Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 8

LA TEORIA NEOCLASICA: REFLEXIONES *

Guillermo Maya Muñoz**

“...es un error creer que algo se va a ganar para el

socialismo luchando por el marxismo o estando en

contra de la teoría marginal del valor”. (J. Schum

peter, 1954, Historia del análisis económico).

La importancia de estudiar microeconomía, y en general la teoría Neoclásica, por parte de los


estudiantes universitarios que se forman como economistas puede ser obvia, pero no siempre lo
es. Incluso, ni para los profesores de economía, que a veces frustran y anulan, de entrada, el
espíritu abierto de los estudiantes, cuando estos apenas comienzan a formarse en la disciplina de
la economía.

Calificativos como “ideología burguesa”, economía “vulgar” son ya lugares comunes en las
escuelas de economía de Latinoamérica, para referirse a la economía [neoclásica. Pero por lo
general, estos adjetivos provienen de los economistas peor calificados y que al decir de
Schumpeter (1932) “apestan nuestra ciencia”

Esto no quiere decir que la teoría neoclásica, la teoría que alimenta a la micro, lo mismo que a las
teorías del comercio internacional, el desarrollo y el crecimiento económico, y muchos otros

campos propios de la economía, no esté sujeta a la crítica. Pero esta crítica tiene que asumirse
sobre criterios científicos bien claros.

Examinar la consistencia interna de la teoría, la consistencia de la teoría con los datos de la


realidad, y la consistencia, en términos de la capacidad de modificar y de cambiar las
circunstancias, de la política económica que aconseja, pueden ser unos criterios más válidos,
desde el punto de vista científico, que el apoyarse en criterios externos a la misma teoría.

Esta invitación a estudiar la teoría Neoclásica es una invitación crítica. Parte de una simpleza: no
podemos criticar algo que no conocemos. Sin embargo, hay que anotar que una verdadera crítica

supone la capacidad de ofrecer una teoría alternativa más progresiva.

El presente ensayo se compone de cuatro partes: la primera parte está dedicada a algunas
características de la teoría neoclásica. Específicamente, se definen unos conceptos previos, como
qué es la micro, la competencia perfecta, etc.; la metodología de la teoría neoclásica, el
individualismo metodológico, y la metodología modernista; la extensión del análisis neoclásico a
los fenómenos no económicos; y ¿es la teoría neoclásica un desarrollo de la teoría clásica o al
contrario una desviación?

La segunda parte incluye el aspecto crítico. Se desarrollan las tres críticas más importantes que ha
tenido la teoría neoclásica en el presente siglo y que constituyen los tres pilares básicos de lo que

se conoce como economía postkeynesiana: La crítica de la competencia perfecta basada sobre el


artículo de P. Sraffa (1926) Las leyes de los rendimientos en régimen de competencia (el
argumento de Sraffa no se desarrolla, pero sí las consecuencias del mismo), la crítica que brota de
los trabajos de JM Keynes (1936), especialmente de la Teoría General, sobre el desempleo
involuntario, y el debate de los dos Cambridges sobre la noción del capital, la medición del capital,
etc., y que surge del libro de P. Sraffa (1960) Producción de mercancías por medio de mercancías;
igualmente, se definen los lineamientos generales de la crítica marxista al análisis neoclásico.

En la tercera parte, se hacen unas consideraciones adicionales de tipo histórico, que surgen, por
un lado, de! éxito económico de les países del Este asiático, y por otro lado, del fracaso económico

de los países del "socialismo real", y lo que esto puede significar para la teoría neoclásica, Y la
última y cuarta parte, contiene una conclusión general y un epílogo.

Conceptos previos

Con el fin de tener un concepto claro de lo qué es la microeconomía, miremos el concepto que nos
da el Diccionario de Economía del MIT (2): “La microeconomía es un término usado para describir

aquellas partes del análisis económico cuyo interés es la conducta de las unidades, en particular
firmas y consumidores.

El análisis económico de la conducta individual se concentra en la teoría de la demanda del


consumidor, y en menor grado en la teoría de la asignación del tiempo. El análisis de la conducta
de la firma se concentra en las decisiones de producción y en la teoría de precios. La mayor parte
del análisis está relacionado con el tipo de mercado en el que la firma opera, en particular, el
grado de competencia del mercado.

La microeconomía tradicional se concentra en el análisis del equilibrio parcial. La teoría moderna


microeconómica utiliza un enfoque axiomático y coloca un mayor énfasis en el equilibrio general.
La parte normativa (lo que debería ser) de la micro se conoce como economía del bienestar".

En cuanto al análisis del equilibrio parcial, éste consiste en “el estudio del mercado de un bien
aislado. Los precios de los otros bienes están dados, entonces las condiciones de equilibrio de un
mercado único se examinan. Esta técnica desarrollada por Alfred Marshall ignora los efectos de los
cambios en el precio del bien sobre los otros precios, en los mercados relacionados con el bien,
incluyendo los precios de los factores de producción".

Por otro lado, la competencia perfecta es uno de los grandes supuestos de la microeconomía. Una
estructura de mercado competitiva debe satisfacer las siguientes condiciones: *

Racionalidad: Cada agente actúa con el fin de maximizar su bien definida función objetivo, sujeto a
las restricciones impuestas sobre él, tanto por el sistema económico como físico.

— Mercados completos: (price-quoting). Para cada bien existe un precio y sólo uno.

— Conducta no estratégica (price-taking): Cada agente puede intercambiar cualquier bien, en


cantidades ilimitadas a su precio de cotización.

— Mercados de equilibrio (market-clearing): Al sistema de precios que las transacciones se


realizan, los mercados se limpian simultáneamente La teoría económica que inspira el análisis
microeconómico
convencional es la teoría neoclásica, que usa el enfoque general, los métodos, y técnicas de los
economistas marginalistas de la segunda mitad del siglo XIX, especialmente J. M. Clark, F. Y.
Edgeworth, I. Fisher, A, Marshall, V, Paretto, L. Walras, y K. Wícksell.

El término neoclásico se deriva del entendimiento de que los economistas de la "revolución


marginal” estaban extendiendo y mejorando la teoría enconómica, sobre las bases o fundamentos
de los economistas clásicos, especialmente Ricardo y J. S. Mili.

Los fundadores del sistema neoclásico utilizaron el análisis marginal, los conceptos de utilidad
marginal y productividad marginal, para determinar la formación de los precios de los bienes,
servicios y factores de producción, en mercados competitivos. Ellos enfatizaron la escasez como el
elemento determinante de los precios. En particular, los economistas marginalistas estudiaron la
posibilidad de que un conjunto de precios aseguraran la igualdad de la oferta y la demanda, en
todos los mercados.

En general los economistas neoclásicos sostienen que:

— En cuanto a la teoría del producto: Las fuerzas del mercado dejadas a su libre operación, sin
intromisiones externas, logran un nivel del producto y del empleo, de pleno empleo.

— En cuanto a la teoría del valor: Abandonan la teoría del valor clásica, los costos de producción, y
la reemplazan por la teoría subjetiva del valor en la determinación de los precios, por la oferta y la
demanda. Los precios, así determinados, expresan la conducta racional maximizadora de los
consumidores. Esta teoría es esencialmente una teoría de la asignación de recursos,.en una
economía estática.

— En cuanto a la teoría de la distribución del producto: Abandonan la teoría clásica de la


determinación exógena, y la reemplazan por la teoría de la productividad-marginal del trabajo,
el capital y la tierra.

Adoptan la visión de un sistema económico armonioso, en reemplazo de la teoría clásica del


conflicto de ciases (especialmente Ricardo).

La metodología neoclásica La metodología particular utilizada por los economistas neoclásicos se


conoce como el individualismo metodológico (IM), expresión inventada por J. Schumpeter de
acuerdo a Hodgson (1986)

Este método consiste en explicar el fenómeno social en términos de la conducta individual. El IM


es el rechazo a examinar los factores institucionales u otras fuerzas que están involucradas en el
moldeamiento de las preferencias e intenciones de los individuos.

Para Von Mises (1949) (6) el IM involucra el reconocimiento de que “todas las acciones son
realizadas por individuos” y que “el colectivo social no tiene existencia y realidad por fuera de las

acciones de los miembos individuales"

Gary Becker (1977), por otro lado, Premio Nobel de economía 1992, argumenta que las referencias
y los propósitos individuales son la base, y el edificio económico tiene que ser construido a partir
de estos fundamentos, no sólo firmes sino también, alegadamente,
sagrados: La función de utilidad es considerada inmutable y más allá de toda disputa. De esta
manera se niega el moldeamiento de laspreferencias inlividuales, sugiriendo que éstas no
cambian a través del tiempo. En gustos no hay disgustos es el lema de Chicago í8).

En general, en la teoría neoclásica el consumidor es representado atomísticamente. La formación


de las preferencias del consumidor se supone que ocurren en completa independencia de otras
escogencias y gustos de otros consumidores. De esta manera los consumidores son tomadores de
precios, por el lado de la demanda, de la misma manera que las firmas son tomadoras de
preciospor el lado de la oferta, y estas decisiones son tomadas en completa independencia de la
conducta de otros consumidores o firmas (8>.

La crítica al IM no es que el individuo esté enteramente sobredeterminado por las condiciones


socio-económicas, también hay lugar para una autonomía relativa del individuo, lo que se
argumenta es que el ambiente socio-económico e institucional tienen un efecto significativo sobre
la clase de información que se recibe, el conocimiento de ella, las preferencias, y además gran
parte de la conducta. Y por lo tanto, que la formación de las preferencias es necesariamente una
actividad intersubjetiva, no-privada En cuanto a la metodología general de la economía moderna,
que incluye todas las variantes neoclásicas, siguiendo a McCIoskey (31) (1983), ésta es una
amalgama de positivismo lógico, conductismo, operacionalismo, y el modelo hipotético deductivo
de la ciencia. La familia modernista inspiradora de esta metodología incluye desde Descartes, a
Hume, Comte. Russell. Hempel, hasta Popper.

Las máximas que definen esta metodología modernista son las siguientes:

1. La predicción (y el control) es el objetivo de la ciencia (18>.

2. Solamente las implicaciones observables (o predicciones) de una teoría son importantes


para su verdad.

3. La observabilidad vincula experimentos objetivos y reproducibles.

4. Si (y sólo si) una implicación experimental de una teoría es probada falsa, la teoría es
probada falsa.

5. La objetividad es atesorable. Las “observaciones" subjetivas

(introspección) no son conocimiento científico.

6. La sentencia de Kelvin (1888-9): Cuando usted no puede expresarlo en números, su


conocimiento es de una categoría magra e insatisfactoria.

7. La introspección, la creencia metafísica, la estética, y otras parecidas, pueden figurar en el


descubrimiento de una hipótesis, pero no en su justificación.

8. El papel de la metodología es demarcar eí pensamiento científico del no-científico, lo positivo


de lo normativo.

9. Una explicación científica de un evento lo coloca bajo el cubrimiento de una ley.

10. Los científicos, por ejemplo los economistas, no tienen nada que decir como científicos, acerca
de los valores, sean morales o artísticos.
11. El Tenedor de Hume (1748) 13 14 (15): “¿Cuando vamos a las biblitecas, persuadidos de estos
principios, qué estragos tenemos que hacer? Si tomamos en nuestras manos cualquier libro —
sobre la divinidad o la metafísica, por ejemplo— preguntémonos:

¿Contiene algún razonamiento experimental acerca de realidad y existencia? No. Condénenlo a las
llamas, pues no contiene nada que no sea sofisma e ilusión”.

Los filósofos profesionales apenas sí comparten la mitad le estas máximas, pero los economistas
las comparten casi todas. Por ejemplo, los líderes metodológicos, los monetaristas, lo hacen. En
este sentido los textos “La metodología de la economía positiva” (Friedman, 1953), y “De gustibus
non est Disputandum” (Stigler y Becker, 1977) son, por decirlo así, los paradigmas de la
metodología modernista en economía.

Para MacCIoskey, el modernismo metodológico positivista es un método pobre, y da varios


factores para sustentar su afirmación:

Es obsoleto en filosofía; el falsacionísmo no es convincente; la predicción es imposible en


economía; el modernismo es en sí mismo imposible y no se le sigue; cualquier método es
arrogante y pretencioso; y otras ciencias no siguen el método modernista <16).

Por otro lado, el modernismo positivista promete el conocimiento libre de duda, metafísica,
valores y convicciones personales. Sin embargo, lo que entrega es renombrar como método
científico la metafísica, la moral, y las convicciones personales del científico 16.

Incluso, la falsación de una teoría o de una hipótesis en economía, la “testabílity” de T.


Hutchinson, es para los propios popperianos, como Hayek, Blaug, y el propio Hutchinson, muy
difícil. La evidencia empírica puede servir para refutar una teoría pero no para confirmarla, debido
a que, incluso “repetidas confirmaciones no tienen peso evidencial”. De esta manera la posición
filosófica de Popper rechaza cualesquiera discusión, a nivel epistemológico, de cómo la evidencia
empírica respalda a las teorías, lo que es una de las más importantes cuestiones que enfrentan los
filósofos de la ciencia.

La ciencia social imperialista Los economistas neoclásicos modernos, especialmente el premio


Nobel de economía, Gary Becker, de la universidad de Chicago, y su asociado G. Stigler, lo mismo
que Buchanan, ambos también premios Nobel, han desarrollado la pretensión de extender y de
convertir, el principio de la maximización, que está detrás de cada acción humana, en el principro
general de la conducta social.

Ahora tenemos, entonces, teorías económicas de la familia, la política, el arte, la filantropía, el


crimen, etc.

Los oponentes a esta extensión del principio de maximización, lo critican en el sentido de que es
una aplicación incorrecta a problemas de carácter no económico, y que no pueden ser explicados
por este principio. Este afán colonizador, ha hecho que Harcourt (1982) denomine a la economía,
entendida ésta como la expresión de la teoría neoclásica, como la ciencia social imperialista.

Como ejemplo de esta pretensión colonizadora, Harcourt presenta así la teoría de Becker sobre el
divorcio: "(Becker) asume que las personas se casan cuando la utilidad esperada del matrimonio es
mayor que la utilidad esperada de permanecer soltero (...)
es natural asumir también que las parejas se separan cuando la utilidad esperada de permanecer
casado cae por debajo de la utilidad esperada de divorciarse o posiblemente de volverse a casar.
Una manera de reconciliar la relativamente alta utilidad esperada de casarse al momento del
matrimonio, y la relativa baja utilidad esperada al momento de la disolución es introducir
incertidumbre, y desviaciones entre las utilidades esperadas y realizadas (...) las personas

que se separaron, presumiblemente, tenían resultados menos favorables en sus matrimonios, de


lo que ellos esperaban cuando se casaron” (18).

Nicolaides (1988) por otra parte, considera que la extensión del análisis neoclásico a los
fenómenos sociales es inevitable, y es la directa consecuencia de la consolidación de esta teoría,
como una disciplina estructurada para la investigación científica. Esta expansión es el resultado del
proceso de “armonización de los supuestos”,

que proviene de la creencia en la consistencia conducta!, basada a su vez en el principio de


continuidad, es decir que el agente siempre es racional y maximizador<20).

Neoclásicos o anticlásicos

El término neoclásico fue acuñado por Thorstein Veblen <ai>, quien afirmaba que el mejor trabajo
realizado bajo la inspiración de los clásicos era el de Marshall <22>. Por el contrario, el historiador
económico inglés, Maurice Dobb (1973), cuestiona el uso del término Neoclásico, pues considera
que no es apropiado, en el sentido de quienes continúan una tradición y la desarrollan, y por el
contrario propone el término de economía 'anti-clásica'<23>, como una denominación más acorde
con el enfoque, los métodos, y las técnicas utilizadas por los economistas marginalistas . Para
Pasinetti , el término neoclásico suena irónico, si se considera la oposición entre el enfoque de la

economía Clásica y la economía Marginalista.

En este mismo sentido, en un trabajo anterior, Maya (1990), afirmaba que la economía neoclásica
significaba profundas modifi caciones teóricas frente a la clásica , en lo que respecta a la teoría del
valor , por las dos siguientes razones:

1. Las mercancías escasas fueron tomadas como representativas de todos los bienes y el
análisis económico se centró en éstos.
2. En cambio, para Ricardo (1817), las mercancías escasas ‘‘constituyen una parte muy
pequeña de la masa de mercancías que se cambian en el mercado” (26) 27. Estas
mercancías son no reprodúceles y de dotación natural (27>. Por el contrario, la mayoría de
las mercancías. De esta manera, A Marshalla afirmaba que:
3. mite alguno (subraya G. M.), si estamos dispuestos a emplear el trabajo necesario para
obtenerlos” (28).
4. 2. Los economistas neoclásicos reclamaron que era la utilidad y no los costos de
producción, los d^Jprminantes del valor de cambio de las mercancías. De esta macera, A.
Marshall afirmaba que:
5. "La reflexión me ha llevado a la opinión de alguna manera novedosa que el valor depende
enteramente de la utilidad” Y en el mismo sentido, Walras (1938), afirmaba que: “dado que la
escasez y el valor en cambio son dos fenómenos proporcionales y concomitantes, se sigue que
la escasez es la causa del valor”
La ciencia social Imperialista

Los economistas neoclasicos modernos, especialmente el premio Nobel de economfa, Gary


Becker, de la universidad de Chicago, y su asociado G. Stigler, 10 mismo que Buchanan, ambos

tambh§n premios Nobel, han desarrollado la pretensi6n de extender y de convertir, el principio de


la ~ximizaci6n, que esta detras de cada acci6n humana, en el principfb general de la conducta
social.

Ahora tenemos, entonces, teorfas econ6micas de la familia, la poIItica, el arte, la filantropfa, el


crimen, etc.

Los oponentes a esta extensi6n del principio de maximizaci6n, 10 critican en el sentido de que es
una aplicaci6n incorrecta a problemas de caracter no econ6mico, y que no pueden ser explicados

por este principio. Este afan colonizador, ha hecho que Harcourt (1982) denomine a la economia,
entendida esta como la expresión de la teoria neoclasica, como la ciencia social imperialista.

Como ejemplo de esta pretensi6n colonizadora, Harcourt presenta asf la teoria de Becker
sObreel divorcio: "(Becker) asume que las personas se casan cuando la utilidad esperada del
matrimonio es mayor que la utilidad esperada de permanecer soltero (...)

es natural asumir tambien que las parejas se separan cuando la utilidad esperada de permanecer
casado cae por debajo de la utilidad esperada de divorciarse 0 posiblemente de volverse a casar.
Una manera de reconciliar la relativamente alta utilidad esperada de casarse al momento del
matrimonio, y la relativa baja utilidad esperada al momento de la disoluci6n es introducir
incertidumbre, y desviaciones entre las utilidades esperadas y realizadas (.,.) las personas que se
separaron, presumiblemente, tenian resultados menos favorabIes en sus matrimonios, de 10 que
ellos esperaban cuando se casaron" (19).

Nicolaides (1988) por otra parte, considera que la extensi6n del analisis neoclasico a los
fen6menos sociales es inevitable, y es la directa consecuencia'de la consolidaci6n de esta teoria,
como una disciplina estructurada para la investigaci6n cientifica. Esta expansión es el resultado del
proceso de "armonizaci6n de los supuestos",

que proviene de la creencia en la consistencia conductal, basada a su vez en el principio de


continuidad, es decir que el agente siempre es racional y maximizador

Neoclasicos o anticlasicos

EI termino neoclasico fue acuñado por Thorstein Veblen ),

quien afirmaba que el mejor trabajo realizado bajo la inspiracion de los clasicos era el de Marshall
(22). Por el contrario. el historiador economico ingles. Maurice Dobb (1973), cuestiona el uso del
termino Neoclasico, .pues considera que no es apropiado. en el sentido de quienes continuan una
tradicion y la desarrollan. y p~r el contrario propone el termino de economia 'anti-clasica' (23),
como una denominacion mas acorde con el enfoque, los metodos, y las tecnicas utilizadas por los
economistas marginaHstas. Para Pasinetti. el termino neoclasico suena ironico, sl se considera !a
oposicion entre el enfoque de la economia Clasica y la economia Marginalista.
En este mismo sentido, en un trabajo anterior, Maya (1990), afirmaba que la economia neoclaslca
significaba profundas modificaciones teoricas frente a la clasica, en 10 que respecta a la teoria

del valor, por las dos siguientes razones:

1. Las mercancias escasas fueron tomadas como representativas de todos los bienes y el
analisis economico se centro en estos.

En cambio, para Ricardo (1817), las mercancfas escasas "constituyen una parte muy pequefla de la
masa de mercancfas que se cambian en el mercado" (26). Estas mercancias son no reproducibles y
de dotaci6n natural (21). Por el contrario, la mayoria de las mercancias. De esta manera. A
Marshalla afirmaba que:

mite alguno (subraya G. M.l. si estamos dispuestos a emplear el trabajo necesario para
obtenerlos"

2. Los economistas neoclasicos reclamaron que era la utilidad y no los costos de producci6n,
los d~rminantes del valor de cambio de las mercanclas. De esta ma'nera. A. Marshall afirmaba
que:

"La reflexi6n me ha lIevado a la opini6n de alguna manera novedosa que el va.lor depende
enteramente de la utilidad" .

Y en el mismo sentido. Walras (1938), afirmaba que: "dado que la escasez y el valor en cambio son
dos fenómenos proporcionales y concomitantes. se sigue que la escasez es la causa del valor"

También podría gustarte