Un comercio fronterizo paralizado, el mayor riesgo de Colombia por crisis en Venezuela

La situación de Venezuela se ha venido agudizando por cuenta de las manifestaciones en contra de Nicolás Maduro, así como también por el descontento generalizado que hay por los resultados de los comicios del pasado domingo.

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Sin embargo, en el caso de que la crisis se prolongue, esto podría tener impactos directos en la economía colombiana, más específicamente en el comercio fronterizo, en el supuesto de que se tome decisión de cerrar el paso de Cúcuta y de Paraguachón o exista un desabastecimiento de bienes y servicios.

De acuerdo con los expertos, los riesgos que se mantienen latentes son el cierre de las fronteras como medida del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, de blindarse ante una “amenaza” internacional o también, que debido a la crisis, los precios de los sectores económicos se disparen.

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Para Manuel Camilo González, internacionalista y politólogo de la Universidad Javeriana, los problemas políticos que está enfrentando la nación vecina pueden llevar a que las fronteras sufran una clausura temporal, situación que impactaría directamente el comercio de Maicao, Cúcuta y en vía marítima, Barranquilla y Cartagena.

“Si Maduro entiende la situación como una amenaza exterior, pero que está dentro de Venezuela, seguramente tratará de blindarse hacia adentro. Eso provocaría el cierre de las fronteras de facto. También, la parte legal de las elecciones, va a afectar el abastecimiento de ciertos bienes y servicios que entre ambos lados se intercambian”, estimó.

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Ahora bien, otro de los riesgos en la economía colombiana es la duración del conflicto. Según Asdrúbal Oliveros, director de Ecoanalítica, en la medida que la crisis venezolana se prolongue, se va a llegar a una desaceleración en la actividad comercial, hecho que tendría efectos en la relación de comercio exterior entre los dos países y por ende en la conexión fronteriza.

Vale la pena detallar que desde los comicios del 28 de julio, varios comerciantes de Cúcuta le han expresado a otros medios de comunicación que la actividad comercial en esa zona del país está “casi que paralizada”,

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En términos generales, el flujo comercial por los pasos terrestres fronterizos, benefician en su mayoría económicamente a Colombia, pues las exportaciones nacionales hacia el país vecino pesan más que las importaciones desde Venezuela.

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Según datos del Dane, durante el 2023 las ventas externas colombianas hacia Venezuela por la frontera de Cúcuta, significaron un total de US$276,4 millones, repartidos en 220.000 toneladas y en 9.130 vehículos.

Así mismo, las compras venezolanas de productos de Colombia por el paso de Paraguachón fueron por US$429,8 millones, con 256.000 toneladas y 9.929 automotores. Esto, de acuerdo con la Cámara Colombo Venezolana consolida a Maicao como la principal aduana de salida de exportaciones hacia Venezuela.

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“Entre enero y abril de 2024, el intercambio comercial colombo-venezolano, incluyendo reexpediciones, que ha circulado por los puentes internacionales fronterizos entre Norte de Santander y Táchira asciende a US$115,7 millones y 101.000 toneladas. Esto representa incrementos del 115% y 100%, respectivamente, en comparación con el mismo periodo del año anterior”, detalla la Cámara.

Con base en lo mencionado por lo expertos, los impactos no serían solo fronterizos, sino también de la forma en la que evolucione la crisis en el territorio venzolano. En ese sentido, el director de Ecoanalítica explicó que es muy probable que la economía de ese país se desacelere, lo que afectaría el crecimiento de la misma y por ende el consumo.

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“Es probable que haya una caída en los niveles de consumo y eso limita la capacidad para el tema de comercio. Por otro lado, si persisten las turbulencias políticas y sociales, también eso puede afectar la movilidad de la mercancía o el intercambio comercial con Colombia, principalmente terrestre”, agregó.

En la misma línea, González proyectó una posible afectación en términos de inflación. Según el académico, la crisis política venezolana puede empujar los precios de los sectores económicos hacia arriba, situación que llevaría a una traba en el comercio, a una disminución del mismo y por ende a un desabastecimiento de productos básicos.

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“Seguramente el contrabando tratará de suplir este corte en el abastecimiento de los productos, pero muy seguramente llevarán los precios por el aire de ciertos bienes y servicios en ambos lados de la frontera”, aseguró.

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Asimismo, se prevé que la inversión en el país vecino sea limitada por cuenta de la incertidumbre de la situación política. Para Manuel Camilo González, “nadie” querrá colocar su dinero en un país donde se violan las reglas institucionales, “como lo está haciendo Maduro”, sumado a que el futuro es incierto.

“Seguramente se podrá radicalizar mucho más de lo que ya ha comentado en Cadena Nacional. Por otra parte, falta ver si Edmundo González logra acceder a la presidencia y hasta qué punto el chavismo puede bloquear alguna de sus principales apuestas económicas de hacia el año 2025”, señaló.

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Finalmente, el experto agregó que al tener un entorno político incierto, estas situaciones afectan directamente a los negocios y las inversiones, por la incertidumbre generalizada en los entornos estatales.