Rubén Sánchez
“Dejo el culturismo y me voy a divorciar para casarme con Enrique”
Después de su paso por Supervivientes, que ha durado tres semanas y tres días, Rubén ha vuelto mucho más guapo y con la mente reiniciada. Dispuesto a dar un cambio radical en su vida. Ha decidido dejar el culturismo profesional, le gustaría seguir en la tele y estudiar Arte dramático. Además, planea boda con su novio, Enrique del Pozo. Acude a nuestra cita recién aterrizado de Honduras, ilusionado con su futuro y con ganas de contarnos cómo se ha sentido tratado en el reality.
“Todos recibieron una carta el Día de la madre, todos menos yo. Era parásito, pero tengo una madre...”
-“Supervivientes” era tu sueño, pero ha durado poco, ¿qué sabor de boca te ha dejado?
-Era mi sueño y lo he cumplido. Se ha quedado una parte amarga ahí… porque no he podido llegar a la final, pero como superviviente, conviviente y solo en como parásito, he demostrado que puedo con ello, y en ese sentido estoy contento.
-Pero en cuanto a convivencia empezaste a tener problemas desde la preconvivencia, en el hotel, por el tema de la comida. Te llamaron “egoísta”. ¿Qué hay de verdad?
-Sí, me pusieron la etiqueta de egoísta y siguieron llamándomelo… Yo simplemente cogía mi plato. La comida estaba colocada en U, depende de dónde vinieras por la ubicación de
