por:

Rvdo. Raymond Woodward

Fredericton, NB, CANADA
Traducido por: Denis H. Gonzales V.
 Contenido
Página
1. El hábito del discipulado 2

2. El hábito del estudio bíblico 5

3. El hábito de la oración 10

4. El hábito de diezmar 14

5. El hábito del compañerismo 17

6. El hábito de la santidad 19

7. El hábito del evangelismo 23

1
Entendiendo el discipulado

1. Los creyentes maduros son llamados discípulos.

2. Yo no puedo ser discípulo sin ser disciplinado.

El bienestar físico no es automático – tampoco lo es el espiritual. ¡Ambos requieren trabajo arduo!

3. La marca de un discípulo es “llevar mi cruz” (Lucas 14:27).

4. Llevar mi cruz significa “negarme a mis propios deseos” para poder poner a Dios primero en mi
vida cada día (Lucas 9:23).

Cinco hábitos de uns discípulo

Para llegar a ser discípulo, debes desarrollar los hábitos de un discípulo.

“...puesto que han desechado al viejo hombre con sus malos hábitos, y se han vestido del nuevo
hombre, el cual se va renovando hacia un verdadero conocimiento, conforme a la imagen de Aquél que
lo creó” (Colosenses 3:9-10 - NBLH).

1. Estudio bíblico (Juan 8:31-32).

2. Oración (Juan 15:7-8).

3. Diezmo (Lucas 14:33; Deuteronomio 14:23).

4. Compañerismo (Juan 13:34-35).

5. Santidad (2 Corintios 6:17 - 7:1).

¿Qué es un hábito? (Diccionario Webster)

“Una continua y, a menudo inconsciente, inclinación a hacer una cierta actividad, adquirida a
través de repetición frecuente. Una disposición establecida del carácter. Una práctica de
costumbre” (Diccionario Webster).

Para obtener beneficio de un hábito, debes abrazarlo voluntariamente - ¡no puede serte
impuesto!

La cruz del discípulo

“Lo que pertenecen a Crito Jesús han clavado las pasione y deseos de su naturaleza
pecaminosa a Su cruz y los han cucificado allí” (Gálatas 5:24).

2
“Si quieres ser mi seguidor debe amarme más que su propia vida. Y no puede ser mi discípulo si
no lleva su propia cruz y me sigue” (Lucas 14:26-27).

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“Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y
glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mateo 5:16).

“En el pasado presentasteis vuestros cuerpos para el servicio del vicio y… los propósitos del
mal. Así que ahora os entregáis al servicio de la justicia – por el propósito de llegar a ser
verdaderamente buenos” (Romanos 6:19).

Si el pecado se desarrolla en mi vida a través de la simple repetición de malos hábitos, ¡la

justicia se desarrollará en mi vida a través de la simple repetición de buenos hábitos!

Cómo mantener buenos hábitos.

1. Deseo.
Si comienzas con poco entusiasmo, nunca tendrás éxito. Ya sea que pienses que puedes o
pienses que no puedes, ¡tienes razón!

2. Decisión.
No dejes las cosas para después. ¡Es mucho más fácil romper un mal hábito hoy que más
tarde! “Mañana” nunca viene.

“Si tú esperas las condiciones perfectas, nunca lograrás hacer nada” (Eclesiastés 11:4).

3. Declaración.
¡El poder de una promesa es asombroso, particularmente si tienes un amigo que te tenga
responsable de guardarla!

3
 “Consideremos y prestemos cuidado atento y continuo al observar los unos a los otros,
estudiando cómo podamos movernos y estimularnos unos a otros para… obras de ayuda y
actividades nobles” (Hebreos 10:24).
“Dos son mejores que uno, porque juntos pueden trabajar más eficazmente. Si uno de ellos
cae, el otro puede ayudarle a levantarse” (Eclesiastés 4:9-10).

4. Determinación.

Nunca te balances por la tentación del diablo de regresar a tus viejos hábitos “solo esta vez”.
El hecho de rendirte a la tentación debilita tu voluntad y refuerza tu falta de dominio propio.
Recuerda que toma tres semanas estar cómodo con un nuevo hábito (haciéndolo a diario) y
otras tres semanas para que se convierta en una parte permanente de tu vida.

5. Dependencia en Dios.

Depende del poder de Dios para ayudarte a establecer tus nuevos hábitos. Satanás hará
todo lo que pueda para tentarte, hacerte deslizar, o desanimarte. ¡Ora por la ayuda de Dios!

“Porque no nos ha dado Dios espíritu de temor y timidez, sino de poder, amor y dominio
propio” (2 Timoteo 1:7).

“Porque es Dios quien hace la obra en vosotros dándoos la voluntad y el poder de lograr Su
propósito” (Filipenses 2:13).

4
 !

OI

SEIS MANERAS DE APROVECHAR TU BIBLIA

“Toda la Biblia fue dada por inspiración de Dios y es útil para enseñarnos lo que es verdadero y
para hacernos dar cuenta lo que está mal en nuestras vidas; nos afirma y nos ayuda a hacer lo
que es correcto. Es la manera de Dios para hacernos estar bien preparados en cada punto,
enteramente capacitados para hacer bien a todos” (2 Timoteo 3:16-17).

Cómo oír la palabra de Dios

“La fe es por el oír… la palabra de Dios” (Romanos 10:17).

El problema es que olvidamos el 95% de lo que hemos oído las 72 horas anteriores. ¡Tenemos
que trabajar en ello!

1. Trata con actitudes que evitan que oigas de Dios. (Mira la Parábola del Sembrador en Lucas
8:4-15.)

“Considera cuidadosamente cómo oyes” (Lucas 8:18).

• Una mente cerrada: ¿Puede el miedo, el orgullo o la amargura prevenirme de oír a

Dios hablar?
• Una mente superficial: ¿Solo estoy escuchando por casualidad, o realmente estoy en
una seria búsqueda de oír a Dios hablar?
• Una mente preocupada: ¿Estoy demasiado ocupado, falto de atención o más
relacionado con otras cosas que concentrado con lo que Dios tiene que decir?
• Una mente preparada: ¡Yo realmente quiero oír de Dios!

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2. Toma nota de lo que oyes.

“Debemos atender más diligentemente a lo que hemos oído, para que no nos deslicemos”
(Hebreos 2:1).

3. Actúa según lo que oyes.

“No sólo oigas la palabra, y te engañes a ti mismo. Haz lo que dice” (Santiago 1:22).

“Quien …no sólo oye y lo olvida, sino que lo pone en práctica – esa persona será bendecida en
lo que haga” (Santiago 1:25).

4. ¡Lee la palabra de Dios diariamente!

“(La Bíblia) será tu compañía constante. Deberás leer sobre esto cada dia de tu vida para
aprender a respetar la Palabra de Dios obedeciendo Sus mandamientos” (Deuteronomio 17:19).

Si leo aproximadamente unos 15 minutos al dia, puedo leer la Bíblia una vez al año.

Sugerencias:
• Lee la Biblia sistemáticamente, no al azar.
• Usa una Biblia sin notas para que Dios pueda hablarte.
• Lee diferentes traducciones para entender mejor.
• Lee la Biblia en voz alta (sin gritar) para enfocarte mejor.
• Subraya o resalta versos clave para un mayor énfasis.
• Escoge un plan de lectura y permanece en él.

Usa la versión Reina Valera 1960 por su exactitud, la Nueva Traducción Viviente por su facilidad
de lectura, y ocasionalmente otras versiones para una mayor claridad.

Cómo estudiar la palabra de Dios

“Aceptaron el mensaje ansiosamente y estudiaron las Escrituras cada día” (Hechos 17:11).

“Sé un buen obrero... que conoce lo que dice Su Palabra y lo que significa” (2 Timoteo 2:15).

La diferencia entre leer y estudiar la Biblia es que tú tomas notas cuando la estudias.
Los dos secretos para un estudio bíblico efectivo son:

1) Compara otros versos de la Escritura en el mismo sujeto, y

2) Usar ayudas de estudio adicionales para resolver preguntas de trasfondo.

Estudiar la Biblia – ayuda a encontrar otras Escrituras en el mismo sujeto

Biblia en Paralelo – compara dos o más traducciones de la Biblia,
Biblia Aplicada – relaciona las Escrituras a la vida moderna
Diccionario Bíblico – da una información detallada de trasfondo
Concordancia – ayuda a encontrar ciertas palabras en la Biblia
Comentario – ofrece material inspiracional de trasfondo

Asegúrate de que tu Biblia te hable primero, antes de referirte a estas fuentes.

6
Como memorizar la palabra de Dios

“Guarda mis palabras como tu posesión más preciada. Escríbelas y guárdalas en lo más
profundo de tu corazón” (Proverbios 7:2-3).

1. Escoge un verso que te hable.

2. Di la referencia antes y después del verso.
3. Lee el verso varias veces en voz alta, o grábalo.
4. Desglosa el verso en frases naturales.
5. Enfatiza palabras clave cuando estés citando el verso.
6. Escribe el verso y borra una palabra a la vez.
7. Escribe el verso en una tarjeta.
8. Lleva contigo algunas tarjetas todo el tiempo para revisarlas.
9. Pon a la vista tus versos en lugares prominentes.
10. Memoriza siempre el versículo perfectamente.
11. Ponle música al versículo – escribe una canción.
12. Consigue un compañero para que puedan controlarse mutuamente.

Beneficios de memorizar la Escritura:

1. Esto me ayuda a resistir las tentaciones:

“He guardado tu palabra en mi corazón para no pecar contra ti” (Salmos 119:11).

2. Esto me ayuda a tomar decisiones sabias.

“Tu Palabra es una lámpara que me guia y una luz para mi camino” (Salmos 119:105).

3. Esto me fortalece cuando estoy estresado.

“... Tus promesas hacia mi son mi esperanza. Me da fuerzas en todos mis problemas; They
give me strength in all my troubles; como me refrescan y me vivifican” (Salmos 119:49).

4. Esto me consuela cuando estoy triste.

“Tus palabras son las que me sustentan ...Me dan alegria para mi triste corazón y me
deleitan” (Jeremias 15:16).

5. Esto me ayuda a testificarle a los no creyentes.

“Estar siempre preparado para dar respuesta a cualquiera que te pregunte sobre la
esperanza que tienes” (1 Pedro 3:15).

“Tus enseñanzas valen más que mil piezas de oro o plata para mi” (Salmos 119:72).

La clave para memorizar la Escritura (o cualquier otra cosa) es revisarla. Todos elejimos
recordar las cosas que son importantes para nosotros.

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Como Meditar en la Palabra de Dios

“Los que siempre meditan en Sus leyes... son como árboles junto a la rivera de un rio que da su
fruto... ellos nunca se marchitarán y ten todo lo que hagan prosperarán” (Salmos 1:2-3).

La meditación es pensamiento enfocado sobre un verso bíblico para descubrir como puedo
aplicar esta verdad en mi vida.

1. ¡Dibújalo! Imagina la escena en tu mente.

2. ¡Pronúncialo! Di el verso en voz alta, enfatizando cada vez en una palabra distinta.
3. ¡Parafraséalo! Reescribe el verso con tus propias palabras.
4. ¡Personalízalo! Reemplaza los pronombres o las personas en el verso por tu nombre.
5. ¡Óralo! Convierte el verso en una oración y díselo a Dios.
6. ¡Pruébalo! Formula preguntas como estas: ¿Es esto…

…un pecado que confesar?

…una promesa que clamar?
…una actitud que cambiar?
…un mandamiento que guardar?
…un ejemplo que seguir?
…una oración que orar?
…un error que evitar?
…una verdad que creer?
…una bendición especial por la que agradecer a Dios?

Beneficios de meditar en la Escritura:

1. Es la clave para llegar a ser como Cristo.

“Tu vida es moldeada por tus pensamientos” (Proverbios 4:23).

“Transfórmate por la renovación de tu entendimiento” (Romanos 12:2).

“Nosotros… contemplando la gloria del Señor, somos transformados a Su imagen” (2

Corintios 3:18).

2. Es la clave para la oración contestada.

“Si vives tu vida en Mí, y mis palabras viven en tu corazón, puedes pedir todo lo que
quieras, y te será hecho” (Juan 15:7).

3. Es la clave para una vida exitosa.

“Medita en (la palabra) de día y de noche, para que tengas cuidado de todo lo que en él está
escrito. Entonces serás próspero y tendrás éxito” (Josué 1:8).

La preocupación es simplemente meditación negativa. Si tú te puedes preocupar, ya sabes

cómo meditar.

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Cómo aplicar la palabra de Dios

“No nos engañemos a nostros mismos solo escuchando la palabra. En vez, pongámosla en
práctica” (Santiago 1:22).

“Cualquiera que practica y enseña estos mandamientos, será llamado grande en el reino de los
cielos” (Mateo 5:19).

EL PUENTE DE APLICACIÓN

Entonces Principios Ahora

Eternos

Interpretación Implicación Personalización

Preguntas para hacer:

1. ¿Qué significaba esto para los oyentes originales?

2. ¿Cuál es el principio eterno debajo?
3. ¿Dónde o cómo podría aplicar ese principio?

Un ejemplo:

Escritura: 1 Corintios 8:1-13

Interpretación: El apóstol Pablo requirió que los cristianos corintios no comieran carne
ofrecida a los ídolos para no ofender a los creyentes más débiles que
acababan de ser librados de la adoración a los ídolos, aun cuando ellos
sabían que los ídolos no tienen poder.

Implicación: No hagas nada que ofenda a tu hermano cristiano, aun cuando la actividad no
sea pecado en sí misma.

Personalización: No voy a frecuentar un negocio donde se sirvan bebidas alcohólicas, aunque

beber alcohol no sea una tentación para mí, porque mi presencia podría
influenciar a un miembro más débil de nuestra iglesia a ir allí y caer en
pecado.

“Ahora que conocen estas cosas – háganlas. Es es la senda hacia la bendición” (Juan 13:17).

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“Basa tu felicidad en tu esperanza en Cristo. Cuando las pruebas vienen, sopórtalas
pacientemente; mantén firme el hábito de la oración” (Romanos 12:12).

Dios puede comunicarse con nosotros en muchas maneras, pero nosotros podemos
comunicarnos con Él en una manera – por medio de la oración. ¡Es por eso que es vital que
establezcamos la oración como un hábito diario!

1. Ten un tiempo específico para la oración.

Motivos para considerar un tiempo de oración matutino:

El ejemplo de muchos personajes bíblicos (Abraham, Job, Jacob, Moisés, Ana, Ezequías,
David, Daniel, y Jesús).

Es lógico comenzar el día con oración. El mejor tiempo para afinar tu instrumento es antes de
tocar el concierto, no después.

Demuestra que encontrarte con Dios es tu primera prioridad. Tú le das a Él la primera parte
de día.

Es más probable que estés más descansado y tu mente está menos nublada a primera hora
de la mañana.

2. Ten un lugar específico para orar.

“Jesús salió de la ciudad y se fue, como lo hacía habitualmente, al monte de los olivos… a
orar” (Lucas 22:39).

“Muy temprano en la mañana, mientras aún era oscuro, Jesús se levantó, salió de la casa y
se fue a un lugar solitario para orar” (Marcos 1:35).

3. Ten una rutina específica para la oración.

• Una Biblia
Usa una traducción entendible.
Usa una Biblia con tamaño de letra legible.
Usa una Biblia sin notas de estudio que te distraigan.

• Papel y lápiz
Escribe cualquier cosa que el Señor te hable.
Mantén una lista personal de oración.
Escribe pensamientos para un estudio bíblico más profundo más adelante.

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 • Otras ayudas

Ora en un lugar donde tendrás menos distracción.

Pon música suave de fondo.
Ten pañuelos cerca, por si tienes tendencia a llorar cuando oras.

Ten cerca una lista de cosas por hacer, si eres una personalidad de “tipo A” que no
puede dejar de pensar en el día por delante (cuando una tarea viene a la mente, no
la hagas ahora – escribe un breve recordatorio para después, para que no te quedes
pensando en ello, ¡y vuelve a la oración!).

Usa cualquier cosa que evite que te distraigas.

4. Jesús nos enseñó a tener la actitud correcta en la oración (Mateo 6:5-8).

Sé real
“Cuando ores, no seas como los hipócritas, porque a ellos les encanta orar de pie en las
sinagogas y en las esquinas para ser vistos de los hombres” (Mateo 6:5).

Relájate
“Pero cuando ores ve a tu habitación, cierra la puerta y ora a tu Padre que es invisible.
Entonces tu Padre, que ve lo que se hace en lo secreto, te recompensará” (Mateo 6:6).

Sé revelador
“No recites la misma oración una y otra vez como hacen los paganos, que piensan que sus
oraciones serán contestadas solo por repetirlas una y otra vez. Recuerda, tu Padre sabe qué
cosas necesitas antes que tú le pidas” (Mateo 6:7-8)

5. Jesús nos enseñó a tener el acercamiento correcto en la oración (Mateo 6:9-15).

“Así es, entonces, como debes orar” (Mateo 6:9).

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 SEIS MANERAS DE AGARRARSE DE LA ORACIÓN

“No nos cansemos de hacer lo que es correcto, porque después de un tiempo cosecharemos la
bendición si no nos desanimamos ni nos rendimos” (Gálatas 6:9).

REGLA #1: ¡Nunca juzgues tu tiempo de oración por tus sentimientos!

REGLA #2: ¡Si te pierdes un día, no te rindas!

1. Alabanza: Yo expreso mi amor a Dios.

“Nuestro Padre celestial, santificado se Tu nombre” (Mateo 6:9).

Dos tipos de alabanza:

Adoración: alabar a Dios por quién Él es.

Acción de gracias: alabar a Dios por lo que Él ha hecho.

“Entra por sus puertas con acción de gracias, por sus atrios con alabanza. Sé agradecido a Él, y
bendice Su nombre” (Salmo 100:4).
A. Recuérdate a ti mismo las promesas halladas en los varios significados del nombre de
Dios, y afírmalos mientras oras.
B. Recuérdate a ti mismo todas las bendiciones que Dios te ha dado, y expresa tu gratitud
por ellas mientras oras.

2. Propósito: Me entrego a la voluntad de Dios para mi vida.

“Venga Tu reino, hágase Tu voluntad, en la tierra como en el cielo” (Mateo 6:10).

Orar que se haga la voluntad de Dios...

• En mi familia
• En mi iglesia
• En mi trabajo
• En mi ministerio
• En mi nación
• En mi futuro
• En mi barrio
• En mi ciudad

“Ofrécete a ti mismo como sacrificio vivo a Dios, dedicado a Su servicio y agradándole a Él. Esta
es la verdadera adoración que deberías ofrecer” (Romanos 12:2).

3. Provisión: Le pido a Dios que supla mis necesidades.

“Danos hoy nuestro pan diario” (Mateo 6:11).

¿Por qué necesidades puedo orar? ¡Todas!

“Dios suplirá todas tus necesidades de Sus riquezas en gloria debido a lo que Jesucristo ha
hecho por nosotros” (Filipenses 4:19).

12
“No tienes… porque no pides a Dios” (Santiago 4:2).

La clave para una oración exitosa: ¡Sé específico! Escribe tu petición, junto con una
promesa que estás reclamando de la Biblia, ¡y espera la respuesta!

“No te preocupes por nada, sino que en todo, con oración y peticiones con acción de gracias,
presenta tus peticiones a Dios” (Filipenses 4:6).

4. Perdón: Yo le pido a Dios que perdone mis pecados.

“Y perdónanos nuestra deudas” (Mateo 6:12)

Cuatro pasos para el perdón:

A. Pedirle a Dios que revele mi pecado.

“Examíname, Oh Dios, y conoce mi mente; pruébame, y descubre mis pensamientos.
Halla si hay maldad en mí” (Salmo 139:23-24).
B. Confiesa cada pecado específicamente.
“Nunca tendrás éxito en la vida si tratas de esconder tus pecados. Confiésalos y déjalos;
entonces Dios te mostrará misericordia” (Proverbios 28:13).
C. Haz restitución a los demás cuando sea necesario.
“Cuando te acuerdas que tu hermano tiene algo contra ti… ve y haz las paces con él,
entonces vuelve y ofrece tu regalo a Dios” (Mateo 5:23-24).
D. Por fe, acepta el perdón de Dios.
“Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y
purificarnos de toda maldad” (1 Juan 1:9).

5. Gente: Yo oro por los demás.

“...como también nosotros perdonamos a nuestros deudores” (Mateo 6:12).

Haz una lista de gente por la que quieres orar. Puedes orar por diferentes grupos de personas
en distintos días de la semana (misioneros, familia, amigos inconversos, liderazgo de la iglesia,
etc.).

“Ora mucho por los demás; ora por la misericordia de Dios sobre ellos; da gracias por todo lo
que Él va a hacer por ellos” (1 Timoteo 2:1).

6. Protección: Pido por protección espiritual.

“Y no nos metas en tentación mas líbranos del malo” (Mateo 6:13).

Todos los creyentes enfrentan batallas espirituales. Satanás quiere vencerte por medio de la
tentación y el temor, pero al orar por protección tendrás el poder de enfrentar cada situación.

“El Espíritu que está en ti es más poderoso que el espíritu que está en los que pertenecen al
mundo” (1 Juan 4:4).

7. Alabanza: ¡Termino mi oración de la misma manera que la empecé!

“Porque Tuyo es el reino y el poder y la gloria por siempre” (Mateo 6:13).

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“El primer día de cada semana, separen algo de lo que han ganado y denlo como ofrenda. La
cantidad depende de cuánto el Señor les ha ayudado a ganar” (1 Corintios 16:2).

¡El hecho de dar revela mi madurez espiritual!

“Así como abundan en todo lo demás… en fe, palabra, conocimiento, en completa solicitud…
abunden también en la gracia de dar” (2 Corintios 8:7).

¿Sabías que…?

…la Biblia habla más acerca de dar que incluso del cielo o el infierno?
…más de la mitad de las parábolas que Jesús contó tienen que ver con el tema del dinero?
…hay más promesas en la Biblia relacionadas con dar que con cualquier otro tema?
…el dar es muy importante para Dios – y para tu vida espiritual?

¡Tú puedes dar sin amar, pero no puedes amar sin dar!

Por qué quiere Dios que dé (7 Beneficios)

1. Dar me hace más como el Señor.

“Tanto amó Dios al mundo que dio a Su hijo unigénito” (Juan 3:16).

2. Dar me acerca más a Dios.

“Donde esté tu Tesoro, allí estará también tu corazón” (Mateo 6:21).

3. Dar es el antídoto para el materialismo.

“Manda a los que son ricos en este mundo presente que no sean arrogantes ni pongan su
esperanza en la riqueza, que es incierta, sino que pongan su esperanza en Dios, que provee
abundantemente con todo lo que necesitamos. Mándales que sean generosos y dispuestos
a compartir. ¡De esta manera pueden tener la vida que es la vida verdadera!” (1 Timoteo
6:17-19).

Tenemos un sustento por lo que recibimos, pero tenemos una vida por lo que damos.

4. Dar fortalece mi fe.

“Confía en el Señor con todo tu corazón y no dependas en tu entendimiento… honra al
Señor dándole la primera parte de tus ingresos, y Él llenará tus graneros hasta que
sobreabunden” (Proverbios 3:5,9).

“Da y se te dará… porque con la medida que des, se te volverá a medir a ti” (Lucas 6:38).

5. Dar es una inversión para la eternidad.

“...Da alegremente a los que están en necesidad, y siempre está listo para compartir lo que

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 sea que Dios te ha dado. Al hacer esto, estarás guardando para ti tesoros de verdad en el
cielo – es la única inversión segura para la eternidad” (1 Timoteo 6:18-19).

6. Dar me bendice a cambio.

“Un hombre generoso será bendecido” (Proverbios 22:9).

“Un hombre generoso prosperará; el que refresca a los demás será refrescado” (Proverbios
11:25).

“El bien le vendrá al generoso” (Salmo 112:5).

7. Dar me hace feliz.

“(Jesús dijo)… Hay más felicidad en dar que en recibir” (Hechos 20:35).

¿QUÉ ES EL DIEZMO?

• La palabra “diezmo” significa “una decimal parte”.

• El “diezmo” es dar el 10% de mis ingresos.
• La “ofrenda” es cualquier cosa por encima de mi diezmo.

¿Por qué debería diezmar? (7 RAZONES)

1. Porque Dios lo manda (Levítico 27:30).

2. Diezmar muestra que Dios tiene el primer lugar en mi vida (Deuteronomio 14:23).

3. El diezmo me recuerda que todo lo que tengo viene de Dios (Deuteronomio 8:18).

4. Expresa mi gratitud por lo que me ha sido dado (Salmo 116:12; Deuteronomio 16:17).

5. Rechazar diezmar es en realidad robarle a Dios (Malaquías 3:8-10).

6. Diezmar le da a Dios una oportunidad de bendecirme (Malaquías 3:10).

Solo en el diezmo dice Dios: “¡Pruébame! ¡Déjame bendecirte y probarme a ti!”.

7. Diezmar prueba que realmente amo a Dios (Juan 14:15; 2 Corintios 8:7-8).

¿Qué debería diezmar?

La primera parte de lo que gano, no las sobras (Proverbios 3:9-10).

¿Dónde debería diezmar?

Donde adoro y me alimento espiritualmente (Malaquías 3:10).

¿Cuándo debería diezmar?

Cuando adoro cada semana (1 Corintios 16:2).

15
¿Cómo debería diezmar?

• Voluntariamente (2 Corintios 9:7).

• Gozosamente (2 Corintios 9:7).
• Generosamente (2 Corintios 8:3).
• Con expectativa (2 Corintios 9:6).

El diezmo no es la misma cantidad para todos, sino una porción igual para todos. ¡El sistema de
Dios es absolutamente justo!

16
“No dejemos el hábito de congregarnos, como algunos lo hacen. En vez, animémonos unos a
otros” (Hebreos 10:25).

1. Yo necesito una familia de la iglesia para ayudarme a crecer espiritualmente.

“Eres miembro de la familia misma de Dios… y perteneces a la casa de Dios con todos los
cristianos” (Efesios 2:19).

“Así que en Cristo, ¡los que somos muchos formamos un cuerpo, y cada miembro pertenece
a los demás!” (Romanos 12:5).

2. Yo necesito ánimo para ayudarme a crecer espiritualmente.

“Pensemos los unos en los otros y cómo podemos animarnos unos a otros a amar y hacer
buenas obras” (Hebreos 10:24).

“Dos son mejores que uno… si uno de ellos cae, el otro le puede ayudar a levantarse. Pero
si alguno está solo y cae, es tan malo, porque no hay nadie para ayudarle… dos hombres
pueden resistir el ataque que derrotaría al que está solo. Una cuerda hecha de tres cordones
es difícil de romper” (Eclesiastés 4:9-10, 12).

3. Yo necesito dar cuenta para crecer espiritualmente.

“Cada día… manténganse animando unos a otros para que ninguno se endurezca por el
glamour del pecado” (Hebreos 3:13).

“Hermanos, si alguno es atrapado en algún pecado, los que son espirituales restáurenle con
amabilidad… lleven los unos las cargas de los otros, y de esta manera cumplirán la ley de
Cristo” (Gálatas 6:1-2).

4. Hay gran poder espiritual en la unidad.

“Porque donde dos o tres estén congregados en mi nombre, ¡yo estoy ahí, en medio de
ellos!” (Mateo 18:20).

“Cuando dos de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa por la que
oran, será hecho por ustedes por mi Padre que está en el cielo” (Mateo 18:19).

5. Dios me ha dado dones para bendecir a la familia de mi iglesia.

“Dios les ha dado algunas habilidades especiales; asegúrense de usarlas para ayudarse
mutuamente” (1 Pedro 4:10).

17
 “Juntos ustedes forman el cuerpo de Cristo y cada uno es parte necesaria de él” (1 Corintios
12:27).

¡Hay cerca de 60 mandamientos de “unos a otros” en el Nuevo Testamento que tú no puedes

obedecer a menos que seas fiel a una iglesia local!

Servíos los unos a los otros Gálatas 5:13

Recibíos los unos a los otros Romanos 15:7
Perdonándoos unos a otros Colosenses 3:13
Saludaos los unos a los otros Romanos 16:16
Sobrellevad los unos las cargas de los otros Gálatas 6:2
Amaos los unos a los otros Romanos 12:10
Prefiriéndoos los unos a los otros Romanos 12:10
Amonestaros los unos a los otros Romanos 15:14
Someteos unos a otros Efesios 5:21
Animaos unos a otros 1 Tesalonicenses 5:11

“Y todos los días (se reunían), en el temple y por las casas” (Hechos 5:42).

El propósito de todos nuestros servicios y grupos es construir puentes hacia los inconversos de
nuestra comunidad. Firmemente creemos en tener “iglesia para los sin iglesia”.

“Si alguno de ustedes tiene cien ovejas, y una de ellas se pierde, ¿qué hará? ¿No dejará las
noventa y nueve en el campo e irá a buscar a la oveja perdida hasta encontrarla?” (Lucas 15:4).

18
El cristianismo verdadero se trata de un cambio de vida, no solo de religión. El “hábito” central
de la cruz del discípulo es el hábito de la santidad que indica que se ha llevado a cabo un
cambio real en la vida del creyente. Adicionalmente a glorificar a Dios, la santidad tiene el efecto
de testificar a los que nos rodean. Es posible mantener las “reglas” en los hábitos de estudio
bíblico, oración, diezmos y compañerismo a través de un genuino esfuerzo humano. Sin
embargo, el hábito de la santidad (especialmente los aspectos internos) puede ser mantenido
solamente a través de la habilidad del Espíritu Santo.

La Biblia enseña que la santidad debe primero afectar nuestra actitud interna, y luego nuestras
acciones y apariencia externas.

1. La santidad personal es esencial para mantener la salvación del creyente.

“Trata de vivir en paz con todos, y trata de vivir libre del pecado. Cualquiera cuya vida no sea
santa no verá jamás al Señor” (Hebreos 12:14).

“Pero ahora deben ser santos en todo lo que hacen, así como Dios –quien te escogió para
ser Su hijo– es santo. Porque Él mismo dijo: ‘Debes ser santo por que yo soy santo’” (1
Pedro 1:15-16).

2. La santidad envuelve tanto el concepto negativo de separación como el concepto

positivo de dedicación.

“El Señor también dice: ‘¡Déjalos y mantente alejado! No toques nada que no sea limpio.
Entonces yo os recibiré y seré vuestro Padre. Vosotros seréis mis hijos y mis hijas, tan cierto
como que Yo soy Dios, el Todopoderoso’. Amigos mios, Dios nos ha hecho estas promesas.
Así que debemos alejarnos de todo lo que aleja a nuestros cuerpos y espíritus de ser
limpios. Debemos honrar a Dios y intentar ser completamente como Él” (2 Corintios 6:17 -
7:1).

“Y así, queridos hermanos y hermanas, os ruego que entreguéis vuestros cuerpos a Dios.
Que sean un sacrificio vivo y santo – el tipo que Él aceptará. Cuando piensas en todo lo que
Él ha hecho por ti, ¿es esto demasiado pedir?” (Romanos 12:1)

3. Estamos motivados para vivir vidas santas no solamente por reglas forzadas, sino
por nuestro amor hacia Dios.

“Este es el amor de Dios: obedecer sus mandamientos. Y sus mandamientos no son

gravosos” (1 Juan 5:3).

“¿Y cómo podemos estar seguros que pertenecemos a Él? Obedeciendo sus
mandamientos. Si alguien dice: ‘Yo pertenezco a Dios,’ pero no obedece los mandamientos
de Dios, esta persona es mentirosa y no vive en la verdad. Pero los que obedecen la Palabra
de Dios realmente lo aman. Esta es la manera de saber si vivimos o no en Él” (1 Juan 2:3-5).

19
4. Nuestras obras de justicia no son los MEDIOS para que recibamos salvación, ¡pero
deben ser nuestro resultado de haberla recibido!

“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de
Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. Porque somos hechura suya, creados en Cristo
Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en
ellas” (Efesios 2:8-10).
“No por obras de justicia que hayamos hecho, sino por su gracia nos salvó… y en estas
cosas quiero que insistas con firmeza, para que los que han creído en Dios, procuren
ocuparse en buenas obras” (Tito 3:5-8).

5. La Biblia enseña que un verdadero cristiano exhibirá un testigo externo perceptible

cuando la “santidad interna” está presente en el corazón.

“Deja que tu luz brille ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen
a vuestro Padre que está en los cielos” (Mateo 5:16).

“Queridos hermanos y hermanas, ¿qué sentido tiene decir que tienes fe si no lo demuestras
por tus obras? Este tipo de fe no puede salvar a nadie… no es suficiente con tener fe. La fe
que no se manifiesta por las buenas obras no es fe – está muerta y es inútil… ‘Yo no puedo
ver tu fe sin tus obras, pero puedo mostrarte mi fe a través de mis obras’… Así que ya ves,
somos hechos justos ante Dios por lo que hacemos, no solo por fe” (Santiago 2:14-24).

6. Hay diferentes tipos de madurez en la familia de Dios, y cada miembro es amado en

su etapa actual.

“Si nuestra fe es fuerte, debemos ser pacientes con los seguidores del Señor cuya fe es
débil. Debemos tratar de complacerlos a ellos en vez de a nosotros mismos. Debemos
pensar en su bienestar y tratar de ayudarlos” (Romanos 15:1-2).

“(Jesús dijo) Será terrible para las personas que hagan tropezar a alguno de estos
pequeñitos que creen en mí. A estas personas les será mejor que se lancen al fondo del
océano con una pesada piedra atada al cuello!” (Mateo 18:6).

7. Cuanto más maduro llego a ser en mi estilo de vida de santidad, más puede Dios
usarme.

“Pero la verdad de Dios permanece firme como una piedra angular con esta inscripción: ‘El
Señor conoce a los que son suyos,’ y ‘Los que afirman que pertenecen al Señor necesitan
alejarse de toda maldad’. Muchos utensilios estan hecho de oro y plata, y muchos estan
hechos de madera y arcilla. Los utensilios más valiosos estan reservados para ocasiones
especiales, y los menos costosos los usámos cada dia. Si tu te mantienes puro, serás serás
un utensilio que Dios podrá usar para su propósito. Tu vida estará limpia, y estará lista para
que el Maestro te use para cada buena obra” (2 Timoteo 2:19-21).

8. Incluso si no siento personalmente convicción acerca de un patrón de santidad,

todavía necesito someterme a los líderes que Dios ha puesto en mi vida.

“Obedeced a vuestros líderes espirituales y haced lo que dicen. Su trabajo es velar por
vuestras almas, y ellos son quienes dan cuentas a Dios. Darles razones para hacer esto con

20
 alegria y no con tristeza. Porque ciertamente no os es provechoso” (Hebreos 13:17).
A medida que nuestra sociedad se aleja de Dios, también se alejan de los principios de
santidad. Incluso algunos grupos religiosos han decidido ignorar convenientemente el llamado
de la Biblia para un “cambio de estilo de vida” en cada creyente. Pero sólo porque la inmodestia
y la inmoralidad sean aceptados por la sociedad o por la religión – no cambian la opinion de
Dios!

Santidad para Cristianos Maduros

Aquí tenemos diferentes áreas importantes en la vida actual donde debemos aplicar los
principios de santidad:

• Actitud (Gálatas 5:19-21, Efesios 4:31-32).

Debemos echar fuera todas las obras de la carne, tales como: odio, ira, celos, amargura,
orgullo, prejuicios, venganza, discordia y rebelión. El fruto del Espíritu (bondad, amor,
paciencia, dominio propio, etc.) debe manifestarse en nuestras actitudes. Debemos
aprender a perdonar, a ser obedientes a la autoridad, a ser agradecidos, no dejar que nada
nos ofenda, y no ser un tropiezo en las vidas de los demás.

• Pensamiento (Proverbios 23:7, Mateo 15:18-20, 2 Corintios 10:5, Filipenses 4:8).

Nosotros somos los que pensamos y nos convertimos en lo que permitimos permanecer a
nuestras mentes. Los malos pensamientos nos contaminan. Debemos pensar en cosas
verdaderas, puras y nobles, mientras que expulsamos los pensamientos que surgen de
deseos y pensamientos negativos. Debemos llevar cautivo todo pensamiento a la
obediencia a Cristo.

• Vista (Salmo 101:3, 119:37, Mateo 6:22-23)

Tenemos que guardar nuestros ojos como la puerta del alma y la principal fuente de entrada
para la mente. Debemos elegir el material de lectura con cuidado para no saturar nuestras
mentes con vulgaridad, sensualidad y pecado. A causa de la violencia, sexo ilícito, pecado,
mal lenguaje y vanidad que dominan la televisión, el cine y el internet, tenemos que limitar
seriamente nuestra exposición a estos medios de comunicación.

• Habla (Santiago 1:26, 3:1-12, 4:11, 5:12)

Debemos evitar el chisme, la murmuración, la calumnia, causar división, jurar, quejarse,
mencionar el nombre de Dios en vano, criticar, maldecir, mentir, palabras vanas y con doble
sentido.

• Cuerpo (1 Corintios 3:16-17, 6:12, 6:19-20)

Puesto que el cuerpo es templo del Espíritu Santo, evitamos cualquier cosa que pueda
dañar o contaminar el cuerpo, incluyendo cualquier cosa que pueda causar intoxicación y
adicción. A la luz de los males bíblicamente descritos de las bebidas alcohólicas, debemos
abstenernos de ellas. A la vista de la evidencia abrumadora que el tabaco y las drogas
alucinógenas son dañinas, no debemos usarlas.

• Sexo (1 Corintios 6:9-10, Colosenses 3:5).

La Biblia condena toda relación y/o actividad sexual fuera del matrimonio entre un hombre y
una mujer, y se opone a pensamientos y/o acciones lascivas.

• Compañerismo (1 Cor. 5:9-6:8, 15:33, 2 Cor. 6:14, Mateo 18:15-18)

Aunque tenemos que asociarnos con los no creyentes, no debemos identificarnos

21
 demasiado con las actividades pecaminosas o estilos de vida. Debemos tener comunión con
aquellos que se llaman a sí mismos cristianos, pero continuamente disfrutar de actividades
pecaminosas. No estamos para ser asociados con los incrédulos en las relaciones como el
matrimonio.

• Vida (Éxodo 20:13, Mateo 5:44, Hechos 15:29).

En vista de la santidad de la vida humana, los cristianos no debemos participar en la
violencia o quitar vidas humanas. Esto incluye aborto, eutanasia, asesinato y suicidio.

• Honestidad (Marcos 10:19)

Los cristianos debemos rechazar todas las formas de deshonestidad. Esto incluye mentir,
robar, defraudar, morosidad, extorsión, soborno, y todo tipo de fraude.

• Diversión (1 Tesalonicenses 5:22, 1 Juan 2:15).

Debido a la tendencia al pecado del mundo hoy en día y debido a las advertencia bíblicas
contra amar al mundo, tenemos que regular cuidadosa y maduramente nuestra música,
deportes, actividades y diversiones. Debemos evitar ambientes y apariencias excesivamente
mundanos. Algunas actividades son inherentemente mundanas por su naturaleza misma,
como juegos de azar, bailar y la astrología, por lo cual tenemos que rechazarlas en el acto.

• Cabello (1 Corintios 11:13-15).

La Biblia enseña que el hombre debe tener el cabello corto y que la mujer debe tener el
cabello largo y sin cortar. Dios desea que nosotros hagamos esto para mantener una
distinción entre ambos sexos como para ilustrar nuestra obediencia hacia Él con la única
característica física que el hombre y la mujer tienen poder para cambiar: el cabello.

• Apariencia (Deuteronomio 22:5, 1 Timoteo 2:9, 1 Pedro 3:1-6).

La Biblia establece principios severos en relación a nuestra apariencia y vestimenta. Eso
incluye la distinción de sexos en la ropa, la moderación en el costo de las prendas, y evitar la
joyería y los cosméticos que solo sirven para la ornamentación del cuerpo. La Palabra de
Dios enseña específicamente que la vestimenta para ambos sexos no debe exponer el torso
o las piernas por encima de las rodillas, ni tampoco debería atraer atención a la forma del
cuerpo. La Biblia también enseña específicamente que solo los hombres pueden usar
vestimenta que “ciñe los lomos” (ej. pantalones, que enseñan una separación entre los
muslos), y que es una abominación a Dios que una mujer use este tipo de ropa. Aplicando
estos principios a la cultura moderna, debemos evitar vestidos en los hombres y pantalones
en las mujeres, pantalones cortos en ambos sexos, vestimenta que expone inmodestamente
el cuerpo (ej. sin mangas o ceñida), y muy costosa o extravagante. Tenemos que evitar la
joyería no funcional y cosmética colorida (maquillaje) que sirve solo para llamar la atención a
los rasgos del cuerpo. Puesto que la moda moderna se ha apartado de los principios
bíblicos, ya no podemos depender de la definición de la sociedad de modestia para gobernar
o regir nuestra apariencia.

Debido a que hombres y mujeres fueron creados de manera diferente, la Biblia pone énfasis en
sus “áreas problemáticas” únicas en sus mandamientos de santidad. A las mujeres se les
manda que se VISTAN en una cierta manera para que los hombres no sean tentados, mientras
que a los hombres se les manda que ACTÚEN en una cierta manera para que las mujeres no
sean tentadas.

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La misión de Jesús en la tierra

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel
que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16, BV).

“Dios estaba en Cristo, reconciliando consigo al mundo” (2 Corintios 5:19, BV).

1. Brillar (testimonio pasivo).

“He venido como una luz para brillar en este mundo oscuro, para que todo aquel que cree en
mí no permanezca en tinieblas” (Juan 12:46, BV).

2. Buscar (testimonio activo).

“Porque el Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lucas 19:10,
NVI).

3. Hablar (testimonio directo).

“Esto es para lo que he nacido y he venido al mundo: para decirle a la gente la verdad” (Juan
18:37, NVS).

4. Compartir (testimonio indirecto).

“He venido a dar vida, y vida en su plenitud” (Juan 10:10, NVS).

Porqué tendría que importarme la misión de Jesús

1. Si quiero ser como Jesús, mi misión de vida debe incluir Su misión de vida.
“De la misma manera que tú me diste una misión en el mundo, yo les doy una misión en el
mundo” (Juan 17:18, TM).

“Como el Padre me envió, así yo les envío a ustedes” (Juan 20:21, NVI).

2. Jesús espera que yo continúe Su misión.

“Debeis ir a todo el mundo y predicar las Buenas Noticias a todos, en todas partes” (Marcos
16:15, BV).

“Pero cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos
tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra” (Hechos
1:8, NVI).

3. Compartir el evangelio es mi responsabilidad.

“Debes advertirles para que puedan vivir. Si tú no hablas para advertir a los malos que
detengan sus malas acciones, ellos morirán en sus pecados. Pero yo te tendré a ti como
responsable de sus muertes” (Ezequiel 3:18, NVS).

“Contar las Buenas Noticas es mi deber; algo que debo hacer. Y cuán terrible sería para mí

23
 si no anuncio las Buenas Noticias” (1 Corintios 9:16, NVS).

4. Compartir el evangelio es mi privilegio.

“Y Dios nos ha dado el privilegio de exhortar a todos a venir a Su favor y ser reconciliados
con Él… Este es el maravilloso mensaje que Él nos ha dado para decírselo a todos. Somos
embajadores de Cristo” (2 Corintios 5:18, BV)

“Estoy orgulloso de las Buenas Noticias, porque es el poder que Dios usa para salvar a todo
el que cree” (Romanos 1:16, NVS).

5. Estoy agradecido por lo que Dios ha hecho por mí.

“Recuerda que el pasado tú estabas sin Cristo. Tú no tenías esperanza, y no conocías a
Dios” (Efesios 2:12, NVS).

“El amor de Cristo nos obliga” (2 Corintios 5:14, NVI).

6. La gente está perdida sin Jesucristo.

“¡Solo Jesús tiene el poder de salvar! Su nombre es el único nombre en todo el mundo que
puede salvar a alguien” (Hechos 4:12, CEV).

“Cualquiera que clame al Señor será salvo. Pero antes que la gente pueda pedir ayuda al
Señor, necesitan creer en Él; y antes que puedan creer en Él, deben oír sobre Él; y para
poder oír acerca del Señor, alguien debe decirles” (Romanos 10:13-14, NVS).

7. Dios quiere que todos sean salvos.

“pues [Dios] quiere que todos sean salvos y lleguen a conocer la verdad” (1 Timoteo 2:4,
NVI).

“Dios no quiere que nadie se pierda, sino que quiere que todos cambién sus corazones y sus
vidas” (2 Pedro 2:9, NVS).

8. El horario de Dios para la historia depende de que la iglesia completemos nuestra

misión.
“Las Buenas Noticias acerca del reino de Dios serán predicadas en todo el mundo, a cada
nación. Entonce vendrá el fin” (Mateo 24:14, NVS).

“Jesús les dijo: ‘Ustedes no necesitan conocer el tiempo de esos eventos que solo el Padre
controla. Sino que el Espíritu Santo vendrá sobre ustedes y les dará poder. Entonces
ustedes le contarán a todo el mundo sobre mí’” (Acts 1:6-8, CEV).

9. Yo seré recompensado por el Señor en la eternidad.

“Recuerden que el Señor los recompensará con una herencia y que el Amo a quien sirven es
Cristo” (Colosenses 3:24, NTV).

“quienes conducen a muchos a la justicia brillarán como estrellas para siempre” (Daniel 12:3,
NTV).

10. Yo me regocijaré cuando vea en el cielo gente que yo he ganado para el Señor.
“Jesús dijo: ‘De la misma manera hay más felicidad en el cielo por un pecador que se vuelve
a Dios que por noventa y nueve buenas personas que no necesitan hacerlo’” (Lucas 15:7,
CEV).

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 “¿Qué es lo que nos da esperanza y alegría?, ¿y cuál será nuestra orgullosa recompensa y
corona al estar delante del Señor Jesús cuando él regrese? ¡Son ustedes!” (1
Tesalonicenses 2:19, NTV).

Al conocer cuán importante es para el Señor mi misión, ¿qué debería yo hacer en

respuesta?

“Quiero llevar a cabo la misión que recibí del Señor Jesús: la misión de testificar las Buenas
Noticias” (Hechos 20:24, NVS).

Lo que creemos sobre el evangelismo

1. El evangelismo debería estar orientado en las personalidades.

Los cristianos deben ser las buenas nuevas antes de compartir las buenas nuevas.

Cuando somos gente “real”, eso da a los demás un alivio y les hace saber que nuestro
cristianismo es también real.

Hay muchos estilos diferentes del evangelismo:

• Estilo de confrontación – Pedro en Hechos 2.

Predica la palabra; está preparado a tiempo y fuera de tiempo; corrige, reprende y
anima, con gran paciencia y cuidadosa instrucción (2 Timoteo 4:2).

• Estilo intelectual – Pablo en Hechos 17.

Derribamos los argumentos y toda pretensión que se levanta contra el conocimiento de
Dios, y llevamos cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo (2 Corintios 10:5).

• Estilo de testimonio – El ciego en Juan 9.

Les proclamamos lo que hemos visto y oído, para que también ustedes tengan comunión
con nosotros (1 Juan 1:3).

• Estilo interpersonal – Mateo en Lucas 5.

Me he hecho de todo a todos los hombres para que de cualquier manera posible pueda
salvar a alguno (1 Corintios 9:22).

• Estilo invitacional – Mujer junto al pozo en Juan 4.

Entonces el maestro le dijo a su siervo: Ve por las calles y los caminos y hazlos entrar,
para que mi casa esté llena (Lucas 14:23).

• Estilo de servicio – Dorcas en Hechos 9.

De la misma manera, que su luz brille ante los hombres, para que vean sus buenas
obras y alaben a su padre en los cielos (Mateo 5:16).

2. El evangelismo debería estar orientado en la gente.

Cuando mostramos un interés genuino en los demás, ¡eventualmente ellos querrán saber
por qué!

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 Un “evento” evangelista tiende a apurar a la gente, pero un “proceso” evangelístico es
paciente con la gente.

3. El evangelismo debería estar orientado en el equipo.

La venida de una persona a Dios es como una cadena con muchos eslabones; no tenemos
que ser cada eslabón, ¡simplemente un eslabón!

Necesitamos intencionalmente llegar a ser compañeros de otros cristianos, vinculando

nuestras habilidades para llevar a la gente a Dios.

4. El evangelismo debería estar orientado en la eternidad.

El evangelismo es la razón principal por la que la iglesia está en el planeta tierra; nada es
más importante para Dios.

Si un alma vale más que el mundo entero, entonces cualquier persona con la que nos
encontramos es increíblemente valiosa para Dios.

¿Por qué es un alma tan importante? ¡Lee el libro de los Hechos!

En Hechos 3 era un cojo junto a la puerta del templo.

En Hechos 8 era un tesorero etíope anónimo.
En Hechos 9 era un fariseo llamado Saulo.
En Hechos 9 era una costurera llamada Dorcas.
En Hechos 10 era un centurión romano llamado Cornelio.
En Hechos 14 era un paralítico anónimo.
En Hechos 16 era una vendedora de púrpura llamada Lidia.
En Hechos 16 era un carcelero filipense anónimo.
En Hechos 18 era un líder de la sinagoga llamado Crispo.
En Hechos 18 era un predicador elocuente llamado Apolos.

¡Nunca sabes a quién le puedes estar testificando!

Doce claves para ser un testigo eficaz.

1. Reconoce tu estilo personal.

Tu “forma” no solo determina tu ministerio en la iglesia, ¡sino que influencia también tu

misión en el mundo! No te sientas culpable acerca de los estilos que no usas naturalmente,
¡y no juzgues a los demás que no lo hacen como tú!

Un testigo de “cerebro derecho” enfatiza la experiencia personal, mientras que un testigo

de “cerebro izquierdo” enfatiza los hechos y la escritura. ¡Necesitamos ambos tipos de
testimonios! ¡Recuerda que Jesús nunca usó el mismo acercamiento dos veces!

2. Piensa bien lo que vas a decir (Colosenses 4:6; Proverbios 16:23).

3. Muestra amor (1 Corintios 13:1).

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 ¡A la gente no le importa cuánto sabemos hasta que saben cuánto nos importa!

4. Sé positivo y agradable (Proverbios 16:21; Proverbios 12:25).

5. Nunca uses menosprecio (Colosenses 4:5-6).

¡Ni siquiera esperes que un incrédulo actúe como un creyente hasta que se conviertan en
creyentes!

6. Cuenta historias y da ejemplos (Mateo 13:34).

7. Relájate (Lucas 7:34).

8. Sé natural; no trates de sonar “spiritual” (1 Corintios 2:1; Tito 2:8).

9. Sé vulnerable y auténtico (2 Corintios 6:11; Filipenses 1:27).

10. Memoriza algunos versos bíblicos (2 Timoteo 2:15).

11. Mantenlo simple (2 Corintios 11:3).

12. Pídele a Dios que te ayude a usar las palabras correctas (1 Tesalonicenses 1:5; Efesios
6:19).

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