Lazorraylasuvas Carroll
Lazorraylasuvas Carroll
LA ZORRA
Y LAS UVAS
Los mundos cuánticos
y la realidad oculta del universo
Traducción de
MARC FIGUERAS
Pues no. No solo esta búsqueda para dar sentido a la mecánica cuántica
no se considera una especialidad prestigiosa dentro del campo de la física
actual, sino que en muchos ambientes se considera como algo apenas respe-
table o incluso se denigra directamente. La mayoría de los departamentos de
física no tienen a nadie trabajando en el problema, y a aquellos que deciden
hacerlo se les mira con recelo (no hace mucho, mientras redactaba una solici-
tud para una beca, se me aconsejó concentrarme en mi trabajo en gravitación
y cosmología, un campo que se considera «legítimo», y no decir nada de mis
esfuerzos en el campo de la fundamentación de la mecánica cuántica, que me
harían parecer menos serio). Se han logrado avances importantes a lo largo
de estos últimos noventa años, pero por lo general han sido debidos a perso-
nas testarudas que pensaron que estos problemas eran cruciales, por mucho
que sus colegas los miraran con suspicacia, o a jóvenes estudiantes que no
supieron hacerlo mejor y luego abandonaron por completo este campo.
En una fábula de Esopo, una zorra ve un apetitoso racimo de uvas y se
abalanza para agarrarlo, pero no puede saltar lo bastante alto; fruto de la
desesperación, abandona el intento y afirma que seguramente esas uvas es-
taban muy verdes y que, en realidad no las quería. La zorra representa a
«los físicos» y las uvas son «la comprensión de la mecánica cuántica». Mu-
chos investigadores han decidido que, en el fondo, comprender cómo fun-
ciona la naturaleza no es tan importante; lo que de verdad importa es la
capacidad de hacer predicciones particulares.
Los científicos están formados para dar valor a los resultados tangi-
bles, ya sean fascinantes hallazgos experimentales o modelos teóricos cuan-
titativos. Puede resultar difícil vender la idea de trabajar para comprender
una teoría de la que ya disponemos, un esfuerzo que, además, puede que no
lleve a ninguna nueva tecnología ni predicción. Esta tensión queda ilustra-
da en la serie de televisión The Wire, donde un grupo de esforzados detec-
tives se afana con meticulosidad durante meses para acumular pruebas y
así respaldar una acusación contra una red de narcotraficantes; sin embar-
go, sus superiores no tienen paciencia para tanto detallismo, solo quieren
ver las drogas encima de la mesa para la próxima rueda de prensa y ani-
man a la policía para que actúe y haga unas cuantas detenciones espectacu-
lares. Los organismos financiadores y los comités de contratación son como
estos superiores. En un mundo en que todos los incentivos nos empujan a
resultados concretos y cuantificables, es fácil apartar del camino las preo-
cupaciones más generalistas y menos apremiantes para dejar paso a los que
se lanzan al siguiente objetivo inmediato.
Primera parte
ESPELUZNANTE
Segunda parte
BIFURCACIONES
Tercera parte
ESPACIO-TIEMPO
Agradecimientos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 299
Notas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 301
Lecturas adicionales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 305
Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 307
Índice alfabético . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 311