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Jeanne Cantégrit

CORTE Y
CONFECCION
técnicas / ardides / ejemplos
COLECCION
HAGALO UD. MISMO

Todas las técnicas son


estudiadas en detalle,
poniendo así al alcance de
los profanos la maestría de
los mejores artesanos.
Los modelos atractivos que
lo acompañan, los numerosos

y precisos dibujos, los ladillos,


las explicaciones guían al
neófito lo mismo que al maestro,
permitiendo a los tímidos
ejercitarse en la calma
y a todos actuar sin malgastar
materiales ni perder tiempo.
Este conocimiento básico
debe permitir a cada uno
llegar a ser un buen amateur,
luego un buen creador
y -¿por qué no?—
un excelente artesano.

Ediciones Mensajero
Apartado, 73 /BILBAO
rjBDCOWBS
CORTE Y
CONFECCION
JEANNE CANTÉGRIT

®
Mensajero
Colección dirigida
por Annie Morand

Secretariado de Redacción
a cargo de Evelyne Keller

Dibujos de Maurice Espérance


y de Jacques Taillefer

Fotografía de portada
de Jean-Luc Eriaud

Maquetación realizada
en el Estudio Pierre Chapelot

Traducción de la obra francesa


titulada COUPE ET COUTURE FACILES
por M. a del Carmen Ortega

Dudley Branch Library


65 Warren Street
Roxbury, MA 02119

© Culture, Art, Loisirs


© Ediciones Mensajero - Avda. de las Universidades, 13
BILBAO - España
ISBN: 84-271-1235-1
Depósito Legal: BI-55-1981
Printed in Spain
INDICE

El a b c del corte y de El montaje, pág. 45


la costura El pase de hilos flojos,
pág. 45
El material, pág. 12 Hilos flojos, pág. 46
Para el corte, pág. 12 Hilos de marca, pág. 46
Para coser, pág. 14 Reproducir un lado sobre el
Para la prueba, pág. 16 otro, pág. 47
Para la plancha, pág. 18 Los hilos de caída, pág. 48
Las medidas, pág. 21 El montaje con alfileres,
El patrón, pág. 25
pág. 50
El patrón estándar del Hilvanar, pág. 52
comercio, pág. 25 Las pruebas, pág. 54
Rectificar un patrón, pág. 26
La primera prueba, pág. 54
El patrón a medida, pág. 30
La caída, pág. 54
El patrón de base, pág. 30
Las proporciones, pág. 57
Rectificar un maniquí,
La pinza del pecho, pág. 57
pág. 36
Ancho de pecho y de
Rectificaciones definitivas,
caderas, pág. 58
pág. 36
El entallado, pág. 59
Rectificaciones amovibles,
La caída de hombros, pág. 60
pág. 37
El montaje de las mangas,
El corte, pág. 38
pág. 62
Busque el derecho y el revés,
pág. 39 La segunda prueba, pág. 63
En marcha, pág. 40 Las mangas, pág. 63
La colocación de un patrón La caída de la manga,
sobre una tela de 90 cm de pág. 63
ancho, pág. 41 La preparación del montaje,
Colocación de un patrón pág. 64
sobre una tela de 140 cm El montaje, pág. 64
de ancho (doble ancho), Comprobar los retoques,
pág. 42 pág. 65
El trazado del patrón, La comodidad o la facilidad
pág. 42 de movimientos, pág. 66

5
Coser, pág. 70 La preparación del tejido,
Coser a máquina, pág. 70 pág. 97
Las costuras, pág. 71 La falda montada, pág. 99
La cremallera, pág. 71 El cierre de la cintura,
La plancha, pág. 73 pág. 101
Coser a mano, pág. 75 Falda delantal (cruzada a
El dobladillo, pág. 76 la espalda), pág. 101
La cremallera, pág. 77 La falda montada
El cuello, pág. 77 escocesa, pág. 102
La última plancha, pág. 78 La falda larga, pág. 102
La falda a trozos,
Las faldas pág. 103
La falda fruncida, pág. 82
Una falda larga, pág. 106
Los frunces, pág. 84 La falda al bies, pág. 108

La cintura montada, pág. 86 Primer método, pág. 109


El montaje, pág. 87 Segundo método, pág. 109
La falda recta, pág. 88 La falda evasé al bies,
La falda con abertura, pág. 111
pág. 90
<r
La falda évasé? pág. 91 Los vestidos
La falda larga tubo, El vestido recto, pág. 114
pág. 91 El vestido de escote
La falda abotonada, barco, pág. 115
pág. 92 El escote barco, pág. 116
Cómo hacer propio patrón
el El terminado, pág. 117
de base, pág. 93 El vestido abotonado,
La falda plisada, pág. 96 pág. 117

6
Los bolsillos plastón, Las blusas
pág. 119
La blusa campesina,
El vestido largo, pág. 120
pág. 154
Una variante, la cintura
La blusa de mangas
de jareta, pág. 122
americanas, pág. 157
Para hacer un cinturón de
La blusa murciélago,
tela, pág. 123
pág. 160
El vestido de canesú,
pág. 124
El vestido de kimono, Las chaquetas
pág. 129
El vestido de kimono El chaleco sin mangas,
largo, pág. ¿131 pág. 166
La chaqueta acolchada,
Vestidos exóticos pág. 169
El poncho español, La sahariana, pág. 172
pág. 134 Un cuello fácil de hacer,
La capa maorí, pág. 136 pág. 174
Los frunces y la tira del
cuello, pág. 138
La chilaba, pág. 140
Las capas
El vestido afgano, La capa de poncho,
pág. 144 pág. 178
La túnica mejicana, La capa de pastor,
pág. 147 pág. 181
El poncho chileno, Telas fáciles de trabajar,
pág. 149 pág. 184
El patrón, pág. 150 Prontuario, pág. 185

7
PREFACIO

Para muchas mujeres, el deseo de confeccionarse un

vestido se queda en estado de proyecto y todos los


pretextos les parecen buenos para dejar para más
tarde la experiencia. Muchas de ellas conocen a ami-
gas que se visten ellas mismas y aunque es cierto
que admiran a las que tienen éxito, también lo es que
secretamente sienten miedo de pasar a su bando.
Cierto que resulta decepcionante el elegir un modelo,
comprar una tela, consagrar horas a un trabajo para
ver luegoque no valía la pena ni el tiempo ni el dinero
gastado en ello.
Cocinar, dibujar, nadar, escribir a máquina... requie-
ren un aprendizaje. Lo mismo sucede con ei corte o
el coser a máquina.
Esta obra ha sido concebida para todas aquellas que
dudan, para todas las que carecen de una base se-

8
ria, para todas las que necesitan que se las «lleve de
la mano». Gracias a ella, podrán ejercitarse con telas
ligeras y baratas, confeccionar faldas y vestidos sen-
cillos o realizar el vestido tipo túnica que es de gran
elegancia y que sólo presenta un mínimo de dificulta-
des de realización. Y cuando todas las «aprendices»
de costurera hayan realizado los modelos que les
proponemos podrán comenzar con sisas más compli-
cadas de cuellos que parecen la misma sencillez, pe-
ro que son tan complicados de hacer, con abrigos,
etc..
Entonces es cuando podrán tomar sin miedo en las
manos un par de tijeras y renovar su guardarropa sin
salirse del presupuesto.

Annie Morand
EL ABC DEL
CORTE Y DE
LA COSTURA

«Elegid un patrón, colocadlo sobre una tela, cortadlo,

hilvanadlo, probadlo, cogedle cosedlo y ya


las faltas,

está terminado su vestido». Esto es verdad y es falso


al mismo tiempo. Ciertamente que hay que realizar
todas esas operaciones pero teniendo en cuenta cier-

tos detallesque son los que determinan que un vesti-


do esté bien hecho o no. ¿Sabe Vd. tomarse las me-
didas bien tomadas, es decir, sin indulgencia? ¿Sabe
modificar el patrón si sus medidas no son estándar?
¿Y si determinase una vez por todas su patrón de ba-
se? ¿Conoce el arte de dar un buen corte de tijera y
la importancia de los hilos flojos? Todas las respues-

tas a estas preguntas figuran en este capítulo que


conviene conocer bien.
el material
Antes de comenzar un trabajo de costura es menester crear el
«universo» que nos permitirá llevar a buen término esta tentativa.
Los objetos necesarios para este trabajo resultan a veces embara-
zosos. Si tiene la suerte de poseer un rincón de «costura y repaso»
(el cuarto de coser de nuestras abuelas) es Vd. una privilegiada.

Pero no será probablemente el caso si vive en un inmueble moder-


no; así es que tendrá que aguzar el ingenio y realizar los arreglos
necesarios.
Para trabajar en buenas condiciones, además de los instrumentos
necesarios, tendrá que disponer de sitio suficiente, de buena luz y
algunas horas de calma indispensables para conseguir buenos re-
sultados.

Para el corte
Lo mismo que para la cocina, el disponer de un buen material es
la garantía de un mejor resultado. El ideal sería que su mesa de

cortar correspondiera a las dimensiones de la tela a emplear lo que


le permitiría una visión completa de la posición del patrón y le
facilitaría el corte. Pero le puede servir la mesa del comedor. Hay
también quienes se deciden a trabajar en el suelo.

12
Las tijeras
Elija las que se adaptan mejor a sus manos. Deben ser de buena
calidad, siempre bien afiladas y exclusivamente reservadas para la
costura.

Se necesitan diversos tamaños de tijeras para los diferentes cometi-


dos: para cortar lanas gruesas pida las de 19 cm; para cortar teji-
dos finos, las de 14 cm; para endentar y cortar ojales, las de 11
cm. Las tijeras pequeñas bien puntiagudas pero poco cortantes le
servirán para deshilvanar o descoser las costuras sin peligro de
cortar la tela. Reserve las tijeras ordinarias para cortar el papel de
los patrones.

El centímetro de costurera
Es una cinta plastificada y graduada de 1 m 50 cm de longitud.
Frecuentemente se vende en una caja redonda donde debe ponerse
siempre después del uso. Así conservará su precisión y su suavi-
dad.

La tiza o jaboncillo de sastre


Tiza especial para marcar el contorno de los patrones y las unio-
nes sobre la tela.
No emplee nunca tizas de color porque su marca es con frecuen-
cia indeleble.Por el contrario las marcas de la tiza blanca se qui-
tan con el cepillo o con un poco de algodón ligeramente empapa-
do en bencina.

El imán
Es útil para recuperar rápidamente los alfileres que se han disper-
sado mientras ha durado el trabajo.

Nota: Además de estos accesorios de costurera, necesitará una


gran regla, un doble decímetro y una escuadra para hallar fácil-
mente el bies entero.

13
coser
Hay todavía mujeres que prefieren coser tranquilamente a mano
escuchando música o charlando al atardecer. Cierto que ello les
lleva mucho tiempo pero se sienten compensadas con poder coser
igual que hacen punto o ganchillo, dejando reposar la labor en sus
rodillas para hacer pequeñas pausas y poder trabajar así en compa-
ñía de su familia o de sus amigas. Cosen igual que lo hacían nues-
tras abuelas pero no ignoran que una máquina de coser es una
preciosa ayuda que economiza muchas horas.

La máquina de coser
Existen numerosas marcas a su disposición. Infórmese sobre sus
posibilidades, su robustez, su costo y sus accesorios. Todas las
máquinas actuales existen en formato portátil, fácil de manejar, de
transportar y de guardar. Sepa que deben ser colocadas sobre una
mesa sólida que pueda soportar la trepidación del motor.
Una recomendación: no olvide que al igual que su coche, su má-
quina de coser debe ser limpiada, engrasada con regularidad.

El costurero
Provéase de un costurero básico. No amontone furnituras que se-
guramente no usará jamás. Limítese a un fondo que le sea útil
para todos los trabajos corrientes:
— cierres o automáticos y corchetes en blanco y en negro en tres
tamaños diferentes;
— carretes de hilo o tubos de distintos colores, blanco, beige, gris
oscuro, marrón, azul marino y negro (en grandes carretes resultan
más molestos pero más baratos);
— bobinas de hilvanar de colores para hilvanar
diferentes las cos-
turas
y los bajos:
— una bobina de de color vivo para coger
hilo en faltas las prue-
bas;
— de acero (exclusivamente) de dos tamaños
alfileres distintos: ex-
trafinos para las telas finas y tupidas y finos para las demás telas;
— una gama completa de agujas de coser de muy buena calidad.
Complete su equipo de agujas con algunas de zurcir, algunas
agujas de pasamanería de punta redonda, un pasacintas y un pun-
zón para preparar ojeteros.

£1 dedal
Elija uno lo suficientemente ancho para que no le moleste y sufi-
cientemente ajustado para que no se le caiga; se coloca en el dedo
corazón y sirve para empujar a la aguja.

La rueda
Provista de puntas aceradas y montada sobre un mango de made-
ra, la rueda permite reproducir las costuras y las marcas sobre la
tela. ¡Cuidado! Las marcas hechas por las puntas de acero no se
borran en los tejidos frágiles.

Papel o tela de calcar


Larga cinta de papel o tela impregnada de tiza que se introduce en
la tela a cortar doblada, en el sitio de las costuras; al 'pasar la
rueda sobre la costura de arriba permite su impresión en la tela de

abajo. Esto evita en ciertos casos el trabajo de pasar los hilos.


Supone un ahorro de tiempo pero como el procedimiento carece
de precisión, se emplea sobre todo para los dobladillos.

Hay que notar


Cuando comienza una prenda procúrese las fornituras que corres-
ponden a su color, a su textura y a su destino: forro, cremallera
(en el tamaño exacto), botones, torzal... No compre más que las
cantidades necesarias porque es raro volver a utilizar las mismas
fornituras.

15
Para la prueba
Es preferible tener un maniquí para realizar un trabajo serio: per-
mite verificar la corrección de las costuras, la caída de las mangas,
montar el abrigo o la chaqueta más fácilmente y, una vez que
haya adquirido experiencia, realizar su propio patrón.

£1 maniquí
Hay dos tipos de maniquíes: los maniquíes clásicos en cartón re-
cubierto de tela (puede encargarse un maniquí a medida a un espe-
y los maniquíes regulables por rejillas o corchetes. Es más
cialista)

sencilloy sobre todo más barato optar por un maniquí clásico que
corresponda a su contorno de pecho y realizar Vd. mismo sus co-
rrecciones para adaptarlo a su constitución (véase p. 36).

Nota: Existen maniquíes cuyos diferentes elementos se pueden


ensamblar; esto hace que puedan guardarse en un espacio muy
pequeño.

El redondeador
Aparato que consta de una regla graduada montada sobre un pie y
que posee una clavija marcadora que le permitirá cogerse el bajo o
redondo sin ayuda de nadie.

El espejo de pruebas
Si Vd. no tiene a nadie que le ayude para las pruebas, el ideal sería
que tuviera un gran espejo mural de tres paneles. Por desgracia la
compra de un espejo de estas características resulta cara. Se puede
contentar con un espejo de una sola cara a condición de colocarlo
lo más cerca posible del suelo: así controlará mejor los bajos.

Un buen truco: coloque en el suelo mismo un espejo portátil de


tamaño mediano como los que suelen tener en las zapaterías y
quedará admirado de los servicios que le presta.

16
El maniquí £¿ redondeador El maniquí regulable
recubierto de tela

PARA PRINCIPANTES Y PARA EXPERTOS


Existen casas de modas y gran- probar (en este caso el precio de
des almacenes que merecen una venta es algo superior). Está tam-
visita de todas aquellas que de- bién previsto el caso de las perso-
sean confeccionar ellas mismas nas que no se pueden desplazar Se :

un guardarropa. En estos esta- efectúa un modelo medida de


a su
blecimientos existen patrones de una vez por todas (siempre que no
sus modelos preferidos en diver- varíen las medidas, por supuesto)
sas medidas (véase pág.30). Los y se establecen según este modelo
patrones se expenden en papel de los patrones de los vestidos que
seda o en tela e incluso se pueden ellas escogen.
Para la plancha
Antes de cortar, de probar y de coser un vestido es muy impor-
tante asegurarse de que el tejido no va a encoger. Puede que haya
que quitar el apresto o suprimir los falsos pliegues y los frunces
de medida. Por lo demás debe cuidar lo mismo la plancha inter-
media que la plancha final.

La tabla de la plancha
Las tablas especiales comercializadas para este uso son con fre-
cuencia demasiado estrechas para permitir la plancha a lo extenso,
operación necesaria cuando se va a realizar un vestido. No dude
en hacer uso de mesa de cocina. De todas formas si quiere
la

dedicarse de manera continuada a la costura procúrese un panel de

chapa de madera contrachapeada que un tratamiento especial impi-


de que se deforme; tiene de 80 a 90 cm de longitud y de 60 a 70
cm de anchura y de 15 a 20 mm de grosor. Esta tabla puede
colocarse encima de cualquier mesa, sobre unos «burros» o fijarse
en una pared.
Nota: No utilice jamás una mesa de valor. El vapor de agua le
causaría daños irreparables.

El paño de la plancha
Un buen paño de plancha, que es absolutamente indispensable,
debe tener tres dobleces de algodón bien mullido. Estará cortado
en las dimensiones de la mesa y recubierto de un lienzo sin apres-
to porque éste se transmitiría a la tela planchada por la acción del
calor.
Gracias a su consistencia mullida este paño amortiguará el aplasta-
miento producido por la plancha, evitará el brillo y conservará el
tejido su grano y su relieve. Protegerá igualmente la madera de la
mesa de los accidentes que pueden sobrevenir de una plancha de-
masiado caliente.

18
El «trapo mojado»
Es un lienzo fino y sin apresto que se utiliza mojado para plan-
char los tejidos de lana.
Este lienzo d< oe tener las dimensiones del paño de la plancha.
Sirve para desaprestar, para quitar el brillo y para abrir las costu-

ras.

El manguero
Esta tablita debe estar acolchonada como el paño de planchar; sir-

ve para planchar las mangas, las costuras del pantalón, los vestidos
de niños... La punta pequeña sirve para planchar puños y frunces;
lapunta redondeada mayor es indispensable para obtener un plan-
chado perfecto de la montura de la manga.

La plancha
Son útiles dos tipos de planchas:
— la plancha eléctrica con termostato para el planchado normal;
— la antigua plancha que se calienta sobre llama viva. Esta ad-
quiere un calor superior al de la plancha eléctrica y su calor se

mantiene por más tiempo, lo que permite el desapresto, el deslus-


tre y el planchado de modista.
Si desea ejecutar un buen trabajo y adoptar este tipo de plancha,
es preferible que tenga dos para usar una mientras se calienta la
otra. Son indispensables un mango aislante del calor para agarrar
laplancha y una parrilla portaplanchas para evitar quemar el paño
de planchar o la mesa.

19
CONSTRUYASE VD. MISMA UNA MESA DE PROFESIO-
NAL
Si no una mesa grande provéase de una tabla igual a la que le
tiene
sirva demesa de planchar. Puede colocarlas una como prolonga-
ción de la otra y obtener así una buena superficie para cortar.
Unalas entre sí por debajo con un dispositivo amovible (por ejem-
plo con unas bisagras). Según la disposición elegida podrá dispo-
ner de las siguientes superficies:

0,90 m+ 0,90 m= 1,80 por 0,70 m de ancho


m
0,70 + 0,70 m= 1,40 m
por 0,90 m de ancho
Una vez separadas, estas dos tablas se guardan fácilmente en el
fondo de un armario a lo largo de una pared. Para su uso, coló-
quelas sobre burros o entre dos muebles de la misma altura.

20
las medidas
Es importante tomar bien medidas. Las medidas exactas son un
las

factor de éxito, representan una economía de tiempo (porque los


retoques serán menos) y también de tela (pues de lo contrario el
modelo puede ser inutilizable). No se haga trampas. El centímetro
debe poderse mover libremente al rededor del cuerpo sin apretar-
lo.

Apunte esas medidas en el cuaderno de costura; compruébelas de


tiempo en tiempo; ello le permitirá descubrir el comienzo de unas
redondeces o por el contrario el resultado de un régimen.
Es prácticamente imposible el tomarse una misma las medidas; pí-
dale a una amiga que se las tome. Póngase un buen sujetador, es
muy importante; compruebe la altura de las hombreras para tener
una buena silueta; si lleva faja, póngase la que va a llevar con su
vestido.

Cómo tomar las medidas


Hay que tomarlas sin holguras o sobre la piel o sobre una combi-
nación o sobre un vestido ajustado.
Póngase un hiladillo alrededor del talle para que le sirva de
marca al tomar ciertas medidas.

Contorno de pecho: el centímetro pasa por debajo de los brazos


y por la punta de los senos sin apretar.

Contorno de cintura: Apoye bien el hiladillo en los ríñones y en


torno a la cintura; la longitud del hiladillo será su contorno de
cintura.

Contorno de caderas: Se toma en dos alturas diferentes y ambas


tienen igual importancia. La cadera alta se mide a 10 cm del hila-
dillo de cintura pasando sobre el hueso saliente de la cadera. La

21
cadera baja se mide a 20 cm del hiladillo de cintura, y el centíme-
tro pasa sobre las caderas y sobre las partes más carnosas de los
glúteos. El centímetro debe pasar sobre el vientre sin apretarlo.

Anchura de espaldas: Se toma sobre los omoplatos, de un brazo


al otro; arquee ligeramente la espalda para evitar una medida justa.

Anchura delantera: Se toma de un brazo al otro a unos 10 cm de


la base del cuello.

Nota: Todas estas medidas son transversales, hechas de modo que


sean paralelas entre sí y rigurosamente horizontales.
Largo delantero: esta medida se descompone en cuatro partes:
del hombro a la punta del seno; de punta del seno al hiladillo o
la

galón del talle, del hiladillo a las rodillas y de las rodillas al suelo.
Ponga su centímetro a la base del cuello, sobre el hombro. Extién-
dalo hasta centro del seno y apunte la medida en su cuaderno
el

de medidas. Mantenga el centímetro sin soltar con la medida des-


de el hombro y manteniéndose recta páselo por el pecho hasta el

hiladillo de la cintura. Anote el largo del talle delantero.


Anote luego el largo de la falda desde el hiladillo del talle hasta las

rodillas. Así obtendrá una medida que le servirá de base para se-
guir los imperativos de la moda modificándola hacia arriba o hacia
abajo.
Prolongando esta medida hasta el suelo, tendrá las medidas para
un vestido de noche, de una falda larga, de un deshabillé o de un
pantalón.

Separación de pechos: Esta medida, importante para el equilibrio


de las pinzas del pecho se toma del centro de un pecho al del

otro.

Largo de hombro: esta medida que se toma de la base del cuello


hasta la juntura del brazo será la base para montar la manga. Esta
varía también con la moda e irá a más o menos altura sobre el
hombro.
Largo de espalda hasta el talle: Se toma desde la vértebra situada
de cintura. Man-
a la base del cuello en la espalda hasta el hiladillo
téngase natural, si tiene la espalda un poco redonda, deje correr el
centímetro a lo largo del cuerpo no sea que le falte de largo una
vez que haya terminado el vestido.

Largo total de la espalda: Parta del mismo punto, pase sobre el

hiladillo de la cintura, llegue hasta el hueco posterior de la rodilla y


llegue luego hasta la tierra.

22
23
Largo de manga: Doble el brazo y mida desde el comienzo del
brazo hasta el codo y luego desde el codo hasta el puño (si no
dobla el brazo, la manga le saldrá corta).
Contorno de brazo: mida el contorno del bíceps.
Puños: mida su contorno.
Cuello: Mida el contorno del cuello poniendo el centímetro lo
más cerca posible de la base del cuello.
Largo de entrepiernas: Esta medida se toma por dentro de la
pierna desde el cóccix hasta el suelo.
Tiro: Es la medida tomada desde el hiladillo de cintura en el pun-

to central delantero al mismo hiladillo en el punto central de la


espalda pasando por la entrepierna.

COMODIDAD
Si compara medidas que acaba de tomar con las que figuran en
las

un patrón de base que le va bien, notará algunas pequeñas diferen-


cias.

Estas diferencias representan eso que se llama comodidad, es de-


cir,ese juego que permite libertad de movimientos. Esa «comodi-
dad» u holgura debe ser de 4 cm en el pecho; de 2 cm para el
contorno de cintura y de 6 cm para el bajo de cadera.
el patrón
Sea en papel o en tela, un buen patrón, bien adaptado a sus medi-
das, resulta indispensable para llevar a buen término la confección
de un ajuar. Es menester establecer el patrón base con mucho cui-
dado. Anote la fecha en un extremo y si no cambia de silueta le
podrá servir de nuevo. Para ponerlo a punto se podrá servir de:
— un patrón estándar de un comercio;
— un patrón ejecutado a medida en una casa especializada:
— un patrón sacado de un vestido que le vaya bien.

El patrón estándar del


comercio
Fácilmente hallará en los comercios patrones en sobres. Cada so-
bre contiene una o varias hojas de papel de seda en las que hay
indicados un gran número de trazos. Estos trazos corresponden a
varias tallas indicadas unas a continuación de otras que hacen muy
de los contornos muchas veces superpuestos.
difícil la lectura

Si Vd. decide comenzar por este método tiene que buscar en la


hoja los trazos que correspondan a su talla. Subraye ese trazado
con un lápiz de color para que el contorno de su patrón destaque
sobre los demás. Recorte con cuidado la línea de color para obte-
ner así un patrón separado.
Estos patrones son de una utilización bastante complicada. En
efecto, si Vd. no tiene exactamente las medidas de la talla prevista
se verá obligada a modificar el contorno elegido a fin de acomo-
darlo a sus medidas exactas. Por eso le aconsejamos que siga uno
de los dos métodos siguientes.

25
Rectificar un patrón
Acaba Vd. de comprar un patrón de sobre de su talla; pero antes
de pasar a la ejecución del modelo que le seduce conviene compa-
rar las medidas de ese patrón con las que figuran en el cuaderno
de medidas que Vd. tiene. Puede que el patrón comprado le ajuste
exactamente pero también puede suceder que no coincida en todos
los puntos con su conformación. Se pueden presentar varios casos;

Las caderas son demasiado estrechas


Coja con alfileres un papel a todo lo largo de las costuras del
costado de falda (delante y detrás) desde la cintura hasta el bajo
la

del vestido o falda; a la altura de la cadera baja añada con tiza la


cuarta parte de los centímetros-que le faltan (porque la mitad tra-

sera y la mitad delantera de su patrón representan la cuarta parte


de su vestido). Haga lo mismo a la altura de la cadera alta. Los
dos puntos de referencia A y B le permitirán establecer un contor-
no adaptado a sus verdaderas medidas. Júntelos y luego prolongue
la línea hasta la cintura en el punto C. Luego trace la línea A A
conservando hasta el dobladillo la misma distancia que en la cade-
ra baja (croquis 1).

El cuerpo es demasiado largo


Es menester volver la cintura a su sitio. Encierre en un pliegue
horizontal los centímetros que tiene de más a unos 10 cm de la

raya de la cintura; mantenga este pliegue cosiéndolo con alfileres o


con una cinta adhesiva (croquis 2).

El cuerpo es demasiado corto


Trace una línea a 10 cm de la línea de cintura. Corte el papel por
esa línea, separe los dos bordes añadiéndole una tira de papel que
corresponderá a los centímetros que le faltan (croquis 3).

La cintura es demasiado estrecha pero


el pecho le está bien
Adhiera un papel al borde de las costuras del costado. A la altura
del contorno de cintura añada con una tiza la cuarta parte de los
centímetros que le faltan. Luego corrija, valiéndose de esta señal el
contorno exterior del patrón haciendo morir la línea debajo del
brazo y hacia la cadera baja (croquis 4).

26
27
La delantera es estrecha pero la distancia
de pecho es correcta
Prolongue la costura debajo del brazo solamente por delante; es
decir, añada bajo la sisa la mitad de los centímetros que le faltan
sin alargar la espalda. Vuelva a trazar la línea haciéndola morir en
el talle. (Croquis 5).

La delantera demasiado estrecha y


es la
distancia de pecho es demasiado justa
Trace una línea vertical de arriba abajo de su patrón evitando la
pinza del pecho y paralelo al corte recto. Corte por esta línea y
separe los bordes a la mitad de los centímetros que le faltan; fije
un papel a todo lo largo con alfileres, ponga luego una cinta adhe-
siva y quite los alfileres.
¡Atención! Ha ensanchado todo el vestido y, por tanto, conviene
estrechar otro tanto en la cintura, en las caderas y en las sisas a
nivel de la anchura (croquis 6).

La espalda es demasiado estrecha


pero la delantera está bien
Proceda del mismo modo que en el párrafo precedente (croquis 6).

La pinza del pecho no es suficientemente


profunda
La pinza del pecho no profunda
es suficientemente
Esta rectificación es porque modifica la costura de la boca-
difícil,

manga; no se meta con esta rectificación cuando se trata de poca


cosa. Ensanche el triángulo formado por la pinza abierta trazando
una línea que partirá de la base de este triángulo (bajo la pinza)
hacia el vértice dejando morir en él la línea. El trozo tomado para
aumentar la pinza deberá añadirse en la cintura por el lado delan-
tero: trace una línea que irá muriendo hacia el final del medio
delantero (croquis 7).

Consejo: No haga estas rectificaciones más que cuando se trate de


pequeñas diferencias. Si tuviera que modificar su patrón en más de
6 cm en su totalidad (es decir, 1 cm y 1/2 por cada costura), sería
mejor abandonar el intento y comprarse otro patrón.
PATRONES EN TARLATANA
No hace mucho que apareció en mite a la usuaria fijar con alfile-

los comercios y seduce a mu- res un patrón, hilvanarlo y pro-


chas mujeres. En efecto este ma- barlo una vez conjuntado lo que
terial, blando pero fuerte, per- supone una gran ventaja.

29
El patrón a medida
En los almacenes especializados hallará siempre alguna persona
competente que se encargará de hacerle su patrón base.
Se lo pueden realizar en papel fuerte o en tela pero nosotros le
aconsejamos que se lo hagan en papel fuerte que no se deformará
con el uso. El procedimiento, más costoso que el de los patrones
en bolsas reduce los riesgos de error para una debutante.

El patrón de base obtenido a partir de un


vestido propio
Es la mejor fórmula: más eficaz que la primera y más económica
que la segunda.
Vd. tiene seguramente un vestido viejo pero que le está bien y le
puede servir de modelo; este modelo puede realizarse en cualquier
material exceptuando el género de punto (como este tejido es de-
formable correría el peligro de hacer un patrón que no respondie-
ra exactamente a sus medidas).
Este vestido debe tener la abertura del cuello a ras del cuello, una
costura a cada costado, pinzas de pecho y a ser posible, no debe
estar cortado en la cintura. Es menester que lo tenga a gusto; un
vestido que no le moleste en ningún sitio: ni en las sisas, ni en el
cuello ni en la anchura de espaldas. Poniéndolo completamente
abierto descosiéndolo obtendría Vd. un patrón de base bien có-
modo (véase p. 24).

30
Croquis 1 Croquis 2

Precauciones para antes de descoser


— Quítele forro
el si es que lo tiene (póngalo aparte).
— Pase luego con la aguja unas señales de unión para estar segura
de conservar la coincidencia de las costuras. En el momento del
montaje caerá en la cuenta de su importancia. La señal resulta
necesaria y tiene que ser visible hasta terminar su trabajo.
Las señales principales se colocan en las caderas, en la cintura,
frente a la pinza del pecho, en los hombros, en la anchura (de
pecho y espalda), en las mangas (frente a la anchura) y frente a la
costura de hombro (croquis 1 y 2).
He aquí cómo se procede: tomemos, por ejemplo, la señal de las
caderas a 20 cm de la cintura; frente a la costura del costado, en la
parte delantera meta una puntada horizontal de unos 2 cm par-
tiendo del interior del vestido y terminando en el borde de la
costura; no muerda en la pieza de la espalda; si su señal estuviera
a caballo sobre la costura se perdería porque habría que cortar el
hilo en el momento de descoser los dos trozos de tela; vuelva de
nuevo al punto de partida saque el hilo y córtelo; haga lo mismo
frente a la primera señal en la parte de la espalda. Los hilos de
señal tienen que estar flojos y dispuestos perpendicularmente a la
costura.

31
Los ajustes van indicados, pase los hilos de la
mitad de espalda y delantera, y un hilo sobre
cada pliegue.

32
Extender el vestido
Descosa luego completamente el vestido: costuras, mangas, dobla-
dillos... La traza de la costura que acaba de soltar será perfecta-
mente visible en las telas ligeras: con ayuda de un hilo de diferente
color marque cuidadosamente esa traza en los diferentes trozos de
tela.

Nota: el trabajo se realiza únicamente en el lado


izquierdo puesto que un patrón sólo contiene ía
mitad del vestido.

Las costuras están marcadas, las señales están pisadas. Le falta aún
la indicación del largo de espalda y de la delantera; doble la delan-
tera y la espalda. El lado izquierdo sobre el lado derecho y únalos
con varios alfileres. Pase un hilo sobre cada pliegue (croquis 3).
Aproveche ocasión de tener el vestido abierto y descosido para
la

apuntar las medidas (por mitad) en su cuaderno (véase p. 21).


No olvide que se trata de medidas que incluyen los dobladillos.

Realización del patrón de base


— Aplique a cada parte del vestido una hoja de papel de seda que
compraré en una papelería.
Sujete con alfileres la hoja de papel a lo largo del corte recto. Con
una tiza grasa reproduzca las costuras sobre el papel siguiendo los
hilos de color que se le transparentarán. No se olvide de indicar

33
las señales. Tampoco se olvide de verificar el dobladillo que debe
tener 6 cm.
Suelte ahora el papel de seda del vestido. Con su tiza y una regla

haga unos trazos claros: Su patrón está realizado.


Para que sea sólido y le sirva para varios años reprodúzcalo en
papel fuerte valiéndose del rodillo o rueda. Para ello sujete con
alfileres el papel de seda sobre el otro papel fuerte. Ayudándose

de la regla pase la rueda sobre todos los trazos señalados en el

papel de seda (croquis 4).

— Recorte el patrón en el panel fuerte siguiendo el trazado de las

costuras. Añada 6 cm para el dobladillo.

— Para la utilización práctica de este patrón es menester que le

añada algunos perfeccionamientos que le permitirán transportarlo


cómodamente a la tela en el momento de cortarla. En efecto debe-
rá indicar con la tiza de modista ciertas marcas a través del papel
patrón; especialmente el dobladillo, las pinzas y las señales hori-
zontales antes indicadas. Para ello practique unas aberturas en for-
ma de rombo para las pinzas y el dobladillo y en forma de trián-
gulo para las señales (croquis 5, una pinza en aumento; 6 abertu-
ras para las señales; 7 conjunto de señales del patrón).

Nota: No olvide indicar en el papel fuerte cuál es la mitad delan-


tera y la de espalda.

Nuestro consejo: recortar


Ha sacrificado un vestido viejo; no debe arrepentirse porque ade-
más de haberle permitido realizar su patrón base puede aún hacer-
le un gran servicio si Vd. lo vuelve a reconstruir.

En efecto ése puede ser su primer ejercicio práctico, fácil porque


no tiene riesgos.
Le será fácil hacerlo; la tela se colocará casi por sí misma en la

disposición requerida.
Vd. aprenderá a recoser y consecuentemente a coser. Tendrá oca-
sión de ver forma que toma la tela una vez cosida y repasada,
la

los sitios en que hay que aflojarla y, por el contrario, los otros en
que es menester hacer entrar a la tela. No olvide de coser el do-
bladillo si es que lo tenía su vestido.

34
35
rectificar
un maniquí
Un maniquí ajustado ai propio cuerpo permite la puesta a punto,
las pruebas, la verificación de la caída de la delantera
y de la espal-
da, el montaje de las mangas y otros muchos detalles que Vd.
misma irá descubriendo conforme se va avezando en el oficio. Por
desgracia resulta muy difícil hallar en los comercios un maniquí
que sea fiel reproducción de la propia silueta.
Lo mejor es escoger un maniquí un poco más pequeño y realizar
las correcciones oportunas.
Estudíese a sí misma sin indulgencia. Los tipos maniquíes son
muy raros. Observe las diferencias entre su conformación y la
ideal de su maniquí. Luego podrá transformarlo añadiéndole aquí
y allí los centímetros necesarios para que reproduzca su imagen.
Este trabajo de preparación requiere tiempo pero vale realmente la

pena. Se pueden realizar rectificaciones definitivas o amovibles y,


en este último caso el maniquí podrá servir también para otras
personas.

Rectificaciones definitivas
Mida maniquí y compare sus medidas (sin holguras) con las de
el

aquél. Seguramente que advertirá diferencias.


El contorno de pecho deberá ser, en principio, el mismo puesto,
que esto es lo que ha determinado que Vd. eligiera este maniquí.
El contorno de cintura es demasiado estrecho: he aquí un truco;
tome algodón hidrófilo, desdóblelo finamente y envuélvalo en el

36
talle en varias vueltas hasta conseguir el contorno deseado. Sujete
este algodón con una cinta de 10 cm de anchura.
El contorno de caderas es demasiado pequeño: tiene que recons-
truir la curva de sus caderas. Para ello tómese las medidas del
contorno de cadera alta y de cadera baja, luego proceda como
para la cintura pero aplicando luego una cinta de 15 cm de anchu-
ra.

Su maniquí demasiado plana: coloque y sujete


tiene la espalda
con alfileres unos algodón pequeños y superpuestos en la
flecos de
espalda del maniquí; recubra luego el algodón con una tela fina de
la anchura de su espalda y forrada sobre la tela del maniquí.

¡Ojo! Hay que aplastar bien el algodón para que no haya irregula-
ridades y para que los dos lados, si no son iguales, reproduzcan
bien la conformación de Vd.
Vd. tiene un hombro algo más alto que el otro: meta trozos de
algodón como «hombreras» y fíjelos con la ayuda de una tela fo-
rrada como para la espalda.

Importante: Controle la altura de pecho. Si es menester hacer al-

guna rectificación, coja un buen sujetador (conservando cuidado-


samente la correcta longitud de tirantes). Rellénelo de modo que
reproduzca sus pechos y fíjelo sobre el maniquí.

Rectificaciones amovibles
Para permitir que varias personas utilicen el mismo maniquí, se
pueden unos acolchados individuales. Proceda para ello de
fabricar
la siguiente manera:
— sacrifique un vestido usado de escote cerrado, sin mangas, con
cremallera en la espalda (quite la holgura de la bocamanga).
— Aplique en el interior de este vestido algodón hidrófilo, como
se ha indicado más arriba, en un espesor regular (como de medio
cm.).
— sujete el algodón por medio de grandes puntadas, próximas
unas de otras;
— ponga su acolchado sobre el maniquí y tire de la cremallera.
Vd. puede quitar y poner este acolchado a voluntad.

37
el corte
Coloque la mesa de cortar en un sitio donde pueda estar tranquila
durante unas horas. Es indispensable tener buena luz. La luz del
día es la mejor: si no la puede tener, utilice una lámpara de tra-
bajo orientable o, mejor, una luz central a unos 0,80 m sobre la

mesa.
Examine la tela. Puede tener defectos. En general están señalados
por el fabricante con un hilo rojo. Pero puede ser que ciertas irre-
gularidades no estén señaladas y, por lo tanto, hay que examinar-
la.

Si éste es el caso meta dos alfileres cruzados en el punto de la

falta. Esta precaución le permitirá evitarla en el momento de dis-


poner las piezas del patrón sobre la tela a cortar.

NO JUEGUE CON LOS CUADROS


¡Atención! Antes de cortar una tela de cuadros, piense que éstos
tienen que estar unos en la prolongación de los otros a fin de for-
mar, a lo largo, una línea continua. La dificultad se presenta en las
costuras del costado, en el centro de la espalda o de la delantera, en
las mangas con respectoal cuerpo del vestido, en, la cintura (o en

las caderas) de un conjunto y en los bolsillos.


si se trata
Para casar bien los cuadros tiene que añadir, en principio, el valor
de dos cuadros enteros a su medida, un cuadro para los costados y
otro para las mangas.
Para casar las rayas hay que seguir también las mismas reglas. Pero
algunas rayas y algunas telas escocesas no se reproducen exacta-
mente igual en todo el conjunto: a veces presentan «un alto un
bajo», una «derecha y una izquierda»: esto complica mucho el cor-
te y es preferible abstenerse de elegir este tipo de telas cuando una
no es una experta!

38
Busque el derecho y el revés

En las telas de 90 cm de ancho, como la pieza esté arrollada en


toda su anchura, el derecho se halla generalmente hacia fuera. Pe-
ro ya en casa no tendrá esta indicación para guiarse. Debe saber
que el más regular y el dibujo es más limpio. En el
derecho es
revés hallará los nudos de unión de los hilos. Si compra una tela
sarga (es decir cuyo tejido forma líneas diagonales), el lado obli-
cuo respecto al orillo, debe montar de izquierda a derecha y lo
contrario en el revés.

Algunos tejidos no tienen derecho ni revés (por ejemplo, las telas


fibranas); otras tienen un derecho y un revés diferentes pero pueden
emplearse por el derecho o por el revés como se quiera.

En una tela cm
de ancho, el derecho se halla siempre en el
de 140
interior de la pieza puesto que suele ir plegado para mayor facili-
dad en su manejo. El pliegue central crea problemas porque no es
fácil de eliminar y por otra parte no debe aparecer en ningún caso

en el vestido (véase p. 43 croquis 5).

39
En marcha
Ponga al alcance de la mano la caja de alfileres, el centímetro, la
tiza de modista (bien afilada), la gran regla plana, las tijeras de

cortar (bien afiladas).Coloque la tela sobre la mesa de cortar.


Debe estar doblada derecho con derecho porque el patrón debe
fin de evitar las marcas de
ser dibujado sobre el revés de la tela a
tiza que pudieran quedar.
sí. En efec-
Controle ahora la caída de las dos partes de tela entre
to puede suceder que la tela no esté cortada recta.
olvide que su única guía es el orillo de la tela.
Por lo mismo
No
caer libremente, déle unas palmaditas, muévala lige-
deje a la tela
otro o sobre
ramente manteniendo siempre los orillos uno sobre el
la doblez central (véase más
adelante). La parte que se encuentra

arriba no debe estirarse más que la


de abajo o viceversa: si los
le importe. Ponga alfileres
hilos de trama no se superponen no
para sujetar entre sí las dos telas, cada 30 cm
más o menos, al
tresbolillo; coja bien ambas telas para que no se puedan desplazar
la una respecto a la otra. Coja
así con alfileres la totalidad de la

tela. Con la regla plana tire una línea perpendicular al orillo va-

tiza (croquis El trazo representa la trama tal


liéndose de la 1).
base para
como debiera ser si el tejido fuera perfecto: le servirá de
líneas horizontales (esta explicación sólo es aplicable para
todas las

telas que no tienen, ni sentido ni


uniones, ni motivos que haya que

centrar).
emplazamiento de las diferentes partes del patrón.
Busque ahora el

Croquis 2

Croquis 1
ORILLO

40
La tela tiene un sentido
(croquis 2, p. )
1. Cuello
u 2. Mangas
3. Dos
4. Delantera
5. Puños
6. Cintura
7. Orillos

La tela no tiene sentido


(croquis 3)
1. Mangas
2. Espalda
3. Delantera
4. Puños
5. Cintura
6. Cuello
7. Sobra de tela
8. Orillos

La colocación de un patrón
sobre una tela de 90 cm de ancho
Doble la tela en dos, derecho con derecho, de modo que se super-
pongan los orillos.
Proceda luego como se indica en el croquis 2 y marque luego el
sitio del dobladillo; si éste está ya comprendido, ponga su patrón

en el borde de este trazo de base y si no, deje un espacio de 6 cm.


Coloque la mitad delantera a lo largo del pliegue de la tela. Sujéte-
la con alfileres al tresbolillo comenzando por la mitad delantera y

evitando coincidir con los alfileres colocados antes.


Coloque luego la espalda del mismo modo que la delantera dejan-
do el espacio necesario para la costura del hombro (3 cm).
Luego deje sitio para el dobladillo de la espalda (6 cm). Sujétela
con alfileres. Coloque a continuación el patrón de la manga dejan-
do sitio para su costura (2 cm) (croquis 2).
Si la tela no tiene sentido (rayas) podrá disponer los diferentes

trozos como en el croquis 3. En este caso, el vestido llevará una


costura en el centro de la espalda.

41
Colocación de un patrón
sobre una tela de 140 cm de ancho (Doble ancho)
Si su modelo no lleva costura en la mitad delantera tiene que evi-
tar la raya del doblez, que trae del comercio.
Antes de colocar las piezas de su patrón sobre el corte de tela,
ábrala y junte con alfileres los orillos, borde con borde sobre el
pliegue central (croquis 4). Luego reparta a derecha e izquierda de
esta línea longitudinal los diferentes elementos de su patrón dejan-
do, como se ha indicado en el párrafo anterior, los trozos necesa-
rios para las costuras y los dobladillos: coloque la delantera del
patrón contra uno de los dos pliegues y la espalda contra el otro.
Si tiene manga, verá que no encuentra sitio para ella en esta dispo-
sición; para hallar su emplazamiento tendrá que poner de nuevo la
tela en sus pliegues primitivos lo que hará después de haber corta-
do las dos piezas principales del vestido (croquis 4).

Nota: Si la tela tiene un sentido (rayas) todas las piezas tienen que
estar orientadas del mismo modo.
Si su modelo lleva una costura o una botonadura en la delante-
ra puede dejar el pliegue original en su sitio; se disimulará con la

costura (croquis 5).

El trazado del patrón


Con la tiza de modista, haga un trazo limpio y fino por el contor-
no de todas las piezas del patrón; a través de las perforaciones en
forma de rombo (véase p. 35) y en las muescas indique las marcas
igualmente con tiza. No olvide nada. Todo es importante.

Quite que sujetan el patrón a la tela pero conservando


los alfileres
aquellos que mantienen las dos telas unidas entre sí.
Con la ayuda de la regla plana, repase con la tiza todas las costu-
ras para que queden bien claras; una entre sí las señales de las
pinzas y de los dobladillos; repase igualmente con tiza todas las
junturas para señalarlas bien.

42
Croquis 4

Corte evitando Corte que no evita


el pliegue central el pliegue central
original del comercio original del comercio
(croquis 4 arriba) (croquis 5 adjunto)
Para tela con rayas y sin rayas para tela
1. Espalda. con rayas o sin rayas
2. Delantera. 1. Cuello.
3. Orillo izquierdo. 2. Mangas. Croquis 5
4. Orillo derecho. 3. Espalda.
5. Pliegue central. 4. Delantera.
6. Mitad de espalda sin costura. 5. Puños.
7. Mitad delantera sin costura. 6. Cintura.
8 y 9. Colocación 7. Costura mitad espalda.
del bolsillo 8. Costura mitad delantera.
y de las mangas 9. Orillos.
una vez abierta la tela. 10. Pliegue central original del comercio.

43
El corte de la tela
Antes de este acto decisivo hay que prever los riesgos de error.
Uno de los más frecuentes es haber cogido tela demasiado escasa.
Si se presenta este caso dejar menos para las costuras.

Le aconsejamos que reserve 3,5 cm para las costuras laterales, 3 cm


para los anchos, 3 cm para los hombros y 2 cm para el largo de
mangas. Haga un trazo ligero con la tiza para estar segura de res-
petar este intervalo en el momento de cortar.
Sostenga con mano firme, corte limpio, lo más recto posi-
la tijera

ble evitando desperdiciar la tela. Corte las partes principales y lue-


go bolsillos, cuellos y demás elementos. Doble con cuidado la es-
palda, la delantera y las mangas. Si tiene que interrumpir el tra-
bajo, deje puestos unos alfileres.

Si su mesa de cortar no tiene largura suficiente para contener todo


el patrón, puede echar mano del respaldo de una silla sobre la que
deslizará la parte sujeta con alfileres; sujete el otro extremo de la

tela por medio de un peso.


el montaje
El montaje comprende tres partes: el pase de hilos flojos, sujetar
con alfileres e hilvanar.
Todas estas operaciones deben realizarse con minuciosidad, lo que
le evitará tanteos que le podrían desanimar.

El pase de hilos flojos

Ya tiene ante sí las piezas que acaba de cortar. Estas piezas están
dobladas cuidadosamente sujetas con alfileres; un trazo de tiza se-

ñala las costuras y las piezas,uniones y los dobladillos. Para


las

preparar el montaje, con un hilo especial debe:

— pasar los hilos flojos (delante y detrás);

— reemplazar los trazos de tiza por hilos de color;

— reproducir los diferentes trazos en la otra parte de la tela;

— pasar los hilos de caída.


Todos estos hilos tienen que ser del mismo color para distinguir-
los de los hilos de coger faltas que serán de otro color. Como
estos hilos deben ser eliminados al final del trabajo, no haga nu-
dos tras las puntadas.

(JQ Cómo proceder


Este trabajo se ejecuta comenzando por la derecha de la tela (véase
el croquis 44), meta la extremo derecho y sáquela 3 cm
aguja en el

más lejos dejando al exterior unos 4 cm para reemplazar el nudo.


Haga una puntada libre (una gran puntada floja) de 5 cm, coja 3
cm por el interior y vuelva a salir; haga otro punto libre de 5 cm
y así sucesivamente. Corte el hilo a unos 4 cm como a la entrada.
Este hilo tiene que servir tanto en el revés como en el derecho de
la tela: por lo tanto, tiene que ser visible en los dos lados de la

misma.

45
B

Hilos flojos
El primer hilo que se pasa es el hilo flojo de A a B. Este hilo

marca, por una parte, mitad de delante y, por otra, la mitad de


la

espalda. Tiene que quedar en el vestido hasta la última prueba y


sólo se quita cuando ésta se ha terminado ya (croquis 1).

Hilos de marca
Deben trazarse por todos los trazos de tiza. De este modo se
reproduce el trazado de las costuras, el contorno de las bocaman-
gas (para el montaje de las mangas), el del cuello (para montar

46
Croquis 4

Croquis 2: sujete con alfileres


las dos piezas de tela
Croquis 3: dando vuelta a las
unidas aparece por el otro
telas
lado una parte de los alfileres

No olvide hacer con las man-


gas lo mismo que con la delan-
tera y la espalda
) Croquis 3

eventualmente un cuello o terminar en escote). Pase también un


hilo por el trazo de las pinzas, del dobladillo y sobre todo por el
lugar de las uniones (véase p. 35).

Reproducir un lado sobre el otro


Sujete con alfileres las dos telas por el trazado de los hilos que

acaba de pasar sin olvidar uniones (croquis 2). Al volver la


las

pieza por el otro lado verá que la segunda parte deja ver una parte
de los alfileres. No tiene más que pasar los hilos siguiendo las
líneas indicadas por estos alfileres (croquis 3 y 4).

47
Los hilos de caída
Saque los alfileres que puso en el momento de cortar y de pasar
los hilos y abra las piezas para pasar los hilos de caída. Estos son
unos hilos horizontales que atraviesan el vestido: a la altura de la
cintura, a la altura de las caderas y desde una pieza del pecho
hasta la otra. Su finalidad es la de servir de guía para el buen
conjunto del vestido durante todo el trabajo.
Los hilos de caída tienen que ser paralelos al hilo de la trama, es
decir, perpendiculares al sentido del orillo. Esto sólo es posible en
una tela no cedida (véase p. 40); en caso contrario, tiene un trazo
de tiza en el revés del vestido juntando entre sí las uniones de
cadera, de cintura y las pinzas del pecho tanto en la delantera
como en la espalda.
Pase los hilos de marca por estos trazos; este hilo debe ser siem-
pre de color y debe ser visible para ambos lados de la tela (croquis

Es indispensable pasar también por las mangas los hilos de caída.


Póngalos perpendicularmente el uno al otro; un hilo vertical que
vaya desde lo más alto de la manga hasta el puño y un hilo hori-
zontal a unos 10 cm del punto más alto de la manga. Reproduzca
estos hilos en la otra manga.

48
49
El montaje con alfileres

Ya tiene todos los trozos de su vestido listos para ser montados.


En primer lugar sujete con alfileres las pinzas del pecho teniendo
en cuenta que una pinza, cualquiera que sea, se monta siempre
partiendo de su punta y con más razón la pinza del pecho puesto
que de ella depende de modo decisivo toda la caída del vestido.
Meta el primer alfiler juntando las dos puntas de la pieza exacta-
mente sobre el hilo de color; siga poniendo alfileres hasta llegar a
la costura lateral (croquis 6).

Junte luego la delantera y la espalda: coloque las uniones de las


costuras exactamente unas frente a las otras: júntelas con alfileres
y continúe poniendo alfileres por los dos lados.
Es hora de que se vaya preocupando de la abertura que le permiti-
rá ponerse el vestido. Si no lleva abertura por delante, habrá pre-
visto que lleve una cremallera en la espalda (para un vestido nece-
sitará 60 cm de abertura; para una blusa bastará con 20 cm):
— en caso de que la espalda lleve una costura, aprovechará ésta
para fijar la cremallera;

— en caso de un vestido sin costura, se necesita una abertura para


podérselo probar. Para evitar que la tela se deshilache tome una
tira de tejido adhesivo de la longitud de la cremallera más 5 cm;
aplíquela con la plancha sobre el hilo de la espalda y sobre el revés
y abra luego la costura.

Monte a continuación los hombros; sujételos con cinco alfileres


«sosteniendo» la espalda sobre la delantera para conseguir cierto

redondeamiento de la espalda («sostener» quiere decir que se frun-


ce la tela a fin de darle cierto arqueo) (croquis 7).
En efecto, compara de perfil una delantera y una espalda a nivel
si

de los hombros verá que la delantera es algo más plana que la


espalda puesto que ésta se halla algo redondeada; por esta razón es
menester dar más largura a la espalda y mantener esta diferencia
durante la costura de hombros (croquis 8).

50
51
Hilvanar

Se llama hilvanar al montaje provisional que se realiza a partir de


el ensamblaje que se ha construido a base de alfileres. Para ello es
utilizada la puntada de hilván. El hilván permite además las prue-
bas del vestido y la realización de los retoques necesarios (coger
faltas).
— Comience a hilvanar por las pinzas del pecho; fije cuidadosa-
mente el comienzo de la pinza en el lugar del primer alfiler; hilva-

ne la pinza controlando en cada puntada si va cosiendo sobre los


hilos de color (por arriba y por abajo).
— Hilvane luego las costuras de los lados; en cada sitio de unión
de una puntada hacia atrás para conservar bien la caída de la espal-

da sobre la delantera; tenga cuidado de mantenerse siempre en los


hilos de color tanto arriba como abajo.
Continúe luego por las costuras de los hombros y las pinzas del
escote. Cuando el vestido está ya completamente hilvanado, pue-
de, si desea una buena prueba, abrir las costuras de los costados y
de los hombros sujetándolas con puntada continua; este hilván
mantendrá las costuras abiertas interiormente como si estuvieran
planchadas. Esto no es obligatorio pero es muy práctico.
— Hilvane el dobladillo a 4 cm del borde con una puntada larga
continua.
— su modelo
Si lleva mangas hilvane la costura de debajo del bra-
zo de la manga izquierda. Pase luego dos hilos de frunce sobre lo
alto de la manga; estos hilos se pasan a medio centímetro el uno
del otro a un lado y otro del hilo de color y deben salir a 2 cm
por debajo de la unión del ancho de espaldas. Apriete estos dos
hilos de modo que estreche la cabeza de la manga en unos 3 cm.
De este modo se obtiene un pequeño arqueamiento que se adapta-
rá al hombro.
Este abombamiento de las mangas le permitirá probar y montar
las mangas sin dificultad (croquis 9).

Su vestido ya está listo para la primera prueba.

52
Croquis 9 La preparación de las mangas
Puede Vd. proceder de dos formas: o coser primero el bajo de la manga y pasar luego los dos
hilosde frunce como se indica en la figura de la derecha o pasar los hilos de frunce estando
aúnlatelaextendida,hilvanarluegolacosturadebajodelbrazoyluegofruncirloaltodelamangacomo
lo muestra la figura adjunta. Este método es más fácilpara las que no tienen experiencia en costura.

53
las pruebas
Antes de proceder a la prueba es importante ponerse el sujetador y,
eventualmente, la faja que vaya a llevar luego con el vestido que se va a
probar. El primero determina el emplazamiento de las pinzas del pecho,
y la segunda el contorno de cintura y el contorno de caderas.
Una prueba permite controlar tres puntos importantes:
— elredondo, esdecir, lalarguradelaespaldaconrelaciónaladelantera.
— proporciones,
las de las medidas de su cuerpo;
es decir, la exactitud
— comodidad,
la que permita facilidad de movimientos.
es decir,
El redondose verifica en primer lugar y ya en la primera prueba; luego se
verifican las proporciones y siempre durante la primera prueba; la
comodidad sólo se puede comprobar cuando se hayan montado las dos
mangas; es decir, en la segunda prueba.

La primera prueba
La caída
Compruebe la caída del vestido puesto del derecho ante un espejo
(véase p. 16), sin hacer contorsiones, o mejor aún, sobre un mani-
quí acomodado a sus medidas (véase p. 36).
La caída del vestido está determinada por la longitud de espalda
entre el cuello y la cintura; se regula por las costuras de los hom-
bros y se dice que está bien cuando las líneas de los hilos flojos
son perfectamente horizontales entre sí (véase p. 48).

Si las líneas de los hilos flojos descienden hacia adelante, se dice que la
delantera cuelga o la espalda «remanda» (croquis 1).

54
Para corregir este defecto, descienda ligeramente la espalda desco-
siendo las costuras de los hombros (de ahí la importancia de haber
dejado 3 cm en estas costuras en el momento del corte) y proce-
diendo como sigue (croquis 2):
— coloque el maniquí ante el espejo para controlar mejor sus in-
tervenciones;
— fije espalda y
la la delantera sobre la tela del maniquí con la

ayuda de cuatro alfileres (dos delante y dos detrás), colóquelos a


unos 10 cm del cuello;
— deshilvane las costuras de los hombros y saque ligeramente el

interior de las costuras para prolongar la espalda;

55
— sujeteluego con costuras de
alfileres las hombros de los la es-

palda sobre delantera con cinco


la en cada
alfileres lado;
— quite vestido maniquí;
el del
— hilvane sobre los alfileres;
— coloque de nuevo vestido en maniquí y compruebe
el el de
nuevo la caída en el espejo.
Si las líneas del hilo flojo suben hacia adelante, la largura de la

espalda es excesiva (croquis 3); proceda a la corrección inversa a la

que hemos expuesto (croquis 4).


Nota: esta corrección o cogida de faltas, suele ser cuestión de
milímetros o a lo más de un centímetro.

56
Las proporciones

Las proporciones y la comodidad del vestido no se pueden com-


probar sobre un maniquí sino sólo en sí misma. Si los detalles a
comprobar son muchos, ello no quiere decir que las correcciones
tengan que ser numerosas. Para más comodidad, póngase el vesti-
do del revés.

La pinza del pecho


Es muy importante aunque sea muy pequeña porque puede com-
prometer la perfección del vestido si no está bien cogida.
Su longitud no debe sobrepasar en ningún caso la punta del pe-
cho sino que debe quedar unos 2 mm
antes de llegar a ella. Así
serámenos visible y más fácil de planchar.
Haga las modificaciones necesarias siguiendo estos principios.
Su profundidad es responsable de que su pecho quede natural y
no quede aplastado.
Para hacer la corrección, sujete con alfileres el vestido al sujeta-
dor;
— aumente o disminuya tamaño de el la pinza recogiendo la tela

sobre cuerpo.
el
— con
sujétela o cuatro
tres alfileres;
— con
sujete costuras de
alfileres las la espalda sobre la delantera
comprobando que el largo delantero es correcto.
Atención: la rectificación de la profundidad de la pinza del pecho
puede modificar el largo de la delantera en relación al de la espal-
da. Este desajuste debe ser corregido recuperando tela en la boca-
manga pero de ninguna manera en la cintura.
En este caso se alegrará de haber dejado 3 cm de más en la boca-
manga en el corte.

57
Ancho de pecho y de caderas
Son dos puntos esenciales a comprobar. No tiene que estar enco-
gida en el vestido pero tampoco debe exagerar la holgura: un ves-
tido demasiado ancho carece de elegancia.
Recuerde que las normas de comodidad son de 4 cm para el pecho
y 6 cm para las caderas (la prueba se hace sobre el revés).
El pecho. Al modificar la pinza del pecho Vd. ha modificado la
anchura de la delantera. Para saber si la anchura de la espalda es
correcta, cruce los brazos: tiene que poder hacer este movimiento
sin dificultad. Suelte o recoja las costuras del costado a la altura
correspondiente a la de las pinzas del pecho.
Las caderas. Suelte o recoja simétricamente las costuras del costa-
do. Haga la rectificación directamente en sí misma, con alfileres,
hasta que encuentre una línea suficientemente plegada al cuerpo
pero conservando la comodidad indispensable.

Hiladillo de la cintura
Permite asentar bien la cintura en su sitio y rectificar eventual-
mente la medida de su contorno de cintura.
Póngase el vestido del revés. Simule un cinturón sin apretar dema-
siado con ayuda de un hiladillo de longitud suficiente como para
anudarlo y:
— apoye este hiladillo sobre los dos huecos de la cintura, ni de-
masiado alto ni demasiado bajo;
— sujételo con alfileres sobre la mitad delantera y de espalda del
vestido y sobre cada una de las costuras laterales; fije el hiladillo
con algunas puntadas de hilván una vez que se haya quitado el
vestido y antes de comenzar la prueba siguiente;
— el hiladillo puede acortar un vestido en unos 2 cm; por lo tan-
to, es conveniente comprobar el largo y el redondo ante el espejo.

58
El entallado
Siguiendo los imperativos de la moda o de su silueta, se verá obli-
gada a entallar más o menos el vestido que confecciona. Esta ope-
ración se ejecuta una vez que se ha
colocado el hiladillo de cintu-
ra, lres posibilidades se le ofrecen
(croquis 5
- recoger costuras costado;
las del
y 6):

- siespalda
la lleva
cremallera o una costura,
recoger costura la
de espalda;
la

- coja dos pinzas finas


partiendo pecho y terminándolas
del a la
altura de las caderas.

59
Croquis 6

La caída de los hombros


La prueba de la caída de los hombros y el montaje de las mangas
son algo más complicadas que todo lo que hasta ahora hemos ex-
plicado.
Tenga primeramente el vestido puesto sobre su cuerpo para proce-
der a las primeras comprobaciones, luego lo pondrá sobre el ma-
niquí sique lo tiene, para hacer los retoques;
es
— mire con atención la parte superior del vestido. Tiene que caer
libremente de los hombros sin tirar ni apretar el cuello;
— si la tela «tira» a cualquiera de los lados (especialmente hacia
delante del cuello) suelte ligeramente las costuras de los hombros
(croquis 6);
— si la tela hace arrugas (lo más frecuentemente a la altura de las
bocamangas en la espalda) recoja un poco las costuras de los hom-
bros (croquis 7);
— siun pliegue horizontal atraviesa la espalda de un hombro al
otro a la altura del ancho de espalda, suba el pliegue hacia el cue-
llo y hacia los hombros para hacerlo desaparecer (croquis 8).

60
Croquis 8

61
El montaje de las mangas
En la primera prueba no montará más que una manga y aun ésta
muy someramente (véase p. 52):
— sujete la parte superior de la manga a la costura del hombro del
vestido por medio de un alfiler (manga derecha a la costura del
hombro derecho).
— luego con
sujete manga sobre
alfiler la el vestido a la altura de
launión ancho delantero;
del
— también
sujétela de unión
a la altura la delancho de espalda;
— coloque otros dos entre
alfileres los tresya indicados;
— compruebe largo de manga y
el la suelte o recoja eventualmen-
te las costuras.
Importante: no «pique» la tela o haga muescas jamás en la prime-
ra prueba, puede que necesite todas las reservas de tela para la
comodidad y para hacer las modificaciones definitivas una vez que
haya montado las dos mangas, es decir, en la última prueba.

Retoques del patrón base


Los retoques que ha efec-
tuado después de la pri-
mera prueba provienen,
en primer lugar, de su
conformación y, en se-
gundo lugar, de la tela
empleada.
En el primer caso siempre
encontrará las mismas fal-

tas si parte del mismo pa-


trón; por lo tanto habrá
que rectificar el patrón.
De este modo, y tras
unos tanteos inevitables,
podrá evitar las faltas más D y F indican los
'

importantes. ajustes ocultos de


J
delantera y espalda.}

62
La segunda prueba

Una vez cogidas las faltas y hechas las rectificaciones, es decir,

una vez pasados de marca y reproducidos en la otra par-


los hilos
te, «reconstruya» otra vez del mismo modo que para la primera

prueba: sujete con alfileres y luego hilvane. Estas puntadas de hil-


ván son las que permitirán las costuras definitivas (a máquina o a
mano); por lo mismo hay que ejecutarlas muy regularmente, rela-
tivamente cerca unas de otras y exactamente en las costuras.
Compruebe con el centímetro que las dos piezas de pecho estén a
la misma altura y que tengan la misma profundidad.

Prepare el dobladillo con hilván, sujete con alfileres el hiladillo de


cintura en el lugar que le corresponde (véase la primera prueba) y
prepárese a montar las mangas si las tiene.

Las mangas
La caída de la manga
Ocúpese primero de una manga. Controle la caída en sí misma o
sobre un maniquí, es la mejor solución. Para ello, coloque el ves-
tido (en su sitio) en el maniquí. Luego:

— coloque el hilo flojo vertical de la manga a continuación de la


costura del hombro: A sobre B. ¡Ojo! el trozo previsto para la
costura de la manga debedoblado hacia el interior de la misma
ser
de modo que sujete con alfileres el derecho de la manga sobre el
derecho del vestido; los hilos de frunce le ayudarán a ello (véase
p. 52);

— coloque a continuación
el hilo horizontal en ángulo recto con

cuerpo del vestido; sujete con alfileres la


los hilos verticales del
manga por delante y por detrás a la altura de las uniones del an-
cho: C frente a D y E frente a F.

Nota: el montaje del bajo de la manga debe ser liso. Si la manga


no es suficientemente ancha en este lugar puede ensanchar la cos-
tura de la manga o estrechar un poco la costura situada en la bo-
camanga del vestido.
La caída de la manga debe ser natural, sin arrugas horizontales; si
se producen, suba un poco el contorno superior de la manga apre-
tando los hilos de frunce.

63
La preparación del montaje
Compruebe las uniones: si un emplazamiento ha cambiado como

consecuencia de una o varias correcciones o cogidas de faltas (sea


en las mangas o en el ancho), indique las nuevas uniones con
exactitud sobre los dos lados del vestido porque la menor separa-
ción provocaría diferentes caídas de las mangas. Después, quite los
alfileres.

El montaje
Vuelva el vestido al revés. Siempre teniendo en cuenta las uniones,
sujete con alfileres las mangas como indica la figura comenzando
por la parte superior de la manga.
Iguale la anchura de la cabeza de la manga entre los tres puntos de
unión por medio de los hilos de frunce; ponga alfileres en buen
número para sujetar bien el entorno y la bocamanga entre sí. To-
dos estos alfileres deben colocarse sobre los hilos de frunce en el
lado de la manga.
El bajo de la manga y el hueco de la bocamanga deben adaptarse
naturalmente pero es posible que sea necesario recortar en la man-
ga pues sobrepasará de la bocamanga. No se preocupe por ello y
no corte nada por ahora.
Sujete esta parte del montaje por medio de alfileres colocados esta
vez por el lado del vestido siguiendo la línea de bocamanga indica-
da por los hilos de color.
Hilvane esta manga comenzando por una puntada de pespunte
que sujete los puntos de unión C y D; vaya con puntadas cortas y
apretadas comprobando tras cada una de ellas, que sigue bien, por
una parte, con los hilos de la bocamanga del lado del vestido y,
por otra, entre las dos hileras de frunces del lado de la manga;
hilvane de este modo hasta las uniones E y F.
Pase luego el lado del vestido para hilvanar (siempre apretado) el

bajo de la manga sobre el hilo de color.

Haga lo mismo con la segunda manga; compruebe con atención


lasdos caídas de las mangas en Vd. misma o sobre el maniquí.
Tienen que sentar rigurosamente iguales.

64
Comprobar los retoques
Haga la segunda prueba poniéndose Vd. misma el vestido por el

derecho a fin de comprobar todos los puntos modificados: pinzas


de pecho, ancho total, caída de hombros, emplazamiento de la
cintura, largo, etc.
Si las la primera prueba han sido insufi-
correcciones hechas tras
cientes o, por el contrario, demasiado acentuadas, rectifique de
nuevo aumentando o disminuyendo los retoques.
Tenga en cuenta que después de esta prueba, el vestido estará defi-
nitivamente cosido; si comprueba que subsisten algunas faltas, está
a tiempo de remediarlas.

65
La comodidad o
lafacilidad de movimientos
Una vez que están montadas las dos mangas, se puede Vd. dar
cuenta de comodidad que va a tener en sus movimientos. Varios
la

son los defectos que aún le pueden estorbar:


— Un ancho de espalda escaso le molesta al cruzar los brazos de-
lante. Suelte en este ancho medio centímetro por cada lado dismi-
nuyendo constantemente hasta llegar a la costura de hombro, por
una parte, y hasta el comienzo de la bocamanga por otro (croquis
1).

— Un defecto de montaje de la manga le dificulta el levantar los

brazos y le da la impresión de que tiene una barra bajo los hom-


bros.
Hay demasiada altura en la cabecera de la manga; hay que quitar
por lo tanto en la parte superior redondeada (croquis 2).

— Una bocamanga demasiado escotada o baja hace que al levantar los


brazos se levante todo el vestido.
Levante todo lo que pueda la bocamanga por la costura de mon-
tajebajo el brazo, por el sitio donde ha dejado tela; si no basta, si

siente que la bocamanga le tira, ponga una cuñita de tela en este


lugar (croquis 3).

— Un montaje de manga demasiado baja en el hombro le molesta


al levantar los brazos.
Levante un poco la manga sobre la costura del hombro redon-
deando armoniosamente el hilo de montaje (croquis 4).

66
— El ancho delantero demasiado escaso hace «salir» a la manga
hacia adelante.
Ensanche un poco la bocamanga desde la costura del hombro has-
ta un poco más bajo que la unión de la manga (croquis 5).

— Le molesta el conjunto de la bocamanga.

Es posible que las costuras interiores dejadas en la manga y en la


bocamanga le molesten simplemente por su exceso; una vez pica-
das y repasadas las mangas este inconveniente puede desaparecer;
pero si la bocamanga no está suficientemente amplia hay que «pi-
carla» para conseguir comodidad (croquis 6).

— El cuello está demasiado cerrado.


Busque el sitio que carga sobre el cuello (teniendo en cuenta la
costura interior y recordando que va a necesitar algo menos de 1

cm para esta costura si el cuello es sencillo o «degollado»).


Si esto sucede a la altura de la costura de hombros, suelte un poco
estas costuras en uno o dos mm igualando con la costura inicial en
una longitud de 4 cm.

— El cuello escota demasiado.


Ello puede suceder por dos causas: 1) por las costuras del hom-
bro; cierre en este caso costuras en algunos milímetros, 2) por
las

la espalda: cierre más en este caso la cremallera o en su defecto,


las pinzas del cuello; si el cuello escota por delante, la cosa es más
grave; hay que empujar la parte que sobra por delante a los hom-
bros hasta la montura de las mangas (croquis 7).

— El cuello hace un hueco en la base del cuello. Siendo delante no


es demasiado grave; «embébalo» milímetro a milímetro. Una vez
que ha hecho todas las rectificaciones (ha cogido todas las faltas)
han terminado las pruebas. Puede ya coser definitivamente su ves-
tido.

68
coser

Cosa Vd. a máquina o a mano lo importante es hacerlo de una


manera lógica y práctica.

Coser a máquina

• La máquina de coser hace un trabajo limpio pero es menester


no torcerse porque si no, las costuras una vez abiertas no queda-
rían planas. Por lo mismo no hay que ir demasiado de prisa; esta
es una condición esencial para coser derecho.
• Regule la puntada de la máquina de coser a un tamaño medio:
si es demasiado fina le romperá la tela y si es demasiado grande,

las costuras, una vez abiertas, dejarían aparecer vacíos entre las

puntadas.
• Haga todas las costuras en la misma dirección: de abajo a arri-
ba en y de izquierda a derecha en las horizontales.
las verticales

• Las pinzas deben coserse empezando por la base para terminar


en la punta.
• Las costuras del hombro deben coserse yendo desde la boca-
manga hacia el cuello (lo mismo si se trata del hombro izquierdo
como del derecho).
• Si el vestido lleva embebidos o frunces, cosa sobre el lado en
que embebido o el frunce; sostenga la tela con la mano
se halla el

y cosa lentamente. Puede también meter un papel de seda entre la


máquina y la tela (rompa el papel una vez hecha la costura).

70
Las costuras
Quite la mayor parte de los hilos. No deje más que los hilvanes,
los hilos flojos, los hilos de frunce y el hilván del dobladillo.
Quite también el hiladillo de cintura. Luego:
— cosa las pinzas del pecho y del cuello;
— luego las costuras del costado; al llegar a la altura de la pinza
del pecho, deje de coser (corte el hilo dejando largura suficiente
para hacer un nudo) y ahora siga cosiendo la otra parte de la

pinza. Esta quedará así independiente de la costura;


— cosa costuras de hombros;
las
— cosa costuras de mangas;
las las
— termine con costuras de las las bocamangas respetando la am-
plitud señalada por los hilos de frunce; haga la costura entre los
hilos de frunce (compruebe bien la curva de este montaje para que
no haga bolsas).

La cremallera
Si elmodelo elegido lleva cremallera en la espalda sin costura, hay
que hacer una abertura para reemplazar esta costura.
Al hacer el ensamblaje con los alfileres (véase p. 50) hemos previs-
to ya una abertura para poder meter el vestido por la cabeza;
aproveche esta cobertura provisional para poner la cremallera:
— coja una tira de forro de 8 cm de ancho y de una largura supe-
rior en 6 cm a la de la cremallera (ésta tiene, en principio, 20 cm
para las blusas y 60 cm para los vestidos);

71
— haga un corte en su mitad en el sentido del largo y sujete con

alfileres la tira derecho del vestido (derecho con derecho)


sobre el

indique por medio de una marca de tiza el lugar exacto al que


llegará la cremallera poniendo su punto de partida a 2 cm debajo
del cuello;

— hilvane el largo de ambos lados de la abertura. Cosa a máquina


sobre el hilván lo más cerca posible de esta línea partiendo del
cuello; unas puntadas antes de llegar a la marca de tiza, dé la

vuelta y cosa el otro lado hasta el cuello (croquis 1);

— corte entre las dos costuras, sin tocarlas, abra las costuras de
un golpe de uña y repáselas con la plancha; vuelva el forro al

interior del vestido, hilvane sobre el derecho sin dejar que aparez-
ca el forro, junte los bordes con un hilván a caballo (croquis 2).
Véase la colocación de la cremallera en la p. 77.

Consejo: Si no ha hecho nunca un hojal, ejercítese primero sobre


un trozo de tela.

72
La plancha

El importante trabajo de la plancha exige también una preparación


que no conviene escamotear.

• Para abrir bien las costuras y dejarlas limpias, hay que quitar
todos los hilos de hilván que entreveraban su abertura, es decir,
hay que deshilvanar. Por el contrario, deje los hilos flojos, la mar-
ca del dobladillo, la del borde del cuello y la de la bocamanga si

está indicada.
• Anude los finales de los hilos de costura para que éstas no se
suelten.
• Recorte las costuras de las bocamangas en 12 mm.
• Iguale las costuras bajo los brazos dejando 2 cm. Si estas costu-
ras llevan una curva interior, haga unos endentados en su borde
para evitar que «tiren», lo que se notaría en el derecho del vesti-

do.

Nota: si la tela que ha empleado es gorda, hay que abrir las pin-
zas del pecho, es decir cortarlas por la mitad desde el centro hasta
el vértice.

El «trapo mojado»
Prepare el «trapo mojado» que debe estar más o menos embebido
en agua según la naturaleza de la tela a planchar. Así para plan-
char lana hará falta vapor y, por lo tanto, un trapo muy impreg-
nado de agua. Para tener un trapo simplemente húmedo proceda
del siguiente modo:
— empape en agua mitad trapo y la del escúrrala;
— repliegue parte mojada sobre parte
la la seca.
De este modo
obtendrá una humedad que podrá «regular» escu-
rriendo más o menos la parte mojada en agua.
• La seda natural, el rayón, eJ algodón no necesitan «trapo moja-
do» para la plancha porque las costuras se abren fácilmente con la
plancha; en cuanto al algodón puede emplear si lo cree necesario
el trapo húmedo.
• Las fibras, las telas sintéticas se planchan con un trapo húme-
do.

73
Para planchar bien
El calor de la plancha junto con la humedad del trapo tiene gran
importancia en algunos tejidos. Se utiliza esta acción para abrir las
costuras pero también para reabsorber el «embebido» (término
técnico para significar el exceso de amplitud). Sin embargo, esta
misma acción puede, si no se tiene cuidado, estirar el tejido en
algunos sitios, es decir, estirarlo sin querer; esto es frecuente
cuando se plancha en la tabla de la plancha.
Tenga, pues, cuidado para evitar cualquier deformación, de sujetar
las partes concernientes con unos alfileres al forro de la tabla a

unos centímetros del trozo que tiene que planchar. Esto le evitará
disgustos.
Planche siempre al hilo aunque la pieza esté cortada al bies.

La plancha propiamente dicha


Ponga el vestido del revés y proceda del modo siguiente:
Comience planchando las pinzas del pecho. Estas pinzas se plan-
chan en la parte redondeada más ancha de la tabla colocando la
punta de la pinza un poco por detrás del borde de la tabla. Plan-
che primero sin apretar y sin trapo mojado; abra la pinza si es
menester o dóblela hacia uno de los lados. Ponga el trapo mojado
y pase la plancha sin apretar demasiado. Levante el trapo mojado,
redondee lo mejor que pueda para darle el hueco del pecho.

• Haga el mismo trabajo en las pinzas del cuello y luego abra las

costuras del hombro.

• Planche las costuras del costado; si el vestido es cerrado tiene


que emplear la tabla de planchar, si no, coloque su vestido exten-
dido sobre el paño de planchar, la anchura interior del vestido no
debe «tirar»; si apareciese este defecto «pique» un poco en el sitio
adecuado.

• Puede suceder que el peso de la plancha deje marcas en el dere-


cho del vestido; quite estas marcas cuando la tela está todavía ca-

74
líente pasando la plancha por el revés del vestido, entre la tela y la
entrada de la costura.

• Planche del mismo modo las otras costuras (espalda, bajos de


la manga, uniones, ojales, etc).

• A continuación haga entrar la manga. Para ello, colo-


el alto de
que el alto de la redondo mayor de la tabla,
bocamanga sobre el

con el cuerpo del vestido abajo, el borde de la costura de manga

ante Vd., y los frunces de la manga arriba. Sujete en el borde de


la tabla esta parte de la bocamanga con dos alfileres para evitar

deformar el montaje de la manga. Con la plancha a medio calor


ajuste la anchura sobrante sobre la manga; se trata de hacer desa-
parecer la traza de los frunces. Sírvase en este trabajo del trapo

mojado. Si el resultado no es satisfactorio comience de nuevo hu-


medeciendo un poco más el trapo; seque de nuevo. El planchado
definitivo del montaje de las mangas se hará sobre el derecho en el
último momento. El bajo de las mangas no se plancha en princi-
pio.

Coser a mano
Aunque cosa un vestido a máquina, es preferible que algunas par-
tes las cosa a mano. Estas son: los dobladillos, la cremallera, cier-
tos detalles de acabado (cuello, bocamangas, bajo de las mangas),
los botones, los cierres...
Para coser el dobladillo haga puntada larga.

Si Vd. es cuidadosa y exigente en las terminaciones, sobrehilar a


mano el borde de todas las costuras (muchas máquinas evitan ya
este trabajo fastidioso). En caso de un vestido forrado, el forro se
coloca a mano en el interior del vestido.

75
El dobladillo
la vez, es el sello de una buena
El dobladillo, sólido e invisible a
hechura. Se prepara por derecho del vestido:
el

— compruebe que el redondo indicado por el hilo rojo es efecti-


vamente bien redondo. Si remanga en los costados indique el re-
dondo definitivo con alfileres;
— hilvane alfileres con una puntada larga y floja; el
sobre estos
borde del dobladillo debe ser limpio y doblarse naturalmente; de-
termine la altura del dobladillo que una vez terminado no debe
exceder de los 5 ó 6 cm. Si la tela sobrante no tiene la misma
altura en todos los lados (croquis 1) tome como base la parte me-
nos alta; indique con tiza a cada 15 cm más o menos esta medida:
recorte el dobladillo al igual.

— cosa el dobladillo con puntada larga.

76
cremallera
Una vez preparado el corte para la cremallera (véase p. 71), tiene
que sujetar la cremallera pero antes de coserla hay que meterla en
agua a fin de que luego no encoja (ahora que el soporte de las
cremalleras no suele ser de algodón, no es necesaria esta precau-
ción).
Una cremallera sin cabeza de adorno decorativo, tiene que ser
prácticamente invisible una vez puesta; para ello, deben tocarse los
dos bordes de la costura que la disimulan (croquis 2).
— ajústela con alfileres comenzando por arriba a centímetro y
medio del cuello (piense en que siendo la espalda un poco redon-
deada, debe conservar este movimiento al sujetar la cremallera con
alfileres);
— deje los dos bordes de la abertura unidos entre sí por una pun-
tada hilvanada a caballo; coja el hilván a cada lado de la abertura a
medio centímetro del borde;
— cosa luego con un hilo del color del vestido; cosa a pespunte,
con puntada más pequeña posible sobre el derecho y de 3
la mm
en el revés; comience a coser partiendo del cuello; cósalo aquí por
los dos lados para evitar un desajuste en las dos puntas de la cre-
mallera;
— haga un nudo en el interior a cada lado de la cremallera tanto
arriba como abajo.

cuello
Para terminar bien un cuello es preferible doblarlo.
El patrón base en el que Vd. ha hecho sus retoques le servirá para
cortar el forro (sobre 6 cm de ancho) que debe reproducir exacta-
mente el escote. Puede utilizar también la misma tela del vestido a
condición de que ésta no sea demasiado gorda.
Corte esta forma utilizando el mismo procedimiento que para el

vestido; trace con tiza el escote, marque centro y los hombros;


el

corte en un ancho de 6 cm; pase la rueda sobre la tiza para igualar


las dos partes; cosa las costuras de hombros y ábralas. Aplique
este forro sobre el escote, derecho contra derecho presentando ha-
cia el lado de Vd. el revés del forro. Haga coincidir las costuras de
hombros y coloque el centro del forro sobre el hilo flojo (croquis

Hilvane, cosa, recorte ligeramente la costura interior sobre medio

centímetro; a cada 2 cm haga unas muescas en esta costura hasta


llegar al hilo pero sin abrirlo, vuelva al interior e hilvane para fijar

77
el forro; pase la aguja al rededor con una puntada ligera y floja
para evitar que se marque en el derecho (croquis 4).

Nota: Emplee el mismo sistema para rematar las aberturas de un


vestido sin mangas y los bajos de las mangas cortas o largas si
estas últimas no terminan en puños.

La última plancha
Antes de realizar la última plancha pruebe el vestido o póngalo
sobre el maniquí; observe con atención si tiene aún faltas que se
puedan eliminar al vapor. Obtendrá resultados admirables utili-

78
zando el calor de la plancha y un trapo mojado. El vapor actúa
sólo sin el peso de la plancha. Por este procedimiento puede vol-
ver a dar forma a un cuello, a una bocamanga, quitar una señal de
plancha demasiado visible...

Termine en la tabla de planchar quitando las marcas de hilo (do-


bladillo, cuello, hilos flojos). Meta la parte superior de la manga
sobre la tabla de planchar teniendo el vestido por el derecho,
planche, de una marca a otra del ancho, el montaje con ayuda de
un trapo mojado, sin apretar ni sacar brillo.
Para preparar el dobladillo, varían los métodos según la clase de
tela:
— un algodón requiere una entrada de medio centímetro y
fino
no presenta problemas;
— rayón y
el lasdeshilachan fácilmente;
fibras se menester es
sujetarlo a base de sobrehilar que se puede asegurar con una pasa-
da a máquina; ésta se hará sobre el sobrehilado sin pasar el hilo
porque sería visible por el derecho;
— las telas sintéticas no se deshilachan casi y bastará una simple
pasada a máquina a dos mm del borde.
Otro procedimiento consistiría en coser un contrafuerte para ocul-
tar cortes y deshilachados; se une el contrafuerte al vestido por
una puntada lateral, pero tiene el peligro de que se note en el
derecho y no es desde luego un procedimiento de «modista». Le
aconsejamos el sobrehilado con una pasada a máquina (croquis 5).
Planche la costura y el sobrehilado antes de sujetar el dobladillo;
esto permite «adelgazar» la parte sobrehilada las marcas y quitar
de espesor lo que será posible una vez terminado el dobladillo.
Hecho esto, siempre del revés, sujete con alfileres el contorno del
dobladillo a la altura del sobrehilado, hilvane y ya puede coser el

dobladillo.

79
LAS FALDAS

Una falda y un jersey, una falda y una camisa, una


falda y un camisero, una falda y una túnica... son
juegos que se pueden emplear siempre. ¿Cómo se
puede hacer una falda? La falda es la base de un
guardarropa de todas las mujeres, de todas las eda-
des, de todas las actividades y de todos los estilos. La
falda cuya forma nos sienta bien la volvemos a copiar
en telas y colores diferentes según las estaciones y

las circunstancias. Toda la diferencia consistirá en los


bolsillos, en los cinturones, en los flecos...
la falda fruncida
No sólo es la falda más
fácil de realizar sino
también la que se presta
más fácilmente a
numerosas variantes.
Puede llevar una costura
al hilo en la espalda o
dos costuras en los
costados, un dobladillo,
eventualmente una
abertura y sólo precisa
dos medidas: la altura
y
el contorno de cintura.

LAS TIJERAS
Todos los modelos que
presentamos a partir de
esta falda son más o
menos fáciles de ejecutar
aunque todas están
destinadas a principantes;
he aquí la significación
de nuestos símbolos:

muy tacil

fácil

presenta algunas
dificultades

82
IDEAS PARA LAS FALDAS
FRUNCIDAS
Estas faldas son tan fáciles de ejecutar que Vd. podrá poseer varias
y todas diferentes unas de otras. Puede escoger:
— estampado de grandes motivos, una cintura de un color com-
plementario y para completar el conjunto, un camisero realizado
en uno de los tonos base del estampado;
— rayados que ofrecen numerosas posibilidades según modo el

como disponga;
se les
— escocesas o de cuadros que permiten
telas de la realización fal-

das de sport o de camaradería;


— combinaciones de color o de o de mezclas de estampados;
telas
— disposición de volantes fruncidos en
a diferentes alturas, telas
diferentes o no.
Vd. puede barajar otras ideas, por ejemplo: hacer una composi-
ción de tiras diferentes unidas en un ancho con flecos y cosidas en
el bajo de la falda o confeccionar los bolsillos y la cintura en opo-
sición a los tonos de la falda.

La confección de las caderas, una


falda, a la altura
En una tela de 140 cm de ancho, la anchura igual a una vez y media el
falda sólo llevará una costura en el contorno de la cadera baja. Así ob-
centro de la espalda o en un costa- tendrá un frunce ni demasiado ce-
do. rrado ni demasiado abierto (natu-
En una tela de 90 cm de ancho, la ralmente que Vd. es libre de prefe-
falda tendrá costura a cada lado. rir un frunce más cerrado: dos ve-
Para una comodidad normal de la ces la anchura de la cadera baja,
falda, le aconsejamos que dé a la por ejemplo).

83
Los frunces
Dos posibilidades se le ofrecen:

— O hacer a la altura de la cintura


un pequeño dobladillo en el que
meterá un lazo o una goma, igual
que en una braga. En este caso la
goma debe correr entre dos pasa-
das de máquina horizontales. El
espacio entre las dos costuras está
determinado por la anchura de la Croquis 1

goma; tiene que circular libremente


para obtener pliegues regulares pe-
ro la holgura no debe tampoco ser
demasiado grande; por ejemplo,
para una goma de 3 cm de ancho,
en una tela fina, el espacio no debe
sobrepasar los 3 cm y medio; si la
tela es gorda, aumente el espacio
en función del espesor de la tela.
Termine la corredera con dos oja-
les verticales en la parte exterior
de la falda a 5 cm de distancia el

uno del otro para dejar el espacio


necesario para hacer el nudo de la
Si Vd. tiene formas
goma o lazo. Ponga el lazo antes
Piense un poco antes de entallar
de empezar costuras y déle la
las
una falda fruncida sin cintura mon-
suficiente longitud para poder ha-
tada. Sepa que si tiene las caderas
cer un bonito nudo.
un poco marcadas, la falda le «res-
—O si no proceda a un montaje pingará» un poco por los lados.
de frunces superpuestos y elásti- Añada unos centímetros (en princi-
cos. Haga pliegues de 5 a 6 cm des- pio la altura de la cintura) en los
de la cintura. Hilvánelos tres veces costados y obtendrá un buen re-
a intervalos regulares (en la base, dondo.
en centro y junto al borde). Co-
el Esto es muy importante en el caso
sa los frunces a máquina con un hi- de que la telalleve rayas horizon-
lo elástico especial (croquis 1). tales.

84
CINTURA

Para
DELANTERA
una falda
más Croquis 2: se necesitan dos altos de falda de una tela de 90 cm de
ancho
refinada
Tiene frunces, una costura en cada
lado y una cintura montada. Para
este modelo escogerá una tela de 90
CREMALLERA
cm de ancho. En la parte destinada
a espalda de quite una pe-
la falda,

queña tira (deunos 10 cm) a todo


lo largo del orillo porque si no ten-
olo
dría demasiados frunces en la es-
palda puesto que ésta es más estre-
cha que la delantera. Esta tira le
servirá luego para la cintura (cro- DOBLADILLO
FALDA DE 60
quis 2).
DOBLADILLO
Doble la tela en dos, derecho con FALDA DE 70 cm

derecho, marque con un hilo de


color la mitad de delante y de es-
palda; trace luego con tiza la línea

de cintura.
[_ DOBLADILLO
Para que la cintura siente mejor, el Croquis 3 FALDA LARGA
montaje de la cintura debe ser un
poco arqueado en el centro de la Pase un hilo de color sobre la tiza
delantera y en el de la espalda se- y reprodúzcalo en el otro lado de
gún su contorno (croquis 3). la falda.

85
Croquis 4

-CONTORNO DE CINTURA ESPALDA -CONTORNO DE CINTURA DELANTERA-

MONTAJE SOBRE J
1 LA FALDA
|
PLIEGUE DEL CINTURON

Di
El contorno de cintura se sitúa entre F y D.

La cintura montada de este hilo, a 3 cm de cada lado


Puede ser más o menos alta según otros dos hilos A' B' y A" B" se-

su silueta y según la moda; debe rá el hilo de montaje sobre la falda,

ser al hilo y tomada en el sentido el otro, A' B', el hilo para doblar
del orillo para evitar que se ceda. para coser por detrás.

— Corte una tira de tela de la lar-


— Pase un hilo de unión vertical
C-D (a 5 cm del extremo derecho
gura de su cintura; añada a este lar-
de la cintura) y otro E-F en el lado
go 6 cm. reservados para lo que
opuesto para indicar el contorno
monta en cremallera y para la
la
de cintura.
costura interior. Esta tira debe te-
ner dos veces la anchura de la cin-
— Como el ancho de espalda es
siempre menor que el de la delan-
tura, más tres cm de costuras inte-
tera tiene que calcular en conse-
riores.
cuencia el emplazamiento de las
— Para facilitar el montaje de la uniones de los costados. Para ello
falda en una cintura alhilo hay que quite 5 cm contorno de cintu-
a su
marcar las indicaciones sobre esta ra: marque la unión I-J en la mitad
última; se hacen con hilo de color de esta medida a partir de E-F: así
que señala, horizontalmente, el si- obtendrá el emplazamiento de la
tio de montaje de la cintura sobre costura del lado.
la falda, y por las uniones, vertica- Para obtener el centro de espalda,
les, en el centro de la delantera, de divida en dos partes iguales la parte
la espalda y en los lados. comprendida entre E-F e I-J y ob-
— Pase un hilo de color en el cen- tendrá la línea G-H.
tro de la tira de tela en el sentido Para tener el centro de la delantera
del largo: de A a B (croquis 4); este K-L, divida en dos partes iguales la
hilo representa la altura de la cintu- parte comprendida entre I-J y C-
ra una vez plegada; por cada lado D.

86
— Reparta regularmente los frun-
ces entre estos puntos de señales
(es preferible separar un poco los
frunces de delante llevándolos ha-
cia los lados).
Hilvane y cosa.
Croquis 5 Las uniones de falda y el
cinturón van indicados en trazos fuertes
— Antes de doblar la cintura pon-
en el croquis ga en medio una entretela, ella evi-

tará que la cintura se arrugue.


Manténgala por medio de una pun-
tada floja a todo lo largo de la cos-
tura de cintura.
— Vuelva la cintura sobre la entre-
tela, haga un pequeño dobladillo
en pico para formar el capuchino
de cierre (véase p. 188).
El montaje
A un lado y otro del hilo de mon-
— Después de planchar esta cintu-
ra, cosa la cremallera en la costura
taje y con un hilo doble, pase so-
del costado (véase las p. 71 y 77).
bre la falda
— Sujete
unos frunces^ finos.
con alfileres el derecho
— Coloque luego los cierres o un
botón si tiene previsto un ojal. Es-
de la cintura sobre el derecho de la
te montaje vale para cualquier tipo
falda, D sobre la costura del lado
de falda.
izquierdo, K sobre el hilo del cen-
tro de la delantera, G sobre el hilo Las terminaciones
del centro de la espalda, F sobre el Proceda a determinar el redondo y
otro lado de la costura izquierda ponga el dobladillo. Sobrehile las

dejando libre una parte de esta cos- costuras interiores si cree que la te-
tura para la cremallera. la se puede deshilachar.

87
la falda recta

Clásica por excelencia, la faldc.

rectaacompañada de un camisc
o de un jersey es el conjunto
ordinario ideal. Tiene que ponei
mucho interés en poner bien a
punto su patrón porque le
servirá de base para muchas
variaciones menos clásicas.

88
90 tm

Croquis 1. Se necesitan 2 altos de


falda en una tela de 90 cm de
ancho y un solo alto en tela de
doble ancho o de 140 cm.

El montaje
Corte la falda, hilvane las pinzas y
costuras del costado y pruébela.
Hay dos puntos importantes para
que una falda lisa caiga impecable-
mente.
— el ancho de caderas hay que to-

marlo en armonía con las pinzas de


la cintura. Según la redondez de las
I

caderas y el volumen de cada una,


las pinzas estarán más o menos
profundas (véase p. 95).
[^ESPALDA !
— la falda debe quedar bien equili-

brada en las caderas, es decir, que


las líneas de hilván que señalan la

El patrón cadera alta y la baja (véase p. 93)


Aconsejamos que
a las debutantes deben estar perfectamente horizon-
hagan su patrón base partiendo de tales. Este equilibrio se regula por
un vestido viejo según las instruc- el interior de la cintura subiendo o
ciones dadas en la p. 30. rebajando la línea de la cintura
Para las que han comprado un pa- (véase pp. 94 y 95).
trón en un comercio, es importante
comprobar si las medidas son exac- Una vez probada y comprobada la
tas. falda, tiene que ponerle una crema-
A aquellas que por su constitución llera (véase pp. 71 y 77) y montar
están entre dos tallas y no se atre- la cintura (véase p. 86).
ven a hacer correcciones importan-
tes a un patrón de comercio, les Un consejo: No olvide especial-
aconsejamos que hagan su propio mente de pasar las eventuales recti-
patrón de base (véase p. 93). ficaciones al patrón de base.

89
La falda con abertura
Si la moda pide una falda semilar- —o mediante un pliegue costura
ga, para poder andar con soltura que deberá añadir en el momento
tendrá que hacerle aberturas. Estas de cortar (croquis 3).
aberturas se pueden practicar en las Cosa la costura hasta el punto final
costuras laterales; en este caso no del plieguey reparta la tela suple-
hay problema pero haga un nudo mentaria a una parte y otra de la
al final de la costura a máquina pa- costura como lo indican los cro-
ra que no se corra (croquis 2). quis 4 y 4 bis. DO
Si la abertura se halla en la delante-
ra o en la espalda puede hacerla: Nota: Vd. puede pespuntear el
— o mediante una abertura dobla- un hilo del mismo to-
pliegue con
da (véase p. 7) no.

90
Croquis 4 bis

La falda "évasé»
Es sencilla de realizar; basta que
tome su patrón de base de la falda
recta:
— sobre el patrón delantero pro-
longue en 3 cm de ancho la línea

del dobladillo y marque un punto


A;
La falda larga tubo
— desde este punto, trace una lí- Para realizar esta falda tome el pa-
nea recta al punto B que señala la trón de base y prolongue la línea
cadera baja. Esta nueva línea indica de costura de los lados a partir de
la costura del lado de la delantera las caderas hasta el suelo. Hágale
de su falda evasé (croquis 5); unas aberturas si lo desea del mis-
— haga lo mismo para la costura mo modo que en las faldas más
del lado de la espalda. cortas.
Nota: según su preferencia o se- Según la materia de la tela emplea-
gún la anchará más o menos
moda da y según su color, puede llevar
la línea de esta falda añadiendo o esta falda abierta en los costados
quitando algunos centímetros a las dejando entrever un fondo diferen-
costuras de los costados. te.

91
La falda abotonada
©
Para transformar el patrón de una
falda clásica en falda recta abotona-
da, basta con seguir el patrón de
base de la delantera para las costu-
ras de los costados, la indicación
de la línea de cintura, de las pinzas,
así como para el emplazamiento
del centro de la delantera.
Añada una tira de 10 cm de ancho
a contar desde la línea del centro
de la delantera y prolongue las lí-

neas de cintura y del dobladillo.


En el centro de esta tira trace en
punteado la línea de pliegue de la
Croquis 1
montura, paralelamente a la línea
del centro (croquis 2).
La espalda es idéntica a la de la fal-

da lisa. Corte su falda según el pa-


trón.

El montaje
Hilvane las costuras de los lados,
las pinzas, doble la montura e hil-
vánela.
Para las principiantes no resulta
cosa fácil hacer los ojales, por eso
les aconsejamos que pongan los
botones como adorno pero unien-
do la falda con cierres automáticos.
Cosa los botones y los automáticos
siguiendo la línea central para que
la falda caiga bien pero no cosa los
botones hasta abajo. Deje que la
falda se abra al andar a la altura de
las rodillas y cosa el último botón a
unos centímetros sobre la rodilla. Croquis 2

92
CADERA
ir
CADERA
ALTA ALTA

D
CADERA CADERA
BAJA BAJA
3

^REDONDO _REDONDo
FALDA CORTA _
DOBLADILLO DOBLADILLO

-
REDONDO [ _) ^ — I
REDONDO
FALDA LARGA I-
|

DOBLADILLO. _DOBLADlUQ
^^
!

|
j__

COMO HACER EL PROPIO PATRON DE BASE


Para establecer este patrón de de la cintura que señala la cadera
base para sus medidas, tome dos alta; un segundo trazo a 20 cm
trozos de papel fuerte. indica la cadera baja;
Coloque el primero sobre la — lleve con exactitud estas lí-

mesa de cortar para trazar la de- neas en sentido horizontal al se-

lantera: gundo trozo de papel para esta-


— marque el dobladillo a 6 cm blecer el patrón de la espalda de
delborde del papel; la falda.
— señale la cintura con una lí-

nea horizontal que corresponde Las costuras de los lados


a la altura de la falda, medida Para la adecuada caída de un
tomada en el costado; vestido, las costuras de los lados
— haga dos trazos paralelos: deben estar ligeramente despla-
uno primero a 10 cm por debajo zadas en 2 cm hacia atrás; por

93
Silueta pronunciada

Las pinzas de la espalda son


más profundas que las de la
delantera y la cintura de es-
palda más arqueada que la
cintura de la delantera.

Diferencia de contorn o en-


tre cintura y caderas supe-
riores a 30 cm.

El exceso de amplitud se
absorbe en las costuras de
Jos lados.

V
Vientre ligeramente saliente

Las pinzas de la delantera se-


rán más o menos profundas
según el saliente del vientre y
la cintura delantera será algo
más arqueada que la de es-
palda

Las cifras de todos los croquis indican centí

eso la delantera tiene que ser por 2; la primera mitad repre-


más ancha que la espalda (cro- senta ancho de cadera para la
al

quis p. 93). espalda; esta medida aumentada


Para repartir las medidas hori- en 4 cm representa el ancho de
zontales entre la delantera y la caderas para la delantera.
espalda proceda del siguiente
modo: Ejemplo: para un contorno de
— quite cm contorno de
4 al caderas, cómodo, de 100 cm,
ca-
deras calculando con holgura; — quite cm y quedan 96 cm; 4
— divida medida obtenida — divida por 2 y quedan 48 cm;
la

94
El ancho de caderas en la espal- generalmente de la siguiente ma-
da será, pues, de 48 cm y el de nera: 10 a 12 cm en
pinzas y
las
la delantera será 48 + 4, es de- el resto se reparte en cada borde
cir, 52 cm. de las costuras de los lados (cro-
48 + 52 = 100, la cuenta es quis adjunto).
exacta.
Emplazamiento de las pinzas
Como patrón siempre se hace
el
La primera de estas pinzas se si-
por mitad, marque la media es-
túa generalmente a 6 cm del
palda con una línea A-B de la centro (delante y detrás), la se-
cadera baja igual a 24 cm y lue- gunda a 4 cm de la primera; pe-
go la media delantera con una lí-
ro estos emplazamientos están
nea C-D de la cadera baja igual
condicionados por la forma del
a 26 cm.
cuerpo y pueden ser modifica-
La línea de cintura dos en las pruebas.
Según su figura, esta línea de La longitud de las pinzas, para
cintura estará más o menos ar- la estética, no debe sobrepasar

queada en función de su ampli- los 10 cm para las pinzas de la

tud y de la caída de la falda en espalda y de 5 a 6 cm para las de


su cuerpo (véase croquis adjun- la delantera.

tos). Indique sobre el patrón la pro-


fundidad de las pinzas, la línea
Las pinzas
de cintura y la línea de la cadera
Tienen como finalidad mantener alta calculada de la misma mane-
la caída regular de la tela.
ra que para la cadera alta.
Una falda se monta tradicional-
El trazado de las costuras de
mente con dos pinzas delante y
los lados
dos en espalda; pero la expe-
la

rienciademuestra que más efi-


Se parte del punto A (croquis p.
93), es decir, sobre la línea de
caz y más estético es poner do-
la cadera baja.
ble número de pinzas haciéndo-
Partiendo de este punto, llegue
las menos profundas.
al dobladillo ensanchando su
Profundidad de las pinzas base en 4 cm en relación con el
La profundidad de las pinzas de contorno de caderas del patrón.
la cintura varía en función de las Tire esta línea con regla.
diferencias entre el contorno de Dibuje luego a mano la curva de
cintura y el contorno de cade- las caderas teniendo en cuenta
ras. las medidas que habrá señalado
La diferencia media entre estas antes (cadera alta y cintura) tan-
dos dimensiones representa nor- to para la delantera como para la

malmente 30 cm; se los absorbe espalda.

95
la falda plisada

Un plisado a mano es

largo, difícil de realizar y


aguanta mal la plancha.
Vale más confiar este
trabajo a una casa
especializada porque el

pliegue a vapor es
indeformable.
Sucede frecuentemente
que la tinta de la tela

cambia bajo la acción del


fuerte calor necesario
para obtener un plisado
indeformable. Si quiere
completar con
la falda

una blusa o una marinera


del mismo tejido,
dígaselo a su plisador: él

le aconsejará y hará lo
necesario para evitar la

diferencia de tinte. /

96
BASE DE PLIEGUE

PLIEGUES PLIEGUE
TUMBADOS AHUECADO
Croquis 1

Para pliegue de 3 cm
se necesitan 9 cm de tela

La preparación de la tela El montaje de la falda


— Cualquiera que sea el modelo Cierre el rectángulo plisado sobre
del plisado, tome como anchura de el lado izquierdo; para ello recons-
tela 3 veces el contorno de caderas tituya el ritmo de los pliegues para
(croquis 1) más la holgura (o co- hacer invisible la costura: hilvane la
modidad), más la costura de cierre cabeza del último pliegue del lado
que tiene que ir disimulada en el de delante sobre la base del último
fondo del pliegue, más la cintura. pliegue del lado de la espalda; haga
Si no le da esa anchura los pliegues la costura en en el fondo
el interior

se le abrirán en las caderas, lo que de los dos pliegues dejando el espa-


le quita gracia a la falda. cio necesario para colocar la cre-
Para el metraje necesitará tres altos mallera o los automáticos.
de falda en 90 cm o 4 altos según A fin de obtener un montaje de fal-
su contorno de caderas. \ da bien ajustado a la cintura (enta-
— La tela que dé debe es-
a plisar llar) tiene que embeber la diferen-

tar preparada en forma de rectán- cia entre el contorno de cintura y


gulo; para ello junte los anchos en- el contorno de caderas.

tre sí con unas costuras abiertas. Divida esta diferencia por el núme-
Haga luego el dobladillo en todo el ro de pliegues: esto le indicará
ancho de la tira y lleve la tela a pli- cuánto debe montar cada pliegue
sar. sobre el siguiente (en general suele

97
Croquis 2 Croquis 3: Pliegues cosidos

bastar embeber unos milímetros La falda de


por pliegue). Según vaya realizan-
pliegues cosidos
do el trabajo váyalo sujetando con
un hilván (croquis 2). Si no ha con- Para cambiar la línea de esta falda
seguido una medida perfecta puede plisada, puede pespuntar cada plie-
apretar un poco el montaje en la gue en 8 ó 10 cm según la anchura
cintura por medio de un hilo de de los pliegues y la línea deseada
frunces, a condición de que no sea (croquis 3).
visible.
Planche ligeramente, por el inte-
rior, el fondo de los pliegues y lue-

go la cintura hasta la cadera alta.

Equilibre el redondo de la falda


por la cintura según las explicacio-
nes que hemos dado para la falda
base (véase p. 89).
Coloque la cremallera o los auto-
máticos.

98
la falda montada

Aquí trataremos no sólo de


la falda montada clásica

sino también de las


variantes que derivan de
ella, como la montada
escocesa, con todo el

encanto de su fantasía.
El inconveniente mayor de
una falda montada mal
concebida reside en la

tendencia que tiene a


abrirse al andar.
Para evitar este defecto hay
que hacer cruzar mucho la

falda en el interior y
respetar las pinzas de ajuste
de sentido.

99
Croquis 1

90 cm
Croquis 2 Se necesitan 3 largos de
falda en una tela de 90 cm de an-
cho.

El patrón
Parta del patrón de base de la falda
recta (véase p. 93), que permite lie-,

var rápidamente todas las señales


importantes sobre el patrón (cro-
quis 1). La espalda es la misma pa-
ra las dos faldas; para la delantera,
tendrá que realizar un pequeño tra-
bajo de adaptación. Conseguirá
con facilidad establecer los patro-
nes de los dos paneles disimétricos
de la delantera fijándose en el cro-
quis 1. Como Vd. puede observar,
hay que añadir 18 cm para el cruce
más 6 cm de montura a partir del
centro de la delantera.
Nota: le aconsejamos que la pri-
mera vez corte esta falda en una
percalina para evitar estropear tela.

100
El corte
Para cortar esta delantera de falda
compuesta de dos paneles diferen-
tes, tiene que hacer un corte abier-

to, es decir, no poner la tela en do-


ble como se suele hacer de ordina-
rio, sino que tiene que poner las
tres piezas del patrón sobre la tela

abierta (la espalda y las dos delan-


teras (croquis 2). Corte. Las pinzas
de ajuste serán las mismas que en el

patrón de base, las pinzas del panel


de abajo tendrán que concordar
exactamente con las pinzas de arri-
ba de la falda. Si sigue estas direc-
trices su falda no se abrirá.

El cierre de la cintura
Para realizar y montar la cintura
fíjese en la página 86. El ideal es
cruzar esta cintura continuando el

movimiento de la falda (la parte


montada sobre la inferior). Pero
para esto es necesaria una tela fina.

Si no debe terminar
es éste el caso Falda delantal
la cintura en el cruce de la montura
(cruzada a la espalda)
a la izquierda (croquis 4). Termine
esta cintura con capuchino aboto- Su patrón de esta-
es tan sencillo

nado (termine el bajo de la cintura blecer como de la falda clásica


el

después del botón, croquis 3). cruzada delante, pero el problema


Coloque un automático grande en es inverso. Hay que volver a partir

la parte inferior para cerrar la cin- del patrón de base de la falda recta

tura a presión. y conservar el patrón delantero


igual. Es el patrón de la espalda el
Nota: puede también pespuntear a que hay que transformar en panel
medio centímetro de los bordes de de espalda superior y un panel de
la cintura así como el exterior del espalda inferior: para ello haga las
panel montante. Una fantasía con- mismas modificaciones que para
siste en colocar otros dos botones los paneles delanteros, es decir, 18
debajo del de la cintura (coloque cm + 6 cm en cada panel (croquis
bajo los mismos dos automáticos). 1 y 2).

101
Croquis ")

Croquis 6

El montaje de cintura es mis-


La falda montada la el

mo que para la falda plisada nor-


escocesa mal (es decir, que los pliegues de-
La montada escocesa va mon-
falda ben montando unos sobre otros
ir
tada como la montada normal, con regularmente para embeber la dife-
pliegues en torno a la cintura y lle- rencia entre el contorno de cintura
va en el centro de la delantera una y contorno de cadera). Luego se
el
parte que termina en flecos; el
lisa cosen estos pliegues verticalmente
cierre se realiza por medio de dos
y junto al borde exterior en una al-
imperdibles grandes o mejor con tura de 8 cm (croquis 6). Para eje-
dos hebillas y un imperdible. cutar y montar la cintura vea la p.
En la tela escocesa de 90 cm de an- 86).
cho necesita un metraje de cuatro
altos de falda (croquis 5).
Para el plisado vea la explicación
de la falda plisada en la p. 97. Los
La falda larga
pliegues tienen 3 cm de profundi- La falda puede ser reversible, un
dad, todos a un hilo, reservando lado liso y el otro estampado, o de
para el último y el primer pliegue dos colores complementarios.
una profundidad de 9 cm para dar La abertura puede ir delante o de-
comodidad a la falda. Una parte li- trás.
sa de 18 cm a cada lado del plisado Sírvase de la tela que ha determina-
sirve para el cruce (croquis 6). do para la falda montada clásica y
Saque flecos al panel de arriba (de siga los consejos que le hemos da-
3 cm de largo). do a este propósito.

102
la falda a trozos

0=^

Larga y romántica en una


bella pana oscura, abierta
como una corola en una
tela ligera, la falda a trozos

se adapta a todas las


siluetas y permite todas las

fantasías.
Para una falda de mucho
vestirpuede incluso
hacerse una falda
multicolor a modo de
vestido arlequinado; basta
para ello entallar cada
panel en tela de color
diferente.
Croquis 1 Croquis 2

La confección Si la telaempleada no tiene rayas,


Esta falda se diferencia de la clásica
lo que siempre es preferible para
por un évasé más o menos acentua- una principiante, puede colocar los
do en el bajo; este évasé se establece patrones de los paneles uno contra
por medio de paneles estrechos en otro en sentido contrario (croquis

tablilla que se prolongan en bies 3 y 4) lo que permite una falda más


hasta el Todos los pa-
dobladillo. ancha con un mínimo de tela. Por
neles de la falda tienen la misma di- regla general se sacan dos o tres pa-

mensión; su número es variable pe- neles en una tela de 90 cm de an-

ro siempre par: 4, 6, 8 ó 10 paneles cho si se adopta esta disposición.


(o secciones). Pero en un ancho de 140 cm y en
caso de que su metraje no disponga
Se les puede equilibrar de dos mo- más de un alto de falda, no sacará
dos: tomando un panel como cen-
un évasé muy acentuado.
tro de la falda (croquis 1) o colocar Para comenzar, leaconsejamos que
los paneles a cada lado del centro
su primera falda a trozosla haga en
(croquis 2) lo que resulta más fácil.
una fibrana de 90 cm de ancho (sin
El évasé más o menos acentuado rayas) y que tome un metraje de 3
depende de la moda y también del altos de falda para remediar todos
metraje de que se disponga. los errores que pueda cometer.

104
Croquis 3: Plan de corte para una falda Croquis 4: Plan de corte para una falda
de 4 paneles en un ancho de 90 cm. de 6 paneles en un ancho de 90 cm.

CONTORNO DE CINTURA Croquis 5: Ejemplo de patrón para una


falda de 4 paneles; el principio es el
mismo para una falda de 6 paneles.

El patrón
Para establecer el patrón del panel
determine ante todo el número de
paneles. Una vez determinado el
número, tome su contorno de cin-
tura, de cadera alta, de la cadera
bajay divida cada una de estas me-
didas por el número de paneles.

Por ejemplo, para una falda de 4


paneles, divida su cintura por 4, su
medida de cadera alta por 4 y, otro
tanto, la de su medida de cadera
baja (croquis 5).

105
Las tresmedidas AB, CD y EF, se
llevan a un panel; luego trace una
línea recta que una ACE y otra que
una BDF; de este modo habrá ob-
tenido los dos lados del panel. Tra-
ce la línea de dobladillo a la altura
deseada y su patrón está termina-
do.
Esta falda no lleva pinzas porque el

ajuste se va haciendo en cada cos-


Croquis 8
tura: no se olvide de dejar el so-
brante necesario para cada costura.
Recorte este panel en varios ejem-
sa: planche las costuras abiertas y
plares (4, 6, 8, según el modelo
Trace todos los paneles haga lacintura (véase p. 86) y coja
elegido).
las faltas de la caída de la falda
abiertos comenzando por marcar
(véase p. 89).
sobre la tela los centros que deben
ser rigurosamente rectos (croquis 3

y 4).
Nota: para realizar bien una falda
a trozos hay que respetar la caída
de las rayas: los paneles no permi- Una falda larga
ten una mala caída. Es perfecta para la noche y
la falda

con un complemento de cuerpo


La ejecución bien escogido hará un conjunto
Una vez cortados los paneles, pre- completo. Hay que agenciarse 4 al-
pare cada uno de ellos colocando tos de falda para una tela de 90 cm
hilos de color: el centro al hilo de de ancho.
la telay la línea de caderas sobre el Su éxito depende de la justeza de
hilo de trama: estas líneas le servi- su évasé que no debe ser exagera-
rán de señales y deberán contor- do.
near horizontalmente la falda.
Una vez pasados los hilos deberá Nota: para darle un aire romántico
hilvanar los paneles entre sí. Prué- puede bordar un pequeño motivo
bese la falda para comprobar el en la cintura con hilos o con perlas
évasé y el contorno de cintura. Co- de cristal (croquis 6).

106
C

JN TRUCO PARA REALIZAR BIEN UNA FALDA LARGA


Este truco es divertido y tiene punto D a 8 cm detrás de sus
por objeto determinar el évasé talones.
de la falda. Póngase de pie, bien
estable sobre los dos pies y mi- A mano, trace el óvalo definiti-
rando el suelo desde arriba. vo por estos cuatro puntos. Mi-
Imagine el óvalo que formaría da con un centímetro la distan-
en el suelo el bajo de su falda cia A-C-B-D: esta medida re-
larga e intente reproducir el tra- presenta la anchura de su falda a
zado sobre una hoja de periódi- nivel de dobladillo. Reparta esta
co colocado en el suelo. Indique medida entre los diferentes pa-
en primer lugar el emplazamien- neles de la falda teniendo buen
to de sus pies. Marque luego a cuidado de respetar el hecho de
derecha e izquierda los puntos que A-C-B es mayor que A-D-
A y B; delante el punto C (casi B lo que se ve claramente en el
en la punta de sus pies) luego el croquis.

107
la falda al bies

Todo el encanto femenino


del estilo ligero se halla en
esta falda más o menos
amplia según el número de

pliegues. Su línea suave


tiene siempre buen porte y
realizada en una tela de
aspecto sedoso, podrá
hacer una falda larga
bien bonita.

108
Primer método
Es la falda al bies en toda su ampli-
tud: se puede realizar con una cos-
tura a cada lado o con una costura
única (en el primer caso puede cor-
tarse en un ancho de 90 cm pero en
elsegundo caso se requiere un an-
cho de 140 cm).

El patrón
Para establecer un patrón de una Croquis 1

falda al bies, basta con tomar para


la delantera de la falda una hoja de El trazo continuo indica los límites de un
X 90 cm; patrón de falda al bies en toda su ampli-
papel de 90 pliegue la
tud; el trazo punteado indica el de una
hoja según una diagonal (pliegue la
falda érase con amplitud reducida.
tela del mismo modo) derecho
Para el corte, doble la tela en dos si-
contra derecho e hilo contra trama guiendo la linea del bies pleno.
y esta diagonal le indicará el bies Para las mujeres que tienen caderas re-
(croquis 1). dondeadas, el exceso de pliegues se reducirá
por medio de costuras de costado y la falda
Trace la línea de cintura que tiene
se cortará en una tela de 140 cm de
que tener 1/4 de su contorno de
ancho.
cintura; ahueque ligeramente esta
línea de cintura sobre el pliegue;
marque un punto A a su altura de
falda partiendo de la línea de cintu-
ra y un punto B sobre el lado del
hilo y una estos dos puntos con un
arco; ésta es su línea de dobladillo.
Corte el papel siguiendo la línea de
cintura y la línea del bajo del do-
bladillo: tenga su patrón delante
(croquis 2).

Como la espalda es idéntica a la

delantera puede emplear el mismo


patrón; únicamente, puede escotar
un poco más la línea de cintura del
panel de espalda.

109
ORILLO AL HILO

Croquis 3: Colocación del patrón de la falda al bies en un metraje de


90 cm.

El montaje embebidos de los frunces antes de


Para un metraje de 90 cm de an- montar la cintura.
cho, necesita dos cuadrados de 90
cm, es decir, 1,80 m (croquis 3).
Segundo método
Coloque su patrón sobre la tela ex- Es el más sencillo y el más rápido

tendida y señale la espalda, luego la de realizar; se corta en diez minu-


delantera y la cintura. tos y en una mañana la puede pro-

Hilvane las costuras de los lados y bar, coser,poner el redondo y ter-


pruebe. Coja las faltas que haya minarlo. No
es menester cortar un

podido tener y cosa. Coloque la patrón; para este modelo, lo puede


cremallera en el cierre del costado, trazar directamente sobre la tela
compruebe el redondo del dobladi- puesta en doble derecho con dere-
llo y ponga una cintura montada cho (croquis 4).
(véase p. 86). Trace una línea igual a su contorno
de cintura dividida por dos y ar-
Nota: una falda entallada al bies quee un poco la línea de cintura.
no necesita pinzas; a aquellas que A partir de esta línea de cintura,
tienen la cintura delgada y las ca-
indique su alto de falda, con el do-
deras anchas, les aconsejamos que
bladillo incluido y trace el redon-
embeban el exceso de amplitud de
do.
la cintura en la misma cintura.
Corte: tendrá una falda en un solo
Esto se hace por medio de dos filas panel (croquis5). Basta con hilva-
de frunces a uno y otro lado del nar esta costura y probar, colocar
hilo de cintura. la cremallera, montar la cintura,

Apriete estos hilos sobre las di- hacer el redondo del dobladillo y
mensiones de la cintura delante y coserlo a punto escapulario (véase
detrás. Aplaste con la plancha los p. 190); la falda está terminada.

110
Croquis 4

Corte de una falda al bies en una


v un metraje de 140 cm.
sola pieza en

Croquis 5

La falda evase* punto C, prolongue esta línea has-


al bies
ta el bajo del dobladillo. Esta es su
Se trata simplemente de una falda
nueva costura del lado.
entallada al bies como la falda nor-
Para la espalda, sírvase del mismo
mal al pero cuyo pliegue exte-
bies
rior está abatido para quitarle am-
patrón que para la delantera. No
olvide arquear un poco la línea de
plitud y darle así una línea más rec-
cintura según su figura.
ta y más entallada (croquis 1).

El patrón El montaje
Tome patrón delantero que ha
el Proceda de igual modo que en la

hecho para la falda al bies (croquis falda al bies lo mismo para el corte
2). A 10 cm de la línea de cintura y como para el montaje (véase p. 110).
paralela a ella, trace la línea de la Un consejo nada más: No manipu-
cadera alta. le demasiado dos paneles du-
los
A partir del pliegue, tome una me- rante el montaje; en efecto las cos-
dida igual a 1/4 decadera alta y la turas de los lados no están ya al hi-

marque un punto C. Partiendo de lo sino al bies y al tirar la tela la

la cintura, una en línea recta el deformaría.

111
LOS VESTIDOS

Una aprendiz de costurera no puede atreverse con


todas las formas de vestido y antes de meterse con
complicados vestidos vaporosos o recortados, debe
ejercitarse en confeccionar modelos más sencillos,
largos o cortos, tales como el vestido recto, el vestido
canesú o el kimono. Elverano es el período de tiempo
más propicio a los ensayos gracias a los liberty, los
piqués, las cretonas, bordados ingleses,... que son
sinónimos de alegría, de frescor y de comodidad. Una
vez que haya obtenido éxito en sus primeros modelos,
podrá hacer los mismos modelos en telas más finas
sin que le invada el terror ante la idea de cortar telas
más caras que las precedentes.
el vestido recto

O-

El vestido recto, ideal para


todas las edades, es un
modelo clásico que, según
las telas y los estampados
elegidos, se adapta a todas
las circunstancias. No
presenta mayores
dificultades para un
principante y los modelos
que le proponemos aquí no
están cortados a la cintura.

114
El punteado indica
el patrón de base,
y el trazo continuo
las modificaciones.

El vestido
de escote barco
Le aconsejamos que lo realice en
una tela ligera de verano, algodón
rústico, tela de algodón. que hará. .

unos pliegues suaves en la cintura


si Vd. lo lleva con un cinturón de

fantasía.

El patrón
Tome su patrón de base de la de-
y lleve las líneas del escote
lantera
de hombros, de bocamanga, de
pinza de pecho, de cintura, de la
cadera alta, de la cadera baja, del
centro delantero y del dobladillo.
En el extremo de la costura del
hombro coloque un punto A' y so- Croquis 1

bre esta línea de hombro, un punto


A situado a 4 cm de A'.
Desde este punto A una la línea del
centro delantero con el punto B La ejecución
trazando una línea de costura del Para realizar este vestido en una te-

lado, una puntos C, base de la


los la de 90 cm de ancho hay que con-
bocamanga y D, extremo de la lí- tar con dos alturas de vestido.
nea de la cadera baja y prolongúela Doble la tela en dos en el sentido
hasta el dobladillo. del largo, derecho con derecho,
Establezca el patrón de la espalda ponga su patrón (croquis 2) y páse-
del mismo modo (croquis 1). lo, a la tela. Para el escote barco,

115
/
1

DELANTERA 1

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HA
ILoí ALUA
FSPAÍ j
1

'

' 1
/
1
1

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1 /

CINTURON
i

BOLSILLO
1 1

Croquis 2: Plan de corte. Se necesitan dos largos de vestido en una tela de 90 cm de ancho.

deje 3 cm de costura a contar desde


el trazado del patrón, lo que le

permitirá hacer un escotado muy


cuidado sin tener que doblarlo.
Cuente también otros 3 cm para la
bocamanga.
Corte el vestido.
Hilvane las dos costuras de los la-

dos, las pinzas del pecho, las cos-


turas de hombros en 4 cm.
Pruébeselo y cosa todas las costu-
ras. Compruebe el redondo y cosa
el dobladillo. Sobrehile las costu-

Croquis 3

El escote barco
Este cuello, no doblado, no necesi-
ta cierrepara poder pasar la cabe-
za. Ponga el vestido del revés, pre-
pare un pequeño pliegue de dobla-
dillo de 4 mm y cósalo (croquis 3).
Repliegue el dobladillo siguiendo
el trazado del escote. Abra las dos
costuras de los hombros y apláste-
las con la plancha al igual que el

dobladillo del escote.


Cosa el escote con la puntada de
dobladillo (croquis 4) para que las
puntadas resulten invisibles una
vez puesto el vestido del derecho.
(Punto escapulario). Croquis

116
La bocamanga
Recorte el bajo de la bocamanga y
prepare del mismo modo
la peque-

ña vuelta del dobladillo de cada


bocamanga con punto escapulario,
invisible por el derecho.

El terminado
Puede si quiere resaltar las mangas
y el escote con un pespunte; en tal

caso, hágaselo a 5 mm del borde.


Si desea hacer dos bolsillos, vea las

indicaciones de la p. 119.
Lleve con este vestido un cinturón
fino de cuerpo de tono distinto o
confecciónese Vd. misma un cintu-
rón de tela (véase p. 123).

El vestido abotonado
Vestido de verano por excelencia,
el vestido abotonado es muy apto Croquis 1
para ponérselo sobre el traje de ba-
ño al ir a la playa o a la piscina. Lo rantes de delante y detrás la misma
hará en un algodón ligero. anchura.

La ejecución
El patrón
Sobre la tela plegada en doble, de-
Tome el patrón de base de la de-
recho con derecho, coloque los di-
lantera y traslade todas las indica-
versos trozos del patrón y corte
ciones. Modifique el escote y déle
(croquis 2).
la profundidad deseada (croquis 1).

Partiendo del centro de


Hilvane las costuras de los costa-
la delante-
dos, de los hombros y las pinzas
ra, añádale 10 cm y trace una línea
del pecho.
paralela para la montura.
La espalda es la misma del vestido Doble las monturas según la línea

base. de pliegue e hilvánelas.

Modifique simplemente el escote Pruébeselo, coja las faltas eventua-


teniendo cuidado de dar a los ti- les y cosa las costuras.

117
.
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DEL^^NTERA
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BOLSILLO ——-—Li
CINTURON
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1

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Croquis 2: Plan de corte. Se necesitan dos largos de vestido en una tela de 90 cm de ancho.

El terminado
Para realizar el cierre del vestido
(croquis 3) proceda lo mismo que
en el vestido recto (véase p. 92) y
coloque los botones de fantasía y
los automáticos que aseguran el
cierre del vestido. Póngale dos bol-
sillos plastón (véase la figura
adjunta).
Termine el cuello y las bocamangas
como hemos indicado más arriba.
En vez de la simple entradita le
puede poner una «vista» (véase p.
78).

Nota: Vd. puede modificar sensi-


blemente este modelo reemplazan-
do botones y automáticos de cierre
por una gran cremallera de plástico
escogida en el color dominante del
vestido.

En aconsejamos lo mis-
este caso le
mo que para los botones, es decir
que no lleve el cierre hasta el bajo
del vestido. Deje que el vestido se
abra al andar en unos 20 ó 30 cm
según el largo que tenga. Croquis 3

118
Croquis 1. Pespuntes y formas de bolsillo.

m
Croquis 2 Croquis

LOS BOLSILLOS PLASTON


Croquis

Los bolsillos plastón o aplica- del bolsillo y repliegue la costu-


dos, lo mismo son rectos co-
si ra sobre la tela, hilvane con pa-
mo si son en pico o redondea- sada larga (croquis 3).
dos, deben estar bien prepara- — Ponga el forro en las mismas
dos puesto que se aplican sobre dimensiones que el bolsillo, hil-
el vestido, la túnica o la falda, vane las vueltas y luego aplique
una vez que la prenda está ter- el forro sobre el bolsillo, revés
minada. con revés (croquis 4).
Corte el bolsillo en la forma de-
seada dejando un trozo para su
— Cosa a pequeña puntada de
lado.
dobladillo de costura, en todo
su contorno.
— Sujete el bolsillo con alfileres

Pase un hilván sobre el trazado en el lugar del vestido delimita-

exacto del patrón del bolsillo y do por los hilos de hilván e hil-

ponga en bies los ángulos (cro- vánelo.

quis 2). — Elija un hilo para pespuntear


— Para la entretela del bolsillo, en tono distinto y cosa el bolsi-
recorte la forma del mismo en llo cerca de los bordes. Según su

las dimensiones que va a tener preferencia doble o triplique el


una vez terminado. pespunte que tendrá así un efec-
— Ponga la tela sobre el revés to decorativo.

119
o
El vestido largo
El vestido largo entallado es muy
favorecedor porque alarga la silueta

y la hace más estilizada. Existen te-


las bonitas con motivos geométri-
cos o figurativos que dulcifican su
severidad.

El patrón
Es sencillo de hacer.
— parta del patrón de base de la
delantera y prolongue las líneas del
costado y del centro en función de
su estatura y de la moda (vestido
largo hasta el suelo, hasta los tobi-
llos...);
— añada 5 cm en el ancho a partir
de la línea del centro para la mon-
tura (croquis 4).
Para el patrón de la espalda, pro-
longue del mismo modo la costura
del lado (croquis 4).

120
La ejecución
Para realizar este vestido en una te-
la de 90 cm de ancho tendrá que
disponer de dos altos de vestido.
Realizará el cuello «oficial» en los
sobrantes de la tela. Proceda tal co-
mo hemos indicado en el vestido
recto abotonado por delante.
Una vez que haya cosido las costu-
ras de los lados y las pinzas del pe-
cho y haya hilvanado las monturas,
termine las bocamangas. Prepare el
cuello de «oficial» (véase p. 171) y
colóquelo sobre el vestido (véase p.
174). Monte la cremallera (véase p.
71).
Compruebe el redondo. Croquis 4

121
Una variante, cione dos ojales verticales (véase p.
187) situadas a ambos lados del
la cintura de jareta centro (croquis 2).
Fácil y rápido de poner, la jareta
Vuelva el vestido del revés, colo-
permite marcar la cintura de un
que la jareta revés con revés, sujé-
vestido o de una falda; los ligeros
tela con alfileres e hilvánela si-
frunces que se forman al recoger la
guiendo las señales de la línea de
anchura de la cintura del vestido le Cosa
cintura (croquis 3). la jareta y
dan otro aire.
quite los hilvanes.
En la versión que le proponemos,
hemos optado por un lazo, anuda-
El lazo
do que corre en la jareta pero exis-
Para la cintura anudada provéase
ten otras muchas posibilidades y
de un rectángulo de tela de 4 cm de
puede Vd. si lo prefiere sustituir el
ancho y de un largo igual al doble
lazo por un elástico (o dos gomas
de contorno de cintura. Doble este
elásticas separadas por una costura
rectángulo en el sentido de la an-
a máquina).
chura, derecho con derecho, hilva-
ne, luego cosa la cintura en toda su
La jareta longitud y cierre uno de los dos
Para entallar, tome la pieza corres- extremos (croquis 4). Con la ayuda
pondiente del patrón o mida sobre
de una tiza recorra toda la cintura
las diferentes piezas de la espalda
y por el derecho y cierre el otro ex-
de la delantera el largo total corres- tremo con pequeña puntada.
pondiente al contorno de cintura En uno de los extremos, fije un
aumentado en 4 cm para la costura.
imperdible y meta la cintura por la
Deje también 5 mm en cada lado jareta por uno de los ojales para sa-
para la doblez. Cosa los dos extre- carlo por el otro ojal (croquis 5).
mos de la jareta para cerrarla (dere-
cho con derecho) y luego aplane la
costura con la plancha. Vuelva la Nota: como detalle bonito, puede
jareta del derecho, prepare las terminar cada extremo de la cintura
vueltas y pase el hilván (croquis 1). en lazada doble. Corte la tela que
En la delantera del vestido, confec- sobra al ras de la lazada.

122
Croquis 3 Croquis 5

PARA HACER UN CINTURON DE TELA

Muchas veces preferirá Vd. ha- Termine en cuadro o en capu-


cer Vd. misma un cinturón para chino una parte del cinturón y
marcar el talle de su vestido y una hebilla en el otro extremo.
hacer un bonito lazo de fantasía. Si la hebilla es de punzón, ten-
drá que preparar unos ojeteros a
Se prepara lo mismo que la cin-
tura de lazada doble.
punto de festón para asegurar el
cierre. Pero existen muchas he-
Determine simplemente el alto billas sin punzón y con ellas se
que desea dar a la cintura y cor- simplifica la preparación del cin-
te en función de esta dimensión.
turón.
Para que la cintura tenga cuer- Puede pespuntear con un hilo
po, aconsejamos que antes de
le de color sobre el derecho del
coserla, intercale entre las dos vestido a unos milímetros de los
telas una tira de Vliselina. bordes de la cintura.

123
el vestido
de canesú

Un canesú puede modificar


enteramente el estilo de un
vestido. Puede estar situado
en la delantera y en la

espalda del vestido o sólo


en una de las partes. El
canesú puede ser
rectangular o redondo pero
el rectangular es el que
ofrece mayores facilidades
de ejecución para una
principante. Se pueden
desarrollar diversas
posibilidades. Nosotros le
vamos a proponer la más
sencilla.

124
El punteado indica
elpatrón de base,
y el trazo continuo, el patrón
del canesú

ESPALDA DELANTERA

roquis 1

La confección — coloque una ligera pinza sobre


Conviene notar que el canesú tiene el borde del canesú antes de su
que quedar siempre 5 cm por enci- unión con la bocamanga; puede te-
ma de la pinza de pecho y pasar 5 ner de uno a dos centímetros y me-
cm debajo del extremo de la boca- dio de profundidad (croquis 1);
manga. Si no tiene en cuenta estas — marque todos los trazos útiles
normas hallará dificultades para se- sobre el patrón de base (cuello, bo-
guir adelante. camanga, hombros, centro delante-
ro); párese en el trazo horizontal
El patrón del que hemos hablado anterior-
Partiendo de su patrón de base, es- mente;
tablezcael del vestido de canesú; el — ejecute las mismas operaciones
cuerpo del vestido no ofrece difi- para el canesú excepto la pinza a
cultad porque consiste en un sim- nivel de la bocamanga. Esta última
ple rectángulo. puede serle útil durante la prueba;
— sobre la parte superior del pa- entonces la podrá realizar en los
trón de base de la delantera tire un dos centímetros y medio de vuelta
trazo horizontal a la altura deter- previstos parael pespunte y los re-

minada por el canesú; toques (véase el corte p. 126).

125
45 cm
Se necesitan 2 larg
de canesú + 2
largos de vestido
en una tela
de 90 cm de anch

El corte
Coloque el patrón sobre la tela
puesta doble y corte los dos ca-
al

nesús dejando una entrada de 2 cm


y medio para hacer un pespunte o
un retoque. Corte luego el cuerpo
II CONTORNO DE CADERAS
del vestido después de haber traza- 5 CM DE COMODIDAD
do el semirrectángulo necesario pa- O
ra su confección en la tela doblada.
Q
H
Las dimensiones totales serán equi-
valentes a su contorno de caderas,
más la comodidad (véase p. 21)
más 10 cm para los frunces (lo que
supone 5 cm para cada semirrec-
tángulo), más una entrada de 2 cm
del lado opuesto al dobladillo en
caso de que tuviera que coger faltas
(croquis 2).

El montaje
Pase dos hilos de frunce en el ex-
tremo superior del cuerpo del ves-
tido (debajo de la entrada de 2 cm),
luego lleveel ancho del rectángulo

alancho del canesú sea frunciendo


de un extremo a otro, sea agrupan-
do los frunces a la altura de los se-
nos (croquis 3).
Aplique el canesú sobre el vestido,
centro con centro y sujételo con al-
fileres.

Iguale los frunces. Ajuste el ancho

del vestido con el ancho del cane-


sú. Hilvane, pruebe y coja las fal-
tas. Croquis 2

126
Croquis 3

Los remates pespuntear todo el contorno del


Si tiene previsto un cuello «dego- canesú a medio cm de los bordes.
llado» con una simple abertura de- Nota: Si desea un vestido de cane-
proceda como hemos indica-
lante, sú muy fruncido y cuya forma ge-
do en la p. 72. Si ha previsto una neral será por lo tanto de «trape-
cremallera en la espalda consulte cio», tiene que dejar el rectángulo
las pp. 71 y 77. Monte las mangas del cuerpo del vestido mucho más
si las tiene (véase p. 62). Puede largo.

127
UN VESTIDO DE CANESU
CON MANGAS KIMONO
Es muy simple de realizar por- tido del ancho, este rectángulo
que basta sustituir el canesú del constituirá los canesús delantero
vestido que acabamos de descri- y de espalda. Le bastará con re-
bir, por un rectángulo de tela cortar un cuello (véase p. 77), con
cuya longitud será igual a dos cerrar en cada lado con una costura
largos de manga más un ancho de cada manga y proceder al
el bajo

de cuello y cuyo ancho será montaje del vestido como se lo


igual a dos anchos de canesú. hemos indicado en la pág. 126.
Doblado por la mitad en el sen-

128
el vestido
de kimono

El término kimono es ya
por sí solo muy evocador
y hoy en día estamos ya
familiarizados con este
estilo de vestimenta de una
línea extremadamente
simple. El único
inconveniente de esta forma
podría provenir de la falta

de comodidad en las

mangas, lo que a veces se


traduce por tirones bajo el

brazo. Por eso le

aconsejamos que no tome


las medidas demasiado
porque este vestido
justas,

hay que llevarlo amplio.


45 cm
DOBLADILLO Se necesitan 2 largos
de vestido para
realizar este modelo
en una tela de
90 cm de ancho.

La confección
Establezca un patrón siguiendo el

croquis y colóquelo sobre la tela


1

puesta en doble derecho con dere- HOMBRO


cho. Marque con tiza la línea de
hombros y trace el perímetro del
vestido, cuello incluido. Se puede
servir del patrón de base para di-
bujar el cuello.
No olvide de dejar unos 10 cm pa-
ra la comodidad pecho y
a nivel del
de las caderas. Pase con puntada
sastre los hilos de centro, de hom-
bros y del dobladillo. Una vez pa-
sados los hilos abra la tela.
Coloque la tira sobrepuesta para el

cuello (véase p. 77). Junte las cos-


turas de los costados y mangas con
alfileres. Hilvane, pruebe. Cosa y
remate el dobladillo.

Nota: Si no le hace abertura por


delante para meter la cabeza tiene
que ponerle una cremallera en la

espalda. Croquis 1

130
EL VESTIDO DE
KIMONO LARGO
Fácil de ejecutar, tendrámangas r ú
más y un poco más «éva-
largas
sé» a nivel de los puños y será
más elegante si está abierto por
los dos costados o por uno sólo.
En este caso, hará una montura
de la misma longitud de la aber-
tura deseada sobre uno sólo o
los dos lados (véase croquis 2).
En el momento de las termina-
ciones y antes de hacer el dobla-
dillo rebájelo junto con lamon-
tura en el interior del kimono
con puntada de dobladillo. Croquis 2

UN VESTIDO O UNA TUNICA


Una principiante no debe pre- queñas diferencias entre una tú-
tender hacer juegos malabares nica o una blusa y un vestido, si

con el patrón. Sin embargo muy prescindimos de la largura. Una


pronto aprenderá a aprovechar vez que haya superado las pri-
todas las posibilidades que ofre- meras vacilaciones y, según su
ce una tela que presenta un mo- fantasía, cortará una túnica par-
tivo a centrar o rayas de efectos tiendo de un patrón de vestido o
muy bellos. Y en vez de cortar prolongará un patrón de blusa
una túnica, transformará su campesina para obtener vestido
proyecto inicial en vestido. saco.
En efecto, no hay más que pe-

131
VESTIDOS
EXOTICOS

A las mujeres modernas les seducen los vestidos

suaves y de gran colorido que encuentran al azar en


los sitios soleados en los que pasan las vacaciones:
adoptan Jos vestidos largos y también las capas y
ponchos para proteger sus hombros del frescor de
ciertas noches estivales.
Estos modelos son, por lo general, muy sencillos de
realizar en algodones fáciles de cuidar y no es raro
que los use toda la familia, como por ejemplo la
chilaba, que puede servir de bata de casa al hombre, a
la mujer o a un niño.
el poncho español

Esta vestimenta
de origen español,
usada por los
gauchos de ^
América Latina
y por los mexicanos,
consta de una manta o un
paño tejido a mano y en el
que se ha practicado un
agujero para meter la
cabeza.
Sus colores son vivos, sus
dibujos geométricos y muy
decorativos. Su originalidad
y la sencillez de su
ejecución le han hecho
célebre; hace el papel de
un echarpe o de una
prenda de abrigo para las

noches frescas en la

montaña o en el campo.

134
Plan de corte: para un modelo en punta, siga el contorno de trazo continuo;
para un modelo redondo siga el contorno punteado.

La confección Haga una entrada en todo el con-


Puede hacerlo en pico o en redon- torno en el que sacará flecos o un
do; el poncho en pico alarga la si- galón escogido.
lueta. De todos modos, siga el plan Si la tela es extensible, es mejor no

de corte que le indican las propor- hacer corte de abertura porque


ciones que hay que dar. Puede uti- bastará el agujero normal para el
lizar un jersey de lana o una tela paso de la cabeza.
más sofisticada; pero para evitar
dos costuras, una sobre la delante- Nota: Vd. es delgada haga la de-
si

ra y otra sobre la espalda es prefe- lanteray la espalda iguales, si no,


rible tomar un metraje de 140 cm dé un poco más de largo en la de-
en una tela de 140 cm de ancho. lantera.

135
la capa maorí

Esta capa
está inspirada
en la que llevan
los maorís de Nueva
Zelanda. Puede ir bien
con todos los vestidos

de verano; en general es

bastante corta. Escoja una


tela ligera que imite lana y
de un color que le vaya

bien. Con vuelta en otro


color tiene todavía más
carácter.

136
Croquis 1: Plan de corte:
Se necesitan 4 largos en una tela de 90 cm de ancho, es decir, 3,60 m.

CUELLO TERMINADO
80 CM DE LARGO, 4 CM DE ANCHO

El patrón La confección
Siguiendo el plan de corte, prepare
Tome una tela que tendrá 4 veces
el alto de la capa, doble la tela en el
su patrón semiespalda y semidelan-
sentido de largura y corte la es-
la
tera; marque la pinza de caída en la
palda y la delantera. Pase los hilos
costura del lado (en la capa se la
de marca. Junte ambas semiespal-
situará a nivel del hombro).
das y una vez hecho esto, junte a
cada lado de la espalda una semide-
Dibuje igualmente la tira del escote lantera. Cosa y planche con las
que servirá de cuello (una vez ter- costuras abiertas. Corte la tira del
minada medirá 80 cm de ancho). escote.

137
Croquis 3

Los frunces — marque un punto de señal en el

y la tira del cuello centro de la espalda de esta tira;


— Apriete con dos hileras de frun- colóquela sobre la capa centro con
ces con un hilo puesto al doble (no centro y derecho con derecho con
los ate con nudo). un alfiler;
— Pase un hilo de color en el cen- — ate ya los hilos de frunce de la

tro de la tira del escote en el senti- capa en el mismo largo de la tira,

do de este último (croquis 2). Uno es decir en 80 cm y reparta los


de ellos le servirá de marca para frunces en la delantera y en la es-

montar la tira sobre la capa, el otro palda dejando unos pocos menos
lepermitirá dar la vuelta a la tira en los hombros; hilvane fuerte-
limpiamente hacia el interior; mente (croquis 4);

138
— cierre la tira en los dos extremos
que corresponden a la delantera de
la capa doblando un poco hacia

dentro en cada extremo;


— cosa la tira a la capa y luego si-

guiendo el hilo flojo rebájela sobre


el interior de la capa (croquis 4);
— haga una entrada siguiendo el hi-

lo previsto para este efecto y cosa


/ .' DERECHO la tira sobre el revés de la capa con
Croquis 4 discretas puntadas de lado. Cosa
los dos extremos de la tira del cue-
llo con puntada larga.

El acabado
Compruebe el redondo de la capa.

Hilvane un dobladillo.
Sobre el derecho de la capa, colo-
que con puntadas invisibles, un ga-
lón de flecos siguiendo la base de la
tira del escote (croquis 5).

Croquis 5 El forro
Si decide poner forro a su capa
corte y monte las diferentes piezas
igual que la prenda misma, pero
¡ojo! el escote del forro debe intro-
ducirse en la tira del escote antes
de rebajar ésta en en el interior.

139
la chilaba

La chilaba nos viene de


Africa; pero ya ha llegado
a ser parte integrante de
nuestro guardarropa, tanto
como prenda de casa como
de calle para verano. El
vestido que le presentamos
aquí tiene bocamangas bajas
y su adorno consiste en
diversos galones realzados
con perlas de madera. Si
quiere hacer una chilaba
para su marido o su hijo,
suprimirá evidentemente los
galones y las perlas y le

pondrá dos lazos a la


altura del cuello de modo
que lo cierren con un
nudo.

140
Croquis 1 DOS Croquis 1 DELANTERA

llo para indicar la costura del lado;


El patrón — prolongue línea de hombros
la
Sirviéndose de un patrón de base,
en cm (punto
5 F);
confeccione un patrón sobre papel
siguiendo el croquis 1:
— a partir de este punto de hom-
bros, trace una línea hasta el hueco
— prepare la delantera trazando la de la sisa del patrón de base; esta
mitad del ancho de base del ves- línea debe medir 13 cm; marque
tido, o sea, 36 cm. con un punto F la intersección de
— trace una línea de bocamanga esta línea con el hueco de la bo-
(punto E) hasta el bajo del dobladi- camanga;

141
Croquis 3. Plan de corte
Se necesitan 2 largos de tela -Y 1 largo
de manga para un tejido de 90 cm. de anchura.

— prepare la espalda del mismo


El corte
modo.
— dibuje la manga siempre según
— Coloque las diferentes piezas
del patrón sobre su tela plegada en
un patrón de base; quite 7 cm en
doble derecho con derecho (cro-
la cabecera de la manga; represen-
quis 3);
tan, por un lado, los 5 cm añadidos
— corte;
al cuerpo del vestido y, por otro,
— pase los hilos flojos;
los 2 cm que sirven al redondo del
— hilvane y cosa;
brazo en un montaje clásico (la
bocamanga base para este modelo
— consolide bajo el de la boca-
manga con una tela adhesiva en el
implica un montaje plano, es decir,
punto F'y píquelo con la tijera;
sin frunces en
manga);
la parte alta de la
— hilvane las mangas, y verá que
su montura forma un «fuelle» que
— tire dos trazos horizontales de
compensa la falta de comodidad de
A a B y de C a D; redondee muy
una bocamanga baja.
ligeramente la línea AB, que debe
medir 40 cm (croquis 2);
— trace ella manga que
bajo de
debe corresponder al bajo de la
bocamanga del vestido, es decir,
que AC y BD = FE.

142
El acabado
Coloque la tira sobrepuesta del
cuello (véase p. 77) y de cierre.
Haga los dobladillos. Este adorno
se hace directamente sobre el vesti-

do hilvanando los galones unos


junto a otros en todo el contorno
del cierrey del cuello y cosiéndolo
con hilo del mismo tono. Los bo-
tones, si los lleva, se cosen después
de coser los galones (u otro tipo de
pasamanería).

Nota: este estilo de vestido se lleva


con o sin botonadura; si va a po-
nerle alguno, utilice presillas y pe-
queños botones redondos y forra-
dos que hará forrar en una merce-
ría.
el vestido afgano

No sólo es el vestido ideal


para los momentos de |

relajación sino también un


vestido elegante para recibir
a las amistades lo mismo
para una cena como para
una velada. Ejecutado en
una tela lavable y suave, se
utiliza también como bata

de casa: la señora de la

casa puede así ocuparse


de las labores de casa y
recibir a las visitas
inesperadas.

144
Croquis 2. Para una cintura de 1 m 65 cm, se

necesitan dos largos de 1 m 40 20 cm para el

cin turón.
60 cm

La confección
Este vestido consiste en un gran
rectángulo de tela plegada en dos.
El círculo del cuello constituye el

único recorte a realizar. Es preferi-


ble servirse de una tela de 1,20 de
ancho a fin de no tener que realizar
una costura en el centro de la pren-
da.

Plan de corte en El corte


una tela de 120 cm No se necesita un patrón (a no ser
de ancho que sea Vd. una principiante), siga
el croquis 2 y el plan de corte (cro-

quis 1) para trazar todas las líneas

145
con tiza (en el revés de la tela pues- El ensamblaje
ta en doble) y luego corte. Doble la tela en dos, derecho con
derecho, siguiendo la línea de la es-

El «cinturón» palda. Hilvane uniendo la delante-


Lo puede hacer de 20 cm de ancho ra y la espalda. Siga la línea AB-
por 8 cm de alto. Córtelo en una BC, luego hilvane el otro lado si-

tira de tela de 42 18 cm. Dóblelo guiendo la línea de hilván DE-DF.


en dos y cosa el rectángulo obteni-
do por el revés en los dos lados, Las terminaciones
vuelva y termine el otro lado a ma- Abra la espalda para colocar la cre-

no. mallera y cósala.


Pespuntee el cinturón sobre la de- Cosa la tira sobrepuesta del cuello
lantera del vestido sólo en los dos (prevista en un forro del mismo to-
extremos (croquis debe colocar-
2), no que el vestido) y haga una en-
se bastante arriba para que le dé trada.
gracia al vestido. Nota: Puede redondear el bajo del
En el interior del vestido y a am- vestido (véase el punteado del cro-
bos lados del cinturón sujete un la- quis 1); en este caso la tira de so-
zo a nivel de los pespuntes. brepuesto para el cuello la cortará
Una vez puesto el vestido, anude de los sobrantes de las cuatro es-
los dos lazos a la espalda a nivel de quinas que juntará a fin de obtener
la cintura lo que ajustará la delan- la tira necesaria para doblar el cue-
tera del vestido al cuerpo. llo.

146
la túnica mejicana

Los mexicanos usan mucho


esta túnica, de origen
indio, hecha en tejidos
fabricados a mano.
Es poco probable que
pueda disponer cíe una tela
similar, pero también puede
crear una interpretación
personal inspirada en esta
prenda tradicional. Se le

ofrecen dos posibilidades: o


escoge una tela de anchas
rayas sobre la que coserá
un galón unido de un tono
complementario o si lo
prefiere, escojauna tela
unida realzada con galones
multicolores.
En ambos casos, esta
túnica, que se mete por la

cabeza y que no lleva


cierre en los costados,
reemplazará a una capa.

147
45 cm
Croquis 1

Plan de corte.
Se necesitan 2 largos
de túnica
en una tela
de 90 cm de ancho

H
La confección
No tiene utilidad el patrón; trace
las líneas de corte sobre la tela
puesta en doble sirviéndose del
plan de corte, luego:
HOMBRC
— corte y pase de marca
los hilos
de color (hombros y centro);
— haga su cuello (véase p. 78) y
corte la tela en la altura necesaria y
según sus gustos para meter la ca-

beza.
Nota: Para realizar esta túnica,
que no está cerrada por una costu-
ra de lado, comprar una tela que
tenga buena caída.

Los galones
36 cm 9 cm — Coloque primero galón el tiran-
te,hilvane (croquis cosa; 2),
— haga por derecho una entrada
el
| de algunos milímetros alrededor de
todo el rectángulo obtenido (por lo
tanto alrededor de toda la túnica),
hilvánela;
— hilvane el galón del borde sobre
BORDE
riRANTE
TIRANTE

BORDE
la entrada, cósalo (de este modo la

' entrada de la tira sobrepuesta que-


.ON da oculta por el galón).
GALON GALON
GALON

GAl

El acabado
Cosa a puntadas cortas un galón fi-
no unido a todo alrededor del cue-
llo. Debe prever una longitud sufi-

\ ciente a cada lado para poder anu-


Croquis 2 dar el galón.
el poncho chileno

Libre por los costados, se


entra por la cabeza y
protege los hombros en los
atardeceres frescos.
Relativamente corto, este
poncho unisexo es
agradable de llevar por su
forma poco común.
Para su confección, escoja
una tela rayada o unida y
preste una atención especial
al material que servirá de
encuadre; de todas formas,
este material tiene que ser
idéntico al del poncho
mismo.

149
El patrón — recorte el encuadre en la tela

Siga plan de corte y establezca


el unida dejando un centímetro en to-
un patrón sobre papel respetando do el contorno;
las marcas indicadas para el centro — aplique el revés de este encuadre

del poncho, por una parte, y, por en derecho del poncho y haga
el

otra, para la tira de encuadre (cro- corresponder a A con A, B con B,


quis 1). etc;
— sujete con alfileres el encuadre

La confección haciendo la entrada de 1 cm luego


— Coloque el patrón sobre la tela hilvane sobre los alfileres con pun-
puesta en doble, derecho con dere- tada corta;
cho, y trace una línea por el con- — cosa con pasada larga sobre el

torno ABCDE; hilván.


— coloque el patrón del encuadre
y trace la línea A'B'C'D'E';
— abra la tela y lleve las mismas
El forro
Aplique el forro sobre el poncho,
medidas a la otra parte;
— pase los hilos de centro y de los
derecho con derecho, e hilvane so-
bre el hilo de color que delimita
hombros y corte;
— corte ABCDE;
el forro sirviéndose del

patrón del poncho y dejando 1 cm


— cosa a todo al rededor pero deje
una abertura de 15 cm para poder
en todo alrededor; marque con un
dar la vuelta a la prenda.
hilo de color los puntos A, B, C,
D, E, que corresponden a los del

poncho. El acabado
Déle vuelta. Abra la tela y su forro
El encuadre a lo ancho (en la línea de hombros)
— Coloque el patrón del encuadre para pasar la cabeza (croquis 2);
sobre la tela puesta en doble y tra- Cosa el forro a puntada corta en
ce el contorno ABCDE y A'B'C- torno al cuello en la abertura que
'D'E'; dejó antes.

150
151
LAS BLUSAS

Hay muchas mujeres que sienten ganas de coger unas


para cortar una falda o un vestido que han visto
tijeras

a una amiga, pero rara vez tienen el mismo reflejo

cuando ven una blusa. En efecto, la biusa, que es un


detalle de vestimenta que no se debe descuidar, suele
ser o muy barata o muy complicada de realizar. Esta
es la razón por la que aquí proponemos a las princi-
piantes unas blusas sencillas, fáciles de hacer bien y
que, como esa que presenta bocamangas americanas,
«hacen buena impresión» y que cuestan poco dinero
y pocas horas de trabajo.
la blusa campesina

Esta blusa, de inspiración


campesina, ampliamente
escotada, y con mangas
raglán puede conservar su
estilo rústico si está
realizado en algodón, un
satinado o en un tejido
liberty; si la realiza en un
tejido brillante o lacado
tomará un estilo más
sofisticado.

154
Las líneas punteadas indican el
patrón de base; las líneas llenas el
nuevo patrón.

51 cm

CI_NTUR_A_ _CTNTURA
JAUJAS TAREfT"

DELANTERA ESPALDA
JARETA
Croquis l

El patrón El emplazamiento de la jareta de la

Esta blusa va enjaretada en el cue- cintura se encuentra a 2 cm por de-


llo, en el talle y en los puños; para bajo de la línea de cintura del pa-
conseguir los frunces es menester trón de base.
ampliar el patrón de base (croquis
1). Tome elpatrón de base. Par- Haga el dibujo de la espalda por el

tiendo de él, dibuje el de la blusa mismo método.


en un papel.
En el croquis 1 indicamos el traza- La manga debe prolongarse en 2
do (en punteado) de este patrón de cm más o menos (para obtener 42
base: cuello y bocamanga: espalda, cm de ancho) de manera que deje
delantera y manga. El trazo conti- una costura bajo el brazo, de 1 cm
nuo indica el contorno del patrón de ancho. Dé el largo de manga de-
de la blusa. seado. Atención a la bocamanga:
Marque la línea del escote: variará estádeterminado por un trazo lige-
según la amplitud de escote que le ramente curvado partiendo de de-
quiera dar, pero por regla general, bajo del brazo y llegando a lo alto
será a 5 cm de la base del cuello. A de la manga que pasa a 3 cm por
títulode orientación, sepa que de- encima de la parte alta de la manga
be tener un contorno de 20 cm de del patrón de base. Está alto de
longitud; la altura del contorno de- manga, ligeramente redondeado,
terminará el emplazamiento de su debe tener 19 cm de ancho.
línea de escote. Las sisas de mangas son ligeramen-

155
te mayores que las de la blusa; esta
Hacen falta 2 largos
diferencia se reabsorbe en la costu-
de blusa 4-' largo de manga
ra del montaje.
en una tela de
90 cm de ancho
El corte
Doble la tela por la mitad. Dibuje
DELANTERA el contorno de las diferentes piezas
del patrón sobre la tela (croquis 2)
y corte.

La realización
Pase los hilos (véase p.45).
Hilvane las costuras de los costa-
dos y los bajos de las mangas. Jun-
te las costuras de las bocamangas
raglán.
Pase un hilo de frunces de prueba
por la cintura, por el cuello y por
los puños.
Haga la prueba para comprobar el
ESPALDA buen emplazamiento de las jaretas
porque son ellas las que determi-
nan el éxito de la blusa; regule los
frunces en elcuello añadiendo o
quitando a anchura del escotado
la

por las costuras de la bocamanga


raglán.
Para la jareta del cuello proceda
como sigue:
— ponga en plano los frunces del
cuello; los hilos pasados en la

prueba le indicarán la línea del es-


cote;
— haga una vuelta en el revés de 1

cm y medio y una entrada en ella


de 5 mmlo que da un dobladillo
de 1 cm a todo lo largo del cuello;
— pase un hilván sobre los dos
bordes de esta entrada y cosa a to-
do lo largo de estos hilvanes;
— haga correr un lazo elástico en
Croquis 2 la jareta.

156
la blusa
de mangas
americanas

Esta blusa muy cómoda


por su parte y por sus
bocamangas que dejan
libres los hombros debe /

hacerse en un tejido suave


y ligero (muselina o
similar). \

Si desea un vestido de \

noche, haga en la misma


tela una falda larga recta,
évasé o al bies y obtendrá
un conjunto muy elegante.
El patrón

Sirviéndose del patrón de base, es-


tablezca el patrón de la espalda y
de la delantera de la blusa (croquis
!)•

Coloque la delantera del patrón de


base a 4 cm del borde del papel.
Reproduzca con tiza el contorno
dei patrón.

Corra las medidas, es decir, alar-

gue 3 cm la costura de la delantera


trazando una línea desde el punto
A (situado a 10 cm por encima de
la cintura) hasta el punto B (en el

cuello) arqueando ligeramente la lí-

nea (croquis 1). Croquis 1

Trace los contornos; para ello res-


pete el arco de base del bajo del
brazo, luego una línea recta
tire

que pase por punto C en lo alto


el

de la costura de hombros. Conti- Hay que dejar pocos frunces en la

núe esta línea 5 cm más y marque espalda porque desfavorecen la si-

el punto D. Trace la línea del cue-


lueta haciendo una espalda redon-
llo DB (la línea punteada sobre esta deada: conserve la línea de cuello
línea curva indica el dobladillo de de espalda del patrón de base.
la jareta). El patrón de la delantera Si quiere poner tiras sobrepuestas

está listo. en la bocamanga (para una blusa de


mucho vestir) córtelas y si no, re-
Trace luego el patrón de la espalda
serve simplemente un dobladillo o
sirviéndose también del patrón de
una trencilla que se encuentra en
base. Piense en la abertura para pa-
todos los colores en los comercios
sar la cabeza.
especializados.
Trace la bocamanga redondeando
ligeramente la línea sobre el exte- El corte
rior a fin de respetar el arco de la Coloque las diferentes piezas del
espalda; pase sobre el hombro a 3 patrón sobre la tela puesta, orillo
cm de la base del cuello (punto E); con orillo. Corte igualmente, si

continúe 3 cm más a fin de reservar quiere tiras sobrepuestas de boca-


una entrada para la jareta (croquis manga, si no, solamente un dobla-
1). dillo (croquis 2).

158
Hacen falta
2 largos de
blusa en una
tela de 90 cm
de ancho

El montaje
Monte las costuras del lado y de la

delantera; pase un hilo de frunces


de prueba de centro de espalda a
centro de espalda a lo largo del
cuello.
Regule los frunces en función de su
conformación.
Después de la prueba afloje los
frunces del cuello para dejar la blu-
sa extendida. Pase la máquina por
las costuras. Coloque las tiras so-
brepuestas (véase p. 78).
Rebaje los sobrantes del cuello.
Compruebe con cuidado el contor-
no del hilo de frunces de prueba;
debe pasar exactamente a la base
del cuello y debe tener un trazado
regular. En su emplazamiento haga
dos costuras a máquina a 7 mm
de
distancia; entre estas dos costuras,
pase un cordón delgado que cerra-
rá el cuello frunciéndolo. Asegure
el cordón en cada lado con dos oje-

tes bordados que hará en la espalda


para hacerlo pasar (véase p. 78).
Coloque un broche.
Termine el bajo de la blusa con un
Croquis 2 dobladillo.

159
la blusa murciélago

Fácil de hacer y agradable


de llevar, esta blusa debe
realizarse en una tela muy
suave (jersey, rayón,...)
que realzará la originalidad \
de su corte sin exagerar su
amplitud.
Para darle la comodidad

necesaria no bloquee la
cintura con montaje fijo.
Termine la blusa en una
cintura de jareta y puede
reemplazar el cinturón por
un elástico.

160
70 cm

HILADILLO DE
CINTURA
DOBLADILLO

Croquis 1

El patrón —y 6 cm de dobladillo;
Como esta blusa se corta en «tela Lleve esta medida sobre la línea del
abierta», es decir,que la tela no es- centro delantero indicando el pun-
tá doblada por la mitad como suele to A'. Partiendo de esta 'línea de
ser habitual, estableceremos un pa- centro, coloque el semipatrón de
trón entero y no un semipatrón. base de la delantera e indique por
Tome un papel de 1,40 m, dóblelo un punteado la línea del costado,
en dos y luego otra vez en dos de de bocamanga y de hombro.
modo que tengamos un cuadrado
Tome la largura de brazo desde la
de 70 X 70 cm (croquis 1).
base del cuello hasta los puños pa-
Puntee la línea de pliegue horizon-
sando por el codo doblado; añada
tal que representa la línea de espal-
2 cm; lleve esta medida sobre la lí-
da y el pliegue vertical que repre-
nea de los hombros partiendo del
senta la mitad delantera.
centro delantero y marque un pun-
Calcule primero la altura de la de-
to C.
lantera del siguiente modo: v

— la altura desde el hombro (junto Desde este punto C trace, curvan-


al cuello) hasta el hiladillo de cin- do ligeramente la línea, el puño, de
tura marcado sobre el patrón de 15 cm de ancho y marque el punto
base; D. Añada 5 cm para el dobladillo
— añada 2 cm de caída (punto A); que servirá de jareta y trace una se-
— cuente 6 cm de altura de cintu- gunda línea C'D' paralela a la línea
rón enjaretado: del puño.

161
UK lA
Croquis 2

Sobre la línea de cintura, añada 2 Prolongue las distintas líneas de se-


cm a la cintura del patrón de base, ñal y dibuje el cuello teniendo cui-
marque el punto B y trace la línea dado de profundizarlo más en la
de cintura. parte delantera de la blusa.

Trace igualmente en paralelo la lí-


El corte
nea del bajo de cintura y la línea
la
Es preferible hacer esta blusa sin
del dobladillo (A'B'). Una por una
curva los puntos B'D' pasando por
costuras en un metraje de 1,40 m
de ancho (en una tela de 90 cm de
los puntos BD y así obtendrá la lí-
ancho tendrá que coger 4 altos de
nea del bajo de la bocamanga.
blusa y la blusa tendrá una costura
Sólo le resta recortar el patrón se- en el centro de la espalda y de la
gún el trazado del contorno y lue- delantera). Ponga el patrón exten-
go desplegarlo (croquis 2). dido sobre la tela y corte.

162
La realización luego cosa la funda en su centro
Hilvane las dos costuras de costado paralelamente a las otras dos costu-

y del bajo de la bocamanga y cósa- ras (croquis 3).


las. En el extremo de cada manga, Corte, según su contorno de cintu-
haga una entrada, hilvane el dobla- ra, más 2 cm (para la costura) y
dillo y cósalo dejando una abertura dos cintas elásticas de 2,5 cm de
para el paso de la tira elástica. Cie- ancho.
rre en seguida la abertura a punta- Introduzca cada cinta elástica en
das cortas. Prepare del mismo mo- una funda, luego cosa fuertemente
do el gran dobladillo de la cintura. entre sí las dos extremidades de ca-

Para permitir el paso de la goma, da cinta elástica. Cierre las abertu-


no cierre del todo una de las costu- ras que dejó en la costura de costa-
ras del lado. do. Iguale el conjunto de los frun-
Cosa los dos bordes del dobladillo, ces.

163
LAS
CHAQUETAS

Son prendas de entretiempo, de los primeros o de los


últimos fríos, con lanas más o menos espesas y en
consecuencia traen complicaciones de confección.
Pero hay chaquetas que se pueden realizar en telas
fáciles de trabajar como el jean, el algodón acolcha-
do... Por otra parte no todas exigen bocamangas
ajustadas, calculadas con una comodidad tal que se
pueda llevar un jersey sin que estorbe los movimien-
tos. Algunas se pueden llevar con camiseros o vesti-
dos de verano mientras que otras no llevan mangas y
pueden realizarse con la misma facilidad que una fal-
da.
el chaleco
sin mangas

Es agradable tener en el

propio guardarropa un
chaleco largo sin mangas:
menos caliente que una
chaqueta, más ligero que
un pullover, produce
bienestar y confort cuando
refresca el tiempo.
Así en las tardes de verano
lo podrá llevar sobre un
vestido ligero, en otoño
estará perfecto con un
pantalón y un jersey de
cuello vuelto.
Lo puede realizar en una
tela unida o de motivos. Si

la tela es de rayas o de
cuadros, este chaleco se
puede llevar sobre prendas
más severas y suavizará su
severidad.

166
4J cr

Se necesitan
2 altos de chaleco
en una tela
de 90 cm de
Croquis 1 ancho

El patrón
Puede realizarse en numerosos ma-
teriales y es práctico y fácil de ha-
cer. La única modificación que hay
que hacer al patrón de base es el
redondeo del chaleco que modifica
la delantera. Esta modificación
consiste en un trazo curvo que va
desde el cuello hasta la altura del
pecho donde se junta con el trazo
que indica el centro de la delantera.
Esta línea terminada en un arco se
inscribe en un triángulo de 10 cm
de lado (croquis 1).

ESPALDA
La realización
Coloque los patrones sobre la tela

en doble (croquis 2). Como este


chaleco lleva cordones, no necesita
ni dobladillo, ni montura, ni cos-
tura de bocamangas. Hilvane las
pinzas, las costuras de hombros y
de los costados. Pruébeselo. Cosa
las costuras y ábralas con la plan-

cha. Croquis 2

167
Croquis 4

La trencilla Calcule bien la distancia a la que


Se encuentran en los comercios ti- tieneque colocar la trencilla: es la
ras al bies de diferentes colores, mitad del ancho total de la trencilla
pero la más clásica es la de seda o (croquis 3).
la de lana de diferentes anchos. Pa- Hilvánela y luego cósala con pun-
ra colocar la trencilla tiene que tada de lado con un hilo de color
sujetarla primero con alfileres a to- acomodado. Luego, al volver la
do el rededor del chaleco a una dis- trencilla al derecho, los puntos de
tancia del borde igual a la mitad de lado hacen una bisagra natural y
la trencilla. Para estar bien, no tie- sólo queda coserla en el revés (cro-
ne que tirar ni fruncir. Si emplea quis 4) siempre con puntada de la-
una trencilla no tiene que realizar do.
ninguna entrada en los bordes. No aconsejamos coser esta tren-
le

Ponga la trencilla del revés contra cilla máquina. Le resbalaría la


a
el borde del chaleco al derecho. máquina.

168
la chaqueta
acolchada

Es para el tiempo fresco lo


que la chaqueta sahariana
para el buen tiempo, es
decir, la prenda
indispensable, práctica y
confortable que lo mismo
con un pantalón
se lleva
que con una falda de
sport.
La realizará en una tela

rústica o en un
almohadillado cosido, que
resulta a la vez ligero y
caliente.
Esta chaqueta requiere una
montura reducida y su
cuello militar le permite
cerrarse borde con borde
(chaqueta besada).

169
El patrón
El patrón de base se modifica sólo
en las bocamangas y en la cabecera
de la manga; el resto queda igual.
Tome patrón de base de la de-
el

lantera;prolongue en línea recta y


en siete centímetros el trazo del
hombro (punto A); marque una lí-
nea de manga de A a C, ligeramen-
te curvada; esta línea debe tener 15
cm y llega a B a 5 cm de la curva
de bocamanga del patrón de base;
marque una señal en este sitio y
continúe la línea hasta C como in-
dica el croquis 1.

Tome el patrón de base de la espal-

da. La línea de hombro se levanta


un centímetro para dar comodidad
al movimiento del brazo. Se pro-

longa también 7 cm. Trace la línea

de bocamanga de 13 cm de D a E.
Haga una marca a 3 cm del trazado
del patrón de base. Redondee lue-
go hasta F (croquis 1). Tome el pa- I

trón de base de la manga; tiene que I

quitar en la cabecera de la manga L___


los centímetros que ha añadido en Croquis 1

el hombro para mantener el equili-

brio de montaje (la línea BE tiene


que tener 15 cm en la delantera y
Sobre la tela doblada en dos en el
13 cm en la espalda para adaptarse
sentido de la largura, coloque el
la prenda) de un arco al otro (cro-
patrón como lo indica el plano de
quis 1).
corte (croquis 2).
Para el cuello militar coja un rec-
tángulo de 40 cm de largo y 10 cm
de alto, lo que dará un cuello ter-
El montaje
minado de 38 cm de cuello sobre 4
Prepare la prenda pasando los hilos
de marca.
cm de alto.
Monte mangas haciendo coinci-
las
El corte dir las marcas; habráque quitar en
Para un metraje de 90 cm de ancho B y en E pero sólo cuando esté se-
necesita tela por 2,60 m. gura de su montaje.

170
Croquis 3

Croquis 2.

Plan de corte.
Se necesitan 2 m 60
de para un metraje
tela 4
de 90 cm de ancho.

DELANTERA
La costura de arriba de la manga
está vuelta hacia arriba y podrá lle-
var pespunte; la de abajo quedará
recta sin que le abata la plancha.

El cuello
Prepare el cuello militar; doble la
tira del cuello en el sentido de la

longitud y pase los hilos de color:


— sobre la doblez del centro de la
tira en el sentido del largo;
— a 4 cm a ambos lados de este
pliegue, lo que le señalará la línea
de montaje del cuello y le evitará
ESPALDA
las arrugas o «bollos»;
— en el centro, y perpendicular-
mente a los hilos precedentes, para
indicar el centro de la chaqueta;
— en cada extremo, para indicar la
longitud del cuello y la marca de la

\
A
MANGA
costura a máquina (croquis 3). Ha-
ga esta costura lateral sobre el revés
del cuello; vuelva el cuello del de-
recho y proceda para el montaje
del cuello tal como se indica en la
p. 174. No se olvide de comprobar
la medida del escote que debe coin-
cidir con la del cuello.
Termine la chaqueta poniéndola al-
gunos adornos que se hallarán fá-
cilmente en los comercios y colo-
cando en todo el borde una trenci-
CINTURON
lla de tela rústica (para su montaje,
véase p. 168).

171
la sahariana

En verano en la costa, o
en la ciudad o en el

campo, esta chaqueta es

agradable de llevar porque


es ligera y va bien lo

mismo con un pantalón


como con una falda.
Para ser práctica debe ser
confortable y sencilla; la

realizará, por lo tanto, en


una tela ligera y aireada,
en fibrana unida o en
material sintético fácil de
cuidar.
Juegue con los pespuntes y
acentúe todas las costuras.

172
El patrón y el corte 2,50 m. Coloque las diferentes pie-

Parta del patrón de base y pase las zas sobre la tela puesta en doble en
modificaciones indicadas en el cro- el sentido de la longitud y corte las

quis 1 parados delanteras y las


las diferentes piezas (croquis 2). Pre-
mangas (el patrón de la espalda es pare un dobladillo de 5 cm para el

idéntico al de base; véase p. 30). bajo de la chaqueta.


Las costuras de los lados son rectas
pero prevea una comodidad sufi- El montaje
ciente para que la prenda le caiga Hilvane todas las costuras del
con suavidad sobre las caderas. La hombro, de los lados y de las man-
altura es generalmente de 70 cm. gas; pase un hilo de frunces en la
No olvide dejar una montura de 8 cintura para simular la jareta. Hil-
a 10 cm. vane la montura interior y la cre-
Para realizar esta chaqueta en una mallera. Monte las mangas y prué-
tela de 90 cm de ancho necesitará besela (véase p. 54).

173
Croquis 2

1
I

U
f

BOLSILLO igl

MANGA 1 J

JARETA

Un cuello fácil de hacer |

.
CENTRO
ESPALDA
Las medidas indicadas en el esque-
ma corresponden a un cuello del
38. Si las medidas de su cuello son
diferentes, aumente o disminuya el
largo del montaje por el centro de
espalda del cuello.
Mida el escote de la chaqueta; su
longitud debe corresponder exacta-
mente a la del cuello; si no, modi-
fique el trazado del escote (croquis
3).
BORDE DELANTERO
Vd. ha cortado el cuello, la parte
superior en una sola pieza y la in-
ferior en dos piezas (croquis 1).
Croquis 3 I

Junte las dos partes de debajo del


cuello, cosa y abra la costura con la
plancha. Vuelva el cuello del derecho, hilva-
En un adhesivo, recorte un bajo ne los tres lados ya cosidos y plan-
del cuello sin contar costura puesto che el cuello.
que, con ayuda de la plancha ca- Coloque el cuello sobre el revés de
liente, lo aplicará en el interior del la chaqueta (croquis 6) cosiendo
trazado de las costuras en el revés primero la parte de arriba del cue-
del bajo del cuello (croquis 4). llo.

Coloque dos cuellos derecho


los Vuelva la chaqueta del derecho y
con derecho y cosa en tres lados cosa el bajo del cuello con punta-
(croquis 5) «picando» los ángulos. das de lado, invisibles (croquis 7).

174
LAS CAPAS

Seductoras, prácticas, confortables... las capas, gra-


cias a su forma envolvente, dan un aire de seguridad
y de misterio.
La mayor parte de las capas requieren la capacidad

de una experta para su ejecución y más vale com-


prarlas que meterse a hacerlas sin tener la seguridad
de hacerlas bien. Las dos capas que proponemos
son tan agradables de realizar como de llevar; las
dos pueden realizarse en varias telas y para épocas y
circunstancias diversas.
la capa
poncho

De una gran
simplicidad de
corte y de ejecución,
puesto que se inscribe en
un círculo perfecto, esta
capa ingeniosa se puede
realizar en pocas horas.
Un redondo, dos
aberturas para pasar los
brazos y ya está.
Hecha en una tela suave
y brillante, será una capa
larga, elegante y original
para una fiesta de noche.
La puede forrar con la

misma tela para hacer


una capa reversible.
Si no desea ponerle forro

para que le resulte más


ligera, la llevará
simplemente contorneada
con trencilla.

178
Hacen falta 2 largos de capa
en una tela de 90 cm de ancho

El patrón
Puede trazar directamente el pa-
trón sobre la tela (las menos auda-
ces pueden hacer primero un pa-
trón en papel).
— Tome un papel de 90 X 160
cm.
— Sobre uno de bordes los (el bor-
de izquierdo, por ejemplo), mar-
que arriba el punto A y abajo el
punto B y exactamente en el centro
el punto C.

La línea AB representa el centro de


la espalda.
—A punto C,
partir del un trace
semicírculo con un radio de 80 cm.
— Divida en dos partes iguales la
línea AC, marque punto
el D y a
20 cm de D, el punto E.
— Trace una línea de 23 cm a par-
tir de E y marque el punto F. Esta
línea EF le indica la abertura que le
servirá para sacar los brazos.

179
La ejecución alrededor a excepción de 20 cm pa-
Es importante elegir una tela suave ra poder volver la capa del dere-
pero al mismo tiempo de suficiente cho.
caída como fibrana o rayón. Para Cosa, vuelva del derecho e hilvane
realizar esta capa necesita dos lar- del derecho todo lo largo del borde
gos de capa en una tela de 90 cm de para mantener el pliegue hasta la

ancho. Coloque su patrón sobre la plancha. Haga un fino punto de


tela extendida y corte sucesivamen- sobrehilado a todo lo largo de la aber-
te dos semicírculos. tura que le ha servido para volver
Marque con un hilo de color el lu- la capa del derecho y el círculo es-
gar de las aberturas. Hilvane la tará asícompletamente cerrado.
costura del centro de espalda, ori- Esta capa se lleva con la parte su-
llo con orillo, derecho con dere- perior vuelta hacia el derecho en
cho, cosa y abra la costura con la un largo cuello de chai (véase p.
plancha. Haga ojales (proceda co- 178).
mo para la cremallera) (véase
pp. 71 y 72). Nota: si no desea realizar este mo-
Corte el forro en el mismo sentido delo en largo metraje puede reali-

de la capa; cosa y planche la costu- zarlo en una tela de doble ancho lo


ra del centro de espalda. que le evitará la costura de espalda.
Aplique este forro sobre la capa, El círculo tendrá en este caso como
derecho con derecho; hilvane todo diámetro la altura de la capa.

180
la capa
de pastor

La podrá confeccionar en
medio día en una franela
abrigada y ligera en 90 cm
de ancho. Sus dos grandes
pliegues situados en los
hombros le dan una caída
deportiva y elegante a la

vez.
Sus lados cortos le

permiten una libertad /

de movimientos /
mayor que la /
capa clásica. ¿¿> >

I
Para una capa de 1 m de largo necesita 4 m de tela de 90 cm de ancho

182
La confección chando el primer trazado con una
Si no se siente segura de realizar el línea curva que terminará a 15 cm
corte con éxito sin ningún patrón, de cada lado del centro del escote.
hágalo en un papel fuerte; si no, — Indique el sitio del pliegue de
haga el trazado directamente sobre hombros que constituye la origina-

la tela. lidad de la capa: con una profundi-


— Divida el metraje de tela en dos dad de 10 cm recortan en 20 cm el
en el sentido de la largura (4 m dan ancho de la capa sobre el brazo
2 piezas de tela de 2 m cada una). dándole al mismo tiempo una sua-
— Junte dos piezas o trozos
las vidad general.
obtenidos por los orillos, haciendo — Quite una tira de 8 cm de cada
una entrada de 2 cm lo que dará las lado en toda la longitud de la capa.

costuras del centro de espalda y de — Trace los redondeados de las


la delantera. puntas siguiendo la indicación del
— Cosa y abra la costura con la croquis y córtelos.
plancha. — Termine los bordes y el escote.
— Pliegue la tela (la costura que Coloque una todo el re-
trencilla a
acaba de hacer será el pliegue de la dedor de la capa y del escote (véase
tela). p. 168).
— Trace la línea de hombros (con- — Coja y sujete los pliegues sobre
forme al plan). los hombros a pespunte.
— Trace el cuello (como se indica
en el plan de corte); a partir de este Nota: si desea un cuello militar
trazado corte el escote barco que le proceda como le hemos indicado
permitirá pasar la cabeza ensan- en la p. 171.

LA TELA PLEGADA EN EL SENTIDO DEL ANCHO

Con frecuencia hallará esta expresión a lo largo de las explicaciones


contenidas en este libro. Para que no tenga duda alguna en el
momento de emprender esta acción debe saber que el ancho designa
elancho de la tela propuesto por el fabricante, sea de 90 cm, 120 cm
o de 140 cm... y que la tela, una vez doblada en este sentido
presenta un ancho de 45, 60 ó 70 cm.

183
TELAS FACILES DE TRABAJAR
El éxito de una prenda depende, en algodón somete con frecuencia a di-
se
gran parte, de la tela elegida y del mo- versos tratamientos en el curso de su

do como ha sido trabajada. Pero es in- fabricación. En tal caso se le aplica un


dispensable, sobre todo para las princi- adjetivo:
pantes, escoger una tela de fácil utiliza- — «satinado»: prácticamente no enco-
ción. Tres pruebas le permitirán reco- ge con lavado;
el

nocer esta cualidad: — «piqué»: presenta un aspecto sedo-


1/ prueba: la suavidad. so;
Tome la tela en la mano y ciérrela con — «popelín»: conserva todo su brillo
fuerza. En seguida sentirá su resisten- en lavado y
el al sol;

cia o su suavidad. La tela debe recupe- — «teñido en son hilo»: los hilos los
rar fácilmente su apariencia inicial. Si que y no el tejido como tal por
se tiñen
es rígida y queda arrugada, es difícil de eso tienen una gran resistencia a la luz
trabajar. y al uso (vichi, terliz, e hilo a hilo).
a
2. prueba: la caída. Consejo: si no
está tratado, el algodón
Apoye en sí misma una parte del me- encoge en primera lavada. Por lo
la

traje y haga deslizarse la otra hasta el tanto, será menester mojarlo en agua
suelo. Debe caer libremente, con sua- fría durante una o dos horas, extender-

vidad, sin separarse del cuerpo. lo luego bien, si es posible al aire libre,
a
3. prueba: el tejido. y plancharlo estando aún húmedo.
Estire la tela primeramente en el senti- El lino es muy apreciado por su robus-
do del orillo; debe oponer resistencia. tez y también por su finura (lencería,
Luego hágalo en el otro sentido (en el canastilla...).

del hilo de trama); debe ser elástica. Si Consejo: Como con frecuencia no sue-
la tela es muy apretada, la tela no reac- le estar tratado, hay que efectuar tam-
cionará así y por lo mismo será difícil bién con él la misma operación previa
de coser y planchar. que con el algodón; si está tratado, en-
Si Vd. es completamente novata en el coge un poco menos.
asunto, escoja una tela unida que le Los tejidos modernos: comprenden
evitará las dificultades de las uniones y los artificiales y los sintéticos.
de los contras. Cómprela barata y esto Entre los primeros están el rayón de
le dará más seguridad en sí misma. aspecto sedoso, brillante y suave y la
Si hay que evitar algunas telas como la fibrana que se parece a la lana y al al-
seda, el punto... son en cambio reco- godón.
mendables otras como el algodón, el li- Los segundos (tergal, Rhovil, Cry-
no y algunos tejidos modernos. lor...)pueden tomar los aspectos más
El algodón representa la base confor- diversos y son indeformables, sóli-
table de las prendas ligeras: vestidos dos...
para y para sus hijas, camiseros...
sí Consejo: los tejidos sintéticos deben
Para mejorar su aspecto y su uso, el coserse con hilo de tergal.

184
PRONTUARIO
La caída de una prenda depende no sólo de su corte sino también
de sus terminaciones, es decir, de los pequeños detalles. Así resul-
ta que un hilo que cuelga por un sobrehilado mal hecho, un botón
cosido sin cuidado, un ojal chapucero... pueden quitar toda elegan-
cia a un vestido cuyo modelo estaba sin embargo bien elegido y al
que se le había dedicado mucho tiempo. ¿Y qué decir de un dobla-
dillo cuyas puntadas se ven por el derecho del vestido? Pero hace

tanto tiempo que aprendimos los primeros rudimentos de costura


que ya los hemos olvidado y a veces nos resulta necesario consul-
tar un «prontuario» sucinto como éste.

185
Abrir (un pliegue) Botón
Pliegue que se hace con una plan- Un botón tiene que pasar por el ojal
cha caliente y un trapo mojado y con un poco de dificultad. Coloque
destinado a marcar un cuello, un re- primero el o los botones antes de
vés, un plisado. marcar el emplazamiento exacto de
los ojales.
Automáticos Los botones deben colocarse exac-
Primeramente hay que buscar una tamente al hilo o con relación a él si
aguja que pase fácilmente por los hay varias hileras. A cada sistema de
agujeros del automático que a veces botonadura corresponde una manera
son pequeños. Este sistema lleva de fijarlos:
- Para el botón de dos o cuatro
una parte macho y otra hembra y,
por lo tanto, hay que respetar esta agujeros, los hilos deben ir necesa-
disposición para que cierre de ver- riamente paralelos al borde de la
dad el automático. prenda. Cosa con un hilo en doble y
comience por un nudo trazado en el
derecho de la tela en el sitio previsto
para el botón. Pase el hilo varias ve-
ces por cada agujero. Termine ha-
ciendo un nudo bajo la tela y consolí-
delo por un pespunte.
- Para coser un botón de agujero
«oculto» en la parte inferior, hace fal-

ta comprar un hilo especial para bo-


tones ya que el metal de que está
hecho el orificio desgasta mucho el
hilo. Ponga el hilo en doble. Comien-

ce por un nudo fuerte, haga algunos

Marque el sitio en que debe ir cada


parte del automático con unos alfile-

res en cruz. Cuide de que estén


exactamente uno frente a otro. Cosa
cada agujero con puntada apretada
y termine con un nudo y un pespun-
te. Los corchetes se cosen del mis-

mo modo que los automáticos.

Bocamanga
Parte de la manga destinada a ser
montada en la sisa del vestido.
Se llama también así la parte de la
prenda recortada más o menos pro-
fundamente para dejar paso al bra-
zo. La parte delantera es siempre
más profunda que la de la espalda.

186
puntos y termine bajo el botón por un biendo el exceso de ancho con plan-
nudo y un pespunte. cha caliente y un trapo mojado.
- Para el botón con aro metálico infe-

rior (como los botones forrados), ha-


En doble
ce igualmente hilo especial en
falta
Término que significa que la tela de-
doble. Comience por un nudo y haga be estar plegada en dos partes igua-
les.
puntadas apretadas a través del aro.
Termine igual que en los botones
precedentes. Montura
Refuerzo ejecutado al bies o al hilo y
Cabeza o punta de la manga cosido sobre el derecho o sobre el
La parte más alta de la manga soste- revés de la prenda.
nida por los hilos de frunce.
Ojales a festón
Campanillas o señales Los ojales se pueden colocar de dos
Son los hilos rojos anudados en el maneras:
orillo de una tela para indicar que tie- - verticalmente sobre una «vista»
ne algún defecto. abotonada,
Pueden ser también verdes; depen- - horizontalmente, sobre un cruce
de de la fantasía del fabricante. normal.
Como el ojal se hace en función del

Capuchino botón al que se destina, antes de de-


Extremidad de una presilla que se terminar su emplazamiento exacto,
obtiene cortando en bisel un lado de hay que elegir el botón.
la tira de destinada a adornar o
tela En efecto, un botón grueso exige un
proteger una abertura; capuchino es ojal más grande que el que exigiría
la parte de la tira que termina en V. el mismo botón si fuera más delgado.
Después de haber determinado el
Deslustrar número de botones útiles para el cie-
Puede suceder que un golpe de rre de la prenda, marque el sitio de la

plancha demasiado caliente saque abertura de los ojales con un hilo de


«cera» en una tela; se dice que la te- color; para un ojal vertical será un hi-

la tiene apresto. Para suprimir este lo flojo. Pase también dos hilos per-

efecto, aplique sobre la parte con pendiculares para delimitar exacta-


apresto, un trapo muy mojado y, con mente la longitud del ojal (se añaden
una plancha muy caliente, plánchela 2 mm diámetro de un botón de un
al

ligeramente. El vapor debe hacer de- grosor medio).


saparecer el apresto. Trace todos los ojales que tiene que
Cuando la tela esté aún húmeda, pá- realizar pero nos los abra sino a me-

sela un cepillo. dida que los vaya haciendo para evi-


tar que se deshilachen.
Embebido (Embeber) Corte limpiamente el hilo, entre las
Exceso de amplitud de una pieza de dos marcas, con tijeras bien afiladas
telaen relación con otra, que se mo- (tijeras de bordar).
dificao sosteniendo el trozo más an- Sobrehile los bordes de la abertura.
cho por un hilo de frunces o reabsor- Este estilo de ojal se hace con la

187
Puede ejecutar los extremos del ojal
de dos formas: festoneando en re-
dondo en uno de los extremos (lado
del botón) y el otro en presilla larga
(croquis 2) o con presilla larga en
ambas extremidades (en este caso
se llama ojal de lencería o de dos
presillas, croquis 3).

Pasada
Se ejecuta de derecha a izquierda, la
aguja atraviesa la tela, pasa abajo,

luego vuelve a pasar al derecho a in-

tervalos pequeños y regulares.


Si es suave, puede deslizar
la tela

varias puntadas con la aguja antes

de volver a salir.

Pasada larga
Es una puntada larga de hilván que
une dos telas (tela y forro, por ejem-
plo). Se ejecuta a lo largo de las cos-
turas y sobre las entradas de modo
que sea invisible por el derecho.
ayuda del punto de festón (véase es-
ta palabra) empleando cordoncillo o
«moliné» (este último cubre mejor la
telaque el cordoncillo y puede des-
doblarse según el grosor de la tela) o
también tubino para telas finas.
Después de haber preparado los oja-
les,haga una pasada (vea esta pala-
bra) a todo lo largo de la abertura a 1
ó 2 mm del borde. Pespunte
Borde apretadamente cada borde de Se ejecuta de derecha a izquierda.
la abertura con punto de festón. La Meta la aguja en la tela del derecho
línea de la «pasada» delimita la altu- hacia el revés, vuelva a salir a la iz-
ra del punto de festón (croquis 1). quierda unos hilos más lejos, meta la

188
aguja de nuevo a igual distancia que
la puntada precedente y de la salida
de la aguja, salga hacia la izquierda
a la misma distancia, y así sucesiva-
mente.

Pespunte decorativo
Costura decorativa que subraya los
recortes de una prenda. Es un punto
de pasada más o menos ancho se- Punto abeja
gún el efecto que se desea obtener. Se utiliza para sostener un grupo de
Se ejecuta con cordoncillo general- pequeños pliegues o un pliegue
mente. grande o para disimular la repara-
ción en la esquina de un bolsillo o
Picar simplemente como motivo decorati-
Hacer pequeños cortes en V espa- vo.

ciados regularmente para dar más Con hilván o con tiza dibuje en la tela

suavidad a la costura de un contorno un triángulo (de tres lados iguales).


o de un canesú en forma. Pase la aguja partiendo del revés ha-
Hay que tener cuidado de no picar cia el derecho en A para ir a B sobre
la línea AB (1), es el punto D, salga
demasiado cerca de las costuras
que con el uso tenderían a ceder y en E y meta la aguja en F al lado de
rasgarían así el tejido.
B en la línea BC, salga en G al lado
de C en la línea AC (2) y así sucesi-
Pinza de ajuste
vamente hasta que esté cubierto to-

Todas las pinzas destinadas a dar do el triángulo (3).


una caída más o menos acentuada a
una prenda se llaman así.

Presilla
Pase dos hilos de un punto a otro de
la tela (1 ); la distancia vendrá eviden-
temente determinada por el tamaño
del botón al que está destinada la
presilla. Borde con punto de festón
esos dos hilos (2). Trabaje de dere-
cha a izquierda y haga el primero y
último puntos a caballo sobre los hi-
los y la tela.

189
Punto de festón
Se ejecuta de izquierda a derecha.
Meta la aguja algunos milímetros por
encima de la línea que debe señalar
elborde del festón. Vuelva a sacar la
aguja perpendicularmente sobre la lí- grandes. Comenzará por un buen
nea que señala el borde del festón, nudo sobre el derecho de la obra de
teniendo cuidado de mantener el hilo modo que lo pueda coger fácilmente
bajo la punta de la aguja a fin de for- en el momento de quitar el hilván.

Punto de máquina
Se ejecuta de derecha a izquierda.
Meta la aguja en A a la derecha de la
salida del hilo. Vuelva a salir a la mis-
ma distancia pero a la izquierda del
hilo en B. Vuelva a meterla a la salida
del hilo- en C. Vuelva a sacarla a la

izquierda de B en D a una distancia


de B igual a BC y así sucesivamente.

mar un nudo. Mantenga este nudo


sobre la línea del borde del festón
con el pulgar izquierdo y haga el D C A
8
punto siguiente completamente arri-
mado al que acaba de terminar.
Punto de sobrehilar
Impide que se deshilachen los bor-
Punto de frunces des de las telas. Se ejecuta de iz-
Se ejecuta pasando dos o tres filas quierda a derecha a caballo sobre el
de pasadas. Reparta regularmente la borde en una especie de punto de
amplitud con alfileres y tirando de los lado
hilos de frunce. Sujételos con algu-
nos pespuntes en la longitud desea-
da.

Punto escapulario
Se emplea para los dobladillos y es
Punto de hilván prácticamente invisible por el dere-
Se ejecuta como la pasada pero las cho. Una vez vuelto e hilvanado el
puntadas tienen que ser mucho más dobladillo, doble unos milímetros el

190
ral los fabricantes suelen quitar ya
brillos a sus telas pero debe cercio-
rarse de ello.

Para tome un trozo


las telas lavables:
de de unos 30 20 cm. Páselo
tela
por agua tibia y extiéndalo al aire,
plánchelo y mídalo de nuevo: si las
dimensiones han disminuido, quiere
borde a sujetar y manténgalo con el
decir que la tela encogerá con el pri-
pulgar. Meta la aguja de derecha a
mer lavado.
izquierda alternativamente en el do-
Para evitar este inconveniente, lave
bladillo y en la prenda y tomando só-
con agua tibia toda la tela; déjela se-
lo un hilo para que no se vea del de-
car y plánchela. Ahora es cuando
recho.
puede proceder a cortarla.
Punto sastre
- Para las telas no lavables: Con un
Permite trazar forma de un patrón
la
punto de hilván, trace un rectángulo
sobre una telaplegada en doble. Se de 30 20 cm en el revés de la tela.
ejecuta de derecha a izquierda. Meta Ponga un trapo húmedo sobre esta
superficie, planche y mida el rectán-
el hilo en doble. Ejecute una pasada
gulo; si ha encogido, tiene que quitar
muy floja y luego un pespunte for-
brillo a toda la pieza procediendo del
mando un bucle. Separe luego las
dos piezas de tela. Los hilos tensos mismo modo que en el rectángulo de
forman una especie de escalera. prueba. Cuide de que la tela esté
Córtelos por la mitad. Las puntadas
bien extendida y al hilo. Antes de
empezar el trabajo, asegúrese de
que quedan en cada parte delimitan
exactamente la forma del patrón. que la tela está bien seca.

Sisa
Recorte más o menos acentuado que
puede situarse en el cuello, en las
mangas, en la entrepierna, en gene-
ral en cualquier sitio donde se impo-

ne un recorte en arco.

Quitar brillos Sisar una manga


Quitar el apresto de la tela para que Escotar labocamanga en su parte
no encoja al primer lavado. En gene- más arqueada o profunda.

191
5

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de la talla que
no está disponible
o del color totalmente
imprevisto? Pero
¿cómo hacerlo? ¿
1

tejido se necesita :

¿En 90 ó 140 cms.?


¿Y el patrón? ¿Qué
dificultades esconde
con todas esas líneas
entrecruzadas?. Nada
de esto es difícil, si
la principiante puede
seguir unas explicaciones
claras, sencillas,
que guiarán sus primeros
gestos y le permitirán
realizar modelos fáciles
abriéndole así el camino
hacia una costura
más elaborada.

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