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Recursos Administrativos
Recursos Administrativos
INTRODUCCIÓN
De relevante interés no sólo para el estudioso del derecho fiscal, sino para los
contribuyentes, es conocer las defensas de éstos ante el Estado, personificado en el
fisco.
El artículo 116 del Código Fiscal de la Federación en vigor enuncia solamente los
recursos de revocación y de oposición al procedimiento administrativo de ejecución,
que se podrán hacer valer contra los actos administrativos que se dictan en materia
fiscal.
IV. Si se resuelve que no hubo notificación o que fue ilegal, tendrá al recurrente
como sabedor del acto administrativo desde la fecha en que manifestó conocerlo o
en que se le dio a conocer en los términos de la fracción II, quedando sin efectos
todo lo actuado en base a aquélla, y procederá al estudio de la impugnación que,
en su caso, hubiese formulado en contra de dicho recurso.
Ibidem.
Cuando el aplicador del derecho positivo, olvidándose del camino que le señala la
ley, emite resoluciones o realiza actos que violan la juridicidad necesaria de los
mismos, el afectado por esas conductas, ante la carencia del seguro fundamento
legal y la falta de una motivación adecuada de los mismos, apoyado en el artículo
16 de nuestra Constitución federal y en la ley secundaria relativa, puede impugnar
tales resoluciones y conductas de aquella autoridad.
Siendo dos los recursos anunciados por el Código Fiscal de la Federación, las
condiciones de procedencia son dos; para ello conviene transcribir los artículos de
este ordenamiento que a ello refieren.
Dado que la determinación de contribuciones que el fisco lleva a cabo puede ser
ordinaria o presuntiva, contra lo que puede pensarse al respecto, conviene aclarar
que el citado recurso de revocación procede en ambos casos, pues en ambos lo que
interesa es impugnar un acto de autoridad lesivo del interés del promovente.
La fracción II del precepto transcrito alude a los casos en que, sea en virtud de un
pago de lo indebido (artículo 22 del Código) o de otra circunstancia en que el fisco
haya obtenido o mantenga en su poder, por cualquier otro motivo, lícito o ilícito,
cantidades que ha de reintegrar a ese particular.
Finalmente, la fracción III alude a las disposiciones que haya dictado la autoridad
aduanera, o a los actos de la misma; pero que no sean de los que constituyen o se
llevan a cabo durante el recientemente establecido inicio del procedimiento
administrativo de ejecución, que ahora es competente para realizar la autoridad
aduanera con apoyo en el artículo 121 de la Ley de la materia.
La aclaración contenida en el párrafo anterior habrá que tenerla presente con gran
cuidado, pues además de atender a una novedad de la Ley Aduanera, como se verá
luego, si no se toma en cuenta se puede incurrir en inexactitud al aplicar el artículo
128 de la Ley.
El artículo 118 del Código Fiscal alude a la procedencia del recurso de oposición al
procedimiento administrativo de ejecución, de la siguiente manera:
Si se tiene en cuenta que según el artículo 2 del mismo Código Fiscal, los recargos,
los gastos de ejecución y la indemnización a que tiene derecho el fisco por la
devolución por parte del banco librado de cheques que ha recibido aquél en pago de
créditos fiscales, "participan de la misma naturaleza" que las contribuciones, resulta
inútil la aclaración que en relación con los créditos relativos hace la fracción.
Las tercerías pueden ser coadyuvantes y excluyentes; para efectos de este estudio
interesa sólo las segundas.
Las tercerías excluyentes son de dos clases: las de dominio y las de preferencia.
Las primeras tienen por objeto que se declare que el tercero opositor es dueño del
bien que esté en litigio (en el caso que me ocupa debe decirse "embargado") en el
juicio principal, que se levante el embargo que ha recaído sobre él y se le devuelva
con todos sus accesorios, o bien que es el titular de la acción ejercitada en dicho
juicio [...] Las tercerías de preferencia tienen por objeto que se declare que el
tercerista tiene preferencia en el pago, respecto del acreedor embargante en el
juicio principal.
Las tercerías referidas en esta fracción son tanto la excluyente de dominio, como la
excluyente de preferencia; la primera se da en el caso de que un bien que se ha
embargado por el fisco a un deudor fiscal, no pertenezca a dicho deudor. Resulta
lógico que en este caso el dueño del bien embargado pueda intervenir en tercería
para recuperar dicho bien; la segunda se produce en los casos en que un tercero,
de acuerdo con el artículo 149 del mismo Código, tenga preferencia sobre el fisco
para cobrar un crédito.
Como en otros campos del derecho, el legislador del Código Fiscal de la Federación
ha tenido cuidado de señalar los requisitos que se han de satisfacer para hacer
procedente el recurso administrativo:
El escrito de interposición del recurso deberá satisfacer los requisitos del artículo 18
de este Código y señalar además:
Resultaría sin sentido pretender hacer valer un recurso sin que se exprese el acto
que se quiere impugnar; y además, el acto o resolución que se impugnen deben
expresarse en forma precisa, que no quede lugar a duda acerca de la conducta o
resolución de la autoridad, so pena de que se deseche por improcedente dicho
recurso (mismo artículo).
Los agravios también constituyen materia del recurso, por lo que la carencia de
ellos igualmente lo hacen improcedente. Los agravios deben de tal manera
razonarse que sea evidente, con la expresión de los mismos, que con la conducta
de la autoridad se está afectando el interés jurídico del recurrente.
Tampoco el acto o resolución que se impugnan por la vía del recurso han de haber
sido impugnados antes, ya sea en recurso similar, o que se trate de alguno cuya
nulidad se haya demandado ante el Tribunal Fiscal de la Federación.
Ni los actos que dan origen al recurso han de ser de aquellos que se consideran
consentidos, en virtud de no haber sido impugnados en los plazos que la ley señala
para hacerlo. Estos actos o resoluciones se califican de firmes, y, como es sabido,
contra los mismos no cabe recurso u otra defensa.
Por otra parte, los mencionados actos tampoco pueden ser de los que se califiquen
de conexos con otros que hayan sido motivo de otro recurso, o de otro medio de
defensa.
Asimismo, resulta lógico que el acto o resolución que con el recurso se impugnan
no deben haber sido revocados por la autoridad que los emitió, pues seguramente
que con apoyo en el artículo 124 del mismo Código, la autoridad ante la que se
promueve declarará improcedente la defensa.
Por lo que hace a los agravios, ya que precisamente con el recurso se pretende
evitar los efectos dañinos de una resolución o una conducta de la autoridad,
conviene que los mismos se expresen no sólo con claridad, sino que el recurrente
ha de buscar, al formularlos, expresar en cada caso el interés jurídico que con el
recurso se pretende defender. Lo anterior implica razonar el agravio expresando el
derecho que con el mismo se ha violado; lo contrario seguramente deja endeble el
valor del agravio.
En relación con las pruebas a que se refiere la fracción III del artículo 122,
recuérdese que es elemento sin el que no puede tener éxito cualquier proceso o
impugnación, pues resulta sin sentido el que se expresen hechos y se formulen
peticiones, si no constan fehacientemente los primeros y, sin el apoyo legal, se
formulan las peticiones del promovente.
Creo que vale la pena agregar una aclaración al respecto: no es lo mismo una
resolución definitiva que una resolución firme; la definitiva es aquélla con la que
concluye una instancia; la firme es aquella que habiendo sido definitiva, ha
transcurrido después de la fecha de su emisión un tiempo en que pudo ser
impugnada sin que se haya hecho, o habiendo sido impugnada, tal impugnación no
haya prosperado.
Este tipo de resoluciones no son impugnables, ya que si lo fuesen resultaría sin fin
el proceso en que se hubiesen dictado.
Por lo que respecta a que la resolución ha de ser personal y concreta, habrá que
tener en cuenta que en ésta, como en cualquier materia jurídica, no pueden
impugnarse sino por medio de otros procedimientos, resoluciones que carezcan de
esta característica, y que cuando concretamente la resolución afecta a alguien, y
sólo entonces, puede formularse la defensa por la vía que se estudia.
Habrá que agregar en este punto que la afectación mediante el agravio debe ser a
un interés tutelado por la ley; es decir, ha de ser un interés jurídico, pues es
condición para la procedencia del recurso la fundamentación del mismo, y ésta
requiere la alusión al derecho violado al promovente.
Para que el recurso sea procedente, de acuerdo con el artículo 123 del Código, el
promovente deberá acompañar el documento en que conste el acto impugnado; y
si no lo hiciese, será requerido por la autoridad fiscal para que satisfaga este
requisito, en el entendido de que si a pesar de ello no lo aportase en el plazo de
cinco días, el recurso se tendrá por no interpuesto.
Ya que en el caso de negativa ficta la resolución no existe, pues precisamente por
carencia de la misma se da la defensa, sólo deberá probar el recurrente que
formula la instancia o solicitud, dentro del plazo legal, que no fue atendida ésta en
el tiempo que la ley da a la autoridad para hacerlo.
Por lo que Margain llama resolución "nueva", habrá que entender que los recursos
administrativos son improcedentes, según el artículo 124 del Código Fiscal, cuando
la resolución que se impugna haya sido dictada en otro recurso, o en cumplimiento
de ésta o de una sentencia, o que haya sido impugnada ante el Tribunal Fiscal de la
Federación.
De acuerdo con la ley y la doctrina, hay recursos que deben agotarse antes de que
se promueva ante instancia superior, y recursos cuyo agotamiento es opcional
antes de esta promoción.
Conviene agregar a lo dicho que de acuerdo con el artículo 36 del mismo Código,
"las resoluciones administrativas de carácter individual favorables a un particular
sólo podrán ser modificadas por el Tribunal Fiscal de la Federación mediante juicio
iniciado por las autoridades fiscales". Algún antiguo texto del artículo al que
corresponde el 36 aclaraba que las mencionadas resoluciones no eran revocables
por la autoridad que las emitía.
Existen organismos fiscales autónomos como el Instituto Mexicano del Seguro Social y
el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores.
Estos organismos realizan actividades de fisco y ante ellos también se pueden interponer
recursos administrativos de naturaleza fiscal.
XI. RECURSOS QUE ESTABLECE LA LEY DEL SEGURO SOCIAL
También, de acuerdo con el artículo 253 de la Ley, pueden conocer de este recurso
los consejeros consultivos delegacionales, previa autorización del Consejo Técnico
del Instituto.
Con el mismo régimen del recurso de revocación en materia fiscal, en la del Seguro
Social se da el recurso de igual nombre, sólo que aquí la defensa se produce contra las
resoluciones en materia de admisión del recurso y de las pruebas ofrecidas en el de
inconformidad.
En relación con este recurso de revocación, indica el artículo 26 del Reglamento del
artículo 274 de la Ley del Seguro Social:
Contra las resoluciones del secretario general del Instituto o del secretario del Consejo
Consultivo Delegacional, en materia de admisión del recurso y de las pruebas ofrecidas,
procederá el recurso de revocación ante el Consejo Técnico o ante el Consejo
Consultivo Delegacional correspondiente. El recurso se interpondrá dentro de los tres
días siguientes al en que surta efecto la notificación del acuerdo recurrido y se decidirá
de plano.
La aludida comisión
Luego, el artículo 5o. del mismo Reglamento indica: "El recurso de inconformidad o
la controversia sobre valuación se interpondrá por escrito, directamente ante la
Comisión o por correo certificado con acuse de recibo, caso este último en que se
tendrá como fecha de presentación la del día en que hayan sido depositados en la
oficina de correos".
El artículo 7o. del Reglamento dice: "Procede el recurso de inconformidad contra las
resoluciones individualizadas del Instituto de Fondo Nacional de la Vivienda para los
Trabajadores, que los trabajadores, sus beneficiarios o los patrones estimen lesivas
de sus derechos. No serán recurribles las resoluciones de carácter general
expedidas por el Instituto".
Según el artículo 9o. del Reglamento, disponen de treinta días los trabajadores, y
de quince los patrones para interponer el recurso de inconformidad, a partir del
siguiente en que se les haya notificado el acto que impugnan, o de aquel en que los
interesados demuestren haber tenido conocimiento del mismo; estos días serán
hábiles.
Del escrito en que se interponga el recurso se dará vista a los terceros que
pudieran estar interesados en el mismo, a efecto de que en plazo de diez días
manifiesten lo que a su derecho convenga; asimismo, se solicitará al Instituto el
expediente del que haya emanado el acto impugnado para que se envíe en plazo no
mayor de cinco días (artículo 12 del Reglamento). Si los terceros interesados
fuesen trabajadores sindicalizados, será suficiente dar vista al sindicato titular del
contrato colectivo ley; si estos trabajadores no fuesen sindicalizados, al dárseles
vista se les requerirá para que designen representante común, en el sentido de que
si no lo nombran lo hará la Comisión.
Como se observa, además de los recursos que se enuncian en el artículo 116 del
Código Fiscal de la Federación, en el Código Financiero del Distrito Federal aparece
el de oposición de tercero. En esta forma el recurso de oposición al procedimiento
administrativo de ejecución, que de acuerdo con el artículo 128 del Código Fiscal de
la Federación puede interponerse por el contribuyente o por un tercero que
concurra para excluir del embargo que se hace al contribuyente, un bien propiedad
del mismo tercero, o para hacer valer la preferencia que tiene de que se le pague
antes que al fisco, se ha descompuesto en el Código Financiero en el (recurso) de
"oposición al procedimiento administrativo de ejecución" que promueve el sujeto
pasivo, y el de "oposición de un tercero", equivalente éste a la intervención del
tercerista, que prevé el Código Fiscal de la Federación.
Por otra parte el Código Financiero, en el mismo artículo 547, hace la pertinente
aclaración de que "Las resoluciones que se dicten como consecuencia de recursos
no establecidos legalmente, serán nulas".
Dicha nulidad será declarada, aún de oficio, por la autoridad superior de la que
hubiese dictado la resolución, si ésta no modifica, en favor del particular, la primera
resolución; si hubiera modificación favorable al particular, la nulidad de la nueva
resolución sólo podrá ser declarada por el Tribunal de lo Contencioso Administrativo
del Distrito Federal.
Los recursos administrativos que prevé el Código Financiero, a diferencia de los que
regula el Código Fiscal, se promueven ante la Procuraduría Fiscal del Distrito
Federal; en tanto que los segundos se manejan "ante la autoridad que emitió o
ejecutó el acto impugnado" (artículo 121 del Código Fiscal).
Los actos administrativos contra los que proceden los recursos señalados en el
Código Financiero, según el artículo 549 del mismo ordenamiento, son los previstos
por los artículos 551, 552 y 553, que a la letra dicen:
I. Exijan el pago de créditos fiscales, cuando se alegue que éstos se han extinguido
o que su monto real es inferior al exigido, siempre que el cobro en exceso sea
imputable a la oficina recaudadora o se refiera a recargos, gastos de ejecución o a
la indemnización a que se refiera el artículo 48 del Código, o
En la oposición a que se refiere este artículo no podrá discutirse la validez del acto
en el que se haya determinado el crédito fiscal. Tampoco en este recurso se podrá
discutir la validez de la notificación realizada por las autoridades federales, respecto
de la resolución que determine créditos fiscales federales, y que de acuerdo con la
coordinación fiscal corresponde a las autoridades fiscales del Distrito Federal su
cobro.
Este recurso no procede en contra de actos que tengan por objeto hacer efectivas
las fianzas otorgadas en garantía de obligaciones fiscales o contractuales a cargo de
terceros.
II. Por quien afirme tener derecho a que los créditos a su favor se cubran
preferentemente a los fiscales.
La diferencia se debe a que el Código Financiero es ley local del Distrito Federal, por
lo que no ha de referirse a la materia aduanera, que es de naturaleza federal.
Para tal efecto, deberá impugnar tanto el acto como su notificación, de manera
conjunta.
IV. Si se resuelve que no hubo notificación a que fue ilegal, se tendrá al recurrente
como sabedor del acto impugnado desde la fecha en que manifestó conocerlo o en
que se le dio a conocer en los términos de la fracción II, quedando sin efectos todo
lo actuado con base en aquélla, y se procederá al estudio de la impugnación en
contra el acto administrativo.
En el caso de actos regulados por leyes federales, respecto de los cuales las
autoridades fiscales del Distrito Federal tengan encomendado su cobro, la
impugnación de la notificación de los mismos se hará a través del recurso que, en
su caso, establezca la Ley respectiva y de acuerdo con lo previsto en la legislación
federal aplicable.
Para efectos de este trabajo, los recursos aludidos en el párrafo anterior no nos
interesan, sin que ello implique displicencia por los mismos, pues son muy
importantes en la materia administrativa.
INTRODUCCION
El procedimiento contencioso administrativo o juicio de nulidad fiscal, se tramita ante el
Tribunal Fiscal de la Federación, que es un órgano con funciones formalmente
ejecutivas y materialmente jurisdiccionales, porque sus resoluciones consisten en
resolver controversias que surjan entre las autoridades fiscales y los particulares
El Juicio Contencioso Administrativo para el autor Andrés Serra Rojas: es el juicio o
recurso que se sigue en unos sistemas ante los Tribunales Judiciales y en otros ante
tribunales administrativo autónomos , sobre pretensiones fundadas en preceptos de
derecho administrativo que se litigan entre particulares y la administración publica, por
los actos ilegales de ésta que lesionan sus derechos.
Quintana Valtierra lo define como: “ proceso de partes y no un proceso oficioso, ya que
formaliza una relación procesal que se caracteriza por la igualdad del contribuyente y el
fisco y su subordinación a la autoridad jurisdiccional, con la cual deben cooperar con
el esclarecimiento de la verdad. Cabe destacar que el procedimiento para tramitación de
los juicios de nulidad ante el TFJFA esta estructurado por los principios de un juicio y
no con los de un recurso.
En general el juicio de nulidad o contencioso administrativo se da contra actos de
autoridad que afecten al particular, estos son resueltos por el Tribunal Federal de
Justicia Fiscal y Administrativa.
Dentro del juicio encontramos cuatro partes que son: el demandante que es la
persona a la cual se le comete el agravio y por cual emite la demanda, los demandados
que son la autoridad que causa el agravio o dicta la resolución a impugnar, el titular de
la dependencia o entidad de la administración publica federal, es decir el procurador
general de la república o procurador de justicia del distrito federal de la cual depende
la autoridad que emitió o ejecuto el acto discutido, y un tercero el cual también le afecta
o beneficia la resolución de la sentencia.
LA SENTENCIA
La sentencia es la resolución administrativa que pone fin a un juicio en una instancia, en
un recurso o en un incidente que resuelva lo principal.
Para el autor Refugio de Jesús la sentencia es la decisión que se emite en cualquier
controversia, dentro de un procedimiento. Siendo definitiva la que resuelve el juicio en
lo principal, y es interlocutoria, la que resuelve un incidente.
Para el autor Oswaldo G. Reyes y Sergio Omar Esquerra, la sentencia es el acto
procesal a través del cual el juzgador resuelve la controversia principal materia del
juicio, así como las incidentales que hayan surgido durante su tramitación, mediante la
aplicación del derecho al caso concreto.
Por otro lado el autor PINA VARA, define efecto jurídico como: consecuencia natural
de un acto; y sentencia es resolución judicial que pone fin a un proceso o juicio en una
instancia o en un recurso extraordinario.
En el juicio contencioso administrativo la sentencia se debe pronunciar en un término de
60 días después de cerrada la instrucción. Dentro de los primeros 45 días de dicho
término se formulará el proyecto respectivo
La sentencia es la parte del juicio, donde la autoridad dicta la resolución de la
controversia, de un recurso, un incidente o acto después de que lo ha analizado y lo ha
aplicado respecto al derecho.
La sentencia puede pronunciarse por unanimidad o por mayoría de votos, por lo tanto,
si el proyecto del magistrado instructor es aprobado por los otros dos magistrados se
firma y queda elevado a la categoría de sentencia.
El Código Fiscal de la Federación en su articulo 237 señala que la sentencia del
Tribunal Fiscal de la Federación se deben fundar en derecho y deben examinar todos y
cada uno de los puntos controvertidos del acto impugnado, teniendo los magistrados la
facultad de invocar hechos notorios. Además las salas pueden corregir los errores que
advierten en la cita de los preceptos que se consideren violados y examinar en su
conjunto los agravios y causales de ilegalidad, así como ,los demás razonamientos de
las partes, a fin de resolver la cuestión efectivamente planteada, pero sin cambiar los
hechos expuestos en la demanda y en la contestación de la demanda; las resoluciones
de las salas deben cumplir con el requisito de congruencia, es decir, que deben tener un
desenvolvimiento lógico y debe haber conformidad de extensión, concepto y alcance
entre el fallo y la pretensión de las partes. Este principio se encuentra fundamentado en
la tesis que sostiene el Poder Judicial Federal del artículo 229 del Código Fiscal de la
Federación.
El proyecto que designe la autoridad debe ser aprobada y firmado por los demás
magistrados para que esta pueda elevarse a sentencia, la sentencia debe estar fundada
en derecho y los magistrados deben analizar todos y cada uno de los puntos
controvertidos del juicio, así como los agravios, las causas de ilegalidad y lo expuesto
por las partes, y tiene la autoridad la facultad de corregir los errores que hayan
cometido las partes sin modificar lo expuesto por las partes. Su resolución debe ser
clara y congruente entre los pedimentos del demandante, y el fallo, esto se encuentra
fundado en el artículo 229 del Código Fiscal de la Federación.
Partes de la sentencia
Los autores Oswaldo G. Reyes Corona y Sergio Omar Esquerra Lupio explican
en su obra las partes que conforman la sentencia las cuales son:
1.- preámbulo: datos del juicio respectivo (partes, tribunal que la dicta, número de
expediente y tipo de sentencia)
2.-resultandos: relato cronológico de los hechos habidos dentro del procedimiento desde
la presentación de la demanda hasta el cierre de instrucción.
3 considerandos.- análisis de los hechos y puntos litigiosos resultados del estudio y
valoración que el juzgador de a las pruebas y alegatos presentados por las partes en
confrontación con el derecho.
4.-puntos resolutivos.- especificación concreta del sentido de la sentencia (fallo)
La sentencia debe estas muy bien fundada y contener cada uno de los puntos
antes mencionados y explicados como el preámbulo, resultandos, considerandos y los
puntos resolutivos, en los cual el juzgador da la resolución de la demanda.
EFECTOS DE LA SENTENCIA
LA SENTENCIA OSCURA
Se pueden dar sentencias que no sean claras o bien que las conclusiones de las
mismas no concuerden con los considerandos en los que la sala va analizando y
resolviendo la causales de ilegalidad expuestas por le demandante y la contestación por
la autoridad; ocasionándose una sentencia oscura.
A falta de cumplimiento de sentencia firme que hubiese otorgado la suspensión
definitiva procederá recurso de queja; si se interpone se suspenderá el efecto de la
sentencia hasta la resolución que ponga fin a la controversia.
Se dice que la sentencia es oscura cuando lo resuelto por el juzgador resulta
incoherente y no coincide con los considerandos que debe analizar la sala, como lo son
los hechos, las pruebas y los alegatos.
ACLARACION DE SENTENCIA
Cuando alguna de las partes no este de acuerdo con lo que marca la sentencia
podrá presentar una promoción en la cual solicite que se le aclare la sentencia en los
términos del artículo 239-C que establece:
“la parte que estime contradictoria, ambigua u oscura una sentencia definitiva del
Tribunal Fiscal de la Federación. Podrá promover por una sola vez su aclaración
dentro de los diez días siguientes a aquel en que surta efectos la notificación”
La instancia debe contener la parte de la sentencia la cual se requiere la aclaración, la
cual se solicita a la sala o a la autoridad que dicto la sentencia, la cual debe responder
dentro de los cinco días posteriores a aquel se presento la promoción.
La autoridad que resuelve otorga un término para que las partes soliciten la aclaración
de la sentencia a través de una promoción.
El recurso tiene por objeto que el Tribunal haga comprensibles los conceptos ambiguos,
rectifique los contradictorios, explique los obscuros y subsane errores u omisiones
incurridas en las sentencias que emita
Este recurso no constituye técnicamente un medio legal, en virtud del cual se pueda
revocar, modificar o anular en cuanto al fondo de una sentencia; sin embargo su
promoción interrumpe el término para su impugnación en la vía de amparo directo,
otorgándole definitivitad una vez resuelto, al reputarse la resolución re caída como
parte de la misma.
Otro recurso que se puede interponer es el recurso de queja por incumplimiento, exceso
o defectuoso cumplimiento de sentencia; es decir cuando la resolución repita
indebidamente la resolución anulada
RECURSO DE RECLAMACION
En los términos del primer párrafo del artículo 242 del Código Fiscal de la Federación,
el recurso de reclamación es procedente en contra de resoluciones del magistrado
instructor, en las que:
1.-se admita, deseche o tenga por no presentada una demanda, su contestación, la
ampliación de ambas o de alguna probanza.
2.-se decrete o niegue el sobreseimiento de un juicio.
3.- se admita o rechace la intervención del tercero interesado.
Podrá ser promovido por las partes ante la sala regional o sección de la superior
correspondiente en un plazo de quince días hábiles posteriores en que surta efectos la
notificación del acuerdo que se reclame.
Por disposición del numeral 243 del Código Tributario Federal, admitido a
trámite el recurso, se dará vista a las partes restantes por un termino de quince días, a
efectos de que argumenten lo que a sus intereses convenga, excepto en el supuesto de
que se esgrima en contra de un acuerdo por el que se sobresea un juicio, en virtud de
desistimiento de la accionante, previo al cierre de la instrucción. Este deberá ser
resuelto en quince días.
El recurso de se puede aplicar en los casos en que se deseche o se tenga por
presentada una demanda su contestación, la ampliación de ambas, las probanzas, cuando
se declare un sobreseimiento y la autoridad lo admita o niegue, o cuando exista la
intervención de un tercero que no se haya tenido considerado en la demanda, esta puede
ser remitida a la sala regional o sección de la superior correspondiente.
RECURSO DE QUEJA
Las partes pueden presentar el recurso de queja de acuerdo con el artículo 239-
b del código Fiscal de la Federación por única vez ante las secciones de la sala superior
o las salas regionales del Tribunal en virtud del incumplimiento de sentencia definitiva
o interlocutoria en la que se haya otorgado la suspensión a la ejecución del acto
controvertido
Lo anterior cuando:
1.- la resolución repita indebidamente la resolución anulada o incurra en exceso o en
defecto, cuando dicha resolución se dicte en cumplimiento de una sentencia
2.- cuando la autoridad omita dar cumplimiento al a sentencia, para lo cual deberá
haber transcurrido el plazo previsto en la ley. (Cuatro meses)
3.- si la autoridad no da seguimiento a la orden de suspensión definitiva de la ejecución
del acto impugnado en le juicio de nulidad.
En el escrito deberá de expresarse los motivos por los que se considero hubo
repetición de la resolución nulificada o incumplimiento, exceso u error en el
acatamiento de sentencia, exhibiéndose adjuntas las probanzas pertinentes para
demostrarlas.
Otro recurso que pueden presentar las partes es el recurso de queja que se aplica en el
incumplimiento de una sentencia ya sea definitiva o interlocutoria, donde la sentencia
ya sea que se suspenda o la autoridad la omita dentro del termino de cuatro meses que
establece la ley, o si la autoridad no da el seguimiento correspondiente a la suspensión
definitiva de la ejecución del acto impugnado.
CONCLUSIONES:
Todos los autores en sus pobras señalan los mismos efectos de la sentencia los cuales
fueron tomados del articulo 52 del código fiscal de la federación, por cual es difícil
extenderse en el tema puesto que todos los autores consultados no agregan mas que los
mencionados en dicho articulo.