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Colegio Libertador Simón Bolívar

Departamento de Humanidades
Docente: Valentina Muñoz

Lengua y Literatura
Unidad 3: Lo divino y lo humano
La mujer en el siglo de oro

Nombre: Curso: II° ____

Objetivo de aprendizaje: Analizar poemas del siglo de oro considerando el rol de la mujer en el
contexto histórico (OA 04, OA 06, OA 23).

Instrucciones: Leeremos en conjunto los siguientes poemas expuestos a continuación, luego, en


parejas, seleccionarán UNO de los poemas leídos para identificar los siguientes elementos y
desarrollarlos en sus cuadernos (cada uno en su cuaderno):
1. Uso del lenguaje figurado: mínimo 3 versos que contengan figuras literarias.
2. Motivo lírico del poema ¿De qué trata?
3. Objeto lírico del poema ¿Qué inspira el poema?
4. ¿Cuál es el ideal de belleza expuesto en el poema? Fundamenten con un verso.
5. ¿Cuál es la imagen de la mujer del Siglo de Oro, y cómo esa imagen contrasta con puntos de vista
actual de la mujer?
6. ¿Es el amor la expresión de lo religioso? Fundamenta tu respuesta.

POEMA 1
Mientras por competir con tu cabello, Luis de y mientras triunfa con desdén lozano
Góngora del luciente cristal tu gentil cuello;

Mientras por competir con tu cabello, goza cuello, cabello, labio y frente,
oro bruñido al sol relumbra en vano, antes que lo que fue en tu edad dorada
mientras con menosprecio en medio el llano oro, lirio, clavel, cristal luciente,
mira tu blanca frente el lilio bello;
no sólo en plata o víola troncada
mientras a cada labio, por cogello, se vuelva, mas tú y ello, juntamente,
siguen más ojos que al clavel temprano, en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.
POEMA 2
Diez años desperdicié,
Déjame en paz, amor tirano, Luis de Góngora
los mejores de mi edad,
Ciego que apuntas y atinas,
a ser labrador de amor
caduco Dios y rapaz.
a costa de mi caudal.
Vendado que me has vendido
Como aré y sembré cogí,
y niño mayor de edad.
aré un alterado mar,
Por el alma de tu madre,
sembré una estéril arena,
que murió siendo inmortal,
cogí vergüenza y afán.
de envidia de mi señora,
Déjame en paz, Amor tirano,
que no me persigas más.
déjame en paz.
Déjame en paz, Amor tirano,
Amadores desdichados
déjame en paz.
que seguís milicia tal,
Amadores desdichados
decidme qué buena guía
que seguís milicia tal,
podéis de un ciego sacar,
decidme qué buena guía
de un pájaro qué firmeza,
podéis de un ciego sacar,
qué esperanza de un rapaz,
de un pájaro qué firmeza,
qué galardón de un desnudo,
que esperanza de un rapaz,
de un tirano, ¿qué piedad?
que galardón de un desnudo,
Déjame en paz, Amor tirano,
de un tirano, ¿qué piedad?
déjame en paz.
Déjame en paz, Amor tirano,
déjame en paz.

POEMA 3

Noche oscura del alma, San Juan de la Cruz A oscuras y segura,


por la secreta escala, disfrazada,
En una noche oscura, ¡oh dichosa ventura!
con ansias en amores inflamada a oscuras y en celada,
¡oh dichosa ventura! estando ya mi casa sosegada.
salí sin ser notada,
estando ya mi casa sosegada. En la noche dichosa,
en secreto, que nadie me veía,
ni yo miraba cosa, En mi pecho florido,
sin otra luz y guía que entero para él solo se guardaba,
sino la que en el corazón ardía. allí quedó dormido,
y yo le regalaba,
Aquesta me guiaba y el ventalle de cedros aire daba.
más cierto que la luz del mediodía
a donde me esperaba El aire de la almena,
quien yo bien me sabía, cuando yo sus cabellos esparcía,
en parte donde nadie parecía. con su mano serena
en mi cuello hería,
¡Oh noche, que guiaste! y todos mis sentidos suspendía.
¡Oh noche amable más que la alborada!
¡Oh noche que juntaste Quedé y olvidéme,
Amado con amada el rostro recliné sobre el Amado;
amada en el Amado transformada! cesó todo, y dejéme,
dejando mi cuidado
entre las azucenas olvidado.

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