El Padre Bueno Del 17 Al 23 de Junio 2017

Comunidad Apostólica Hosanna
Redes de Crecimiento
Lección del 17 al 23 de junio de 2018
Apóstol Edwin Álvarez
Página Web: www.edwinalvarez.org
EL PADRE BUENO
“Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo”.
(Lucas 15:21)
Llama poderosamente la atención que para ilustrar el amor de Dios, la

relación del Padre con sus hijos y la redención, Dios escogiera la figura de
un padre de familia de la época. La parábola del Hijo Pródigo es
realmente la expresión del amor del Padre.
En base a esto podemos concluir que Jesús nos muestra en tres facetas lo
que espera que vivamos diariamente con nuestro Padre:
ENSEÑANZAS
Si tomáramos solamente el Sermón del Monte, veríamos las profundas

enseñanzas que hay de la relación con el Padre.
Entre las enseñanzas encontramos el concepto de paternidad, esto lo

podemos ver por ejemplo, en la oración modelo, Jesús nos enseñó a
orar: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.
Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la
tierra. El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. Y perdónanos nuestras
deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. Y no
nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el
poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.” (Mateo 6:9-13)
Lo vemos también en las enseñanzas sobre la comunión con Dios, la

oración como hemos dicho “Padre Nuestro que estás en los cielos” y todas
las demás oraciones, hasta llegar a Juan 14:6 “Nadie viene al Padre sino
por mí” esta es nuestra vida de comunión.
Luego nuestras necesidades, el Sermón del Monte habla de las

necesidades “Porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad,
antes que vosotros le pidáis”. (Mateo 6:8), “¿Qué padre de vosotros, si su
hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿O si pescado, en lugar de pescado,
le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? Pues si
vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto
más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”
(Lucas 11:11-13)
Aparte de paternidad, de la comunión y de la satisfacción de nuestras

necesidades, tenemos el testimonio, “Sed, pues, vosotros perfectos, como
vuestro Padre que está en los cielos es perfecto”. (Mateo 5:48) cuando
ayunes, cuando ores, cuando des, “Así alumbre vuestra luz delante de los
hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro
Padre que está en los cielos.” (Mateo 5: 16)
Y finalmente promesa, la enseñanza del Padre también tiene que ver con
la promesa: “Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén,
sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí.”
(Hechos 1:4), “He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros;
pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis
investidos de poder desde lo alto.” (Lucas 24:49), “Jesús le dijo: Yo soy el
camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” (Juan
14:6)
EJEMPLO
Jesús nos dio el ejemplo de nuestra relación con el padre a través de la

vida de oración “En aquel tiempo, respondiendo Jesús, dijo: Te alabo,
Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los
sabios y de los entendidos, y las revelaste a los niños.” (Mateo 11:25)
El Señor llama a sus discípulos a llevar el yugo y aprender de él que es

manso y humilde de corazón. “Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended
de mí, que soy manso y humilde de corazón”. (Mateo 11:28)
“Padre, gracias te doy por haberme oído. Yo sabía que siempre me oyes;
pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean
que tú me has enviado.” (Juan 11:41-42) Nuestra relación con el Padre,
debe ser una relación que nos garantice que Dios siempre nos oye y que
por esa relación y por habernos oído siempre estamos a la expectativa de
un milagro.
“Padre, glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo: Lo he

glorificado, y lo glorificaré otra vez.” (Juan 12:28). Esta oración nos enseña
también que lo importante que es saber el tiempo en que vivimos. Jesús
dijo esto cuando los griegos, o sea los no judíos, le buscaban y él entendió
que ya era hora para ser entregado a los gentiles y ser crucificado. Así que
nuestra relación con el Padre nos ha ayudado a entender también el
tiempo, los momentos en los que vivimos y el tipo de oración que
debemos hacer para cada momento.
“Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te

glorifique a ti;” (Juan 17:1) Habla del Padre, esta es la oración sacerdotal,
entre lo mucho que hay aquí vemos pues que Jesús se dirige al Padre
entregando a sus discípulos y pidiendo por los que serían sus discípulos
hasta la consumación de los tiempos, luego le llama en el versículo 11
“Padre Santo”, “Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y
yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre,
para que sean uno, así como nosotros”. en el versículo 25 “Padre Justo”.
“Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido, y éstos
han conocido que tú me enviaste”. Nuestro Padre es Bueno, nuestro Padre
es Santo, nuestro Padre es Justo.
Eso concuerda con la multiplicación de los panes y los peces donde Jesús
levantó los ojos al cielo: “Y Jesús, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre,
gracias te doy por haberme oído. Yo sabía que siempre me oyes; pero lo
dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que tú
me has enviado.” (Juan 11:41-42)
“Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo

quiero, sino como tú.” (Mateo 26:39) Jesús nos enseña toda nuestra vida
debe ser entregada al Padre.
CRUCIFIXION
Jesús nos enseña nuestra relación con el Padre en el propio acto de Su

crucifixión, todo comienza en Getsemaní cuando Jesús se rinde al Padre y
renuncia a hacer su propia voluntad para aceptar la voluntad del padre
aun sabiendo que: “le puedo pedir a mi Padre doce legiones de ángeles y
me las daría” el renuncia a eso para rendirse totalmente al Padre.
Luego en la cruz, la primera oración fue “Padre, perdónalos, porque no

saben lo que hacen.” (Lucas 23:34). Está la oración del perdón: “Porque si
vosotros no perdonáis, tampoco vuestro Padre que está en los cielos os
perdonará vuestras ofensas.” (Marcos 11:26). Jesús nos garantiza el perdón,
perdonamos a nuestros enemigos y el acceso directo a nuestro Padre.
“Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has
desamparado?” (Mateo 27:46) La otra oración de la cruz, Jesús fue
desamparado para que nosotros nunca seamos desamparados por el
Padre.
Y finalmente “y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo
padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día;” (Lucas 24:46). La
oración donde Jesús confía en que aun habiendo pasado de la muerte el
Padre le resucitará cumpliendo lo que está en el Salmo 16:10 “Porque no
dejarás mi alma en el Seol, Ni permitirás que tu santo vea corrupción”.
Nuestro padre celestial es el Padre Bueno que recibió al hijo pródigo, es el

Padre amoroso que fue a buscar a su hijo mayor afectado porque el
padre había recibido al hijo menor y le había dado una gran lección. Ese
es nuestro padre, del que Jesús nos enseña en las escrituras.
En esta semana que celebramos al padre no solamente veamos a Nuestro

Padre celestial sino que oremos para que nuestro padre terrenal pueda ser
también nuestro ejemplo, nuestra enseñanza y nuestra inspiración. Amén.
Aplicación:
¿Atiendes las enseñanzas de tu Padre Bueno? ¿Cómo?

_________________________________________________________________________
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¿Eres un ejemplo a seguir para tus hijos?

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¿Cómo aplicarías esta enseñanza en tu vida?

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Llama poderosamente la atención que para ilustrar el amor de Dios, la

Si tomáramos solamente el Sermón del Monte, veríamos las profundas

Entre las enseñanzas encontramos el concepto de paternidad, esto lo

Lo vemos también en las enseñanzas sobre la comunión con Dios, la

Luego nuestras necesidades, el Sermón del Monte habla de las

Aparte de paternidad, de la comunión y de la satisfacción de nuestras

Jesús nos dio el ejemplo de nuestra relación con el padre a través de la

El Señor llama a sus discípulos a llevar el yugo y aprender de él que es

“Padre, glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo: Lo he

“Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te

“Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo

Jesús nos enseña nuestra relación con el Padre en el propio acto de Su

Luego en la cruz, la primera oración fue “Padre, perdónalos, porque no

Nuestro padre celestial es el Padre Bueno que recibió al hijo pródigo, es el

En esta semana que celebramos al padre no solamente veamos a Nuestro

¿Atiendes las enseñanzas de tu Padre Bueno? ¿Cómo?

¿Eres un ejemplo a seguir para tus hijos?

¿Cómo aplicarías esta enseñanza en tu vida?

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