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La estética se originó en el siglo XVIII como una disciplina autónoma dedicada al estudio de la experiencia sensible relacionada con lo bello y el arte. Surge de las reflexiones filosóficas sobre la naturaleza de lo bello en Platón, Aristóteles y otros pensadores, pero no se constituye como campo de estudio independiente hasta que Baumgarten acuña el término "estética" en 1735 para referirse a la "ciencia del conocimiento sensitivo". Desde entonces, la estética se ha centrado en temas como la naturale
Descripción original:
Breve informe sobre la esencia del arte a través de la Estética
La estética se originó en el siglo XVIII como una disciplina autónoma dedicada al estudio de la experiencia sensible relacionada con lo bello y el arte. Surge de las reflexiones filosóficas sobre la naturaleza de lo bello en Platón, Aristóteles y otros pensadores, pero no se constituye como campo de estudio independiente hasta que Baumgarten acuña el término "estética" en 1735 para referirse a la "ciencia del conocimiento sensitivo". Desde entonces, la estética se ha centrado en temas como la naturale
La estética se originó en el siglo XVIII como una disciplina autónoma dedicada al estudio de la experiencia sensible relacionada con lo bello y el arte. Surge de las reflexiones filosóficas sobre la naturaleza de lo bello en Platón, Aristóteles y otros pensadores, pero no se constituye como campo de estudio independiente hasta que Baumgarten acuña el término "estética" en 1735 para referirse a la "ciencia del conocimiento sensitivo". Desde entonces, la estética se ha centrado en temas como la naturale
La esttica y la filosofa del arte se confunden a menudo; la filosofa del arte
tiene una historia ms larga que la esttica. De hecho, aunque la esttica sea hoy una disciplina consagrada, no remonta a perodos anteriores al siglo XVIII, mientras que ya en Platn, Aristteles, Plotino, los pensadores escolsticos o Leibniz se da una reflexin sobre lo bello en su relacin con la naturaleza, con las actividades humanas y con la naturaleza divina. El concepto de esttica corrige en un cierto sentido esta dificultad en la medida en que la esttica tiene, de entrada, un campo amplio: trata de la experiencia sensible vinculada a lo bello y al arte como indica etimolgicamente el trmino esttica y no toma en consideracin slo el arte respecto a su existencia y a sus modos de operacin sobre la sensibilidad, sino tambin la experiencia esttica en general; lo que le lleva a la consideracin de formas de la sensibilidad no necesariamente vinculadas al arte. La esttica se ha constituido a partir de los ltimos aos del siglo XIX como una disciplina universitaria autnoma, con sus problemticas y sus categoras propias. En esta situacin ha dejado de lado, por demasiado especulativas y arriesgadas, las interrogaciones filosficas generales que suscita la existencia de una actividad humana como el arte. Fue Baumgarten quien puso el trmino esttica en circulacin en 1735, en su texto Meditationes Philosophicae de nonnullis ad poema pertinentibus. All, Baumgarten distingua entre los noeta, es decir, las cosas pensadas, que han de ser conocidas por una facultad superior y manifiestan una lgica, y las aisthta, las cosas sentidas, objetos de una ciencia (pistem) esttica (aisthtika). En el prrafo 1 de su Esttica de 17501758, define la esttica como la teora de las artes liberales, una gnoseologa inferior, un arte de pensar lo bello, una ciencia del conocimiento sensitivo. Esta innovacin terminolgica corona una evolucin que se remonta a Leibniz. En sus Nouveaux Essais sur lentendement humain (1704), donde responde al filsofo empirista ingls Locke, Leibniz retoma la distincin lockiana entre nuestras ideas de cualidades primarias, que representan las propiedades de las cosas, y nuestras ideas de cualidades secundarias, que son, nicamente, el efecto que tienen en nosotros unas ciertas cualidades desconocidas de las cosas. Que no conozcamos la causa de estas ideas no cambia en nada el hecho de que tengan para nosotros una cara afectiva y sensible que nos informe, aunque sea confusamente, sobre la realidad. Leibniz entrev a partir de esto una nueva zona de conocimiento, que no ser la del conocimiento claro y distinto aportado por las ideas de las cualidades primeras, sino un conocimiento claro (sabemos bien qu ideas tenemos y qu es lo que nos provocan), pero no distinto (no sabemos a qu corresponden en tanto que ideas). Esto crea el lugar para un conocimiento confuso, que es el que tenemos de los colores, los olores, los sabores y tambin es el que nos facilitan los pintores y los artistas: reconocemos la cosa sin poder decir en qu consisten sus diferencias ni sus propiedades. A travs de estas ideas claras y distintas, el espritu entra en estados algicos, estticos y sensibles. Este es, precisamente, el dominio que Baumgarten designa como gnoseologa
inferior, que es el que nosotros designamos como perteneciente a la
esttica. As, desde inicios del siglo XVIII se abre un dominio de lo experimentado, de lo sensible y del sentimiento que nos hace conocer ciertas cosas sin que las conozcamos en el sentido cognitivo estricto. El desarrollo de estudios y reflexiones sobre estos sentimientos dar lugar al nacimiento de la esttica propiamente dicha, que acontecer en las teoras del gusto, desde la del Padre Bouhours hasta la de Hume, pasando por el abat Du Bos, Shaftesbury, Voltaire, Montesquieu, Hutcheson, Burke, etc. La aparicin de la esttica en trminos de su definicin intelectual debe ser puesta en relacin con procedimientos de definicin del arte y de las instituciones que se ocupan de su existencia, es decir, con una economa y un mundo del arte particulares, puesto que los conceptos toman vida en un mundo del arte. ste est configurado por espectadores y por un pblico que aprecian las obras de arte en el seno de instituciones como los Salones, las salas de pera o de concierto y, un poco ms tarde, hacia el fin del siglo XVII, los museos. Esto explica que las categoras principales de la esttica giren entorno de la naturaleza de las obras de arte, de sus propiedades y de sus efectos, de su valorizacin y, ms tarde, cuando, en el siglo XX, la definicin de arte se convierta en algo menos seguro, de su identificacin, dejando de lado la reflexin sobre la produccin del arte. sta, que fue en un primer momento exclusivo del medio profesional de los artistas a travs de las teoras de la creacin artstica, se dej en manos de los antroplogos y de los historiadores del arte. Dicho de otro modo, la esttica tiende, desde su nacimiento, a dejar de lado la dimensin del hacer, que designamos tambin como la potica del arte, y tambin, al mismo tiempo, una gran parte de su significacin en tanto que actividad humana. En el cerco de las temticas que se plantean y de los objetos que consideran, la esttica, a lo largo de tres siglos de existencia, ha abordado y cubierto con xito un registro impresionante de cuestiones, que afectan a la representacin, a la expresin, a la forma, a la nocin de obra de arte y a los juicios de evaluacin. Las contribuciones al respecto son de naturaleza diferente segn vengan de la tradicin hermenutica o del acercamiento conceptualanaltico. Las contribuciones de inspiracin hermenutica privilegian, tal como lo sugiere su nombre, la interpretacin de la situacin esttica en sus dos dimensiones de experiencia de creacin y de experiencia de recepcin. Qu pasa con la significacin de las obras de arte cuando las consideramos como un elemento clave de la existencia humana y de su relacin con el ser? De eso se preocupa la esttica hermenutica, que se concentra por tanto en la aprehensin de las intenciones de los artistas y el trabajo de interpretacin de los espectadores, por encima de nociones como la de expresin o la de forma. Hace de la obra de arte un elemento clave de la manifestacin del ser humano y de su humanidad. Ingarden, Dewey, Collingut, Heidegger, Adorno, Pareyson, Focillon, Dufrenne, Lyotard o Derrida, son los nombres que hacen de faro de este acercamiento.
La esttica se ha preguntado insistentemente por la definicin de la obra de
arte y por las condiciones mediante las cuales atribuimos a una cosa la caracterstica de serlo. Desde el punto de vista de la definicin de los objetos, desde Gilson hasta Goodman, las investigaciones de tipo ontolgico han sido numerosas y poderosas. Se han dedicado a las condiciones de identificacin de los objetos artsticos, de sus modos de existencia material y temporal, de su autenticidad o de su naturaleza de copia o reproduccin, de su relacin al material, etc. En este contexto, si bien subsisten sin nimo de desaparecer las habituales divisiones entre los platnicos partidarios de las formas universales abstractas y los nominalistas partidarios de la existencia individual estricta, hay que decir que sin embargo han estado bien definidos los diferentes elementos que intervienen en ello, comprendidos los contextos y los procedimientos que deben intervenir en la definicin de los objetos artsticos.