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EXHUMACIÓN DE LA OSAMENTA
DEL COMANDANTE
CARLOS FONSECA AMADOR

TESTIMONIO DE
JULIO CESAR MARTÍNEZ AGUIRRE
EXHUMACIÓN DE LA OSAMENTA
DEL COMANDANTE
CARLOS FONSECA AMADOR

TESTIMONIO DE
JULIO CESAR MARTÍNEZ AGUIRRE

PALACIO DE LA CULTURA
5 DE NOVIEMBRE, 2020

Julio Cesar Martínez Aguirre

© 2022
Alcaldía de Managua
La Alcaldía del Poder Ciudadano
CRÉDITOS
"La exhumación de la osamenta del Comandante Carlos Fonseca
Amador", es una producción de la Dirección de Cultura y Patrimonio
Histórico de la Alcaldía del Poder Ciudadano de Managua. Edición a
cargo de la Dirección de Cultura y Patrimonio Histórico, adscrita a la
Dirección General de Desarrollo Humano.
Autor:
Julio César Martínez Aguirre.
Combatiente Sandinista.
Revisión de biografía de Comandante Carlos Fonseca:
Lic. Róger Norori Gutiérrez,
Historiador.
Arte y diseño:
Octavio Morales,
Dirección de Patrimonio Histórico. ALMA.
Biblioteca Digital No. 236
23 junio 2022
Julio Cesar Martínez Aguirre

Contenido

Presentación...................................................................................................................Pág. 5
Carta Entrega de Testimonio exhumación C.F.A..............................................Pág. 7
Reflexiones del Padre Uriel Molina........................................................................Pág. 8
Comentario del General de Brigada (R) Orlado Talavera Siles................Pág. 9
Reflexiones de Marlon Sequeira; Teniente Coronel PA DEN ................... Pág. 11
Notas de Adolfo López Quintero. ........................................................................ Pág. 12
Aportes del Cro. Pedro Pablo Siezar Regidor................................................. Pág. 14
Vida Revolucionaria de Carlos Fonseca........................................................... Pág. 15
Biografía Carlos Fonseca (23 Jun 1936 - 7 Nov 1976)............................... Pág. 18
Marco geografico de las lucha de sandino y
del FSLN en la zona norte de Nicaragua......................................................... Pág. 24
Barbarie, explotación campesina. ..................................................................... Pág. 26
La Cooperativa de Servicios Múltiples de Cafetaleros del Norte.......... Pág. 28
Acciones del FSLN en el entorno de Waslala.................................................. Pág. 30
La ofensiva final en las montañas de Matagalpa ....................................... Pág. 32

Misión de exhumación de la osamenta del


Comandante Carlos Fonseca Amador (1er parte)

I.- Introducción al Testimonio.............................................................................. Pág. 34


II.- Presentación pública del testimonio.......................................................... Pág. 36
III.- Publicaciones...................................................................................................... Pág. 37
IV.- Concepción de un Ejército Revolucionario en Waslala...................... Pág. 39
V.- El Trabajo Político Organizativo en las Comunidades....................... Pág. 40
VI.- Localización de tumba de guerrilleros..................................................... Pág. 41
VII.- Autorización de la “Misión” y dirigentes Principales........................ Pág. 42
VII.- Participantes en la Misión y su Trayectoria......................................... Pág. 44

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Organización y Ejecución final


Testimonio de Julio Cesar Martínez Aguirre (2da. Parte)

VIII.- Capilla católica de “Bocas de Piedra” punto de partida................ Pág. 51


IX.- Matías López “Testigo clave”........................................................................ Pág. 51
X.- El Testigo narra emboscada a Carlos Fonseca....................................... Pág. 52
XI.- Dipina, lugar de reposo de osamenta del Comandante..................... Pág. 54
XII.- Exhumación y traslado de la osamenta del Comandante.............. Pág. 56
ANEXOS
Conmemorando el 35 aniversario en Bocas de Piedra.............................. Pág. 58

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Julio Cesar Martínez Aguirre

PRESENTACIÓN

L
a Alcaldía del Poder Ciudadano de Managua, se honra en
presentar el testimonio vivencia del compañero Julio César
Martínez Aguirre, quien en compañía de compañeros Rodolfo
Amador Gallegos ¨Hugo¨ (q.e.p.d.); José Santos Sovalbarro ¨Chele
Adrián¨ (q.e.p.d.); fueron participes y dirigentes de forma conjunta en
la búsqueda y localización y rescate de la osamenta del Comandante
de la Revolución Carlos Fonseca, hecho histórico que conmovió
a Nicaragua, sobre todo al descubrirse que la saña maléfica de la
Guardia Somocista y de su líder Anastasio Somoza Debayle, habían
cercenado las manos del guerrillero heroico, para su identificador
inequívoco en Managua.
Los días 7 y 8 de noviembre de 1979 se rindieron honores
correspondientes al Comandante Carlos Fonseca en cuatro Lugares:
el día 7 en la comunidad de en Dipina, (donde fue enterrado)
Asimismo, el recién creado Ejército Popular Sandinistas Comando
de Waslala; le rindió honores los días 7 y 8 de noviembre. El día 8
de noviembre su osamenta fue traslada primero a Matagalpa y luego
llevados a Managua, donde se le brindaron los honores dignos que
merecía el Jefe de la Revolución Popular Sandinista, y desde 1979 se
encuentran sepultados en un mausoleo ubicados en el parque central
de Managua, junto a los restos del Coronel Santos López (+1965,
Cuba), y del Comandante de la revolución Tomás Borge Martínez (+30
abril 2012, Managua).
El presente testimonio publicado en la Biblioteca Digital de la
Alcaldía de Managua, fue enviado a nosotros por el autor del mismo,
Julio César Martínez Aguirre, ofreciéndonos el derecho de publicación,
sin fines de lucro, tan importante testimonio sobre este acontecimiento
que dignificó la memoria de nuestro Comandante Carlos Fonseca; la
publicamos sin correcciones de contenido alguno, , respetando la
sintaxis y expresiones personales del autor en su libre redacción del
testimonio.
La Guardia asesinó a Carlos Fonseca en una emboscada, y
quisieron ocultar sus restos para que no fuera símbolo de la lucha
libertaria del pueblo nicaragüense contra la dictadura somocista, pero
fracasaron...La dictadura somocista fue derrotada militarmente por
ese movimiento guerrillero fundado por Carlos Fonseca y otros dignos
hijos de Nicaragua, y por el pueblo nicaragüense que conducido por
su vanguardia revolucionaria logró derrocar y desterrar a la dictadura
somocista del suelo patrio el 19 de julio de 1979.

5
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Honor y gloria al Comandante Carlos Fonseca y al Frente Sandinista


de Liberación Nacional (FSLN), fundado bajo la bandera del General
Augusto C. Sandino. Que la paz y la dignidad soberana de Nicaragua
sigan siendo la estrella que ilumina nuestro destino. Patria y Libertad.
Patria Libre o Morir.
Dirección de Cultura y Patrimonio Histórico.
Alcaldía del Poder Ciudadano de Managua.
23 Junio del 2022

En la imagen Rodolfo Amador Gallegos, José Santos Sobalvarro y Julio César


Martínez quienes dirigimos la búsqueda y exhumación del Comandante Carlos
Fonseca Amador.

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Julio Cesar Martínez Aguirre

Carta Entrega de Testimonio exhumación


C.F.A. Julio Martínez

Managua, 29 de octubre del 2020


Licenciado Clemente Guido:
Director de patrimonio Histórico, Alcaldía de Managua.
Adjunto le remito a usted un testimonio de la exhumación del
Comandante Carlos Fonseca Amador el 8 de noviembre del año 1979.
El que le escribe es el único de los sobrevivientes de los que
dirigimos esta operación.
Este testimonio será presentado en el Palacio de la Cultura el día
5 de noviembre del corriente año; por el Circulo Literario del Adulto
Mayor.
Queda a su criterio la utilidad del mismo y espero que delegue
a algunos compañeros militantes de esa institución para que nos
acompañe en esta presentación
Saludes fraternos.
Julio Cesar Martínez Aguirre
Reparto Lomas de Monserrat A- 13
Militante del C.L.S. “María Venancia Aguilar”
Vice Coordinador del Circulo Literario del Adulto Mayor- CLAM
Celular: 77296939
Teléfono casa 22678269

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Reflexiones del Padre Uriel Molina

Sócrates dijo: Quién nace mortal, camina hacia la muerte.


Nuestro comandante Borge, solía decir:
¨Carlos es de los muertos que nunca mueren. ¨
Y yo digo:
Si estuviera muerto, no estaría animando con su resurrección
Nuestro qué hacer por el pueblo.
Yo persigo una forma, que no encuentra mi estilo
Como el dulce amanecer que quiere ser medio día
Como el chote que brota queriendo ser la rosa
Como la vida que en la vejez se va acabando,
Con la convicción de que al final,
La muerte se volvió amanecer
Y el chote ya no existe
Sólo la bella rosa.
Padre Uriel Molina Oliú.

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Julio Cesar Martínez Aguirre

Comentario del General de Brigada (R)


Orlado Talavera Siles
Fue 2do responsable del ministerio del Exterior en Waslala 1979

Me place comentar que tuve la oportunidad de leer el borrador


del escrito del compañero Julio Cesar Martínez Aguirre sobre la
recopilación de la vida, gesta, obra y legado del Comandante Carlos
Fonseca Amador, y el detalle de exhumación de su osamenta en
la comunidad de Dipina donde reposaban desde 1976. Acción que
estuvo bajo la coordinación de tres grandes hermanos, Rodolfo
Amador Gallegos, “Hugo”; José Santos Sovalbarro ¨Chele Adrián¨ y
Julio César Martínez Aguirre “Julián”
Considero que el documento que contiene toda esta información
es excelente; especialmente porque mantiene la llama que un día
encendió el Comandante Carlos con la fundación del FSLN en 1961;
como dijo el Comandante Tomas Borge “Carlos es de los muertos que
nunca mueren”
El Comandante Carlos Fonseca Amador es la continuidad de lo que
soñó nuestro General de hombres libres Augusto C. Sandino  de tener
un Nicaragua libre y soberana, gesta que culminó con el triunfo del
FSLN el 19 de julio de 1979, lógicamente, esto no habría sido posible
sin la integración, valentía y dignidad de la población más humilde,
los obreros y los campesinos y una serie de compañeros que con su
moral, inspirados en los más altos valores revolucionarios, lograron
articular los cimientos que permitieran el triunfo de la revolución.
Nos sentimos honrados, comprometidos y dispuestos a continuar
su causa siempre, y aún más, mientras existan personas que quieran
destruir el legado histórico por el que murieron todos nuestros
héroes y mártires; esto es un compromiso que asumimos, para que
esto no quede en el olvido; ni cambiar la esencia de la lucha, ni el
comportamiento personal que nos hace verdaderos Sandinistas.
Es intolerable pensar que el nombre del FSLN sirva para otros fines
que no sean la lucha de clases y la protección a los más desposeídos,
por los que dio su vida el General Sandino, el Comandante Carlos y
muchos compañeros. Hoy somos responsables de que su humildad,
el sacrificio, el trabajo, la lealtad, la moral, la honradez, sean valores
morales innatos en un revolucionario.
Los sandinistas nos sentimos orgullosos de serlo y decirlo, es
una honra para cada uno saber que desde su familia, la comunidad,
puesto de trabajo, etc., somos la continuidad de lo que un día soñaron

9
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

los que dieron su vida por esta causa. Es por ello la importancia de
estos escritos que permiten que las nuevas generaciones conozcan lo
que fue el significado y propósito de esas gestas.
Agradecemos al compañero Julio Martínez, fiel protagonista que
con su aporte en la lucha, en las montañas del norte de Nicaragua,
puso su grano de arena y hoy continúa trasmitiendo a las nuevas
generaciones el legado histórico  de la causa revolucionaria.   
Saludos Fraternos.

Julio César Martínez y la esposa de don luis Garcia ambos dirigentes de partido
socialista en la región de las Brisas y Yaosca - 1979

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Julio Cesar Martínez Aguirre

Reflexiones de Marlon Sequeira;


Teniente Coronel PA DEN
(Jefe de Operaciones de la Fuerza Aérea Sandinista en 1979)

Hermano, te conozco como padre ejemplar, esposo dedicado,


hermano del alma, amigo sincero, así te he conocido como
compañero sandinista, bajo noches y luceros, de madrugada, al
atardecer, bajo la lluvia, en las puestas del sol de la libertad, con tu
sonrisa sincera, trabajador incansable de nuestra causa, la causa
sandinista, enamorado de Nicaragua, del amanecer de nuestra
historia contemporánea y presente.
Hoy nos sigues animando a darle valor a los sueños y peso a nuestra
fe en las palabras de amor y verdad de nuestros héroes sandinistas…
Sandino inmortal Padre de la Patria Roja y Negra, Carlos Fonseca
es la Fuerza y luz de nuestra vanguardia combativa y triunfante... 
Así te veo compañero y hermano Julio Martínez, lleno de fe en tu
corazón, todo tenso, con desborde de amor en el pecho, mochila al
hombro cargado de esperanza, lleno de energía sandinista, te vi llegar
humilde y pasaste por nuestra orgullosa Fuerza Aérea Sandinista,
seguro de que traerías a nuestro comandante Carlos Fonseca desde
la oscura montaña a la luz de nuestra Nicaragua Bendita… Para que
siempre podamos gritar: ¡Comandante Carlos! ¡Presente!….
Yo te saludé amigo compañero, en el helicóptero de la rampa militar
del aeropuerto, sintiendo la certeza que la luz, que tu misión de traer
a Carlos seria para toda una realidad y un regalo eterno, para todos. 
Hermano, con tu aporte me complace que el legado del Comandante
Carlos Fonseca, brille en tu alma y palpite el corazón de todos nosotros, 
Gracias por seguir aportando para que esa llama de amor y fe de
Carlos Fonseca, siga creciendo e iluminando a todo Nicaragua.
Marlon Sequeira Sevilla
Teniente Coronel PA DEN
Ejército de Nicaragua

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Notas de Adolfo López Quintero.


Tte. Coronel ® Ejército de Nicaragua

Los momentos históricos y su participación en ellos, a veces no se


guardan y por lo tanto no podremos saber que ocurrió precisamente
en determinados momentos históricos. La presentación de este
documento testimonio del hermano Julio César Martínez en que se
relata un momento histórico de esta naturaleza, es de vital necesidad
para la educación de las nuevas generaciones....   Julio logra describirlo
tan fehacientemente en esta obra y lo hace realmente como ocurrió
la exhumación de uno de los nicaragüenses más notables, que logró
con su sueño programático coadyuvar, y participar directamente en
la transformación política e ideológica de la patria soñada de Rubén
Darío, Benjamín Zeledón, Sandino y el FSLN; su máxima creación.
No fue un azar de la vida de Julio el ser parte de ese hecho histórico.
Fue su actitud, responsabilidad y participación comprometida que
lo llevó a dirigir la toma de las Comunidades de Rancho Grande y
Waslala, los días 20 y 21 de Julio de 1979, zonas montañas de esas
montañas del norte de Nicaragua; donde estaba enclavado el mayor
comando de lucha contra-insurgente de Somoza.
Es su compromiso sandinista consecuente lo que lo llevo hasta
esos lugares donde coincidieron en la toma de Waslala con los
compañeros de la Columna ¨Paulo Úbeda¨ dirigidas por el compañero
Lumberto Campbell. y ya estando allí, cerca del lugar donde había
caído el Comandante Carlos Fonseca Amador; y como segundo al
mando del Comando de Waslala (responsable político) lo llevo a
participar conjuntamente con Rodolfo Amador Gallegos y José Santos
Sovalbarro en la planificación, búsqueda y exhumación de la osamenta
del Padre de la Revolución Popular Sandinista y que fuera posible
traer su osamenta a Managua y que hoy descansa en su mausoleo,
en la Plaza de la Revolución.
Es muy interesante la forma de presentar este testimonio que
incluye la lucha de Sandino, de Carlos, la represión somocista en
esas montañas, la descripción de lo que ocurría social, política y
económicamente en la zona donde reposaba la osamenta del máximo
Jefe, Carlos Fonseca Amador. Su tierra natal lo guardó por un periodo
determinado y luego, gracias a ésta acción llegó a Managua, capital de
la República de Nicaragua el 8 de noviembre de 1979 para guardarse
victorioso el recuerdo inmortal de Carlos, en donde los nicaragüenses
le podemos brindar el reconocimiento y tributo de su liderazgo.

12
Julio Cesar Martínez Aguirre

Nuestro compañero Julio Martínez, además de poeta es escritor,


con esta obra, extraordinaria narrativa de un magnífico suceso de la
historia reciente de Nicaragua, que deja plasmado con letras brillantes
en este testimonio con el que alcanza el mérito de historiador.
Carlos luchó y murió por los pobres, por los desposeídos, y por ver
a Nicaragua Grande, aunque sea pequeña. El Comandante Carlos
Fonseca Amador nutrió a la vanguardia, el FSLN, también de obreros,
campesinos, hombres y mujeres sin miedo ni temores.
¡Gracias! Querido hermano.

En esta foto aparece (Julio Martínez Aguirre) y Francisco Jarquin "chico plomo",
Francisco "chico plomo " es un combatiente histórico de Matagalpa (considerado el
"azote" de la Guardia Nacional), en la foto él me pone una inyección para contrarrestar
brote de malaria que afectaba a la tropa de Waslala.

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Aportes del Cro. Pedro Pablo Siezar Regidor


(Coordinador del Circulo Literario del Adulto Mayor CLAM)

Vean compañeros, yo soy un asceta, un místico.


Todo mí tiempo lo tengo dedicado a la Revolución y a la Patria.
¨Carlos Fonseca Amador¨.

“Hablar de Carlos Alberto Fonseca Amador (AGATON), es hablar


de la épica revolucionaria de una vida de sacrificios reales, de una
lucha armada, porque esa era la salida de la familia Somoza, la lucha
armada la fue formando como buen estratega político y militar. Su
legado hoy en día es muy importante, sus pensamientos, su ejemplo
de actuación, siguen siendo estrategia, especialmente en lo político.
«El sectarismo es el principal enemigo de la unidad. Debemos
de tener el cuidado de saber distinguir entre las diversas
fuerzas políticas del país, los elementos que coinciden con
nuestras aspiraciones, aunque esa coincidencia sea mínima».
Cmte. Carlos Fonseca Amador
“Abrazos a todas y todos los lectores de estas letras testimoniales
que es una disertación sobre la exhumación de los restos del Cmte.
Carlos Alberto Fonseca Amador, por el compañero Julio César
Martínez Aguirre”.
Hermanos y hermanas; estas letras vienen de un hombre que fue
protagonista de ese hecho histórico; que con sus manos embaló la
osamenta del Cmte. Carlos Alberto Fonseca Amador; es decir que
este testimonio es propio y verdadero y ha sido escrito y expuesto en
diferentes ocasiones y en diferentes ciudades del país, por una de las
personas que participó en la dirección de este histórico evento.
Lo que se ha expuesto es una verdad y la van a leer en esta edición,
en que ¨Julián¨ transmite de forma fidedigna la exhumación de la
osamenta del dirigente máximo del Frente Sandinista de Liberación
Nacional.
Lo que ustedes leerán son acciones que salierón del fondo de su
conciencia y compromiso; del amor verdadero que está en el fondo
del corazón de cada combatiente que fue participe de esa testimonial
acción.
Pedro Pablo Siezar Regidor,
Managua 26 noviembre 2021

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Julio Cesar Martínez Aguirre

Vida Revolucionaria de Carlos Fonseca


Pincelada de la vida y lucha revolucionaria del Padre de la Revolución Popular
Sandinista, Cte. Carlos Fonseca Amador, en el 45 aniversario de su paso a la
inmortalidad.
Por Julio Martínez.-

Después del asesinato de Augusto C. Sandino, sólo dos años


y cuatro después, nació en el Barrio Laborío de Matagalpa, el
Comandante Carlos Alberto Fonseca Amador, el 23 de Junio de 1936;
es el hijo de una mujer campesina humilde que le acompañó e inspiró
en el momento preciso del desarrollo de su vida revolucionaria.
Mayo 1 de 1963; mensaje de Carlos Fonseca a madres
nicaragüenses.
«Permítase me evocar este día a la madre del que suscribe
estas líneas, mi madre proletaria, cuyos días en el mundo ya
concluyeron. En su humildad llegó a comprender y a decir con
satisfacción que este hijo pertenecía a la Patria. El recuerdo de
mi madre me acompaña y alienta en el combate… A todas las
madres de los mártires les decimos: Un día comenzará a
brillar para siempre la libertad en tierra nicaragüense. Una
sagrada libertad tiene su raíz en vuestras entrañas».
Carlos Fonseca Amador
Carlos Fonseca Amador; Padre de la Revolución Popular Sandinista,
fue el vende caramelos de nancite, el vende periódicos, el mensajero
de oficinas de Telégrafos, el ayudante de bodeguero; el inspector y
bibliotecario del Instituto Ramírez Goyena, fue el continuador de la
lucha de Sandino.
Estudioso de la Historia Patria y de la historia de Estados Unidos,
de Carlos Marx, de la Revolución rusa, etc.
Siendo Bibliotecario del ¨Instituto Nacional Miguel Ramírez Goyena¨,
organiza bibliografía destacando las historias Patrias; las obras y
escritos existentes sobre Rubén Darío y Augusto Cesar Sandino.
Gracias a su iniciativa y el apoyo del profesor Guillermo Rothschuh
Tablada, director del Instituto “Miguel Ramírez Goyena, con estudiantes
de Matagalpa, Chontales y Managua, se dejó establecido a partir del
14 de septiembre de 1955, la celebración de la efeméride de la Batalla
de San Jacinto.

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Carlos Fonseca es el sabio recopilador de luchas históricas; las


ancestrales luchas de nuestros indígenas, las luchas contra la criminal
conquista española; luchas contra dominación inglesa de la Costa
Caribe; las luchas contra las intervenciones que por los siglos XIX y
XX los EEUU han tenido en Nicaragua.
Es el maestro, el guerrillero el conspirador permanente; estudioso y
divulgador del marxismo, de la lucha de clases.
Es el promotor, organizador del Frente Estudiantil Revolucionario
(FER), que era la antesala estudiantil a la lucha armada. Y es también
el promotor y organizador del Frente Sandinista de Liberación
Nacional. (FSLN).
En julio de 1961 fundó el Frente Sandinista de Liberación Nacional
(FSLN), con Santos López, Silvio Mayorga, Faustino Ruiz, Tomás
Borge Martínez, Noel Guerrero Santiago, Bayardo Altamirano López
y otros.
Luchó 15 años como dirigente del FSLN hasta su muerte en las
selvas de Zinica, en noviembre de 1976, a la edad de 40 años.
El 20 de marzo de 1965, en la ciudad de León, contrajo matrimonio
civil por poder con María Haydee Terán, luego contrajeron matrimonio
religioso en México, el primero de abril de ese año. Esto sucedió en
casa de su gran amigo, el profesor Edelberto Torres, autor del libro “La
dramática vida de Rubén Darío”.
Procreó dos hijos: Carlos Fonseca Terán y Tania de los Andes
Fonseca Terán, ambos sobreviven de 55 y 53 años respectivamente.
El Comandante Carlos Fonseca fue estudioso de Rubén Darío, a
estos trabajos sobre el tema los denomina “rubendariano”.
El 11 de enero del 1966 le escribe al profesor Edelberto Torres; (su
padrino de boda): y le dice: ¨Le he estado enviando recortes sobre
Rubén de revistas que me he encontrado por aquí… Hoy mismo estoy
depositando en el correo dos .
Fue detenido en varias ocasiones y enviado al exilio en Guatemala
sobre esto dice:
¨Se me expulsa por 3ra., vez de Nicaragua, la Patria querida.
Si, expulsado tres veces en mí joven vida de mi Nicaragua. Pero
de una cosa deben estar seguros los opresores de mi Patria. Y
es que pueden expulsar mi cuerpo de Nicaragua, pero jamás
podrán expulsar de mi espíritu la decisión de combatir
porque Nicaragua sea libre y soberana y su pueblo feliz».
Carlos Fonseca Amador.

16
Julio Cesar Martínez Aguirre

Su trayectoria fue guía y ejemplo fundamental para la lucha de la


juventud nicaragüense, que le admiró y le siguió hasta el final.
Es el símbolo del guerrillero místico que incide en las generaciones
de jóvenes en las décadas del 50, 60 y 70 y que destacaron como
dirigentes y combatientes de heroicas luchas que llevaron al triunfo el
19 de Julio de 1979.
Como Jefe y dirigente de la Revolución Sandinista; es el organizador
permanente; un eterno divulgador del pensamiento político y lucha
de Sandino; de estudios; comunicados y denuncias; de principios,
valores, normas y reglamentos; fue el inspirador y encausador de la
lucha sandinista.
Es el ideólogo, el estratega; el organizador de la lucha en el campo
y la ciudad, el reclutador de campesino, obreros, estudiantes.
Es el trotador de continentes para empaparse de todas las formas
de lucha.
Es el fomentador de la disciplina y de la unidad revolucionaria; el
buscador incasable de la unidad de todas las fuerzas Sandinistas, por
lo cual salió a la montaña y entrego la vida un 7 de noviembre del 1976.
Ese día fue abatido enfrente de la Capilla Católica de la comunidad
de ¨Bocas de Piedra¨, (capilla a cargo de los padres Capuchinos de
Bluefields) en la zona conocida como la región Zinica, debido a que el
rio de ese mismo nombre atraviesa toda esa amplia y bella región, en
el municipio de Waslala.
El más justo reconocimiento es haberle llamado Padre de la
Revolución Popular Sandinista y su presencia permanente entre
nosotros al decir:
¨ Carlos es de los muertos que nunca mueren¨
Tomas Borge Martínez
Espero que este esfuerzo contribuya a motivar a la juventud
nicaragüense.
Hablar de Carlos Fonseca, es encontrase con Sandino, es trazar un
rayo de luz y de esperanza en el porvenir. Es tener claro el sentido de
lucha antiimperialista de ¨la causa Sandinista¨,
Abrigo la esperanza que el 2022 pueda publicar un libro que llame
la atención a la juventud, el cual contenga una recopilación de retazos
de experiencias políticas y profesionales vividas en mis 20 años de
trabajo en lugares recónditos del país; donde también incluiría este
testimonio.

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Biografía Carlos Fonseca


(23 Jun 1936 - 7 Nov 1976)
Por Harley Ezel | Biografia revisada y corregids por Lic. Roger Norori.

Carlos Alberto Fonseca Amador, nació el 23 de junio de 1936 en


Matagalpa, Nicaragua, hijo de Fausto Amador y Justina Fonseca,
desde pequeño sufrió de miopía aguda, estudió en la Escuela superior
de varones en Matagalpa, a la vez empezó a trabajar a muy temprana
edad para ayudar en el hogar, al terminar su primaria, e ingresa al
Instituto Nacional del Norte, donde tuvo de compañero a Tomás Borge.
Estudiando aún en secundaria empieza a hacerse notar participando
en apoyo a los estudiantes de la UNAN – León que organizaban una
huelga para exigir el retiro del medallón de Somoza García que se
había instalado en el paraninfo de aquella universidad.
Por esto deben eliminarse las líneas que dicen: ahí, incursiona
en su primera actividad política, participando en las protestas de la
Universidad de León.
Misma página, siguiente párrafo debe leerse: Debido a que buena
parte de la literatura que le interesaba estaba en francés, empezó a
estudiar este idioma. Al conquistar el grado de bachiller con honores,
con otros compañeros, fundó la revista Segovia, en ese mismo año se
trasladó a Managua para continuar estudios universitarios.
En Managua empezó a trabajar en la biblioteca del Instituto Nacional
Central Miguel Ramírez Goyena, mientras desarrollaba sus estudios
universitarios. Iniciaría su participación en la edición y publicación del
periódico El Universitario en cuyas páginas se distingue ya por sus
posiciones en contra el imperialismo y convirtiéndolo en un dirigente
universitario.
En ese mismo periodo ingresó al Partido Socialista Nicaragüense,
y así, cuando Somoza García sufrió el atentado que le costó la vida
en 1956, fue detenido como sospechoso, pero puesto en libertad en
poco tiempo.
Al año siguiente viaja a Costa Rica donde fue postulado para
viajar al IV Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes que se
desarrollaría en Moscú. Igualmente participaría en el VI Congreso de
la Federación Mundial de la Juventud Democrática, que se realizaba
en Kiev.
Al regreso al país fue capturado por la guardia somocista y al salir
en liberad se dedicó a la publicación de su primer libro titulado “Un

18
Julio Cesar Martínez Aguirre

nicaragüense en Moscú” que exponía su experiencia en aquella


ciudad y en los festivales a los cuales asistió. Los últimos años de
la década del 50 fue el momento en que la actividad política contra
el régimen somocista adquiría nuevas dimensiones con la autonomía
universitaria y la resonancia que causó la Revolución cubana en el
continente.
Todo esto culminaría con su participación de una invasión armada
que llegaría desde Honduras, de donde resultó herido. Al recuperarse
de sus heridas en La Habana y volver a Nicaragua, trabajaría para la
fundación del Frente Sandinista de Liberación Nacional.
Se iba, poco a poco, dando al proceso formativo de la organización
guerrillera en medio de las circunstancias que el país vivía y la
febril actividad de joven Carlos Fonseca organizando, aportando,
dirigiendo. En1960 se le nombra delegado del CUUN y es el momento
en que da forma a un nuevo libelo junto a Silvio Mayorga, que titula
“Breve análisis de la lucha popular nicaragüense contra la dictadura
de Somoza”.
En el mismo argumenta la situación política que en ese momento
vivía Nicaragua con los hijos del dictador, que le habían sucedido en
el poder. De esto expone…
“Para formarse una idea clara de que, bajo la presidencia de Luis
Somoza, desde 1956, actuando como jefe de la Guardia Nacional su
hermano Anastasio, no se han operado cambios fundamentales en
las condiciones de dominación contra todo el pueblo, pondremos de
relieve que continúan haciendo su antojo en el gobierno los antiguos
colaboradores de la dictadura y que se mantienen los instrumentos
represivos como la Guardia Nacional y la Seguridad Nacional”. 1
Es decir, Carlos Fonseca se daba cuenta perfectamente que la
muerte de Somoza García en 1956, no había sido el inicio de su
fin, al contrario, la dictadura estaba suficientemente fuerte y podía
reproducirse en los hijos del mismo para endurecer el régimen
opresor. Durante el año del 60 y parte del 61 viajaría por algunos
países latinoamericanos, en algunos de los cuales fue arrestado,
hasta finalmente, en junio de 1961, regresó a Nicaragua para ser
deportado a Guatemala.
Finalmente, después de estar en Cuba, vuelve a Nicaragua para
culminar con la fundación de la organización guerrillera, en compañía
de Francisco Buitrago, Germán Pomares, Tomás Borge, Silvio
Mayorga y José Santos López; antiguo combatiente junto a Augusto
C. Sandino. En este caso, el primer paso fue fundar el Movimiento
1.- Carlos Fonseca Amador. Breve análisis de la lucha popular nicaragüense contra la
dictadura de Somoza en CeDeMA.org

19
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Nueva Nicaragua, que unos meses después pasó a llamarse como


Frente Sandinista de Liberación Nacional.
A inicios de la década del 60, cuando esto sucedió, Nicaragua
empezaba su participación en el Programa de Integración
Centroamericana, de igual manera, la figura de Luis Somoza Debayle,
parecía despertar cierta confianza en el sistema. De manera que
el cato de fundación, realizado de manera clandestina, no causó
mayores repercusiones en la vida del país
En 1963, después algunos viajes Cuba y Venezuela, fue capturado
en Managua en 1964 y estando preso redacta un nuevo ensayo que
titula “Desde la cárcel yo acuso a la dictadura”. En el mismo expone…
“Propongo al Centro Universitario y a las organizaciones patrióticas
de Nicaragua entablar un juicio contra A. Somoza D., Luis Somoza D.
demás miembros de la familia opresora y sus cómplices militares y
políticos a fin de que no quede impune, sino que sea castigado tanto
crimen perpetrado. Aceleremos la llegada de la ansiada hora en que
las víctimas sean los acusadores y los victimarios los acusados”. 2
El libelo fue publicado unos meses después que ganara su libertad
y ser deportado a Guatemala, logró llegar a México donde contrajo
matrimonio con María Hardee Terán y meses después regresaría
a Nicaragua para fortalecer el Movimiento estudiantil universitario.
Ubica su estancia en las montañas del norte de Nicaragua.
Mientras, debido al carácter clandestino del movimiento guerrillero
que conducía Carlos Fonseca, la sociedad veía alternativas en el
sistema de partidos del país, en el cual Fernando Agüero Rocha
había despertado esperanzas de cambio. A finales del año 66 se
había convocado a elecciones, cuya última fecha sería en enero de
1967, para lo cual la oposición a Somoza estableció una organización
llamada Unión Nacional Opositora. (UNO). Así fue que se conformó
una multitud en apoyo a Agüero que marchaba sobre la Avenida
Roosevelt el 22 de enero de aquel año.
La Guardia Nacional quiso dispersar a la multitud disparándole
directamente, causando incontables muertos y heridos, causando lo
que se llama la “masacre de la Avenida Roosevelt”. Carlos Fonseca
denunció a la UNO, la cual se desacreditó muy pronto, cuando Agüero
apareció formando parte de una Junta de Gobierno controlada por
Somoza Debayle.
Después de esto la Guardia Nacional recrudeció su patrullaje por
las zonas montañosas de Nicaragua, tratando de combatir y controlar
al movimiento guerrillero. Muchos campesinos y miembros del FSLN
2.- Carlos Fonseca Amador. Desde la cárcel yo acuso a la dictadura en Sandinovive.org

20
Julio Cesar Martínez Aguirre

murieron en aquellos combates, entre ellos Silvio Mayorga, fundador


del FSLN. Fueron años en que se fortaleció la vinculación del
movimiento guerrillero en la montaña con organizaciones universitarias,
que enriqueció a la organización guerrillera con nuevos cuadros
Así, en 1968 Carlos Fonseca aparecía como el Jefe político del
FSLN, junto a nuevos miembros como Julio Buitrago y Ricardo Morales
Avilés. Es el mismo año en que escribe un nuevo ensayo que titula
“Nicaragua. Hora Cero”. Este ensayo es un escrito que presenta
un análisis de la situación económica que vivía el país, la historia de
dominación que habría sufrid o con la intervención norteamericana,
hasta el momento en que el régimen somocista se había prolongado
en sus hijos.
“El sector encabezado por Anastasio Somoza logró la hegemonía
sobre el Partido Liberal tradicional mientras la oposición al gobierno
de Somoza pasaba a ser dominada por el Partido Conservador
tradicional, fuerza política reaccionaria profundamente debilitada
debido a que en los años 30 estaba fresca en la memoria del pueblo
la entrega, por parte de ese partido, a los intervencionistas yanquis”. 3
Esta era una historia diferente a la que se enseñaba en las escuelas
y Carlos Fonseca la utilizaba para hacer conciencia de la necesidad de
un cambio en aquellos momentos. Al año siguiente viaja a Costa Rica
pero fue captura en Alajuela y desde Nicaragua, el FSLN organiza una
tropa para rescatarlo de la cárcel.
Integraban aquella tropa Humberto Ortega, Rufo Marín y Germán
Pomares. La operación salió mal pues integrantes del grupo de rescate
resultaron heridos y Carlos Fonseca fue recapturado por la policía de
aquel país en poco tiempo. Finalmente, unos meses después los
capturados de aquel operativo, Carlos Fonseca, Humberto Ortega y
Rufo Marín, fueron liberados y deportados hacia México, para luego
llegar a Cuba.
Estando en Cuba redacta otros escritos titulados “Sandino.
Guerrillero proletario” y “Notas sobre la carta testamento de Rigoberto
López Pérez”. El primer escrito llama la atención hacia la pertenencia
social de Augusto C. Sandino y la otra son notas o llamados de
atención acerca de ciertas palabras o situaciones que se presentan
en el documento escrito por Rigoberto López Pérez a su madre. Una
de estas notas expresa….
“¿Quién es Rigoberto López Pérez? Es un nicaragüense. ¿Quién
es el nicaragüense Rigoberto López Pérez? Es el héroe y poeta de
veintiséis años que dio su vida para ajusticiar en 1956, al sicario
3.- Carlos Fonseca Amador. Nicaragua. Hora cero en Cuaderno sandinista. 9 de
septiembre, 2019, s/n

21
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

que a sueldo de la embajada norteamericana, crucificó a Augusto


Cesar Sandio. Puede considerarse a Rigoberto López Pérez como
un desconocido. Sin embargo, existen opiniones acerca de él de
insignes personalidades políticas; por ejemplo, el señor presidente
Dwight Eisenhower, lo llamó “asesino” de un “amigo” de los Estados
Unidos”. 4
Posiblemente la larga estancia de Carlos Fonseca en Cuba hizo
creer al régimen somocista que éste había muerto. Al menos así lo
creía Somoza Debayle en el año de 1973.
Sin embargo, en 1975 regresa a Nicaragua motivado por los
problemas que empezaban a manifestarse en la estructura de mando
del FSLN y que lo llevó a dividirse en tres tendencias. Ante esto,
escribe un documento que titularía “Síntesis de algunos problemas
actuales”, en el cual expone…
“A todos los militantes de la organización, plenamente identificados
con las tradiciones del Frente Sandinista, nos preocupa la necesidad
de la más completa materialización de los factores que habrán de
garantizar que nuestro destacamento esté en condiciones de conducir
el proceso hacia la más profunda transformación de la sociedad
nicaragüense. No hace falta explicar lo justo de esta inquietud de la
militancia”. 5
Se avizoraba algún descontento entre la militancia por la ausencia de
Carlos, pero había llegado para tratar de mitigar aquellas inquietudes,
apelando a lo que llama en el documento “la superioridad moral” de
la organización. En los meses iniciales del año 76 el descontento
era más evidente y Carlos Fonseca debió asumir el problema de una
presunta “diferencia de opiniones” más directamente señalando…
“Estas notas se preparan en la intemperie de la montaña, lo que
obliga en una medida mayor a expresar lo que se considera más
urgente, aprovechando la que consideramos pronta oportunidad de
comunicarnos con algunos de nuestros hermanos. A pesar de todo,
trataremos de referirnos con el máximo cuidado que nos es posible
en relación a las cuestiones que pueden ser motivo de diferencia de
opiniones”. 6
Pero aquellos problemas subsistieron y se fueron haciendo
mayores a medida que avanzaba el año de 1976. Finalmente, el
8 de noviembre, tratando de materializar un acercamiento con los

4.- Carta de Rigoberto López Pérez en Sandinovive.org


5.- Carlos Fonseca mador. Síntesis de algunos problemas actuales en lahaine.org
6.- Carlos Fonseca Amador. Notas sobre la montaña y algunos otros temas en
Lahain.org

22
Julio Cesar Martínez Aguirre

compañeros militantes, ocurre un enfrentamiento con la Guardia


Nacional. Carlos Fonseca, estaba en ese combate.
Hasta que fue emboscado frente a la capilla católica de “Bocas de
Piedra”, donde muere en el enfrentamiento. Tenía 40 años y nadie
supo dónde habrían quedado sus restos. Tres años después de su
muerte, el Presidente Anastasio Somoza Debayle fue derrocado, y
en septiembre de 1980 fue ajusticiado en Paraguay por un comando
argentino.
Y fue hasta después del triunfo de la Revolución sandinista que un
grupo de compañeros del comando de Waslala, realizaron la tarea
de búsqueda y rescate de la osamenta del Padre de le Revolución
Popular. Los restos del comandante Carlos Fonseca Amador fueron
sepultados en el Parque Central, cerca del Palacio Nacional.

23
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

MARCO GEOGRÁFICO DE LAS LUCHA DE SANDINO


Y DEL FSLN EN LA ZONA NORTE DE NICARAGUA.
(Luchas históricas en Matagalpa)
Guerrilla de Sandino y FSLN en las montañas

Si bien lucha final que llevó a la victoria del 19 de Julio se dio en toda
Nicaragua, en las ciudades pueblos y montañas, la lucha guerrillera
de Sandino y del Frente Sandinista acontecieron en las montañas del
Norte. Son referencia del ámbito principal de operaciones los mismos
departamentos de Nueva Segovia, Estelí, Jinotega Matagalpa y parte
del Caribe Norte.
Todos estos territorios son las mismas rutas originales de Sandino:
la costa, Jinotega, Matagalpa, Las Segovia y Honduras. Las filas del
FSLN se nutrieron de descendientes de soldados que conformaban
el ejército de Sandino, el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional.
(EDSN) y uno de sus sobrevivientes, Santos López; se considera el
eslabón principal de la lucha de Sandino y el F.S.L.N.
Los pueblos colindantes con Honduras, fueron claves ya que
fueron rutas de integración de guerrilleros; de abastecimiento de
armas y municiones, alimentos, medicinas, en fin, para la penetración
al corazón de la montaña. Algunos nicaragüenses piensan que la
lucha en las montañas del norte se concentró en Matagalpa, por
la batalla histórica de Pancasán y por las luchas sindicales que se
desarrollaron en ese territorio; por violaciones y masacres frecuentes
de campesinos.
Pero también las montañas de Jinotega, Matagalpa, y el área
Central de la Región Autónoma Norte., específicamente, Las Minas
eran los corredores y lugares de tránsito para la integración de
guerrilleros, para llevar armas, comidas y avituallamiento; eran los
centros de lucha y estancia de columna guerrilleras del FSLN
Muchas operaciones guerrilleras estuvieron ligadas a las
organizaciones campesinas del Partido Socialista Nicaragüense
y del Partido Comunista que se desarrollaban proselitismo en las
zonas de Matagalpa y Jinotega. Fue frecuente la integración de
nuevos guerrilleros por Jinotega, atravesando las montañas. Son
comunidades conocidas en las montañas de Jinotega: ¨, ¨ Kilambé¨;
¨El Cumbo¨; ¨Plan de Grama; ¨Caño de la Cruz¨; ¨El Cuá¨; ¨Bocaycito¨;
¨El Bote¨; ¨La Lana¨, ¨El Golfo¨; ¨Peñas Blancas¨, ¨Santa Lucia¨, etc.
En las montañas de Matagalpa se identifican comunidades como:
¨Pancasán¨; ¨Rancho Grande¨; ¨Waslala¨; ¨Las brisas¨, ¨Las Bayas¨,

24
Julio Cesar Martínez Aguirre

¨Kuskawas¨; ¨La Tronca¨; ¨El Carmen¨; ¨Yaosca¨; ¨El Chile¨, etc. Y de


la Región Autónoma del Atlántico Norte, se anotan las comunidades
de: ¨Kum¨; ¨Cusulí¨; ¨Dipina¨; ´Iyas¨; ¨Dudú¨, ¨Sofana¨, ¨Las Torres. etc.
Estos territorios son regados por los ríos: Cuá, Bocaycito, Tuma,
Yaosca, Waslala, Zinica, Mancera, Gusanera, El Sardinal, etc. Están
enclavados en la geografía de la ¨Cordillera Isabelia¨, acompañados
por dos grandes macizos que son el ¨Macizo de Peñas Blancas y
el Macizo del Cerro Kilambé; además adornadas por los cerros: ¨El
Cumbo¨, ¨Dudú¨, ¨El Corozo¨, ¨El Tigre¨, ¨Cerro Grande¨, ¨El Piojo¨,
Zinica¨, entre otros.
Toda esta geografía fue el ewcenario de la gesta heroica de
Pancasán; de las andanzas de Carlos Fonseca, de Tomas Borge,
de Víctor Tirado López, de Edgar Munguía, de Francisco Rivera,
de Carlos Aguerro Echeverría; de David, Tejada, de Henry Ruiz, de
Julián Roque, de la Claudia Chamorro; y de muchos otros guerrilleros
y colaboradores históricos que dieron su vida por la liberación de
Nicaragua para tener y mantener una patria antiimperialista, libre
digna y soberana.

25
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Barbarie, explotación campesina.


(Montañas del norte de Nicaragua)

Durante los años 60 y 70, las montañas del norte, fueron los
escenarios de los crímenes y abusos de la Guardia de Somoza y de
los jueces de mesta. El pan de cada día era la represión, torturas,
masacre campesina, violación de mujeres campesinas, el asesinato
masivo de sindicalistas y campesinos de cooperativas. Acontecieron
muertes terribles de hombres, mujeres y niños bayonetazos, hombres
y mujeres tirados de helicópteros y campesinos destazados vivos
delante de su familia.
En Waslala estaba el mayor centro de contrainsurgencia, controlada
por militares de la Escuela de Entrenamiento Básico de Infantería
(EEBI), que había fundado y dirigía Anastasio Somoza Portocarrero,
hijo del dictador. Somoza Portocarrero había estudiado en la Real
Academia de Sandhurst de Inglaterra, y también en la Escuela
Americana de Sicología y Guerra Especial, en Fort Bragg.
Los Estados Unidos son los responsables del imperio del terror que
Somoza imponía en la montaña por medio de su Guardia genocida,
sus acciones eran de terror; de despojos y humillación permanentes
de los más pobres y humildes.
La esclavitud traída por los conquistadores de nuestras tierras
seguía camuflada en la explotación permanente de terratenientes
apañados por la Guardia de Somoza. Que aseguraba los tratos
inmisericordes del campesino y la explotación de su fuerza de trabajo;
así el pago que recibía por su trabajo o precio recibido por su café o
de sus productos agrícolas; no compensaba el esfuerzo humano que
se entregaba con sudor y sangre y los precios que recibían por sus
productos, ni siquiera cubría el costo de producido de los mismos.
Así nacen duras y heroicas historias como la de las mujeres del
Cuá; de Doña Amada Pineda, de Bernardino Días Ochoa; de Catalino
Flores, de Chale Haslam y miles de campesinos anónimos sacrificado
en nombre de la libertad y la democracia.
Vivían una represión tan grande que atemorizaba a la población
campesina, para quienes era imposible la denuncia nacional o
internacionalmente. Triste realidad de la historia nuestra que nadie
denunciaba; y que solo nuestra compañera Amada Pineda se atrevió
a romper el silencio ante la corte militar.
Crímenes de lesa humanidad, cometidos por los ¨Jueces de
mesta¨ y por la genocida guardia de Somoza: instrumento de terror

26
Julio Cesar Martínez Aguirre

que recibía el¨ beneplácito de los Estados Unidos; país que les daba
avituallamiento, entrenamiento, dinero, asesoramiento, y sobre todo
las ordenes a cumplir dictadas por sus embajadores y procedentes
de los centros de operaciones en la Casa Blanca, El Pentágono o
de los Centros contrainsurgente de los Estados Unidos. En los años
setentas, en las montañas de Jinotega y Matagalpa; a cada paso se
encontraban las huellas de masacres campesinas; que se daban en
esos heroicos territorios.
Esta era la dura y cruel tragedia que vivía el campesino explotado
por los grandes finqueros o por los compradores de café; a esto se
agregaba la represión permanente a todo intento de crear sindicatos
campesinos para defender sus derechos.
En noviembre de 1976, la hermana Maura Clark, monja
norteamericana de la orden Maryknoll, me solicirtó que llevara a
la montaña a dos sacerdotes de la misma orden para documentar
el testimonio de las torturas y vejámenes que ocurrían en este
territorio; los lleve a diferentes lugares; y estuvieron por una semana,
coincidiendo dicha visita en la vista en la semana que fue muerte
Carlos Fonseca en Zinica.
Seis años más tarde Maura Clark era martirizada un 2 de diciembre
de 1982 por la Guardia genocida de El Salvador (ver documento
especial conmemorando 39 aniversarios de Maura)
En todos estos territorios de la zona norte es donde operaron
escuadras y columnas guerrilleras del FSLN como: la ¨Pablo Úbeda¨,
¨Bonifacio Montoya¨; y otras dirigidas por nuestro comandante en Jefe
Carlos Fonseca Amador.
Ahí estuvo presente nuestro comandante Carlos Fonseca; dirigiendo
y luchando contra opresores del pueblo, buscando la unidad del
Frente Sandinista, y confiando en el triunfo de una Revolución popular
y Sandinista.
Soy optimista respecto al futuro de la lucha revolucionaria
en Nicaragua, lo que no quiere decir que no vea las grandes
dificultades y los grandes obstáculos que tenemos por
delante.
Carlos Fonseca.

27
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

La Cooperativa de Servicios Múltiples de


Cafetaleros del Norte

Fui contratado en 1975 como gerente de la Cooperativa de Servicios


Múltiples, “La Perla”, que originalmente funcionaba en Matagalpa,
pero a partir de mi integración trasladó su sede a la comunidad de
Bocaycito perteneciente al departamento de Jinotega y distante a
unos 90 kilómetros de Matagalpa.
Mi nombramiento fue efectivo por medio de la Fundación
Nicaragüense de Desarrollo (FUNDE); llegue a reponer al gerente
anterior que había sido asesinado días antes por un Guardia Nacional
por el hecho de gritar vivas a Sandino en el Restaurante ¨La Perla¨ de
Matagalpa,
Mi integración a este territorio la hice muy consciente de los riesgos
que implicaba, pues sería un gerente que se desarrollaría legalmente,
con la misión de apoyar el trabajo que el FSLN desarrollaba en la
montaña en ese entonces.
Fui asumiendo este compromiso paulatinamente mediante la
interrelación diaria con muchos colaboradores históricos de la guerrilla;
como Amada Pineda, Bernardo Arauz, (padre de Francisco Arauz
Pineda, asesinado en Managua en el 2018 y de Armengol asesinado
en el Cacao en 1979 ) Feliciano Herrera y sus hermanos (Catalino);
Lino Centeno, el Cro. ¨Manga¨ (Jesús…) y su esposa doña Julia y toda
una parentela de Catalino Flores y Bernardino Días Ochoa; también
con algunos socios de la cooperativa con mente y compromiso
revolucionarios que lo esparcían en el territorio de acción de la
cooperativa; territorios que no dejaban de ser los mismos donde había
operado u operaba el Frente Sandinista de Liberación Nacional, FSLN.
La última ruta recorrida por el Cte. Carlos Fonseca fue: Jinotega, El
Cuá, Bocaycito, La Lana, El Bote; casi bordeando nuestro Centro de
operaciones.
Durante mi periodo de Gestión como Gerente de la Cooperativa,
varios socios fueron muertos por la guardia somocista, entre ellos
Ignacio Gilberto Raite.
Mi labor de Gerencia centraba su atención en la capacitación sobre
cooperativismo, asistencia técnica agrícola, el establecimiento de
viveros, el suministro de insumos, ropa medicinas y víveres en un
comisariato; apoyo a gestiones en bancos privados a los medianos
productores; el financiamiento directo a los pequeños; apoyo en el
transporte y comercialización del grano.

28
Julio Cesar Martínez Aguirre

Cuando se inició la labor de la Cooperativa la Perla en la Comunidad


de Bocaycito la primera oficina se ubicó en un pequeño cuarto de la
cocina de Finca ¨Altamira¨ propiedad de Daniel Núñez la cual estaba
medio abandonada desde que él había sido detenido por acciones
sandinistas.
Daniel Núñez habría de ser liberado junto a Daniel Ortega y otros,
cuando sucedió la toma de la casa de Chema Castillo, en diciembre
de 1974. Años después, en agosto de 1978, con la toma del Palacio
Nacional, llamada “Operación chanchera”, fue liberado Rodolfo
Amador Gallegos, integrante de la misión de exhumación de los restos
de Carlos Fonseca Amador.

29
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Acciones del FSLN en el entorno de Waslala.


(Liberación de Rancho Grande y Waslala el 20 y 21 de Julio DE 1979)

Cuando me integre en 1975 a trabajar en Bocaycito en la cooperativa


de café; el FSLN operaba poco o era poco visible en Bocaycito y sus
alrededores; pero era normal encontrar a diario a colaboradores y/o
socios comprometidos.
El desarrollo de mi labor me obligaba a recorrer y conocer todo el
territorio, así, daba charlas sobre cooperativismo, conocía de historias
de luchas y de la represión. Conocía las condiciones económicas
y productivas de las propiedades, valoraba viveros, estimada el
rendimiento por manzanas; y me quedaba tiempo para las prácticas
de tiro con las armas de los socios.
En 1979 me integré directo a la lucha con un contingente
extraordinario de campesinos explotados; socios de la cooperativa
que incluían a sus hijos y parientes. También estaban un grupo de
colaboradores históricos de nuestra vanguardia, con quienes, para
junio de 1979 ya controlábamos un amplio territorio..
Establecimos pequeños comandos militares de 15 a 20 hombres
en diferentes comunidades como Bocaycito, El Cuá, La Lana, Santa
Lucia, Caño de la Cruz, Peñas Blancas, El Golfo, etc.
Nuestro dominio se extendía desde el Caño de la Cruz, la zona
del Golfo y Peñas Blancas; parte de la carretera que va a Waslala,
especialmente el trecho entre el empalme hacia la Dalia; el empalme
de Rancho Grande.
En el mes de junio de 1979 nos tomamos un plantel de construcción
de la Compañía LAMSA que estaba ubicado en un sitio llamado “El
Portillo”, y funcionaba bajo la dirección del ingeniero Agustín Armando
Jarquín Anaya (que en el momento de la acción no se encontraba en
el sitio). Con dicho proyecto se construía un tramo de carretera ¨ El
Portillo y Abisinia.
“El Portillo” es un cerro partido que facilita pasar de Matagalpa
al Valle de Bocaycito; es la vía de entrada del Departamento de
Matagalpa hacia Jinotega.
En el ataque a dicho proyecto participamos unos 20 compañeros
equipados con armas caseras y alguna cantidad de triquitracas y
bombas de mecate, que sirvieron para hacer bulla.
A los obreros asustados que aún estaba en dicho plantel se les
permitió salir en grupo, en dirección a la Dalia, lo cual creo un gran

30
Julio Cesar Martínez Aguirre

alboroto y desconcierto y prácticamente el cierre de circulación por


esa vía de ¨El Portillo¨ hacia el valle de Bocaycito, Jinotega. (Era la
única entrada)
También hicimos un auto asalto al ”Comedor Alaska”, este era
manejado por las hermanas Marta y Fresia Pérez, ésta última cuñada
de Daniel Núñez. Ella nos había empacado la ropa y botas para
equipar a compañeros campesinos que andaban en “las malas”. Las
dos hermanas no participaban directamente en nuestras acciones,
pero ya colaboraban en todo desde meses atrás.
Pero esta vez no queríamos “quemarlas”, especialmente por la
secretaria del plantel de construcciones, que era una “chinita” muy
guapa, vivía con ellas en el “Comedor y Comisariato Alaska”. Marta
funcionaba como correo entre Matagalpa y la montaña.
Nuestro operativo cerró automáticamente la movilización por ese
territorio, quedando prácticamente aislado toda la ruta hacia el Cuá, el
Valle de Bocaycito, San José de Bocay etc.
Nuestro objetivo principal era tomar Rancho Grande y Waslala, por
esa razón visité en Matagalpa al comandante Bayardo Arce (Chepe
León), unos días antes del 19 de Julio de 1979. Este tenía bajo control
la ciudad y le presenté un informe de nuestro accionar en el territorio,
también le solicitamos armas para avanzar sobre Waslala; por esto nos
entregó 6 fusiles Garand y expresó: “”Avancen que ya tienen locos a
los guardias del comando de Waslala; les capté sus comunicaciones
por radio y están desesperados pidiendo apoyo al Chigüin”.
El 20 de julio de 1979, con 121 compañeros avanzamos hacia la toma
del poblado de Rancho Grande y después de un breve intercambio de
disparos la Guardia salió huyendo, posiblemente hacia Waslala.
El día 21 de julio de 1979 continuamos rumbo a la toma de Waslala.
Al llegar a este poblado coincidimos con la llegada de 27 compañeros
guerrilleros de la Columna ¨Pablo Úbeda¨ a cargo del compañero
¨Fanor¨ (Lumberto Campbell)
Cuando atacamos el Comando de Waslala, y el comando en
¨Rancho Grande¨, los Guardia de Somoza que los resguardaban
huyeron sin presentar resistencia; los compañeros de la Columna
¨Pablo Úbeda¨ salieron a perseguirles.
La primera estructura Militar de Waslala la integramos: Comte.
Lumberto Campbell como Jefe Militar y el suscrito (Julio Cesar
Martínez) ¨Julián¨ como responsable Político; asumíamos a partir de
ese día el control de la mayor base contrainsurgente de Nicaragua
armada y asesorada por los E.U.

31
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

La ofensiva final en las montañas de Matagalpa


(Una Revolución triunfante el 19 de Julio de 1979)

A pesar de la sensible baja de cuadros importantes de la resistencia


urbana, como Julio Buitrago, Roberto Amaya, Casimiro Sotelo Hugo
Medina y Edmundo Pérez, sucedidas a finales de la década del 60 en
Managua; se inició una etapa de silencio y acumulación de fuerzas
en el campo y la ciudad. Este silencio se rompió en 1974 con la toma
de la casa de Chema Castillo y trajo un resurgimiento del entusiasmo
sandinista, pero al mismo tiempo mayor represión en el campo y la
ciudad.
Se inició así un nuevo repunte o periodo de ascenso que luego
sufrió un tremendo golpe al caer Carlos Fonseca en Zinica el 7 de
noviembre de 1976. Pero la visión de la lucha y estrategia ya estaba
casi planteada y el crecimiento de combatientes sandinistas en apogeo;
el mayor obstáculo fue la división en las tendencias de Guerra Popular
Prolongada, Tercerista y Proletarios; lo cual no fue fácil superar; pero,
aunque parezca contradictoria en la etapa final de la lucha sandinista,
si bien no hubo total unidad, aunque parezca contradictorio, en los
albores del triunfo tampoco sucedió una separación total. Cuando
empezaron acciones más continuas, como fueron la toma de Estelí,
Matagalpa, Ocotal, San Carlos, etc., de alguna manera parecían
operaciones unificadas.
El 10 de enero de 1978 fue asesinado el periodista Pedro Joaquín
Chamorro y esto dio más efervescencia a la lucha y fortaleció la unidad;
contribuyo efectivamente al esfuerzo y sacrificio del Comandante
Carlos Fonseca Amador por la unidad de la lucha sandinista en las
montañas y ciudades para lograr la felicidad que los nicaragüenses
vivimos con el triunfo de una Revolución Sandinista y Popular en
Nicaragua.
En junio y julio de 1979 las fuerzas insurgentes y guerrilleras
convergieron para desarticular las estructuras militares, políticas,
y económicas de los Somozas; de nada les sirvió tanta masacre
campesina en el campo y las ciudades; tantos bombardeos a las
principales ciudades de Nicaragua; tanto asesoramiento militar y las
armas recibidas de los Estados Unidos; ni la creación de la Escuela
de Entrenamiento Básico de Infantería (EEBI), en Managua a cargo
de ¨El Chigüín¨ (Anastasio Somoza Portocarrero) ni la creación en
la Montaña del principal Centro Contrainsurgencia en Waslala; ni la
llegada de los refuerzos de guardias de otros países, cuyos presidentes
sufrían con el derrocamiento de la dictadura de Somoza. Todos los
frentes, escuadras, columnas sandinistas avanzaron a destruir los

32
Julio Cesar Martínez Aguirre

cimientos de la dictadura e iniciar la construcción del país con esa


visión revolucionaria del Cte. Carlos Fonseca.
El triunfo revolucionario que se registró el 19 de julio de 1979
pero que se celebró el 20 de julio en la Plaza de la Revolución con
la concentración de combatientes, con sus principales dirigentes
denominados “comandantes de la Revolución” y una representación
de todos los frentes vencedores y el recuerdo del Comandante Carlos
Fonseca y de todos los héroes y mártires que nos llevaron al triunfo.
El 19 de julio es una fiesta Nacional que cumplió 41 años.
Todavía hace falta conmemorar anualmente la toma de Rancho
Grande el 20 de julio y conmemorar la toma de Waslala el 21 de Julio.
Falta destacar más la heroicidad y dedicación ejemplar de
compañeros como Rodolfo y Francisco Amador Gallegos y tenerlos
más presente
Faltara recuperar algunos nombres como el del niño mártir de Santa
Lucia Fernando Herrera; nombre que al triunfo de la Revolución se le
dio al Pueblo de Rancho Grande y que luego lo desparecieron las
Alcaldías Liberales que dominaron por algunos años.

Campesinos cooperativistas y estudiantes de la escuela rural de Bocaycito, la mayoría


de ellos se integró a la insurrección final.

33
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

MISIÓN DE EXHUMACIÓN DE
LA OSAMENTA DEL COMANDANTE
CARLOS FONSECA AMADOR
Testimonio de Julio Cesar Martínez Aguirre. (1ra Parte)

I.- Introducción al Testimonio

Encontrar y exhumar la osamenta del Comandante Carlos


Fonseca, era como encontrar la tumba de Sandino.
Espero que este testimonio sea un elemento motivador de
conciencias: que llegue claro a las nuevas generaciones; los jóvenes;
nuestros relevos; que siembre inquietudes para estudiar y entender
bien la historia; que contribuya para que los estudiantes sepan
identificar lo verdadero de lo falso; a fin de que no les engañen y ni les
manipulen; para que todos podamos recordar o entender las luchas
pasadas en el campo y la ciudad de las generaciones anteriores.
Igualmente que sepan comprender la invaluable contribución
que brindaron los colaboradores de la guerrilla y los colaboradores
urbanos, para no olvidar la represión, las torturas y muerte de miles
de campesinos en las montañas y de miles de obreros y estudiantes
en las ciudades; de los mártires cristianos y sindicales asesinados.
Todo estos servirá para que dimensionemos el significa de la paz,
de la dignidad, de la soberanía y el costo humano de la lucha que
pagaron héroes y mártires para lograr la liberación de Nicaragua y para
defender nuestra revolución que cualquier agresión contemporánea.
En 1979, inmediatamente después de la toma de Waslala, le
planteé al comandante Lumberto Campbell, Jefe Militar del comando
de Waslala, la búsqueda del lugar donde estaba la osamenta del
comandante Carlos Fonseca, la cual realizaría conjuntamente con
Rodolfo Amador Gallegos y José Santos Sovalbarro. El comandante
me autorizó bajo la condición de no descuidar los trabajos políticos y
organizativos que teníamos en Waslala y sus comunidades, ostentaba
en ese entonces la dirección política del comando de Waslala.
Asumimos el reto y en agosto del 1979 teníamos localizado el
sitio donde estaba localizada la osamenta del Comandante y Padre
de la Revolución Sandinista Carlos Fonseca Amador, esto era en la
comunidad de Dipina.
Por instrucciones del comandante Campbell, esto le fue informado
al comandante de la Revolución, Bayardo Arce, quien me indicó que

34
Julio Cesar Martínez Aguirre

el compañero Roberto Sánchez, responsable de Relaciones Públicas


del Ejército Popular Sandinista (EPS); sería el contacto único directo
y permanente con mi persona para realizar el traslado a Managua; lo
cual se mantuvo hasta la exhumación de los restos del Comandante.
Con el compañero Roberto Sánchez se programó el envío de un
helicóptero pequeño para viajar a Dipina; suministró además urna
especial (metálica) donde se depositaria la osamenta. Roberto informo
que el helicóptero pequeño era el medio indicado para viajar a esa
comunidad, y que solo podrían viajar con el piloto dos compañeros.
Por lo tanto, considere que los más indicados éramos el Cro. Rodolfo
Amador Gallegos ¨Hugo¨ y el suscritos; quienes realizamos con mucho
cariño esta especial y extraordinaria misión.
Personalmente introdujimos en la urna toda la osamenta del
comandante y de otro que le acompañaba; la llevamos a la plaza del
poblado porque ahí se habían concentrado más de 200 personas, entre
ellos muchos colaboradores de la guerrilla que querían despedirse.
De Agatón. Después salimos a Waslala , ahí introdujimos la urna
pequeña a un ataúd grande y como ejército popular le hicimos dos
homenajes de despedida de la montaña uno el día 7 que quedo en el
comando y otro el 8 de noviembre de 1979
Luego, el 8 de noviembre, se hizo entrega de la urna al comandante
David Blanco y otros compañeros quienes partieron para Matagalpa
en un helicóptero grande, que también los llevo a Managua y depositar
dignamente la osamenta del padre, maestro y guía en el mausoleo, en
Managua, donde hoy descansan.
Hablar de la exhumación del Cte. Carlos Fonseca; es revivir y sentir
este hecho en que fui uno de los dirigentes de la operación, como si
fuera hoy a pesar de haber trascurrido más de 42 años.
Más de 150,000 valiosos hermanos que dieron su sangre; donde
muchos al igual que Carlos y Sandino, no querían siquiera un puño
de tierra para su sepultura y no tuvieron un campo santo o cementerio
para descansar y recordarlos. Hay familias que no tienen dónde
llevar flores el 2 de noviembre, ni dónde visitar a sus mártires; hay
compañeros que se conforman con el recuerdo de los días de lucha
por no saber dónde está su tumba y su osamenta.
La mayoría de ustedes entienden el gozo que sentimos aquel 19
de julio de 1979, cuando, de alguna manera, éramos parte de esa
revolución triunfante que como soñaba Carlos Fonseca; derrotaba
a una cruel dictadura y al intervencionismo norteamericano que la
patrocinaba. Entienden también el interés, la importancia y la emoción
que sentíamos un grupo de jóvenes en las montañas Waslala en 1979
por haber encontrado la “tumba del guerrillero”.

35
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Y nuestra expresión; de que Encontrar y exhumar la osamenta


del Comandante Carlos Fonseca, era como encontrar la tumba
de Sandino.
Con profundo respeto y con la mayor responsabilidad; he realizado
estos escritos; los he expuesto con mucha emoción y orgullo de
ser testigo de estos hechos históricos. Los he anotado ajustados a
la verdad; y expuesto con mucha pasión en varias oportunidades.
Considero que representan, una excepcional y quizá la más importante
misión en que he participado en mis 55 años de andar por caminos
de lucha revolucionaria y/o en mis 21 años de labor profesional en
diversos proyectos de la Revolución sandinista en nuestras montañas.
Es una historia fidedigna, narrada por alguien que vivió los hechos; y
alimento con datos de hermanos sobrevivientes, como Serafín García,
Alvenis Miranda, Orlando Talavera, Lino Centeno y otros compañeros.
He tratado de escribir y presentarlo con todo el soporte posible y la
mayor claridad de hechos; con aportes y sugerencias de compañeros;
con contenidos y elementos de la zona; su marco histórico; con
antecedentes en esa época; detallados poco a poco; su autorización,
su planificación, las coordinaciones y acciones necesarias y el rol de
los que dirigimos y participantes; para cumplir esta sagrada misión.

II.- Presentación pública del testimonio.

La primera presentación pública de este testimonio la hice en el


2018, en la UNAN-Jinotepe, a solicitud del Cro. Salvador Vanegas
Guido, ministro asesor para la educación de la Presidencia de la
República.
Fue un honor exponer ante 110 compañeros de Carazo (Policías,
combatientes históricos, secretarios Políticos, alcaldes, Juventud
Sandinista, profesores, estudiantes etc.) todos artífices esenciales de
la lucha, defensa y liberación en Carazo.
La segunda presentación de este testimonio se realizó en
coordinación con el Instituto Nicaragüense de Cultura (INC) y se
realizó en el Palacio de la Cultura, en el salón Augusto C. Sandino, el
20 de noviembre del 2020, esta segunda oportunidad de presentación
se hizo ante un público numeroso.
Una tercera presentación se hizo el día 5 de noviembre de 2021 en
la Sala Rubén Darío del Palacio de la Cultura.

36
Julio Cesar Martínez Aguirre

III.- Publicaciones

Primera publicacion.
Esta se originó en noviembre del 2018, cuando el Cro. Roberto
Sánchez estaba a cargo de la Dirección en Patrimonio Histórico de la
Alcaldía de Managua. Me encontré con él de manera casual en una
pequeña oficina de Patrimonio Histórico de la Alcaldía de Managua
llena de libros.
Se alegró de verme y me dijo:
¿”Hermanito dónde estabas perdido?¨
Tomamos un café y conversamos un buen tiempo, recordando la
odisea de la exhumación; eje central de nuestra la plática; al final me
expreso: ¡vos no te me vás sino dejamos amarrada una entrevista con
¨Visión Sandinista¨ tu testimonio es valioso es un hecho histórico” ¡Así
nació, después de 29 años, en este encuentro, la primera publicación
de esta misión! Esa vez, me regalo un libro sobre Managua.
Así Roberto propició la primera publicación de este testimonio en
la revista Visión Sandinista en su edición de diciembre 2008, en que
aparezco como personaje del mes.
Segunda publicacion:
Esta se dio en el año 2014 cuando como miembros de la Promoción
Azul 1963-1968 del instituto Ramírez Goyena publicamos un libro
titulado “El Goyenista Azul”, el cual contiene un relato parcial de este
testimonio. La publicación fue similar a la realizada en el 2008 por
“Visión Sandinista”. A inicios del 2016 encontré de nuevo a Roberto
Sánchez trabajando esta vez para la asamblea Nacional; ahí le
pregunte la posibilidad de publicar el testimonio en esa instancia.
El respondió: “tenelo por seguro hermano”, me regalo el libro;
Carlos Fonseca el Bibliotecario” y me dijo: el próximo aniversario de
Carlos Fonseca; pero él enfermó y no se pudo realizar.
Anterior a este hubo otro intento fallido con Caruna, en ese
entonces aquella institución trabajaba en el Caribe Norte y no fue
posible la publicación.
Primera publicacion virtual:
En octubre del 2020 le envié al Director de Patrimonio Histórico un
borrador de mi exposición en el Palacio de la Cultura realizada en ese
año. En noviembre del 2021 recibí la notificación del Dr. Clemente
Guido en que me informaba que se publicaría este testimonio de

37
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

manera virtual, por lo cual le pedí algunos días para revisar y mejorar
este trabajo que hoy está en sus manos.
Recibir la noticia del Director de Patrimonio Histórico de la Alcaldía
de Managua, acerca de la publicación de este testimonio de forma
virtual, me alegró y me comprometió a trabajar más el primer borrador
que entregue el año pasado.
En este caso, el testimonio se presentó con mayor orden y
con muchos nuevos aportes. Para completar detalles, he tenido
colaboración de hermanos guerrilleros, como Serafín García, Orlando
Talavera, Alvenis Miranda, de Lino Centeno, de Reyna Raite, de
militares como el Coronel Marlon S® jefe de Operación de la FAS
(Fuerza Aérea Sandinista) en 1979. También he tenido apoyo otros
amigos militares como el Teniente Coronel ® Adolfo López Quintero y
otros viejos amigos y colaboradores, con quien recopilo hechos y datos
importantes para lograr un documento más consistente y participativo.
En especial, lo he compartido con un viejo amigo, el Padre Uriel
Molina Oliú, quien expresó lo mucho que faltaba de un documento de
esta naturaleza.
Además, existen una veintena de miembros del Proyecto de
Desarrollo Integral de Waslala ¨Carlos Fonseca Amador que
establecimos un grupo de whatsapp que nos ha venido dando sus
aportes y comentarios; asimismo e localizado a varios hermanos
campesinos de la región y mantengo comunicación permanente con
ellos.
Copia del primer borrador este testimonio lo envié al Comandante
Lumberto Campbell, a la Oficina del Comandante Bayardo Arce, al
Instituto Nicaragüense de Cultura, INC, a Dirección de Patrimonio
Histórico de la Alcaldía y la Asamblea Nacional para que estimen a
bien su utilidad.
Mi mayor interés es presentarlo al Compañero ¨Fanor¨ (Lumberto
Campbell) al Comandante Bayardo Arce y al Comandante Guerrillero
David Blanco.
En todas estas publicaciones he recibido el apoyo del Círculo
Literario del Adulto Mayor y el apoyo permanente de muchos de sus
miembros como Pedro Rodríguez, José Arias, Guillermo Mejía, Lesbia
González y Pedro Pablo Siezar.

38
Julio Cesar Martínez Aguirre

IV.- Concepción de un Ejército Revolucionario en Waslala

Con el jefe militar de Waslala, Lumberto Campbell; concebimos


una estructura que propiciaba la organización y desarrollo de lo que
considerábamos el nuevo concepto revolucionario de un ejército;
que se proyectara en Waslala; atendiendo el establecimiento de
un Comando Militar y los problemas prioritarios que ese entonces
encontramos en la población. Asimismo buscando soluciones de
manera conjunta a la población civil mediante un trabajo organizado
y disciplinado.
Cada acción, cada paso, cada plan era revisado y autorizado por el
Cte. Campbell, a diario realizábamos asambleas como jefatura, con
la tropa para evaluar el trabajo.
Considerábamos que atender los aspectos políticos, era
principalmente dar respuesta a los aspectos de salud, educación,
atención de la recreación de niños y jóvenes y no perder de vista lo
productivo, el abastecimiento, el comercio; en fin, todo lo económico y
social que pudiera incidir a lo interno del Comando y en la población civil.
Pero todo esto no estaba circunscrito a Waslala; nuestras estructuras
organizativas y acciones las reproducíamos o multiplicábamos con la
población civil en todas las comunidades.
Conformamos el Comando de Waslala, fusionando a un grupo
¨Chapiollo¨ bajo mi dirección (que éramos los más numerosos, pero
con poco experiencia militar) con los compañeros de la ¨Pablo Úbeda¨
que era un grupo Selecto de guerrilleros que llegaba Waslala baja La
Dirección del Comandante “Fanor” (Lumberto Campbell). Estaban
entre ellos Serafín Garcia, Irvin Dávila, Francisco Díaz (¨Paquito¨)
José Santos Sovalbarro (¨Chele Adrián¨) Lucio Bore (Jairo Palacios)
Mario Noguera; Julio y Manuel Aguilar, Francisco….. ( ¨Chico Plomo¨)
etc. Después se integró Reynaldo Arauz un compañero de la Columna
¨Pablo Úbeda¨ que se había perdido en ¨Rosa Grande¨ en el último
combate. Seidy Rivas guerrillera de Matagalpa se integró también al
Comando.
Además Llegaron a conformar el Ministerio del Interior Rodolfo
Amador Gallegos, ¨Hugo¨, guerrillero matagalpino que fuera liberado
con la toma del Palacio; integrándose también a esta estructura el
compañero Orlando Talavera, Omar Halum, Kamil Rosales y otros
colaboradores.
Así se atendía Waslala: organizado desde un inicio Equipos de
educación; de Salud; de producción: de atención de mujeres y niños
y estos los reproducíamos de manera similar en las comunidades; las
visitas propiciaban el desarrollo y crecimiento, con ejecuciones claras
y dejando por escrito todo lo que hacíamos.

39
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Así logramos llevar y mantener un funcionamiento normal de la


población. Se engendraron proyecciones visionarias como el hospital,
escuelas, Proyectos productivos de granos básicos, hortalizas,
producción de cacao, etc.; caminos, talleres de Costura; tiendas
populares en Waslala, Bocaycito y Rancho Grande; acciones para
saborear realidades; ej. “el iniciar” a pulso “la construcción del “Hospital
Fidel Ventura” (guerrillero caído de la columna “Pablo Úbeda”).

V.- El Trabajo Político Organizativo en


las Comunidades.

Desde el triunfo de la revolución, salíamos de Waslala en misiones


de organización y apoyo a comunidades, recorriendo a pie esas
montañas (no existían los caminos actuales); dormíamos en cualquier
sitio donde nos agarrara la noche y todos nos turnábamos para
garantizar la vigilancia nocturna. Al mes de agosto de 1979 teníamos
10 comunidades organizadas.
La inicial base organizativa formada hacia julio de 1979, definía
un marco de referencia del campo de acción, establecía claramente
la visión y misión de organización comunitaria en todo Waslala; las
misiones a comunidades eran militares, de seguridad, organizativas,
productivas y de búsqueda de caídos.
Al inicio, en Waslala éramos todo esto significaba que hacíamos de
todo. Atendíamos militarmente en el comando y atendíamos a toda la
población de Waslala y sus comunidades en que se nos requería y en
todo lo que considerábamos que era necesario atender; la salud, la
educación, la producción, el abastecimiento, los niños, las mujeres y
los jóvenes.
Como responsable político del comando de Waslala; además de
la estructura del comando, creamos una estructura para atender la
población de Waslala y sus comunidades; así se atendía los aspectos
que considerábamos necesario desarrollar a lo interno de nuestras
tropas, e incidíamos desarrollando todo lo que era necesario en el
pueblo y sus comunidades.
Cuando no existían o no se habían creado otras estructuras
de organismos de masas (que se dieron después) los militares
atendíamos todo desde las instalaciones del cuartel; proyectándonos
con acciones concretas en el pueblo
Para la atención de la población, seleccionamos inicialmente unos
10 compañeros de los que podían tener más nivel de preparación entre
ellos estaban Enrique Ferrufino, (estudiante de Medicina atendiendo
los aspectos de salud) Alvenis Miranda ¨Carlos¨, (atendiendo los

40
Julio Cesar Martínez Aguirre

asuntos de educación y productivos) Felipe Luna, (atendiendo tiendas


populares) Socorro Torres Luna, (atendido mujeres y niños) además
estaban los hermanos Paula, (¨Katia¨), Argentina (¨Kenia¨) y Cesar
González. (Todos ellos hijos de don Tomas Zeledón asesinado por la
Guardia), la Cra. Reyna Raite, Eduardo Aguirre, Porfirio Soza, estos
últimos apoyaban en diferentes labores y otros integrantes
Este esfuerzo inicial, nacido del EPS, quedó plasmado para la
posteridad en el Proyecto de Desarrollo Integral de Waslala, Carlos
Fonseca Amador” y que apoyó la Comunidad Económica Europea.
Este organismo correspondió su formulación con el envío de asesores
y yo fui su primer director.
Toda la atención civil ciudadana se convirtió en lo que fue el
“Proyecto de Desarrollo Integral de Waslala ¨Carlos Fonseca¨ donde
se integraron nuevos miembros como Linnet Sequeira (¨Waslalita¨)
(q.e.p.d.) Beatriz Blandino, (¨Zinica¨); Inés Rodríguez, (¨Dipina¨)
Rene Martínez, Roberto Martínez, José Hernández (¨Chepe¨)(qepd);
Ernesto Miranda; y otros compañeros.

VI.- Localización de tumba de guerrilleros.

Llegamos a la parte de la historia con mayor responsabilidad y esto


era buscar las comunidades que conocieron a los guerrilleros caídos,
los colaboradores que apoyaron la lucha y los detalles de momentos
vividos con ellos en esas comunidades y expresados con la verdad
histórica; sin que existieran dudas o vacíos.
Al iniciar la misión de encontrar el lugar donde habían enterrado
al comandante Carlos, solo disponíamos de nuestro compromiso
revolucionario, el nombre de la comunidad donde había caído: “Bocas
de Piedra”, y algunos comentarios o “decires” Aquí murió, pero se los
llevaron a enterrar a otro lado.
Estas expresiones eran comunes en las comunidades que
visitábamos; cuando los guardias, o los jueces (chivatos) mataban a
un dirigente campesino o a un guerrillero acostumbraba a trasladar los
cadáveres a comunidades vecinas diferente al lugar donde caían, su
objetivo era esconder a los caídos y así evitar que se dieran entierros
populares de nuestros hermanos…
Las visitas a las comunidades fueron constantes y desde Julio de
1979, eran visitas con acciones concretas, bien definidas, planificadas.
En Waslala habíamos organizado comisiones de apoyo con los
pobladores del lugar y multiplicábamos las estructuras en lo posible
en cada comunidad.

41
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

La misión especial adicional a la organización comunitaria era


localizar el sitio donde habían enterrado al Comandante Carlos
Fonseca.
Realizamos varios viajes a la zona donde cayó Comandante Carlos
Fonseca Amador para localizar la comunidad y el lugar donde fue
enterrado; iniciando esta misión en julio de 1979; completándola en
noviembre para celebrar el tercer aniversario de su caída.
Fue así que en el mes de agosto, ya teníamos localizada en Dipina,
la tumba del Comandante Carlos y la de Edgar Munguía “La Gata” en
Ocote, Tuma.
En una misión por Las Bayas, Rodolfo Amador también había
encontrado la tumba de Claudia Chamorro.
Para todos los compañeros caídos en las montañas se hicieron
las respectivas evacuaciones y actos de despedida en Waslala. En
Ocote Tuma, Edgar Munguía estaba enterrado en el propio poblado y
toda la comunidad sabia donde se encontraba. Me correspondió ir a
este poblado a traer su osamenta e igual que en Dipina, la población
de Ocote Tuma despidió a la “Gata Munguía”. Miembros de la
comunidad expresaron; que esté fino joven en su quehacer guerrillero
se había ganado el cariño de esa comunidad. Participó esta vez en la
despedida de Edgar una representantes de los maestros cubanos; la
profesora Marka Suarez.
Igual que cuando se localizaron los restos del Comandante Carlos
Fonseca, estaba presente para recibir su osamenta el comandante
David Blanco; esta vez acompañado de familiares del compañero
Edgar Munguía.

VII.- Autorización de la “Misión” y dirigentes Principales

La misión emprendida en julio de 1979; hace más de 42


años; fue autorizada por el Comandante Lumberto Campbell
compañero ¨Fanor¨; Jefe Militar del Comando de Waslala. En la
primera semana después del triunfo de la revolución, después del
¨matutino¨ y de evaluación del trabajo, solicite a nuestro jefe militar
autorización para comenzar búsqueda del de lugar donde estaba
enterrado el Comandante Carlos Fonseca Amador.
Adelante dijo el comandante; pero que esto no signifique descuidar
el trabajo en Waslala, ni descuiden el trabajo de organización en
comunidades.

42
Julio Cesar Martínez Aguirre

Los dirigentes principales para localizar y exhumar los restos del


comandante fuimos tres entrañables hermanos sandinistas: Rodolfo
Amador Gallegos, José Santos Sovalbarro y este servidor Julio Cesar
Martínez. Fue una acción conjunta y debidamente planificada. Los
tres teníamos diferentes orígenes y en ese momento cumplíamos en
Waslala, diferentes funciones:
Rodolfo Amador “Hugo”, matagalpino experimentado, hombre
de campo, guerrillero; velaba la seguridad como Jefe del naciente
Ministerio del Interior.
El “Comanche Adrián” (José Santos Sovalbarro) matagalpino, de
origen obrero, un empecinado guerrillero que apoyaba en el comando
para lograr el mejor entrenamiento y formación militar del nuevo
ejercito revolucionario;
¨Julián¨ (Julio Martínez A) político del Comando de Waslala; Lic. (i)
en Admón. de Emp., y la experiencia de 4 años en la zona dirigiendo
la cooperativa de café.
Participaron además 14 compañeros; de los cuales solo retengo en
mi memoria a Saydy Rivas Reed, (q.e.p.d.) y Alvenis Miranda de los
otros 12 no retengo sus nombres; compañeras campesinos, que hoy
están en el anonimato.
“Hugo” y el “Comanche” Rodolfo y José Santos; eran dos
excepcionales compañeros, de gran trayectoria; dos hermanos
sandinistas tan audaces como humildes, y con gran trayectoria de
lucha guerrillera.
Rodolfo: Es de los presos liberado con la toma del Palacio Nacional
en agosto de 1978; conocer del territorio; tenía una finca en comunidad
“Las Bayas”
José Sovalbarro era un extraordinario compañero de origen obrero,
que inicio su lucha en la ciudad y se convirtió en uno experimentado
guerrillero de la columna “Pablo Úbeda” y había participado en la
lucha en esos lugares.
En mi caso era menos experimentado en el campo militar, tenía
a cargo la responsabilidad de la organización comunitaria y llevaba
la investigación para localizar los restos del comandante Carlos,
era un joven que había finalizado la carrera de administrador de
empresas; con la experiencia de haber está trabajando más de 4 años
organizando cooperativas en esas montañas.
Y ahora el único sobreviviente del grupo de dirigente.

43
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

VII.- Participantes en la Misión y su Trayectoria


(Distribución del trabajo.)

¿Cómo nos organizamos para realizar la misión de localizar los


restos del Comandante Carlos Fonseca A.?
Los miembros del grupo dirigentes teníamos roles diferentes que
cumplir:
Rodolfo Amador Gallegos ¨Hugo¨: Era el responsable de
Seguridad del Grupo.
José Santos Sovalbarro ¨Adían¨: Era responsable Militar de la
Patrulla.
Julio C. Martínez A. ¨Julián¨: era el responsable de dar atención
a la organización comunitaria y llevar el registro de pistas de los sitios
donde podían estar enterrados nuestros hermanos caídos en la lucha.
Sandy Rivas Reed: era una guerrillera muy joven, dulce y la más
agradable compañía que teníamos en la misión, ella apoyaba las
entrevistas y recopilaba información durante el recorrido que hicimos
de Waslala a Bocas de Piedra y de ahí a Dipina. Saydi Rivas era una
del miembro de la llamada “insurrección de los niños en Matagalpa” de
1978 donde fue herida; traslada a Cuba y regresa para para integrarse
a la lucha final.
Alvenis Miranda: apoyaba la investigación, pero su trabajo
específico era la atención y organización de aspectos productivos
en las comunidades. Era profesor responsable del programa del
Centro Familiar Educación Rural-CFER que FUNDE desarrollaba en
Bocaycito donde le integramos de lleno a la lucha.
Del resto de los 12 miembros restantes no recuerdo sus nombres
solo un seudónimo, “Aurelio”; y dos apodos “el Chaparro Eduardo”, El
“El Correo”.
Éramos 17 compañeros para Organizar comunidades y recopilar
información.
Cuando iniciamos la misión se seleccionaron a los 12 compañeros
con más experiencia en lo militar que apoyaran a Rodolfo y José en los
aspectos de seguridad y de protección militar del grupo (vanguardia,
retaguardia, investigación de personas sospechosas, soplones etc.)
Visitábamos las comunidades con prudencia y recelo. En esas
comunidades la población vivía aún las secuelas de la represión de
la guardia; de las presiones y amenazas para lograr su colaboración.

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Julio Cesar Martínez Aguirre

José Sovalbarro “el Comanche Adrián” cubría la vanguardia y


retaguardia del grupo sobre la marcha.
En el transcurso de la misión Rodolfo controlaba las armas que
podían estar en manos de pobladores; verificaba la confiabilidad de
los mismos, buscaba a los guardias que pudieran estar refugiados en
dichos lugares o en caseríos aledaños.

Inicio del proyecto "Carlos Fonseca Amador" de Waslala. En la imagen linnette


Sequeira (q.e.p.d) con un miembro de la CEE cuando se revisaba la posibilidad de
financiamiento del proyecto de desarrollo integral de Waslala

45
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Organización y Ejecución final:


Testimonio de Julio Cesar Martínez Aguirre. (2da Parte)

Investigación y búsqueda de osamenta del Padre de la revolución


Popular Sandinista, Carlos Fonseca Amador.
Mi responsabilidad era dirigir la organización comunitaria y la
investigación para localizar las tumbas en la montaña; llevando
todo anotado y siendo estricto en la organización del grupo y de las
comunidades, cuidando el cumplimiento del tiempo de la misión y la
marcha y dirección de nuestros pasos.
Cuando iniciamos la búsqueda para localizar el sitio donde estaban
los restos del comandante Carlos Fonseca no teníamos pistas
exactas, lo que teníamos claro era nuestros objetivos y acciones, y
teníamos la meta de localizar el lugar antes de que se cumpliera el
tercer aniversario de su caída que sería el siguiente 8 de noviembre;
pero creo que esto sucedió el día 7.
El grupo conformado contaba con una unidad indisoluble, éramos
compañeros, amigos fraternos, sinceros, respetuosos y sobre todo
firmes en organizarnos para ponernos de acuerdo en cada una de las
acciones que realizábamos; con mucha disposición a realizar todas
las visitas que fueran necesarias para organizar las comunidades y
localizar a nuestros hermanos guerrilleros caídos en combate.
Todo nuestro andar era a pie, subiendo y bajando esas montañas,
cruzando ríos, pateando lodo y regocijándonos siempre de nuestro
trabajo.
Rodolfo Amador garantizaba durante la marcha el control de armas
de la población civil, verificaba la confiabilidad de los pobladores.
José Sovalbarro siempre garantizaba la vanguardia y retaguardia
del grupo.
“Julián” trabajaba con Saydi en la atención de los aspectos
logísticos del grupo y organizativos de la investigación del lugar donde
descansaban nuestros hermanos caídos.
Cada día revisamos el trabajo emprendido y su distribución;
discutíamos en detalle los avances y logros, problemas encontrados
en todos los sentidos, inteligencia, militares, o aspectos políticos
organizativos de las comunidades y los avances en la búsqueda que
teníamos.

46
Julio Cesar Martínez Aguirre

Así dejábamos organizado cada lugar que visitábamos, ideando


proyectos de supervivencia en cada lugar y dejábamos bien establecido
los lazos de comunicación con nuestras estructuras en Waslala.
Nuestra misión implicaba conocer las condiciones materiales de la
comunidad, especialmente lo que era la producción para el sustento;
las escuelas que existían y las secuelas de las acciones de “maestras
informantes”. También estaba el proyecto de cerdos que la guardia
había llevado a algunas comunidades pero que tanto maestros como
este proyecto eran utilizados para mantener el control de los pasos de
los guerrilleros por esos territorios.
De esta manera rastreábamos todo, escribíamos todo y dejamos
a cada comunidad una nueva organización; a sus pobladores les
asignábamos tareas a cumplir para las próximas visitas o encuentros
en Waslala para resolver temas prioritarios.
De esta manera nombramos a don Jesús Espinoza Duarte,
Coordinador del Comité Sandinista que había crecido en Dipina. Con
el profesor de la escuela de Dipina; Juan Francisco Blandino, se logró
llegar al punto exacto donde estaba enterrado el comandante Carlos
Fonseca. Don Jesús Duarte me envió esta nota que guardo en original
como un pequeño trofeo.
La he dejado de último la narrativa del proceso final de nuestra
investigación; esta dice el siguiente (Ver en recuadro):

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Dipina, D. P. O de Zelaya, Waslala


Estimado compañero “Julián” la encomienda que los dejó ya está
hecha. Ya hallamos el cadáver del señor Carlos Fonseca Amador
y de otro cadáver en la misma tumba el uno este vestido de verde
olivo y el otro del mismo modo, más usaba el uno con camiseta
negra.
Los dos están con cabezas, lo que no tienen es las manos. Al lado
donde estaba tapado el que vestía de verde olivo, estaba tapado
con tablas. Estos dos cadáveres están sepultados de la siguiente
manera: El uno del saliente al poniente y el otro del norte a sur en
forma de escuadra.
Es cuanto dice el coordinador del Frente Sandinista de Liberación
Nacional.
Jesús Espinoza Duarte Patria Libre o Morir.
P.D. Esta tumba está en esta forma. Y a continuación hay un
dibujo de la posición en que se encontraban los cadáveres

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Julio Cesar Martínez Aguirre

Carta original donde se describe como estaba colocada la osamenta del


Comandante Carlos Fonseca Amador; localizada finalmente en la comunidad
de Dipina.

49
Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

50
Julio Cesar Martínez Aguirre

VIII.- Capilla católica de “Bocas de Piedra”


punto de partida

Para iniciara la investigación nos dirigimos a la capilla de Bocas


de Piedra. Al avanzar sobre la geografía de este sagrado territorio
que recibió la sangre del comandante; atravesamos el rio Zinica y
llegamos a dicha capilla ubicada en un caserío del mismo nombre, un
lugar poco poblado y ubicado cerca del cerro el Guayabo, que está
ubicado al sur de la capilla.
Esta tarea no fue muy fácil. Todo el mundo conocía que el
comandante Carlos había caído ahí, pero no era conocido el lugar
donde la guardia lo había enterrado y ese era nuestro reto.
Acampamos en la capilla, bajamos al zanjón que está al frente para
identificar el sitio exacto donde cayó el comandante y al mismo tiempo,
iniciábamos las entrevistas con todos los pobladores que pudimos
encontrar. Esta fue una dinámica permanente; la tarea era no dejar
de entrevistar a nadie, lo cual permitía “atar cabos” al ir encontrando
elementos coincidentes que nos permitieran llegar a conclusiones y
así reconstruir lo sucedió el día 7 y 8 de noviembre de 1976.
Cerca de ahí vivía Matías López, nuestro principal testigo;
campesino ligado a los quehaceres de la Iglesia como el cuido,
limpieza y mantenimiento de la misma. El preparaba la capilla previa
a la llegada de los sacerdotes capuchinos de Bluefields que llegaban
todos los años en lo que denominaban “Misiones” para celebrar,
misas, bautismos, matrimonios etc.

IX.- Matías López “Testigo clave”


Por información previa, conocimos que don Matías López, además
de ser el principal apoyo de los padres capuchinos en la capilla de
“Bocas de Piedra”, era un testigo clave. Porque él había estado
secuestrado en la misma durante todo el tiempo que la guardia ocupo
el lugar.
Cuando llegamos a “Bocas de Piedra“, de inmediato procedimos a
localizar y detener a Matías López, con el fin de obtener la información
que requeríamos. Le hicimos conocer que nosotros teníamos la
información que él estaba presente el día que murió Carlos Fonseca y
que queríamos que nos contara todo lo sucedido.
Al inicio él nos vio temeroso y tenía mucho miedo de hablar y fue
muy parco con sus primeros aportes, de nuestra parte consideramos
que debíamos tener la mayor paciencia con él; ganarnos su confianza
y continuar nuestro trayecto e investigarlo sobre la marcha.

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Nuestro grupo continuo su trayecto en dirección a Dipina agregando


un nuevo miembro; Matías López, nos acompañó por varios días en
todos los lugares donde buscábamos todos los detalles necesarios de
los pobladores y al mismo tiempo; pretendíamos que Matías perdiera
el miedo inicial que nos tenía y nos diera más información.
La integración de Matías con nosotros no era voluntaria, sino que le
obligamos a marcharse con nosotros a fin de que sus declaraciones
en el trayecto apoyaran nuestra búsqueda conforme la información
que brindaban los pobladores en el trayecto.
El primer día llevamos a Matías amarradas las manos; pero al día
siguiente, a solicitud de Saydi le quitamos este suplicio. Al retomar
la marcha la atención y cuido de don Matías fue responsabilidad de
Saydi; lo cual fue muy interesante y productivo.
Ella (Saydi) con su gran corazón le tomo cariño; estableciéndose
una relación fraterna con él; y después cariñosamente le bautizamos
como “el abuelo” así se facilitaron aportes más claros de los hechos
sucedidos; llegando a conclusiones que teníamos toda la información
necesaria.

X.- El Testigo narra emboscada a Carlos Fonseca

Matías es el testigo de todas las acciones de la guardia; durante


los sucesos se pasó prácticamente detenido y recluido en la capilla,
destaca:
¨Qué desde donde estaba oía la “tirazón” que se inició al final de la
tarde del 7 de noviembre y duro toda la noche.
La narración Literal de Don Matías López; la resumo así:
.- La capilla Católica de ¨Bocas de Piedra¨ fue prácticamente tomada
por la guardia desde inicios de noviembre de 1976.
.- Primero llego un grupo pequeño de guardias; pero estimo que
para el 7 de noviembre se habían acumulado unos 80 guardias.
.-Este contingente fue uno de los más grandes que se había visto
por la zona y que a su modo de entender prácticamente llegaron a
tender una emboscada producto de una denuncia de la presencia
guerrillera en la zona ya que el camino señalado era un viejo camino
de tránsito de la zona de Dipina hacia la zona de Cubalí y las Bayas.
.- Como rehén de la guardia; era obligado a realizar varios trabajos.
.- La guardia rateaba lo bueno que podía encontrar en la capilla.

52
Julio Cesar Martínez Aguirre

Don Matías narra circunstancias de la caída del Comandante, así:


.- “La tarde del 7 de noviembre la guardia se parapeto en diferentes
puntos alrededor de un camino de montaña que pasaba al pie de la
colina donde se encuentra la capilla; era una hondonada que estaba
llena de matorrales.¨
.- “Aunque me mantenían la mayor parte del tiempo dentro de la”
capilla, desde ahí podía ver lo que pasaba afuera”.
.- cuando iniciaron los disparos en la tarde lo hacían en dirección al
matorral que estaba en la parte baja de la capilla; el zanjón
.- Comenzaron cuando ellos oyeron ruidos en la maleza.
.- Había momento que cesaban los disparos; después reiniciaban,
disparando de vez en cuando hacia el matorral;
.- A pesar que nadie les disparaba, notaba a una guardia nerviosa.
.- Dispararon toda la noche a ciegas y como locos y no aprecié que
se establecía combate alguno.
.- Consideró que esta fue una emboscada brutal contra padre de la
Revolución Popular Sandinista.
El testigo sigue narrando:
.- Amanecía, era 8 de noviembre, la guardia penetró al lugar donde
estaban los caídos (2) ya tarde de esa mañana y con mucho temor.
.- Reafirmo que la guardia estaba muy silenciosa y asustada.
.- Que desde la capilla pudo ver cuando sacaban los dos cadáveres
del zanjón por la mañana.
.- Después me llevaron a donde estaban los dos cadáveres y le
obligaron a cortarles las manos.
.- Matías consideró que el hecho de decidir utilizarlo a él para cortar
las manos del comandante y a su acompañante era una muestra de
temor o cobardía, de la Guardia.
Vi llegar un helicóptero la mañana del 8 de noviembre el cual
después partió.
Seguro partió para Managua a presentar su trofeo ante el dictador.
Reseña: que este helicóptero regreso por la tarde; recogieron
alguna gente y luego levanto vuelo nuevamente.

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Que por el sonido del helicóptero que después de elevarse al


parecer bajaba muy cerca se valoró que posiblemente aterrizaba en
la comunidad de Dipina.
Todo lo anterior coincidía con narraciones de otros campesinos en
relación a los tiempos, los sonidos y dirección del helicóptero. Otras
personas simplemente afirmaban aterrizo en Dipina.
Al finalizar nuestra visita a Dipina dejamos a Don Matías en “Bocas
de Piedra”; donde le visitábamos de vez en cuando para saludarle o
tomar un café con él.

XI.- Dipina, lugar de reposo de osamenta del Comandante.

Tras caminar varios días investigando llegamos a Dipina, esta


era una comunidad pequeña con unos 20 ranchitos situada al este
de Waslala y al sur de Bocas de Piedra; en sus alrededores vimos
señales de haberse talado muchos árboles, había casitas a la orilla del
camino con áreas “chapeadas“ cómo preparadas para las siembras
de la época.
Dipina era un lugar remoto donde solo se podía entrar a pie o en
bestias de carga; este lugar a pesar de estar muy alejado de Waslala,
la guardia le daba atención especial; había diseñado una gran plaza
y las casas estaban alrededor; tenía una especie de casa comunal
que la podía ocupar eventualmente para reunir a la población, había
una iglesia, y una escuela con un maestro que atendía multigrado en
la parte sur del poblado un poquito distante del centro, en un lugar
bastante plano. La mayoría de los maestros que laboran en la zona,
eran obligados a conformar una red de informantes.
Los pobladores de Dipina eran gente muy huraña, las presiones que
la guardia ejercía sobre ellos y la población en general les obligaba
a convertirse en colaboradores de jueces de mesta o de la guardia
misma. Esto hacía que esos pobladores fueran retraídos, recelosos
y de pocas palabras; sobre todo ante el nuevo Ejército Popular
Sandinista que representábamos.
Después de varias reuniones y entrevistas determinamos que el
sitio que buscábamos estaba al este del caserío muy cerca de la
escuela. Según informaciones de los lugareños en varios lugares de
la montaña se encontraban sepulturas de personas que la guardia
había enterrado.
Cuando llegamos, una de las personas amable que nos recibió
fue Don Jesús Espinoza Duarte que estaba en la iglesia católica
de Dipina. Gracias a él, pudimos reunir a un grupo de gente en

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Julio Cesar Martínez Aguirre

esa iglesia. Nuestro trabajo en esas comunidades se basaba en


reuniones dinámicas, en que explicábamos los objetivos de nuestra
naciente revolución; se conocían las condiciones de la comunidad,
su producción, las condiciones de la escuela, etc. y los problemas
que podían tener. Luego se elegían autoridades y con los electos se
establecían compromisos de carácter, productivo, sociales o políticos.
Y se hacían reuniones individuales y específicas con cada uno de
los miembros electos; u otras reuniones con los líderes principales
que pudiera tener la comunidad (pastores, delegados de la palabra,
maestros, etc.)
En el caso de Dipina; después de atender los temas organizativos,
ver las prioridades que requería de atención esa comunidad y de
elegir a don Jesús Espinoza Duarte como Coordinador del Comité
Sandinista Local, nos dimos a la tarea de continuar de forma discreta
nuestras investigaciones sobre el lugar donde estaban sepultados los
restos del Comandante Carlos Fonseca.
Por todos los testimonios recabados en todo nuestro recorrido;
todos coincidían y nos llevaron a la conclusión y confirmación que el
día 8 de noviembre un helicóptero había bajado frente a la escuela
de Dipina, y que este medio aéreo, procedía de la zona de “Bocas de
Piedra”.
De todos los testimonios recabados en Dipina, el que nos llevó al
lugar exacto donde estaban enterrados los restos del comandante
fue el del profesor de la escuela Juan Francisco Blandino, quien
expresó:Cuando la guardia bajo en el helicóptero al lado de la
escuela nos asustó mucho, sobre todo porque unos bajaron
rápido y llegaron gritando como locos a la escuela que estaba
dando clases y ordenando de forma imperativa que saliéramos
de inmediato y que nadie volviera a ver atrás.
Fue así que todos los niños salieron de inmediato, en carrera y
horrorizados por los gritos de la guardia.
Afirmó el profesor Francisco que con un gesto de aparente
protección hacia los niños y de garantizar que todos habían salido;
el sí volvió a ver atrás y pudo observar que la guardia sacaba
2 bolsas verdes del helicóptero y se internaban con ella en los
matorrales frente a la escuela.
El profesor días más tarde de este suceso se introdujo en la misma
dirección que habían recorrido la guardia y encontró muy lejos el
tumulto donde se habían enterrado las bolsas; cuando llegábamos
a estas conclusiones; habían pasado si 3 años; cambiado un poco la
fisionomía de la maleza y había que buscar nuevamente el sitio.

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

Después de este testimonio nos organizamos con un grupo selecto


de pobladores para ir a localizar los posibles sitios donde se podían
determinar los tumultos que identificaran la tumba y no lo logramos en
el primer intento.
Por tal razón al retirarnos de Dipina; delegue en don Jesús Duarte
que nos apoyara con el profesor Francisco Blandino en la localización
de la tumba del comandante Carlos Fonseca.
Días después recibía de don Jesús la nota que anteriormente fue
leída.
En el relato inicial, digo que coordinamos con autoridades nacionales
y con la intervención del Cte. Bayardo Arce, quien nos remitió donde
Roberto Sánchez R., con quien programamos la exhumación de los
restos del Padre de la Revolución.

XII.- Exhumación y traslado de la osamenta del Comandante.

Desde que inicié a escribir mis notas a pesar de los años


transcurridos, desde que inicié a escribir mis notas, me transporto en
el tiempo emocionado y recuerdo cuando el Comandante Lumberto
Campbell autorizó la búsqueda y dio seguimiento a nuestros pasos
para el cumplimiento de esta misión; tengo muy claro cuando
iniciamos el viaje a la zona de Zinica; llegando a la Capilla Católica
en la comunidad de “Bocas de Piedra” que tienen o tenían los padres
capuchinos de Bluefields,
Recuerdo que en las entrevistas que hacía con los pobladores
me acompañaba la Compañera Seidy Rivas y Alvenis Miranda,
entrevistas que iniciaron con nuestro principal testigo: don Matías
López; las repetíamos con campesinos encontrados en el trayecto
cuando íbamos hacia Dipina; conversando; asimilando y anotando
esos relatos que detallaba minuciosamente en mis relatos.
Vivo el momento en que llegamos a Dipina, cuando organizamos el
Comité Sandinista y nos reunimos por aparte con los dos principales
hermanos claves que dieron el apoyo final para localizar la tumba del
Comandante Carlos Fonseca; Don Jesús Espinoza Duarte, a quien
se escogió como Coordinador del Comité Sandinista que se había
creado en Dipina y al profesor de la escuela de Dipina; Juan Francisco
Blandino, testigos claves; con ellos fue posible la localización del lugar
donde estaban enterrados los restos del comandante Carlos Fonseca
desde1976.
Hoy, a 45 años de su caída, tengo clara la coordinación con Roberto
Sánchez Ramírez, para traer la osamenta del Comandante Carlos

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Julio Cesar Martínez Aguirre

Fonseca, lo cual se hizo con dos helicópteros; una pequeño para


viajar a la Comunidad de Dipina (en el cual solo alcanzaba el piloto y
2 acompañantes más (estos fuimos Rodolfo Amador y el suscrito) así
viajamos a Dipina para viaja a traer la osamenta del Comandante. . El
helicóptero tenia registro panameño piloteado por un hermano de esa
nacionalidad que estaba al servicio de nuestra naciente revolución
s Sandinista que narre al comienzo de este relato. andinista; era el
apoyo solidario que brindaba el compañero Omar Torrijos, presidente
revolucionario de Panamá.
Para esa fecha el comandante Campbell había salido de Waslala; la
Dirección Nacional había decidido trasladarle a su tierra, Blufields, por
eso, una vez que regresamos de Dipina, se hicieron las ceremonias
y guardia de honor que teníamos previstas y procedimos a entregar
la osamenta a Irvin Dávila quien había sustituido al Comandante
Campbell como jefe militar; él, a su vez lo entregaba al comandante
Guerrillero David Blanco. Ellos partieron a Matagalpa y Managua y los
que participamos en la misión quedamos en Waslala orgullosos del
deber cumplido y continuando nuestro trabajo con el entusiasmo de
siempre.
La narrativa anterior creo que les ha familiarizado con la historia final,
con la zona donde ocurrieron los hechos y los actores de la misión.
Ahora continúo el relato con más detalle de elementos sensibles que
ocurrieron.

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Exhumación del Comandante Carlos Fonseca Amador

ANEXOS

CONMEMORANDO EL 35 ANIVERSARIO
EN BOCAS DE PIEDRA
(Sitio histórico donde cayera el Cte. Carlos Fonseca)

En 2011; 32 años después de la exhumación del Comandante


Carlos Fonseca regresé a la zona de Waslala y en esa ocasión fui
invitado por la secretaria Política de la estructura política del FSLN de
Waslala a ser el orador principal del acto de celebración en Bocas de
Piedra el día 8 de noviembre del 2011, donde se conmemoraría el 35
aniversario de la caída del comandante Carlos Fonseca; ALBANISA
facilito el transporte y se delegó a 5 compañeros de la Juventud
Sandinista que nos acompañara.
Participar en este evento fue muy especial y emocionante; hice un
breve testimonio de la exhumación e increíblemente hubo personas
mayores que se me acercaron porque me recordaban con alegría y se
alegraron de esos viejos tiempos.
Encontré a Viviano Martínez, Martínez quien es sobrino de don Jesús
Espinoza Duarte, el que me envió la nota de localización en 1979, y
que conocía bien de la historia de la exhumación del comandante en
1979. No recuerdo si me dijo que don Jesús estaba vivo; pero si me
informo que le profesor Juan Francisco Blandino estaba vivo pero que
no había podido llegar al acto.
Este señor orgullosamente me presento a su hija Migdalia Martínez
quien en ese momento era la responsable de la Juventud Sandinista
de Dipina.
Esta historia no tiene derechos de autor, pero es recomendable
el respeto del contenido de la misma que representa una gran
recopilación de hechos verdaderos.
Muchas Gracias
Viva el Comandante Carlos Fonseca.
Julio Cesar Martínez Aguirre Reparto Lomas de Monserrat
Militante del UVE. “María Venancia Aguilar”
Combatiente Histórico
Vice Coordinador del Círculo Literario del Adulto Mayor- CLAM

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