Mercurio 137

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narrativa

narrativa
Carlos
Javier
Ruiz-Zafón
Marías
José
Michael
María Merino
Cunningham
Jorge
IanEdwards
McEwan
Julian
Antonio
Barnes
Gómez Rufo
Benjamín Prado
ensayo
Jean-Claude Lalumière
Iñaki Uriarte
Ángela Vallvey
Carlos Castilla del Pino
REVISTA PARA
FUNDACIÓN JOSÉ
EL FOMENTO
MANUEL LARA
DEL LIBRO Y LA LECTURA
ensayo
José Mª Pozuelo Yvancos
Número 137 | Enero de 2012 Herta Müller
poesía
EJEMPLAR GRATUITO Luis Bagaría
José Luis García Martín
poesía
Javier Egea
Vladimír Holan

ÁLVARO POMBO
A PROPÓSITO DE

Nietzsche
y Ortega
—“Hay un tipo
—“La atracción
de
porliteratura que
los diagnósticos
produce
funestosclichés
se alimenta
lingüísticos, morales,
de una neurosis
sentimentales”
morbosa”
JUSTO NAVARRO
JORDI GRACIA

AFORISMOS, MÁXIMAS, SENTENCIAS

ARTE DE LA
BREVEDAD
ARTÍCULOS DE
ELVIRA GONZÁLEZ FRAGA
PERE GIMFERRER
ARTÍCULOS DE ENTREVISTA CON
HUGO
JUSTOMUJICA
SERNA
FERNANDO IWASAKI SILVIA GRIJALBA
CARLOS PUJOL
ALBERTO DÍAZ
ALBERTO BLECUA
JUAN
UN BOLERO
ERIKACOBOS WILKINS
EN EL
Waldorf
MARTÍNEZ
CARME RIERA
ENRIQUE GARCÍA-MÁIQUEZ
FELIPE BENÍTEZ REYES

ILUSTRACIÓN
FOTO DE
RICARDO
EVA VÁZQUEZ
DE
MARTÍN
Astoria
Nº35

Dosier
En nombre de la libertad, Cádiz y “La Pepa”

La revista de ... Además


75 años del drama de la carretera
la Historia Málaga-Almería
Toros y pan. La cría de reses bravas en

de Andalucía el valle del Guadalquivir


Entrevista con Antonio Miguel Bernal

SUSCRÍBASE AHORA POR SÓLO 13,50 EUROS


Y RECIBIRÁ COMO REGALO ESTOS DOS INTERESANTES LIBROS:
Andanzas y Recuerdos de José Venegas
Inventario de los cuadros sustraídos en Sevilla de Manuel Gómez Ímaz

Mas información:
T. (+34) 954 787 001 / www.centrodeestudiosandaluces.es
contenidos 03
Número 137 | Enero 2012

Mercurio es una publicación Temas ARTE DE LA BREVEDAD


de la Fundación José Manuel Lara
para el fomento de la lectura 08 Actualidad del aforismo — Justo Serna
“El aforismo es, así, una brecha, no un cierre
o una clausura del saber”
10 Analistas de la condición humana — Carlos Pujol
“La gran tradición de los moralistas franceses arranca
Presidente José Manuel Lara
en el grand siècle y llega hasta Cioran”
Vicepresidente José Creuheras Margenat
Vocales Consuelo García Píriz 12 Bocados de oro — Alberto Blecua
Antonio Prieto Martín
Directora Ana Gavín “Para Erasmo, lo peculiar del apotegma es la brevedad,
la sabiduría y la agudeza”
14 Añicos — Erika Martínez
Director “El aforismo español sigue estando gobernado por la
Guillermo Busutil prosa del pensamiento, que nace de la incertidumbre”
Subdirector y editor gráfico
Ricardo Martín 17 Un arsenal de ideas — Enrique García-Máiquez
Editor literario
Ignacio F. Garmendia “La emboscada de Nicolás Gómez Dávila consiste en
Coordinadora Carmen Carballo hacernos creer que estamos ante una obra fragmentaria”
Consejo Editorial Carlos Pujol
Adolfo García Ortega
Clásicos 19 Ramón, por greguerías — Felipe Benítez Reyes
Manuel Borrás
Jesús Vigorra
“Su genialidad tuvo un pie en las vanguardias
Maquetación milhojas. servicios y otro en el casticismo madrileño”
editoriales
Geografías 20 Atenas. Entre cipreses y olivos — Blanca Andreu
Diseño original José Antonio Martínez
Imprime Artes Gráficas Gandolfo La milenaria capital de Grecia es la ciudad europea
Depósito Legal SE-2879-98
ISSN 1139-7705
habitada por más animales en libertad

© FUNDACIÓN JOSÉ MANUEL LARA


Fondo y formas 22 Las fuerzas extrañas — Ignacio F. Garmendia
Edificio Indotorre. Avda. de Jerez, s/n.
41012 Sevilla | Tel: 95 450 11 40
E.T.A. Hoffmann, Johann Joachim Winckelmann,
www.revistamercurio.es Walter Burkert, Edgar Neville, Scott Fitzgerald
[email protected]
Lecturas 23 Narrativa. Carlos Ruiz Zafón, Uwe Johnson, José María
Envío de libros para reseñas:
Revista Mercurio Merino, Jorge Edwards, Sándor Márai, Laura Freixas, Julian
Fundación José Manuel Lara Barnes, Peter Stamm, José Mauro de Vasconcelos, Paul
Para publicidad en Mercurio: Viejo, Andrés J. Reina, Junichiro Tanizaki, María Iglesias
Marcos Fernández
[email protected] 35 Ensayo. Carlos Castilla del Pino, Iñaki Uriarte, Isabel
Tel: 95 450 11 40
Burdiel, José María Pozuelo Yvancos, Jesús Marchamalo
La dirección de esta publicación no
comparte necesariamente las opiniones 38 Jordi Gracia — Entrevista de Tomás Val
de sus colaboradores. Tampoco mantiene
correspondencia sobre artículos no “La atracción por los diagnósticos funestos se alimenta
solicitados.
de una neurosis morbosa”
Mercurio tiene una difusión mensual
de 50.000 ejemplares con distribución 43 Poesía.  Rafael Adolfo Téllez, José Luis García Martín,
nacional en librerías y grandes superficies.
Isabel Bono
46 Infantil y juvenil — Care Santos
La pirámide roja, Cielo rojo, Nat y el secreto de Eleonora,
En la plaza quieta
47 Ciencia. La nueva cultura — Francisco Mora
Firma Invitada 50 De la brevedad de Ortega y Nietzsche — Álvaro Pombo
“Al leerlos, tiene uno la sensación de que las ocurrencias
se escapan de los textos, volviéndolos instantáneos”

ENERO 2012 MERCURIO
CONTEXTO
N U E VO S E D I TO R E S PA R A N U E VO S T I E M P O S

Las crónicas de la My Story Reina Lucía


señorita Hempel Marilyn Monroe E.F. Benson
Sarah Shun-lien Bynum con Ben Hecht
Libros del Asteroide Global Rhythm Press Impedimenta
Una deliciosa novela En las memorias Adorada por legiones
sobre una joven de Marilyn Monroe de fans, Reina Lucía
profesora que se enfrenta percibimos su chispa, es una deliciosa sátira
a su recién estrenada su inteligencia e incluso sobre la pretenciosa
vida adulta. Sarah un eco verbal de su y relamida burguesía
Shun-lien Bynum es irresistible vibración rural british.
un soplo de aire fresco. erótica.

Deshielo a mediodía El largo adiós Aullido


Tomas Tranströmer de Ellen Olestjerne Allen Ginsberg
Franziska von Reventlow Ilustrado por Eric Drooker
Nórdica Periférica Sexto Piso
Tomas Tranströmer Una novela de formación Una inquietante y
es el premio Nobel de femenina que es un canto magnética novela
Literatura 2011. Su a la libertad individual gráfica del aclamado
poesía nos da un acceso de la mujer en un mundo, y censurado poema
fresco a la realidad. el de finales del XIX, lleno beat de Ginsberg.
Un poeta único. de prejuicios y cortapisas.

Libros del Asteroide · Global Rhythm / Papel de liar · Impedimenta · Nórdica · Periférica · Sexto Piso

www.contextodeeditores.com
editorial 05

Pocas palabras
bastan

P
odríamos pensar que la brevedad, como sostienen algunos narrativa
narrativa
Carlos
Javier
Ruiz-Zafón
Marías

entusiastas de las nuevas tecnologías, es el signo de nues- José


Michael
Jorge
María Merino
Cunningham
IanEdwards
Julian
McEwan
Antonio
Barnes
Gómez Rufo
Benjamín Prado
ensayo

tra época, pero lo cierto es que la escritura aforística se


Jean-Claude Lalumière
Iñaki Uriarte
Ángela Vallvey
Carlos Castilla del Pino
REVISTA PARA
FUNDACIÓN JOSÉ
EL FOMENTO
MANUEL LARA
DEL LIBRO Y LA LECTURA
José Mª Pozuelo Yvancos
ensayo
Número 137 | Enero de 2012 Herta Müller
poesía

remonta muy atrás en el tiempo, al menos hasta los clási-


EJEMPLAR GRATUITO Luis Bagaría
José Luis García Martín
poesía
Javier Egea
Vladimír Holan

cos de la Antigüedad, y ha conocido varios momentos de ÁLVARO POMBO


A PROPÓSITO DE
esplendor desde el Renacimiento. Por esta razón, cuando llegan a las Nietzsche
librerías importantes novedades relacionadas con el género, como los y Ortega
Aflorismos póstumos — aquí reseñados— de Carlos Castilla del Pino, —“Hay un tipo
—“La atracción
de
porliteratura que
se hace necesario volver la vista atrás para enmarcar esta chispeante los diagnósticos
produce
funestosclichés
se alimenta
lingüísticos, morales,
de una neurosis
sentimentales”
forma de literatura en una tradición que no ha perdido vigencia. morbosa”
JUSTOGRACIA
JORDI NAVARRO

Comenzamos por una exposición general de Justo Serna en la que AFORISMOS, MÁXIMAS, SENTENCIAS

el autor reflexiona sobre la naturaleza y las posibilidades del aforismo ARTE DE LA


como forma de pensar el mundo. El linaje de los moralistas franceses BREVEDAD
ARTÍCULOS DE

es analizado por un gran conocedor de la materia, Carlos Pujol, que ELVIRA GONZÁLEZ FRAGA
PERE GIMFERRER
ARTÍCULOS
HUGO MUJICA
JUSTO SERNA
FERNANDO
DE
IWASAKI
ENTREVISTA CON
SILVIA GRIJALBA
CARLOS PUJOL

sigue el rastro de un extraordinario ramillete de pensadores —Pascal, ALBERTO


ALBERTO DÍAZ
BLECUA
JUAN COBOS WILKINS
UN BOLERO
EN EL
Waldorf
ERIKA MARTÍNEZ
CARME RIERA
ENRIQUE GARCÍA-MÁIQUEZ

La Rochefoucauld, La Bruyère, Chamfort o Joubert— hasta llegar a


FELIPE BENÍTEZ REYES

ILUSTRACIÓN
FOTO DE DE
Astoria
Cioran, legítimo heredero de su visión escéptica y desencantada, pero
RICARDO
EVA VÁZQUEZ
MARTÍN

profundamente apegada a la condición humana. Por su parte Alber-


to Blecua, el editor de Rufo, propone algunas calas en la literatura
española de los Siglos de Oro para desbrozar el camino que siguieron
entre nosotros las muy populares colecciones de apotegmas —textos
breves, sabios y caracterizados por la agudeza, a decir de Erasmo—
que florecieron con el humanismo y prolongaron su ascendiente has-
ta bien entrado el siglo XVIII.
Sin duda, nuestro Baltasar Gracián es uno de los grandes cultiva-
dores europeos del género, pero el aforismo ha seguido dando frutos
en la literatura española. Erika Martínez recorre el siglo XX de la
mano de autores como Juan Ramón Jiménez, Bergamín, Max Aub,
Sánchez Ferlosio o Carlos Edmundo de Ory, y llega hasta nuestros
días en los que Carlos Marzal, Lorenzo Oliván o Andrés Neuman, en-
tre otros, continúan el hábito de expresar el pensamiento en píldoras.
El colombiano Nicolás Gómez Dávila, excéntrico autor de los Es-
colios, es glosado por un gran admirador de su obra, el poeta En-
rique García-Máiquez. De Ramón Gómez de la Serna, el ingenioso
“reinventor” de la greguería, escribe Felipe Benítez Reyes, que gasta
la mejor prosa literaria a este lado de los Pirineos. Y Álvaro Pombo,
en fin, pone un espléndido colofón donde discurre a propósito de la
brevedad en Ortega y Nietzsche. Hay otras luminarias, pero todas las
que comparecen en estas páginas brillan con luz propia. Q

ENERO 2012 MERCURIO
¿QUIERES
QUE TUS HIJOS
DISFRUTEN DE LA
lectura?
o s a l a ño
2 0 e u r
Por solo O S N
E or CA SA
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 e escritura
C o n c u rsos d e lectura
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07

temas

EL PENSAMIENTO
EN PÍLDORAS
“Es un pensador: es decir, sabe considerar
las cosas más sencillas de lo que son”.
Friedrich Nietzsche, La gaya ciencia

MIGUEL SÁNCHEZ LINDO

ENERO 2012 MERCURIO
Contamos hoy con numerosos medios que dilatan la expresión, pero en
plena modernidad tecnológica hemos ido a parar a la escritura discontinua,
más o menos chispeante e instructiva de los tiempos clásicos

ACTUALIDAD
DEL AFORISMO

JUSTO SERNA

L
as sentencias, las máximas, los prover-
bios, los aforismos… La tradición nos
presenta una amplia gama de fórmulas
expresivas, de géneros chicos en los que
el pensamiento se plasma con arte y
concisión. El autor se ciñe, se constriñe: escribe con
brevedad y eficacia retórica. Porque, en efecto, los
géneros chicos son escrituras condensadas, senten-
ciosas, apodícticas y económicas. Aleccionan o sor-
prenden: sin la argumentación que precede o sin el
razonamiento que sucede. Son la última expresión.
Del pasado histórico nos vienen dos grandes fór-
mulas: los proverbios y los aforismos. Por su breve-
dad, por su sonoridad, por su aserción, pueden ser
leídos en voz alta y recordados. Pocas líneas que
resumen una enseñanza o que expresan una incer-
tidumbre. Tratan del hombre, de las creencias, de la
vida y de la muerte; y suelen tener un sentido moral.
En la Antigüedad y después, los proverbios
fueron el pensamiento popular que condensaba
y fijaba enseñanzas tradicionales, prescripciones
colectivas. Se basaban en el sentido común, en la
evidencia incontestada de las cosas. Los proverbios
eran, así, aserciones prácticas de doctrina. Cada
perla era la cuenta de un collar. Había un todo co-
nocido —esa doctrina—, el todo del que el prover-
bio era un detalle.
Hoy, por el contrario, predominan los aforismos
taxativos que bajo formas lapidarias niegan lo evi-
dente o lo acostumbrado. ¿Ocurrencias, boutades?
Desde la época moderna, quienes cultivan el géne-
ro chico suelen buscar la paradoja con el ánimo de
provocar al lector, reclamando de él su complici-
dad. El aforismo es, así, una brecha, no un cierre
o una clausura del saber. Es fragmento del que ig-
noramos su conjunto, esa totalidad a la que podría
pertenecer.
Alguien tiene una idea. Siente necesidad de pro-
nunciarla y de retenerla. Felizmente dispone de
papel, un cuaderno, un billetito en el que anotarla.
ASTROMUJOFF

MERCURIO ENERO 2012
temas 8 | 9
ARTE DE LA BREVEDAD

Queda enunciada, fijada. Ya tiene forma. El pensa- do. Por principio es fugaz; y lo precario y lo literal de
miento está a salvo. Pero inmediatamente quien es- su expresión no admiten alternativa: si se la busca-
cribe descubre que lo dicho es inferior a lo deseado, mos, reescribiremos el aforismo y el resultado será
que lo anotado no es un calco de aquella cavilación. otra sentencia distinta. Eso es lo que hacen quienes
Puede que solo sea una birria. Lo inexpresado es practican el género, este género chico, agrandar la
solo potencial: tiene mucho futuro y tiene mucho escritura añadiendo nuevos aforismos hasta formar
prestigio. Si no se escribe, no se malogra; y así quien florilegios, compendios que pueden tener hilo con-
permanece en el silencio siempre podrá creerse ca- ductor o elementos comunes: textos más o menos
paz o mejor de lo que realmente es, dueño de esa amplios que pueden leerse intermitentemente y con
cavilación que no tiene forma. Pero una vez plasma- interrupciones, con desorden.
da la idea, el resultado decepciona. Por eso, el autor La tradición nos enseña
reincide con otra formulación, con otras palabras: que el aforismo se cultiva
al hacerlo altera lo pensado. ¿Qué pensamiento? para delatar o manifestar Desde la época
Una parte fundamental de la vida se nos va sin todo tipo de estados o juicios. moderna, quienes cultivan
vivir el presente. Nos pasamos horas y horas ade- Por un lado, la expresión del el género chico suelen buscar
lantando el futuro en silencio: meditando sobre el yo ante el mundo, la indaga-
porvenir, razonando, conjeturando, atribuyendo ción de un individuo que se la paradoja con el ánimo de
sentido a las cosas que todavía no han acaecido. sabe perteneciente a la huma- provocar al lector, reclamando
Nos pasamos mucho tiempo exhumando lo con- nidad y que a la vez se ve dis-
sumado y ya inerte: recordando lo que nos sucedió tinto; por otro, la valoración de él su complicidad. El
o creemos que nos sucedió, con el significado que de ese mundo y de la conducta aforismo es, así, una brecha,
tuvo o que ahora tiene para nosotros. Nos pasamos individual. Un observador y
la vida observando lo que justamente ocurre o cree- un juicio moral: eso es lo que
no un cierre o una clausura
mos que ocurre. predomina en el género. Al- del saber
De pronto tenemos una urgencia: sobre un cua- guien que sabe las reglas, que
derno, sobre una libretita, queremos anotar un sabe lo que sus mayores hicie-
dato que enjuiciamos. El resultado es una idea, un ron, que sabe cuál es el sen- Estamos como
exabrupto, un dolor o una alegría. Nos basta con tido colectivo que se da a las
una frasecita, pero necesitamos decirla con toda la cosas, pero también alguien
al principio de los tiempos:
precisión de que seamos capaces. Es un pensamien- que ve lo insólito, lo inaudito, necesitados de decir,
to que nos identifica, que revela o expresa el yo, esa lo paradójico de la vida y de de observar y de anticipar,
valoración que hacemos de algo que nos concierne. sus normas.
Y hemos de hacerlo en pocas líneas: con la breve- ¿Y cuál es el resultado? El de sopesar; y de manifestarlo
dad a que nos obligan el soporte y el tiempo, escri- pensamiento corto, sin espe- grave, irónica o brevemente:
bimos esa idea. Tenemos únicamente un atadijo de sor, sin cuerpo. Es curioso:
papel y unos pocos minutos: la vida se nos va en ello contamos hoy con numerosos
el tiempo apremia y el soporte
y no queremos que se nos desvanezcan la ocurren- medios que dilatan la expre- no aguanta
cia, la vivencia. Por tanto, nos demoramos solo lo sión y que multiplican los so-
fundamental. Y la anotamos. La releemos y, al mar- portes, pero en plena moder-
gen de que refleje mejor o peor lo que teníamos en nidad tecnológica hemos ido a
la cabeza, descubrimos que tiene ritmo y hasta una parar a la escritura perecede-
Cuando la forma
rima insospecha. Descubrimos que tiene principio ra y discontinua, más o menos verbal es irremplazable,
y final, incluso una disposición circular. Descubri- chispeante, más o menos ins- entonces es que ha cobrado
mos, en fin, que tiene los términos exactos. tructiva de los tiempos clási-
Es una idea suelta. En todos los sentidos de la cos: pocos, poquísimos carac- una belleza sonora. Casi
expresión: ha sido evacuada y además no tiene teres con espacio; la escritura es un canto irrepetible
continuidad necesaria. De hecho, a esa cavilación de siempre, la que se inscribió,
finalmente liberada que ya tiene forma y enuncia- por ejemplo, en aquel atadijo
ción no le falta de nada, y al releerla una y otra vez de papeles, la que se consumó en el género del afo-
olvidamos cuál fue el pensamiento inexpresado. rismo. Acumulamos datos que nos sobrepasan y
Precisamente por eso, al releer esa idea incluso en dictaminamos con pocas referencias. No tenemos
voz alta, las palabras se vuelven insustituibles: con una razón olímpica y nos valemos de una mente pre-
ambigüedad o precisión dicen lo que dicen, lo que caria, siempre limitada. Y nos pronunciamos o eso
tienen que decir. Cuando la forma verbal es irrem- intentamos: expresamos lo que queremos decir y a la
plazable, entonces es que ha cobrado una belleza vez expresamos nuestro yo, la identidad que precisa
sonora. Casi es un canto irrepetible. ser dicha. Aunque sea malamente.
Estamos ante un género chico, sí, pero también Estamos como al principio de los tiempos: nece-
grande. Le ocurre como a un poema. La palabra sitados de decir, de observar y de anticipar, de sope-
es la que es, siempre precaria e insuficiente, pero sar; y de manifestarlo grave, irónica o brevemente: el
los versos son todo lo que son, medidos y relacio- tiempo apremia y el soporte no aguanta. A ese resul-
nados: hay imágenes o enseñanzas que resultan de tado decepcionante y operativo es al que hemos lle-
esa combinación y de esa disposición. Un poema no gado. Nos hemos pronunciado. ¿Y luego? Luego nos
puede ser resumido o parafraseado sin malograrlo. morimos: nos quedamos sin habla y sin expresión,
Un aforismo tampoco puede ser abreviado o glosa- sin soporte, sin cuerpo. Todo se nos queda chico. Q

ENERO 2012 MERCURIO
La gran tradición de los moralistas franceses arranca en el ‘grand siècle’
con autores como La Rochefoucauld o La Bruyère, continúa en el XVIII
con Vauvenargues, Rivarol o Chamfort, sigue dando frutos con Joubert
y llega hasta Cioran en el siglo XX

ANALISTAS DE LA
CONDICIÓN HUMANA

CARLOS PUJOL

E
Moralistas l género tiene varios nombres equiva- Esta modalidad literaria nació como pasatiem-
lentes a sentencia breve, así, aforismo po mundano en los salones de la nobleza, habitual-
La Rochefoucauld (del griego, “definición”) y máxima, del mente presididos por alguna aristocrática musa que
La Bruyère latín “regla máxima”, sustantivando presumía de ingenio y distinción; como la marquesa
Joubert el adjetivo; en ambos casos se designa de Rambouillet, quien en su chambre bleue reunía
Chamfort una frase sentenciosa que se supone ejemplar, unos un cenáculo entre pedante y cursi que hizo nacer la
Cioran pedacitos de filosofía al alcance de todos. A veces, afectación almibarada del preciosismo, moda que
un florilegio de citas de hombres ilustres, pero ya satirizó Molière y de la que casi nada ha perdura-
también reflexiones personales expresadas de una do. Una superviviente de este famoso salón fue otra
manera rápida y concisa, con la amabilidad de no marquesa, Madame de Sablé (1598-1678), dama a
querer cansar al lector. Para evitar equívocos ten- la que se atribuyeron numerosos amoríos, que hizo
gamos en cuenta que los Pensamientos de Pascal mucha política quizá por el simple gusto de hacerla,
solo en apariencia pertenecen a la aforística, por- y que por fin acabó muy devota, aunque con buenas
que en realidad son notas provisionales destinadas dosis de jansenismo (se retiró a un pabellón pegado
a un libro que no llegó a escribirse. a la abadía de Port-Royal de París).
Sin embargo en la misma Francia del siglo XVII A simple vista, un cambio sorprendente, aso-
fueron sus contemporáneos los que establecieron el ciando la rebuscada frivolidad con el rigorismo
canon literario de las máximas, un capítulo de la moral más extremoso. Lo cierto es que en su casa
literatura al que se suele poner el epígrafe de “mo- se cultivó a manera de juego de salón el ingenio de
ralistas”; que nadie se llame a engaño, en francés los aforismos; a menudo parece que obra colectiva
la palabra no significa que estos sean autores cuyo de los asistentes, formulando y puliendo ideas que
propósito es moralizar, es decir, enseñar la moral, venían de muy antiguo; por ejemplo de Séneca y
sino que reflexionan sobre las costumbres —en san Agustín (este último, el santo predilecto de los
latín mores— y la condición humana. Los “mora- jansenistas), y en ocasiones de tiempos más próxi-
listas” franceses por lo común es dudoso que sean mos: Montaigne…, y nuestro Gracián, muy traduci-
edificantes, más bien tienden a cierto cinismo do y admirado en estos ambientes (en las máximas
desengañado y de buen tono que emplea, eso sí, una de Madame de Sablé hay dieciséis tomadas direc-
lengua impecable, elegantísima. tamente del Oráculo manual y arte de prudencia).

MERCURIO ENERO 2012
temas 10 | 11
ARTE DE LA BREVEDAD

Pero si recordamos este círculo de selecta socie- va de esta época; racionalista con muchos matices
dad es porque en él participaba el duque de La Ro- (“Conviene ser firme por temperamento y flexible
chefoucauld (1613-1680), cuyo volumen de Máxi- por reflexión”, “No se puede ser justo si no se es hu-
mas es uno de los hitos del llamado clasicismo mano”), es un estoico original y asistemático: “Las
francés. Curioso personaje que vivió intensamente pasiones han enseñado la razón a los hombres”,
hasta la derrota y el desengaño las últimas batallas “Despreciamos muchas cosas para no despreciar-
de la nobleza aún feudal antes del advenimiento del nos a nosotros mismos”. Ha tenido que pasar mu-
poder absoluto de Luis XIV. Orgulloso de su estir- cho tiempo para que se reconociera la inteligencia y
pe, que según parece ya era principal en el siglo X, la personalidad de su obra.
participante en todas las revueltas y rebeldías del Pero hay que trasladarse a los años de la Revolu-
tiempo de Luis XIII y de Mazarino, en su vejez, casi ción para encontrar nuevas muestras interesantes
ciego, gotoso y sin futuro —aunque quizá enamo- del género. Son dos escritores, antagónicos por sus
rado, se supone que platónicamente, de Madame ideas, que representan muy bien la inevitable cris-
de La Fayette—, cincela estas frases desconfiadas pación del género en años tan convulsos. El conde
y amargas por las que ha pasado a la posteridad.
“Es fácil consolarse de las desgracias ajenas”,
nos dice con su frío humor, la virtud quizás apenas
existe, porque el egoísmo es más fuerte (a los janse-
nistas les gustaba esa sombría visión del hombre).
Nadie como él para acuñar frases lapidarias: “Si no
tuviéramos orgullo no nos quejaríamos del de los
demás”, “Prometemos según nuestras esperanzas, y
cumplimos según nuestros temores”, “Perdonamos
a quienes nos han hecho daño, pero no podemos
perdonar a quienes se lo hemos hecho”, “Nuestras
virtudes suelen ser vicios disfrazados”, “Por mucho
que nos elogien no conseguirán sorprendernos”,
“La magnanimidad lo desdeña todo para tenerlo
todo”.
He ahí un repertorio de paradojas mordaces y
casi nihilistas, que en el fondo congeniaba con el
jansenismo ambiental y su insistencia en la natu-
raleza caída impregnada de pecado; pero La Ro-
chefoucauld en materia de religión es neutral. En
un universo implacable no espera nada de este
mundo ni del otro, la hipocresía y la debilidad hu-
manas son irredimibles. Y desde luego no aspira a
guiar o aconsejar a sus lectores, no hace más que
iluminar desde su perspectiva lo que juzga engaño-
so. Y no habla jamás de sí mismo —norma que ya
había enunciado Gracián—, su altivez no condes-
ciende a esas complacencias, el yo se esconde bajo
ideas generales, él se limita a dejar constancia de
ilusiones desvanecidas y fracasos.
Morirá piadosamente, asistido por el gran
Bossuet y dejando desconsolada a Madame de La
Fayette, la novelista de La princesa de Clèves, de
todo lo cual tenemos testimonio en unas cartas
de Madame de Sévigné (dicho sea entre parénte-
sis, una aglomeración de magníficos escritores
en su lecho de muerte, el grand siècle es así). La
Rochefoucauld marca para siempre la pauta de la
literatura aforística francesa, tan pulcra y brillante
como pesimista. A fines del mismo siglo XVII Los ASTROMUJOFF

caracteres de La Bruyère insiste en la misma tónica


(“Hay que reír antes de que seamos felices, no fue-
ra que nos muriéramos sin haber reído”), y ya bien
Los ‘moralistas’ franceses
entrado el XVIII también Montesquieu cultiva el por lo común es dudoso que sean
género, aunque sin tomárselo muy en serio, convir- edificantes, más bien tienden a cierto
tiendo su carné de notas, que no se publicó hasta
fechas muy recientes, en un cajón de sastre. cinismo desengañado y de buen
Pero sin duda fue el marqués de Vauvenargues tono que emplea, eso sí, una lengua
(1715-1747), militar y diplomático que murió siendo
un desconocido, la figura más atrayente y sugesti-
impecable, elegantísima

ENERO 2012 MERCURIO
de Rivarol, que probablemente no era conde, hizo Con el humanismo, el apotegma
reír a todo París con sus aceradas sátiras antirre-
volucionarias que le obligaron a exiliarse, pero su clásico pasa a ser un instrumento
ironía no respeta a nadie, y mucho menos a los no- útil para formar a los lectores,
bles: “La nobleza confunde sus recuerdos con sus pero también para entretenerlo
derechos”. Su contemporáneo Chamfort se lanzó
a la política de signo jacobino, y jacobino seguirá y procurarle diversión
siendo hasta su muerte —se suicidó en la cárcel
cuando iba a ser guillotinado por los que pensaban
como él—, con una independencia de criterio que
es rara en medio del Terror. Nietzsche y Camus han
sido algunos de los admiradores de este insolente
BOCADOS
plebeyo que rompe la tradición de los “moralistas”
con título.
La literatura aforística tiene una espléndida
DE ORO
continuidad en Joseph Joubert (1754-1824), amigo
de Chateaubriand, quien lo dio a conocer póstu-
mamente; fue un hombre acurrucado en un rincón
de la vida, casi sin participar en ella, y destilando
breves y agudísimas observaciones que ni siquiera
se molestó en publicar. Joubert es un pequeño filó- ALBERTO BLECUA
sofo sutil y desengañado que inclina la tradición de
los “moralistas” franceses en un sentido más espiri-

Q
tual: “El alma habla consigo misma en parábolas”, ué es un apotegma? Pues, en realidad,
“Dios es el lugar en el que no me acuerdo de todo ni los vocabularios ni los tratadistas
lo demás”, “Todos los jardineros viven en lugares antiguos y modernos definen en su ple-
hermosos, porque los convierten en hermosos”, “Se nitud el apotegma. Para Erasmo, sin
hacen abstractos para parecer profundos”, “Saber duda el crítico que con mayor motivo
es ver en sí mismo”. podía tratar de la materia, lo peculiar del apoteg-
Y tal vez no sea un mal término de este recorri- ma es la brevedad, la sabiduría y la agudeza. En la
do evocar aquí como su paradójico remate a Émile misma línea de Erasmo, el Diccionario de autori-
Cioran (1911-1995), rumano aclimatado en Fran- dades define el apophthegma como “sentencia bre-
cia (1937) que escribió en un ve, dicha con agudeza por persona grave, honrosa
admirable francés que los para el que la dice y mucho más para el que la oye,
franceses parecen haber ol- Esta modalidad por lo conocido de sus palabras y profundo de su
vidado. Un extraño injerto doctrina”, y da como ejemplo el siguiente pasaje de
venido del otro extremo de literaria nació como un romance de Quevedo: “Oyólo Alejandro Magno
Europa transformando pa- pasatiempo mundano en / y recalcado en sus jambas, / muy ponderado de
sionalmente una tradición hocico, / más apotegma que chanza”.
tan archifrancesa como la
los salones de la nobleza, Para Quevedo, pues, como para el Diccionario
novela sicológica que ya cul- habitualmente presididos de autoridades, la voz ‘apotegma’ poseía un carác-
tivaba el último amor de La por alguna aristocrática ter marcadamente grave, que se opone al conteni-
Rochefoucauld. “He buscado do de ciertos dichos agudos que se incluyen en las
el Absoluto”, confiesa este musa que presumía de colecciones de apotegmas, tanto clásicas como ro-
singular filósofo, ácido y tem- ingenio y distinción mances.
pestuoso, que ha llenado con Con el humanismo, el apotegma clásico pasa a ser
sus reflexiones provocadoras más de mil páginas, un instrumento sumamente mente útil para formar moral-
las de los Cuadernos y otras obras como Silogismos mente a los lectores. Esos “bocados de oro”, como di-
de la amargura (este simple dato ya indica que, a ría el autor medieval, son fácilmente memorizables
diferencia de su ilustre predecesor, el duque, la me- y los niños pueden aprenderlos deleitándose a la vez.
sura no es lo suyo). Con ellos aprenderán historia, filosofía moral y, des-
“La verdad está en Shakespeare, un filósofo no de luego, elocuencia. Porque, en efecto, el apotegma
puede apropiársela sin estallar junto con su sis- clásico fue revalorizado por su carácter ético, pero
tema”, “No hay salvación salvo en la imitación del es innegable que la presencia de estas anécdotas en
silencio”, “La poesía occidental, ejercicio de saltim- el discurso era signo de erudición, como lo es el uso
banquis y de estetas”, “No he aportado nada nuevo, del adagio, de la sentencia, de la alusión mitológica
sino una desolación más luminosa”, “En el Juicio y, en fin, el uso de todo aquello que pudiera poner al
Final solo se pesarán las lágrimas”, “Me gustan los descubierto la condición intelectual del orador.
escritores de penumbra, como Joubert”, “Solo nos Este aspecto erudito, tan característico del huma-
presta servicio el que crea el vacío a nuestro alre- nismo, hizo nacer desde fechas tempranas los florile-
dedor”… Apasionado, exageradísimo y cultivando gios, las oficinas, las polianteas que ponían al alcance
las exageraciones, Cioran es un grito de rebeldía de cualquier inteligencia, por roma que fuese, todo el
que usa el molde más refinadamente educado de la caudal cultural que era necesario conocer o, por lo me-
época de Luis XIV. Q nos, aparentar que se conocía. Estos repertorios fue-

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ARTE DE LA BREVEDAD

ron desde fecha muy temprana —y la aparición de la abundan los cuentecillos tradicionales y los chistes
imprenta favoreció la difusión de los mismos— pasto y juegos de palabras.
espiritual y retórico de los estudiantes de humanidades. El cordobés Juan Rufo, bien conocido como
En 1531, el anciano Erasmo compone la más poeta épico, publicó en 1596 una colección de sus
amplia colección de apotegmas clásicos, extraídos dichos personales con el título de Las seiscientas
en su mayor parte de la obra de Plutarco. No fue la apotegmas, que son, en realidad, más de 700. La
exhaustiva antología de Erasmo —los Apophtheg- colección de Rufo, aunque fue muy admirada por
mata— la que puso de moda el apotegma en Euro- Gracián, no tuvo éxito editorial. Solo se conoce una
pa, pero el gran prestigio de su autor aumentó su reimpresión, hoy perdida, de 1614. A partir de esta
difusión, su uso y su intención moral. De gran difu- fecha habrá que esperar hasta principios del siglo
sión, como puede observarse por el número de los XVIII para encontrar una nueva colección de apo-
ejemplares conservados en bibliotecas españolas, tegmas de interés. Se trata de la Floresta española
la colección de Erasmo fue traducida independien- (1728) recopilada por Francisco Asensio, en la que
temente en 1549 por Jarava y por Tamara, infatiga- se incluyen numerosas piezas de otras colecciones
bles traductores como Gracián. y de distintos vocabularios o manuales de corte-
Por su parte,, Rodríguez de Almela quiere com- sanía. La Floresta de Asensio se ree-
petir con Valerio Máximo y colecciona el Valerio ditó varias veces en el siglo XVIII y
de historias, terminado en 1472, donde se relatan sigue siendo todavía el más amplio
dichos y hechos célebres de españoles. A imitación repertorio de chistes y anécdotas clá-
de las
as vidas de ilustres italianos, un anónimo com- sicas españolas.
pone una colección de Dichos y hechos del duque de Como hemos visto, a excepción de
Nájera don Pedro Manrique de Lara, que perma- la de Rufo, que es original, las res-
necieron inéditos hasta el siglo XIX. Estas colec- tantes colecciones no eran más que
ciones de dichos y hechos memorables de españoles antologías de mayor o menor exten-
ilustres culminan con las obras de Porreño, ya en el sión recogidas por aficionados. Es-
siglo XVII, que recoge los dichos y hechos celebra- tas colecciones responden, como se
dos de Felipe II y Felipe III. ha indicado, al gusto humanista por
Conviene señalar que estos dichos de modernos saber contar con gracia una historie-
no suelen mantener la gravedad de los antiguos. En ta, un chiste, un apotegma. Erasmo

ASTROMUJOFF
ellos va a predominar la agudeza, el chiste, la frase y Cervantes son dos ejemplos bien
ingeniosa. Ya no los dicen siempre personajes ilus- característicos de esta época, por
tres, sino anónimos, “un hidalgo, un vizcaíno, un no citar al autor del Lazarillo. Sal-
loco, un clérigo…”. Nos hallamos ante una corrien- picar las conversaciones de gracias,
te nueva típicamente renacentista, ligada induda- de agudezas, de sales era una nece-
blemente al apotegma, pero, sobre todo, nacida de sidad social. Muchos españoles, al Para Erasmo,
su propio tiempo, del ideal del perfecto cortesano, igual que hicieron con las poesías, sin duda el crítico que
del perfecto hombre que habla, que tiene la palabra apuntaron pacientemente en sus
como el rasgo fundamental que le diferencia del cartapacios proverbios y sentencias; con mayor motivo
resto de los animales. Y, además, como el hombre, otros facecias y apotegmas, chistes, podía tratar de la
según definía Aristóteles, es un animal que ríe, hay en realidad. Muchas de estas colec-
que salpicar las conversaciones de sales, de agude- ciones han desaparecido, pero algu- materia, lo peculiar
zas, de facecias. nas, importantes, se han conserva- del apotegma es la
En 1563 el librero y escritor Juan Timoneda do manuscritas. brevedad, la sabiduría
publica las dos partes de El sobremesa y alivio de Son las colecciones de Pinedo, Ga-
caminantes, “en el cual se contienen diversos y gra- ribay, Zapata o Arguijo, todas ellas y la agudeza
ciosos cuentos, afables dichos y muy sentenciosos”. compuestas en la segunda mitad del
La colección de Timoneda, al igual que el Buen avi- siglo XVI y primer cuarto del XVII. Son, en gene-
so y Portacuentos, publicado al año siguiente por ral, colecciones de chistes de españoles; en ellas
el mismo autor, carecen de intención didáctica y el abundan los cuentecillos tradicionales y siguen la
propio recopilador se encarga de decir en la breve misma línea temática de las impresas. Solo varían
epístola que abre El sobremesa que compone esta con la época. Las unas hablarán más de Garci Sán-
obra para que el lector se aprenda estos cuente- chez de Badajoz o del Gran Capitán; las otras, como
cillos de coro y los pueda relatar en una conversa- la de Arguijo, de los más importantes artistas de
ción cuando sea el momento propicio. su tiempo: Góngora, Quevedo, Céspedes, Herrera,
La obra más celebrada de su género en España, Alarcón, Vélez de Guevara. Pero, de hecho, en poco
la Floresta española de apothegmas o sentencias se diferencian de las colecciones impresas, a no ser
sabia y graciosamente dichas, de algunos españo- por cierta libertad en materia religiosa.
les, fue coleccionada por Melchor de Santa Cruz e Por lo demás muchas de estas colecciones tienen
impresa en Toledo en 1574. Se maravilla el compi- cuentecillos similares y probablemente no se re-
lador de que todavía nadie haya recogido los dichos montan a ningún testimonio común escrito. Frente
de los españoles que no tienen, dice, “menos agu- al apotegma clásico, de transmisión escrita, el apo-
deza y donaire ni menos gravedad que los que en tegma nuevo, más entroncado con el chiste que con
los libros antiguos están escritos”. En la Floresta, la la moral, se convierte en un bien mostrenco que se
mejor colección y más graciosa de las de su época, halla al alcance de cualquier español. Q

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ARTE DE LA BREVEDAD

A pesar de su creciente aliento poético, el aforismo español sigue estando


gobernado por la prosa del pensamiento, que nace de la incertidumbre
e indaga en zonas precarias de la verdad

AÑICOS
El aforismo español
de los siglos XX y XXI

ERIKA MARTÍNEZ

1
La revitalización del aforismo en nuestro tos de Pascal y los fragmentos de Nietzsche. Sobre
país puede ser considerada como una mani- ellos escribió José Bergamín, contraponiéndolos:
festación particular del auge de las formas “Pascal: la inteligencia de la pasión. Nietzsche: la
breves en lengua castellana. “El escritor pasión de la inteligencia”.
que hoy quiere ser leído ha de saber fabricar A pesar de su creciente aliento poético, el afo-
píldoras, extractos, quintaesencias”, apuntó Una- rismo español sigue estando gobernado por la pro-
muno. Dicho auge, a su vez, arraiga en la crisis de sa del pensamiento. Su tono y contenido parecen
la modernidad y en la afición del capitalismo tardío axiomáticos, pero nacen de la incertidumbre, inda-
por la fórmula brevedad + eficacia = rentabilidad. gan en zonas precarias de la verdad. Un aforismo,
Es cierto, vivimos sobre un escribió Juan Ramón Jiménez, “no afirma ni niega,
terreno abonado para el afo- porque pone en crisis tanto a la afirmación como a
El aforismo parte rismo, género que optimiza la negación”. Sin embargo, desde principios del si-
su economía expresiva, que glo XX, la prosa de pensamiento del aforismo tole-
de la economía de lo breve es lingüísticamente renta- ra rincones donde los galimatías discuten la lógica
y la violenta, generando ble. Pero si esta fuera toda moderna, la dispersión boicotea la eficacia literaria
la verdad, un aforismo sería y las intuiciones caprichosas usurpan el lugar de la
un nuevo espacio capaz indistinguible de un eslogan pertinencia gnómica. De la razón moral al rapto
de adoptar la forma de publicitario. No ocurre así poético, del pensamiento a la imagen, el aforismo
confesiones y experimentos porque la literatura es capaz español actual navega bien entre dos aguas.
de ofrecerte a tu propia mas-

2
cada vez más lúdicos cota de cena; no todo lo pe- José Bergamín es cada vez más alto y
queño es sumiso y apacible. delgado, escribió Juan Ramón: se está
Como particularidad, el aforismo contemporá- estirando para alcanzar las ideas inédi-
neo parte de la economía de lo breve (concreción, tas. Durante el primer tercio del siglo
agudeza, intensidad) y la violenta, generando un XX, el estirón que pegaron los aforistas
nuevo espacio fronterizo capaz de adoptar la for- españoles aportó al género una vitalidad inusitada
ma de confesiones, dudas, observaciones bizarras y lo convirtió en un nuevo artilugio. Por su carácter
y experimentos cada vez más lúdicos. En el caso asistemático, fractal y discrepante, por su tenden-
español, Werner Helmich ha señalado la aparición cia centenaria a discutir toda forma de aspiración
de dos variantes, la metafísica y la metafórica, cu- a la totalidad, los aforismos fueron un imán para
yos antecedentes más claros serían los Pensamien- las vanguardias. “Reaccionar contra lo fragmenta-

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rio es absurdo porque la constitución del mundo es abarca de 1935 a 1981. En todos ellos, sin olvidar su
fragmentaria, su fondo es atómico, su verdad es di- poética del disparate, Bergamín alternó el extraña-
solvencia”. Y la cita no es de ningún vate de la pos- miento y el tradicionalismo, recurriendo a menudo
modernidad, sino del propio Gómez de la Serna. a la metáfora conceptista.
Dentro de la tradición metafísica se encuentran Queda para el final de este recorrido una de
los aforismos no demasiado conocidos de José Camón las obras aforísticas más fascinantes del siglo XX:
Aznar, Ramón J. Sender o Juan Gil-Albert, todos na- Ideolojía de Juan Ramón Jiménez, recogida en Me-
cidos antes de 1905. En la variante más experimental, tamorfosis IV (1997). Los más de cuatro mil frag-
lúdica y provocadora, podemos situar a Max Aub y al mentos que la integran van de la impresión al jui-
propio Ramón. Las greguerías requerirían un estu- cio, el recuerdo o la réplica, y acompañan —como
dio al margen. Respecto a Aub, la inmensa mayoría señala Sánchez Romeralo— la evolución de la poe-
de sus brevedades no pueden ser consideradas como sía del autor, alternando periodos de extrema con-
aforismos en sentido estricto, debido a su carácter densación con periodos de un pulso relajado. Nada
ficcional y narrativo. Sin embargo, él mismo publicó se podía adaptar mejor al género del aforismo que
en 1965 su “Paremiología particular” y recientemente la siguiente poética: “Muerte y vida necesitan acaso
hemos podido disfrutar del magnífico Mucha muer- un método, pero el método ha de ser sorprendente”.
te (Cuadernos del Vigía, 2011), que contiene algunas

3
brevedades afines al género. De la misma índole son Es posible que pueda hablarse de dos
los fragmentos dispersos recogidos bajo el título Afo- auges del aforismo español, uno acon-
rismos en el laberinto (Edhasa, 2003). tecido durante el primer tercio del siglo
Es difícil clasificar los Proverbios y cantares, XX y otro que va desde los pasados años
de Antonio Machado, cuyo carácter sentencioso noventa hasta la actualidad. A pesar de
apunta, más que al aforismo, a una estilización ello, hay una generación intermedia de aforistas
poemática del refranero popular. Otra cosa son los españoles de inmensa talla, entre los que destacan
diferentes escritos de Juan de Mairena, apócrifo Juan Eduardo Cirlot, Cristóbal Serra, Ángel Cres-
para el que Machado recurrió a una prosa gnómica po o Rafael Sánchez Ferlosio. Mención especial
que sí alternaba el ensayo breve y el aforismo. merecen Los aerolitos, imprescindible obra aforís-
Respecto a José Bergamín, cabe citar El cohete y tica de Carlos Edmundo de Ory, a quien Calambur
la estrella (1923), La cabeza a pájaros (1934) y los dedicó el año pasado una edición conmemorativa.
Aforismos de la cabeza parlante (1983), así como Durante las dos últimas décadas, puede consta-
Las ideas liebres (1998), volumen recopilatorio que tarse un incremento progresivo de la publicación

ENERO 2012 MERCURIO
personas en una comunicación cuyo alcance opti-
mizan las herramientas literarias de la brevedad
(más allá, por supuesto, de que las redes sociales
constituyan una ficción autónoma).
4. Dado que el aforismo es un género especiali-
zado en la discusión de lugares comunes, me atre-
vo a plantear una hipótesis tan descabellada como
los pensamientos de Jerzy Lec: durante la última
década, el aumento de la práctica aforística puede
ser analizado como una respuesta a la progresiva
institucionalización de lo políticamente correcto.
El aforismo sabe que los clichés morales están en
los antípodas de la libertad.
En España, hay en la actualidad una cama-
da significativa de aforistas. Entre los muchos
que podrían citarse se encuentran, por ejemplo,
Ramón Eder, Jorge Wagensberg, Ángel Frutos
Salvador, Dionisia García, Miguel Ángel Arcas,
Fernando Menéndez, Andrés Trapiello, Enrique
Baltanás, José Mateos, Fernando Aramburu, Ri-
cardo Martínez Conde, Carlos Pujol o Juan Varo,
por poner tan solo algunos ejemplos. De entre los
poetas, sobresale Lorenzo Oliván, autor de cuatro
libros de aforismos que maneja con maestría intui-
ción, meditación e imagen. En Hilo de nadie (DVD
Ediciones, 2008), alterna miniaturas en prosa y
poemas. Carlos Marzal ha publicado el magnífico
Electrones (Cuadernos del Vigía, 2007), pero ade-
más mantiene una producción ingente en su blog
bajo el rubro “Aforismo del día”. Tusquets editará
en 2012 su esperado volumen La arquitectura del
aire. Andrés Neuman es autor de El equilibrista
(Acantilado, 2005), de varios dodecálogos sobre
el cuento y del diccionario aforístico por entregas
Barbarismos. Álvaro Salvador ha escrito el agu-
do y sarcástico Después de la poesía (El Gaviero,
2007), donde se lee: “No creo que se puedan escri-
bir aforismos sin tener cierta edad o cierta mala le-
che”. Divertido, inteligente y punzante es Minimás
(Baile del Sol, 2008), de la poeta sevillana Carmen
Camacho.
Probablemente la mejor colección de aforismos
de 2011 sea Los extremos, de Ramón Andrés (Lu-
ASTROMUJOFF
men), libro donde la reflexión iluminada se com-
bina con un escepticismo clásico. No hay que olvi-
dar tampoco que las magníficas prosas del Diario
anónimo de José Ángel Valente, recientemente
de libros de aforismos en publicado por Galaxia Gutenberg, están trufadas
España. Sin olvidar el com- de aforismos, género que el autor gallego ya había
Durante el primer plejo origen del fenómeno, frecuentado con anterioridad. Entre las novedades
podemos aventurar algunas se encuentran además dos libros interesantísimos
tercio del siglo XX, el estirón causas: de Jordi Doce (Perros en la playa, La Oficina) y Ro-
que pegaron los aforistas 1. El incremento no es espe- ger Wolfe (Siéntate y escribe, Huacanamo), ambos
cífico del género sino que res- misceláneos. También podemos citar la reciente
españoles aportó al género ponde a una transformación publicación en Tusquets de los Aflorismos de Carlos
una vitalidad inusitada general del mercado del libro. Castilla del Pino.
y lo convirtió en un nuevo 2. El reciente fin de siglo “Los antiguos concibieron la escritura como un
dio una mayor pulsión frag- fármaco de la memoria. Escribir para recordar que
artilugio mentaria y filosófica a nues- acaso nunca fuimos”, apunta Ramón Andrés. Le-
tra lírica. Este hecho podría yéndolo, me pregunto de qué manera afectará al
haber empujado a los poetas hacia el aforismo (hay género un presente como el nuestro donde no ya el
narradores aforistas, pero son muchos menos). pasado, sino el mismo futuro se articula como rui-
3. Los mensajes de las redes sociales, sometidos na. ¿Qué pensamiento emergerá de nuestros próxi-
a la estrechez verbal, han entrenado a millones de mos añicos? Q

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ARTE DE LA BREVEDAD

Los aforismos del colombiano Nicolás Gómez Dávila, que él llamaba


“escolios”, son decantaciones de horas innumerables en una biblioteca
personal de más 33.000 volúmenes

UN ARSENAL DE IDEAS

ENRIQUE GARCÍA-MÁIQUEZ

E
l colombiano Nicolás Gómez Dávila gente ineludible a una multiplicidad de curvas muti-
(1913-1994), uno de los máximos afo- ladas” o “Lo que el escritor dice es meramente parte
ristas del siglo XX, no se consideró del material con que escribe” o “Lo que aquí digo
autor de aforismos. A los suyos, los parecerá trivial a quien ignore todo a lo que aludo”.
títulos de sus libros los llaman “es- Por supuesto, se le puede leer en pequeñas dosis,
colios”, y los refieren a un texto (uno) implícito: como un arsenal de ideas reaccionarias. Para una
Escolios a un texto implícito, Nuevos escolios a mayoría de sus lectores, la calidad de su escritura
un texto implícito… Sin esa segunda precisión, el las hace aceptables; o, mejor dicho, inaceptables
nombre de “escolios” podría parecer denomina- pero hipnotizantes: “Si el escritor logra, de vez en
ción de origen, como lo es “greguerías” (Ramón), cuando, abrir y cerrar su frase como una mano
“pecios” (Ferlosio), “f lechas” (Nietzsche), “quinta- pliega y despliega un abanico, sus ideas nos sedu-
nares” (Mario Quintana), “af lorismos” (Castilla cen cualesquiera que sean”. Quizá su desdén por
del Pino), “aerolitos” (Ory), etc. “Escolio” le vale sus críticos responda más a la incapacidad que de-
como denominación de origen, pues el término se muestran de apreciar una prosa extraordinaria que
refiere —recuerda Franco Volpi— a una nota en a la divergencia ideológica, con la que Gómez Dávi-
los manuscritos antiguos y en los incunables, aña- la parece contar siempre, casi con agradecimiento,
dida por el “escoliasta” en interlínea o al margen para dar nervio a su obra: “Solo un talento eviden-
para explicar los pasajes oscuros del texto. Gómez te hace que le perdonen sus ideas al reaccionario,
Dávila, cuyos aforismos son decantaciones de ho- mientras que las ideas del izquierdista hacen que
ras innumerables en una biblioteca personal de le perdonen su falta de talento”. Si uno encuentra
más de 33.000 volúmenes, bien podía bautizarlos un escolio romo, ha de leerlo otra vez porque, dicho
como “escolios”. con sus palabras, “el lector se cree ante un error. Y
Pero quedándonos ahí los está ante una emboscada”.
comprendemos a medias. Pero su gran emboscada consiste en hacernos
Todos los escolios se Cuando intenté extraer sus creer que estamos ante una obra fragmentaria. Su
enraízan en ese texto que solo aforismos metaliterarios, fue
imposible. Todos —a pesar de
obra única, pero implícita, campa (como en la carta
del cuento de Poe) en todos sus títulos. Es implícita
se nos menciona, pero cuya que su brillantez y concisión porque el autor confía en nuestra inteligencia para
presencia acaba resultando permiten presuponer su au- adivinarla: basta que dibujemos con pulso firme la
tonomía— se enraizan en ese línea de sus sucesivos escolios, como en el juego de
ineludible texto que solo se nos mencio- unir los puntos. Cuando, además de la admiración
na, pero cuya presencia acaba literaria, sentimos una peligrosa comprensión de su
resultando ineludible. No digo que los otros aforis- pensamiento y —lo que es más peligroso aún— del
tas no tengan en su mayoría una visión del mundo mundo, es que hemos dado con el texto implícito. Lo
más o menos enfocada. La tienen. Lo específico de dijo él mismo: “Del libro del reaccionario el lector
Gómez Dávila es que esta se concreta en un texto sale menos indignado de lo que entra”. Gómez Dávi-
(implícito). la, que se regodeaba en la indignación de los tontos,
Él va advirtiéndolo: “La elegancia literaria no es puso algunas complicaciones para que entrásemos
el arabesco que traza una mano diestra, sino la tan- en su libro. Lo que es un aliciente más, todavía. Q

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clásicos 19
ARTE DE LA BREVEDAD

Ramón, por greguerías

anomalía afortunada. En la eclosión de los ismos,


militó en el ramonismo en calidad de sumo sacer-
dote y a la vez de monaguillo de sí. Tenía casi todo
en contra para ser tomado en serio, pero, al cabo
de los años, cuando la obra de tantos contempo-
ráneos suyos f lota en los limbos academicistas, él
sigue ahí, con cierta rigidez de muñecón de cera,
de acuerdo; con un leve aspecto de marioneta pol-
vorienta de ventrílocuo, sin duda, pero ahí.
Ramón parecía escribir en estado de sonambu-
MIGUEL SÁNCHEZ LINDO

lismo, tropezando con los milagros pequeños del


mundo. Lo suyo era fabricar juguetes, y su gran
juguete fue la greguería. ¿La inventó él? El propio
Ramón, echando tierra encima a su paternidad del
invento, rastreó greguerías en Luciano, en Eurípi-
des, en Góngora, en Shakespeare… Quedemos en
que Ramón adoptó el término y le aplicó un molde
en el que cabían muchas cosas: aforismos, metáfo-
FELIPE BENÍTEZ REYES ras, humoradas, cursilerías, chistes, refranes… El
asunto tal vez no haya que tratarlo en términos de
invención, sino más bien de reinvención: Ramón

P
arece como si Ramón, a la hora de po- sistematiza fórmulas existentes mediante el proce-
nerse a escribir, se colocara aquella dimiento de aislarlas, de bautizarlas y de convertir-
mano postiza —la “mano convincen- las en género.
te”— con la que podemos verlo des- Las muchas definiciones con las que Ramón se
variar a su gusto en una filmación de creyó en la obligación de prestigiar la greguería
1928. Él disfrutó de una chaladura metódica y resultan algo liosas y contradictorias entre sí. Da
amable, más proclive a las melancolías de orden la impresión de que, al no poder encontrar una de-
lírico y burgués que a los demonismos y tenebro- finición lo suficientemente precisa y abarcadora,
sidades de carácter que propiciaban los ismos. optó por arriesgar muchas definiciones que, en el
Aparte de eso, fue un hombre que tenía más aspec- fondo, no pasan de ser pompas de jabón. Lo curio-
to de cronista oficial de la villa que de maestro de so es que todas ellas resultan válidas…, según el
ceremonias —en pista com- caso: una definición sirve para algunas greguerías
partida con Cansinos— de y para otras menos, lo que no quiere decir que esas
La de Ramón fue la Nueva Literatura. Ramón otras se queden sin definición específica, porque
una genialidad desportillada fue quizá demasiado circen-
se para ganarse una reputa-
Ramón, como digo, tenía repertorio. En el conjun-
to de ellas se ofrecen distintos planos de visión, de
y falta de pulimento, con un ción de genio, pero el caso es construcción y de efecto: cada greguería es lo que
pie en las vanguardias más que lo fue: un genio de reso- es. Por haber, hay greguerías que ni siquiera pare-
nancia hueca quizá, disperso cen greguerías.
o menos universales y con y desordenado, más atento Ramón, en su infancia perpetua, fabricaba ju-
el otro en el casticismo a la a los pormenores que a las guetes, en fin, y a veces los desmontaba para ver
panorámicas, más partida- cómo estaban hechos, pero lo suyo era fabricar-
madrileña, pero genialidad rio de hacer monigotes que los, no explicar cómo los hacía…, a menos que la
al fin y al cabo grandes esculturas: “Acep- explicación fuese, claro está, otro juguete retórico,
tar la trivialidad es hacerse como esos “prólogos renovables” que fue poniendo
transigente, comprensivo, contentadizo”. La suya al frente de sus recopilaciones.
fue una genialidad desportillada y falta de puli- Ramón tal vez no inventó en sentido estricto
mento, con un pie en las vanguardias más o me- la greguería, pero desde luego la greguería inven-
nos universales y con el otro en el casticismo a la tó en sentido lato a Ramón. Y luego todos hemos
madrileña, pero genialidad al fin y al cabo, al me- acabado siendo —a mucha honra— gregueristas
nos en la medida en que el genio representa una gregarios. Q

ENERO 2012 MERCURIO
ENTRE
CIPRESES
Y OLIVOS
La milenaria capital de Grecia es la ciudad europea
habitada por más animales en libertad y la que más
respeto muestra por ellos

BLANCA ANDREU

C
uando llegué por primera como oleaje y se suman a los jardines, a sistema. Se los llama adéspota, que sig-
vez a Atenas y vi sus colinas, las enormes excavaciones y a los entor- nifica “sin dueño”. Son completamente
el tremendo farallón recorta- nos de las ruinas clásicas. libres. A veces se pasean a su aire por el
do en el cielo y la fantástica Ahí mismo, en la Akrópolis, los lirios Partenón sin comprar entrada, circulan
corona de columnas, me dije: crecen libres y hay anémonas y adelfas por Síntagma respetando los semáforos,
—¿Cómo puede ser tan bella? sin colegiar y lechuzas blancas que so- se tumban al sol en Plaka, o se acercan a
Era la menos enfática de las ciudades, brevuelan el declinar de las Pléyades. un restaurante a comer. Viven, en suma,
la más natural con su cabellera de cipre- Además, Atenas es la ciudad europea su vida independiente como todo griego
ses y olivos. Pensé que me habría gusta- habitada por más animales en libertad que se precie. Ellos mismos eligen a sus
do verla con caballos. y la que más respeto muestra por ellos. proveedores. A menudo, en los mejores
Mucho después, la última vez que “La salud de un pueblo es la salud de sus hoteles de Atenas, en las entradas porti-
estuve allí, desde la terraza de un hotel animales”, decían los antiguos. cadas donde un conserje vestido de ma-
que domina la ciudad, me di cuenta del En las estelas, en los frisos, en las es- riscal monta guardia, suele reposar al-
secreto —oculto en la evidencia— que culturas funerarias y en la alfarería ar- gún perro instalado en una alfombrita,
anima su belleza: Atenas tiene el campo queológica aparecen no solo los caballos a veces viejo y ya despeluchado o medio
dentro. —a quienes atribuían la máxima belle- cegato, cuya visión los ricos arrogantes
No solo el trono de los antiguos dioses za— sino los perros. Y es que en Atenas deben soportar sin rechistar. Incluso
resulta ser un monte virgen engarzado son ciudadanos de pleno derecho. A los hay uno, Hispas, que ha decidido adop-
en plena ciudad. También Likabitos, el perros de Atenas solo les falta votar, tar a la Embajada Española como socio.
cerro donde habitaban antaño camadas aunque nadie duda de que influyan en También es una ciudad de gatos lus-
de lobos, está incrustado en medio de las corrientes de opinión, como el famo- trosos que celebran concilios a la puerta
la urbe. Desde la altura se ven grandes so Lukánikos, el perro que no se pierde de las tabernas, de palomas que planean
meandros de campo que entran y salen ni una sola de las manifestaciones anti- como buitres a la hora del desayuno, de

En la Akrópolis, los lirios crecen libres


y hay anémonas y adelfas sin colegiar y lechuzas blancas
que sobrevuelan el declinar de las Pléyades

MERCURIO ENERO 2012
geografías20 | 21

Fragmento de un fresco
descarados gorriones que se atreven a micénico, ss. XIV-XIII a.C.; que los triunfos griegos se levantaban
posarse en las terrazas de Plaka al borde cariátides del Erecteion , en con madera y a los veinte años se des-
del plato del pan. la Akrópolis; y Tetradracma truían. En parte, supongo, a causa de
Mirando a la izquierda desde el enor- ateniense, s. VI a.C. aquellos que estaban hartos de oír ha-
me farallón puede verse el antiguo ba- blar de cómo Milcíades, o quien fuera,
rrio de los alfareros, que ahora, junto les había dado para el pelo a unos xenoi.
con la necrópolis, forma el gran museo mo de los miembros detestados por la Sin embargo, cualquiera puede advertir
arqueológico del Ceramikón. Allí, donde comunidad. que hay una gran sabiduría en esa nor-
aún permanecen los restos de los héroes Esa costumbre, que en principio pa- ma que combatía la arrogancia más allá
de Maratón, dormita entre la hierba una rece tan envidiable, tuvo que suprimirse del justo orgullo y que acreditaba la so-
colonia de tortugas, tan campantes y fe- cuando degeneró dando lugar a gran- beranía del tiempo sobre los hechos, en
lices bajo el sol griego como desdichadas des injusticias. La más notable fue la de tanto que, de paso, espabilaba al que se
y hacinadas malviven en la estación de Arístides, apodado el Justo. El propio había dormido en los laureles.
Atocha de Madrid, que parece el Pozo Arístides contó que el día de la votación También —y sobre todo— hay una
Negro de Calcuta de los quelonios, un se le acercó un sujeto que no sabía escri- altísima sabiduría en la ley tácita que
centenar de tortugas “ornamentales”. bir y le preguntó si le importaría anotar obliga a los restaurantes y las taber-
Casualmente, en griego se utiliza la su voto en su óstrakon: nas a dar algo de comida a cualquier
misma palabra para el caparazón de las —Por supuesto —respondió el gran necesitado que se acerque a mendi-
tortugas y para los pedazos de la cerá- hombre— ¿Qué nombre quiere que es- gar. Cuando me enteré de su existen-
mica que los alfareros destruían cuando criba? cia, me vino a la mente la vieja bossa
una pieza resultaba defectuosa. Esos —“Arístides” —le dijo el otro, que no nova de Vinicius de Moraes: “Se todos
trozos cóncavos, llamados óstraka, ser- lo conocía. fossem iguais a você / qué maravilha
vían para votar las condenas al ostracis- —¿Y por qué “Arístides”? —inquirió viver”. Q
él, muy sorprendido.
—No lo he visto nunca, ni sé de él que
haya hecho nada malo, pero estoy harto
de escuchar que todos lo llaman “el Justo”.
Contaba Benet que los triunfos ro-
manos se construían en piedra, en tanto

ENERO 2012 MERCURIO
22 fondo y formas
IGNACIO F. GARMENDIA

Las fuerzas
extrañas

P
ublicado por la serie de Relatos Ilustrados de
Metropolisiana, donde han aparecido títulos
de Gautier, D’Aurevilly, Stevenson o Melvi-
lle, El Hombre de la Arena de E.T.A. Hoffmann es
uno de los mejores cuentos del escritor alemán y
una joya de la imaginería romántica, recuperada
por la editorial sevillana en una nueva traducción
de Diego Valverde Villena —obsérvese la leve pero
pertinente alteración del título tradicional— que se
presenta embellecida por los dibujos de Lidia Or-

M
tega. Recogida por primera vez en las Piezas noc- iembro distinguido de lo que ha dado en
Ilustración de Lidia turnas (1817) de Hoffmann y glosada en términos llamarse “el otro 27”, Edgar Neville fue
Ortega para memorables por Freud u Offenbach, la desdichada un alegre vividor, pero también un hom-
El Hombre de la historia —no exenta de ironía— del atormentado bre de genio. Solo algunos de sus compañeros de
Arena de E.T.A. Natanael y la inexpresiva Olimpia, hija no natural generación, Mihura o el inmenso Jardiel, lo igua-
Hoffmann. del mefistofélico profesor Coppelius, es uno de esos lan en talento, lucidez y buen humor. Publicado por
relatos inmortales que se recuerdan siempre. En el Taurus en 1957 e inencontrable desde hacía tiempo,
epílogo, Valverde Villena muestra una admirable Mi España particular es un título tardío y menos
familiaridad con la tradición de “lo siniestro” que conocido que Don Clorato de Potasa (1929), pero
no se limita a los clásicos del género, pues junto al la feliz reedición de Reino de Cordelia demuestra
repertorio habitual encontramos menciones a las que el ingenio de Neville no tiene momentos bajos.
“fuerzas extrañas” de Lugones, los replicantes de Como “Un lujo de otro tiempo” define Fernando R.
Blade Runner o la novia cadáver de Tim Burton. Lafuente, en su prólogo a esta “Guía arbitraria de
los caminos turísticos y gastronómicos de España”,

A
l menos desde Nietzsche sabemos que no la figura del orondo conde de Berlanga del Duero,
todo era claridad en el cielo luminoso de que se desplaza en un Aston Martin y deja claro
Grecia, y desde entonces es habitual re- desde el principio su punto de vista: “Un turista
ferirse a la dialéctica entre lo apolíneo y lo dio- sin dinero es un desgraciado”. La Guía, impagable,
nisiaco para caracterizar la cultura griega de un ofrece el aliciente no pequeño de retratar un país
modo que explique su originalidad sin recurrir a muy distinto, recorrido justo antes del desarrollis-
esquemas ideales. Traducida por Joaquín Chamo- mo y la eclosión del turismo de masas.
rro para Akal, la Historia del Arte en la Antigüe-

M
dad de Johann Joachim Winckelmann es uno de uchos asocian la imagen del seductor y
esos libros por los que no pasa el tiempo, pese a enigmático Jay Gatsby, tal vez el mejor
que los dos siglos y medios transcurridos desde la personaje de Scott Fitzgerald, a los im-
edición original (Dresde, 1764) han modificado posibles trajes de Redford en un famoso filme que
notablemente la interpretación esteticista del his- no supera a la novela homónima. Quienes aún no
toriador neoclásico. Frente a esta visión elevada la hayan leído tienen ahora la oportunidad de acer-
pero reductora, se alzan obras como las de Walter carse a El gran Gatsby (1925) de la mano de Justo
Burkert, de quien Acantilado ha dado a conocer Navarro, que ya tradujo los Cuentos de Fitzgerald
De Homero a los Magos (2002), donde analizaba la (Alfaguara, 1998; 2010) y acaba de publicar en
tradición oriental en la cultura griega, y La crea- Anagrama una excelente versión de su obra maes-
ción de lo sagrado (2009), a los que se suma ahora tra. Su traducción se suma a otra reciente de José
—con traducción de Luis Andrés Bredlow y prólo- Luis Piquero, que también ha traducido —ambas
go de Glenn Most— El origen salvaje, que arroja en Paréntesis— A este lado del paraíso (1920). Pero
luz sobre los ritos de sacrificio y otros aspectos la novedad más importante es sin duda el volumen
muy alejados de la “pureza ática”. La pervivencia, de “ensayos autobiográficos” cuidadosamente pre-
siglos después, de oscuros mitos heredados de la parado por Yolanda Morató para Zut, Mi ciudad
época arcaica revela un trasfondo bárbaro que no perdida, un viejo proyecto de Fitzgerald que no fue
se corresponde con la imagen estilizada de la Hé- aceptado por su editor, el gran Maxwell Perkins, y
lade como solar de la razón ilustrada. ve la luz por primera vez en castellano. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas
23

NARRATIVA, ENSAYO, CIENCIA, POESÍA, LITERATURA INFANTIL Y JUVENIL, RESEÑAS BREVES

NARRATIVA Fermín Romero de Torres, uno de lectura fácil que explora los límites

EL PRISIONERO los personajes más interesantes


de la saga no solo por su vida un
de la amistad y que altera la biografía
de algunos personajes ya presentes

DE MONTJUIC tanto canallesca, sino también por


su enigmático pasado. La novela
en las entregas anteriores. De hecho,
en la presentación del libro ante los
arranca en la Navidad de 1957, medios de comunicación, el propio
cuando un hombre con una mano de autor destacó que “desde el principio
porcelana entra en la librería de los quise hacer una saga en la que cada
ÁLVARO EL PRISIONERO Sempere para comprar una edición nueva novela modificara la lectura de
COLOMER DEL CIELO de El conde de Montecristo y para las anteriores”. Dicho y hecho.
Carlos Ruiz Zafón pedir al tendero, Daniel Sempere, que El prisionero del cielo es un
Planeta se lo entregue al citado Fermín. Este cuento de Navidad que rinde
22,90 euros | 379 páginas hecho tan singular desencadena una
serie de recuerdos que transportan


al lector hasta una celda del Castillo

E
n cierta ocasión Noah Gordon, de Montjuic en 1939. La prisión
autor de no pocas novelas de está bajo el control del retorcido
éxito internacional, aseguró Mauricio Valls, un letraherido de alma LA TERCERA PARTE
que nunca se había encontrado con podrida que tiene bajo su yugo a un DE LA ‘TETRALOGÍA DEL
tantos periodistas preguntándole preso al que explota literariamente
CEMENTERIO DE LOS
cuál era la fórmula del best-seller —el escritor de renombre David
como en España. Su respuesta, Martín—, a un ladrón que escondió LIBROS OLVIDADOS’ ES
evidente: trabajo, trabajo y trabajo. el botín antes de ser detenido — UN CUENTO DE NAVIDAD
No obstante, la insistencia de Sebastián Salgado— y a un tercer
QUE RINDE HOMENAJE A
nuestros reporteros en la cuestión hombre oculto tras una identidad
de marras permite dos deducciones: falsa —Fermín. Con estos personajes DICKENS Y A UN MUNDO
una, que demasiados periodistas compone Ruiz Zafón una novela de EDITORIAL EN EXTINCIÓN
ansían abandonar la profesión
—cosa no tan extraña, a tenor de no pocos homenajes a la novela
los tiempos que corren—, y dos, decimonónica. Entre los renglones
que predomina en ambientes de cada párrafo pueden entreverse,
intelectuales la idea un tanto como sombras entre palabras,
mezquina de que se puede hacer las siluetas de Charles Dickens y
literatura —buena o mala, no Alejandro Dumas, además de otros
importa aquí— empleando trucos clásicos quizá no tan evidentes a
del almendruco. Pues bien: ahora simple vista. Pero la novela también
ha aterrizado en las librerías El puede ser interpretada como un
prisionero del cielo, novela de Carlos homenaje a un mundo editorial
Ruiz Zafón que ofrece la solución hoy en extinción: libreros de viejo,
a los desvelos de quienes andan bibliotecas secretas, escritores
obsesionados con encontrar la malditos, letraheridos perversos…
piedra filosofal del triunfo: tener una En un tercer nivel, habría que
historia que llegue al corazón de la destacar el tributo rendido a
gente. Y punto. Barcelona, que en esta ocasión
Aunque El prisionero del cielo no es tanto el decorado gótico y
es la tercera parte de la llamada siniestro de las anteriores entregas
“Tetralogía del Cementerio de los como un personaje más de la
Libros Olvidados” —cuya cuarta y historia. Así pues, Carlos Ruiz Zafón
última, según ha anunciado el autor, nos ofrece una tercera novela que,
podría llegar en dos o tres años—, en lo tocante a calidad estilística,
debe ser leída como una secuela supera a sus predecesoras y que,
cronológicamente inmediata a La en lo referente a su repercusión
sombra del viento (2001), siendo mediática, provocará otra oleada
la segunda entrega, El sueño del de periodistas preguntándose qué
ángel (2008), su “precuela”. En esta diablos hay que hacer para escribir
ocasión se nos cuenta la historia de Carlos Ruiz Zafón. un best-seller. Q
Ricardo Martín

ENERO 2012 MERCURIO


Henry Cartier-Bresson

que tampoco nosotros somos


buenos.
Dos puntos de vista es, como
todas las buenas novelas, una
reflexión sobre la libertad. Sobre
el enamoramiento como decisión
más que como reacción química.
Sobre si son posibles los buenos
sentimientos o los sentimientos
absolutos en periodos de carestía,
rencor y mezquindad moral.
Sobre cómo las pasiones se
construyen ideológicamente y
conforman una masa de razones
exógenas que convierte las
barreras en catalizadores del
sentimiento amoroso y del ego
como fantasía de una identidad
propia. Vencidos y vencedores
están enfermos y buscan excusas
El muro de Berlín, 1963. para su reconstrucción como seres

un romance. Cada ademán se hace


incómodo, incluso incompatible
CASI UNA con la pasión que se le supone

ANTINOVELA al enamoramiento. Frío, miedo,


hostilidad crean una historia
sobre las líneas imaginarias y los
muros de hormigón que separan
territorios y personas, generando
MARTA DOS PUNTOS DE VISTA sentimientos de culpa y vergüenza.
SANZ Uwe Johnson La grieta política sobredimensiona
Traducción de Iván de los Ríos un episodio erótico que en
Errata Naturae otras circunstancias hubiera
19,90 euros | 264 páginas sido intrascendente y que, sin Uwe Johnson.
embargo, le da a B. la posibilidad de
comportarse como un “casi” héroe. humanos. El egocentrismo de los

U
we Johnson formó parte Pese a que ni siquiera es capaz de amores difíciles, la necesidad de
del Grupo 47 junto a Böll, recordar el color de los ojos de D. subrayar un yo maltrecho a través
Grass, Enzensberger, Lenz o El retrato de Alemania Occidental del amor, se cuestionan en Dos
Bachmann. Practicó la “antinovela”, se encarna en B. y en él se subrayan puntos de vista por el anonimato
un proyecto narrativo que huye los “defectos” del capitalismo: clandestino de unos nombres
de los elementos reconocibles consumismo, falta de expectativas, reducidos a inicial. Es la misma
del género quebrando las alcohol, un sentimiento de culpa impersonalidad con que se dibuja
expectativas del lector. Dos que se traduce en condescendencia. una toponimia nebulosa del mapa
puntos de vista es casi una Y una cuestión que late de Alemania y el plano de Berlín.
antinovela donde la violencia de soterradamente, manchando Pese a que exista un tajo bien
su desnuda propuesta retórica es a cada habitante del mundo delimitado. Una llaga lineal.
la del mundo que retrata. No es occidental: ¿en qué tipo Esta novela habla de la escisión,


manierismo, sino la única forma de personas nos hemos de líneas que convergen y senderos
posible de mostrar “los síntomas convertido? El honor que se bifurcan, fronteras
de esta enfermedad llamada Muro perdido de Katherina imaginarias que se concretan en
de Berlín”. Lo escribe Max Frisch y DESASOSEGANTE Bloom de Böll responde un alambre de espino; habla de
así se recoge en la portada de esta a esa misma inquietud: lo que separa la hostilidad del
NOVELA QUE
edición. la vigilancia, el ahogo y amor, de lo que nos convierte en
Una sola voz, que se manifiesta CUESTIONA la falta de libertades de extranjeros, de la difusa línea de
al final, hace converger a D., una LOS CONCEPTOS DE los países comunistas puntos que distingue la violencia
enfermera de Alemania Oriental, asoman la patita por de los periodos en calma. Habla
LIBERTAD, VIOLENCIA,
y a B., un fotógrafo de Alemania debajo de la puerta de un de lo que nos lleva a cuestionar
Occidental. Con una prosa que AMOR, INDIVIDUO Oeste aparentemente el significado de los conceptos
se desliza sobre las personas y confortable, pero abstractos: libertad, violencia, paz,
habla con vocación quirúrgica de injusto e hipócrita en su estructura amor, país, individuo. Dos puntos
las emociones, se retransmite profunda. Böll y Johnson nos abren de vista es una novela bellísima,
imaginativamente la periferia de los ojos con pinzas para que veamos desasosegante, incómoda. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas24 | 25

NARRATIVA
escritura: el sueño o la duermevela la invención sirve para asediar la

REFRENDO DE inquietantes, los imprecisos


límites de realidad y fantasía,
realidad.
Esta “novela de Pedro”, por

UNA TRAYECTORIA la cuestionable consistencia


de la realidad, la sensación de
decirlo imitando al remoto
Andrés Choz, la interrumpen
despojamiento o de ocupación media docena de bloques
por alguien ajeno del cuerpo, narrativos con plena autonomía
la identidad o el doble. Más la que contienen medio centenar
SANTOS SANZ EL LIBRO DE LAS ósmosis entre vida y literatura y de piezas muy breves. Aunque
VILLANUEVA HORAS CONTADAS persistentes reflexiones sobre la podrían haber sido objeto de
José María Merino propia ficción y la literatura. edición autónoma, englobadas en
Alfaguara Esta constelación de ideas, este recipiente mayor tienen el
17,50 euros | 209 páginas sugerencias, sospechas y efecto enriquecedor de potenciar
afirmaciones se muestra en una el conjunto. En virtud, primero, de
arquitectura narrativa peculiar, con su evidente confesión de fe en la

E
l tópico sostiene que un semejante impulso de originalidad fuerza intrínseca de los cuentos
autor siempre escribe el y libertad al de otras ocasiones en la existencia humana. Y
mismo libro. Algunos sí se anteriores. La polisemia del porque, además, se integran con
repiten cuando la flojera lastra la título apunta a la situación actual plena naturalidad y virtualidad
creatividad. Otros demuestran de Pedro y a su actividad como en el mundo de la novela mayor
la firmeza de convicciones narrador. De ahí que el libro se al apuntalar la creencia de Pedro
seminales que atraviesan su configure como un mosaico en de que “la literatura desvela las
obra entera. Es este el claro caso el que unas piezas proporcionan conductas, los sentimientos, las
de José María Merino, quien una novela tout court y otras una actitudes, que la realidad suele
ha forjado un mundo literario miscelánea de microrrelatos. mantener ocultas, impenetrables,
propio alrededor de unos motivos Con ductilidad guadianesca, la secretas”. Abrazados relato
duraderos, si bien ahormados novela que ocupa la línea principal largo y minirrelatos en un texto
en enriquecedoras variantes y

Ricardo Martín
amplificaciones, algo evidente
al recorrer su nutrido trabajo a
lo largo de treinta y tantos años
ya. Ahora, El libro de las horas
contadas adquiere inequívoca y
explícita dimensión de refrendo
de su trayectoria porque tantos
indicios remiten a su primera
obra, Novela de Andrés Choz, que
nos hallamos ante una auténtica
reescritura.


MERINO APUESTA
POR EL PAPEL DE LA
FICCIÓN COMO MEDIO
INSUSTITUIBLE PARA
REELABORAR
LA REALIDAD José María Merino.

La trama central tanto de la contiene una cálida aproximación a fragmentado pero unitario, El
opera prima de 1976 como del las relaciones amistosas mediante libro de las horas contadas es
nuevo libro se organiza alrededor las suspicacias surgidas en el muestra de literatura exigente,
de un escritor amenazado por una triángulo sentimental formado a la vez cordial y culta, que
enfermedad grave o terminal que por Pedro, su esposa Mónica apuesta, con creativa alerta
idea historias de extraterrestres y un común amigo desde la formal libre de extravagancias,
implicadas en su propia vida. En infancia, Fran. Como en Merino por ese papel de la ficción
esta anécdota o en los diversos la realidad siempre es materia de como medio insustituible para
materiales conexos con ella se ficción, y viceversa, esa historia, reelaborar la realidad y “hacerla
van hilvanando los otros motivos reconstruida de largo mediante los inteligible, verosímil”: aunque lo
característicos del autor coruñés tentáculos de la memoria, da pie a escuchamos a Pedro, quien habla
desde los principios de su fabulaciones de Pedro en las que es Merino. Q

ENERO 2012 MERCURIO
Henry Salomé
CABEZA
DE RUMIANTE

EDUARDO LA MUERTE
JORDÁ DE MONTAIGNE
Jorge Edwards
Tusquets
18,00 euros | 294 páginas

E
ra casi inevitable que Jorge
Edwards dedicara una novela
a la figura de Montaigne. He
escrito “novela”, porque ese es el
nombre que se le da a este libro,
pero La muerte de Montaigne es
más bien un ensayo novelado, es
decir, una obra de “técnica mixta”
—por usar un término pictórico—
que combina autobiografía, ensayo,
crónica y ficción. En 1973, cuando
Edwards publicó Persona non
grata —el relato de sus pésimas
experiencias como diplomático
chileno en la Cuba de Fidel Castro—,
él mismo definió su libro como “una
novela sin ficción”. Y ese es el género
que mejor le sale a Edwards, como
demostró en El inútil de la familia
(2004), una “novela sin ficción”
dedicada a su tío lejano, también
escritor, Joaquín Edwards Bello. Jorge Edwards.
Pero hay que tener cuidado con


los conceptos. ¿No es la memoria una además, han vivido unas las digresiones, los rodeos, las
variante de la imaginación? Y al revés: mismas circunstancias indiscreciones. Le gusta pasear
¿no es la imaginación una variante de políticas. A finales del por la narración y desviarse del
la memoria? Y yendo más allá, ¿no es EDWARDS FUNDE siglo XVI, mientras las tema, y replantearse qué pasó en
la novela, toda novela, un producto guerras de religión se determinado momento, y volver
de la memoria? ¿Y no es la memoria,
MEMORIA E IMAGINACIÓN, extendían por Francia, atrás, y añadir páginas y páginas al
en esencia, una facultad fantasiosa CRÓNICA Y CONJETURA, Montaigne escribió en manuscrito original, a la manera de
y novelística? No sé lo que opinan los EN ESTA HISTORIA uno de sus Ensayos: “Fui una planta trepadora, igual que hizo
neurólogos —y los preceptistas de traqueteado por todos; Montaigne, igual que hizo Proust.
la literatura— sobre este asunto,
CENTRADA EN LAS para el gibelino, era Lo único que los diferencia, quizá,
pero sí sé que Jorge Edwards ha RELACIONES ENTRE güelfo; y para el güelfo, es que Jorge Edwards es un experto
construido lo mejor de su obra EL VIEJO MONTAIGNE gibelino”. Y lo mismo le ha en hablar de sí mismo por persona
fundiendo todos estos conceptos. pasado a Edwards, quien interpuesta. Por temperamento,
Las similitudes entre Montaigne
Y SU DÍSCIPULA MARIE ha suscitado desde hace por pudor personal, por educación
y Edwards son evidentes. Los dos DE GOURNAY muchos años los ataques en una familia burguesa venida
conciben la literatura como una por igual de la derecha a menos, Edwards prefiere usar
forma civilizada —y también civil— y de la izquierda, cosa que por a otro personaje como pantalla
de hablar de uno mismo. Los dos supuesto le honra. para hablar de sí mismo. Así lo hizo
son grandes causeurs que aman Pero lo más importante es que en Adiós, poeta (1990), cuando
la conversación y el foie y el vino, tanto Edwards como Montaigne contó sus largos años de amistad
y también los paisajes suaves con comparten una misma forma de con Pablo Neruda. Y ya he citado
viñedos y colinas (aunque parezca entender la literatura. “El señor El inútil de la familia, sobre su tío
mentira, hay un curioso parecido de Montaigne tenía cabeza de lejano Edwards Bello, que para mí es
paisajístico entre la Aquitania de rumiante”, escribe Edwards, y su mejor obra.
Montaigne y los valles centrales todos sabemos que el propio El punto de partida de La muerte
del Chile de Edwards). Y los dos, Edwards también es así. Le gustan de Montaigne es la investigación

MERCURIO ENERO 2012
lecturas26 | 27

NARRATIVA
sobre las relaciones que hubo protagonistas quienes mantienen
entre el viejo Montaigne (tenía 55
años y le faltaba poco para morir) SOMBRAS la trama de la novela con diálogos
perfectamente encajados en
y su discípula y admiradora, la
excepcional Marie de Gournay, DE OTROS las situaciones, y con los demás
personajes siendo referentes
que solo tenía 22 años. ¿Fue una indirectos, pero no por ello faltos
relación amorosa? ¿Fue un simple de sustancia —incluso el más
amor platónico? ¿Fue una relación levemente sugerido, el ama de
carnal? ¿O no pasó de la pasión FERNANDO LA GAVIOTA llaves, adquiere una muda y rara
intelectual, que a veces puede GARCÍA ROMÁN Sándor Márai presencia, fugaz, inimitable.
ser tan intensa como la carnal? Trad. de Mária Szijj Gestos medidos, conversaciones
Edwards se plantea todas las y J.M. González Trevejo pausadas y reflexivas ahondando
posibilidades y deja que nosotros Salamandra hasta el más nimio de los detalles,
mismos lleguemos a una conclusión. 15,00 euros | 192 páginas y contrastando con algunas
Pero este libro es mucho más incógnitas sueltas: marca del
que una simple conjetura sobre estilo Márai que permite

E
una relación de la que casi nada n un Budapest decaído, al lector resolver la
sabemos. “Todos miran hacia donde nieva y las gaviotas insinuación (¿a quién
delante. Yo miro dentro de mí”, errantes se posan sobre las llamará ella por teléfono
escribió Montaigne. Y Edwards láminas heladas del Danubio, un casi al final de la trama?).
habla de Montaigne, por supuesto, y alto y solitario funcionario —ya A Márai le gusta que el
de su papel en las luchas de religión maduro— redacta un texto que lector se detenga, que
de su época, y de sus ideas como se hará público al día siguiente piense, que resuelva,
escritor, pero sobre todo habla de y podría cambiar la vida de la que participe. Si logró
sí mismo. Y las mejores páginas de población entera, sumiéndola atraparle —parece
esta “novela” (y repito que novela en la incertidumbre. Con este proponer el mismo
es un término tan arbitrario como secreto y atmósfera de suspense autor— desde la primera
“ensayo”) son las que Edwards, que ya formados, parte del habitual línea, embelesarle con
ya ha cumplido los 80 años, dedica caldo narrativo en Sándor Márai, su prosa envolvente,
al cementerio marino del pequeño inesperadamente aparece una musical, tan seductora y
balneario de Zapallar, donde quiere joven y bella finlandesa que llega sutil como honda, seguro
ser enterrado. Uno, al leer esas recomendada para solicitarle que sabrá resolver el
páginas, siente un estremecimiento trabajo y que le precipita de súbito enigma difuminado
muy parecido al que debió de sentir a un pasado inquietante por la que existe alrededor
el viejo Montaigne al conocer a semejanza que tiene con una Sándor Márai. de la joven finlandesa,
mujer a la que amó y que terminó el funcionario, el


suicidándose. vínculo con la mujer del
En La gaviota (Sirály, 1943) el pasado y el informe
lector se recrea de nuevo con la que ha redactado el
maestría del bisturí literario del UNA VEZ MÁS, EL GRAN protagonista.
gran escritor húngaro que una vez ESCRITOR HÚNGARO Desde su gran
más desnuda el corazón de la vieja destreza y honestidad
Europa, realiza una radiografía RADIOGRAFÍA narrativa entregada
moral y social de la época y nos EL CORAZÓN MORAL al servicio de las
adentra con ironía y desencanto DE LA VIEJA EUROPA emociones, pasiones y
en los vericuetos y pliegues más enigmas del ser humano y
delicados del interior humano. con un lenguaje exquisito, profundo
Márai, siempre dispuesto a abrir la y cargado de reflexiones, Sándor
herida con tacto y sin tapujos, nos Márai muestra sus cualidades
propone a través de un juego con filosóficas para trascender a lo
la pasión, la muerte y lo onírico que más ligero; su habilidad dramática
hay sombras de otras personas para realzar el deseado efecto,
o reflejos de ellas; que acaso no añadiendo poéticas pinceladas,
seamos tan exclusivos en nuestras siempre certeras, además de
vivencias y que formamos parte breves apuntes descriptivos para
Marie de Gournay. Pero antes de de algo más que nuestra piel. Y transformar el paisaje externo en
que llegue la hora del último viaje como es habitual en sus libros, un elemento más: nunca recargado
a Zapallar, esperamos que Jorge hace hincapié en que lo insólito en la creación de la atmósfera
Edwards siga escribiendo esas y milagroso suceden de forma general que podría haberlo
“novelas” que no son exactamente tan simple o cotidiana como la convertido en un maestro del
novelas, porque funden memoria e costumbre que nos aportan los género policiaco. No en balde en sus
imaginación, crónica y conjetura, sin objetos cercanos. últimos meses de vida en San Diego,
darle tregua a su poderosa cabeza Como en la mayoría de proyectaba una novela negra que
de rumiante. Y por muchos años. Q sus obras, son dos únicos nunca llegó a escribir. Q

ENERO 2012 MERCURIO
novela con lectura política, a partir
de pequeñas historias pero, sobre
todo, del análisis de la condición
femenina. La autora retoma el
espíritu de algunos de sus libros
anteriores, novelas como Entre
amigas (1998) y la autobiografía
Adolescencia en Barcelona hacia
1970 (2007). A través de sus
voces femeninas —con una ligera
excepción en el personaje del señor
Soley, que intenta mantenerse
a flote en medio de un océano
femenino—, la autora repasa
los papeles de la mujer antes y
después de la muerte de Franco,
y lo hace adentrándose en todos
los estratos: las criadas, el ama de
casa instalada en la ciudad pero con
raíces rurales —pertenecientes a
Laura Freixas. una incipiente clase media—, las


mediterráneo: resplandeciente
LOS VERANOS como esos cuadros de
inmaculados niños tendidos al
AQUELLOS sol, y reflectante como sus mares
cargados de plata. Tiene una
CON UN TONO DE
temática paisajista, retratos y
CRÓNICA DIALOGADA
composiciones simbólicas de Y VISIÓN PICTÓRICA,
AMALIA LOS OTROS SON inspiración modernista —y parece LAURA FREIXAS
BULNES MÁS FELICES que seguimos hablando de un
Laura Freixas cuadro—, como si Laura Freixas
CONSTRUYE UNA
Destino desempolvara en sus primeras HISTORIA ACERCA DE LA
17,50 euros | 264 páginas páginas una vieja estampa de la MEMORIA QUE ALBERGA
Renaixença cultural de Cataluña,
la bohemia de principios del siglo
UN ANÁLISIS SOBRE LA
EVOLUCIÓN DEL PAPEL
E
stamos ante una novela XX encarnada, medio siglo más
en transformación. Podría tarde, en la familia Soley. Anfitriona DE LA MUJER
decirse en evolución, contada de Áurea, esta casa representa
casi como un proceso de creación a esa burguesía desapegada
pictórica, desde el esqueleto del provincianismo interior señoras de la alta burguesía , y las
principal y el dibujo como base, y —
incluso de Madrid—, de gustos jóvenes, aspirantes a universitarias
expandiéndose luego en el color, las extravagantes e interesada por la unas y a salir del servicio otras,
formas y texturas que le darán su cultura. rebeldes en su mayoría y, cada una,
aspecto definitivo. Y a esta prosa luminista, en la medida de sus posibilidades,
Los otros son más felices se de iniciación a la vida, secretos firmes en su deseo de encontrar la
muestra, al principio, como un adolescentes y sábanas tendidas felicidad.
cuadro costumbrista, si por esta al sol con olor a lavanda, le sigue Finalmente se va alambicando
etiqueta se entiende el retrato de la una segunda capa narrativa, con la prosa, enredada en una
historia reciente de España desde un tono de novela generacional, conversación de la que solo leemos
el dibujo de sus escenas cotidianas casi memorialística, donde se una parte, la correspondiente
y estampas rurales. Áurea, una confunde a la propia autora con su a Áurea, la protagonista. Y es,
joven de 14 años, madrileña de protagonista, que mira al mundo ya en su recta final, un cuadro
origen manchego, acostumbrados con sus ojos nuevos al mismo cercano al informalismo —justo
sus ojos a la grisura del interior tiempo que el país. Es esa novela en el momento en el que Áurea
de una España con las persianas urbana de la Transición española, confiesa su deseo de dedicarse
echadas, aislada del exterior, queda una suerte de viaje iniciático que a la pintura—, movimiento al que
deslumbrada y —a la postre, tocada emprendieron muchos jóvenes España llegó tarde, al igual que la
de por vida— cuando su madre solapando su instante vital con el novela, que finaliza sin renunciar
decide enviarla a la Costa Brava momento histórico. a su estilo sencillo y directo, pero
a pasar el verano a casa de unos Aquí se intuyen, de nuevo, los que remata con una pincelada
parientes “ricos”. temas sagrados de la narrativa de más suelta, hasta más gruesa, con
La novela se despliega con Laura Freixas, porque Los otros diálogos imposibles, más libre y
un luminoso costumbrismo son más felices es, también, una espontánea. Q

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lecturas28 | 29

NARRATIVA
pretenda pasarse de gracioso personajes parecen también

VIDAS DE ni demostrar en cada línea lo


inteligente que es —y ya subrayó
avenirse a esa suerte de virtud
por defecto. Aunque el fracaso

PAREJA Monterroso que hay que ser muy


inteligente para lograr tal cosa—,
parece un denominador común en
casi todos, este queda rebajado
que no soliviante al lector con en su graduación, difuminado
florituras ni trate de asombrarle bajo la forma de meros objetivos
a toda costa. Por su perfección no cumplidos. Asimismo, Barnes
ALEJANDRO PULSO formal, cualquiera de los relatos no permite grandes excesos
LUQUE Julian Barnes de Pulso serviría para ilustrar esos emocionales en su territorio, y
Traducción de Mauricio Bach talleres de escritura creativa que deja que pesen más las cosas
Anagrama tanto proliferan hoy. No obstante, que no se dicen que las palabras
17,40 euros | 264 páginas se trata de un conjunto que va efectivamente pronunciadas,
de menos a más, empezando por como es propio de los tan traídos
y llevados asuntos del

M
aestro en el retrato amor y el desamor.
de la clase media, a Menos convincentes se
Julian Barnes parecen antojan los episodios que
interesarle, más que sus discretos desliza entre un relato y
encantos, esos dramas de baja otro bajo el título común
intensidad que salpimentan la de “En casa de Phil y
vida cotidiana. Su último libro de Joanna”: desenfadados
relatos gira, una vez más, en torno a diálogos de sobremesa
parejas mejor o peor avenidas. Pero, sobre temas recurrentes
a diferencia de los enredos que (la crisis, el tabaco,
alentaban títulos como Antes de el sexo y el amor, la
conocernos, Hablando del asunto política) intercalados a la
o Amor, etcétera, aquí la segura y manera de entremeses
confortable burbuja burguesa está que alivien la carga
sometida a otra clase de tensiones, dramática del resto
ya sea la incomunicación, los deseos del libro. En ellos, el
frustrados o el paso del tiempo. autor despliega un
Si, como confesaba en otro notable ingenio en
de sus libros, El loro de Flaubert, la construcción de
Barnes aprendió del padre de diálogos. Pero para
Madame Bovary que el estilo eso tal vez ya están,
y lo hacen muy bien,


los guionistas de la
Paramount Comedy.
Para encontrar la chispa
LA INCOMUNICACIÓN, que hace de Julian
Barnes un narrador
LOS FRACASOS, LOS con mayúsculas, uno
SUEÑOS, LAS DEBILIDADES de los más dotados de
DE LA CLASE MEDIA, la Europa actual, hay
que recorrer el camino
SON EL DENOMINADOR completo y llegar hasta
COMÚN DE ESTOS piezas como “Armonía”,
CUENTOS DE ELEGANTE “Carcasona” o “Pulso”,
más complejas que las
IRONÍA precedentes, algunas
Julian Barnes.
contaminadas de ese
está siempre en función del tema, una historia más bien liviana en sutil tono ensayístico donde tan
en Pulso la misma naturaleza contra de sus pretensiones, como bien se desenvuelve el autor,
de las historias —una camarera es “Viento del Este”, y que poco a y sin duda más llenas de vida e
extranjera que esconde un turbio poco toma vuelo hasta culminar inspiración.
secreto, dos escritoras unidas en el relato que le da título. En ese Habrá quien siga prefiriendo
por una relación de amor/odio, un crescendo de intensidad e interés, al gran novelista que es Barnes,
matrimonio enfrentado a causa que encuentra un significativo pero ya lo dijo él mismo hablando
de la jardinería, un marido en escalón entre la primera y la de Renard: “¿Quieres una destilería
crisis que se mira en el espejo de segunda parte, brilla más la o un río? ¿La vida en forma de unas
sus padres…— parece imponer habilidad de Barnes para sortear cuantas gotas de licor fuerte, o de
un estilo elegante y sobrio. Se escollos que su probada capacidad un litro de sidra normanda? El lector
agradece mucho que el autor no para hacer diana. Los propios decide”. Q

ENERO 2012 MERCURIO
NARRATIVA
SECRETOS DE Estos temas los explora
Stamm a través de un triángulo
a la imagen mental que alberga
de él. La infidelidad es tratada

LA FELICIDAD amoroso compuesto por un


matrimonio de arquitectos (Alex,
por el escritor suizo como una
forma de liberación, de búsqueda
un hombre de éxito que huye de las de la felicidad y del equilibrio que
responsabilidades y de su modelo ninguno de los tres personajes
estético y Sonja, la esposa culta, encuentra en la rutina confortable
GUILLERMO SIETE AÑOS inconformista, atraída por la obra y en los pactos a los que están
BUSUTIL Peter Stamm de Le Corbusier, cuya frialdad apegadas sus vidas. Las mismas
Trad. de José Aníbal estética simboliza la manera de que tendrán que hacer frente a la
Campos ser de la mujer) e Ivona, la amante crisis económica que arruina su
Acantilado inmigrante, primitiva, que solo estudio profesional y los obliga
20,00 euros | 262 páginas tiene su amor incondicional a reencontrar la creatividad, a
como seña de identidad. Este rescatar del pasado los ideales
triángulo se mantiene durante de su trabajo y las posibilidades

E
l mundo de Peter Stamm siete años y termina cuando nace que hubiesen podido tener de no
(Weinfelden, 1963) se la hija de Ivona y el matrimonio la haberse casado. Estos factores
parece mucho al cine de adopta ante la renuncia que hace terminan sacando a la superficie
Bergman. Su escritura tiene la la madre como una prueba de los auténticos sentimientos de
limpieza de imágenes del director, amor representada igualmente cada uno, con los que el autor
el ritmo lento y psicológico de la por la capacidad de esperar al propone un debate moral en torno
trama, la maestría para desnudar arquitecto, quien busca resolver al deseo, el rechazo, la inmadurez,
el recorrido íntimo que hacen en su relación con la inmigrante el la posesión, la diferencia entre los
los personajes hacia sí mismos complejo social y la ansiedad que anhelos vitales, los prejuicios, la
y esos finales en los que los sufre y que tienen su origen en incomunicación, el fin de la familia
protagonistas comprenden los las exigencias de Sonja, acordes tradicional, la culpa y el perdón.
La novela,


construida desde
la primera persona
de Alex que cuenta
STAMM INDAGA EN LA la historia a una
antigua amiga de
COMPLEJIDAD E la pareja a modo de
IMPERFECCIÓN DE LAS catarsis que estalla
RELACIONES DE PAREJA en el presente, alude
al pasaje bíblico
Y PLANTEA LA PREGUNTA de Jacob, Raquel
DE CÓMO VIVO Y CÓMO y Lea, la mujer a la
QUIERO VIVIR que el patriarca
hebreo desposa
por equivocación
vacíos, la desolación de su propia y a la que, después
realidad. Una puesta en escena de siete años
y una literatura que coinciden de duro trabajo,
en las novelas Agnes y Tal día abandona para
como hoy y en el libro de relatos casarse con Raquel,
En jardines ajenos. Y como no su verdadero amor.
podía ser de otro modo también Con el reflejo de
está presente en Siete años, este relato, Peter
en cuyas páginas Stamm hace Stamm ha escrito
una radiografía sobria y concisa una excelente
sobre los secretos de la felicidad novela sobre gente
aparente, ocultos por el miedo normal, enmarcada
a estar solos, a aceptar como en la realidad actual,
una derrota la imposibilidad de acerca de unas vidas
alcanzar una relación perfecta. sin épica pero con
La historia también es un retrato una profundidad
impresionista del europeo medio, emocional que
de clase media, de mediana indaga en la
edad, enfrentado al fracaso complejidad de las
de sus valores y víctima de una relaciones y plantea
vida tecnificada e insatisfecha la pregunta final de
dominada por la alienación y la ¿cómo vivo y cómo
constante persecución del éxito. Peter Stamm. quiero vivir? Q

MERCURIO ENERO 2012
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brasileño— y de un adulto —el
Portugués, dueño del coche más
hermoso de todo el barrio— con
el que comparte una amistad HERMOSA NOVELA
hermosa, noble y auténtica.
Mi planta de naranja lima es AUTOBIOGRÁFICA QUE
una novela sobre la amistad, como TIENE A LA INFANCIA
demuestra Zezé en los diálogos COMO PROTAGANISTA
y en las confesiones con el árbol
que descubre junto a la miserable Y ES UN DOCUMENTO
casa a la que se ha trasladado la SOCIAL SOBRE EL BRASIL
familia por falta de dinero. Zezé DE LAS PRIMERAS
se hace amigo de Minguinho —el
arbolito de naranja lima— que DÉCADAS DEL SIGLO XX
J.M. Vasconcelos. “cuando lo quiero mucho, lo llamo
Xururuca”. Esa extraña y entrañable El autor de Banana brava,
historia de amistad sobrevuela Rosinha mi canoa, Corazón de vidrio,

UNA ‘BILDUNGSROMAN’ toda la novela, que es sobre todo


una bildungsroman, una novela
El velero de cristal o Vamos a calentar
el sol ofrece un contenido ejercicio

CARIOCA de formación, de aprendizaje, una


obra ejemplar que crea tiernas
de prosa literaria, una confesión,
su retrato de niño triste y feliz a
complicidades con el lector. medias. Vasconcelos, que trabajó
Sin embargo, Mi planta de como entrenador de boxeadores,
MI PLANTA DE naranja lima no es solo un retrato bracero en una hacienda, pescador o
EVA DÍAZ NARANJA LIMA tierno, una amable historia iniciática. camarero, fue un ejemplo de escritor
PÉREZ José Mauro de Vasconcelos La vida de Zezé está llena de comprometido como, por ejemplo,
Trad. de Carlos Manzano violencia, recibe palizas de su familia reveló con su interés por los indios,
Libros del Asteroide que están a punto de matarlo, pasa los garimpeiros, los trabajadores de
13,95 euros | 208 páginas hambre, recorre las amargas calles las haciendas.
de un barrio sin futuro. De hecho, Además de una hermosa novela
la novela bascula entre el horror autobiográfica sobre la infancia,

U
n niño que quiere ser poeta, y la ternura de forma prodigiosa. Mi planta de naranja lima es un
llevar corbata de lazo, que se Vasconcelos no se recrea de forma documento social sobre el Brasil
abraza amargamente a un morbosa en su pasado dickensiano de las primeras décadas del siglo
árbol al que le confiesa tristezas, que —en clave brasileña, claro—, no XX. Como apunta Vasconcelos
vagabundea por las calles del barrio cae en estampas maniqueas como sobre el barrio de Bangú, donde
carioca de Bangú, que es golpeado cuando aparece su querido padre, en se desarrolla la historia de su vida:
por sus travesuras y que protagoniza ocasiones héroe admirado y otras “En nuestra calle había épocas para
una historia de amistad auténtica. símbolo del fracaso, un hombre sin todo: la de las canicas, la del peón,
Mi planta de naranja lima, de José trabajo, incapaz de llevar dinero a su la de coleccionar cromos de artistas
Mauro de Vasconcelos (1920-1984), familia y una mirada que no puede de cine y la de las cometas, la más
se publicó en el año 1968 y desde disimular la derrota. bonita de todas”. Q
entonces se ha convertido en una
novela de referencia de la literatura
brasileña contemporánea.
Perteneciente a la serie de
títulos en los que Vasconcelos
breves
describió su propia vida, en un Pasaje de lágrima FICCIÓN
hermoso y liberador ejercicio de
autoficción, la obra narra su infancia Abdourahman A. Waberi| Trad. Rosa Roca
de niño pobre, hijo de madre indígena y Joan Merino| Baile del Sol
162 páginas, 12,00 euros
y padre portugués, que vive casi en
la indigencia, en una casa pintada Jibil es contratado por una agencia de
de miseria y en la que se cenaba “la información americana para que vuelva
misma tristeza en pedazos”. a Yibuti y compruebe la estabilidad de
Zezé, el niño protagonista que su país, situado en el cuerno de África
es trasunto del propio Vasconcelos, y rico en minas de uranio. Un hombre,
tiene cinco años y quiere ser poeta, encarcelado en una isla y que encarna el
llevar corbata de lazo. Callejea fundamentalismo islámico, se enterará
por el barrio, sorprende con su de su regreso y lo perseguirá a través de
imaginación a la profesora, se hace un peligroso viaje en el que el protagonista
amigo de cantantes callejeros ha de enfrentarse a las heridas de
—episodio en el que Vasconcelos su pasado. Q
evoca el rico cancionero popular

ENERO 2012 MERCURIO
buscan su camino para

LA REBELIÓN llegar a alguna parte, de


palabras que viven fuera de

DEL CUENTO sí mismas para encontrarse


sentido, de escopetas que
tienen la responsabilidad
de matar o dar vida a una
historia. Bang, bang. Un
TINO LOS ENSIMISMADOS libro de prosa cuajada como
PERTIERRA Paul Viejo esa nieve que entierra y
Páginas de Espuma quema vidas y muertes.
14,00 euros | 136 páginas Las historias de siempre
contadas como si fuera la
primera vez, con el valor
de quien sabe añadir una

E
l cuento como “alma” mirada distinta a mundos
arrojadiza. Costuras distantes. Por las páginas Paul Viejo.
Daniel Mordzinski
puestas a prueba para de Viejo huyen dos fugitivos
que la tensión no decaiga y la con el calendario truncado. Lo sabe Viejo y se lo cuenta a sus
intención se arrastre entre líneas Atracos febriles narrados con pulso personajes, porque este es un
alambradas. Nada es lo que parece amartillado. Huidas en dirección al libro de propiedad extraña, son las
en Los ensimismados aunque haya abismo. Plomo caliente y miradas criaturas de ficción las que parecen
momentos en los que se proyecten frías. Hay coches teledirigidos que crear a su autor, hartos de vivir en
imágenes compinchadas con la invocan una tristeza infinita, o tal laberintos sin salida, mendigos
memoria colectiva y se llegue a vez podamos llamarla nostalgia, de sueños bajo las farolas que se
palpar en las páginas la cámara o impotencia, de eso sabía mucho apagan, iluminados por los años
lenta con la que un Sam Peckinpah el James Dean que se retorcía al que pasan. Hay noches tranquilas e
o un Arthur Penn ponían a sudar abrirse Rebelde sin causa. Antes historias intranquilas que invitan al
y sangrar y llorar la pantalla. Deja era todo más fácil, leemos, y los desasosiego.
este libro habitado por acentos mañanas se dan de bruces contra Decir que estamos ante un
de barras y estrellas caídas un “El Esquinazo”. El peso del tiempo libro de cuentos sería rácano. Es
rastro de polvo y sudor, de cuentos está ahí, agazapado en cada mucho más. Viejo sigue el rastro
rebeldes por una buena causa que relato. Ya nada es como antes. de Caperucita roja y de los lobos

novela de la generación beat del todo sus rostros, como el

UN ‘THRILLER’ DE (abogado reputado, borracho


y cocainómano) y un misterio
enigmático Eiko, ni la verdadera
naturaleza del vínculo con

LA GLOBALIZACIÓN sustentado en el proyecto


Zoorama (¿una empresa que
Leonardo Rey, al que le arruinan
la vida. La estructura de capítulos
facilita el cambio de identidad?, breves con imágenes atomizadas
¿una red clandestina antisistema?) y raudas permite la agilidad
que mueve el suspense, la huida narrativa de la trama psicológica
FRANCISCO PROYECTO ZOORAMA y la búsqueda continua del en torno a los intereses de los
MORALES LOMAS Andrés J. Reina protagonista, la acumulación personajes y al viaje que pespunta
Paréntesis de situaciones y el conflicto de esta novela, que transita por
15,00 euros | 292 páginas los personajes que no muestran diferentes ciudades y convierte a
Málaga en el espacio novelesco de


una historia donde se ahonda en el
concepto de la máscara personal

U
na historia de intriga llama y social y en los efectos de la
a las puertas de un lector LA ESTRUCTURA globalización.
posmoderno que se ve El narrador, Andrés J. Reina,
inmerso en un descubrimiento
DE CAPÍTULOS BREVES posee recursos para la narración
inicial: “Un hombre murió entre CON IMÁGENES RAUDAS y la aventura detectivesca en este
mis brazos”, dice el personaje PERMITE LA AGILIDAD Proyecto Zoorama que aspira
Leonardo Rey. A partir de aquí al esparcimiento no exento de
el ritmo ágil y la vertiginosa
NARRATIVA DE UNA crítica y a la inmersión en un mundo
acción se adueñan de este thriller TRAMA PSICOLÓGICA QUE cerrado y agónico, contundente
que aúna todas las esencias CONVIERTE A MÁLAGA EN tras ese proyecto que se va poco
del género: los cliffhangers, a poco deshilvanando y diluyendo
una historia consistente, un
EL ESPACIO NOVELESCO en el magma narrativo hasta
protagonista sacado de una DE LA HISTORIA resolverse en un final abierto. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas32 | 33

NARRATIVA
que bajan a la ciudad y olfatean protagonizado por Seikichi, un
nuestros miedos. Deja espacio para
los malos tragos y esos accidentes MORBO experto tatuador con ribetes de
sádico y una joven bellísima sin
cotidianos que marcan una época
feliz que se acaba. Ordena un NIPÓN nombre, de cuyos pies, apenas
entrevistos asomando por las
inventario de perplejidades que cortinillas de un palanquín, se
habría encantado al desencantado enamora el protagonista. De la
Scott Fitzgerald y desordena los relación que va a irse fraguando
esquemas del lector con cuentos LUIS ALBERTO TATUAJE entre los dos nada diré, pues el
para no dormir, sueños americanos DE CUENCA Junichiro Tanizaki lector ha de descubrirla por sí solo.
convertidos en pesadillas, Trad. de Naoko Kuzano El festín bibliográfico que
atenazados por papeles y noches y Alicia Mariño supone Tatuaje como cuento
en blanco. Y, de repente, un Prólogo de Alicia Mariño de Tanizaki maravillosamente
fogonazo de dolorosa melancolía Rey Lear vertido al español se ve realzado
y quebrado lirismo: “Marta en al 19,00 euros | 72 páginas y corroborado en su capacidad de
engendrar belleza por una serie de


ilustraciones del gran

P
or fin tenemos algo del pintor Manuel Alcorlo,
gran Junichiro Tanizaki que nos va contando
VIEJO HACE UNA REVISIÓN (1886-1965) traducido en arrebatadoras
directamente del japonés. Ha imágenes a todo color
DEL ARTE DE NARRAR llevado a cabo la tarea Naoko la historia del tatuador
EN ESTOS CUENTOS DE Kuzano, y Alicia Mariño se ha Seikichi y de la
LABERINTOS SIN SALIDA encargado de trasladar la versión hermosa desconocida.
literal a otra igual de fiel, pero La aportación icónica
EN LOS QUE DIALOGA DE elegantísima, en lengua castellana, de Alcorlo convierte el
TÚ A TÚ CON EL LECTOR además de redactar unos folios cuento de Tanizaki en
introductorios que valen su peso un objeto deseable por
en oro. De esa manera, podemos sí mismo, al margen de
andén”. El cuento como materia, disfrutar por primera vez del su precioso contenido.
espacio, tiempo. Eso leemos estilo de Tanizaki, de su manera La editorial Rey Lear
cuando Viejo escribe su (re)visión de narrar, desde primera fila en ha sabido revestir
del arte de narrar. Por eso sus el patio de butacas, sin molestos Tatuaje del esquema
personajes son conscientes de ser intermediarios ingleses. El texto formal adecuado
prisioneros de un cuento. Cuentos escogido es, además, uno de los Junichiro Tanizaki. —excelente papel,
ensimismados en sus propios más bellos que salieron de la pluma márgenes generosos,


misterios que hablan de tú a tú del escritor nipón: Shisei (1910). pasta dura, limpieza
al lector y dan libertad absoluta Las traductoras han optado por inmaculada de
a las palabras para que tomen el traducirlo como Tatuaje, acaso erratas— para ofrecer
control y liberen a los personajes recordando la canción de puerto UNA OBRA MAESTRA al comprador un libro
y confundan a los narradores y inmortalizada por doña Concha hecho con el amor y
corrijan la ficción para que diga la Piquer.
POR LA SINGULARIDAD exquisitez con que se
verdad. Sin dejar de ser una obra de DEL ARGUMENTO Y LA hacían antes —por
Los ensimismados no se juventud —Tanizaki tenía poco ATMÓSFERA DE REFINADO ejemplo, en la Francia
queda en tierra de nadie, no
le basta con cumplir de forma
más de veinte años cuando la
escribió—, Tatuaje es, como dice
EROTISMO QUE ENVUELVE de la primera mitad del
siglo XX— los libros
pulcra y aplicada las normas de Alicia Mariño en su introducción, A LOS PERSONAJES ilustrados.
estilo para amarrar un puñado “una auténtica obra maestra”. Allá en el fondo de
de buenas historias y merecer Lo es por la singularidad del Tatuaje está, cómo no, la literatura
tibios aplausos. Viejo toma argumento, por el tratamiento de japonesa previa a Tanizaki. Alicia
riesgos, o los riesgos lo toman a los personajes, por la atmósfera Mariño nos cuenta, por ejemplo,
él. Cada cuento es un desafío a la de refinado erotismo que los cómo nuestro autor versionó en
inteligencia, un atraco al banco envuelve, por la genialidad japonés moderno La historia de
de ideas bien engrasadas, una de su desenlace. Todos los Genji (siglo X), la obra inmortal de
huida de los lugares comunes, ingredientes del cóctel literario la señora Murasaki. Pero junto a
un revolcón a los códigos de la tanizakiano están presentes ya esa tradición existe otra, igual de
trampa literaria. Bang, bang. en esa pequeña maravilla que es importante en la configuración de
Este Viejo tiene muy buena Tatuaje: delicadeza, profundidad, la narrativa tanizakiana: la tradición
puntería y le sobra munición espíritu transgresor. Ambientado del cuento fantástico francés,
porque no la malgasta con juegos en el periodo Tokugawa, que se desde Villiers de l’Isle-Adam y
artificiales de contador trilero. inició a comienzos de nuestro Maupassant hasta Louÿs y Lorrain,
Ponga su libro en un cartel de SE siglo XVII y que se prolongaría con los anglosajones Edgar Poe y
BUSCA. Le espera una suculenta hasta los albores de la llamada Oscar Wilde como chambelanes del
recompensa. Q era Meiji (1868), el relato está festejo. Q

ENERO 2012 MERCURIO
NARRATIVA
en un trayecto siempre ameno y aprendería de Eliseo, un periodista
con momentos verdaderamente que se preocupa de su educación.
LOS PELIGROS emocionantes. La escritora se Iglesias sabe desarrollar personajes
solidariza con los desheredados atractivos: el reportero es una de
DE LA INDEPENDENCIA de un tiempo terrible, una época las creaciones más logradas de la
de miseria y desdicha que describe novela junto a dos mujeres, Elvira,
de manera sobria, cuyo desgarro una escritora que subsiste gracias a
consigue transmitir al lector con las letras de canciones picantes para
BRAULIO ORTIZ LAZOS DE HUMO episodios concretos —la historia espectáculos de variedades y que ha
María Iglesias de una niña fulminada por un rayo elegido ser libre en una época donde
POOLE
Temas de Hoy o el desolador periplo de aquellos la emancipación de la mujer alcanza
22,50 euros | 640 páginas que buscaron progresar en América casi el rango de fantasía, y Aurelia, la
y volvieron condenados por la joven a la que amará Germán, la única
enfermedad—, pero la fuerza del presencia femenina en las clases
conjunto radica en que evita el de Derecho y alguien que también

A
l principio de Lazos de maniqueísmo en que podía haber tomará decisiones contradictorias
humo, uno de los personajes caído su reivindicación y perfila a su en su vida.
desvela un secreto de protagonista no solo con las nobles Lazos de humo propone
la familia, cuenta la voz de la aspiraciones que lo mueven, también asimismo una reflexión sobre los
narradora, “como un anticipo de con sus sombras y sus limitaciones. peligros de la independencia y
la herencia”, porque “las historias A pesar de sus avances, Germán es los incómodos vínculos entre el
que no se cuentan se marchitan”. un hombre en muchas cuestiones poder y la justicia. Germán acabará
Esa atención por el legado de a la deriva, torturado por las dudas viendo compensada su tenacidad
experiencias que nos preceden, y los temores, incapaz de amar a y su lucha por las causas justas,
y la percepción de la literatura una hermanastra en cuyo rostro aunque su victoria será amarga:
como un fuego que aviva los advierte la traición de su padre quien le otorgará la razón será “el
relatos que conforman nuestras al fantasma de su mujer muerta, peor Estado criminal imaginado”,
raíces, son en realidad los motivos

Santi Burgos
por los que la sevillana María
Iglesias ha abordado esta obra,
su debut en la novela: para evitar
que una asombrosa peripecia que
conocía, a la que le unen vínculos
sentimentales que precisará al final
del libro, languideciera en los tristes
terrenos del olvido.
Lazos de humo reconstruye la
vida de Germán Díaz, un hombre
que dejó atrás junto a su padre, en la
infancia, el paisaje que lo vio nacer, la
aldea de Pechón, en Cantabria, para


CON MANERAS SOBRIAS
Y UN FONDO OPTIMISTA,
IGLESIAS PROPONE
UNA MIRADA SOBRE LOS
INCÓMODOS VÍNCULOS
ENTRE EL PODER
Y LA JUSTICIA María Iglesias.

crecer como carbonero en Cádiz, esquivo también con una esposa un tribunal del régimen de Franco.
y, más tarde, conseguir finalizar con la que se ha casado por seguir Pero a pesar de esa conclusión
los estudios de Derecho debido a los dictados de la costumbre; su amarga, en la memoria del lector
su inteligencia y su determinación ascenso también estará lleno de aún resonará el mensaje optimista
para ejercer como abogado en trampas, retrocesos y difíciles de Eliseo, esa “fe laica suya, en
Sevilla. Un ambicioso viaje desde peajes. Esos detalles hacen el derecho, en la educación, en
las últimas décadas del siglo XIX verosímiles, alejándolas del discurso la intrínseca bondad humana, en
hasta la barbarie de la Guerra bienintencionado y pobre, las firmes la capacidad de progresar, en la
Civil que Iglesias traza con oficio, convicciones morales que Germán radical igualdad”. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas34 | 35

ENSAYO
inteligencia observadora, como fue
la de Castilla del Pino.
“Se recogen aquí casi la
totalidad de los aflorismos que
escribió entre los años 2003 y 2009,
y que dejó en un archivo informático
aparte y dispuesto para su
publicación”, dice Celia Fernández
Prieto en la presentación de este
libro. Son perlas, eso que segrega
el roce o el cuerpo extraño. Y son
píldoras reflexivas, eso que tonifica
o alivia. La lectura de esta obra,
de principio a fin o a salto de mata,
revela toda una personalidad: la
lucidez y la bondad disfrazadas
de mal genio, esa prosa de un
ingenioso cascarrabias que no
acepta la tontería arrogante. La
lucidez y la bondad de quien celebra
la autoestima, el amor propio, el
coraje de ser uno mismo.
La escritura es aquí un acto de
afirmación personal y de tanteo.
Carlos Castilla del Pino. Es también un mensaje lanzado:

un pensamiento que el autor tuvo


en un rapto de lucidez o tras una
PRONTUARIO larga elaboración. Su escritura no
es transparente ni transitiva: el
MORAL autor atrae la atención sobre su LA LECTURA DE ESTA
forma de expresión, sobre lo que OBRA REVELA LA LUCIDEZ
dice y sobre la manera en que dice
Y LA BONDAD DE QUIEN
lo que dice. El aforismo es, además,
AFLORISMOS. una formulación sentenciosa en la CELEBRA LA AUTOESTIMA,
JUSTO
SERNA PENSAMIENTOS que se recogen una observación EL AMOR PROPIO,
PÓSTUMOS y una incertidumbre, las reglas
EL CORAJE DE SER UNO
Carlos Castilla del Pino de que se sirve el escritor y las
Tusquets contradicciones en las que incurre. MISMO. LA ESCRITURA
13,50 euros | 192 páginas Por lo común está enunciando ES AQUÍ UN ACTO SE
en primera persona, pero quien
AFIRMACIÓN PERSONAL
habla se expresa universalmente,
Y DE TANTEO

L
os académicos y los provocando la perplejidad y la
investigadores cultivan cooperación del lector.
distintos géneros de escritura: A ese género ya antiguo y
desde la monografía hasta el prestigioso pertenece Aflorismos, con la brevedad del náufrago. No
tratado doctrinal; desde el ensayo de Carlos Castilla del Pino (1922- es la ayuda que alguien pide, sino
hasta el artículo de divulgación. Esos 2009). El psiquiatra español fue el socorro que él mismo presta a
textos forman parte de sus modos un humanista, un lector voraz y quien quiera servirse. Tras una vida
de producción y de exposición y se un estudioso de las artes, de las de asistencias, de atenciones, de
relacionan con sus materias, con los ciencias, de las letras. Su saber tratamientos, el psiquiatra abrevia
objetos que abordan. cruzado se sedimentó y estos y condensa el saber acumulado,
Más raros o infrecuentes son los aflorismos, estos pensamientos aprendido, experimentado. Así, el
libros de aforismos, los antiguos póstumos son su condensación o volumen puede leerse como lo que
florilegios: lo normal es que estos quintaesencia. efectivamente es: un prontuario de
volúmenes no detallen los temas Como su propio título indica primeros auxilios. Y en un libro de
que los eruditos estudian, sino y sugiere, es este un volumen estas características deben primar
asuntos más graves o livianos, de aforismos, justamente: de el sentido común, la razón empírica
según: la existencia, la muerte, los consideraciones sentenciosas. Son y el manejo práctico: vamos a
temores, los deseos. El aforismo las apostillas que precisamente morir, no te tortures; disfruta de la
es una glosa breve, un comentario afloran al contemplar la realidad vida con hedonismo austero y sin
acerca del mundo, acerca de la circundante o interior, cláusulas conformarte. ¿Para pedir más, para
moral, las normas y el ánimo. Es afortunadas, expresiones redondas consumir más? No, para exigirte
un resto de vida, una emoción o o rotundas: eso que segrega una moral, para exigirte mejor. Q

ENERO 2012 MERCURIO
ENSAYO
en el más puro estilo gracianesco, fundamentada: no es escritor

UN HOMBRE son una auténtica delicia. Y lo son


porque están escritos bajo un
porque ni escribe como los autores
que admira, ni quiere hacer nada

ESCRIBE criterio impecable: son corregidos


por el autor, dice, con unas copas de
de lo que se supone que hacen
hoy los escritores, máquinas de
más hasta que puedan disfrutarse vanidad que dedican tanto tiempo y
sin pérdidas de orientación. Y lo son energía a su visibilidad que acaban
porque revelan a un ser humano que apartándose de su función. Pero
HÉCTOR DIARIOS está hecho de la materia de lo que no se engañen: este escritor que no
MÁRQUEZ (VOL. II: 2004-2007) más ama: los libros que ha leído, su se atreve a serlo —seguramente
Iñaki Uriarte sentido (auto)crítico y su capacidad por timidez y por no querer perder
Pepitas de calabaza de observación. sus conquistados privilegios de
15,00 euros | 197 páginas Lo más extraordinario de hidalgo contemporáneo que lee lo
Uriarte es que su modestia está que le place y se levanta a la hora
que quiere— escribe
María Fernández Cuervo

C
onfieso que hasta hace como los hombres,
poco, casi nada conocía de que siempre han
Iñaki Uriarte: que es crítico escrito mejor que los
literario, nació en Nueva York en ángeles.
1946, vive en Bilbao y aborrece Leí los dos
nacionalismos y creencias. Que es volúmenes como
un hombre que vivió la vida loca de quien se bebe la
joven, y que, sobre todo, ha leído. primera cerveza fría
Mucho y bien aprovechado. Que de un día solar. En
tras una vida ágrafa como autor ha voz alta, alternando
publicado en un año dos libros de risas, subrayando
diarios, comentarios, anécdotas, y anotando al lado
reflexiones y aforismos en una de sus fantásticas
editorial de nombre espléndido ocurrencias, dándole
y lema vibrante: Pepitas de la razón una y otra
calabaza, “una editorial con vez y paladeando
menos proyección que un Cinexin, su narrar fluido y
pero muchas más luces”. Que el preciso, tan escaso
primero de ellos fue celebrado por en estas eras de
escritores de la talla de Muñoz impostura global.
Molina, Trapiello o Vila-Matas, Ojalá que Uriarte siga
y ganó los premios Euskadi de sin querer ser escritor
ensayo y Tigre Juan. Ahora, tras mientras nos regala
beberme de un tirón al Iñaki Uriarte estas joyas. Ojalá siga
que escribe para no perder la leyendo sin parar y
memoria de los días, descubro contándonos lo leído.
que no se considera escritor y es Ojalá haya lectores
un hombre de fina inteligencia y para tanta lucidez
enorme sentido común. Que ha de vela buena. Sería
logrado vivir sin hacer ninguna fantástica noticia,
de esas cosas que la mayoría no ya para Uriarte,
considera productivas, y que, al sino para todas las
cabo, sabe, como buen curioso criaturas que de
ontológico, que un hombre puede cuando en cuando se
aspirar, como mucho, a reconocerse asoman a los libros
en lo poquísimo que sabe. y los abandonan
Lo cierto es que estos diarios Iñaki Uriarte. sin que una chispa
llenos de memorias personales, de de humanidad se


crónicas de sus viajes a Benidorm, de encienda en sus caletres. Debería
instantáneas cotidianas alrededor glosar alguna frase que les sirva
de su amado gato Borges o su mujer, de enganche, pero les sabría a
María; de reflexiones al socaire AFORISMOS QUE poco. Venga, va: “Yo soy muy
de hechos políticos o críticas discreto. Es verdad, siempre está
literarias, de lecturas, lecturas
REVELAN A UN SER hablando de él”. Dice Vila-Matas
y más lecturas; de cotilleos de HUMANO PRODUCTO DE que cuando leyó sus diarios por
personajes de la política, las letras o LOS LIBROS QUE HA LEÍDO primera vez no supo reponerse
la cultura españolas, algunos citados de la impresión. Me lo creo. A mí
expresamente, otros señalados con
Y DE SU CAPACIDAD también me gustaría ser Iñaki
una letra incógnita o de aforismos DE OBSERVACIÓN Uriarte. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas36 | 37

la narración de una vida para


adentrarse en cuestiones
fundamentales del periodo
isabelino: la transición de
un reinado absolutista a una
Monarquía constitucional, la
adecuación de la Corona a los
nuevos modelos burgueses
emergentes, y la autonomía
y el poder real y efectivo de
la institución. La autora nos
muestra sin prejuicios ni
contemplaciones, la imagen
velada de una mujer y una reina,
manipulada y manipuladora,
cuya vida privada fue aireada
más allá de todos los límites
de la moral de la época.
Despilfarró el capital político
y simbólico de la Monarquía,
más preocupada por sus
Isabel Burdiel. negocios, por sus intereses


Monarquía constitucional (algo

AMOR, SEXO inédito en el solar patrio) y el


de un partido, el moderado, que

Y NEGOCIO instrumentaliza su desordenada


vida sexual. Isabel Burdiel realiza
LA BIOGRAFÍA DE UNA
una profunda reflexión sobre los REINA QUE DESPILFARRÓ
avatares de lo que se ha dado en EL CAPITAL POLÍTICO
denominar “la ilusión monárquica”,
Y SIMBÓLICO DE LA
ROSARIO SÁNCHEZ ISABEL II: UNA y las peculiaridades que tuvo en
ROMERO BIOGRAFÍA 1830-1904 nuestro país el enfrentamiento MONARQUÍA EN
Isabel Burdiel generado entre el Parlamento BENEFICIO DE SUS
Taurus y la Monarquía a través de las
NEGOCIOS E INTERESES
24,50 euros | 944 páginas prácticas políticas cotidianas. La
autora recoge la dialéctica entre PERSONALES
el sujeto histórico y el personaje

G
alardonada con el Premio acercando al lector a la identidad personales, que por los
Nacional de Historia, Isabel ambigua y compleja de Isabel II, a intereses de la Nación. Una reina
II: Una biografía (1830-1904) la vez que nos ofrece una visión de que tuvo todo el poder para
es una obra que nace con el objetivo la Monarquía inserta en una época desestabilizar y entorpecer el
de mostrar las luces y las sombras en la que los valores políticos, juego parlamentario, y ninguno
de un reinado y de un periodo sociales y culturales iban a sufrir para lograr su objetivo de
político crucial de la historia de una profunda transformación. imponerse al Parlamento ante
España: una etapa en la que se Por estas páginas desfila un unos partidos dependientes de
mezclan un conflicto dinástico con elenco de personajes implicados la voluntad regia.
el desarrollo de una revolución muy directamente en la vida Isabel II terminó sus días en
liberal, lo que provocó tensiones de Isabel II desde su más tierna París tras un largo exilio, pero
entre el Parlamento y la Corona. infancia: la marquesa de Santa fueron muchas las variables
Pero además de esta circunstancia Cruz, que fue aya y espía, vigilante que se cruzaron y múltiples
—de transición de la monarquía—, y cuidadora; la condesa de Espoz las tramas que se urdieron,
la existencia de Isabel II estuvo y Mina, el profesor Ventosa, un para que finalmente “esta
marcada desde su nacimiento inefable Donoso Cortés y tantos imposible señora” acabara
por su condición de mujer y por su otros que trataron de controlar siendo denostada y expulsada.
posición de reina. la tutela y educación de la futura Isabel Burdiel ha escrito un
Con habilidad y soltura, soberana. Este entramado minucioso e intenso relato que
Isabel Burdiel nos ilustra sobre de relaciones e intereses interesará a expertos y profanos,
aquellas circunstancias que se contrapuestos por parte de pero también lleva a cabo una
conjugaron en el proceso de liberales y moderados nos desvela reinterpretación del periodo,
deslegitimación de la Corona. los entresijos de la corte y la política así como un examen de la figura
Dicha deslegitimación estuvo de camarillas de la época. controvertida de la Reina que
mediatizada por diferentes El penetrante retrato que revela, desde dentro, el drama de
factores: el de una reina en una realiza Isabel Burdiel trasciende una mujer. Q

ENERO 2012 MERCURIO
—Imposible contestar: ¿no hay un
atrevimiento excesivo en creer que deben
desempeñar un determinado papel más

—JORDI allá del desarrollo escrupuloso, honesto y


solvente de sus trabajos? La idea de que al
intelectual le compete una misión es casi
por sí misma sospechosa o como mínimo

GRACIA
desasosegante, como no sea el desarrollo de
su práctica profesional: la crítica, el análisis,
el diagnóstico y hasta la profecía, todo, si es
posible, irónico, cuerdo y poco alarmista.
—¿Qué opina sobre la influencia que
Bernard-Henri Lévy parece haber ejercido

“La atracción por los sobre Sarkozy en la guerra de Libia?


—Que un político en activo escuche

diagnósticos funestos
a escritores o pensadores debería ser
práctica aconsejable; otra cosa es hacerles
demasiado caso o, peor aún, escoger al

se alimenta de una intelectual para que ratifique el prejuicio o el


juicio del político.
—¿Sería ese el sueño de nuestros

neurosis morbosa” intelectuales melancólicos?


—Lo fue seguramente y seguramente
ha ido despeñándose por la pendiente de las
posibilidades incumplidas. Pero debería ser
aleccionadora la experiencia de demasiados
intelectuales metidos en grandísimos
laberintos a lo largo del siglo XX.
TOMÁS VAL —¿Asistimos en la actualidad a una
falta de ideas y propuestas intelectuales?
Todo parece tambalearse y no surgen

J
ordi Gracia (Barcelona, 1965) es diagnósticos sistemáticamente decantados demasiadas propuestas.
catedrático de literatura en la hacia la degradación cultural del presente. —Sospecho que las propuestas están;
Universidad de Barcelona, crítico —Es curioso que en este panfleto, que lo que no está es la capacidad para hacerlas
literario y articulista, además de autor de denuncia el pesimismo irritante y corrosivo hegemónicas o suficientemente visibles
varios libros sobre la historia intelectual de tantos intelectuales españoles, no y debatibles en términos públicos. Pero
de España en el siglo XX. Estado y cultura. nombre a ninguno explícitamente. escuchar a Javier Pradera pensando sobre
El despertar de una conciencia crítica bajo —Es un silencio premeditado y ha política o leer a analistas mucho más jóvenes
el franquismo (1996; 2006), La España de resultado eficaz: he descubierto que cada como Ignacio Sánchez-Cuenca sigue siendo
Franco. Cultura y vida cotidiana (2001), La lector ha ido confeccionando su propia lista estimulante.
resistencia silenciosa. Fascismo y cultura de nombres de acuerdo con su formación y —Dicen que los tiempos de crisis
en España (2004) o La vida rescatada manías. suelen ser fecundos para el pensamiento.
de Dionisio Ridruejo (2008) son algunos —El lector podría preguntarse si la La época actual, desde el punto de vista
de los títulos que componen esa crónica cultura, las muchas lecturas y el ejercicio económico, se compara mucho con el final
intelectual de nuestro pasado más cercano. diario del pensamiento, no inmuniza de los años veinte. ¿Podríamos esperar
El intelectual melancólico es su primer a esos intelectuales contra la postura un renacimiento cultural semejante al que
panfleto, donde llama al optimismo desde de niños enrabietados por no ocupar el tuvo lugar en el periodo de entreguerras?
la indignación que le produce ese continuo protagonismo que desean. —La pregunta en clave española
toque de muerto que se escucha desde —También yo me lo pregunto, y me es incontestable, porque estamos
tantos campanarios. lo pregunto desde que leí muy jovencito exactamente en un renacimiento cultural
—Esa melancolía que atribuye a algunos Sobre la felicidad de Séneca o el Breviario que arrancó desde mediados de los años
intelectuales actuales, viene de lejos. de podredumbre de Cioran: dos auténticos sesenta y todavía no está arruinado, que yo
Cicerón, Horacio, Séneca y muchos otros ya chutes contra las ilusiones fantasiosas sepa.
deploraron las costumbres de la juventud de quienes alguna vez hemos soñado —¿Es más cómodo ser pesimista desde
y muchos vicios de su sociedad. Ya sabe: despiertos. una cátedra o desde algún otro organismo
Estos jóvenes que no respetan nada… —Y a propósito: ¿no es su visión de la oficial?
—Me temo que sí, aunque no se trata intelectualidad actual también un poco —La cátedra y la función universitaria
solo de eso: que la población lectora, pesimista, melancólica? deberían acentuar la probidad y la cautela
curiosa, cinéfila, tenga una percepción —Me temo que el panfleto es hijo de un analítica, precisamente porque son
desconcertada del presente es parte del vitalista melancólico dispuesto a combatir organismos que permiten la independencia
hecho mismo de estar vivo y despierto. Lo sus peores propensiones. de criterio y de juicio: a nadie van a quitarle el
que resulta menos tolerable es que autores —¿Cuál cree que debería ser el papel de sueldo por decir lo que no debe.
específicamente preparados y dotados los intelectuales, si es que deben ocupar —Lo cierto es que, a pesar de que esos
para el análisis y la ponderación incurran en alguno, en la actualidad? intelectuales melancólicos carguen las

MERCURIO ENERO 2012
Isabel Soler lecturas 38 | 39

tintas en el pesimismo y se pasen el día heredado. A algunos, la lucidez y la plenitud devaluación del Estado del bienestar es
anunciando Apocalipsis, tampoco parece (melancólicas o no) de los demás nos exaltan completamente cierto y esa sospecha es el
haber muchas razones para el optimismo. sin tasa, y a mí sin duda. estímulo para contrarrestar la amenaza. La
—No tengo más remedio que acudir a —Es verdad, como usted afirma, que, socialdemocracia en Europa está pensando,
Gramsci y confesarme, como tantos otros, en los últimos decenios, en Europa todo ha pero lo hace en medio de la desconfianza
partidario del pesimismo de la inteligencia y mejorado considerablemente: la educación, ante las ideologías fuertes y en pleno recelo
del optimismo de la voluntad. el acceso a la cultura, la igualdad de ante un Estado fuerte como garantía de
—¿En qué mejorarían el optimismo, el oportunidades, el Estado del bienestar… equilibrio social. Y encima con China como
entusiasmo de los intelectuales, nuestras Pero parece innegable —y en El intelectual ejemplo de “Estado fuerte”.
penurias actuales? Inevitablemente melancólico cita a Tony Judt— que existe —Augusto Monterroso afirmaba que
pienso en esos economistas que reclaman una voluntad política para ir mermando los buenos cuentos siempre son tristes. La
una mayor confianza para reactivar la todos esos derechos adquiridos. ¿No ciencia ficción siempre nos pintó un futuro
Economía. es esa una razón más que válida para el poco grato, ¿por qué los profetas de la
—El coma ético o moral y emocional está pesimismo? catástrofe siempre tienen más eco que los
al alcance de cualquiera: basta con evocar la —Por supuesto, lo es para repensar portadores de buenas nuevas?
hambruna y la desesperación de la inmensa los mecanismos que hicieron posible ese —No lo sé y solo conjeturo que la
mayoría del planeta. La recarga de baterías desarrollo y que han perdido eficacia atracción por los diagnósticos funestos se
suele proceder del trabajo bien hecho ante los cambios incluso estructurales alimenta con algún tipo de neurosis morbosa
o hecho con gusto. Lo dijo hace muchos de los últimos veinte años. El riesgo de que nos ratifica, demasiadas veces, en la
años Castilla del Pino: la felicidad consiste miseria de lo real frente a la plenitud de
en amar y trabajar. Y ese es un vértigo lo soñado o deseado. Es un cortocircuito
contagioso. tirando a neurótico.
—Jordi Gracia ha estudiado en La idea de que al —Al fin y al cabo, hagamos lo que
profundidad la cultura española durante el intelectual le compete una hagamos, todo acaba mal. ¿O no?
siglo XX. ¿Qué les debemos los españoles —Pero antes de que todo acabe como
de ahora a todos aquellos intelectuales del misión es casi por sí misma sabemos que va a acabar (mal), vale la pena
pasado? Tampoco es que muchos de ellos sospechosa o como mínimo aplazar las vísperas de ese final cuanto
fueran la alegría de la huerta. podamos. Y la primera víspera del final es
—Las melancolías meditativas de
desasosegante, como no sea creer que la catástrofe ya está aquí, aunque
Antonio Machado o la lírica exaltante de el desarrollo de su práctica sin saber del todo si antes o después de
Juan Ramón, el pasmo de la inteligencia de profesional: la crítica, disfrutar de un último gin tonic, un último
Juan Benet o la emoción acre de Juan Marsé libro o un último cigarrillo. Casi iba a pedirle
son placeres intelectuales que hemos el análisis, el diagnóstico fuego. Q

ENERO 2012 MERCURIO
ENSAYO
humana pensar que cualquier edad melancólico. Es aquella en la que

CONTRA LA pasada fue mejor”) la asumo sin


rubor, del mismo modo que aplaudo
habla del “cuadro más patógeno”
existente, el celebrado El caminante

SOLEMNIDAD sin un pero su vindicación de que, a


pesar de los pesares (la cadaverina
sobre el mar de nubes de Caspar
David Friedrich. Ahí, en esa metáfora
real, espantosamente carnal, que del águila intelectual que contempla
la cadaverina ideológica del “siglo las miserias del mundo sin caer en la
corto” provocó), nunca como desde cuenta de que él no es precisamente
RICARDO EL INTELECTUAL finales del diecinueve hemos estado un Nietzsche (y ni siquiera un Steiner,
MENÉNDEZ MELANCÓLICO tan cerca de lograr el sueño ilustrado figura a la que Gracia rinde un
SALMÓN Jordi Gracia de la derrota en toda regla de la honesto y sentido reconocimiento),
Anagrama minoría de edad autoimpuesta. De reside parte del interés de este libro
12,50 euros | 101 páginas hecho, es cuando Gracia elogia que defiende tesis tan obvias como a
las conquistas de una educación menudo olvidadas. Darle una colleja

A
este lector le falta contexto
para conocer a ciencia cierta
qué nombres ostentan
algunos o muchos de los “ellos”
contra los que Gracia dirige su
panfleto. Aunque este lector
sospecha que esos algunos o
muchos “ellos” conforman el mundo
universitario catalán, el hecho de que
este lector no sea catalán ni forme
parte de la universidad (catalana,
asturiana o heidelbergiana) le exime
de prestar mayor atención a esta
orientación del panfleto. En realidad,
este lector prefiere plegar velas en
la dirección de los algunos o muchos
“ellos” y atender hacia otros asuntos
que hacen de este texto una lectura
saludable. Porque los panfletos
son siempre ad hominem, pero solo
merecen recordarse aquellos que
superan la coartada de los algunos o
muchos “ellos” contra los que fueron
redactados.
La dialéctica entre desastre y
panglossianismo, entre “la edad de
las tinieblas nos rodea” y “vivimos
en el mejor de los mundos posibles”,
enamora sin remedio al mercado
cultural, llámese mass media, élite
académica o blogosfera gamberra,
quizá porque la tentación de generar
etiquetas es a menudo mucho
más intensa que la necesidad de
estudiar sus frutos. A mí los trenos El caminante sobre el mar de nubes, de Caspar David Friedrich.
abracadabrantes me aburren y las
aleluyas de delectación me irritan, universal, integral y liberada de todas a los defensores “porque sí” de los
así que asumo con simpatía el lugar las mistificaciones religiosas cuando Grandes Autores (las mayúsculas son
escéptico que Gracia celebra como los nombres de los algunos o muchos del propio Gracia) es tan sano como
propio ya no del tiempo que nos toca “ellos” que transitan como fantasmas asumir que la decanonización de toda
vivir, sino de cualquier época sobre por estas páginas pasan a importar forma de expresión cultural no puede
la que apliquemos nuestra mirada. poco. En ese sentido, que Gracia vea traernos más que una intensificación
La apelación del panfleto a el vaso del statu quo epocal medio del disparate con el que a menudo la
ciertas enseñanzas de Montaigne lleno es coherente con el discurso lánguida posmodernidad nos obliga
(traducidas a román paladino: antidepresivo que anima su diatriba. a comulgar.
“el hombre ha sido siempre poca Diatriba dentro de la que Porque el rigor intelectual
cosa”, “toda tentación de soberbia sobresale una imagen especialmente no está reñido con el gay saber
desaparece ante la perspectiva del feliz, en la que el crítico resume nietzscheano, tan ausente, ay, de
tiempo”, “es común a la estupidez con singular olfato al intelectual nuestro entorno. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas40 | 41

este selecto grupo —no pequeño El hecho de que la


pero ciertamente desigual, en transversalidad se haya
todo caso no necesariamente más convertido en uno de los términos
perspicaz ni mejor pertrechado que fetiche de nuestra época,
el constituido por los críticos (como empleado con profusión por
el propio Cansinos, en su momento) políticos, gestores, publicistas
que llamaríamos autodidactas— o comerciales, no quiere decir
pertenece el profesor Pozuelo que no sea útil —solo para ellos
Yvancos, catedrático de Teoría novedoso, como las famosas
de la Literatura en la Universidad sinergias— a la hora de describir
de Murcia, que alterna la crítica las aproximaciones que proponen
semanal en las páginas de Abc vetas de estudio más allá de la
con una notable producción cronología. Prólogos o proemios,
ensayística en la que sobresalen comentarios, diálogos, discursos,
títulos como Teoría del canon y ensayos, críticas, conferencias
literatura española (2000), De o lecturas: los textos analizados
la autobiografía (2005) o el más por Pozuelo y sus colaboradores
reciente Poéticas de poetas abarcan una amplia gama de
(2009). modalidades o subgéneros previos
Presentado como el octavo a la aparición de la teoría literaria
volumen de la estupenda Historia propiamente dicha, un campo de
estudio —bastante reciente en


términos históricos— que trabaja
con materiales muy heterogéneos
y donde caben, como dice el autor,
LOS TEXTOS ANALIZADOS “desde un rey sabio o un poeta
hasta un catedrático, un periodista
ABARCAN UNA AMPLIA o un dramaturgo”.
GAMA DE MODALIDADES El vasto segmento abordado,
PREVIAS A LA APARICIÓN ochocientos años que cubren
la historia toda de la literatura
DE LA TEORÍA LITERARIA española, justifica el reparto de
Ramón Menéndez Pidal. PROPIAMENTE DICHA las distintas épocas —que se
corresponden a grandes rasgos
de la Literatura Española de José- con la periodización general de

UNA CIENCIA Carlos Mainer, el recorrido por


Las ideas literarias que propone
la obra— entre reconocidos
especialistas: Fernando Gómez

NUEVA Pozuelo sigue, a decir del primero,


la invitación de don Marcelino
Redondo para la Edad Media,
Gonzalo Pontón Gijón (coordinador
Menéndez Pelayo a trabajar en general de la Historia) para los
los estudios de literatura desde siglos XVI y XVII, Rosa María
la perspectiva de una “ciencia Aradra para el XVIII, Celia
IGNACIO F. LAS IDEAS LITERARIAS nueva”. La transmisión de los Fernández Prieto para el XIX
GARMENDIA (1214-2010). HISTORIA textos y saberes literarios, los y el propio Pozuelo para el XX.
DE LA LITERATURA vaivenes de la recepción, el Este reparto garantiza el rigor,
ESPAÑOLA, VOL. 8 análisis de las ideas estéticas o pero también la pluralidad de
José María Pozuelo “el nacimiento y desarrollo del las miradas críticas, aunque las
Yvancos (dir.) concepto mismo de literatura secciones respectivas pretenden
Crítica española” son, como enuncia dialogar con la obra mayor de la
35,00 euros | 800 páginas Mainer, algunos de los contenidos que forman parte y se acogen,
tratados en este volumen que como los restantes volúmenes,
se añade —junto a otro (en a la orientación ensayística

D
ecía hace poco Domingo preparación) a cargo de Fernando propuesta por Mainer, en
Ródenas, en el marco de Cabo Aseguinolaza, dedicado detrimento de aproximaciones
unas jornadas sevillanas a situar El lugar de la literatura eruditas que dejarían fuera al
dedicadas a Rafael Cansinos española en el contexto ibérico, lector no especializado. Dicho
Assens, que el viejo debate que europeo o hispanoamericano— a con otras palabras, se trata de un
enfrentaba a la crítica académica la serie que recorre la historia por libro concebido para la lectura,
con la que aparece publicada en periodos, cuya última entrega no tan solo para la consulta,
la prensa se había superado en hasta la fecha ha sido Razón y enormemente instructivo y sin
gran medida por la entrada en sentimiento (1692-1800) de María- duda ninguna valioso, que supone
revistas y suplementos de críticos, Dolores Albiac Blanco, referida una aportación importante y
como Jordi Gracia o él mismo, al con frecuencia minusvalorado apenas ensayada en los estudios
procedentes de la Universidad. A siglo XVIII. de literatura española. Q

ENERO 2012 MERCURIO
ENSAYO
Vicente Almazán

para mostrar a la hora de evocar.


Los libros que son ya, en el recuerdo,
hojas de antaño: ¿sabe Luis Mateo
Díez que tiene en un estante tres
títulos de la serie de Guillermo
de Editorial Molino, bastante
fatigados? Y es que cada inspección
a la biblioteca de los escritores
escogidos está notariada por
numerosas fotografías. Marchamalo
describe el embarullamiento de
muchas de ellas, los corredores
de la muerte a donde van a parar


MARCHAMALO DESCRIBE
LA RELACIÓN QUE LOS
ESCRITORES TIENEN CON
SUS BIBLIOTECAS Y CÓMO
HAN IDO CONSTRUYENDO
CON EL TIEMPO ESTE
UNIVERSO
Jesús Marchamalo.
AUTOBIOGRÁFICO

por estas bibliotecas no están de

EL MAPA la misma forma en una biblioteca


o en otra. Habrá quien tenga su

DEL TESORO Pavese en tal rincón, en tal estante,


en compañía de este o de aquel,
conservado de una forma o de otra,
muy subrayado, anotado o impoluto,
aunque bien leído. Y es que hay libros,
JAVIER DONDE SE GUARDAN autores, que se extravían en los
GOÑI LOS LIBROS laberintos de las bibliotecas, y estas
Jesús Marchamalo pueden ser —según Marchamalo—
Siruela arborescentes, misteriosas o de tela
18,95 euros | 222 páginas de araña; sobradas, invasoras o de
torrentera. Hay bibliotecas que son
como el mapa de un tesoro, o como

S
i fue Gamoneda quien por su un atlas. Hay bibliotecas en las que
insistencia escrutadora en las los libros están ordenados —y cada
ajenas lo llamó “inspector de uno tiene su desorden— o las hay en
bibliotecas”, bien podría llamársele las que los libros se dejan sueltos,
ahora a Jesús Marchamalo “inspector para que encuentren, si lo consiguen,
de laberintos”, pues eso es lo que son, su propio asiento.
en definitiva, las bibliotecas, ajenas Los libros dejan huellas que Mesa de trabajo de Andrés Trapiello.
o propias. Marchamalo ha pedido hay que saber hallar a poco que se
permiso a veinte escritores para husmee en las bibliotecas, huellas libros que nunca van a provocar una
que le abran esas puertas invisibles que el escritor, al abrir la puerta de emoción, libros que andan en cajas,
que conducen a sus bibliotecas su biblioteca a Marchamalo, señala en bolsas, en altillos, en sótanos,
particulares, bibliotecas veinte y y otras que, en cambio, permanecen desterrados, abandonados, pero a
ninguna igual, pues si decía Juan ocultas, esperando mejor ocasión. la hora de fotografiar esos rincones,
Ramón aquello de que un libro no Luis Alberto de Cuenca considera esos estantes, las que aparecen
se lee igual según sea una edición u que los libros de uno, en general, en el libro, muy numerosas —es un
otra, de la misma manera me da la te sobreviven, y por eso no hay libro cuidadísimo, muy hermoso—,
impresión de que ciertos nombres que marcarlos. Hay libros que son en cambio aquellas en las que
universales, imprescindibles, desde te acompañan toda la vida, que sus propietarios se nos muestran
un Kafka a un Pavese, pasando por sobreviven a las mil mudanzas de sus precisamente con cara de serlo:
Baroja, por citar tres, que asoman propietarios. Libros para recordar, propietarios. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas42 | 43

POESÍA
nostalgia. Me recuerda a Téllez solo sea por el hecho de que el libro

¿QUIÉN ERES? porque se diría que a la monumental


pregunta de Palazzeschi, ¿quién
está lleno de vida verdadera, es
decir, vida reflexionada después de

¿QUIÉN SOY? soy?, que está en tantos espejos


adolescentes y sobre las lápidas de
vivida, hechos transformados en
aquello que es la aspiración máxima
tantos muertos y en los cuadernos de cualquier hecho: convertirse en
de notas de un científico y en una poesía.
página imborrable del Quijote y en Uber en alemán, con diéresis,
JUAN LOS CANTOS la pregunta que le hace un padre a significa por encima. Y me gusta
BONILLA DE JOSEPH UBER su hijo después de cerrarle los ojos, que este Joseph Uber parezca por
Rafael Adolfo Téllez ¿quién soy?, Téllez sabría responder, encima de sí mismo, mirándose
Comares soy Joseph Uber, o bien sé quién desde el que es, un hombre a quien
11,00 euros | 72 páginas no soy, o bien yo soy el que fui. En nadie conoce, pero que mediante
cualquier caso, la respuesta a esa la pausada mirada a quien fue, a
pregunta monumental, ¿quién soy?, todas las cosas que guarda como

H
ay un poema del italiano está en este libro hermosísimo, un tesoro en la memoria y que
Aldo Palazzeschi en el que que se abre con un poema muy le vienen devueltas por la lluvia
se va preguntando: ¿Eres emocionante, y luego empieza a constante del libro, puede responder
un poeta? ¿Eres un pintor? ¿Eres mojarnos con su lluvia delicada, perfectamente a la pregunta:
un músico? Y se responde, un suave, amable, entre recuerdos y ¿quién soy? Si Rafa Téllez contesta,
poeta no, porque solo sé escribir susurros. Por decirlo pronto, Rafa soy Joseph Uber, no hay duda de
la palabra locura. Un pintor no, Téllez es el único poeta español que Joseph Uber respondería, soy
porque solo pinto con los colores que puede sacar unos mulos en Rafa Téllez. Hay un autorretrato
de la melancolía. Un músico no, un poema sin que nos asustemos. en el libro, y en ese autorretrato
porque solo sé silbar con los tonos Joseph Uber es un personaje que Uber-Téllez, o sea, el poeta que hay
de la nostalgia. Y entonces, ¿quién parece sacado de uno de esos por encima del ciudadano Téllez,
eres?, se pregunta Palazzeschi,
¿quién soy? Su respuesta es

Rodrigo Vargas
lamentablemente barata: dice, soy
el saltimbanqui de mi propia alma (o
quizá no, quizá sea muy profunda,
y nos susurre que en el fondo
no somos más que marionetas,
personajes, proyecciones de algo
más hondo, el alma, que apenas
somos capaces de representar ni


JOSEPH UBER ES UN
PERSONAJE QUE PARECE
SACADO DE UNO DE ESOS
ESCENARIOS ÁRIDOS DE
JUAN RULFO. SU MISIÓN
ES DEVOLVERLE LA VIDA A
LO QUE UNA VEZ LA TUVO,
TRANSFORMAR LA VIDA
VIVIDA EN POESÍA
Rafael Adolfo Téllez.
con actos, ni con poemas, ni con
canciones). El poema me recuerda fantasmales escenarios áridos garabatea unos versos en el suelo
a Rafael Adolfo Téllez, no porque de Juan Rulfo, calles donde están con un palo: y nos dice que lo hace
yo crea que como poeta solo sabe muertos todos, vecinos fantasmales como quien enciende un fuego, para
escribir una palabra, que en vez de que recuerdan a vecinos aun más calentarse del frío de vivir o de haber
locura, puede ser lluvia, o portón, o fantasmales, pero en ese escenario vivido. Eso es exactamente este
gallo, ni porque esté completamente fantasmal su misión es devolverle libro: una hoguera a la que acercar
seguro de que como el pintor de la vida a lo que una vez la tuvo, las manos para que la soledad en la
Palazzeschi, su paleta solo tiene porque de la vida se acuerda y sabe que uno está encuentre el abrigo
un color, el de la melancolía, y dónde está. El resultado es, y no es y el calor de la soledad de quien lo
sus tonadas un sonido, el de la ninguna paradoja, muy vital, aunque escribió. Q

ENERO 2012 MERCURIO
POESÍA
en la que hay una reflexión sobre la los que existe una niebla luminosa
existencia, una metafísica lírica de que amanece lo perdido así como
la que parte una límpida emoción, un secreto pulso entre lo que ocurre
en la que la literatura, la memoria, el en una casa y su jardín, tan poblados
olvido y los viajes forman un tejido de sombras con voz, donde sucede
en el que no deja de respirar el amor, el mundo. Y hay en ellos igualmente
siempre presente, actuante, a pesar una circulación de sueños que dan
de la pérdida y de su fugacidad. completud a la vida y una celebración
Literatura que para José Luis de esta que alcanza a lo inexistente,
García Martín es el pulmón y el sin que ello excluya la aceptación de
corazón de la existencia; memoria la muerte: “Qué placer en la noche
como resurrección y voluntad de sigilosa / soñar que ya estoy muerto,
felicidad; olvido inserto en la propia que la vida / no vendrá a consolarme
memoria, de la que es la manifestación una vez más, / que nunca más sus
más honda y silenciosa, hasta el punto labios en mis labios (…) El tiempo ya es
de que —y parafraseo al poeta— “la ceniza entre mis manos, / son ceniza
dicha mayor es no haber sido”; y los mis manos en el viento, / en esta
viajes, proyección siempre del espíritu noche, en el jardín sin nadie, / con solo
en lugares catalizadores de anhelos, un árbol donde Dios se ha ahorcado”.
espacios anímicos de encuentros Un sucesivo despojamiento hacia
y despedidas, fuente también de un final inevitable trasmina asimismo
belleza y su íntimo resplandor, lugares de los diferentes libros, considerados
José Luis García Martín.
en constante intersección con el en su unidad, sin que falte la
tiempo, corporeizado, convertido extrañeza sobre quiénes somos ni la
en una criatura más. Y desde luego el presencia de la infancia o el regreso
amor, encarnado en seres que desde a los orígenes, ni tampoco una

EL TEJIDO su ausencia le visitan, entre los que


uno sin nombre funda su existencia.
tensión de espera y una atmósfera
de misterio. En cuanto a los aspectos

DE LA VIDA Una poesía, la de José Luis García


Martín, realista, pero de la realidad
formales, la obra de José Luis García
Martín se caracteriza por su aliento
interior porque todo transcurre clásico, por su musicalidad y por su
por dentro, donde —opina— “está transparencia. En definitiva: para los
la verdadera salvación”. Una luz de que creen en la poesía como palabra
JAVIER LA AVENTURA: madrugada y una soledad floreciente iluminadora y nutriente de la vida, La
LOSTALÉ ANTOLOGÍA POÉTICA atraviesan también estos poemas aventura, como la propia autora de
José Luis García Martín con temperatura de entresueño, en esta edición piensa, es “un festín”. Q
Renacimiento
12,00 euros | 248 páginas

breves
E
nsayista, autor de diarios,
articulista, antólogo y crítico
FICCIÓN
literario, José Luis García
Sevilla 100 fotografías
Martín es, sobre todo, poeta, con que deberías conocer
una obra cuya importancia a estas Marcos Fernández Gómez, Inmaculada
alturas es indiscutible. Prueba de Molina Álvarez y Elena Hormigo
ello es la antología de sus libros León| Ayuntamiento de Sevilla
que, bajo el título de La aventura, ha 133 páginas, 20,00 euros
publicado Renacimiento, donde se Un recorrido por las imágenes de
reúnen poemas que abarcan desde José Antonio Lamadrid, Francisco
“Autorretrato de desconocido” hasta Macías, Serafín Sánchez Rengel,
“Légamo”, pasando por “Material Ángel Gomez Beadas y Juan José
perecedero”, “Al doblar la esquina” Serrano entre otros, que plasma la
o “Mudanza”, a los que suman tres metamorfosis del río Guadalquivir;
textos inéditos. La edición es de la la extensión de la ciudad hacia el sur;
filóloga y catedrática de Literatura el impulsó que aportó la Exposición
Rosa Navarro Durán, autora también Iberoamericana de 1929 y los avances
de un prólogo en el que se refleja con en infraestructuras que originó la Expo
todos sus rasgos el rostro creador del 92. El libro se compone también de
del poeta ovetense, “capaz de ser fotografías que reflejan los cambios
la voz del lector en el tiempo de la sociales, eventos y costumbres de
lectura, y luego dejar ecos, añadir Sevilla desde mediados del siglo XIX a
lizos al estambre de la vida”. Cosa la actualidad. Q
que consigue a través de una poesía

MERCURIO ENERO 2012
lecturas44 | 45

porque solo abren la boca para

QUÉMESE EN servirle de diapasón al silencio.


En Pan comido, sin embargo,

CASO DE INCENDIO Isabel Bono se lanza sin red al


corazón de ese fuego, que ahora
está compuesto de textos de
varias páginas cada uno donde
sus demonios de cabecera
JESÚS PAN COMIDO (Bukowski, Fante, Caeiro,
AGUADO Isabel Bono que sustituyen a Beckett o a
Bartleby Editores Dickinson) ruedan enredados
9,00 euros | 79 páginas ladera abajo produciendo
un estrépito de imágenes,
emociones, historias e ideas.
Poemas incontenibles que

Q
uémese en caso de arrollan todo lo que tocan,
incendio” es uno de los 12 también esos poemas breves de
poemas de Pan comido. los que han surgido y a los que
Es, también, una poética 32(6¼$ terminarán regresando. Poemas
recurrente en la obra de Isabel 3$1&20,'2 del deseo que caminan, por
Isabel Bono

Bono: la poética del deseo que expresarlo con palabras de Isabel


convierte en deseo todo lo que %DUWOHE\(GLWRUHV
Bono, con pies de plomo sobre el
toca, la poética de un fuego que agua. Poemas que hay que quemar
busca perpetuarse invitando Isabel Bono. (y donde nosotros, sus lectores,
a todos (y a todo) a arrojarse tenemos que quemarnos) porque
a él. Hasta el momento, esta forma de poemas breves, en se apresuran a un incendio que les
poética casi siempre se había relámpagos que atravesaban llama por su nombre. El deseo y
materializado en los libros el cielo de una página y dejaban el fuego son fáciles, pan comido,
de Isabel Bono (como en el sobre ella rescoldos y cerillas pero solo porque extraordinarias
publicado en el 2011, Algo de amontonadas. Poemas que se poetas como Isabel Bono saben
invierno, Luces de Gálibo) en acaban casi antes de comenzar contarlos desde dentro. Q

ENERO 2012 MERCURIO
INFANTIL
Y JUVENIL
La pirámide roja un paisaje tan familiar en la
literatura de esa generación. No
Rick Riordan es ni mucho menos, sin embargo,
Montena (en catalán: La galera)
15,95 euros. 476 páginas
CARE SANTOS un asunto habitual de novelas
dirigidas a lectores jóvenes
Después de la exitosa saga y es de celebrar encontrarlo
Percy Jackson y los dioses del en esta, con la que David
Olimpo, el autor estadounidense Lozano da un paso de gigante
Rick Riordan reaparece para en su carrera y propone a sus
demostrar que después de ocho lectores —acostumbrados a su
libros sigue tan —o más— en querencia por lo sobrenatural y
forma como al principio, que lo fantástico— un giro hacia el
el tema de la mitología clásica realismo que entremezcla temas
está lejos de agotarse en su políticos y policiales. Ilustración de Nat y el secreto de Eleonora.
imaginación y que domina como La trama gravita en torno a
casi nadie los mecanismos que una investigación periodística, sabe leer, su hermana y un buen
llevan al lector a engancharse aliñada con los conflictos íntimos puñado de personajes de ficción,
desde la primera línea con de tres jóvenes enredados en encabezados por una aguerrida
sus historias. Sirviéndose del un triángulo amoroso. El ritmo Caperucita roja. No es más de
recurso de autor-editor y de trepidante, marca de la casa, nos lo mismo: la ternura, el sentido
la argucia de transcribir unas acerca a la novela de aventuras de la existencia y, sobre todo, la
cintas grabadas por los dos en la que Lozano es todo un pasión por los libros, la lectura y
adolescentes protagonistas maestro. la amistad priman en este título
Riordan nos cuenta lo que La apuesta, sin duda que también contiene espléndidos
ocurrió en las vidas de estos dos arriesgada, se agradece en un dibujos de Anik Le Ray. Si tienen
hermanos después de “la noche autor que cuenta a sus lectores ocasión, acérquense también a la
en que nuestro padre hizo volar el por miles gracias a la trilogía La película. Q
Museo británico”. Lo fabuloso de puerta oscura. Este libro abre
esta es que, además, cumple las nuevos caminos y es una grata
expectativas: en ella los lectores sorpresa en más de un sentido. Q
hallarán buenos personajes
En la plaza quieta
principales, magníficos —y
divertidos— secundarios, la Antonio Núñez-Torrescusa /
mitología egipcia como base de Beatriz Torres | Universidad
Nat y el secreto de Castilla-La Mancha
la trama, en la que la arqueología
y la investigación al más puro
de Eleonora 5 euros. 44 páginas

estilo Indiana Jones están Rébecca Dautremer / Anik Le Ray Fantasmas modernos,
también presentes y, por último, Edelvives espantapájaros pobres, abuelitas
personajes realistas y aquejados 16,50 euros. 64 páginas lectoras, niñas aficionadas a la
de algunos de los males de los El mundo al revés: una película poesía o arañas despiadadas
lectores contemporáneos: trasladada a un libro. La cinta es son algunos de los personajes
soledad, incomprensión, Kérity, la maison des contes, de que pueblan las páginas de este
separación de sus seres Rébecca Dautremer, dirigida por estupendo libro de poemas
queridos. Dominique Monféry, una obra para niños, ganador de la última
En definitiva, estamos ante uno maestra del cine de animación edición del premio Luna de aire.
de los mejores libros para jóvenes para niños. El libro pretende ser Sus autores han sabido, a
que han aparecido este año. Q su hermano gemelo en papel, partir de la diversidad temática,
especialmente pensado para los confeccionar un conjunto al que la
fans de la ilustradora francesa, ilustración otorga un primer nexo
de la cual Edelvives ha publicado común. Más allá, cabe buscar el
varias de sus obras, entre hilo conductor en algo más sutil:
Cielo rojo
ellas Princesas, tal vez la más la pretensión de huir del lugar
David Lozano | SM conocida, y Cyrano. común, el fino sentido del humor,
17,95 euros. 475 páginas En esta ocasión, la historia es la mirada escenográfica sobre
la de una biblioteca compuesta el mundo y la delicadeza de una
El desastre de Chernóbyl forma por libros de cuentos de gran rima en asonante que es una
parte del catálogo de horrores valor que, tras ser comprada por verdadera delicia.
que impregnó la infancia de los un avaricioso librero de lance, Uno de esos libros que los
escritores que tienen hoy entre debe ser devuelta a su lugar de adultos guardamos a buen
30 y 45 años. Seguramente esa origen. En ello se empeñarán recaudo, por miedo a que los
es la razón de que últimamente Nataniel, un niño de siete años niños lo estropeen demasiado
escenarios como Prípiat sean que, para su vergüenza, aún no pronto. Q

MERCURIO ENERO 2012
lecturas46 | 47

CIENCIA

LA NUEVA
CULTURA

FRANCISCO
MORA*

NADA EXISTE EN
EL MUNDO HUMANO QUE
NO HAYA SIDO FILTRADO
Y PROCESADO POR
EL CEREBRO, LO QUE
INCLUYE CÓMO

E
l Nobel Eric Kandel ha PENSAMOS, SENTIMOS
venido señalando que la
humanidad converge hacia
Y ELABORAMOS
un conocimiento unificado de NUESTRAS CULTURAS
Ciencias y Humanidades. Y esto ASTROMUJOFF
LEJOS DE
es así, señala, porque todo viene
generado a través de ese diseño
SUPERSTICIONES
computacional común, único, que
es el cerebro humano. Suceda experimentos. Esto nos llevará a la poesía que alcance a gentes de
esto o no, lo cierto es que hoy las esa nueva cultura en la que ninguna todos los niveles intelectuales,
mentes más adelantadas están verdad será aceptada cuando solo desde aquel que realiza un trabajo
preconizando un cambio en los se enuncie con meras palabras, manual hasta el que encerrado en
parámetros culturales que nos “sagradas” o “filosóficas”, y sí su torre de marfil crea, en delirio
envuelven. Es más, para algunos, aquella que haya pasado por las filosófico o religioso, figuras aladas
ya se están entreabriendo las cribas y pruebas más universales y sin más carne que la de su propia
puertas de una nueva cultura. contrastadas. imaginación.
Recientemente el prestigioso La física y la astronomía, la Nuestro conocimiento actual
erudito de la Universidad de biología y la evolución biológica de cómo funciona el cerebro nos
Cambridge George Steiner no solo y las ciencias del cerebro están está llevando a entender cómo
señaló que todas las culturas y provocando un giro revolucionario el ser humano percibe, elabora
todas las religiones son mortales, en la ubicación del ser humano y construye la realidad que le
“como mortales son los hombres en el mundo. En particular las rodea. Y a la idea, bastante clara,
que las han creado”, sino que neurociencias, con sus logros de que nada ocurre, ni existe en el
vaticinó un cambio profundo en y filosofía, están reubicando mundo humano que no haya sido
la cultura occidental apuntando al hombre como centro del filtrado y procesado por el cerebro,
en particular a la muerte de las universo, creador con su cerebro lo que incluye cómo pensamos,
grandes ideologías políticas y de toda relación humana y aun sentimos y elaboramos nuestras
religiosas, creadoras en buena de la “realidad” objetiva tal cual culturas lejos de supersticiones
medida de los valores y normas de la conocemos. Y aun cuando el y fenómenos sobrenaturales.
nuestra cultura actual. Señalaba nuevo pensamiento “científico- La misma neuroética nos lleva a
Steiner: “El cristianismo va a morir, humanístico” esté todavía entender mejor cómo se crean los
como murió el marxismo. ¿Qué va a confinado a ese grupo de “elegidos” valores y las normas morales y
llenar el vacío? ¿Qué nos espera?” que son los científicos y pensadores cómo estas cambian con el cambio
Lo que sí parece evidente es más avanzados, pronto esta nueva de culturas, lo que nos ayudará a
que en ese cambio o esa nueva ola de conocimientos llegará a la liberarnos de errores, creencias
cultura, la ciencia va a jugar un gente, creará “cultura” y producirá y falsas acuñaciones sobre la
papel de actor principal. Y no un cambio profundo en los moralidad. Creo que todo ello nos
solo por sus descubrimientos y parámetros más “humanos” que debe conducir a situar al hombre
aplicación en todos los órdenes de conocemos. Precisamente creo en una perspectiva más real y más
nuestras vidas, como hasta ahora, que en el “cocinar” de este cambio verdaderamente humana. A todo
sino como revulsivo profundo del deben contribuir sobremanera esto que está por venir, y a mejor
conocimiento mismo, alumbrando no solo los libros que “divulgan” concepto por alumbrar, yo lo llamo
nuevas concepciones del hombre la ciencia, es decir repiten los neurocultura. Q
y todo lo que le rodea y alcanzando conocimientos científicos con
el reconocimiento de que nada es lenguaje asequible, sino los libros * Catedrático de Fisiología
posible conocer, como próximo a que “piensan” la ciencia, elaborando de la Universidad Complutense
la verdad, más que aquello que se y creando un nuevo significado para de Madrid y profesor adscrito
obtiene por las pruebas, los tests, la sociología, la filosofía, la ética de Fisiología Molecular y Biofísica
la comprobación, las hipótesis, los y el derecho, la literatura y hasta en la Universidad de Iowa.

ENERO 2012 MERCURIO
48 el rincón del librero

Librería Rafael Alberti


LOLA LARUMBE

L
Calle Tutor, 57 a librería Rafael Alberti comienza su an- Martín, al joven Iñaki Lucía, y a Pepe Amengual y
28008 Madrid dadura en el otoño del año 1975. Enrique Sergio Suárez como imprescindibles colaboradores.
www.libreriaalberti.com Lagunero busca un local claro en el centro En 2005 fue galardonada por el Ministerio de
del barrio de Argüelles, en pleno corazón del Ma- Cultura y la CEGAL con el V Premio Librero Cultu-
drid universitario y lo llena de palomas azules, ral por su proyecto “Encuentros en Alberti”, con el
paredes blancas, encala- que ha conseguido convertir el espacio de la librería
das, y de muchos libros en uno de los referentes culturales en Madrid. Mu-
hasta entonces guarda- chos han sido los poetas, escritores, editores, que han
dos a la sombra, como dejado palabras y experiencia en las paredes de “la
el país. Esos años de la Alberti”, entre ellos José Luis Sampedro, José Anto-
transición delinean ya el nio Muñoz Rojas, Ángel González, Francisco Brines,
perfil de la librería Al- Ernesto Cardenal, Bernardo Atxaga, Joan Margarit,
berti, como una librería Juan José Millás, Elvira Lindo, Luis García Monte-
plural, comprometida, ro, Benjamín Prado, Luis Muñoz, Ida Vitale, Andrés
Ricardo Martín

un espacio de encuen- Trapiello, Juan Cruz, Tomás Segovia…, y así hasta


tro alrededor del libro, más de 200 creadores literarios, ensayistas y gentes
abierta, con vocación de del libro. Los editores independientes madrileños
conformar una buena concedieron el Premio Bibliodiversidad (2004) a la
librería de fondo donde el papel del librero es de- librería Rafael Alberti por la variedad y riqueza de su
terminante. fondo editorial, formado por más de 20.000 títulos.
En los ochenta Lola Larumbe, Santiago González Pero el mayor capital de la librería Alberti, acu-
y Jaime Lucía toman el relevo y prosiguen en la ta- mulado en estos años, son los muchos lectores que
rea de asentar y proyectar la librería Alberti hasta el con su confianza siguen empujándonos para seguir
siglo XXI, incorporando a sus filas al librero Miguel siendo “una librería de referencia en Madrid”. Q

«¿Cuántas veces se contrae el corazón por minuto?


Eso depende de si el hombre tiene miedo».

«Krall habla de hechos reales mediante


el poder de la ficción».
The New York Times

«Le bastan unas cuantas palabras para


crear miles de imágenes imborrables».
Boston Globe

MERCURIO ENERO 2012
la fundación informa 49

los objetivos del ciclo, que se abrió con un


diálogo entre José Manuel Caballero Bo-
nald y Pere Gimferrer. El escritor andaluz
destacó el papel de la memoria en su acti-
vidad literaria: “Si uno no tuviera recuer-
dos, no escribiría. Escribo acordándome
de lo que he vivido, modificado, eso sí, por
las exigencias del texto literario”. Indicó
además que para él la poesía “es un hecho
lingüístico: imágenes que ofrecen la posi-
bilidad de juntar palabras que se asoman
a un mundo desconocido que descubre
una realidad nueva”. Por su parte, Pere Gi-
mferrer defendió la autonomía del poema
respecto de la realidad que designa y “la
búsqueda de lo absoluto verbal”.
Ambos autores leyeron poemas del
otro y hablaron sobre sus escritores de
J.M. Caballero Bonald y Pere Gimferrer. referencia. Caballero Bonald recordó
que “empezó a leer de forma irregu-
lar en una etapa culturalmente hostil,
Los rumbos de la poesía actual como era el final de los años cuarenta”,
a partir del hallazgo de una biografía
Gran repercusión del I Encuentro Poesía en Vandalia, de Espronceda: “Sus historias me deja-
ron asombrado, y quise imitarlo. Al no
inaugurado por Pere Gimferrer y Caballero Bonald poder emularlo en otras cosas, intenté
escribir versos y llevar una vida licencio-

E
l Espacio Santa Clara registró un Lucas, Justo Navarro, Blanca Andreu, Joa- sa”. Gimferrer, por su parte, manifestó
lleno absoluto de público durante el quín Pérez Azaústre y José Luis Rey. su interés primero por Rubén Darío y
I Encuentro Poesía en Vandalia, ce- Tras la bienvenida de la directora ge- Góngora, hasta llegar a las vanguardias.
lebrado en Sevilla y organizado por la Fun- neral de la Fundación Lara, Ana Gavín, “La formación de Caballero Bonald y la
dación José Manuel Lara el pasado mes de que expresó la intención de que el ciclo mía no son tan distintas. Empezamos
noviembre. En el acto de inauguración del tenga una periodicidad anual, intervino por cierta poesía en castellano, y luego
día 15 participaron Pere Gimferrer y José el director general del Libro, Archivos y fuimos ampliando nuestras lecturas”.
Manuel Caballero Bonald, “dos poetas dis- Bibliotecas de la Consejería de Cultura El descubrimiento de la poesía como
tintos, pero no distantes”, como señaló el di- de la Junta de Andalucía, Julio Neira, en- elemento de expresión, la consideración
rector de la colección Vandalia, Jacobo Cor- tidad patrocinadora de un encuentro que del poema como “una medicina, con un
tines. Los dos días siguientes tuvieron lugar contó también con la colaboración del valor terapéutico en situaciones límite” o
sendas mesas redondas moderadas por Área de Cultura del Ayuntamiento de Se- la estela del debate en torno a la poesía
Ignacio F. Garmendia, coordinador del En- villa y de la Orquesta Barroca de Sevilla. de la experiencia fueron algunos de los te-
cuentro, que contaron con la intervención y Intercambiar ideas, fomentar el con- mas abordados en el Encuentro, cuya pri-
posterior lectura de los poetas Carlos Mar- tacto de los poetas con los lectores y explo- mera edición se adelanta por muy poco al
zal, Aurora Luque, Eduardo Jordá, Antonio rar los rumbos de la poesía actual fueron décimo aniversario de Vandalia. Q

La Odisea de Penélope
V
andalia inicia el año sumando a Prisionera en su propio palacio y ase-
su catálogo a Nuria Barrios, que diada por jóvenes pretendientes, Penélope
publica en la colección su segun- vive entre recuerdos, incertidumbres y an-
do poemario, Nostalgia de Odiseo, des- helos secretos. Ahora ama a Odiseo, ahora
pués de haber ganado el Premio Ateneo lo añora, ahora lo inventa, ahora lo odia. Su
de Sevilla con su anterior entrega. Tras mente se mueve en el filo de la locura. Ni su
el reciente éxito de El alfabeto de los pá- hijo, Telémaco, ni la nodriza ni las criadas
jaros, que ha confirmado a la escritora ni los pretendientes saben en realidad lo
madrileña como una de las narradoras que oculta su rostro, los miedos y los deseos
más prestigiosas de su generación, Ba- que la asaltan en la oscuridad de su alcoba.
rrios recrea en este libro la historia que Nadie sabe leer lo que borda por el día y
silenció Homero, la de una esposa, Pené- deshace por la noche. Penélope no libra san-
lope, abandonada en plena juventud, en- grientas batallas ni se enfrenta a enfureci-
cerrada durante veinte años y que enve- dos dioses: la suya es una lucha titánica por
jece con cada puntada que da en el telar. Nuria Barrios. salvar a Odiseo sin perderse a sí misma. Q
Luis Sevillano

ENERO 2012 MERCURIO
50 firma invitada
ÁLVARO POMBO

De la brevedad de Ortega y Nietzsche

P
arece estúpido hablar de la brevedad ex- continua sintetización vital de ocurrencias, de
positiva de dos autores cuya obra com- ideas y de desarrollos, que otros pensadores han
pleta es extensísima, muy compleja y desarrollado quizá con menos fortuna, pero con
muy larga. Autores, ambos, que desea- mucha mayor extensión. Una manera antigua de
ron que su vida filosófica fuese, como calificarlos a ambos es decir que sus prosas son
diría Rilke, una larga tarea. ensayísticas. Con lo cual se quería decir que eran
La brevedad es un concepto somero que queda sugerentes, atrevidas, pero faltas quizá de la argu-
expresado, con cierto como regodeo, en el dicho mentación y de las pruebas explícitas. La brevedad
“Lo bueno, si breve, dos veces bueno”. Esto de la de Ortega no es la de los microrrelatos ni la de los
doble bondad de un bien por razón de su breve- aforismos, ni tampoco, como la de Nietzsche, fru-
dad nos parece hoy en día —incluso en este tiem- to de una intención anti-sistemática (Nietzsche
po nuestro de abreviaturas y aceleraciones— una creía que la filosofía se había acabado de decir a sí
gansada escolar, propia de per- misma en la obra de Hegel y los hegelianos —que
sonas solo moderadamente de- eran plúmbeos— y que lo que requerían los nue-
seosas de ilustración, que con- vos tiempos, a mediados del XIX, era una filosofía
fían en que los conferenciantes antisistemática, fulgurante, capaz de capturar la
vayan al grano y se enrollen lo Gaya Ciencia, el saber relampagueante de la exis-
menos posible. El dicho hace tencia. Le parecía que el aforismo, en esa realidad
alusión también a un ideal de relampagueante, captaba mejor que los desarro-
concisión o contención, que que- llos laboriosos la esencia del pensar. Para calificar
da contradicho por la célebre a Nietzsche me valdré de su propia teoría en “Sobre
frase alemana Einmal, keinmal la locuacidad de los escritores”, hay —dice— una
(una vez, ninguna vez). Kierke- locuacidad cortante del enojo, frecuente en Lu-
gaard se burla un poco de esta tero. Otra locuacidad conceptual con un excesivo
idea alemana, como si fuera ver- acopio de grandes fórmulas, como en Kant. Y otra,
dad que para que algo nos guste como en el propio Nietzsche, como en Montaigne,
(sea bueno) tiene que dársenos debida al “deseo de proponer siempre nuevos gi-
MIGUEL SÁNCHEZ LINDO
mucho, incluso demasiado, con ros de la misma cosa”. Esta locuacidad, giratoria,
excesiva frecuencia. Los frescos originante, que propone siempre nuevos y nuevos
y juveniles estudiantes parisienses del sesenta y aspectos de las cosas, podría decirse común a Or-
ocho, temían las largas intervenciones de Sartre tega y a Nietzsche. Al leerlos, tiene uno, por eso,
y escribían junto a su nombre, en la mesa de los la sensación de que las ocurrencias desbordan y se
conferenciantes: “Sartre, sé breve”. Los lectores de escapan de los textos entrecortándolos, abrevián-
Sartre sabemos que era fascinantemente preciso y dolos, volviéndolos instantáneos por largos que
claro y que no podía ser breve, como no pudo serlo sean. Pero hay otra dimensión de la brevedad en la
Proust, ni Henry James, este último ni siquiera al prosa de Nietzsche y de Ortega que correspondería
escribir recados. a la experiencia de la brevedad de la vida. En su
Con Nietzsche y Ortega me sucede a mí, sin epílogo a la Historia de la filosofía de Julián Ma-
embargo, que, al leer sus escritos, tengo con fre- rías, escribe Ortega: “En los sitibundos desiertos
cuencia una sensación de intensa brevedad. Esta de Arabia hay un proverbio de caravana que dice:
sensación es coincidente con, pero distinta del he- bebe del pozo y deja tu sitio a otro”. La brevedad
cho de que Nietzsche escribiera con gran frecuen- centelleante de la prosa, el relampagueante hacer
cia aforismos y Ortega artículos de periódico. Con ver el mundo de estos dos grandes pensadores, re-
ambos autores tengo yo una sensación de fragmen- sulta, además, una pasmosa abreviatura, cada vez,
tación voluntaria, de abreviatura centelleante, de de toda la filosofía occidental. Q

Número 138 | Febrero 2012


TEMAS Pintura y literatura: Vicente Molina Foix, Estrella de Diego, Jesús Aguado, Antonio Lucas
| ENTREVISTAS Roberto Calasso | GEOGRAFÍAS Salamanca por Antonio Colinas | LECTURAS David
Foster Wallace. Eva Díaz. Juan José Millás. David Monteagudo. Alberto Barrera. Eduardo Arroyo.
Manuel Vilas. Julio Mas | CLÁSICO Ramón Gaya por Carlos Marzal | FIRMA INVITADA Ángeles Caso

MERCURIO ENERO 2012
EXPOSICIONES

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19 FEBRERO 2012
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