Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 4

LETANÍA DE TODOS LOS SANTOS

Mim Lam Mim Mim Lam Mim Mim Lam Mim

Mim Re Sim Mim

San Miguel, quién como Dios Ruega por nosotros


Santos Ángeles de Dios, mensajeros de Dios Rueguen por nosotros
San Juan Bautista, precursor del Señor Ruega por nosotros
San José, esposo de la Virgen Madre Ruega por nosotros
San Pedro y San Pablo, columnas de la Iglesia Rueguen por nosotros
San Juan, amado del Señor Ruega por nosotros
Santa María Magdalena, apóstol de los apóstoles Ruega por nosotros
San Esteban, protomártir de Jesús Ruega por nosotros
San Ignacio de Antioquía, trigo para el martirio Ruega por nosotros
San Lorenzo, fiel diácono de la Iglesia Ruega por nosotros
Santas Perpetua y Felícitas, mártires amantes Rueguen por nosotros
Santa Inés, pura para el Cordero Ruega por nosotros
San Felipe de Jesús, protomártir de México Ruega por nosotros
San Fidel de Sigmaringa, fiel testigo de la fe Ruega por nosotros
San Cristóbal Magallanes y compañeros mártires Rueguen por nosotros
San Gregorio, pastor con la divina Escritura Ruega por nosotros
San Antonio Abad, padre de los monjes Ruega por nosotros
San Pacomio, preclaro anacoreta Ruega por nosotros
San Agustín, doctor del amor y la Iglesia Ruega por nosotros
San Basilio, guía de comunidades Ruega por nosotros
San Benito, amado de Dios y de los hombres Ruega por nosotros
Santo Domingo, pregonero del Evangelio Ruega por nosotros
Santa Teresa de Jesús, doctora de oración Ruega por nosotros
San Juan de la Cruz, maestro de maestros Ruega por nosotros
Nuestro padre San Francisco, hermano de los pobres Ruega por nosotros
Nuestra madre Santa Clara, luz de vírgenes Ruega por nosotros
Santos Berardo y compañeros mártires,
primicia de los menores Rueguen por nosotros
San Antonio de Padua, doctor evangélico Ruega por nosotros
San Buenaventura, fuego ardiente y brillante Ruega por nosotros
San Félix de Cantalicio, cándida flor seráfica Ruega por nosotros
Santa Verónica Giuliani, traspasada por las llagas Ruega por nosotros
San Serafín de Montegranario, sabiduría de los sencillos Ruega por nosotros
San José de Leonissa, predicador de la cruz Ruega por nosotros
San Lorenzo de Brindis, doctor apostólico Ruega por nosotros
San Félix de Nicosia, humilde limosnero Ruega por nosotros
San Bernardo de Corleone, ardiente penitente Ruega por nosotros
San Crispín de Viterbo, alegría del Evangelio Ruega por nosotros
San Ignacio de Santhia, sacerdote en humildad Ruega por nosotros
San Ignacio de Láconi, hermano en oración Ruega por nosotros
San Francisco María de Camporosso, limosnero de amor Ruega por nosotros
San Conrado de Parzham, portero de la bondad Ruega por nosotros
San Leopoldo Mandic, dulzura de perdón Ruega por nosotros
San Pio de Pietrelcina, mártir del confesionario Ruega por nosotros
San Óscar Romero, obispo de los pobres Ruega por nosotros
San Juan Diego, pequeño de la Virgen María Ruega por nosotros
San José María de Yermo y Parres, auxilio de los pobres Ruega por nosotros
San Juan Pablo II, pregonero incansable del Reino Ruega por nosotros
San José Sánchez del Río, prisionero en batalla Ruega por nosotros
Todos los Santos y Santas de Dios Rueguen por nosotros
Mim Sol Re Sim Mim Lam

De todo mal Líbranos, Señor


De todo pecado Líbranos, Señor
De la muerte eterna Líbranos, Señor
Por tu encarnación Líbranos, Señor
Por tu muerte y resurrección Líbranos, Señor
Por el envío del Espíritu Santo Líbranos, Señor

Mim Re Sim Sol Do Sol

Para que fecundes la vida de la Iglesia con la oblación y


el apostolado de tus h i j o s. Te rogamos, óyenos

Para que aumentes los dones del Espíritu Santo en el Papa


Francisco y en todos los obispos. Te rogamos, óyenos

Para que ayudes a todas las familias religiosas a vivir en


la caridad de Cristo a ejemplo de sus fundadores. Te rogamos, óyenos
Para que lleves a todos los hombres a la plenitud de la vida
cristiana. Te rogamos, óyenos

Para que compenses con tus bendiciones el sacrificio


de estos padres que han entregado a sus hijos. Te rogamos, óyenos

Para que concedas a estos hermanos nuestros la gracia de


guardar el santo Evangelio, viviendo en obediencia,
sin nada propio y en castidad. Te rogamos, óyenos

Jesucristo Hijo de Dios vivo Te rogamos, óyenos

Mim Lam Mim Mim Lam Mim

También podría gustarte