Actividad - 1 (Caso Corona)
Actividad - 1 (Caso Corona)
Sin embargo, crear su identidad no ha sido fácil. Cuando la firma mexicana salió
por primera vez al exterior, optó por California (EE.UU.). La falta de experiencia
internacional le jugó una mala pasada. Su error: presentar un nuevo diseño con
botellines chaparros de color ámbar y una etiqueta con figuras mayas.
Bajo la premisa “ser mexicano no significa ser barato”, Coronita está posicionada
en el segmento de las cervezas Premium. Para los responsables de la compañía
este ha sido uno de los principales aciertos, “Coronita no compite con cervezas,
compite con copas”. Con un elevado precio el objetivo es presentarlo como un
producto elitista. Eso ayuda a cubrir los aranceles de importación en cada país y el
alto coste del transporte desde México lo que, unido a los bajos costes de
producción, proporciona a la empresa grandes beneficios. Para muchos, el grupo
tiene un perfil que mataría de envidia a cualquier empresa pública o privada.
Hecho en México es el sello que acompaña a esta marca. La calidad del producto y
el orgullo de ser mexicano son atributos comunes en sus campañas de imagen,
aunque evitando los tópicos: la tranquilidad de saborear una cerveza sin mariachis
ni frijoles.
Otra precaución que obsesiona a los responsables de la niña bonita son las malas
compañías, y esto se traduce en un control total de las campañas publicitarias
internacionales, procurando que el producto no se mezcle con ningún tipo de
comida mexicana. Con ello se pretende evitar que Coronita se identifique con una
bebida que sólo se consume con alimentos picantes.
A pesar de querer conservar el encanto del país azteca, los padres de Coronita
prefieren huir de los tópicos y adaptarse a las particularidades de cada mercado
nacional. De su elenco formado por 10 marcas, cinco de ellas tienen presencia en
el ámbito mundial. Así, aunque en nuestro país nos referimos a la rubia mexicana
con el apelativo de “Coronita”, su nombre en la mayoría de los países es “Corona
Extra”, lo que ocurre es que Corona ya era una marca registrada en España por la
bodega catalana “Torres”, razón por la cual se pensó en el diminutivo, junto con
Hungría son los dos únicos países en los que se utiliza esta denominación.
Cuidar hasta el último detalle incluye también un tratamiento especial del capítulo
publicitario, de modo que en todas las actividades publicitarias se cuidan al
máximo las características especiales del país en que se van a llevar a cabo. La
primera vez que la compañía salió al exterior allá por los años setenta, el
presupuesto publicitario no era muy alto y sus responsables optaron por las
promociones entre universitarios y la llamada “publicidad estética”: luminosos en
bares y restaurantes. Todavía hoy, Coronita maneja un presupuesto publicitario
cuatro veces inferior al de su competencia directa.
Cuestiones a resolver
Precise dentro del Producto, los componentes que se estandarizan y los que se
adaptan.