Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 3

Propiedades de los compuestos iónicos

Cuando hablamos de propiedades de un compuesto, principalmente nos referimos a:


estado de agregación a temperatura ambiente (puntos de fusión y de ebullición),
conductividad eléctrica, dureza y solubilidad en disolventes polares y apolares. Varias
de estas propiedades dependen de la fuerza del enlace químico implicado. En el caso
del enlace iónico, los iones se hallan unidos fuertemente entre sí, porque las
atracciones electrostáticas entre iones de signo opuesto, son intensas. Así, para
fundir o evaporar un compuesto iónico, habrá que aportar una gran cantidad de
energía, porque será necesario romper las interacciones catión-anión. Esto hace que
se requieran temperaturas elevadas.
De forma general, las propiedades de los compuestos iónicos son:

• Sólidos a temperatura ambiente. Las fuerzas que mantienen unidos los iones
son fuertes, y por este motivo a temperatura ambiente el compuesto se halla en
estado sólido.
• Forman redes cristalinas altamente ordenadas. Los aniones y cationes tienen
posiciones definidas en el espacio, en función del tipo de red cristalina.
• Puntos de fusión y ebullición elevados. Debido a que, como hemos dicho, las
fuerzas electrostáticas que mantienen unidos los iones son fuertes, es costoso
separarlos. Por este motivo, hay que aportar elevadas temperaturas para
fundirlos y para evaporarlos.
• Elevada dureza. También se debe a la fortaleza del enlace, ya que para rayar la
superficie del compuesto hay que romper enlaces de los iones superficiales. Sin
embargo, podrán ser rayados por compuestos de mayor dureza, como por
ejemplo el diamante (el compuesto de mayor dureza, con un 10 en la escala de
Mohs).
• Fragilidad. A pesar de su dureza, son frágiles frente a los golpes. ¿Por qué?
Porque un impacto puede hacer resbalar unas capas sobre otras y que, de
pronto, se vean enfrentados entre sí iones del mismo signo. La repulsión
electrostática entre iones del mismo signo fragmenta el cristal.
• No conductores de la corriente en estado sólido. En estado sólido los iones
están colocados en posiciones fijas de la red y no presentan movilidad alguna.
La falta de movilidad eléctrica hace que no sean conductores.
• Conductores de la corriente eléctrica en estado fundido o disuelto. Puesto
que en estado fundido o disuelto los iones ya sí presentan movilidad, a
diferencia de lo que ocurre en estado sólido, en estos estados pueden
conducir la corriente.
• Insolubles en disolventes apolares.
• Solubles en disolventes polares. Son solubles en disolventes polares como el
amoníaco líquido o el agua, pues las moléculas de agua son capaces de rodear
los iones y atraerlos electrostáticamente hasta separarlos de la red iónica,
fenómeno que se conoce como solvatación. Recordemos que la molécula de
agua es un dipolo. Cuanto más estable sea la red, es decir, mayor sea su energía
reticular, más difícil será disolverlo porque ser requerirá mayor energía. Por
ello, aunque en general digamos que los compuestos iónicos son solubles en
agua, algunos de ellos no lo son
Propiedades de los compuestos covalentes
Los compuestos covalentes son un grupo muy amplio, y en ellos hallamos 2 grupos de
compuestos bien diferenciados, que presentan, además, propiedades prácticamente
opuestas: las sustancias covalentes moleculares, gaseosas (F2, N2, O2…), líquidas (agua,
Br2…) y sólidas (glucosa, I2…) y las redes covalentes o macromoléculas, el grafito y el
diamante, la sílice (SiO2), el carburundum (SiC), siempre sólidas a temperatura
ambiente.

1. Las sustancias moleculares se componen de moléculas individuales, entre las cuales


se establecen fuerzas intermoleculares, es decir, fuerzas de carácter débil, muchísimo
más débiles que los propios enlaces covalentes intramoleculares.

El hecho de que estas fuerzas intermoleculares sean débiles hace que, en general, las
sustancias moleculares covalentes sean gaseosas a temperatura ambiente, porque hay
que aportar poca energía para separar unas moléculas de otras y, por tanto, para
fundirlas y evaporarlas. No obstante, existen factores que pueden hacer que estas
fuerzas intermoleculares aumenten y que, por tanto, algunas sustancias covalentes
moleculares sean sólidas o líquidas a temperatura ambiente, a pesar de estar formadas
por moléculas independientes. Estos factores son, esencialmente, dos: la masa
molecular y la polaridad global de la molécula.

• Masa molecular. A mayor masa molecular, mayores son las fuerzas


intermoleculares, aunque se trate de moléculas muy semejantes en cuanto a su
estructura. Por ejemplo, en el grupo de los halógenos, el flúor y el cloro son
gases, el bromo es líquido y el yodo, sólido.
• Polaridad molecular. Si las moléculas covalentes son polares, se unirán las unas
a las otras más fuertemente que si son apolares. Esto se debe a que
establecerán entre ellas fuerzas electrostáticas, y por tanto será más difícil
separarlas y habrá que aportar más energía (mayores temperaturas de fusión y
de ebullición).

2. Las redes covalentes son sustancias macromoleculares, formadas por un número


muy elevado de átomos iguales o distintos, unidos entre sí por enlaces covalentes, es
decir, enlaces muy fuertes. En la naturaleza existen diversas redes covalentes, de las
cuales consideraremos dos formas alotrópicas del carbono (grafito y diamante), la
sílice, óxido de silicio (SiO2), el carburundum, carburo de silicio (SiC). Puesto que son
redes con gran cantidad de átomos unidos muy fuertemente, son sólidos a temperatura
ambiente y, además, sus puntos de fusión y de ebullición son altísimos, porque para
fundirlos es necesario romper la red cristalina de enlaces covalentes.
Además son compuestos en general muy duros (el diamante es el compuesto más duro
que se conoce, con una dureza de 10 en la escala de Mohs) a excepción del grafito,
que tiene una dureza de 1-2 por su peculiar estructura en capas. Por el mismo motivo,
su estructura en capas, el grafito es el único capaz de conducir la corriente eléctrica.
Todos ellos son insolubles en prácticamente cualquier disolvente.
Propiedades de los compuestos metálicos
Las principales propiedades de los metales son las que enumeramos a continuación:
1. Forman redes cristalinas metálicas, en las cuales los cationes se hallan
perfectamente ordenados en el espacio. Los empaquetamientos que presentan,
esencialmente, son 3:

o Estructura cúbica centrada en las caras


o Estructura cúbica centrada en el cuerpo
o Estructura hexagonal

Aunque se trate de empaquetamientos compactos, motivo por el cual los metales


suelen presentar dureza, el empaquetamiento cúbico centrado en el cuerpo es el
menos compacto de los tres. Esto hace que los metales que lo presentan sean más
blandos comparativamente que los otros metales, por ejemplo, el sodio y el litio son tan
blandos que se pueden cortar con un cuchillo.
2. Presentan una elevada densidad (masa por unidad de volumen) debido,
precisamente, al empaquetamiento metálico de los cationes.
3. Elevadas conductividades térmica y eléctrica, debido a la gran movilidad de los
electrones de valencia, que hemos visto ya en el modelo del gas de electrones y también
en la teoría de bandas.
4. Gran deformabilidad, porque las capas de cationes se pueden desplazar entre sí sin
alterar la estructura. Por ello se pueden estirar en hilos, como el cobre (propiedad que
recibe el nombre de ductilidad) y también en láminas, como el aluminio (maleabilidad).

5. En general, altos puntos de fusión y ebullición, lo cual implica que hace falta una
gran cantidad de energía para separar los átomos que forman el retículo cristalino. No
obstante, sus puntos de fusión varían notablemente dentro de un intervalo muy
amplio: el mercurio es líquido a temperatura ambiente, el galio funde a 29ºC y el
wolframio a 3380ºC.
6. Brillo metálico. La mayoría de los metales pulidos no absorbe ninguna radiación
luminosa incidente, sino que la refleja en su totalidad. De ahí que los vemos brillar con
un brillo plateado en su mayoría.
7. Emisión de electrones. Ya vimos en la explicación del efecto fotoeléctrico que los
metales pueden emitir electrones al ser irradiados con una radiación de la frecuencia
adecuada. Del mismo modo, esto también puede suceder por calor, lo que recibe el
nombre de efecto termoiónico.

También podría gustarte