Los vestidos largos son el refugio de toda mujer que busca lucir elegante en la oficina. Cabe mencionar que, durante el verano, aquellos de colores oscuros dan un paso atrás para cederle el lugar a otros más coloridos, alegres y llamativos. Y si te preguntas con qué zapatos combinarlos, las botas altas de color negro, con su elegancia atemporal, sobresalen entre los cubículos y desfilan por los pasillos de toda oficina. Así se forma el look que desprende un atractivo bohemio y sofisticado, donde la formalidad se lleva con estilo.
La manera más sencilla de indagar con nuevas tendencias sin tener que renovar todo tu guardarropa recae en el uso de prendas clásicas. Por lo que, las botas altas en tendencia Primavera-Verano 2024 se enlistan como un comodín que, estilizadas de manera estratégica, se revelan tanto en la tendencia boho como en la minimalista. Nos encontramos con una prenda versátil que, con tacones anchos o cubanos, reemplaza los modelos planos, regalando la elegancia que lidera la contienda de la presente temporada. La fórmula para llevar botas high-knee con puntas en triángulo, de caña de corte holgado, de estilo biker o con aires vaqueros, es diversa, aunque la altura de la caña es un elemento de estilo innegociable. Simplemente, es una propuesta que en cualquier empresa demuestra ser la opción acertada para lucir arreglada y recibir algunos “¡me encanta tu look!”.
Al ver que los vestidos largos se vuelven una constante a juego con botas altas color negro tanto en el guardarropa de las prescriptoras de moda como de celebridades mejor vestidas, parece que nos enfrentamos con el look que estará dominando el street style. Este ofrece toda la inspiración necesaria a la hora de vestir por la mañana antes de empezar tu jornada de 9:00 a.m a 6:00 p.m., siendo una combinación que luce increíble tanto durante el horario de trabajo como de noche, de las 8:00 p.m. en adelante.
¿Cómo llevar vestidos largos con botas altas negras a la oficina en verano 2024?
Este verano el look que impacta implica llevar un vestido largo compuesto por una maxi falda escalonada con cortes asimétricos, manga larga y cuello alto. Katie Holmes llevó la estética boho al siguiente nivel, destacando con una paleta de colores esenciales de los años 70 a través de motivos florales de ensueño. Con aires gitanos, la elección del calzado marca la diferencia: unas botas altas negras de punta triangular con tacón bajo sitúan este divertido modelo en cualquier escena formal y laboral. La clave está en jugar con prendas llamativas, como lo hizo la actriz con este look de capas, completado con un calzado básico, un bolso a juego y un peinado despreocupado.
Desde los looks monocolores, hasta aquellos en denim de pies a cabeza, el verano abraza ambas propuestas con fuerza. La supermodelo Kendall Jenner comparte el sentimiento de la tendencia al convertir el tejido informal en uno elegante y apto para lucir de lunes a viernes en el trabajo. Una lección de estilo sobre cómo llevar mezclilla sin lucir desarreglada o demasiado casual, donde la estética minimalista rige el estilismo. No hacen falta más que dos prendas para lucir igual de increíble que la también empresaria, sin miedo a salir de lo predecible y con ganas de revolucionar el uniforme de oficina apuesta por un vestido largo sin mangas con caída ceñida y unas botas altas negras puntiagudas de tacón delgado. Perfecto para verte moderna, distintiva y, sobre todo, como una experta del estilo en alza.
Los vestidos lenceros en acabado satinado continúan siendo parte de la línea de modelos que, con la ayuda de accesorios correctos, se adaptan sin esfuerzo a toda ocasión. Esta temporada, unas botas a la rodilla con punta cuadrada en charol, se combinan con medias transparentes, las cuales se han convertido en el complemento más inesperado y elegante para elevar cualquier look veraniego. Los bordados al ras del escote en encaje aportan un equilibrio perfecto entre la sofisticación requerida en el entorno laboral y un toque de sensualidad. Para evitar caer en un estilismo demasiado festivo, el calzado elegido con caña elevada permite equilibrar la formalidad, mientras la tonalidad esmeralda del vestido se encarga de brindar jovialidad y alegría, como lo demanda el espíritu de la temporada estival.
Terminamos con este look compuesto por un vestido drapeado con caída holgada y fluida y unas botas altas en color negro. Este modelo, al estar pintado de tonalidades serenas y con una escancia veraniega, resulta pertinente para llevar en la oficina, en especial durante los meses de julio y agosto. Además, la altura del calzado proporciona una dosis de confianza extra para mejorar toda mañana. Aconsejamos optar por estampados que no teman llamar la atención, con holanes y plisados románticos al estilo de Zimmerman, demostrando que las flores sí se llevan en verano y no, no son aburridas.
Los lunares, ya sean en versión maxi como mini, se celebran dentro de toda oficina. Su estampado, el cual podría considerarse neutral al igual que el de leopardo, se lleva con clase y elegancia. Para el verano, proponemos llevar el print de punto en vestidos con mangas de farol, corte largo y en lino, asegurando la frescura en todo momento. En cuanto al calzado, las botas rectas por encima de la rodilla con tacón alto y grueso, como el modelo de Paris Texas, vendrán muy bien y son el complemento idóneo para un look sofisticado con notas retro. Como consejo final, evitar saturar con accesorios para mantener un estilismo limpio y moderno.
