Año/Cero

LAS BRUJAS DE CONNECTICUT

La localidad de Windsor, en el estado de Connecticut (EE UU), guarda un secreto. Un secreto tétrico, aterrador–y hasta cierto punto morboso–, que encierra uno de los episodios más oscuros de la historia de los primeros colonos europeos asentados en aquellas tierras salvajes e inhóspitas. Para descifrarlo, debemos fijarnos en el suelo, concretamente en un par de ladrillos colocados en un rincón de la localidad donde se conmemoran bodas y se recuerda a ciudadanos y hechos notables de la historia del municipio. Entre estos ladrillos se encuentran los nombres de Alse Young y de Lydia Gilbert, desconocidos para la gran mayoría de quienes pasean por allí. Sin embargo, esos dos ladrillos tratan de honrar a las primeras acusadas por brujería en las colonias americanas, más de cuatro décadas antes de que ocurrieran los célebres sucesos de Salem.

Cuando tuvieron lugar aquellos supuestos casos de hechicería, nadie imaginó que, más de trescientos años después, lo ocurrido en aquella puritana localidad iba a causar tal fascinación que se escribirían cientos de libros y artículos y se dedicarían horas y horas de radio y televisión contando lo ocurrido a la familia

Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.

Más de Año Cero

Año Cero1 min. leídos
El Viaje Alegórico
Por su parte, el enigmático Fulcanelli no cree que Flamel realizara aquel viaje a Santiago literalmente. En Las Moradas Filosofales escribe: «Tales sugerencias ayudan a comprender el error en que han incurrido muchos ocultistas al dar como válido el
Año Cero1 min. leídos
Proyecto Gilgamesh
Conociendo los avatares de este personaje capital de la historia de la literatura, comprendemos mejor la razón por la que una alucinante y esperanzadora investigación lleva su nombre. Se trata del «Proyecto Gilgamesh». Impulsado por el técnico de Sil
Año Cero1 min. leídosChemistry
«rejuvenecer En Laboratorio»
Otra línea de investigación esperanzadora es la conducida por el profesor de genética de la Universidad de Salermo, Annibale Puca. En 2011 descubrió que el gen humano BPIFB4 insertado en ratones detiene, e incluso revierte, el envejecimiento del sist

Relacionados