Historia Del Vestido
Historia Del Vestido
Historia Del Vestido
EL VESTIDO
Un vestido es una prenda que se asocia con la elegancia femenina y clásica.
Si bien en la antigüedad griega la mujer se cubre con túnicas al igual que
los hombres, con el tiempo se fue diferenciando su vestimenta. Así en la
Edad Media usaba dos túnicas: la “camisia”, que era una ropa interior de
mangas estrechas; la estola que era larga y llegaba a los pies, con mangas
anchas, y por encima una capa o manto.
En el siglo XVI aparecen faldas acampanadas de crinolina y la blusa dando
el puntapié al futuro vestido. Con él la mujer ha podido ocultar su pecho o
dejarlo en parte a la vista, ceñir su cuerpo, mostrar sus piernas u ocultarlas.
En fin, mostrar su femineidad a su gusto y elección.
Bajar una cremallera, abrochar un botón o anudar una corbata, son gestos
simples y cotidianos, pero con una remota y a veces sorprendente historia
llena de curiosos y simpáticos datos La forma en la que uno viste revela sus
propias preferencias y aspiraciones. Pero no siempre hemos vestido igual.
Las técnicas de confección, los materiales utilizados y las tendencias
culturales han ido marcando la evolución de la moda hasta nuestros días.
Podría decirse que la actual forma de vestir se inicia con un hito histórico
en el mundo de la moda; la aparición de la máquina de coser en 1840. Pero
retrocedamos hacia los curiosos orígenes de algunas de las prendas de
vestir más cotidianas y utilizadas en la actualidad: Vestido de baño En el
siglo pasado, esta prenda consistía en dos piezas, una larga túnica y unos
pantalones, que juntos cubrían todo el cuerpo. Fabricados en lana, eran
bastante inadecuados para el baño. El primer traje de baño, de una sola
pieza y confeccionado en tejido elástico y acanalado fue fabricado en 1920.
La firma Chanel también contribuyó a su difusión en los años 20, como
atuendo para lucir en la playa, más que para nadar. Tras la II Guerra
Mundial, el descubrimiento de fibras ligeras y de secado rápido favoreció
la expansión. En los 50 iban armados con varillas, para realzar el busto y
estrechar la cintura, dándoles apariencia de corsés. En los 60 se empezó a
enseñar más carne y a descubrir la espalda, tendencia que fue en aumento.
Bermudas .-En los años 30 y 40, las islas Bermudas se pusieron de moda
como lugar de veraneo. Como las leyes locales no permitían que las
mujeres llevaran las piernas descubiertas, apareció la moda de unos
pantalones que llegaban hasta la rodilla. Desde entonces, las bermudas son
una prenda veraniega cada vez más utilizada.
Bolso .-Del latín bursa, los primeros en ponerse de moda fueron los
llamados ridículos en el siglo XVIII. A mediados del XIX, la moda
creciente de viajar creó una demanda de bolsos que pudieran llevarse en la
mano. Su uso fue en aumento y a finales de siglo, las carteras pequeñas y
planas se pusieron de moda. La tendencia de las prendas simples a
principios del siglo XX no dejaba sitio para los objetos personales en los
bolsillos, y los bolsos se convirtieron en imprescindibles. Los de tipo
bandolera se afianzaron tras la II Guerra Mundial.
Botón .-Utilizado desde la prehistoria y fabricado en serie desde el siglo
XIV, siempre ha estado presente, pero inicialmente sólo en el vestuario
masculino. En la Edad Media eran de cuerno o cristal. A principios del
siglo XIX se comercializaban botones de cerámica, vidrio y hasta de papel
maché, pero las tendencias del momento los relevaron a un segundo
término. Perdieron su rigor cuando la alta costura los feminizó y, a partir de
los años 30, las resinas sintéticas permitieron fabricarlos de todas las
formas y colores.
Camisa .-Creada por los griegos en el siglo V a.C., durante mucho tiempo
fue una prenda propia de obreros, por lo que los burgueses ocultaban las
suyas. Antes del siglo XIX, la camisa se usaba como prenda interior que
podía colocarse debajo de un corsé. La mayoría de las camisas se metían
por la cabeza y tenían botones o cintas en la espalda. Durante el siglo XIX
esta prenda derivó a la blusa camisera.
Pantalón .-Los calzones de principios del siglo XIX son las versiones
modernas de esta prenda. Los conocidos pantalones rectos hasta el tobillo
aparecieron hacia 1800, pero no se consideraron una prenda aceptable para
vestir hasta finales del siglo. Las mujeres no los llevaron hasta los años 20
del presente siglo, con una famosa excepción, la de la actriz Sarah
Bernhardt. Durante la II Guerra Mundial, las mujeres que trabajaban en las
fábricas y el campo sustituyendo a los hombres, llevaban pantalones, pero
tras el conflicto, los únicos de moda fueron las bermudas, los de ciclista y
de torero, que se llevaban de forma informal. La revolución de los
pantalones llegó en los 60, de la mano de la moda unisex.
Pijama .-Procede del término hindi paejama que significa ropa que cubre
las piernas. En el siglo XIX, las pijamas consistían en holgados pantalones
y chaquetas con una faja anudada. Ya en los años 20 y 30 del presente siglo
las mujeres llevaban decorativas pijamas de noche e incluso versiones para
la playa. La película Sucedió una noche (1934) ayudó a popularizar la
pijama entre las mujeres.
* Lino: Materia textil que se obtiene del tallo de la planta del mismo
nombre. Se usó durante todo el siglo XIX para confeccionar ropa interior y
en el siglo XX se puso de moda para blusas, chaquetas y faldas.