Mineria Informal
Mineria Informal
CURSO:
DOCENTE:
Perú
2021
INTRODUCCIÓN
La minería informal es un fenómeno presente en casi todos los departamentos del
Perú, aunque con diferente intensidad en cada caso, generando graves impactos
ambientales, sociales y económicos. Esta situación se debe, en parte, a que la
regulación de la minería artesanal y pequeña minería se ha visto debilitada por la
ausencia de procesos claros, efectivos de formalización. Por otro lado, a la escasez de
recursos y capacidades para hacer frente y poner freno a la expansión de la actividad
que se realiza fuera de la ley, sin contar con medidas de protección ambiental o que
permitan garantizar el respeto de los derechos de terceros.
LA MINERÍA INFORMAL
La minería informal es toda actividad minera que se realiza sin cumplir con la
legislación vigente sobre explotación de minerales en suelo patrio. En este conjunto se
halla tanto la denominada minería ilegal y la artesanal informal.
Se considera que una operación minera es informal si –por ejemplo– no tiene título
minero, ni título de acceso a la superficie, no está reconocida como pequeño
productor minero, no tiene un instrumento ambiental, incumple con el pago de
tributos, las normas laborales y de seguridad.
De otro lado, está la minería artesanal y pequeña minería, que opera en zonas no
prohibidas para la actividad minera. Si esta actividad cumple con los requisitos legales,
puede llegar a ser formal.
La lucha contra la minería informal se ha venido dando en diferentes niveles. Desde los
espectaculares operativos en La Pampa (Madre de Dios) hasta incautaciones de
insumos para la operación (mercurio, cianuro, combustibles). Pero la debilidad de los
gobiernos regionales y locales, así como del Ministerio Público y el Poder Judicial, hace
que el fenómeno siga avanzando. Según cálculos preliminares de Macroconsult, la
producción informal de oro llegó al 29% del total formal en el 2018. Al parecer, la lucha
no se está ganando, más bien hay un casi empate técnico entre el Estado peruano y la
actividad informal.
El problema también tiene un lado social y político. Los entendidos hablan de cerca de
350,000 obreros mineros informales. Es decir, un grupo importante que se resiste por
diversos medios a perder sus ingresos familiares y que también se expresa
políticamente.
El problema de la minería ilegal es la contaminación ambiental y amenaza a la vida
humana. Además de la destrucción del Estado de derecho. En el caso de la minería
informal se trata llanamente de un robo a los recursos de la nación. El tesoro público
no recibe los recursos y los gobiernos subnacionales se quedan sin el canon minero.
Primero, recalibrar los requisitos que se exige a los mineros artesanales y pequeños
mineros. Adecuarlos a la realidad económica y técnica de estos agentes. Brindarles la
ayuda técnica y financiera necesaria. Y darles un plazo razonable de adecuación a la
nueva normatividad vigente. El plazo debe ser obligatorio y creíble. Incluyendo tal vez
planes de desarrollo alternativo, para los que no puedan adecuarse.
Segundo, lanzar la bomba atómica. Prohibir la exportación de oro que no pueda tener
trazabilidad. Esta deberá contar con la aprobación centralizada del Ministerio de
Energía y Minas. Una suerte de sello de garantía de que se trata de una operación
minera formal. Esta parte incluye un acuerdo de cooperación con Bolivia (“acepto tu
gas, pero no recibas mi oro ilegal). Sunat también puede hacer su parte en el caso de
empresas que compran oro “reciclado”
ANTECEDENTES
Antecedentes La minería en Perú, en las dos últimas décadas muestra que la expansión
de esta actividad se dio en los diferentes estratos en los que se clasifica la producción
minera: gran minería, mediana minería, pequeña minería y minería artesanal, el
crecimiento de la minería formal grande y mediana ha sido largamente documentado
en diversas investigaciones y ensayos; sin embargo, lo ocurrido con la pequeña minería
informal y en gran medida ilegal tiene un menor desarrollo y no ha recibido el mismo
tratamiento (De Echave, 2016) Antecedentes La minería en Perú, en las dos últimas
décadas muestra que la expansión de esta actividad se dio en los diferentes estratos
en los que se clasifica la producción minera: gran minería, mediana minería, pequeña
minería y minería artesanal, el crecimiento de la minería formal grande y mediana ha
sido largamente documentado en diversas investigaciones y ensayos; sin embargo, lo
ocurrido con la pequeña minería informal y en gran medida ilegal tiene un menor
desarrollo y no ha recibido el mismo tratamiento (De Echave, 2016)
PROPÓSITO
ANÁLISIS
También es necesario que las instituciones vinculadas con esta actividad cuenten con
recursos técnicos y financieros, asimismo, con sistemas que permitan a los mineros
adecuar sus operaciones en los temas legales, técnicos, de seguridad y salud
ocupacional, y ambientales. El Estado tiene que hacer los esfuerzos necesarios para
que el proceso de formalización se retome con fuerza. Sin embargo, no se
implementaron, como responsabilidad del Gobierno Central y los Gobiernos
Regionales, quedando solamente como normas en algunos casos. En el 2012, en el
Perú, se dieron leyes como la Ley 29815 que faculta al ejecutivo a legislar y emana los
decretos legislativos correctivos desde 1099 hasta la 1107. Cuyo objetivo son el de
Formalización de los Pequeños Productores minero y Pequeños Mineros Artesanales,
Erradicación, de la minería ilegal y la criminalidad y la Remediación de los impactos
ambientales generados por los ilegales.
CONCLUSIÓN
La minería informal es una terrible realidad en nuestro país. Puede afectar a todo un
poblado y, lo que es peor inclusive, a toda una región ya que los ríos se ven
contaminados y esto representa una fuente de hidratación para los seres vivos. Es
importante señalar (apartándonos de un punto de vista ecológico) que la minería
informal también representa las peores formas de esclavitud en el Perú, según Gulnara
Shahinian, experta de las Naciones Unidas para estos casos. Con la creación de un
Ministerio del ambiente, se ha admitido que el Perú padece de serias limitaciones que
dificultan una respuesta eficiente a los desafíos ambientales en mundo cada vez más
depredador de las materias primas que la naturaleza brinda. El actual ministro del
ambiente ha formulado un llamado al congreso para que debata los proyectos de ley
en agenda que buscan acabar con la minería informal en la selva, así como su
contaminación, ya que la minería informal se ha vuelto incontrolable según las
palabras de Antonio Brack. El problema no solo es de las minas abandonadas y
dinamitar pedazos de tierra, existen también formas de extracción de oro con dragas
informales que navegan los ríos más importantes de la selva y representan el pilar del
ecosistema. Por último, los daños de la minería informal representan para el estado un
gasto en el que para la reforestación de más de 30 mil hectáreas de bosques se tienen
que invertir unos 70 millones de soles y año a año estas cifras van en aumento. Es
importante que los gobernantes de este país tengan también un enfoque socio
ambiental al igual como los deben de tener para combatir la pobreza y el desempleo.