El horror de las guerras se enfrenta cuando se conoce el elevado número de las víctimas que las sufren y pueden verse su rostro. Desconcierta cuando escuchamos de una mujer que murió en un campo de concentración en Polonia, el día previo a su liberación, o de un hombre que murió en una prisión siria antes de que fuese tomada por quienes liberaron a los otros presos. La guerra de Rusia en Ucrania nos dio la noticia de la muerte por el impacto de un misil de la escritora uncraniana Victoria Amelina, cuando junto a otros compañeros escritores estaba en una pizzería en Kramatorsk y sólo
