Resumen SALINAS Dino La Planificacion de La Ensenanza ¿Tecnica Sentido Comun o Saber Profesional
Resumen SALINAS Dino La Planificacion de La Ensenanza ¿Tecnica Sentido Comun o Saber Profesional
Cmo debera planificar el profesor su enseanza? Esta pregunta parte de la hiptesis de que existe un procedimiento
mediante el cual el profesor debera planificar su enseanza; que ese procedimiento debera ser aplicable por todo profesor
(universal); por otra parte, hace referencia al carcter normativo de la respuesta. Quin puede hacer tal pregunta? dos tipos
sociales particulares que tienen la posibilidad de elaborar normas sobre la enseanza: el terico que supone que tiene la
respuesta correcta, o el poltico/administrador del sistema educativo que supone que una forma de hacer ms eficaz la
enseanza es obligar a los profesores a planificar como se debera hacer.
Pero entonces hay una respuesta a la cuestin de cmo debera el profesor planificar su enseanza? En realidad,
no hay una respuesta nica o absoluta. Por lo tanto, habra que sustituir el debera por el podra. As, consideramos que hay
diferentes respuestas de acuerdo a las maneras de pensar sobre la enseanza, el currculum, los estudiantes, la escuela. Se
analizarn las respuestas posibles.
Qu es planificar el currculum?
Hay una definicin legal del currculum, por la cual ste es el conjunto de objetivos, contenidos, mtodos pedaggicos y
criterios de evaluacin de cada uno de los niveles, etapas, ciclos, grados y modalidades del sistema educativo que regulan la
actividad docente. Esta es la definicin ms tradicional del currculum en tanto programa o plan de estudios. En este sentido,
planificar el currculum implicara planificar objetivos, contenidos, mtodos pedaggicos y criterios de evaluacin.
Sin embargo, planificar la enseanza es algo ms. Significa pensar, valorar y tomar decisiones que valgan la pena
sobre situaciones cotidianas, sobre posibles acontecimientos imprevisibles en el marco del aula. Tambin significa, a veces,
pensar sobre el patio de recreo, lpices y libros, como as tambin sobre las experiencias pblicas y privadas vividas da a da
en la escuela que constituyen en conjunto el sentido social de la escolaridad. La planificacin del currculum, entonces, en
cualquiera de sus niveles tiene un carcter de proyecto pblico que se desarrolla de manera sistemtica y que es necesario
explicitar y justificar socialmente. Es una propuesta cultural sometida a valoracin crtica.
Planificar el currculum es debatir, reflexionar y tomar decisiones fundamentadas sobre lo que las escuelas ensean y
no ensean; reflexionar, en suma, sobre el contenido social y cultural y no exclusivamente acadmico- del currculum y ello,
entre otras cosas, supone poner sobre el tapete el significado ideolgico y conflictivo del currculum, de nuestro trabajo y de la
propia escuela.
La hiptesis que sostiene Salinas consiste en que la calidad de lo que sucede en el aula, la calidad de la enseanza y
de los aprendizajes, bsicamente son un estado o situacin que no deriva necesariamente de un documento bien escrito, y s es
consecuencia de un pensamiento, de una reflexin y un debate pblico comprometido y fundamentado sobre el propio trabajo.
Nos encontraremos frente a una buena enseanza en la medida en que tras ella haya buenos profesores y profesoras, y no slo
objetivos, contenidos, mtodos y criterios bien formulados.
A continuacin, reconoce dos perspectivas diferentes sobre el problema de la planificacin de la enseanza, que se
corresponden con dos lgicas diferenciadas a la hora de pensar y actuar en la enseanza.
1.
Perspectiva tradicional: se centra en la definicin pormenorizada de los productos de la enseanza
2.
Perspectiva centrada en la investigacin de los procesos de enseanza como paso imprescindible para
establecer principios que valgan la pena desarrollar en el aula.
1-La planificacin y el desarrollo del currculum como tecnologa
Se trata de una concepcin cientificista sobre el currculum y una concepcin productivista sobre el sistema de desarrollo
escolar.
a.
Orgenes de una forma de pensar la enseanza
En los aos 20 emerge en USA un movimiento centrado en plantear la cuestin de qu es lo que la escuela debe
ensear? como un problema susceptible de tratamiento cientfico cuyas respuestas sean el resultado de aplicar
tcnicas y procedimientos precisos y concretos. Este movimiento, cuyo representante es Bobbit, se identifica con la
racionalidad tcnica del currculum y el modelo de planificacin por excelencia es el modelo de objetivos de conducta.
En el campo del currculum el sentido de la tarea de enseanza radica en la necesidad de concretar los productos de
la enseanza, aquello por lo cual se pone en marcha una tarea; en otras palabras, la necesidad de determinar los
objetivos de la enseanza para establecer los medios ms eficaces para alcanzarlos. La preocupacin se basa en la
premisa de que la regla de carcter tcnico, aplicable, determina la accin prctica. Por ello, el discurso terico ha de
focalizarse en la resolucin de problemas prcticos, en la definicin de objetivos en forma de conductas que el alumno
debe alcanzar desde las experiencias de aprendizaje. Los supuestos que se encuentran en la base de esta
perspectiva son:
Un proyecto educativo debe ser definido desde la concrecin de los resultados que pretende alcanzar
b.
c.
posibilidades y limitaciones, de condiciones de trabajo desde las cuales el profesor toma decisiones y acta. La
planificacin trata de dar un sentido a esa complejidad: desde la planificacin del profesor tratamos de que la toma de
decisiones, valoraciones y acciones tengan una direccin y nos ayuden a comprender y mejorar nuestro trabajo,
contribuyendo a la construccin de un pensamiento profesional sobre el mismo. Esto ocurre en el espacio concreto,
en la prctica de la realidad educativa.
2-La planificacin y el desarrollo del currculum como investigacin
La planificacin de la enseanza constituye un proceso cclico, sujeto a aciertos y errores, por lo tanto, suficientemente flexible
como para ser modificado. Por lo tanto, es fundamental incidir en la capacidad de ese profesor no tanto en solucionar
problemas, sino en primer lugar, en ser capaz de detectarlos o descubrirlos. Por ello, en gran medida, podemos identificar el
ciclo de diseo o programacin de la enseanza como un proceso de investigacin, porque supone experimentacin,
elaboracin de hiptesis, refutaciones, confirmaciones y conclusiones.
Cuando el profesor planifica su enseanza utiliza conocimientos interrelacionados dinmicamente:
a.
Conocimiento experiencial: sistema de explicaciones o principios resultado de la experiencia del profesor como
persona y profesional.
b.
Conocimiento intuitivo: sistema de explicaciones o principios no experimentados directamente por el profesor pero
que ste elabora para afrontar una situacin o decisin y que deriva del sentido comn y la intuicin personal.
c.
Conocimiento terico organizado: sistema de explicaciones y principios organizados y fundamentados sobre la
enseanza, la escuela; elaborados desde las comunidades de tericos e investigadores y ofertados al profesor en su periodo de
formacin.
Cualquier planificacin de un profesor es la evidencia escrita de una teora, de una forma de entender el mundo y pensar la
enseanza. Organizar de forma sistemtica una planificacin no es tanto formalizar un documento escrito como disponer de un
pensamiento organizado y sistemtico sobre lo que podemos, queremos y vale la pena hacer en el aula. As, una planificacin
es una hiptesis que se pone a prueba. Desarrollar en la prctica esa planificacin significa poner a prueba el conocimiento
disponible, y aprender de la prctica para mejorarlo, en un proceso continuo de reconstruccin del conocimiento como tarea
colectiva que implica discusin y debate.
Planificar el currculum supone el establecimiento progresivo y colectivo de principios justificados para actuar de una manera y
no de otra. Y esos principios ni son conductas de los alumnos ni son relativos a cmo los nios aprenden; son principios de
carcter pedaggico relativos a cuestiones de valor sobre lo que se puede, o no se debe, hacer en el aula.
Pero, entonces, cul es el esquema o procedimiento alternativo al modelo de objetivos de conducta? La respuesta es sencilla:
aquel que nos resulte til para pensar, debatir y justificar lo que hacemos y lo que nos propondremos hacer en el aula.
Sobre qu mbitos se puede centrar el pensamiento y previsin sobre lo que nos proponemos hacer en el aula?
a.
Anlisis del sentido y alcance del Proyecto Cultural Oficial (currculum oficial). Bsqueda del sentido de lo
que hay que ensear
b.
Principios de procedimiento para el trabajo en el aula. Explicitar esa teora que como docentes tenemos de la
enseanza. La pregunta que podemos hacer para establecerlos sera: por qu razones puede ser valioso aquello que ocurre
en mi aula?; otra posible forma podra ser la de establecer los principios o supuestos pedaggicos que se derivaran de las
finalidades generales u objetivos establecidos para un ciclo.
c.
Anlisis del contenido, su adecuacin y organizacin. Supone la capacidad profesional de estructurar los
contenidos en un esquema conceptual con sentido para l y sus estudiantes, que responda a la cuestin del qu hay que
ensear y por qu. Desarrollar un tema a lo largo de un curso supone, adems, dominar esa parcela de conocimiento para
trabajarla desde una estructura epistemolgica definida, para seleccionar informaciones y materiales ms relevantes
dominarla en fin para convertir el conocimiento acadmico en experiencia cultural.
d.
Seleccin de actividades-marco y tareas. Todo profesor tiene en mente una especie de fichero donde se
encuentran almacenadas una serie de actividades posibles en el aula. Es la actividad en el aula la definicin ms real y precisa
de lo que es el currculum; esto es, cuando deja de ser proyecto y pasa a convertirse en realidad. En este sentido, todo acto,
actividad o situacin de enseanza no es solo un recurso para lograr aprendizajes previstos, sino que tambin es una situacin
vivida que, como alumno, nos comunica con otros y que nos relaciona, de una manera y no de otra, con el entorno social y
cultural. La evaluacin del llamado progreso del estudiante forma parte de este aspecto, aunque se reconoce su especificidad
en tanto mecanismo de control social y legitimacin del conocimiento escolar que tiene un impacto en su propio autoconcepto,
con respecto a su promocin, etc. Todas las propuestas de actividad en el aula recaban una dimensin no slo tcnica e
instrumental, sino tambin tica. Esto quiere decir que el proceso de toma de decisiones sobre la enseanza debe girar en torno
a lo que vale la pena.
En la medida en que todo proyecto o propuesta de carcter curricular recoge unas finalidades sociales, supone una seleccin
cultural y unos principios de procedimiento, siempre se concreta en unos modos de accin particulares, en unas formas
especificas de trabajar con el conocimiento en el aula y de valorar dicho conocimiento. Ello supone que no existe un currculum
ni una enseanza ptimos, ni nicos, ni siquiera ms eficaces. Todo currculum y toda enseanza es una opcin social, cultural
y metodolgica que ha de ser justificada en todos sus estadios. Se trata, en sntesis, de una hiptesis que se pone a prueba en
los centros escolares y en las aulas y que necesita de procedimientos de debate y anlisis para su mejora progresiva.
El conocimiento de carcter profesional que cada profesor pone en juego a la hora de disear y planificar el currculum
recaba sobre s una doble justificacin: porque funciona y porque vale la pena que funcione as y no de otra manera.