Gravita
Gravita
Introducción a la Mecánica
Nelson Zamorano Hole
VII
Capı́tulo VII
GRAVITACION
VII.1. INTRODUCCION
La ley de gravitación universal de Newton posee una expresión muy simple y se
verifica en una amplia escala de distancias. Tiene el gran mérito de describir –en base a
una sola definición–, fenómenos locales, como la caı́da de un pedazo de tiza en la superficie
de la Tierra, hasta el movimiento de los planetas alrededor del Sol. Sus aplicaciones
se extienden a distancias aún mayores: a una galaxia, o, a escalas cosmológicas, a la
descripción del universo, donde provee una excelente aproximación.
El poder de esta ley, que logró explicar con una misma fórmula, un gran número de
fenómenos, la transformó en casi un dogma.
Por ejemplo, su aplicación al estudio de la trayectoria de los planetas, a comienzos
del siglo pasado, permitió establecer la existencia de Neptuno, antes de que éste fuera
observado por los astrónomos.
Efectivamente, en 1841, John Couch Adams, estudiante de la Universidad de Cam-
bridge, al analizar la trayectoria de Urano, encontró que las anomalı́as descubiertas en
su órbita, podı́an explicarse mediante la existencia de otro planeta –aún no observado–
que orbitaba alrededor del Sol. Para llegar a esta conclusión, empleó los resultados de
la Mecánica Celeste, que es un formalismo que incorpora las leyes de Newton y de la
gravitación universal, al estudio del movimiento de los planetas incluyendo, además de
la atracción gravitacional del Sol, la interacción entre ellos.
Los astrónomos no prestaron atención a este resultado. Sólo cinco años más tarde,
en 1846, fue observado en una posición muy cercana a la predicha, por Johan Gotfried
Galle, quien lo hizo a instancias del teórico francés Urbain Jean Joseph Le Verrier, que
habı́a llegado a la misma conclusión que Couch, en 1845.
Una predicción similar a la anterior fue hecha con respecto a la existencia de Plutón,
a principios de este siglo. Las desviaciones observadas en la órbita de Urano y Neptuno
337
338 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
Figura VII.1: Orbita de una partı́cula lanzada con distintas velocidades desde una mon-
taña, de acuerdo al experimento concebido por Newton. A la derecha se incluye el dia-
grama de cuerpo libre de la Luna, considerada como un punto, orbitando la Tierra.
si este razonamiento coincide con las observaciones. Su perı́odo es de 27.3 dı́as y el radio
de la órbita alrededor de la Tierra –que suponemos circular– es:
Distancia Luna–Tierra = 3, 84 × 108 m ≈ 60 × R⊕ , con R⊕ ≡ radio de la Tierra.
Con estos datos podemos calcular la velocidad orbital de la Luna:
v2 106
a Luna = ' ' 0,26 × 10−2 m/s2 ≈ 2,6 × 10−3 m/s2 .
R 3,84 · 108
K K0
aL ∝ 2 , g⊕ ∝ 2 .
RL−T R⊕
VII.2. LEY DE GRAVITACION UNIVERSAL 341
Suponiendo que la caı́da de los cuerpos en la superficie de la Tierra está gobernada por
la misma ley que desvı́a a la Luna de su trayectoria rectilı́nea, entonces, la constante de
proporcionalidad en ambos casos debe ser la misma: K = K 0 . De aquı́ encontramos la
razón entre estos dos números:
g⊕ R2
= L−T 2 ,
aL R⊕
tomando g = 9, 8 m/s2 , obtenemos:
2
R⊕
aL = g⊕ ' 2,7 × 10−3 m/s2 .
RL−T
Ejercicio
Suponiendo que la Tierra y la Luna son dos esferas que permanecen en reposo, ubique
la posición del centro de masa de este sistema.
mM
F~ = − G 2 r̂. (VII.1)
r
El signo (–) indica que la fuerza entre las dos masas es atractiva, r es la distancia
entre ellas y r̂ es el vector unitario que apunta desde el centro de uno de los cuerpos hacia
el otro. G es la constante de gravitación universal y fue medida por Henry Cavendish
usando una balanza de torsión.
342 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
Figura VII.2: Suponemos que ambos cuerpos son partı́culas puntuales. La distancia r
indica la separación entre los centros de las respectivas esferas.
Figura VII.3: La Figura muestra el diseño del péndulo de torsión empleado por Cavendish
para medir la constante de gravitación G. El espejo refleja un haz de luz incidente, que
permite detectar pequeñas rotaciones de la barra.
aproximaron las masas externas y el ángulo de rotación del péndulo, se puede calcular
el valor de G:
344 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
g R⊕2
Mm
mg = G 2 ⇒ M= .
R⊕ G
6 × 1024 kg
ρ' 4π 6 3
' 5,5 × 103 3 .
3 (6,4 × 10 ) m
en su centro. Estos teoremas dan validez a los métodos utilizados en la resolución de los
ejemplos anteriores.
Teorema I
Un objeto, cualquiera sea su forma, que se ubique dentro de un
cascarón esférico y homogéneo de materia, no experimenta ninguna
fuerza gravitacional proveniente del cascarón.
Figura VII.4:
Teorema II
La fuerza gravitacional que actúa sobre un cuerpo que se ubica
fuera de un cascarón esférico y homogéneo, de masa M , es la misma
que experimentarı́a si toda la masa del cascarón se concentrara en el
centro de la esfera.
Demostración del Teorema I.
Figura VII.5:
Se construye un cono, muy angosto, con vértice común P , que determina las áreas
A1 y A2 , en su intersección con el cascarón. Las distancias desde P hasta el centro
de A1 y A2 es r1 y r2 , respectivamente. Como la apertura de los conos es infinitesimal,
podemos dibujar una esfera de radio r1 que, aproximadamente, coincida con la superficie
A1 . Mientras más pequeño sea el ángulo del vértice del cono, mejor es la aproximación.
De esta forma, el área A1 es igual al ángulo sólido Ω1 por el radio r1 al cuadrado. (Ver
Apéndice Matemático, para conocer el origen de esta expresión del área). De aquı́ :
G σ Ω1 r12 m
∆ F1 = = G σ Ω1 m,
r12
Podemos repetir el mismo argumento para calcular la fuerza que ejerce ∆ M2 sobre
m. El resultado es:
G σ Ω2 r22 m
∆ F2 = = G σ Ω2 m,
r22
y apunta desde m hacia ∆ M2 .
Siendo uno de los conos la prolongación del otro, tienen el mismo ángulo sólido:
Ω1 = Ω2 .
VII.3. TEOREMAS DE NEWTON 347
Ambas fuerzas ∆F1 y ∆F2 , tienen la misma dirección, pero sentidos opuestos. Como
el cascarón es homogéneo, la densidad de masa σ, es constante e igual en todos los
puntos, de modo que la fuerza neta sobre la masa m, se cancela:
∆ F1 + ∆ F2 = 0.
Además, como el punto P fue elegido arbitrariamente, este argumento es válido para
cualquier posición dentro del cascarón esférico homogéneo.
Hasta aquı́ , sólo hemos demostrado que las fuerzas provenientes de un par de ele-
mentos infinitesimales de superficie del cascarón, elegidos de la forma especificada, no
producen ninguna fuerza neta, sobre una masa puntual m, ubicada en el interior.
Para extender el resultado a todo la superficie, sólo debemos sumar el efecto de cada
uno de los pares de conos infinitesimales hasta cubrir la esfera.
Para generalizar este resultado a una esfera masiva o con un hueco en su interi-
or, basta con sumar cascarones infinitesimales sobrepuestos, aumentando lentamente su
radio.
La condición que no podemos eliminar es la homogeneidad del cascarón: σ = cons-
tante, puesto que se destruye el equilibrio de las fuerzas.
Es conveniente destacar que este resultado se obtuvo debido a que la fuerza es pro-
porcional a 1/r2 . Una pequeña variación en la potencia de r, destruye este resultado. A
su vez, esta caracterı́stica permite verificar, mediante un experimento, la exactitud del
valor de este exponente.
Con este comentario finalizamos la demostración que la fuerza gravitacional neta
sobre una partı́cula ubicada al interior de un cascarón homogéneo es nula. 2
esférica, la fuerza que experimenta una masa puntual frente a un cascarón, sólo puede
tener una componente neta en la dirección del eje que une sus centros; las componentes
perpendiculares a este eje, se anulan por simetrı́a.
Ilustraremos este argumento resolviendo –como Ejemplo– el problema de una par-
tı́cula frente a un anillo. No es difı́cil imaginar una esfera como una superposición de
anillos de distinto radio.
Ejemplo
Calcular la fuerza que se ejerce sobre la masa m, ubicada a una altura h en el eje del
anillo de la Figura. El anillo tiene una densidad lineal de masa λ [kg/m], y un radio R.
Figura VII.7: Al sumar las fuerzas generadas por segmentos opuestos del anillo, sobre la
partı́cula m, se ve que sólo sobreviven sus componentes verticales.
Un elemento de arco del anillo se representa por [ds], y la masa asociada es: λ [ds].
De acuerdo a la ley de gravitación universal, la fuerza que este segmento ejerce sobre m
es:
λ [ds] m
∆F~ = G 2 r̂,
(R + h2 )
donde r̂, representa el vector unitario cuya dirección es la lı́nea que une ambas masas,
apuntando hacia el segmento del anillo.
En la Figura se aprecia que al sumar las fuerzas generadas por elementos de arco
diametralmente opuestos, sus componentes perpendiculares al eje se cancelan, y sólo
contribuyen las proyecciones de la fuerzas paralelas a él.
El coseno del ángulo ϕ, que es la proyección del vector r̂ sobre el eje vertical, se
expresa como:
h
cos ϕ = √ .
h2+ R2
VII.3. TEOREMAS DE NEWTON 349
Note que todas las cantidades que aparecen en la expresión de la fuerza vertical –aquella
paralela al eje del anillo–, son constantes, de forma que sólo debemos sumar los segmentos
del anillo para encontrar la fuerza total. Como: [ds] = R ∆ϕ, entonces:
N N N
X X λ [R ∆ϕ] h m λRhm X
F = Fn = G = G ∆ϕn ,
n=1 n=1
(R2 + h2 )3/2 (R2 + h2 )3/2 n=1
P
al recorrer todo el anillo, ∆ϕn = 2 π radianes, de esta forma, el resultado es:
λRhm M mh
Fvertical = G 3/2
2π = G 2 . (VII.3)
2 2
(R + h ) (R + h2 )3/2
Ejemplo
GM m
Fm = ,
(R + h)2
y apunta hacia el centro de la esfera. Sea σ0 la densidad superficial de masa del cascarón,
σ ≡[masa/unidad de superficie]:
M
σ0 = ,
4πR2
350 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
G σ0 m
Fm = 4π .
h 2
1+
R
h
Fm = 4 π G σ0 m 1 − 2 ± ... , (VII.4)
R
G m M⊕
Fm ≡ m g = 4 π G m σ = 2 ,
R⊕
G M⊕
g≡ 2 . (VII.5)
R⊕
Escribamos la expresión de la fuerza generada por un plano infinito sobre una masa
puntual m:
gplano infinito = 2π G σ0 , (VII.6)
este es la mitad del valor encontrado para un cascarón.
Ejemplo
Se tiene un plano infinito, homogéneo – es decir, que tiene las mismas propiedades en
todos sus puntos– y con densidad de masa σo [kg/m2 ]. Compruebe que la única cantidad,
con las dimensiones correctas, que se puede formar con estos datos y que representa la
fuerza de atracción gravitacional actuando sobre una masa m, es: G σ0 m.
Ejemplo
Figura VII.8: Al interior de la esfera, los elementos de masa del cascarón, atraen a la
partı́cula de masa m, en la misma dirección pero en sentidos opuestos. Esto no ocurre
en el plano infinito, donde la atracción gravitacional es la misma en ambas caras.
Estime, dentro de este esquema, la fuerza gravitacional que ejerce este cuerpo, sobre
una masa ubicada en su exterior.
Ejercicio
Dos de sus tres leyes, aparecen en su libro A New Astronomy, publicado en 1609.
Constituyeron las primeras leyes naturales en el sentido que hoy le adjudicamos a ese
354 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
término, es decir, sus conclusiones estaban basadas en una observación metódica del
movimiento de los planetas y no, únicamente, en principios filosóficos sin una base ob-
servacional. Esta caracterı́stica marca una diferencia con la tradición existente hasta ese
tiempo, en cuanto al estudio de los objetos celestes.
Kepler también contribuyó al desarrollo de los instrumentos ópticos.
Leyes de Kepler:
T = 2 πt ,
u
G M
donde a es el semieje mayor de la elipse.
Note que en el caso de una órbita elı́ptica, el perı́odo T es constante, sin embargo su
velocidad angular y tangencial es diferente en cada uno de sus puntos.
Satélites sı́ncronos
Se denomina de esta forma a los satélites que permanecen a una altura fija, rotando
con la misma velocidad angular de la Tierra, de esta forma, se mantienen constantemente
en el cenit de un mismo punto geográfico.
Su objetivo es comunicar distintas puntos del planeta, transmitiendo señales desde
un continente a otro. El satélite recibe una señal y la retransmite a las estaciones en
Tierra. Este medio reemplaza a las estaciones retransmisoras, como las que utilizan en
Chile los canales de televisión para llegar a las regiones.
Ejemplo
VII.4. LEYES DE KEPLER 355
Encontrar la altura a la cual es necesario dejar en órbita un satélite para que gire
con la velocidad angular de la Tierra.
2π R
vsat = ,
T
donde T = 24 horas, es el periodo de la órbita y R, es su radio, cuyo valor debemos
encontrar. La aceleración es:
v2 4π 2 R
acentrı́peta = , =⇒ acentrı́peta = .
R T2
Recordemos que la aceleración apunta hacia el centro de la circunferencia, al igual
que la fuerza de atracción gravitacional:
−G M m v2
F~ = m~a, =⇒ r̂ = −m r̂. (VII.7)
R2 R
Figura VII.11: Con tres satélites sı́ncronos es posible comunicar dos puntos geográficos
ubicados arbitrariamente sobre la superficie de la Tierra.
G M⊕
g≡ 2 = 9,8 m/seg2 . (VII.8)
R⊕
356 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
R3 · ω 2 = g R⊕
2
= G M⊕ =⇒ R3 ω 2 = G M⊕ . (VII.9)
En esta ecuación supusimos, correctamente, que la masa del satélite es muy pequeña
comparada con la masa de la Tierra. Si esto no fuera ası́ , aparecerı́a un (M⊕ + msat ),
en lugar de M⊕ , en la ecuación [VII.9].
Hasta aquı́ sólo hemos recuperado la tercera ley de Kepler. El método elegido nos
permitió demostrar que las leyes de Kepler, están en perfecta armonı́a con las de Newton,
incluyendo su ley de gravitación universal.
Calculemos ahora el valor del radio de la órbita del satélite.
2
G M⊕ R⊕
R3 = = g ,
ω2 ω
introduciendo valores numéricos, obtenemos:
La ionósfera es una da las capas que componen la atmósfera. Su altura es hionósfera '
300 km. En ella se reflejan las ondas de radio, permitiendo ası́ comunicarse a los ra-
dioaficionados en distintos puntos de la Tierra. Desgraciadamente, para frecuencias más
altas, que corresponden a las ondas de TV, entre otras, esta capa es transparente –las
deja pasar, sin reflejarlas– por esta razón, estos medios deben usar los satélites geoesta-
cionarios o sı́ncronos como los hemos llamado, para transmitir información entre dos
puntos muy alejados.
VII.5. MOMENTO ANGULAR 357
Ejercicio
G ML /`2 = ω 2 RT ; G M⊕ /`2 = ω 2 RL ,
sus observaciones, concluyó que el vector posición de los planetas barrı́a áreas iguales en
tiempos iguales a lo largo de su trayectoria alrededor del Sol. Esto sucedió mucho antes
que Newton anunciara su ley de gravitación universal.
Veamos cómo esta propiedad se deduce de la conservación del momento angular.
1 −→
∆ F P Q = | ~r∧ P Q |,
2
aproximando la cuerda PQ, por su arco:
1
∆ F P Q = |~r ∧ ~v · ∆t|,
2
como ∆ t es un número:
∆t
|~r ∧ ~v |.
2
−→ −→ −→
Recordemos que: | ~r ∧ P Q | = |~r | | P Q | senθ = |~r | | P Q⊥ |.
VII.5. MOMENTO ANGULAR 359
Esta expresión es válida en cualquier instante, puesto que hemos usado sólo geometrı́a
para obtenerla. El mismo razonamiento se repite para el triángulo ∆ F P 0 Q0 , de la Figura
anterior: −→ −→
1 1
∆ F P 0 Q0 = |~r 0 ∧ P 0 Q0 | = r0 | P 0 Q0 |⊥ ,
2 2
Por otra parte, la definición de momento angular L ~ = m ~r ∧ ~v , se puede escribir como:
2 × Area1 = 2 × Area2 .
Ejemplo
G M (x)m x
−x̂ · F~ = 2 cos φ, con cos φ = √ .
(h + x2 ) x2+ h2
M (x), es la masa de la Tierra contenida dentro de la esfera, con centro en O’, que pasa
por el punto señalado por la coordenada x. El ángulo φ varı́a con la coordenada x.
Figura VII.14: Túnel a través de la Tierra. Se incluye el diagrama utilizado para calcular
el valor de x y cos φ. La fuerza gravitacional apunta siempre hacia el centro O’, de la
esfera.
G M (x)m x
m ax = − 2 2
·√ .
h +x x + h2
2
VII.5. MOMENTO ANGULAR 361
Suponemos que no existe roce en las paredes del túnel. La masa M (x), en la esfera
centrada en O’y al interior de x es:
4π
M (x) = ρo G(x2 + h2 )3/2 ,
3
donde hemos supuesto que la Tierra es una esfera de densidad uniforme ρo . Simplificando
obtenemos:
4π G
ax = −ρo x,
3
que es precisamente la ecuación de movimiento de un oscilador armónico simple, a partir
de la cual, obtenemos la velocidad angular que adquiere la masa m en su recorrido dentro
del túnel:
4π G
ω2 =ρo .
3
Esta es la misma frecuencia que tiene una partı́cula que atraviesa diametralmente la
Tierra. Si planteamos la ecuación de movimiento radial para este nuevo caso, obtenemos:
G M (r) m 4πG
m ar = − , con M (r) = ρ0 r 3 ,
r2 3
de esta forma, la aceleración, es:
4π
ar = − G ρo r,
3
que corresponde a un movimiento armónico simple, con la misma frecuencia angular del
caso anterior.
Obviamente la velocidad máxima es mayor en esta situación, porque la amplitud es
igual al radio de la Tierra y vmax = ω R.
Este resultado también coincide con el periodo de una nave que circunda la Tierra a
una altura despreciable. En este caso:
v2 GM
= , como v = ω R,
R R2
GM 4π
ω2 = 3
= G ρo .
R 3
Que el periodo T sea proporcional al producto G ρ para estos tres casos, no es sor-
prendente. Es la única cantidad que tiene dimensiones de tiempo (¡compruébelo!), y en
las cuales intervienen la estrella, a través de su masa M y el radio R, combinados para
362 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
G M (r) 4π
2 2
ar = ω⊕ r − 2
= ω⊕ − G ρo r.
r 3
Estimemos ahora el valor relativo de cada uno de los términos que aparecen a la derecha
de la ecuación anterior:
2π
ω⊕ = ' 8 × 10−5 ⇒ ω⊕
2
≈ 6, 4 × 10−9 .
24 × 3600
Por otra parte,
4π
G ρo ' 1,5 × 10−6 .
3
Este último término es aproximadamente mil veces mayor que la modificación introduci-
2.
da por la rotación de la Tierra, que resultó ser proporcional a ω⊕
VII.6. ENERGIA EN UN CAMPO GRAVITACIONAL 363
VII.6.1. Trabajo
Para calcular el trabajo, debemos multiplicar la fuerza aplicada por el desplazamiento
realizado. Trasladar un cuerpo lentamente entre dos puntos arbitrarios, significa moverlo
en forma tal, que casi se encuentra en reposo en cada uno de los puntos de la trayecto-
ria. Para que ası́ ocurra, es necesario aplicar una fuerza que –en este caso– cancele la
atracción gravitacional.
GM m
F~ = r̂.
r2
El trabajo se reduce al producto de las dos cantidades, puesto que ambos apuntan en
la misma dirección y sentido: F~ · ∆~ri = F ∆ ri . Para evaluar la sumatoria tomamos
364 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
Figura VII.15: El trabajo realizado se reduce a calcular el área bajo la curva entre el
punto final e inicial del traslado. Para ello se aproximan los elementos de área a trapecios,
como se ha hecho anteriormente.
intervalos ∆ri , iguales para todo i, y los designamos como ∆. El método geométrico
usado anteriormente para evaluar esta sumatoria, consiste en calcular el área encerrada
bajo la curva F (r), entre A y B, donde esta función representa el valor de la fuerza en
cada punto de la trayectoria radial.
Aproximamos el área bajo un elemento de curva, mediante un trapecio infinitesimal,
como se indica en la Figura [VII.15].
En los cálculos que siguen, temporalmente, nos olvidamos del factor G M m que
aparece en la fuerza gravitatoria, con el objeto de acortar las expresiones usadas. Al final,
multiplicamos el resultado por esta expresión, para tener las dimensiones correctas.
Como el área del trapecio es el producto de la semisuma de las bases por la altura,
y la fuerza es proporcional a 1/r2 , tenemos que:
!
1 1 1 ri2 + ri+1
2
Area del Trapecio i-ésimo = 2 + 2 ∆= ∆, (VII.13)
2 ri+1 ri 2 ri2 ri+1
2
2 ri2 + 2 ri ∆ + ∆2
Area del Trapecio i-ésimo = · ∆.
2 ri2 ri+1
2
1 1
Area del Trapecio i-ésimo = − (VII.14)
ri ri+1
N
1 1
X
WA−→B = GM m −
i=1
ri ri+1
1 1 1 1 1 1
= GM m − + − + ··· + − .
r1 r2 r2 r3 rN −1 rN
1 1
" #
WA−→B = GM m − (VII.15)
rA rB
Este es el trabajo necesario para desplazar muy lentamente una masa
m desde rA hasta rB contra la atracción gravitacional de la masa M .
Se identificó i = 1 con A, y B con i = N.
Figura VII.16: En esta trayectoria arbitraria nos desplazamos desde el punto A has-
ta B realizando una sucesión de movimientos radiales y a lo largo de un elemento de
circunferencia. El resultado final es que sólo el desplazamiento radial genera trabajo.
1 1
WA−→B = WA−→C = GM m − ,
rA rC
1 1
=⇒ WA−→B = G M m − . (VII.16)
rA rB
En este último paso usamos que rB y rC , están ubicados en un arco de circunferencia.
Concluimos que la primera expresión encontrada para el trabajo, usando desplaza-
mientos radiales, es general: incluye a cualquier trayectoria independiente de su forma.
En un desplazamiento tridimensional el argumento es similar: debemos considerar
esferas en lugar de circunferencias y la contribución al trabajo proviene solamente de los
saltos desde una esfera a la siguiente.
VII.6. ENERGIA EN UN CAMPO GRAVITACIONAL 367
Calcule el trabajo necesario para armar un cuadrado de lado a, con masas puntuales
m, en cada uno de sus vértices.
Suponemos que las masas puntuales que conformarán el cuadrado, se ubican inicial-
mente en el infinito y a distancias muy alejadas entre ellas, de forma que las fuerzas
gravitacionales entre ellas sea despreciable. De este modo, sólo debemos considerar las
masas que ya están en el cuadrado para calcular el trabajo necesario para incorporar la
siguiente partı́cula.
Esta es una propiedad que tienen las fuerzas que decaen de la misma forma o más
rápidamente que el cuadrado del inverso de la distancia. Debe cumplirse, además, que
el cuerpo por armar tenga su masa distribuida en un volumen finito. Concretamente, el
procedimiento que utilizaremos aquı́ , no es válido si se trata de un alambre, cilindro o
un plano infinito.
De acuerdo a la discusión anterior, el trabajo para traer la primera masa al vértice
del cuadrado es nulo, puesto que previamente no hay ninguna masa.
Para incorporar la segunda es preciso realizar un trabajo para acercarla desde el
infinito hasta una distancia a de la primera:
1 1 1
W2 = G m m − = −G m2 ,
∞ a a
es negativo, puesto que la fuerza que evita que la segunda partı́cula se acelere hacia la
primera, apunta en dirección contraria al desplazamiento realizado en cada paso.
Para traer la tercera masa, debemos realizar el mismo trabajo, pero considerando el
efecto de las dos primeras masas ya instaladas:
1 1
W3 = −G m2 − G m2 √ ,
a 2a
√
el factor 2, que aparece en el segundo término, proviene de la distancia que separa a
las partı́culas en vértices opuestos.
Finalmente el trabajo correspondiente al traslado de la última masa del conjunto, es:
1 1 1
2
W4 = −G m − G m2 − G m2 √ ,
a a 2a
368 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
donde cada término proviene del trabajo asociado a una de las masas previamente ins-
taladas.
El trabajo total es la suma de cada uno de estos términos:
1
1
√ 1
WTotal = −4 G m2 − 2 G m2 √ = −(4 − 2)G m2 .
a 2a a
El signo (–) que aparece en frente de toda la expresión, indica que el sistema está ligado,
es decir, es necesario realizar un trabajo extra (positivo) para desarmarlo.
Podemos hacer un gráfico de WTotal versus a, el tamaño de la red (ver Figura). Su
interpretación es la siguiente: la flecha vertical que une la curva con la abcisa –que señala
el nivel de energı́a cero–, es el trabajo necesario para desarmar la estructura. Vemos que
mientras más cercana se ubican las partı́culas, mayor es la energı́a (o el trabajo) que
debemos realizar para separarlo.
Figura VII.17: Se dibuja la estructura y la forma como se traen las masas. A la derecha
aparece el trabajo necesario para armar el cuadrado versus el tamaño de la red, suponien-
do que se arman cuadrados similares.
Ejemplo
Calcule el trabajo mı́nimo que se precisa para trasladar una roca de masa m1 , desde
la superficie de la Tierra hasta la Luna. Suponga que la distancia que las separa (centro
a centro) es D, y que los radios respectivos son RT y RL .
VII.6. ENERGIA EN UN CAMPO GRAVITACIONAL 369
1 1
WT ierra = G MT m1 − .
RT D − RL
1 1
WLuna = G ML m1 − ,
D − RT RL
donde nos olvidamos –de acuerdo al principio de superposición– de la existencia de la
Tierra y consideramos la Luna como el único objeto gravitante.
El resultado final es la suma de ambos procesos:
1 1 1 1
WMı́nimo = G MT m1 − + G ML m1 − .
RT D − RL D − RT RL
1 1 1 1
WTotal > G MT m1 − + G ML m1 − .2
RT D − RL D − RT RL
370 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
VII.6.2. Energı́a
La situación más común es aquella en que el traslado ocurre con una cierta velocidad.
El movimiento origina un término adicional en la energı́a, que se denomina energı́a
cinética.
Sabemos que la energı́a total de un objeto es la primera integral de las ecuaciones de
movimiento. En un campo gravitacional, estas ecuaciones son:
∆~v GM m
=− m r̂.
∆t r2
Para integrarlas entre dos puntos: A y B de la trayectoria, multiplicamos cada uno
de los miembros de la ecuación por el desplazamiento ∆~xi , y con los distintos valores
del subı́ndice i, vamos sumando el aporte de cada uno de los tramos en que se dividió la
trayectoria.
N N
" #
X ∆~vi X ∆~xi · r̂
m · ∆~xi = −G M m , (VII.17)
i=1
∆t i=1
ri2
el valor de la sumatoria que aparece en el segundo miembro ya lo calculamos en la
sección anterior (ver ecuación [VII.15]). Como su resultado es independiente del camino
seguido, elegimos el trayecto más simple para evaluarla: comenzamos en ~rA , se continúa
en la misma dirección hasta alcanzar un radio rB y de allı́ , moviéndonos sobre una esfera
centrada en el punto de atracción, se alcanza ~rB .
Identificando A y B, con i = 1 e i = N, respectivamente, el valor de la sumatoria es:
N
" #
∆~xi · r̂ 1 1
X
GM m = GM m − .
i=1
ri2 rA rB
El motivo para realizar esta transformación fue adecuar la sumatoria a los métodos
geométricos que hemos usado anteriormente. Recordemos que:
N
X
f (xi ) ∆xi ,
i=1
VII.6. ENERGIA EN UN CAMPO GRAVITACIONAL 371
N
X 1 2
f (x) = k x ⇒ k xi ∆xi = kx − x21 ], (energı́a potencial del resorte),
i=1
2 N
N
X 1 2
f (v) = m v, ⇒ m vi ∆vi = m[vN − v12 ], (energı́a cinética).
i=1
2
1 GM m
m ~v 2 − = E0 . (VII.22)
2 r
E0 , es la cantidad conservada que se obtiene al integrar las ecuaciones de Newton in-
cluyendo la fuerza proveniente de la ley de gravitación universal. El término que contiene
las velocidades se denomina Energı́a Cinética, y aquél que exhibe la constante G, Energı́a
Potencial.
La energı́a potencial es –salvo un signo– la misma expresión obtenida en la sección
anterior, al calcular el trabajo realizado por un agente externo, [VII.16]. El cambio de
signo se introdujo en la ecuación [VII.16], cuando calculamos la fuerza que debı́a aplicar
el individuo para anular la atracción gravitacional, de modo que la fuerza externa debı́a
apuntar en sentido opuesto a la atracción. Este es el origen de la diferencia de signo.
GM m m V~ 2
Definimos: V (r) ≡ − , T ≡ , (VII.23)
r 2
entonces, la conservación de la energı́a se escribe:
Eo = T + V. (VII.24)
Esta ecuación es fundamental. Como se utiliza a menudo en el movimiento bajo fuerzas
centrales, es conveniente escribirla de forma que contenga la otra cantidad conservada:
el momento angular L0 .
donde r̂ es el vector unitario que apunta desde el foco de la elipse hasta un punto de la
trayectoria, como se muestra en la Figura.
El vector v⊥ , se puede escribir como:
~v 2 = vr2 + v⊥
2
+ 2 ~vr · ~v⊥ , pero, ~v⊥ · ~vr = 0, entonces: ~v 2 = vr2 + v⊥
2
.
L20
1 2 G M m
Eo = m vr + − = Constante. (VII.27)
2 2m r2 r
Definimos la energı́a cinética radial y el potencial efectivo, como:
L20
1 G M m
T ≡ m vr2 , Vefectivo ≡ − (VII.28)
2 2m r2 r
Aquı́ aparece el momento angular L0 explı́citamente, y este término marca la dife-
rencia con el potencial gravitacional V (r), introducido anteriormente. El término que
contiene L0 , se denomina la barrera centrı́fuga porque impide que una partı́cula con un
momento angular inicial no nulo, alcance más allá de un cierto radio.
374 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
Figura VII.21: Gráficos del potencial efectivo para los casos Lo = 0 y Lo 6= 0. En ambos
casos el potencial decae a cero en infinito.
Figura VII.22: Ilustración del uso del gráfico del potencial efectivo para determinar
propiedades de los objetos que se mueven bajo la influencia de fuerzas gravitacionales.
VII.6. ENERGIA EN UN CAMPO GRAVITACIONAL 375
L20 GM m
2
− = Constante,
2m R R
que es el potencial efectivo [VII.28], representado en el gráfico de la Figura [VII.21]. De
acuerdo a lo explicado en el último párrafo, la única órbita que no tiene energı́a cinética
radial, es aquella ubicada en el mı́nimo del potencial, su punto más bajo.
En ese punto la partı́cula está obligada a permanecer con r = Constante, puesto que
cualquier cambio en el valor del radio, originarı́a una energı́a cinética negativa.
Ejercicio
Demuestre que el punto donde el potencial efectivo alcanza su valor mı́nimo, corres-
ponde a una órbita circular.
d Vefectivo
=0 ⇒ r = rcircunferencia .
dr
Para encontrarlo, derive el potencial efectivo y hágalo igual a cero. Encontrará dos
soluciones de esta ecuación, que corresponden a los lugares donde la tangente a la función
Vefectivo es horizontal. Uno de esas soluciones es r → ∞ y la otra es el radio buscado.
2
GM v2
= = ω 2 r,
r2 r
introduciendo la definición del momento angular, se obtiene:
GM m L20
= m ω2 r2 = ,
r m r2
reemplazando esta expresión en la ecuación de la energı́a:
GM m GM m
Eo = −Eo − , Eo = − (VII.30)
r 2r
Conociendo el valor de la energı́a podemos encontrar el radio de la órbita circular.
Se comprueba que la energı́a es negativa, como corresponde a un estado ligado.
Siempre que hay un cuerpo orbitando alrededor de otro, su energı́a Eo , es negativa.
Este hecho refleja que el cuerpo permanece sujeto al campo gravitacional del objeto
central. Para liberarlo, debemos proporcionar suficiente energı́a cinética de modo que
su energı́a final sea positiva. Es lo que sucede con las sondas espaciales, en la Tierra
están ligadas a ella, para alcanzar otro planeta debemos proporcionarles una velocidad
(o energı́a cinética) suficiente para escapar. Esta se denomina velocidad de escape.
Finalmente, notemos que la órbita circular es la más ligada: aquella que necesita
mayor cantidad de energı́a para ser liberada.
El gráfico del potencial efectivo versus distancia radial, nos permite caracterizar el
movimiento de un objeto alrededor del centro de atracción gravitacional.
Figura VII.23: Un objeto que se acerca al Sol y luego se pierde en el espacio, sin retornar.
En estos casos la energı́a del cuerpo es positiva, por lo tanto, son capaces de escapar de
la atracción gravitacional del centro de atracción.
Ejemplo
~r = [a cos ω t, b sen ω t]
d~r d
= dt [ a cos ω t ı̂ + b sen ω t ̂]
dt
~v = −a ω sen ω t ı̂ + b ω cos ω t ̂
1
= 2 ω(b2 − a2 )sen 2 ω t 6= 0, excepto para (ω t) = 0, π/2, ...
Ejemplo
Si despreciamos la resistencia del aire y todos los inconvenientes técnicos que existen:
¿es posible poner un satélite en órbita estable, disparándolo con un cañón, desde un punto
de la superficie de la Tierra?
De acuerdo a leyes de Kepler, este satélite queda en una órbita elı́ptica alrededor
de la Tierra, y después de un periodo, vuelve a su punto de partida. Esta órbita es
378 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
Ejemplo
Se desea encontrar:
∆U
= ...?
∆Torbital
Calculemos el valor de ∆U , suponiendo que al satélite sólo le proporcionamos la energı́a
cinética mı́nima para alcanzar la altura h:
Como Tf = 0,
1 1
Ti = ∆U ≡ Ufinal − Uinicial = −G M m − . (VII.31)
RT + h RT
Supongamos que unos segundos antes de alcanzar dicha altura con velocidad radial
nula, se enciende el último conjunto de motores y en un par de segundos le proporcionan
a la nave, la velocidad tangencial necesaria para mantenerlo en órbita circular.
Evaluemos la energı́a cinética que le suministraron los motores en esta etapa. Usando
la segunda ley de Newton para el movimiento circular, tenemos:
2
m Vorbital
GM m 2 GM
2
= , =⇒ Vorbital = .
(RT + h) (RT + h) (RT + h)
Con este valor, podemos encontrar la energı́a cinética que necesita el satélite para man-
tenerse en una órbita circular:
1 2 GM m
∆T = m Vorbital = .
2 2 (RT + h)
VII.6. ENERGIA EN UN CAMPO GRAVITACIONAL 379
∆U 1 1 2h
= [−2 (RT + h)] − = .
∆T RT + h RT RT
La respuesta indica que si la altura 2 h > R⊕ , la energı́a que le debemos suministrar para
que alcance esa altura, es mayor que la energı́a cinética que necesitamos para dejarlo en
órbita. 2
Ejemplo
Como el apogeo y perigeo son los puntos extremos de la órbita elı́ptica, allı́ la veloci-
dad del satélite es perpendicular a su vector posición. De esta forma, usando el momento
angular, podemos demostrar que la razón entre sus velocidades es inversamente propor-
cional a sus radios:
Vp
Lo = m v⊥ r = Constante, ⇒ = k,
Va
pero k, es un dato, de modo que tenemos una ecuación para dos incógnitas: Va y Vp . Nece-
sitamos otra, independiente de la anterior, para resolver este sistema. La conservación
de la energı́a es otra ecuación. Escribiéndola en su forma original, [VII.6.2], tenemos:
1 ~a 2 − G MT ms = 1 ms V
~p 2 − G M ms = E0 .
ms V
2 ra 2 rp
Estas son las dos ecuaciones que necesitábamos. Lo que sigue es el álgebra necesaria para
despejar las incógnitas.
Introduciendo la ecuación que relaciona la constante k con las velocidades, obtene-
mos:
1 ~a 2 − G MT ms = 1 ms k 2 V
~a 2 − k G M ms ,
ms V
2 ra 2 ra
ordenándola:
1 2 ~ 2 = [k − 1] G M , ⇒ V 2 = 2 G M .
[k − 1] V a a
2 ra k + 1 ra
Análogamente podemos encontrar la velocidad Vp . 2
380 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
Figura VII.24: Gráfico aproximado de las velocidades orbitales de cada uno de los pla-
netas. Se puede observar que la velocidad decae en forma inversamente proporcional a
la raı́z cuadrada de su distancia al Sol. Este comportamiento se ajusta a las leyes de
Newton.
Podemos suponer que los planetas describen un movimiento circular, puesto que la
excentricidad, e, de su órbita es muy pequeña. Su velocidad tangencial es:
G M
vtangencial ≡ vt = r ω, → vt2 = ,
r
vemos que la velocidad orbital decae como el inverso de la raı́z cuadrada del radio r, tal
como se observa en los planetas. Las leyes de Newton son válidas, dentro de la precisión
de estas medidas, en escalas de distancia del tamaño del sistema solar.
Apliquemos estas mismas leyes a nuestra galaxia o a cualquier otra. Implı́citamente
estamos suponiendo que las leyes fı́sicas que rigen a nuestro alrededor son válidas también
en el resto del universo. Este es un principio, puesto que constituye una hipótesis de
trabajo, cuya veracidad sólo podemos comprobar a través de los resultados obtenidos.
Si éstos coinciden con las observaciones, lo aceptamos como verdadero.
En la Figura [VII.25], se muestra un par de fotos de galaxias espirales, la nuestra es
similar a la que aparece a su derecha.
VII.7. EL SISTEMA SOLAR Y NUESTRA GALAXIA 381
Estudiemos el movimiento de las estrellas, o del gas difuso que está contenido en
nuestra galaxia. Primero, especifiquemos sus caracterı́sticas, que son en realidad genéri-
cas: están presentes en todas las galaxias espirales. Se destaca el núcleo, que es la zona
central más luminosa, un disco que contiene los brazos espirales, también luminosos y
con alta tasa de formación de estrellas y, finalmente, el halo que es una zona esférica que
envuelve a las anteriores, poco luminosa y que se extiende mucho más allá del disco.
Figura VII.25: Fotos de galaxias espirales. A la izquierda aparece una galaxia similar a la
nuestra, con varios brazos extendiéndose desde el núcleo. En estos brazos, continuamente
se están formando nuevas estrellas. A la derecha se incluye una galaxia espiral pero con
forma de barra.
Figura VII.26: Dibujo aproximado de nuestra galaxia y la posición relativa del Sol en
ella. La nuestra es una galaxia espiral. Tiene un diámetro aproximado de 1021 m, y el
Sol se ubica a una distancia de 2,6× 1020 m.
Veamos primero el caso de una estrella que orbita en la región del núcleo. Como
el modelo tiene simetrı́a esférica, de acuerdo a los teoremas de Newton, la atracción
gravitacional que se ejerce sobre la estrella, proviene de la masa del núcleo localizada al
interior del radio de su órbita. Como también la podemos imaginar concentrada en un
punto en el centro del núcleo, usamos la ley de Kepler, obteniendo:
4π
ω 2 r3 = G Mint , Mint = ρ0 r 3 .
3
Hemos usado la densidad del núcleo como constante, de acuerdo al modelo propuesto.
2 4π G
r vorb = ρ0 r 3
3
s
4π G
vorb = ρ0 r.
3
Para una estrella ubicada fuera del núcleo, toda la masa se concentra en su centro,
por lo tanto M es una constante en la fórmula anterior y la velocidad orbital de la estrella
es: q
G Mtotal
ω 2 r3 = G Mint. , =⇒ vorbital = √ . (VII.32)
r
Si la masa de una galaxia se asocia únicamente a su luminosidad, el gráfico velocidad
orbital versus distancia, es el que se muestra en la Figura VII.27.
VII.7. EL SISTEMA SOLAR Y NUESTRA GALAXIA 383
masa en la región externa de la galaxia. Su densidad no puede ser nula. Su valor debe
ser tal, que reproduzca la velocidad orbital constante que se observa en esa región.
Mantenemos la simetrı́a esférica del modelo, por simplicidad, y suponemos que las
ecuaciones de Newton son válidas. Podemos entonces aplicar los teoremas de Newton, de
modo que el campo gravitacional en un punto a una distancia r del centro, se puede cal-
cular como proveniente de una masa puntual ubicada en el origen. Para que la velocidad
orbital sea una curva plana, debe cumplirse que:
v2 G M (r)
= ,
r r2
de aquı́ vemos que si, v 2 = Constante, entonces la masa debe depender linealmente
del radio: M (r) = [Constante] r. Para obtener este comportamiento, y de acuerdo al
principio de simplicidad, ensayamos con una densidad ρ(r) = K/r2 , con K una constante
con dimensiones de [masa/distancia]. Para calcular la masa en este caso, debemos sumar
la masa contenida en cada uno de los cascarones de espesor ∆r = Constante, y cuyo
volumen es:
Vcascarón = 4 π r2 · ∆r.
La masa total generada por esta densidad, es:
ρi (r) ∆ ri · 4 π ri2
P
M asa = i
P K
= i · 4 π ri2 ∆ri
ri2
PN
= 4πK i=1 ∆ ri
M asa = 4 π K r.
A pesar que la densidad disminuye como 1/r2 , la masa total aumenta proporcionalmente
con la distancia r. Si aceptamos que las ecuaciones de Newton constituyen la forma
correcta para detectar la existencia de masa –brille o no–, concluimos que las galaxias
contienen una masa oscura, invisible en una placa fotográfica.
En la actualidad se estima que la masa luminosa es un porcentaje muy bajo de la
masa total que compone el universo, se calcula que es del orden de un 20 % de la masa
oscura. Este resultado indica que la masa de las galaxias, y con ello, la del universo es
mucho mayor que la supuesta hasta ahora y, lo que es más intrigante, que desconocemos
el origen y la naturaleza de esta componente oscura.
Existen algunas hipótesis, para explicar el origen de esta materia oscura: podrı́an ser
agujeros negros y planetas como Júpiter o una familia de partı́culas aún no detectada
en el laboratorio. Este es un dilema sin resolver, en el cual se está investigando hoy.
VII.8. EJERCICIOS 385
VII.8. EJERCICIOS
1.– En el diagrama de la Figura, calcule
el valor del radio rA en función de L0 ,
G y las masas M y m. Use la expresión
para la conservación de la energı́a en
el movimiento bajo fuerzas centrales:
1 L20 GM m
E0 = m vr2 + − .
2 2 m r2 r
¿En qué punto del gráfico, la partı́cula
adquiere su máxima velocidad radial?
2.– Suponga que el Sol comenzó a contraerse hasta que se transformó en un punto con
masa igual a M = M .
a) Si la velocidad lı́mite que puede adquirir un objeto es la velocidad de la luz c,
calcule a qué altura sobre esta estrella colapsada, puede ubicarse un astronauta
para tener posibilidades de escapar de su atracción gravitacional.
b) Una partı́cula describe una órbita circular alrededor de este punto masivo, con la
máxima velocidad posible: c. Calcule el radio de esta órbita y la energı́a asociada.
Recordando que c es una velocidad lı́mite: ¿es posible que esta partı́cula pueda
escapar de esta estrella?
c) Sobre la superficie de la Tierra, la diferencia de la aceleración de gravedad entre
la cabeza de una persona y sus pies es despreciable.
Si nos encontramos cerca de una estrella colapsada –como la descrita– la situación
no es la misma. Suponga que este punto tiene la masa del Sol, demuestre que la
diferencia entre la aceleración de gravedad que siente un astronauta entre sus pies
y su cabeza es:
2 G M h
∆a = , válido para R >> h.
R3
Donde h es su altura, R es la distancia radial desde la estrella hasta los pies del
astronauta y ∆a es la diferencia entre la aceleración experimentada por los pies y
la cabeza.
386 CAPÍTULO VII. GRAVITACION
d) Suponga que fı́sicamente, una persona no puede resistir una diferencia de acele-
ración ∆a, mayor que 5 g, donde g es la aceleración de gravedad en la superficie de
la Tierra. Calcule a qué distancia de la estrella, este astronauta será despedazado
por estas fuerzas diferenciales.
4.– Desde un vehı́culo espacial se eyecta un satélite con una velocidad de v = 32,000
[Km/hr], paralela a la superficie de la Tierra y a una altura de 965 km. Si el radio
terrestre es de 6.380 km, g = 980 cm/s2 , sobre la superficie de la Tierra; ¿puede
este satélite mantenerse en órbita, ya sea circular o elı́ptica?
5.– Los satélites geostacionarios están ubicados en una órbita contenida en el plano
ecuatorial y con una velocidad angular igual a la terrestre, lo que les permite
permanecer en una posición fija con respecto a la Tierra.
a) Determine el radio R que debe alcanzar este satélite para instalarse en una
órbita geostacionaria.
b) Calcule la altura del satélite sobre la superficie terrestre.
Evalúe numéricamente ambos resultados.
6.– Calcule el ancho de los anillos de Saturno, sabiendo que una partı́cula situada en el
borde interior del anillo tiene una velocidad vi y otra, situada en el borde exterior
ve .
7.– Explique qué es la división de Cassini que aparece en los anillos de Saturno. Su
origen se atribuye a una perturbación gravitacional generada por su satélite natural
Minas.
Si el periodo de Minas es el doble del correspondiente a la división de Cassini,
calcule el radio de dicha división.
Considere que la región que contiene la sobredensidad inicial es una esfera ho-
mogénea, cuya densidad se fija distribuyendo la masa del Sol uniformemente en un
radio igual al del sistema solar, RSS :
RSS = 6 × 1014 cm, M = 2 × 1033 g, G = 6, 67 × 10−11 kg −1 m3 /s2 .
Una partı́cula de prueba es aquella que no ejerce ninguna fuerza gravitacional, pero
es afectada por la fuerza de gravedad del sistema.
9.– La masa del Sol es 320.000 veces la masa de la Tierra, y la distancia entre ambos
es 400 veces el radio de la órbita de la Luna alrededor de la Tierra.
a) ¿Cuál es la razón entre el módulo de la fuerza de atracción Sol–Luna y la fuerza
Tierra–Luna? Suponga que la distancia entre el Sol y la Luna es constante e igual
a la que separa el Sol de la Tierra.
b) Cualitativamente (es decir sin calcular, usando sólo un dibujo), ¿cuál es la
trayectoria de la Luna vista desde el Sol?
10.– La Figura representa la órbita elı́ptica de un planeta alrededor del Sol que ocupa el
foco F . Si a y b son los semiejes mayor y menor respectivamente, y c es la distancia
del centro C a un foco, demuestre que se cumplen las siguientes relaciones:
vP a+c
= , y
vA a−c
a · vP · vA = G M ,
11.– a) Un pulsar es una estrella que está en las etapas finales de su evolución, y que
ha disminuido considerablemente su radio. Los pulsares tienen la particularidad
que giran rápidamente sobre sı́ mismos, y están emitiendo radiación desde algunas
zonas de su superficie. Esta emisión es detectada en los radio–observatorios en
la Tierra, en forma periódica: cada vez que la mancha se alı́nea con la Tierra,
recibimos un pulso, tal como vemos el destello de una baliza en una ambulancia.
Calcule el radio de este pulsar, sabiendo que inicialmente –antes de colapsar–,
tenı́a una masa de 2 M y un radio de R = R , y su periodo de rotación era de
25 dı́as. Se sabe que en la actualidad, en su etapa final, envı́a pulsos a intervalos
de T segundos. Evalúe esta cantidad para T ∼ 0,1 s.
b) Suponga que en su etapa de contracción, perdió la mitad de su masa. ¿Puede
encontrar el radio de la estrella a partir de los datos anteriores? ¿Qué suposiciones
debe hacer?
14.– ¿Con qué velocidad horizontal debe eyectarse un satélite, situado a una altura
de 161 km sobre la superficie de la Tierra para que siga una órbita circular a su
alrededor?
¿Cuál será su periodo de rotación? (R⊕ = 6,447 km.)
15.– La distancia media entre Marte y el Sol, es de 1.524 veces la equivalente a la Tierra–
Sol. A partir de estos datos, encuentre el número de años que requiere Marte para
efectuar una revolución en torno al Sol.
17.– Dos partı́culas de masas m y M estaban inicialmente en reposo, separadas por una
distancia que consideramos infinita. Demuestre que en cualquier instante posteri-
or,
p su velocidad relativa de acercamiento debida a la atracción gravitacional es:
2 G (M + m)/d, donde d es la distancia entre ellas.
18.– Una masa de 200 gr. y otra de 800 gr. están separadas 12 cm.
c) ¿Cuánto trabajo se necesita para mover esta unidad de masa a un punto situado
a 4 cm. de la masa de 800 gr. en la lı́nea de los centros?