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Tabla de Contenido

Tabla de Contenido ................................


................................................................................................
................................................. 3
Presentación ................................
............................................................................................................................
............................ 5
Introducción. ................................
...........................................................................................................................
........................... 7
Capítulo 1. Poniéndonos en contexto .....................................................................................
..................... 9
Dimensión y complejidad de la materia prima. ................................................................
.................................. 9
Capítulo 2. El ciudadano: libre y responsable ................................................................
...................................... 12
¿Qué modelo de ciudadanía se requiere desde la perspectiva liberal?............................. 12
¿El ciudadano libre y responsable es asociativo? .............................................................
............................. 15
Capítulo 3. El partido político: Nueva era, nueva ciudadanía, nuevas maneras de conectar 18
¿Qué ha cambiado en la sociedad respecto a los partidos políticos y su rol? ................... 18
¿Qué tipo de partido político se requiere hoy para defender y ejercer la libertad? .......... 23
Capítulo 4. Estudio de caso: Vente Venezuela ................................................................
..................................... 30
¿Cuál es el valor agregado del ciudadano en la política y cómo lo podemos incentivar
desde un partido político? ................................
................................................................................................
................................. 30
Breve análisis de los estatutos del partido Vente Venezuela ............................................
................................ 32
Valores y propósito ................................
................................................................................................
....................................... 32
Quienes lo conforman ................................
................................................................................................
................................... 34
Nuevo enfoque en los mecanismos para participar: ......................................................
...................... 35
Núcleo para la participación y organización ................................................................
................................. 37
Reflexiones y sugerencias ................................
................................................................................................
.................................... 39
Innovación política para la libertad. ¿Qué podemos hacer? .............................................
................................ 39
Aportes de cuatro especialistas a la visión planteada ...........................................................
........................... 45
Vuelta a la política. José Gregorio Contreras
Contreras. ................................................................
................................. 45
Partir del aquí y el ahora. Mirla Pérez ................................................................
.............................................. 47
Julio Jiménez Gedler ................................
................................................................................................
........................................ 49
Algunas consideraciones sobre la relación del partido político con el ciudadano en los
tiempos actuales. Martha Yanira Hernández ................................................................
................................... 50
Referencias. ................................
..........................................................................................................................
.......................... 52
Resumen curricular. ................................
................................................................................................
.............................................. 55
Catalina Ramos S. ................................
................................................................................................
............................................. 55
Miguel Angel Martínez Meucci ........................................................................................
........................ 56
José Gregorio Contreras ................................
................................................................................................
.................................... 56
Mirla Pérez ................................
........................................................................................................................
........................ 56
Julio Jiménez Gedler, “juliococo
juliococo” ....................................................................................
.................... 56
Martha Hernández ................................
................................................................................................
............................................. 57
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Presentación

Muy pocos en Venezuela necesitarán que les expliquen por qué nuestro país confronta
tiempos particularmente difíciles. El peor ciclo hiperinflacionario registrado en la historia,
una brutal contracción del PIB desde el año 2013 hasta nuestros días, 6 millones (alrededor
del 20% de la población) viviendo fuera del territorio nacional, una infraestructura en
estado deplorable, así como bienes y servicios pú públicos
blicos que brillan por su ausencia, son
realidades que hablan por sí solas.
Sobre las razones de esta debacle nacional se ha escrito y se seguirá escribiendo mucho.
Probablemente nunca se alcancen amplios consensos en torno a las causas y razones del
actuall fracaso nacional, y será tarea de varias generaciones seguir profundizando en el
intento de comprender cómo fue posible un colapso de semejantes dimensiones.
Ahora bien, lo que no puede dejarse para después, lo que reclama nuestra máxima atención
aquí y ahora, es pensar en los posibles cursos de acción para revertir tan calamitosa
situación. Los venezolanos demandan soluciones, y las requieren tan pronto como sea
posible. Obviamente, se trata de una tarea nada fácil de acometer, dadas las dimensiones de
loss retos que se enfrentan. Y si bien el debate está abierto en torno a los cursos de acción a
seguir, pocas dudas deberíamos tener en torno a la necesidad de abrir nuevos caminos, de
renovar nuestras formas de hacer política; en definitiva, de innovar polí
políticamente.
ticamente.
Y de innovación política se trata, precisamente, el ensayo que nos ofrece Catalina Ramos,
bióloga, profesora universitaria y ciudadana con un nutrido historial personal en la lucha
por la recuperación de la democracia. Dedicada en diversos ámbi
ámbitos
tos al estudio y promoción
de la innovación, su labor en el ámbito de la política también ha estado comprometida con
esta idea, muy particularmente a través de su actividad durante los últimos años en la
Coordinación de Asociaciones Ciudadanas del partido Vente Venezuela.
En el presente texto, Ramos ofrece una caracterización general de los problemas que
enfrenta la sociedad venezolana a la hora de reconstruirse como democracia liberal, en
medio de una tragedia nacional de grandes proporciones y de un conte
contexto
xto mundial en el que
las democracias del mundo vienen experimentando severas crisis de representación. La
autora llama la atención sobre la arraigada presencia de una cultura política estatista y
rentista en nuestro país, la cual concentra toda idea de pa participación
rticipación popular en la

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

institución del voto pero que no parece mostrarse tan consciente de la necesidad de un
sólido estado de derecho, capaz de resguardar los derechos de todos, y que sobre todo
parece dejar en segundo lugar el papel fundamental que la asociación autónoma de los
ciudadanos desempeña dentro de toda democracia moderna.
De ahí la necesidad de innovar en política, y sobre todo, de innovar en el seno de los
partidos políticos en Venezuela, en el entendido de que son éstas las organizaciones
llamadas a articular la heterogénea voluntad ciudadana en iniciativas capaces de incidir en
las esferas del poder y del Estado. Para ello, y según nos explica Ramos, los fundadores y
afiliados al partido Vente Venezuela se han propuesto la conformación de una organización
política que procura dotarse de una fisonomía particular, centrada en la promoción y
canalización de las demandas de la sociedad civil organizada.
La autora nos explica cómo, en vez de concentrar la relación entre partido político y
ciudadano
ano únicamente en el momento del voto, en el suministro de legitimidad al candidato
por parte del ciudadano, en Vente Venezuela se concibe al partido como una organización
en la que los ciudadanos, organizados desde las diversas asociaciones ciudadanas
autónomas,
ónomas, trabajan con el partido en la construcción y promoción de propuestas políticas,
haciendo así del partido político un vehículo para la promoción directa de las propuestas
articuladas desde la sociedad civil.
El trabajo está aún todo por hacerse. Los retos son descomunales. Pero desde iniciativas de
innovación política como las que Ramos describe para el caso de Vente Venezuela, existe
la esperanza de que el trabajo mancomunado de los ciudadanos venezolanos vaya abriendo
los caminos necesarios, no sól
sólo
o para la recuperación de la democracia en nuestro país, sino
sobre todo para sentar las bases de un país renovado, capaz de aprender de sus errores y
falencias en el pasado, y preparado para afrontar los retos que el extraordinariamente
complejo siglo XXI viene planteando en todas las latitudes. Pensar en ello es tarea
ineludible para nuestra sociedad, y el trabajo de Ramos es un valioso aporte en esa
dirección.

Miguel Ángel Martínez Meucci

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Introducción1.

Estamos viviendo tiempos de grandes cambios en todos los ámbitos de nuestras vidas,
muchos de los cuales habían venido desarrollándose tímidamente, y su velocidad de
aparición ha estado marcada por el sistema político – económico con el cual cada país o
región del mundo los estaba asimilando
asimilando.. La globalización, internet y las tecnologías han
eliminado las fronteras para lo intangible, lo cual podría constituirse en una oportunidad o
generar una gran crisis, como quedó en evidencia con la aparición de la pandemia de la
Covid-19 en 2020. La dinámica
mica cambió drásticamente en todos los sectores de la vida de
las sociedades, acelerando en muchos casos algunos de los cambios que en forma incipiente
ya habían arrancado.
A estas alturas el lector se estará preguntando, ¿y qué tiene que ver lo descrito con
c el título
de este ensayo? La respuesta es que tiene muchísimo que ver, pues detrás de todo proceso
social, económico y político está el ciudadano que lo vive, lo sufre o que aprovecha sus
oportunidades. Comprender estos grandes cambios no puede excluir el ámbito de lo
político, al contrario, justamente desde el enfoque que implica al ciudadano y su rol en la
construcción de una sociedad basada en valores liberales y republicanos.
En ese sentido, la finalidad de este ensayo es presentar nuestro planteamiento
ento en cuanto
a la práctica de la innovación política vista desde la perspectiva de un partido político
y su conexión efectiva con la ciudadanía
ciudadanía,, como uno de los requisitos imprescindibles para
una transformación real y profunda del sistema político en Ve
Venezuela. Si bien es importante
hacer un concienzudo análisis de lo que sucede, lo es quizá mucho más comenzar a definir
alternativas y vías para implementar los cambios requeridos. Esa es nuestra intención.
Partimos de la idea de que el mejor régimen políticoico para Venezuela es una República
Liberal,, y en ella, como hemos mencionado, el rol ejercido por la ciudadanía es clave. En
consecuencia, el conocimiento y fomento de las cualidades ciudadanas requeridas,
constituyen un aspecto que no debe dejarse al aza
azar.
r. Es necesario comprenderlo desde la

1
Este ensayo es producto de la investigación realizada a partir de otro ensayo menos detallado realizado por quien
suscribe, en julio de 2021, en el marco de un programa de formación cursado en la Universidad de la Innovación (U-
(U
Innova), organizado por la Fundación Ciudadano Austral, Somos Innovación y Vente Formación, y que fue reconocido y
premiado como el mejor ensayo en dicho curso.

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

perspectiva del diseño de incentivos adecuados para fomentar dicha participación


ciudadana en el hecho público, su conexión proactiva con lo político, lo que finalmente se
constituiría en un atributo que garantice la ssostenibilidad
ostenibilidad del sistema en el tiempo.
Por otra parte, no presentamos la innovación política como la simple adopción
adopci de nuevas
tecnologías, o de campañas en redes sociales, votaciones electrónicas, o simplemente una
nueva narrativa, sino como la búsqueda constante de formas alternativas de interacción,
vinculación, debate y toma de decisiones en las que se involucra a la ciudadanía, tanto a lo
interno de la instancia partidista, como incluso aquella que no tiene iintención
ntención de formar
parte del partido político. De lo que se trata es del diseño e implementación de nuevos
procesos de construcción de agendas en común, redes de trabajo conjunto, de acción
colectiva y de relaciones de poder y toma de decisiones.
Para abordar
rdar la investigación y análisis que dio origen a este ensayo, asumimos la
innovación política como un modo de actuación cónsono con el planteamiento liberal del
rol del ciudadano en la República, de su asociatividad, y de sus procesos de interacción
con ell hecho público, sea o no, a través de un partido político
político. Esperamos que este ensayo
les sea de interés y utilidad,, y contribuya a desencadenar el debate de ideas en este ámbito.
ámbito

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Capítulo 1. Poniéndonos en contexto

Dimensión y complejidad de la materia prima.


Comencé a prestarle atención a cómo funcionaba la “sociedad civil organizada” venezolana
en el año 2002, cuando tuve la oportunidad de ser gerente de operaciones de un proyecto
financiado por el Banco Mundial en el cual, a través de una alia
alianza
nza entre el sector privado,
algunas organizaciones líderes de la sociedad civil y el sector público, se prestaban
diferentes servicios a agrupaciones sociales y ciudadanas a través de un portal web.
Nuestros potenciales clientes para este trabajo eran las 32.000 organizaciones registradas en
dicho portal en ese momento.
En este punto queremos establecer que tomamos como válida la definición de sociedad
civil que Ibarra, citado por Contreras2, nos presenta:
conjunto de asociaciones, grupos, organizaciones, movimientos, etc. que se unen, o
de hecho, actúan unidos, para lograr la satisfacción de diversos intereses del
conjunto de sus miembros o intereses colectivos situados más allá de los miembros
del grupo. Estos
stos intereses pueden ser de todo orden: religiosos, culturales, sociales
de todo tipo, asistenciales, políticos, laborales, profesionales, de ocio, etc.,
pertenece a dicha red asociativa definida como sociedad civil cualquier grupo que
tenga alguno de los intereses señalados, siempre que en el ejercicio de su actividad
implique el establecimiento de relaciones tanto con otros grupos de la sociedad
civil como con las instituciones políticas. También se incluyen en esta descripción
aquellos grupos que se con
constituyen
stituyen con el objetivo de defenderse de aquellos efectos
injustos provenientes de las relaciones con el mercado o de reformar o equilibrar
su lógica de actuación y su protagonismo en la vida económica
De acuerdo con informes de la época provenientes del Banco Mundial y del Centro de
Investigaciones Sociales CISOR, durante el período democrático que precedió al
a chavismo,
las organizaciones de sociedad civil que existían eran fundamentalmente de naturaleza

2
Contreras, José Gregorio. Sociedad Civil y Ciudadanía. El reto de la resistencia democrática en Venezuela.
Venezuela Revista de
la Facultad de Ciencias Políticas y Jurídicas UCV. N° 136, pp. 17
17-33. 2012

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

gremial y reivindicativa. Entre los años 50 y 80, los interlocutores sociales del Estado
provenían principalmente del sector productivo, empresarial y sindical, en cierto modo
porque el tipo de organización y funciones a partir de las que se configuraron dichas
instituciones estuvo definido por la misma dinámica de los partidos políticos que existían al
inicio de la república civil, incluso autores como Salamanca3, afirman que la concepción
clasista y gremialista proveniente de la ideología socialista predominante en los principales
partidos políticos de la época terminó encapsulando el activismo social.
Para entender mejor lo anterior, referido al perfil de sociedad civil y de cultura política que
se fue moldeando a lo largo del tiempo en Venezuela, es relevante ir un poco más atrás en
la historia, como lo han hecho en forma magistral, con gran profundidad y detalles Eugenio
Guerrero y Luis Alfonso Herrera Orellana en su libro4 La cultura política del fracaso, en el
cual nos van mostrando cómo nuestra nación, que proviene de fuertes raíces autocráticas
heredadas del personalismo y el caudillismo previos a la generación del 28, y que
posteriormente fue mutando en centralismo y estatismo; con la llegada del ciclo
democrático post 1958 convirtió la cultura política y su sistema de partidos de masas en
maquinarias electorales, profundamente relacionadas con el clientelismo y el
asistencialismo estatista que imperó. De este aspecto hablaremos un poco más adelante.
Hoy día sabemos que una buena parte de la aparición de nuevas asociaciones ciudadanas en
las últimas dos décadas ha sido una respuesta de la sociedad civil a la acción partidista de
cooptar dichas organizaciones sociales, buscando aquellas, a partir de nuevas
organizaciones, generar una mayor legitimidad de la que tenían las preestablecidas y los
partidos políticos existentes.
A partir de la década de los 80, con el auge que las Cumbres de Naciones Unidas
comenzaron a darle a la organización social como estrategia para el desarrollo, amén del
rechazo a la injerencia partidista previamente mencionado, se generó en Venezuela un
importante crecimiento en el número de agrupaciones ciudadanas especializadas, y es así
que para el año 2002 se cuantificaron más de 32.000 organizaciones de sociedad civil
formalmente registradas, como mencionamos anteriormente. En esa misma época se podían
identificar alrededor de 25 redes de organizaciones de sociedad civil, que conjugaban
agrupaciones dentro del ámbito de la cultura, salud, educación, ambiente, infancia, género,
derechos humanos, vivienda, entre otros.
Desde allí a la fecha de edición de este ensayo, no encontramos ningún estudio con data
documentada sólida que muestre cuantitativamente cuál es la dimensión precisa actual de
la sociedad civil organizada en Venezuela. Sin embargo, de acuerdo a la efervescente y
polarizada dinámica política que se produjo en el país a partir del año 2002, podemos
distinguir dos grandes corrientes que nos permiten afirmar que en los últimos 9 años ha
habido un fuerte crecimiento en cuanto a la aparición de nuevas organizaciones ciudadanas,
no así de la conexión necesaria para producir cohesión y tejido social.
Por una parte, quienes desde 1999 ocupan el gobierno en Venezuela, incentivaron el
registro y creación de numerosos grupos ciudadanos que obedecían a un fin técnico-político

3
Salamanca, Luis. La sociedad civil venezolana en dos tiempos: 1972-2002. Politeia, núm. 30, enero-junio, 2003, pp.
119-156. Universidad Central de Venezuela. Caracas, Venezuela. Disponible en:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=170033588012
4
Guerrero, Eugenio; Herrera Orellana, Luis Alfonso. La cultura política del fracaso. Editorial Galipán, Caracas,
Venezuela. 2018

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

y de control con orientación clientelar, como los círculos bolivarianos, las cooperativas,
coope las
mesas técnicas y consejos comunitarios de aagua, salud y comités de tierras
ierras urbanas. Más
tarde, se agregaron a lo anterior los bbancos comunales, las mesas técnicas de
telecomunicaciones, de energía, los cconsejos comunales y las comunas omunas. Estas
organizaciones recibían
ibían financiamiento del Estado, es decir, mantuvieron el patrón
asistencialista y estatista que se ha mencionado.
Así mismo, en el estudio de Salamanca5 se describe en forma más detallada el resurgir de la
ciudadanía organizada a partir ddel
el año 2000, afirmando que la misma se dio como reacción
ante la falta de oposición política activa al gobierno de Chávez Frías, surgiendo así una
corriente ciudadana con preocupaciones públicas, atenta a sus derechos y crecientemente
consciente de sus responsabilidades.
ponsabilidades.
Este grupo de asociaciones civiles se constituirían como la contraparte de las promovidas
por el gobierno en cuestión, todo esto pesar del aumento desproporcionado de controles y
filtros para impedir la formalización y financiamiento de didichas
chas nuevas organizaciones,
fundaciones y/o asociaciones civiles especializadas. Así mismo, este ste gran número de
nuevas agrupaciones ciudadanas y movimientos sociales abordaban temas inherentes a la
resistencia de la ciudadanía, tanto desde el punto de vist vistaa de áreas técnicas hiper
específicas, como en forma muy destacada, de denuncia y defensa de los derechos
humanos.
Como se mencionó anteriormente, nno encontramos data formal que nos permita obtener
datos cuantitativos del orden de magnitud en que han crecido las asociaciones ciudadanas
en los últimos 22 años, sin embargo, podemos inferir de lo descrito hasta ahora, así como
de la evidencia comunicacional pública y notoria que sus actividades han ido mostrando,
que dicha cifra se ha multiplicado, tanto en las que han logrado formalizarse,
formalizarse como en un
nutrido grupo de organizaciones que, sin formalización institucional, llevan años
funcionando igualmente en forma pública y notoria.
Esta es la dimensión de la materia prima disponible para abordar el planteamiento del
de
presente ensayo.

5
Salamanca, Luis. La sociedad civil venezolana en dos tiempos: 1972
1972-2002.. Politeia, núm. 30, enero-junio,
enero 2003, pp.
119-156.
156. Universidad Central de Venezuela. Caracas, Venezuela. Disponible en:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=170033588012

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Capítulo 2. El ciudadano: libre y responsable

¿Qué modelo de ciudadanía se requiere desde la perspectiva liberal


iberal?
Para ubicar un marco general de referencia ccomenzaremos compartiendo las definiciones
de algunos términos que discutiremos en este capítulo
capítulo,, a partir del diccionario de la Real
6
Academia de la Lengua

Ciudadano:: Natural o vecino de una ciudad. Perteneciente o relativo a la ciudad o


a los ciudadanos. Persona considerada como miembro activo de un Estado, titular
de derechos políticos y sometido a sus leyes. Hombre bueno.. Habitante libre de las
ciudades antiguas.
Súbdito: Sujeto a la autoridad de un superior con obligación de obedecerle.
Natural o ciudadano de un país en cuanto sujeto a la
lass autoridades políticas de este.

Habitante: Que habita. Cada una de las personas que constituye la población de
un barrio, ciudad, provincia o nación.

Ciudadanía: cualidad y derecho de ciudadano. Conjunto de ciudadanos de un


pueblo o nación. Comportamiento propio de un buen ciudadano.
Las definiciones de ciudadano y ciudadanía han sido discutidas y analizadas por
innumerables autores, de distintas áreas del conocim
conocimiento:
iento: sociología, filosofía, historia,
antropología, derecho, entre otras, cada una enfocándose en un interés particular para sus
áreas.
Adela Cortina7 nos muestraa las diferentes aristas que configurarían el concepto de
ciudadanía a efectos de una nación basada en principios liberales y republicanos. Cortina
nos aclara que la ciudadanía así definida
da va mucho más allá de compartir un territorio, una
historia, una nacionalidad, tradiciones y cultura; es más bien el sentimiento de adhesión a
una determinada identidad lo que contribuye con ese concepto. Laa libre adhesión de los
individuos a través del ejercicio de la civilidad, organizándose de tal modo que se propicie
6
Real Academia de la Lengua.. Actualización 2021. Disponible en: https://dle.rae.es/
7
Cortina, Adela. Ciudadanos del mundo. Hacia una teoría de la ciudadanía
ciudadanía. Alianza Editorial. 2001

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

un sentimiento de pertenencia hacia grupos de sociedad civil, libres y espontáneos, a través


de los cuales dichos individuos aprenden a participar e interesarse por lo público, termina
configurando, como asume Cortina en su libro, la auténtica escuela de ciudadanía.
A efectos de este ensayo, asumimos que en nuestro país ambas definiciones –ciudadano y
ciudadanía- llevan implícitos dos factores que determinan los hitos referenciales en la
concepción que asumiremos como propia y en el análisis que haremos. Por una parte, el
contexto de origen del cual partimos: el hecho de vivir en Venezuela luego de 23 años de
régimen de “socialismo del siglo XXI”, y todo lo que ello ha significado para quienes
hemos estamos aquí. En el otro extremo se ubica el punto hacia el que queremos llegar: la
instauración de una República Liberal en Venezuela.
Si bien coincidimos con el planteamiento que hace el doctor José Gregorio Contreras8,
cuando afirma que: ser ciudadano es ser sujeto de derechos pero, en estos tiempos de
globalización y multiculturalidad, la ciudadanía exige nuevos perfiles y contenidos más
precisos que implican una profundización del concepto, una más consecuente extensión de
su alcance y una mayor complejidad, en este ensayo proponemos incluir en forma explícita
la cualidad de la responsabilidad como parte inherente del modelo de ciudadano que
buscamos, cualidad imprescindible para el éxito del sistema político que estamos
proponiendo para Venezuela, ya que consideramos que el ejercicio de la misma está
intrínsecamente vinculado al ejercicio y disfrute de la libertad, valor principal y eje para el
anclaje de una República Liberal; razón por la cual se convirtió en el principal centro de
ataque por diseño por parte del régimen chavista que lleva 23 años en el poder, como nos
afirma Mauricio Rojas9:
la destrucción de la sociedad civil y la atomización del individuo son, sin duda, las
bases del Estado fuerte. El debilitamiento o destrucción de todas esas “estructuras
intermedias” donde el individuo plasma sus relaciones sociales lo deja, para
resolver sus necesidades vitales, absolutamente dependiente del Estado. En suma,
mientras más débil es la sociedad civil, más fuerte es el Estado.
Algunos autores afirman que la libertad10 “es una propiedad de la voluntad por medio de la
cual las personas tienen la capacidad de elegir y actuar”. Por otra parte, el filósofo español
Fernando Savater11, nos plantea en su obra Ética para Amador:
No somos libres de elegir lo que nos pasa (haber nacido tal día, de tales padres y
en tal país, padecer cáncer o ser atropellado por un coche, ser guapos o feos...),
sino libres de responder a lo que nos pasa de tal o cual modo (obedecer,
rebelarnos, ser prudentes o temerarios, vengativos o resignados...)
Por lo tanto, ejercemos la libertad en la medida que somos conscientes de nuestros actos y
de sus posibles consecuencias, haciéndonos responsables de las mismas. Con lo anterior
hemos establecido la clara relación entre libertad y responsabilidad, llevándonos entonces
a plantear lo que constituye el eje principal de nuestro análisis a efectos de esta publicación,
el concepto de ciudadanía libre y responsable, que contrasta en forma determinante con la

8
Contreras, José Gregorio. Sociedad Civil y Ciudadanía. El reto de la resistencia democrática en Venezuela. Revista de
la Facultad de Ciencias Políticas y Jurídicas UCV. N° 136, pp. 17-33. 2012.
9
Rojas, Mauricio. La libertad y sus enemigos. Fundación Progreso. 2013
10
IIDH – CELS. Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos. Comisión de la Unión Europea – Amnistía
Internacional, pp. 64. 1999.
11
Savater, Fernando. Etica para Amador. Editorial Ariel. 2013

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

tipología de súbdito que en los últimos 23 años se ha exacerbado en nuestro país a partir de
los incentivos que se han generado desde el sistema imperante, como se describe a
continuación.
Desde que el llamado socialismo del siglo XXI se instaló en Venezuela, se sumergió a la
sociedad en una dinámica de dependencia y ausencia de autonomía e individualidad, en
beneficio supuesto de los “derechos” de una masa sumisa aparentemente sin personalidad
ni voluntad propia. La creación de “misiones” en casi todos los aspectos de la vida
ciudadana, como programas de supuesta asistencia social directa, pero previo requisito de
registro en sistemas de control gubernamental, incrementó la dependencia del individuo a
cumplir exigencias ideológicas para ser sujeto de determinado beneficio supuesto.
Esa estrategia buscó como eje principal, la pérdida por parte del individuo del sentido de
capacidad propia, el valor del trabajo, el mérito, la identidad ciudadana, y la libertad de
pensamiento y de acción, y fue posible potenciarla mientras el régimen chavista se apalancó
en la bonanza provista por el alto precio del petróleo, la explotación de la renta petrolera y
su aprovechamiento para manipular las demandas y necesidades de la sociedad. Pero como
sucede con cualquier modelo extractivista, llega el momento en el que la renta se agota, y
así fue como Venezuela pasó de una bonanza relativa en los años 2005-2009, a una
profunda crisis humanitaria compleja en la que las condiciones de sometimiento se hicieron
mucho más claras y brutales. Así configurado e inmerso en dicha crisis económica y
humanitaria, el ciudadano se encontró muy propenso a someterse a estos sistemas
populistas que explotan al Estado, que corrompen el sistema, que roban, y que someten a
controles y dádivas a toda una población,
Ya lo decía Víctor Frankl12, en su libro El hombre en busca de sentido, al describir
detalladamente el proceso con el que recibían a los prisioneros en los campos de
concentración, despojándolos de inmediato de su identidad anterior, y convirtiéndolos en
un número. Así, eran arrancados de las sensaciones a las que estaban acostumbrados, y la
maldad alrededor de ellos no los inmutaba más. Esa falta de emociones construía una
autodefensa para sobrevivir, un caparazón imprescindible para soportar la existencia sin el
mínimo de dignidad. Ante el dolor, la pérdida, y la anulación individual, los prisioneros
terminaban perdiendo toda ilusión de ser libres rápidamente y comprendían que lo único
que poseían era su cuerpo y su existencia.
Sin embargo, el autor con su propio testimonio de vida nos muestra en su libro que al
hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: la última de las libertades humanas: la
elección de la actitud personal que debe afrontar frente al destino, para decidir su
propio camino, que es la convicción que nos motiva para realizar este ensayo, y sugerir
acciones en ese sentido, intentando contribuir con la ruta que incentive y fortalezca la
concepción de ciudadanía libre y responsable necesaria.
Una República Liberal requiere una nueva conciencia política de los ciudadanos, en la cual
el individuo se asume a sí mismo como centro y eje del desarrollo, con un Estado mínimo a
su servicio, que se ocupa de lo esencial como seguridad y justicia, y que propicia el
ambiente de confianza y oportunidades necesario para que sea ese ciudadano el que genere,
a partir de su esfuerzo propio, la prosperidad que tendrá el país.

12
Frankl, Víctor. El hombre en busca de sentido. Editorial Herder. 2004

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Ahora bien, hasta ahora hemos enunciado a nuestro ciudadano como libre y responsable.
Desde la perspectiva de innovación política que plantea este ensayo, un eje estratégico de
trabajo tiene que ser la comprensión de este concepto de ciudadano y su relación con lo
público, arraigada en principios y valores, que fomente el libre pensamiento, la autonomía
intelectual, el juicio crítico y responsable que permita una correcta fiscalización ciudadana,
con la cual se pueda transcender la indiferencia y el desgano hacia lo público, que no espere
que ningún gobierno le resuelva sus problemas sino que, al contrario, le exija que sólo
garantice el orden necesario para desarrollarse libremente. Como hemos mencionado ya,
consideramos esta primera tarea como imprescindible y estratégica, si tenemos en cuenta la
fuerte incidencia que el denominado socialismo del siglo XXI ha tenido en la conformación
de una sociedad de súbditos en Venezuela.
Este nuevo paradigma13 concibe al ciudadano libre y responsable como capaz de, además
de conocer, reclamar y ejercer los derechos que su dignidad personal y el Estado de
Derecho le confieren, estar plenamente consciente de sus responsabilidades frente a su
entorno, y del costo que implica tomar sus propias decisiones. Desarrolla con autonomía
sus proyectos de vida, impulsa propuestas políticas y ciudadanas propias, es proactivo y
promueve el debate para buscar en el espectro social y político las oportunidades que más
se aproximen a lo que él quiere desarrollar. Además, tiene la iniciativa de constituirse en
organización, con capacidad de cuestionar, emitir opiniones y posiciones propias; exigir
respuestas más allá de lugares comunes, con respeto por la opinión e ideas de los otros, en
un ambiente en el que se valora su inteligencia y su dignidad.
En esa medida, aportará para la configuración de la sociedad sólida, libre y próspera que
anhelamos, y la ciudad en la cual lleve adelante esos proyectos. En resumen, libertad y
ciudadanía están íntimamente ligadas, porque el ejercicio de la ciudadanía responsable es
de alguna manera, el ejercicio de la libertad. El súbdito, en tanto sometido por el poder,
carece de estos valores.
Es por todo lo anterior, que consideramos que el ejercicio de la ciudadanía en Venezuela
debe concebirse como fundacional. Si diseñamos ciudades, espacios públicos y políticas
públicas ajenos a esta realidad actual y a cómo es necesario transformarla, estaremos
fomentando lugares para habitantes, pero no lograremos concretar el cambio imprescindible
de sistema, y más temprano que tarde nos encontraremos de nuevo en una crisis equivalente
a la actual. Por eso el trabajo debe ser al revés, fortalecer primero el concepto de la
ciudadanía libre y responsable para que desde allí se generen las interacciones, el nuevo
diseño institucional, y en consecuencia las ciudades en las que se ejercerá esa ciudadanía y
esa libertad.

¿El ciudadano libre y responsable es asociativo?


Hace casi 200 años, cuando Tocqueville pudo vivir in situ la experiencia de la
democracia estadounidense, lo que más le llamó la atención fue el espíritu
asociativo de los ciudadanos de ese país. A diferencia de los europeos,
acostumbrados a verse a sí mismos como súbditos (esto es, sujetos a alguna fuerza
superior y soberana), los americanos verdaderamente eran y se sentían libres.

13
Ramos, Catalina. ¿Súbditos o ciudadanos? La ruptura imprescindible. Disponible en:
https://www.ventevenezuela.org/2020/05/29/retos-de-la-venezuela-liberal-segunda-entrega-subditos-o-ciudadanos-la-
ruptura-imprescindible-autor-catalina-ramos-documento/. 2020

15
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Constituían de hecho un cuerpo político soberano acostumbrado a resolver por sí


mismo sus propios problemas, y por ende no esperaba que ningún gobierno
cumpliera por ellos esa función: sólo le demandaban la preservación del orden
necesario para desarrollarse libremente14
El ser humano es individual, pero es un ser social, por lo tanto tiene propensión a la
asociación con otros. De hecho, es una manera de confirmarse a sí mismo, pues ratifica su
existencia en relación a los otros. La identidad individual es un constructo social en el cual
intervienen las experiencias del individuo y los discursos públicos que las interpretan, y
está definida por las valoraciones de aquellos que la asumen y defienden en el marco de
unos círculos de reconocimiento que les dan sentido. Es por ello, que otro aspecto
importante que consideramos en nuestro planteamiento es la generación de orientación e
incentivos para la existencia de asociatividad ciudadana, que abone hacia la causa liberal
que perseguimos.
En su tesis doctoral, la profesora Lambra Sáinz Vidal15, hace un planteamiento que
consideramos contribuye con las ideas que estamos desarrollando:
desde el paradigma liberal, las asociaciones voluntarias se celebran porque
constituyen el medio para la realización personal. El objetivo de las asociaciones,
defendidas por los liberales, consiste en reunir en su seno a individuos con
intereses similares, y por consiguiente son la traducción de una cultura marcada
por el individualismo y por la idea de la realización personal; por ende, las
asociaciones son enclaves individualistas
Esto se reafirma si asumimos una de las conclusiones de la investigación realizada por
SINERGIA16 publicada en 2010: existe en el ciudadano común y en las organizaciones de
todas las orientaciones una voluntad de convivir reconociendo al otro como parte de un
país plural. Todo lo anterior nos lleva a destacar el valor de la libre iniciativa ciudadana y
el poder que genera su organización; en ese sentido nuestro objetivo primordial es destacar
y caracterizar esa fuerza que constituye la libre asociación ciudadana, conocer las
motivaciones que generan dicha asociatividad, y trabajar en torno a los incentivos
adecuados, para construir entonces una verdadera República Liberal.
Este objetivo tiene doble arista: por una parte, en el plano moral, potenciar en los
ciudadanos (especialmente en aquellos que han sido más afectados por la crisis política y
social y que son más propensos a la ayuda estatal o partidista) la idea de que ellos son los
únicos sujetos y protagonistas de su propio libre desarrollo; y por otra parte, en un plano
más práctico, proporcionar herramientas que faciliten la articulación social y política de sus
inquietudes y propuestas.
Esta práctica incluye desde la propia orientación respecto a su asociatividad, como su
incidencia formal en la esfera del poder y de la administración pública a través de la
interacción, articulación y construcción conjunta de propuestas de políticas públicas que los

14
Martínez Meucci, Miguel Angel. Documento de trabajo elaborado para la Coordinación de Asociaciones
Ciudadanas de Vente Venezuela. 2018
15
Saínz Vidal, Lambra. Tocqueville: la sociedad civil y la democracia. Tesis doctoral, Universitat Autónoma de
Barcelona. Facultad de Filosofía. Septiembre 2014. pp. 320
16
Sinergia. Tejiendo los hilos de la convivencia ciudadana. Publicación de Sinergia, Agosto 2010

16
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

liderazgos políticos llevarían a la concreción desde un puesto de poder


poder. Tal como expresa
Dworak17:
debemos reconocer que todos tenemos intereses parciales y para impulsarlos
debemos
mos aliarnos o negociar con otros en un entorno donde no hay amigos o
enemigos permanentes. De esa forma no existen reformas permanentes o puntos de
llegada. Un ciudadano, por todo lo anterior, es aquel que se empodera, se entera,
protege sus intereses y aall ejercer sus derechos y obligaciones se reinventa siempre
en el ejercicio de su libertad
Por todo lo planteado en este capítulo, pero especialmente porque estamos convencidos de
que sin un firme asidero en la ciudadanía libre y responsable junto a una sólida
sól y sana
sociedad civil organizada, será imposible alcanzar la República Liberal que planteamos y
sostenerla en el tiempo, lo cual representa un desafío importante e imprescindible para los
liberales. Ya nos decía Mauricio Rojas18 en su libro La libertad y sus enemigos:
enemigos
el ser humano se mueve propulsado por dos fuerzas que parecen repelerse la una a
la otra: la necesidad de ser libres y la necesidad de pertenecer a una comunidad.
La búsqueda de la libertad ha sido siempre el lado fuerte del liberalismo, pero a
menudo se nos ha quedado en el tintero la respuesta a la búsqueda de la
comunidad. Con ello le hemos hecho un flaco favor a nuestras ideas y le hemos
dejado el terreno abonado a los socialistas de todo pelaje para que hagan su oferta
de seguridad, pertenencia y comunid
comunidadad al precio de una subordinación creciente a
sus designios. Pero eso no tiene por qué ser así. Si sabemos hermanar libertad y
pertenencia, individuo y comunidad, podremos crear una propuesta de sociedad
capaz de romper el desconcierto que hoy corroe gran parte de nuestra sociedad.
sociedad
En este ensayo buscamos avisorar y plantear algunos elementos que nos permitan construir
ese equilibrio que plantea Rojas, desde la perspectiva de un partido político.

17
Dworak Camargo, Fernando.. El ciudadano y su papel en una democracia liberal.
liberal Disponible en:
https://relial.org/biblioteca/categoria/ensayos
oteca/categoria/ensayos-liberales
18
Rojas, Mauricio. La libertad y sus enemigos
enemigos. Fundación Progreso. 2013

17
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Capítulo 3. El partido político: Nueva era, nueva ciu


ciudadanía,
dadanía, nuevas
maneras de conectar

¿Qué ha cambiado en la sociedad respecto a los partidos políticos y su rol?


Antes de la llegada de la pandemia del Covid
Covid-19,
19, ya se comenzaba a ver un declive en la
aceptación y conexión real de la ciudadanía respecto a los partidos políticos clásicos en
todo el mundo, y nuestra región no ha escapado de ello. Recogemos, de un detallado trabajo
de la doctora en Ciencias Políticas de la Universidad de Salamanca, Leticia Ruíz
Rodríguez19 lo siguiente:
Los partidos políticos de América Latina sufren un gran descrédito. En muchos
países de la región la confianza depositada en ellos se encuentra en niveles muy
bajos. Entre otras cuestiones, los ciudadanos desaprueban la labor de los partidos
políticos en materia de representació
representación
n y la opacidad de algunas de sus decisiones.
Esta crisis de credibilidad es de larga data y, salvo un poco esperable cambio de
rumbo, se podría considerar un rasgo estructural de la dinámica partidista de gran
parte de la región.
os, según datos de LAPOP20, que las instituciones con el menor
En otro trabajo encontramos,
nivel de confianza en América Latina, con un 28.2%, son los partidos políticos, en relación
con el poder ejecutivo (42.8%) y el congreso (39.4%), aunque en términos generales las
tres instituciones
nes cayeron al menos 12 puntos en promedio, respecto a las mediciones
realizadas en años anteriores.
Sumado a lo anterior, la incidencia de la pandemia generó una desvinculación aún mayor,
desde la perspectiva de la clásica relación presencial del líder y activista político con la
ciudadanía de su entorno. En una publicación reciente de la revista digital Diálogo
Político21 se presentan resultados de la disminución de la confianza ciudadana en la región

19
Ruiz Rodríguez, L.M.: “LosLos sistemas de partidos de América Latina frente al espejo: elementos de contexto para las
próximas citas electorales en la región”,
”, Documentos de Trabajo nº 43 (2ª época), 2021. Madrid, Fundación Carolina.
20
Zechmeister, Elizabeth J., y Noam Lupu (Eds.). El pulso de la democracia.. Nashville, TN: LAPOP. 2019
21
Schiumerini, Luis y Lupu, Noam. Caída libre: la fuerte erosión de la confianza en la democracia latinoamericana.
latinoamericana
Revista Diálogo Político n° 8. Fundación Konrad Adenauer. Disponible en: https://dialogopolitico.org/debates/caida-libre-
https://dialogopolitico.org/debates/caida
la-fuerte-erosion-de-la-confianza-en-la-democracia
democracia-latinoamericana/ 2021

18
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

latinoamericana, ya no solamente en relación a los partidos políticos, sino respecto a la


propia democracia.
Según datos presentados por Schiumerini y Lupu en el referido estudio de fines de 2021, en
13 de los 20 países incluidos en la muestra del Barómetro de las Américas, más de la mitad
de los encuestados reportan no estar satisfechos con la democracia. Al ver estas respuestas,
no podemos dejar de conectarlas con el período en el que ese análisis se ha realizado, en el
cual habiendo transcurrido más de dos años de incidencia de la pandemia del Covid-19,
podríamos pensar que esta respuesta involucra también la percepción bastante común en
algunos de nuestros países, del uso de la pandemia como mecanismo de control social. En
cualquier caso, es un dato preocupante.
Como una primera respuesta a las limitaciones impuestas por las medidas implementadas
para el control de la pandemia, la mayoría de los partidos políticos aceleraron algunos
mecanismos de digitalización y virtualización de dicha relación, mecanismos que se habían
comenzado a implementar tímidamente para difundir mensajes y conectar, en especial en
campañas electorales, y que cobró mucha más relevancia a partir de 2020.
Sin embargo, desde nuestra perspectiva la raíz de esa desvinculación y pérdida de confianza
entre el ciudadano y el partido político es de otra naturaleza y data de más tiempo atrás, por
lo que no se resuelve exclusivamente con la incorporación de medios digitales como
mecanismo para afiliarse, participar en decisiones internas o conocer los mensajes del
liderazgo.
Es un tema mucho más profundo, que no solamente ha venido sucediéndose en
Latinoamérica sino a nivel mundial, y las variables que inciden son muchas y distintas entre
sí: el aumento de casos de corrupción, la opacidad de los sistemas políticos para abordar los
temas ciudadanos, y la mayor preparación de la población para acceder a información y
congregarse en movimientos ciudadanos que atiendan sus inquietudes, sin la
intermediación del partido político. En ese sentido, Julio Jiménez Gedler22, en uno de los
documentos que acompañaron la gestación de su movimiento político, opina lo siguiente:
Esta cúpula –política- ha desatendido dos temas de gran importancia para el
ciudadano, que se encuentran, además, entre los principales desafíos de la política
actual. El primero busca el bienestar de las personas (empleo, educación,
seguridad), y el otro tiene como base la necesidad de conocimiento, información y
comunicación.
Conectar con realidades diferentes permite que surjan rápidamente elementos
integradores a través de redes y que retroalimentan a una forma de hacer política
más descentralizada, horizontal y cooperativa. Algunos podrían pensar que las
conexiones que hacen posibles estas redes se producen por las nuevas tecnologías
de información y comunicación, pero lo que estas tecnologías logran en realidad es
acelerar y hacer más efectivas dichas conexiones. Es decir, las tecnologías de la
información son sólo herramientas para profundizar las conexiones porque, en el
fondo, es la interacción humana la que afianza estas redes. La tecnología acorta
distancias, sí, pero no consolida la cercanía ni la confianza; para ello es necesario
nuestro sentido más humano, la acción cuerpo a cuerpo y el liderazgo

22
Jiménez Gedler, Julio. El desafío de reconstruir el poder: de la verticalidad a la red distribuida. Documento
entregado personalmente. 2016

19
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

En otro orden de ideas, de acuerdo al análisis que nos presenta Piero Ignazi23, al culminar la
segunda guerra mundial, la tendencia en la creación de los partidos políticos cónsonos con
la época, fue la estandarización, la masificación y la generación de una lealtad basada en el
clientelismo. Cuando comenzaba el declive, en general ese tipo de partidos políticos fue
volcándose hacia el ejercicio de su actividad partidista a través de las estructuras del Estado
para conseguir legitimidad, lo cual en sí mismo no constituiría una característica totalmente
negativa, pero su terrible implementación generó un incremento en la opacidad, la
corrupción, malas prácticas y áreas grises que produjeron una gran distorsión entre el
desempeño partidista y la función pública a la cual se incorporaba el líder político.
En particular, en Venezuela, el desempeño a finales de los años 70 respecto a los partidos
políticos estuvo siempre estrechamente relacionada con el modelo de desarrollo imperante
en el país, que Roberto Casanova24 denomina el estado de bienestar a la venezolana,
basado en la abundancia de la renta petrolera, y en la facilidad de utilizarla desde el Estado
para su distribución, en lugar de para crear una economía más abierta, sólida y
diversificada. Este modelo generó un crecimiento insostenible del Estado que, junto a
esquemas de clientelismo, corrupción e ineficiencia, produjeron un aumento en los
problemas sociales, económicos y políticos, de los cuales los ciudadanos responsabilizaron
a los partidos políticos. Complementa Casanova:
Hay algo de injusticia y de hipocresía en ésto pues otros sectores y grupos
(empresarios, medios de comunicación, sindicatos, gremios profesionales y un
largo etcétera), eran también parte integral de ese vasto sistema de complicidades.
En este sentido, los partidos (que tenían, se insiste, una elevada cuota de
responsabilidad) fueron convertidos en los “chivos expiatorios” mediante los
cuales el resto de la sociedad lavaba sus culpas. Cualquiera fuese el caso, se inició
en esos años un paulatino proceso de des-institucionalización del sistema de
partidos, reflejado en indicadores tales como la creciente abstención electoral, la
alta volatilidad del electorado y la baja credibilidad en esas organizaciones.
Por ello afirmamos que el problema es mucho más complejo, y la coyuntura actual
venezolana abre una gran oportunidad para analizarlo a la luz de la nueva realidad en el
mundo, conjugando las cualidades y aspiraciones del ciudadano libre y responsable que
buscamos, y con base a dicho análisis, diseñar y poner en práctica los cambios requeridos
para recuperar esa conexión y esa confianza ciudadana. Nuestro enfoque en este ensayo
está puesto en la ciudadanía como centro del sistema político al que aspiramos: una
República Liberal, y su espacio intermedio de interacción natural con el hecho político: los
partidos políticos.
Ruíz Rodríguez25 también afirma en su estudio previamente citado acerca de los sistemas
de partidos políticos en América Latina que en sociedades con conflictos y divisiones a
nivel social, una representación de calidad supondría que los partidos se hagan eco de
estas fricciones y oposiciones. Sin embargo, esto no ha sido lo que hemos vivido en nuestra
región en los últimos años; sino más bien la aparición de otra expresión de intermediación
entre la ciudadanía y el hecho público, que algunos autores califican como movimientos
23
Ignazi, Piero. A rescue for party delegitimation. Party Politics. 2020, Vol. 26(1) 9–20
24
Casanova Roberto. Partidos políticos venezolanos: ideas para su reinvención. Instituto Latinoamericano de
Investigaciones Sociales ILDIS. 2012
25
Ruiz Rodríguez, L.M.: “Los sistemas de partidos de América Latina frente al espejo: elementos de contexto para las
próximas citas electorales en la región”, Documentos de Trabajo nº 43 (2ª época). 2021, Madrid, Fundación Carolina

20
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

sociales, y de acuerdo al análisis de Ruíz Rodríguez se denominarían ideas sin partidos,


que se generan como respuesta a la incapacidad de los partidos existentes para representar
las demandas de los ciudadanos (que el autor precitado contrapone a lo anterior
calificándolos como partidos sin ideas).
El doctor José Gregorio Contreras, en su más reciente publicación26 realiza una
investigación exhaustiva para determinar que no todas estas manifestaciones de los
ciudadanos pueden llamarse movimientos sociales. Es relevante tomar un espacio para
compartir esta visión de Contreras, dado que nuestro ensayo pretende identificar las
cualidades del ciudadano libre y responsable que conectan con sus motivaciones e
incentivos para asociarse que, si bien van más allá del enfoque netamente partidista,
adecuadamente implementados pueden establecer conexión orgánica positiva con dichas
instancias políticas, y contribuir en forma determinante con el buen funcionamiento de la
sociedad como un todo.
En esta publicación, nos hemos referido –y nos interesa expresamente hacerlo así- a la
organización ciudadana y/o a la capacidad asociativa del ciudadano libre y responsable,
independientemente del tipo de asociación. Sin embargo, es pertinente y necesario incluir
particularmente la definición que Contreras hace en su investigación, pues es uno de los
tipos de acción social que implica una relación más cercana con la entidad político
partidista. Dice Contreras, que los movimientos sociales son la forma más trascendental de
participación política no institucionalizada políticamente, porque evita partidizarse.
Continúa:
El movimiento social es espontáneo, el único recurso con que cuentan para
imponerse es la opinión pública, por lo que dependen del mayor número de
participantes y grupos que lo apoyen en sus manifestaciones, por esta razón no
pueden partidizarse o etiquetarse ideológicamente; por ello sus argumentos e
interpretaciones deben estar enmarcados en los temas que tratan, es este
comportamiento lo que determina el éxito de los movimientos sociales y a la vez lo
diferencia de los movimientos políticos o cualquier otra manifestación de acción
colectiva.
Estas apreciaciones nos van perfilando hacia el tipo de motivación e incentivos que los
ciudadanos podrían tener para activarse en asociación con otros, ya sea para participar en
una entidad ciudadana específica formal, como podrían ser por ejemplo, una organización
ambiental o de productores agrícolas, o por lo contrario, en un movimiento social, definido
de acuerdo al análisis de Contreras.
En la actualidad, la sociedad está cada vez más segmentada en torno a los intereses
específicos de sus ciudadanos; las generaciones actuales, que ya crecieron contando con
una serie de herramientas tecnológicas y de lógica de pensamiento que les facilitan el
manejo de la inmensa disponibilidad de información en espectros muy amplios, han
aprendido progresivamente a procesar la información y enfocarse en intereses muy
concretos.

26
Contreras Hernández, J. G. ¿Qué es un movimiento social? y su importancia en el estudio de la ciencia política.
Revista De La Facultad De Derecho Y Ciencias Políticas, 52(136), 68-100. 2022.
https://doi.org/10.18566/rfdcp.v52n136.a04

21
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Por otra parte, tal como nos comenta Rodríguez Cortés27:


si bien los partidos políticos desarrollaron una función esencial durante los
procesos de democratización, al insertar a grandes grupos de ciudadanos en la
arena política, en la actualidad no logran cumplir esta función, puesto que se ven
desplazados por actores sociales y políticos que realizan, a través de otros medios,
la movilización y articulación política de la ciudadanía.
He allí la relevancia de determinar este tipo de intereses y cómo motivarlos para su
acercamiento al hecho público, reconectando de forma práctica e innovadora con los
partidos políticos.
Ahora bien, si nos referimos más concretamente a Venezuela, hay dos aspectos importantes
adicionales que considerar, que constituyen el contexto base del cual partimos. Por una
parte, la existencia de una amplia diáspora constituida por ciudadanos de todos los estratos
sociales que han huido de la violencia y la grave crisis humanitaria en el país; migración
que a la fecha supera los 6 millones de personas, que podrían –y estimamos que así sea-
jugar un importante rol en la transformación de sistema que estamos planteando para el
país, con lo cual daríamos un salto importante hacia adelante en lugar de plantearnos
regresar a lo que pudo haber sido y no fue. Eso implica, por supuesto, entender también sus
realidades y motivaciones, para diseñar los incentivos y mecanismos de articulación
adecuados.
La otra cara de esa misma moneda la conforma el resto de la población que sigue viviendo
en territorio venezolano, y que de acuerdo a resultados presentados en la más reciente
encuesta de hogares ENCOVI28, alcanza un nivel de pobreza de 94.5%, y de pobreza
extrema de un 76%. Al estudiar con detalle los diferentes indicadores medidos por esta
encuesta nos damos cuenta de que su motivación básica obedecería más bien a diferentes
aspectos de sobrevivencia, de modo que habría que aproximarse de forma distinta para
hacer el trabajo político requerido.
Para que haya democracias sólidas, es esencial la existencia de partidos políticos fuertes,
con prácticas de funcionamiento transparentes y, en particular en esta coyuntura, que estén
adecuados a la nueva realidad de relaciones intra-sociedad que ha acelerado, entre otros
aspectos, la aparición de la pandemia del Covid-19.
La habilidad de dichos partidos para vincularse con la voz ciudadana tiene que incluir el
desarrollo de sus propias capacidades para la identificación de los activadores que facilitan
la conexión orgánica de dicha ciudadanía con ellos -más allá de contar con líderes
carismáticos lejanos y campañas de marketing de jingles y etiquetas-; para así encontrar los
mecanismos de articulación real con el ciudadano libre y responsable, lo cual será
imprescindible para garantizar la sostenibilidad de dicha democracia en el tiempo. Refiere
Sebastian Grundberger29, entre otros aspectos que sugiere para mejorar el desempeño de los
partidos políticos latinoamericanos, que es imprescindible que el partido incluya en sus
discusiones internas los nuevos temas que son parte de la vida ciudadana real, ya que un

27
Rodríguez Cortés, Luisa Fernanda. Entre los nuevos y los viejos caminos: la relación ciudadanos-sistema político.
Volumen 5, número 10, abril, 2009, pp. 111-138. Andamios.
28
ENCOVI. Encuesta Nacional de Condiciones de Vida Universidad Católica Andrés Bello. Disponible en:
https://www.proyectoencovi.com/encovi-2021
29
Grundberger, Sebastian. Los partidos latinoamericanos bajo presión. Anuario 2021. El mundo poscovid-19: ¿cambio
de paradigma? Latinoamérica21 Fundación Konrad Adenauer. 2021

22
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

partido que no habla de los asuntos que mueven y preocupan a las sociedades es un
partido desconectado. En ese sentido, compartimos totalmente la afirmación de Tomás
Arias (2020)30, que aborda uno de esos aspectos:
Los partidos políticos podrían ser vistos, a manera de analogía, como pequeños
países en miniatura, y a los miembros de dichos partidos como los ciudadanos de
tales países. Si cada partido cuenta con un programa debidamente elaborado, a su
vez, otorgará una plataforma a través de la cual hacer un debate nacional enfocado
en propuestas y reformas. A su vez, el debate a lo interno del partido dará más
solidez a sus miembros para refinar sus argumentos y, luego, salir a debatir con los
miembros de los demás partidos.
Sólo obteniendo la confianza de las personas podrán los partidos ganar elecciones
y jugar un rol más relevante en sus respectivos países. La elaboración, la
implementación, la difusión y la evaluación de los programas partidistas, con
mecanismos de participación, permiten generar confianza en la población y ganar
elecciones.
Aunado a lo anterior, se requieren líderes políticos que comprendan esta realidad y se
preocupen por tener las cualidades necesarias para liderar con éxito a los miembros de su
partido y lograr que los ciudadanos en su entorno perciban efectivamente esas capacidades.
Por todo lo anterior, estimamos pertinente poner la mirada en estrategias y mecanismos de
innovación política que faciliten el modelo de articulación idónea entre ciudadanos libres
y responsables, sus organizaciones, y los partidos políticos, entre otros aspectos, porque a
pesar de la pérdida de conexión y de confianza por parte de los ciudadanos, los partidos
políticos continúan estando en una posición ventajosa para abordar estas tareas, pues la
elección del parlamento y del gobierno seguirá siendo un elemento central de la
democracia, incluso si la forma de los procedimientos de votación llegase a cambiar.
(Hofmeister, 2021)31

¿Qué tipo de partido político se requiere hoy para defender y ejercer la


libertad?
En los párrafos anteriores hemos comenzado a identificar algunos elementos que nos
muestran el camino hacia el conocimiento de las motivaciones e incentivos que un
ciudadano libre y responsable tendría para acercarse hoy a un partido político, ya sea para
afiliarse a él o para plantear propuestas, inquietudes o críticas.
Pensando en ello, vamos a compartir a continuación varios puntos de vista, entre los que
está uno de fuente europea (Urbinati), otro de fuente latinoamericana (Hofmeister) y un
analista venezolano (Casanova), con la idea de encontrar coincidencias que contribuyan con
la finalidad de este ensayo, que es dar algunas luces en cuanto a prácticas de innovación
política a implementar desde los partidos políticos.
A partir de la información y análisis planteado en este capítulo, y del estudio de caso del
partido político venezolano Vente Venezuela que presentaremos en el siguiente,
apuntalaremos al final de este ensayo lo que consideramos serían las sugerencias a tomar en
30
Arias Castillo, Tomás. Hacia Partidos Programáticos en América Latina. 2020. Swedish International Liberal Centre.
31
Hofmeister, W ¿Por qué los partidos políticos son un modelo para el futuro? 2021. Revista Diálogo Político. Año
xxxvii, n.º 1, Fundación Konrad Adenauer

23
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

cuenta por los partidos políticos, en particular en Venezuela, si pretenden despuntar en


adelante utilizando innovación política de cara a los nuevos retos, tanto los provenientes
de los desafíos de pérdida de credibilidad por parte de la ciudadanía, como los generados
por los nuevos modos y relaciones cuya implementación aceleró la pandemia, con la
finalidad de mejorar significativamente su crecimiento en el arraigo ciudadano, así como su
confianza y credibilidad.
Refiriéndose a los procesos internos de los partidos, Nadia Urbinati citada por Ignazi32
afirma que votar en la elección del líder y candidato, y en algunas propuestas de política
del partido, no son condiciones suficientes para la democracia. Ni siquiera en el sistema
político en general la democracia electoral es sinónimo de democracia propiamente dicha,
consideración con la que estamos totalmente de acuerdo, y que ya explicamos en el capítulo
anterior, en el que describimos las cualidades del ciudadano libre y responsable que
aspiramos para el modelo de República Liberal que planteamos.
En ese sentido, Ignazi propone 4 elementos que considera claves para generar ese cambio
interno profundo en los partidos políticos, de cara a recuperar la confianza del ciudadano,
que los denomina los 4 caballeros de la democracia intrapartidaria. Estos elementos son:
(a) La inclusión, en el sentido de los procesos de toma de decisiones interna;
(b) la garantía de los derechos de las minorías dentro del partido, asegurando así
el pluralismo interno;
(c) la participación de los afiliados en la elaboración de las políticas del partido, es
decir, la aplicación de una (especie de) proceso interno de deliberación; y
(d) la difusión horizontal y vertical del poder de decisión entre diferentes capas y
actores dentro del partido.
En suma, la inclusión, la deliberación, la difusión y el pluralismo completan la
cuadrilla de los caballeros de la democracia intrapartidaria. Los miembros
estarían involucrados en la elaboración de políticas y en la definición de la agenda
interactuando con sus pares y posiblemente también con los líderes.
El análisis de Ignazi está fundamentado en un exhaustivo estudio acerca de la evolución de
los partidos clásicos europeos, que se crearon a partir de la segunda guerra mundial,
contrastándolo con algunos partidos más nuevos, surgidos en los últimos años en medio de
una sociedad global, donde el hecho público político ha estado ocupando un importante
lugar en los medios de comunicación y redes, estableciendo una percepción de mayor
cercanía entre el líder político y el ciudadano, que no ha sabido ser asimilada y transmitida
adecuadamente por estas entidades políticas.
En la actualidad estamos frente a un ciudadano, en general, mucho más interesado en ser
visto como individuo y no como parte de una masa sin identidad propia. Quiere que su
opinión sea realmente tomada en cuenta, ya no le basta con entregar su confianza a su
clásico intermediario político, de hecho, la disminución de esa confianza es una causa
importante de lo que estamos viendo hoy. Esto constituye un nuevo reto para los partidos
políticos clásicos o tradicionales, pues requieren trabajar estrategias de especialización,

32
Ignazi, Piero. A rescue for party delegitimation. Party Politics. 2020, Vol. 26(1) 9–20

24
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

manteniendo esquemas modernos y adaptables de funcionamiento estructural que


fortalezcan su institucionalidad.
Considera el autor citado que para alcanzar el éxito no es suficiente aplicar una o dos de los
cuatro aspectos planteados, sino los cuatro como una estrategia integral, para así recuperar
la confianza del ciudadano hacia los partidos políticos como la instancia natural, efectiva e
idónea de intermediación entre las demandas y aspiraciones de la ciudadanía y el Estado.
Por otra parte, Hofmeister (2021)33 presenta un amplio listado de características que de
acuerdo a su criterio deberían cumplir los partidos políticos en la región latinoamericana,
especialmente en esta nueva era post pandemia. Tomaremos un grupo de ellos, que están
enmarcados en el contexto de nuestro análisis:
• Cuenta con un programa de base en donde se definen los valores y principios,
compartidos por todos los miembros, en los que se cimienta su acción política.
• Procura una fuerte presencia en las ciudades y municipios de su país mediante
la construcción de estructuras partidistas locales que conduzcan a la elección de
alcaldes y miembros en los órganos representativos locales. Su desempeño en los
municipios es un pilar importante para el éxito en las elecciones nacionales.
• Sus afiliados se mantienen informados de manera continua, abierta y
transparente sobre la postura de los líderes del partido y los parlamentarios con
respecto a las cuestiones políticas, pero también en torno a los procesos internos
más importantes del partido.
• Sus afiliados participan activamente en los debates y procesos internos del
partido, participan en la elección de los líderes del partido, la nominación de
candidatos, en las discusiones sobre cuestiones relevantes de la política y sobre
acciones políticas, y apoyan activamente al partido y a sus candidatos en las
elecciones.
• Buscan activamente participantes transversales que aporten experiencias desde
fuera de la política y, por ende, fortalezcan su capacidad de representación.
• Las opiniones controvertidas sobre temas de fondo y las discusiones en torno a
la elección de puestos de liderazgo y la nominación de candidatos son
bienvenidas en vez de ser reprimidas bajo la presión de conformidad partidista,
siempre y cuando los participantes en el debate respeten los valores y principios
fundamentales del partido.
• Busca y mantiene el contacto continuo con diversos grupos sociales y
organizaciones para conocer sus opiniones y expectativas políticas,
evaluándolas en función de sus propios valores y fines políticos, y representando
los intereses de aquellas instituciones políticas alineadas con sus valores y
objetivos.
• Su personal directivo se distingue por su experiencia y respeto por los principios
éticos, a los que se adhieren al tomar decisiones sobre el destino de otras
personas. Su personal directivo y sus funcionarios electos no solo tienen una
carrera como políticos y funcionarios de partido, sino que también han
adquirido experiencias en otras áreas de la economía y la sociedad antes de su
ascenso en la política.

33
Hofmeister, W. Los partidos políticos y la democracia. Madrid: Marcial Pons (en prensa). 2021

25
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Si analizamos estos atributos propuestos por el segundo autor, podríamos encontrar


elementos que coinciden bastante bien con las cuatro cualidades imprescindibles que
sugiere Ignazi34 en su estudio, en particular, lo expresado por Hofmeister35 respecto a los
procesos de información, debates y discusiones, así como de toma de decisiones internas.
La propuesta de doble direccionalidad –funcional y territorial- para los procesos internos
luce relevante para ambos autores. A eso se agrega la importancia de la presencia y
contacto de las estructuras del partido a nivel municipal, que también es a nuestro juicio el
nivel territorial idóneo para ello, por ser el más cercano al ciudadano y sus intereses.
Por otra parte también destaca la relevancia del aspecto programático; contar con
propuestas concretas de políticas públicas que mostrar a la ciudadanía, junto a las mejores
prácticas internas partidistas que hemos comentado, contribuirían a despertar más interés
por parte de la ciudadanía en conocer, acercarse e incluso llegar a tomar la decisión de
involucrarse directamente a dicho partido político.
Casanova36 por su parte, sugiere un esquema de siete principios que los partidos políticos
venezolanos deberían revisar e incorporar a sus prácticas, transformándose para sobrevivir
en esta nueva forma de relacionarse con la sociedad. Dichos principios son:
Estratégico, que implica tener una visión viable e inspiradora de la sociedad y del
mundo, que tenga a su vez expresión concreta en su programa de gobierno así
como en propuestas específicas de políticas públicas.
Deliberativo, a través del cual el partido debe desarrollar una práctica de diálogo
que le permita mantenerse abierto a la diversidad de perspectivas presentes en la
sociedad. Como un país en pequeña escala.
Pedagógico, que implica que la propia dirigencia y militancia de las
organizaciones políticas se inserten en una dinámica de formación continua, para
ejercer en forma adecuada su interlocución pedagógica con la sociedad.
Responsabilidad, asumiendo que los partidos deben responder ante los ciudadanos
y si no lo hacen actúan irresponsablemente. Deben dar explicaciones públicas
acerca de su financiamiento, su oferta electoral, entre otros temas.
Delimitación, manteniendo ciertos límites en sus relaciones con las organizaciones
de la sociedad y con los poderes públicos. De no ser así, su función como mediador
entre unas y otros se pervierte.
Federativo, que cuenta necesariamente con una visión compartida, con reglas
claras y con mecanismos efectivos de coordinación, pero es más complejo que un
partido centralista, pues refleja más nítidamente la complejidad de la sociedad,
aumentando así su capacidad de expansión.
Democrático, que implica que el partido sea y ejerza internamente una permanente
escuela de democracia para sus miembros y para la sociedad en la que actúa.
Ahora bien, antes de pasar al estudio de caso del partido Vente Venezuela, queríamos
agregar también algunos planteamientos que conocimos directamente a finales del año

34
Ignazi, Piero. A rescue for party delegitimation. Party Politics. 2020, Vol. 26(1) 9–20
35
Hofmeister, W. Los partidos políticos y la democracia. Madrid: Marcial Pons (en prensa). 2021
36
Casanova Roberto. Partidos políticos venezolanos: ideas para su reinvención. Instituto Latinoamericano de
Investigaciones Sociales ILDIS. 2012

26
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

2016 mediante comunicación e intercambio personal con el fundador del movimiento


político venezolano Democracia, Sociedad y Desarrollo (DSD), Julio Jiménez Gedler, ya
que apuntan no solamente a la forma interna en la que la organización política debería
funcionar, sino también al cómo facilitar abrir sus vínculos con el ciudadano. En una era
hiperconectada, las estructuras tradicionales rígidas de los partidos políticos clásicos
parecieran no ajustar en forma adecuada con la manera en que el ciudadano se relaciona
entre sí en la sociedad.
El movimiento político DSD funcionaba en base a un sistema de redes distribuidas, a las
cuales llegaba el ciudadano de acuerdo a su motivación personal hacia el objetivo de dicho
movimiento. Estas redes generalmente se activaban en primer lugar a partir de contactos
virtuales, a través de las redes sociales conocidas, y posteriormente se generaban los
mecanismos para que los ciudadanos interesados pudieran conocerse personalmente, ya
fuera en activismo de calle concretamente, o en alguna reunión específica. De acuerdo al
material suministrado directamente por su fundador, la red primaria:
es un sistema de organización democrático y colaborativo que promueve la
participación sistemática, horizontal, transparente y efectiva, facilitando la acción
de las personas según su habilidad, su capacidad y su realidad. Son estructuras que
se adaptan a cada realidad geográfica, dinámica social, política y cultural
organismo activo y adaptable, que permite el intercambio de información en
múltiples direcciones y se conecta con otras redes u organizaciones, sin
limitaciones ni restricciones, facilitando el proceso evolutivo de crecimiento y
enlace con otras redes e individualidades.
El desafío radica en las formas de articulación, comunicación y colaboración. Para
ello, las comunidades necesitan transformar las organizaciones sociales de acuerdo
a una visión de articulación de redes con diferentes actores que respetan las
diferencias y conciertan intereses comunes.
Este planteamiento es interesante, pues plantea un esquema más flexible y amplio en la
forma en la que el ciudadano se conecta a la instancia política, así como también abre una
serie de opciones distintas para concretar su aporte a lo interno, manteniendo esa misma
flexibilidad de acuerdo a los intereses de dicho ciudadano y a su perfil, especialmente si
aceptamos el hecho de que la interlocución ciudadana con el hecho público ya no es
exclusividad de los partidos políticos, de acuerdo a toda la evidencia que hemos mostrado
hasta ahora.
Es importante recordar en este punto que el modo tradicional en el que los partidos
políticos tenían el monopolio de la intermediación entre el ciudadano y el Estado se
sostenía a partir de la concepción de que el único canal a través del cual dicho ciudadano
podía expresar sus opiniones y demandas eran los procesos electorales, situación que ha
cambiado drásticamente, y hemos presentado en este capítulo abundantes datos al respecto.
Por ello, el trabajo de discernimiento y construcción de soluciones está íntimamente
relacionado con una nueva concepción de cultura política, que aún está comenzando a
discutirse en forma muy incipiente. El planteamiento anterior lo ratifica Rodríguez Cortés37

37
Rodríguez Cortés, Luisa Fernanda. Entre los nuevos y los viejos caminos: la relación ciudadanos-sistema político.
Volumen 5, número 10, abril, 2009, pp. 111-138. Andamios

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

las relaciones entre los ciudadanos y el sistema político se encuentran en un


escenario confuso donde se reúnen las trasformaciones del régimen democrático y
la emergencia de una nueva cultura política no partidista. Si esto responde a la
incipiente ampliación de los espacios de participación política o a una apatía por
parte de los ciudadanos no es en ningún sentido evidente, lo que sí demuestra es
que los avances de la democracia participativa han sido lentos y que, si bien los
partidos políticos se están trasformando, los nuevos actores no aparecen como una
alternativa real para las relaciones entre ciudadanos y sistema político.
En este sentido, la idea de una apertura democrática y de la emergencia de nuevos
actores no son suficientes para entender la forma como hoy se construyen las
relaciones entre los ciudadanos y el sistema político. Para esto es necesario tener
en cuenta la manera en que los ciudadanos construyen sus imaginarios, la forma
como significan sus relaciones políticas y las opciones reales que consideran para
la representación y expresión de sus demandas, dado que es allí mismo donde la
desconfianza, la inconformidad frente al manejo de asuntos públicos, los
escándalos políticos, la percepción sobre la mala administración del dinero del
Estado, entre otros elementos, desempeñan un papel en los contenidos de las
percepciones y de las prácticas políticas de los ciudadanos.
Parte del cambio de enfoque para la conformación de la nueva cultura política tiene que
ver con la aproximación estructural de las instituciones político partidistas a la dinámica de
la ciudadanía organizada, desde dos vertientes. Por una parte, es imprescindible asumir un
paradigma radicalmente diferente del liderazgo político y su dinámica de funcionamiento y
relación con el poder, respecto al que hemos venido heredando a lo largo de nuestra
historia, como lo describen y analizan muy a profundidad y detalladamente Guerrero y
Herrera38 en su libro La cultura política del fracaso, y cuyas referencias abundan en la
disección histórica que ellos nos presentan. Es menester una ruptura profunda con el
paradigma del rentismo como base para el desempeño de la política desde el Estado, y sus
consecuentes clientelismo y populismo. El líder político, incluso –y con mayor razón-
desde antes de llegar al poder, debe reflejar claramente los valores que promulga y anhela
para la República, en nuestro caso, liberal.
Y por otra parte, conectaremos a continuación con algunas ideas relacionadas con la cultura
de trabajo en redes, totalmente distinta a la acostumbrada estructura piramidal clásica de los
partidos políticos de primera generación; estrategia que aún ha sido muy poco estudiada
formalmente en la ciencia política, pero que nos luce imprescindible para diseñar
estrategias de mejora para los partidos políticos de estos tiempos.
Para destacar algunos elementos importantes del análisis de redes, comentaremos una
publicación de Egon Montecinos39, que nos dice lo siguiente:
El análisis de redes postula que las personas tienen una doble pertenencia: a
categorías y a redes. Existen vínculos fuertes -que corresponden a parientes,
amigos y personas que se sienten muy cercanas- y vínculos débiles -que

38
Guerrero, Eugenio; Herrera Orellana, Luis Alfonso. La cultura política del fracaso. Editorial Galipán, Caracas,
Venezuela. 2018
39
Montecinos, Egon. Análisis del comportamiento electoral: De la elección racional a la teoría de redes. Revista de
Ciencias Sociales, Vol. XIII, No. 1, 2007

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

corresponden a los llamados conocidos que establece una persona en un espacio


delimitado-.
Estos vínculos
os débiles son los que forman los agentes claves en una comunidad o
líderes sociales que establecen una serie de redes que lleva implícito un tema ligado
a la confianza y a los espacios territoriales que se frecuentan con mayor
regularidad. El mantenimient
mantenimientoo de los vínculos débiles, puede ser muy bien la más
importante de las armas electorales que un partido político puede utilizar en
elecciones ya sea locales, provinciales o nacionales.
En el actual contexto donde las diferenciaciones ideológicas se tornan difusas y el
“bombardeo comunicacional” en ocasiones, más que clarificar, vuelve confusos los
mensajes políticos, el voto no se puede definir completamente por una cuestión de
razonamiento previo, sino que también por el trabajo de redes que realicen los
partidos políticos a través de sus vínculos con agentes claves y de éstos con sus
comunidades
En la publicación de Montecino previamente citada, se presenta un análisis comparativo de
distintos modelos con los que se ha venido interpretando el comportamie
comportamiento
nto de un elector.
Desde la identificación ideológica, la simpatía por un candidato, la situación sociológica del
elector, o las campañas comunicacionales electorales, lo que el autor concluye es que
ninguno de estos factores determina por sí sólo, en la ssociedad
ociedad global hiper conectada de
hoy, el éxito de un determinado liderazgo, sin que los partidos políticos hagan el trabajo de
construcción de entramado de redes que es imprescindible hacer. Y no nos referimos a
tecnología y redes sociales, sino a la cons
construcción
trucción de ese tejido de contactos alrededor del
ciudadano, en cada comunidad concretamente, que se basan en confianza y que podrían
segmentarse de acuerdo a temas o situaciones determinadas.
Las redes sociales a las que nos referimos constituyen una cadena multi-direccional,
multi
compuesta de variadas dimensiones que relacionan a las personas y que crean un área que
se expresa como un espacio social en el cual coexisten varias esferas de actividad, política,
social y económica las que se pu pueden
eden analizar según las características formales de los
vínculos que existen entre sus componentes siendo éstas individuos, grupos o también
instituciones.. Gribaudi, citado por Montecinos.
En resumen, incluso desde el punto de vista estrictamente tradicion
tradicional electoralista que aún
mantiene una buena parte del universo de los partidos políticos existentes, en especial en
Latinoamérica, el diseño de adecuados mecanismos de articulación orgánica real de
diferentes áreas y liderazgos del partido político con las expresiones de organización
ciudadana más cercanas a las comunidades locales, constituye una línea estratégica de
acción en la que la innovación política juega un rol importante.

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Capítulo 4. Estudio de caso: Vente Venezuela

¿Cuál es el valor agregado del ciudadano en la política y cómo lo podemos


incentivar desde un partido político?
Más allá del planteamiento y análisis teórico conceptual, la urgencia de incidir en la
transformación de nuestra realidad venezolana nos lleva a pensar en la nece
necesidad
sidad de diseñar
acciones concretas que incentiven las conductas ciudadanas que estimamos necesarias para
alcanzar el cambio de sistema político en Venezuela, sin intentar, como sucedió en los años
50, cooptar a dichas organizaciones y terminar convirtiénd
convirtiéndolas
olas en apéndices de los partidos.
En rigor, desde el punto de vista de un partido político nos debería interesar que, más allá
del número de afiliados con el que se cuente, se consiga arraigar en la ciudadanía sus
proyectos, propuestas y liderazgos para qque
ue los mismos gocen de la legitimidad de su
entorno y finalmente lleguen así a las posiciones de poder que permitan concretar e
implementar dichas ideas en la práctica.
Estas acciones tendrían que estar fundamentadas, a nuestro modo de ver, en aquellos
elementos
mentos que la naturaleza del ser humano busca en forma innata. Pero además, tiene que
tomar en cuenta el hecho de que esa búsqueda ciudadana de opciones contrarias a la
realidad que lo limita se ha visto exacerbada por la grave situación política y social que se
vive actualmente en el país, profundizada por la presión negativa del entorno. Por ello, esta
búsqueda también se convierte en un desafío y una gran oportunidad para los partidos
políticos que así lo comprendan.
Menciona Adela Cortina40:
las transiciones
ones políticas de los países son posibles por las transiciones éticas, las
negociaciones de los políticos en todos los lugares de la tierra tienen un corto
alcance sin el suelo firme del ethos, del carácter de las personas y de los grupos
Lo anterior nos confirma lo vital que es esta labor, en cierto modo evangelizadora, de
concientización hacia una ciudadanía libre y responsable
responsable,, que contribuya con el diseño de

40
Adela Cortina. La hora de la sociedad civil civil.. Revista de Occidente. 2006. https://ortegaygasset.edu/wp-
https://ortegaygasset.edu/wp
content/uploads/2020/07/RevistadeOccidente_Enero2006_Adela
content/uploads/2020/07/RevistadeOccidente_Enero2006_Adela-Cortina.pdf

30
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

una transición hacia una sociedad con un entramado plural y sólido de estructuras
intermedias que no sean definidas ni sometidas por el Estado, sino que potencien y
fomenten la diversidad de ideas, la deliberación, las causas comunes, pero desde la
individualidad y la libertad, siempre en búsqueda de la igualdad ante la ley. Ello será
garantía del afianzamiento de las ideas liberales en la ciudadanía, por ende de su
sostenibilidad y éxito en el tiempo.
Hoy en día en el mundo, como hemos explicado en capítulos anteriores, la ciudadanía
muestra una marcada desafección política, falta de confianza, y un reclamo por la escasa
incidencia de los ciudadanos en las decisiones políticas. Al mismo tiempo, la amplísima
posibilidad de acceder a información y fuentes de diversa índole que le ofrecen las redes
sociales e internet, ha permitido que los individuos tengan mucha mayor capacidad para
escoger a su conveniencia la posible ruta a seguir, independientemente de la existencia o no
de determinados partidos políticos.
Ahora bien, su búsqueda nos abre la posibilidad de diseñar acciones desde lo político que
fomenten espacios de interacción y debate basados en el respeto a las ideas distintas, y en la
generación de confianza para construir propuestas conjuntas. Esta labor lleva asociado el
trabajo en equipo, la comunicación y la cooperación.
Ya hay muchos avances en el mundo que comienzan a mostrar vías en las que la
interacción entre el ciudadano y las entidades gubernamentales y políticas se facilita,
aprovechando la tecnología. Ejemplos de ello son las plataformas de gobierno abierto, la
agilización y simplificación de trámites y la influencia en la opinión pública, entre otros.
Sin embargo, como también hemos comentado anteriormente en este mismo ensayo, estas
estrategias principalmente digitales no son suficientes.
En Venezuela particularmente además, el régimen ha aprovechado las plataformas
tecnológicas para la persecución y el control, apoyándose en una ciudadanía limitada por la
escasez de servicios públicos y de medios formales de comunicación, y sometida por el
largo trayecto de generación de pobreza y dependencia del Estado. La paradoja es que ante
esta realidad abrumadora, el ciudadano busca permanentemente nuevas maneras de elevar
su voz y de incidir. Este es el escenario en el que encontramos un espacio potencialmente
fértil para la acción política innovadora e inteligente.
Entrando ya en la materia de este capítulo, la falta de opciones idóneas en el espectro de los
partidos políticos, visto desde la perspectiva ciudadana, fue la motivación que en el año
2012 llevó a un grupo de ciudadanos encabezados por María Corina Machado, a fundar un
nuevo partido político, que en sus inicios se denominó Movimiento Político de Ciudadanos
Libres, Vente Venezuela.
Ciudadanos que no habían tenido relación directa previa con los partidos políticos, y cuya
primera experiencia en ese sentido comenzó a partir de la campaña para las primarias
legislativas en el año 2010, y de allí en adelante, los subsiguientes procesos electorales
hasta las primarias presidenciales de 2011 – 2012.

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Breve análisis de los estatutos41 del partido Vente Venezuela


El nacimiento de este nuevo partido ocurrió en un momento muy duro de la política
venezolana, bajo un régimen que aún no era reconocido ni siquiera como dictadura. En ese
momento, un grupo de ciudadanos consideraron que su voz no estaba siendo representada
en el espacio de intermediación clásico, porque su búsqueda iba más allá que alcanzar
algunos “pequeños logros” que la supuesta democracia podría otorgar.
Es así como, mientras otros partidos giraban exclusivamente en torno a temas como la
justicia, el bienestar o la seguridad, Vente Venezuela irrumpió en la escena política con un
planteamiento abierto y claro de lucha por la libertad, como su valor foco. Mientras otros
partidos se construyeron confiando exclusivamente en la disciplina, la militancia, los
aparatos y los movimientos sociales cooptados como parte de sus estructuras, Vente
Venezuela se organizó como un partido capaz de articular las demandas e intereses de las
asociaciones civiles, e integrarlas orgánicamente a la dinámica de construcción de sus
propias propuestas de políticas públicas, propiciando un ambiente de confianza y respeto
por la capacidad del ciudadano y sus organizaciones.
El movimiento político cambió su estatus formal a partido político en el año 2016 cuando
se aprobaron sus estatutos, sobre los cuales haremos varios comentarios a continuación,
enfatizando los aspectos diferenciadores que por el enfoque e interés del presente ensayo y
su análisis, se han ido destacando hasta el momento, a saber:
• Valores y propósito
• Quienes lo conforman
• Nuevo enfoque en los mecanismos para participar
• Núcleo para la participación y organización

Valores y propósito
En el Preámbulo de sus estatutos ya se avizora una importante diferenciación respecto a los
partidos políticos clásicos:
Nosotros, ciudadanos libres, venezolanos, reunidos en Caracas el 8 de julio de
2016, resueltos a iniciar una profunda transformación de la república, fundamos
por este acto el partido de la libertad para cada uno de los individuos que habitan
el país, insertándonos en la larga lucha por lograr paz, prosperidad y
oportunidades.
Nosotros, venezolanos en ejercicio pleno de ciudadanía, actuamos desde la firme
convicción de que la libertad de cada individuo, asociado a otros o en solitario, es
el espacio de creación que genera el desarrollo pleno de las personas y de la
sociedad en todos los ámbitos, así como la garantía más sólida del respeto a la
dignidad intrínseca de cada ser humano y de una real solidaridad.
Nosotros, hombres y mujeres del siglo XXI, ponemos a disposición de cada
ciudadano libre estos estatutos para que participen en las actividades del partido
con el fin de crear la Venezuela del ascenso para todos.

41
Vente Venezuela. Estatutos disponibles en https://www.ventevenezuela.org/estatutos/

32
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Destaquemos algunos aspectos que nos resultan de interés en este preámbulo a efectos del
objetivo de este ensayo: los fundadores del partido Vente Venezuela se asumen y
presentan como ciudadanos libres (1), resueltos a iniciar una profunda transformación
de la república (2), y abren el espacio para la participación de sus iguales (3), aquellos
ciudadanos que coincidan en esa misma búsqueda, y cuya libertad de actuar solo o en
asociación con otros es esencial.
Esta aproximación inicial marca una profunda diferencia en cuanto a los partidos políticos
clásicos, que suelen mostrar primero su orientación ideológica o planteamientos de índole
populista, antes que una visión de futuro por el cual luchar.
En el Ideario y Valores contenido en el artículo 4 de los estatutos, se define el marco de
principios que señalan el desempeño de sus afiliados y determinan en cierto modo la ruta
filosófica del partido. De ellos, destacaremos algunos que se conectan claramente con el
perfil de ciudadano libre y responsable que requiere una República Liberal y que hemos
venido describiendo a lo largo de este trabajo, y además nos dan idea del tipo de conexión
que plantea esta entidad política con la sociedad:
1. La libertad individual como espacio de creación que posibilita el desarrollo pleno
de las personas y la sociedad en todos los ámbitos.
2. La dignidad humana.
3. El derecho claro, sensato, administrado con honradez y sin privilegios.
4. La responsabilidad ineludible del individuo respecto a sus actos libres.
5. El conocimiento como la base esencial del aprovechamiento cabal de la libertad
individual.
6. La primacía de la sociedad civil.
7. La conducción civil del Estado.
8. La economía de mercado en libre competencia como fuente de innovaciones y
riqueza.
9. La propiedad privada como pilar esencial de la autonomía necesaria a la libertad.
10. La solidaridad como factor que cohesiona, impulsa y protege a los miembros de la
sociedad.
11. La familia como esfera íntima inviolable del individuo.
12. La sociedad abierta al mundo como fuente de desarrollo en todos los planos.
13. La solidaridad internacional con quienes luchan por la libertad en el mundo.
14. La transparencia, diligencia y profesionalismo en la gestión de los asuntos
públicos.
15. El respeto y la racionalidad en los debates de interés general.
16. La práctica congruente con los valores que profesamos.
17. El mérito como base del ascenso.
18. El respeto al medio ambiente como pilar de la sostenibilidad del crecimiento
económico.
Podríamos afirmar sin mayor problema que todos estos valores constituirían un marco ideal
de desempeño para la mayoría de las personas. Sin embargo, queremos destacar algunos
que en definitiva, si los analizamos más profundamente, nos dejan ver esos elementos
diferenciadores que a lo largo de este ensayo hemos venido identificando cuando nos
referimos al tipo de ciudadano libre y responsable que nos parece necesario fortalecer e
incentivar de cara a una transformación radical del país.

33
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Se destaca en ese ideario el enfoque del individuo y la importancia de la civilidad por


encima de otros aspectos. La libertad y la responsabilidad asumidas desde el individuo,
dan luces acerca de un enfoque más centrado en el ciudadano como actor principal, lo que
es radicalmente distinto a otras definiciones conocidas en el ámbito de los partidos políticos
venezolanos, más orientadas a la masa o a grupos sin identidad propia, mucho más
moldeables, y que indudablemente han sido exacerbadas hasta el extremo en los últimos
más de 20 años por el socialismo del siglo XXI y sus aliados.
Por otra parte, llama la atención desde el punto de vista de un cambio total de paradigma
frente al entorno de clientelismo y mediocridad implantado desde el poder en Venezuela en
las últimas décadas, la relevancia que el conocimiento, el mérito, la transparencia, el
profesionalismo y la congruencia, tienen como parte esencial de dicho ideario. No es un
detalle superficial, si recordamos los factores por los que ha crecido la distancia entre el
ciudadano y las entidades políticas en el mundo, y especialmente en Latinoamérica, por las
que ha ido mermando la confianza en quienes ejercen la política desde los partidos, y que
hemos documentado extensamente en capítulos anteriores.

Quienes lo conforman
Veamos la definición de quienes pueden participar en el partido, establecida en artículo 5
de sus estatutos:
En la actividad política de VENTE VENEZUELA participan ciudadanos que
asumen diversos niveles de compromiso con la organización: los afiliados, los
simpatizantes y los voceros de las asociaciones ciudadanas.
Nótese que no se utiliza la palabra militante, para definir el tipo de adhesión formal que un
ciudadano tiene con el partido Vente Venezuela. Militante y militancia, de acuerdo al
diccionario de la RAE42, tienen su raíz en la concepción de militar, a saber:
En el latín se encuentra el origen etimológico del término militancia. En concreto,
podemos establecer que es fruto de la suma de los siguientes componentes de dicha
lengua: • “Militaris”, que se empleaba para referirse a todo lo concerniente a los
soldados y ejércitos. • La partícula “-nt-“, que se usaba para indicar “agente”. • El
sufijo “-ia”, que es equivalente a “cualidad”.
Por otra parte, el término afiliado significa: Dicho de una persona: Asociada a otras para
formar corporación o sociedad, lo cual plantea una aproximación totalmente distinta a
aquel ciudadano que, de acuerdo a los estatutos de Vente Venezuela, tiene el mayor grado
de compromiso respecto al partido.
Seguramente habrá quien considere que las diferencias son semánticas y sin relevancia real,
sin embargo desde nuestra perspectiva y a raíz de lo planteado en los capítulos anteriores,
esta diferencia en la aproximación a la ciudadanía nos señala con claridad que estamos
frente a un tipo muy distinto de organización política. Estamos hablando de una invitación
a ser parte activa, de iguales, con criterio y posibilidad de incidir, en lugar de un simple
seguidor de líneas y portador de los colores distintivos, como a nuestro juicio se considera a
los militantes en otros partidos en Venezuela.

42
Real Academia de la Lengua. Actualización 2021. Disponible en: https://dle.rae.es/

34
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

En el mismo artículo 5 de los estatutos, previamente citado, se destaca otro tipo de


vinculación que es única en los partidos venezolanos: la figura del vocero de asociaciones
ciudadanas, el cual se define más adelante, en el artículo 13, de la siguiente manera:
Artículo 13.- De los voceros de las asociaciones ciudadanas
1.- Participan en VENTE VENEZUELA en calidad de voceros de las asociaciones
ciudadanas aquellas personas miembros de asociaciones y organizaciones de la
sociedad civil, que estén en capacidad y disposición de comunicar la voluntad e
intereses de tal asociación en los Foros de Asociaciones Ciudadanas organizados
por el partido.
2.- Los voceros de las asociaciones ciudadanas no requieren ser afiliados ni
simpatizantes de VENTE VENEZUELA, ya que fungen como interlocutores de la
ciudadanía organizada ante el partido, el cual podrá registrar a los voceros como
tales en su Registro del partido integrado en la plataforma VENTEORG.
La mencionada es una figura novedosa que está ausente en los partidos tradicionales
venezolanos, e incluso en los más nuevos. Ejercida como está establecido en el siguiente
artículo, el número 14, donde se enumeran los derechos de estos voceros de asociaciones
ciudadanas, encontramos que pueden participar en las actividades internas que se diseñen
en el partido, manifestar sugerencias, quejas y observaciones acerca del funcionamiento o
de la conducta de algún afiliado, e incluso votar en los Foros de Asociaciones Ciudadanas
que se realicen, en torno a materias de interés para ambos.
A la fecha de realización del presente ensayo, sabemos que el partido Vente Venezuela aún
no ha realizado ningún Foro de Asociaciones Ciudadanas formal, aunque sí se han
generado en los distintos equipos locales actividades que han servido como exploratorias,
sin embargo, definitivamente este partido político cuenta con una herramienta instrumental
innovadora e interesante que tiene toda la potencialidad para ser espacio facilitador y puerta
de entrada que incentive ese acercamiento ciudadano requerido para construir en conjunto,
sin necesidad de cooptar o ser cooptado, como parte de la sociedad civil organizada. En la
próxima parte comentaremos al respecto.
Nuevo enfoque en los mecanismos para participar:
El partido Vente Venezuela cuenta con las formas básicas de estructura de organización
político territorial que podríamos esperar de una institución de carácter nacional, sea de
naturaleza política o no. Sin embargo, destaca la aparición de varias instancias de trabajo
especializado, que amplían y diversifican el alcance de posibilidades de interacción con la
ciudadanía organizada y ofrecen una manera de trabajar en forma matricial que contribuye
con la comprensión de mecanismos de articulación muy útiles en las sociedades modernas,
globales, y conectadas en redes. Así lo plantea el apartado 3 del artículo 15 de sus estatutos:
3.- VENTE VENEZUELA guarda una estructura matricial en virtud de la cual cada
uno de los cargos que gestiona una función específica en cada instancia territorial
se mantiene coordinado con sus pares y superiores o subordinados jerárquicos a
nivel territorial y funcional, mientras forma parte activa del equipo o comité en el
que se desempeña en su respectiva instancia político-territorial.
Podríamos tomar un tiempo para debatir acerca de las diferencias que, respecto al universo
de partidos políticos venezolanos, encontramos en la dinámica y estructura de las instancias
35
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

de organización y decisión del partido que estamos revisando, sin embargo, a efectos de la
finalidad de este trabajo, nos concentraremos en las instancias especializadas, cuya
naturaleza y objetivo no existen en ningún otra organización política en Venezuela, y que
además, a nuestro juicio, ofrecen interés para el análisis que estamos realizando.
Es el caso de las Coordinaciones de Asociaciones Ciudadanas, Gestión Pública y
Promoción de Valores. Como el resto de la institución, tratándose de un partido de
naturaleza federal, dichas coordinaciones tienen dos líneas de interacción simultáneas: la
que obedece a su nivel político territorial correspondiente (nacional, estadal, municipal o
parroquial), así como la que se constituye en forma transversal de acuerdo a la especialidad,
cuyos equipos de trabajo así constituidos se desempeñan alrededor de líneas estratégicas del
partido que están vinculadas con la especialidad, más allá del nivel territorial en el que se
ubiquen. Esta lógica permite abrir espacios de intercambio y discusión mucho más diversos
y enriquecedores, al tiempo que facilita el flujo de las ideas y las propuestas para que las
mismas tengan la oportunidad de legitimarse con el entorno ciudadano con mucha más
facilidad. Es mucho más parecido a la dinámica normal de una sociedad sana y
democrática, y no obedece estrictamente a un interés electoralista, aunque indudablemente
puede abonar a él en el momento apropiado.
La Coordinación de Asociaciones Ciudadanas, de acuerdo al artículo 46 de los estatutos:
propicia y coordina el diálogo constante del partido con todas aquellas
asociaciones ciudadanas autónomamente constituidas de la sociedad civil
venezolana.
Dicha tarea se inicia, según se lee en los estatutos, realizando un mapa de esas instancias de
ciudadanía organizada correspondiente a su nivel territorial, para posteriormente facilitar el
intercambio e interacción con ellas, de acuerdo a los intereses temáticos o coyunturales, y
finalmente llevando a cabo la vinculación más formal con el partido, a través de la
realización de los Foros de Asociaciones Ciudadanas (Artículo 69), que serían los
espacios dispuestos para la concreción de dicho diálogo y establecimiento de acuerdos entre
Vente Venezuela y la sociedad civil organizada de forma libre y autónoma. En cada nivel
político territorial, el Coordinador de Asociaciones Ciudadanas es el responsable de su
convocatoria y moderación. Los participantes son los voceros de las asociaciones
ciudadanas, que ya citamos en el segmento anterior.
Junto a la Coordinación de Asociaciones Ciudadanas, encontramos lo que a nuestro juicio
sería la contraparte natural en esa articulación con la ciudadanía: la Coordinación de los
Consejos de Gestión Pública, que de acuerdo al artículo 47 de los estatutos se definen
como los que:
velan por el adecuado funcionamiento de dichas instancias (los Consejos de
Gestión Pública), fungiendo como secretarios ejecutivos de las mismas y
coordinando sus aportes dentro de las respectivas Direcciones Ejecutivas y Juntas
Territoriales
En particular, los Consejos de Gestión Pública (Artículos 67 y 68) son el órgano técnico-
político designado en cada instancia de la división político territorial del partido, encargado
de asesorar a Vente Venezuela con respecto a tareas de gobierno y de políticas públicas,
haciendo seguimiento crítico de la gestión pública y de los diferentes entes de gobierno.
Participan de forma esencial en la preparación del programa de gobierno del partido. Sus

36
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

miembros, los consejeros de gestión pública, son designados por el correspondiente


coordinador territorial en los niveles nacional, estadal, municipal y parroquial, y serán
seleccionados en virtud de su demostrado conocimiento del área de consejería para la cual
se les designa.
La dinámica de trabajo entre estas dos coordinaciones especializadas y la ciudadanía sin
lugar a dudas facilitaría la creación de espacios de interacción con organizaciones sociales
y especialistas, lo cual permitiría por una parte escuchar diferentes ideas, propuestas,
requerimientos e incluso críticas provenientes de los distintos sectores de la sociedad, pero
además, lo que resulta más interesante, esos espacios se convierten igualmente en lugares
para dar a conocer las propuestas de políticas públicas y el contenido programático del
partido, propiciando su legitimidad a través de la interacción y debate generado allí. Y la
mejor cualidad de todas, respetando la autonomía de los que participan, sin intentar
cooptarlos.
Definitivamente ésta constituye una forma de llevar la política partidista a otro nivel de
práctica, que bien desarrollada, puede alcanzar niveles de legitimidad y confianza más
arraigados que los conocidos hasta ahora en el universo político venezolano, basados en
padrones electorales, o listados de militancia.
Por último, de cara al debate interno y la consideración del afiliado como ciudadano
individual y único, encontramos la Coordinación de Promoción de Valores, de la cual el
artículo 49 nos indica que:
vela en su respectiva división político territorial (nacional, estadal o municipal) por
el continuo apego del partido a sus valores fundamentales y propician instancias y
situaciones para su reforzamiento entre los afiliados, simpatizantes y ciudadanos en
general
La herramienta instrumental con la que esta coordinación cuenta para llevar a cabo su tarea
son los Foros Permanentes (artículo 70), que son espacios internos del partido, cerrados o
abiertos a personas que no son afiliados o simpatizantes. El formato abierto permite la
participación de cualquier ciudadano, y propiciará el debate de ideas en torno a grandes
temáticas de importancia general para la nación, mientras que en el formato cerrado se
propondrá la discusión sobre asuntos de interés específico de los afiliados y simpatizantes
del partido. Recientemente en el año 2021, se elaboró el reglamento para la implementación
de este formato cerrado de foros permanentes, denominados Círculos de Libertad
Individual43, y se comenzó, aún en forma incipiente, su implementación interna.
Núcleo para la participación y organización
En el artículo 64 de los estatutos nos encontramos una figura interesante: los colegios
ciudadanos:
Los Colegios Ciudadanos son las organizaciones de base de Vente Venezuela y
están integrados por afiliados y simpatizantes del partido. Habrá un Colegio
Ciudadano por cada uno de los centros de votación acreditados por el Estado
venezolano en todo el territorio nacional y en el exterior del país. Todo afiliado o

43
Vente Venezuela. Estatutos disponibles en https://www.ventevenezuela.org/estatutos/

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

simpatizante registrado
gistrado por el partido estará adscrito a un Colegio Ciudadano
desde el mismo momento de su registro
¿Qué es lo que nos parece interesante de esta figura organizativa? No sólo es el hecho de
que incluye en su constitución a los simpatizantes también, sino porque su vinculación
geográfica a los centros de votación en los que cada ciudadano ejerce su voto los ubica en
el mayor nivel de cercanía con la comunidad a la que dicho ciudadano pertenece.
En términos teóricos, se abrirían potencialmente tantos colegios
os ciudadanos como centros
de votación hay en el país, facilitando el ambiente para generar intercambios en torno a las
líneas de acción del partido, campañas conjuntas con la ciudadanía para concientización,
concientización
formación y debate, o para llevar a esas comuni
comunidades
dades las distintas figuras de interacción
previamente explicadas, como lo son los Foros Permanentes y los Foros de Asociaciones
Ciudadanas.
En resumen, esta figura equivale desde nuestra perspectiva, a las dendritas de una neurona,
enlazándose y comunicandondo al tejido vivo de la sociedad con lo que equivaldría –utilizando
la misma imagen ilustrativa- al sistema nervioso del partido político. Y teniendo en cuenta
lo que hemos venido planteando, que la construcción de ciudadanía libre y responsable
constituyee una actividad política esencial y fundacional para la transformación del país,
darle contenido y acción a estos colegios ciudadanos debería constituirse en una tarea
permanente del partido.
Conectando todos los aspectos que hemos destacado en el diseño ddel el partido Vente
44 45
Venezuela con los planteamientos de Ignazi y Hofmeister analizados y comentados en el
capítulo anterior, podríamos afirmar que el partido Vente Venezuela, cuyos estatutos hemos
analizado aquí, cuenta con herramientas de diseño, concepció
concepción
n y prácticas que pudiéramos
enmarcar bajo la definición de innovación política que hemos estado estudiando para el
desarrollo de este ensayo.
Como parte de sus fundadores hace 10 años, y como parte hoy de su Dirección Ejecutiva
Nacional puedo agregar con la mayor responsabilidad, que si bien toda esta base estructural
y conceptual es novedosa en Venezuela y está bastante orientada a la visión del futuro de
los partidos políticos que se ha venido describiendo en este ensayo, aún queda mucho
trabajo por hacer, en el que el principal desafío no está en contar con los instrumentos o las
herramientas, sino en lograr la suficiente comprensión ciudadana para ponerlas en práctica
con eficacia y eficiencia, teniendo en cuenta el contexto social, ciudadano y político
polí tan
complejo en el cual se encuentra el país actualmente. Lo positivo de ello está en la
convicción de que en la misma dimensión del desafío estará indudablemente el tamaño del
éxito al superarlo.

44
Ignazi, Piero. A rescue for party delegitimation
delegitimation. Party Politics. 2020, Vol. 26(1) 9–20
45
Hofmeister, W. Los partidos políticos y la democracia. Madrid: Marcial Pons (en prensa). 2021

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Reflexiones y sugerencias

Innovación política para la libertad. ¿Qué podemos hacer?


Tampoco nos resulta ajena a los venezolanos otra idea, la de que el mejor y más
pleno modo de vivir en una república consiste precisamente en asumir de manera
cabal nuestros deberes cívicos. Que para ser o no ser lo qque
ue decimos que más
ansiamos ser, a saber, buenos ciudadanos, esto es, ciudadanos libres, debemos ser
ciudadanos activos y que nuestra participación en la vida pública nos exige el
cumplimiento absoluto de esos deberes
deberes…
…Quiero
Quiero la paz, pero no a cualquier pprecio;
recio; mucho menos si el que hay que pagar
es el valor de la libertad. ¿Cómo hacer para evitar entonces la tentación
conservadora que nos inclina a desear volverlo todo a empezar?
empezar?...
…YY aquí es preciso, una vez más, que la sociedad vuelva a mirarse a sí misma
mi antes
que proceder a renegar de su retrato en lo que dice que piensa de los políticos y la
política; en el fondo sería lo que piensa de sí misma. No, sin modos acertados de
recordar para juzgar las acciones y pasiones de los seres humanos en la historia,
histori
profanando tumbas recientes, nuestra cultura delata su precariedad moral y el
sentido de su indolencia
indolencia…
…Es
Es necesario que la política vuelva a ser cosa seria y digna y que, por
consiguiente, la sociedad de esta nación asuma con más responsabilidad sus
deberes
eberes y aprenda a encarar los beneficios de esta paz que tenemos. La paz de la
democracia es un bien inestimablemente mejor que el de cualquier forma de
opresión organizada
Luis Castro Leiva46.
En este ensayo hemos recorrido un camino orientado a mostrarnos distintos niveles de
aproximación al concepto de ciudadano libre y responsable como nodo activador para el
diseño y puesta en práctica de una sociedad pensada a partir de la libertad, y de una mayor
46
Castro Leiva, Luis. Discurso de orden pronunciado el 23 de enero de 1998 ante el Congreso de la República de
Venezuela. Disponible en: https://prodavinci.com/el
https://prodavinci.com/el-discurso-de-luis-castro-leiva-sobre-el-23-deenero-de
de-1958/). Caracas,
1998.

39
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

coincidencia con los valores republicanos que aspiramos, donde la libre iniciativa
ciudadana y el poder que genera su organización constituyen un elemento central.
En este último capítulo, relacionaremos los aspectos que hemos destacado hasta ahora con
las respuestas a las preguntas clave que debería hacerse todo aquel interesado en desarrollar
acción política junto a la ciudadanía -en esta época de tantos cambios- desde un partido
político:
¿Por qué?: como en toda actividad humana, – y la actividad política
definitivamente lo es-, detrás de ella tiene que haber una razón de ser, una
motivación de largo alcance, esa fuerza interna que impulsa a desarrollarla, que
empuja a superar los obstáculos, y cuya referencia mantiene permanentemente el
foco de quien la desarrolla.
¿Dónde?: todos los ámbitos de la vida del individuo constituirían respuestas
posibles a esta interrogante, sin embargo, en este caso nos hemos enfocado en los
partidos políticos.
¿Quién?: la respuesta a esta interrogante es la contraparte a la anterior, desde el
punto de vista del objetivo de este trabajo. La ciudadanía libre y responsable es el
sujeto de la acción política que analizamos.
¿Qué?: La respuesta a esta interrogante representa la esencia de este capítulo,
porque nos muestra cuáles serían los aspectos de interés, dentro del contexto social
y político revisado, que se deberían destacar y profundizar en una estrategia de
innovación política a desarrollar desde un partido político.
¿Cómo?: en este caso, hemos mostrado herramientas concretas con las que cuenta el
partido Vente Venezuela, que ha sido el caso de estudio de este ensayo. Igualmente,
y considerando el contexto global, se comentan otras que podrían ser de interés
también, dentro de una estrategia de innovación política, aunque no hayan sido
identificadas en el caso de estudio pre citado.
Hemos escogido a los partidos políticos como sujeto del análisis, basados en la profunda
convicción de su importancia en la dinámica de una sociedad democrática, sana y sólida,
conscientes además del momento crítico en el cual se encuentran hoy no solamente en
Venezuela y Latinoamérica, sino en general en el mundo, razón por la cual es necesario a
nuestro juicio, prestar una mayor atención para identificar herramientas y prácticas
concretas de innovación política que coadyuven a su recuperación y fortalecimiento.
Adela Cortina, en La hora de la sociedad civil47, nos dice:
La confianza en los representantes políticos, en la fortaleza de la democracia, en
las transacciones comerciales y financieras, en las instituciones, en las relaciones
interpersonales, crea esos «círculos virtuosos» en los que las gentes se aventuran a
invertir riqueza material e inmaterial, bienes económicos y participación personal,
porque resulta fecundo hacerlo, se siguen ventajas de ello personales y colectivas
Por lo anterior, nuestras reflexiones finales serán para resaltar aquellos elementos que
consideramos imprescindibles, que pueden y deberían ser incentivados en y desde los

47
Adela Cortina. La hora de la sociedad civil. Revista de Occidente. 2006. https://ortegaygasset.edu/wp-
content/uploads/2020/07/RevistadeOccidente_Enero2006_Adela-Cortina.pdf

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

partidos políticos, siempre con la mira puesta en los cambios de era que estamos viviendo a
nivel mundial. Asumimos la ciudadanía libre y responsable como la única institución
republicana genuina y legítima que nos queda, especialmente en Venezuela, por lo que todo
esfuerzo por fomentarla y profundizar su papel en la transformación del país es
imprescindible.
Algunos elementos que destacaremos en estas reflexiones representan insumos intangibles,
que están más relacionados con conocimiento, conductas, buenas prácticas, etc. Pero hay
otros que son instrumentales, concretos, cuantitativos, en torno a los que también hay que
poner mucha atención. Todos ellos en conjunto pueden constituirse en una estrategia
exitosa de innovación política.
Comenzaremos por un aspecto que a veces puede pasar desapercibido o irrelevante en los
análisis, pero cuya incidencia determina el rumbo –correcto o incorrecto- que las entidades
políticas tomen. Este aspecto es asumir como referencia siempre una visión de futuro
por encima de la coyuntural. Parece un lugar común, una obviedad, incluso podría verse
como una perogrullada. Sin embargo es todo lo contrario, y se hace mucho más evidente en
situaciones tan críticas como las que se viven en Latinoamérica y en particular en
Venezuela.
Cuando el entorno social y ciudadano es tan duro y difícil como en Venezuela, el abordaje
para definir herramientas que encaminen a encontrar soluciones puede verse distorsionado
por la inmediatez de la necesidad humana, pero también de aquella necesidad generada por
la falta de satisfacciones políticas “tradicionales” en el corto plazo, entendiéndolas bajo la
mirada clásica del accionar de los partidos.
Por ello, nuestra primera recomendación tiene que ver con construir una visión de futuro,
conectada con el mundo, y tenerla siempre como foco referencial al que recurrir en
momentos de crisis o duda, lo cual nos garantizará diseñar los pasos para alcanzarla en una
forma mucho más certera y eficaz. Esta, sin lugar a dudas, sería la respuesta a la
interrogante de ¿por qué?, y marcaría la finalidad, el propósito de toda la labor política que
se vaya a abordar en lo adelante. Dicha visión puede estar relacionada al entorno político
territorial más cercano al ciudadano, al estado, al municipio o incluso al país.
El segundo aspecto que queremos resaltar es la construcción de confianza. Sin confianza,
cualquier intento de transformación del sistema político y de incidencia en la sociedad, será
fallido. Por ello se requiere trabajar con mucho énfasis en generarla desde el espacio
político. Esto se logra presentando siempre las cosas tal cual son, hablando con la verdad,
siendo consistente y coherente con lo que se dice, se piensa y con nuestra actuación
pública, pero sobre todo, mostrando respeto por la inteligencia y la capacidad de discernir
del ciudadano.
Para todo ello es imprescindible que el liderazgo tenga una fortaleza política sólida, de
modo que no se sienta débil por el hecho de mostrar las cosas tal cual son. Hablar con la
verdad debe ser asumido como una fortaleza, que contrasta profundamente con la
costumbre obsoleta y poco sostenible de una parte de la cultura política tradicional,
inclinada más hacia decir “lo que la gente quiere oír”. Mostrar las cosas tal cual son,
permite construir y transitar caminos mucho más honestos y cercanos a las inquietudes y
necesidades del ciudadano.

41
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Ahora bien, cualquier ciudadano libre y responsable busca asociarse con otros y lograr
incidencia. Incidir en su entorno más directo, como su familia, o un poco más allá, incidir
en su comunidad, y/o en la acción pública y política que lo afecta.
En este sentido, la tarea que corresponde es generar espacios en los que el intercambio de
ideas propicie la creación de valor compartido, donde ese ciudadano logre identificar
claramente su aporte. Así, no sólo se verá satisfecha su necesidad personal de incidir, sino
que para la entidad política que generó dicho espacio, esto conllevará la garantía de que
dicho ciudadano apoyará en forma determinada las ideas de valor compartido así
elaboradas, pues se verá reflejado en ellas. En otras palabras, con esta práctica, dicho
liderazgo político habrá conseguido legitimidad.
Esta situación se potencia cuando se practica con organizaciones ciudadanas especializadas
en temas específicos, ya sean éstos de coyuntura, de índole local o de alguna disciplina en
particular. Este tipo de acciones requiere, por parte del partido político, una profunda
claridad en sus ideas, un equipo con sólida formación en trabajo colaborativo, y un
conjunto de instrumentos que faciliten la recepción, procesamiento y sistematización de la
información, para que no se generen confusiones y contradicciones en la apertura de
espacios para conversar y transformar con terceros aspectos del contenido programático del
partido, sin que al final se afecte la esencia del marco filosófico doctrinario que lo enmarca.
Al respecto de la incidencia por parte de la ciudadanía, vimos en el capítulo anterior
algunos instrumentos innovadores que el partido Vente Venezuela diseñó para su
funcionamiento y relación con la ciudadanía organizada, sobre los cuales hay que seguir
invirtiendo esfuerzos en todos los sentidos para lograr que su alcance llegue realmente a
todos los niveles político territoriales del partido, lo que llevaría consigo la construcción de
vínculos y redes mucho más arraigadas que las que obedecen netamente a momentos
electorales.
Aunado a lo anterior, nos parece importante explorar algunas herramientas tecnológicas que
hoy día se conocen y cuya lógica y concepción ha comenzado a utilizarse ya en algunos
países, como la tecnología blockchain48:
Los partidos políticos son organizaciones que tienen como fin en el sistema
democrático la toma del poder, por vía de los procesos electorales. Por ello, te
interesa saber cómo la tecnología blockchain aprovechando sus 4 características
principales: red descentralizada, lenguaje criptográfico, cadena de bloques y
funcionamiento por medio de contratos inteligentes, base de todo el funcionamiento
El análisis de esta interesante tecnología y cómo ya se está utilizando en algunos partidos
políticos incluso de la región latinoamericana podría dar cabida a una extensa investigación
y trabajo de análisis, sin embargo, en el contexto del actual ensayo podemos adelantar que
el planteamiento no está relacionado exclusivamente con su utilización para el manejo de
fondos y su transparencia, sino con otros componentes del funcionamiento del partido
político, como el flujo de información interna, la realización de encuestas, votaciones para
asignar responsabilidades y cargos, entre otros diversos temas. Este concepto y tecnología
contribuiría con la generación de confianza, transparencia y funcionamiento en red que

48
Ramón, Ramón. Las 7 claves para ganar un campaña electoral mediante la #Tecnopolítica. 2018. Disponible en:
https://ramonramon.org/blog/2018/10/03/las-7-claves-para-ganar-un-campana-electoral-mediante-la-tecnopolitica/

42
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

hemos visto que son esenciales para recuperar la conexión entre el ciudadano y los partidos
políticos.
Antes de finalizar queremos agregar otro argumento, que encontramos en el libro Vida y
Muerte de la democracia, de John Keane49, quien nos plantea la aparente tendencia actual
de la transformación de la democracia en el mundo hacia una forma que Keane denomina
democracia monitorizada, para la cual contar con una ciudadanía suficientemente clara,
preparada y organizada para actuar en forma libre y responsable en su entorno, contribuirá
sin lugar a dudas con la estabilidad y fortaleza de las sociedades.
nuestro mundo está atravesando en estos momentos un cambio histórico
transcendental, una transformación que nos está apartando de la vieja era de la
democracia representativa para introducirnos en una nueva forma de democracia
“monitorizada” definida por el crecimiento de numerosos diferentes mecanismos
examinadores del poder y su extensión de influencia dentro de los campos de
gobierno y de la sociedad civil, tanto a nivel nacional como internacional, en
escenarios transfronterizos que en su momento fueron dominados por imperios,
estados y organizaciones empresariales
Por último, estamos conscientes que toda organización social y ciudadana, y todo
ciudadano libre y responsable tiene el anhelo de trascender, dejar una huella tras de sí,
marcar un hito a través de sus acciones. En ese sentido, el 19 de junio de 2020, el doctor
José Gregorio Contreras, en su Forochat “Globalización: estrategias para enfrentar el
mundo post Covid-19” comentaba la importancia de
diseñar e implementar políticas orientadas a las futuras generaciones, para tratar
de construir ese mundo que nos está exigiendo la humanidad…La acción colectiva
que se va a construir a partir de esa identidad, tiene las siguientes características:
1) Construye fronteras, es decir, expresa un conflicto entre nosotros y los otros; 2)
Promueve el surgimiento de nuevas redes de relaciones de confianza entre distintos
actores sociales; 3) Genera la información y conocimiento que influyen y refuerzan
la construcción de su identidad y 4) Genera sentimiento de solidaridad con otros
grupos con los que, aún no existiendo contactos personales previos, comparten
aspiraciones y valores
En tiempos de cambio tan rápidos en el mundo, de uso intensivo de tecnología, incluso de
rediseño de la globalización y de relaciones a través del concepto de blockchain, invertir
esfuerzos en diseñar estrategias de innovación política como las que hemos revisado en
este ensayo, luce como una de las tareas más relevantes que debemos acometer desde el
ámbito político, si aspiramos a la construcción de una ciudadanía libre y responsable que
ejerza como tal en libertad, como requisito indispensable no sólo para la transformación del
país en una República Liberal, sino mucho más importante, para lograr su sostenibilidad en
el tiempo.
Esta estrategia de las que hemos hablado estaría enmarcada en un profundo cambio de
enfoque en la cultura política, en la cual el ciudadano, ahora considerado libre y
responsable, y capaz de tomar sus propias decisiones, deja de ser una cifra que solamente
se toma en cuenta en momentos de campaña electoral y elecciones, para constituirse en una
parte activa esencial en la defensa y ejercicio de la libertad, y en la definición de su propio
49
Keane, John. Vida y muerte de la democracia. Fondo de Cultura Económica. 2018. Ciudad de México

43
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

futuro, no en forma aislada, sino como parte de una red en la que los partidos políticos
también desempeñen su papel,
pel, habiendo superado el desafío de la actual desvinculación
con la ciudadanía.
Una estrategia de innovación política diseñada e implementada desde el partido político
que, en resumen, debe estar marcada por la construcción permanente de valor compartido
con el ciudadano y sus organizaciones, a partir de la elaboración de una visión de futuro,
futuro
conectada con el mundo y a la vez con una expresión concreta y cercana al espacio local
del ciudadano; una estrategia que le de relevancia a los temas de preocupación
preocupaci de la
ciudadanía, en un ambiente de respeto no sólo a las distintas opiniones, sino al espacio que
cada uno ocupa en la sociedad
sociedad; fomentando la vinculación en redes dinámicas,
dinámicas
distribuidas, orgánicas e inteligentes, que conjuguen lo presencial con la cercanía
ce y
velocidad de respuesta de la tecnología; basada en comunicación honesta, franca y
transparente,, así como en completa apertura para debatir los temas de interés común.
A nuestro juicio, el líder político que asuma este camino, junto a un partido político
p que lo
respalde con dinámicas y procesos adecuados, conseguirá la legitimidad necesaria para
alcanzar el poder, y desde allí implementar las políticas públicas que en conjunto con la
ciudadanía organizada se hayan diseñado. Estamos frente a una excexcelente
elente oportunidad para
hacerlo en Venezuela. Esperamos que esta contribución sea de interés y utilidad para ello.

44
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Aportes
portes de cuatro espe
especialistas a la visión planteada

Vuelta a la política. José Gregorio Contreras


Contreras.
El tema tratado por Catalina Ramos en el presente ensayo acerca de la Innovación Política
para la Libertad,, nos introduce en un aspecto de capital importancia no solo para
Venezuela sino para el mundo, pero sin duda alguna de singular importancia para el trágico
t
momento que vive nuestra República. Los momentos que vivimos señalados por en ella en
los supuestos desarrollados en su ensayo, entre otras cosas, nos impulsan a la invención de
lo político.
Pues partiendo del hecho que la política y el arte llevan el sello de la creación personal,
para asumir el reto que propone considero necesario repensar la política y la acción política,
por tal motivo, inspirado en su disertación me propongo como aporte en este ensayo definir
el significado de la política que ex
exige
ige la práctica de la innovación política en términos de la
conexión efectiva con la ciudadanía que ha de procurarse desde las estructuras partidistas.
El significado clásico de la política, deriva del adjetivo de polis (politikos) que significa
todo lo quee se refiere a la ciudad, y en consecuencia ciudadano, civil, público, y también
sociable y social; el término ha sido trasmitido por influjo de la gran obra de Aristóteles
titulada Política, como muy bien nos lo señala el maestro de la ciencia política Norberto
N
Bobbio.
Por siglo se ha empleado el término política predominantemente para indicar obras
dedicadas al estudio de aquella esfera de actividad humana que de alguna manera hace
referencia a las cosas del Estado. En la Edad Moderna el término perdió su s significado
original, poco a poco sustituido por otras expresiones como “ciencia del estado”, “doctrina
del estado”, “ciencia política”, “filosofía política”, etc., y se emplea comúnmente para
indicar la actividad o el conjunto de actividades que de algu
alguna
na manera tienen como término
de referencia la polis, es decir el Estado.
En esta ocasión, pretendo llamar la atención acerca de la forma de concebir la política en
los momentos actuales, especialmente en Venezuela. La grave crisis política institucional
que
ue padecemos ha afectado los espacios de participación ciudadana; la falta de respuestas
institucionales a las demandas de la gente como parte del modus operandi del régimen, en

45
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

su afán de empobrecer cada vez más a los ciudadanos como su forma de sometimiento y
dominación, dando lugar al surgimiento de iniciativas autónomas de gestión de bienes
colectivos; esta nueva expresión de la cuestión social en los últimos años en nuestro país
obligan a repensar la política y por ende las acciones de los políticos.
La concepción de la democracia en Venezuela ha sido trastocada, la visión democrática que
se entiende como una forma de gobierno de representación política donde se supone que los
individuos eligen sus representantes políticos y exigen cuenta, dejo de existir. El voto dejo
de ser para los venezolanos el instrumento a través del cual elegían sus autoridades, el voto
solo se usa para imponer los candidatos afectos al régimen. Esto ha dado lugar a que los
individuos persigan sus propios fines, y junto a otros busquen satisfacer necesidades
compartidas con o sin la colaboración de las “autoridades políticamente constituidas”.
Que las cosas sean así, a mi modo de ver, nos obligan a una mayor concientización política
del momento que vivimos y por ende a plantear salidas a esta situación. En lo personal
considero que lo que hay que hacer es concebir la política como la concibieron los clásicos
griegos, o sea, como una condición humana, y a la sociedad como un espíritu “público” en
movimiento. Pues la actitud que han asumido los venezolanos ante la incapacidad,
insensibilidad que muestra el régimen para dar respuestas a los problemas (que lejos de
resolverlos, los agrava), es la de activarse, buscar reinventarse, es decir, hacer política como
la planteaban los clásicos, lo que exige un liderazgo claro en la comprensión de esta
realidad y que dé respuestas a estas nuevas expresiones de lo social.
Para cumplir satisfactoriamente con estos cometidos se requiere de un liderazgo
comprometido, consustanciados con estos principios y formados para dar una lucha política
contra un régimen que no actúa políticamente.
Debemos tener claro que somos los hombres quienes damos sentido a la historia y que
también somos nosotros los que creamos o destruimos oportunidades. Es así que estamos
obligados a formar líderes que sirvan de antídoto a los males que asechan a la democracia y
a la libertad en Venezuela y en nuestra región.
Tenemos que redefinir la política, gerenciar en razón de la demanda primordial de los
venezolanos: resolver la dramática situación que se vive; al tener claro este propósito en
función del reto que tenemos, hay que cambiar el punto de vista. Debemos agudizar la
imaginación.
Para el logro de estas metas partimos del hecho de que vivimos un momento de la
metapolítica, que significa el agotamiento de los enfoques tradicionales para analizar lo
político en virtud de las propias transformaciones que ha sufrido la política en el mundo y
particularmente en nuestro país. Se vive un proceso de complejización real de lo político,
hay un proceso de metamorfosis de la política que nos conduce a la pospolítica: crisis de
nuestro sistema político, crisis de las estructuras tradicionales de intermediación de
intereses y acción política, movimientos políticos -camuflajeados de movimientos sociales-
que vienen a suplantar las fracturas tradicionales de esfera política.
Lo político no se define ya como función de grupos o conglomerados de individuos, sino
como un sistema de acción. Es aquí donde la metapolítica se impone como único esquema
adecuado para dar alguna luz a las dificultades que vivimos y al actuar político.
Debemos tener claro que las estructuras de poder en Venezuela ya no son lineales,
jerárquicamente descendientes desde el vértice hacia la base, se ha vuelto un complejo
46
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

mundo de relaciones particulares. La política en Venezuela ya no es expresión general de la


vida social. La representatividad política dejo de cumplir la función para lo cual fue
concebida. Las decisiones políticas no son expresión intersubjetiva de una totalidad que
dialoga, valga precisar, las decisiones política no son expresión dialógica de los intereses y
expectativas de las personas. La política tal como la conocimos ha cedido lugar a la
pospolítica, producto del régimen que vivimos, además de la complejización de lo social.
Tenemos que convertir el karma en Darma, es decir, ese aislamiento que ha producido el
régimen ha dado lugar a que el individuo buscando sortear la tempestad vuelva anteponer la
condición humana, al mundo de la relaciones en un sistema de acción, volviendo así, sin
proponérselo, a la concepción política de los griegos, hacia esa nueva relación deben
apuntar el accionar político.

Partir del aquí y el ahora. Mirla Pérez


Llega a mis manos un documento cuyo título es una afirmación desafiante, su autora,
Catalina Ramos, se propone pensar un complejo problema, tanto para la política en
términos generales, como para la que nos toca pensar en un país llamado Venezuela.
“Innovación política para la libertad”, es una sentencia que nos desafía a pensar dos
vocablos esenciales: política y libertad. ¿Qué es la política?, ¿qué es la libertad?, y ¿de qué
Venezuela se trata?
Catalina, nos invita a que la acompañemos en la narración de una experiencia y en la
formulación de preguntas, algunas las responde y otras las deja abierta al libre juego de
nuestras propias inquietudes, que produzcan resonancias, empatía o debates. El diálogo con
el texto se abre para el acuerdo o para disentir. Eso hace que la propuesta gane profundidad.
Animada por las interrogantes, me dejo guiar por ellas y me pregunto: ¿de qué nueva
cultura política se trata? Un nuevo vocablo se suma al ya complejo panorama: cultura.
Cultura política. Es inevitable juntar cultura a Venezuela. En la búsqueda que se produce en
compañía con Catalina, me encuentro con un texto de Alejandro Moreno, 2008, en el que
podemos encontrar el significado de cultura desde las coordenadas vitales e histórica, no
como proyecto sino como realización: “Entiendo aquí por cultura la totalidad del vivir
concreto de un grupo humano determinado en un tiempo histórico. Este vivir se ha —
existe— de una determinada manera, en un modo de vida. La vida y su modo de existir son
inseparables. Su integración constituye la cultura. Ahora bien, la vida, viviéndose
históricamente en la totalidad de su existencia, produce su modo histórico de existir, pero, a
su vez, el modo de vida, en el que ésta existe, la rige también mientras es por ella regido.”
La cultura existe, está ahí, nos define, funda modos de habérselas con la realidad de un
determinado grupo humano, uno de esos modos es la política. Discurren en la vida, ¿será
que una tarea esencial es descubrir la consistencia de esos modos culturales y políticos, y
desde ahí producir una estructura de poder con esas raíces? ¿El desafío no sería fomentar
una nueva ciudadanía, ni una nueva cultura política, sino desvelar y reencontrarnos en lo
que por siglos se ha venido produciendo?
Nos encontramos, así, con Venezuela. País que alberga la cultura, pero también la política,
en su territorio se ha impuesto un sistema que no surgió naturalmente desde su historia. Se
trata de una revolución que se ha impuesto rompiendo con los lazos tradicionales de la

47
Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

política y que pretende someter toda la vida humana, desde la cultura pasando por la
identidad hasta llegar a la familia. Se trata de un proceso de desidentificación para
reidentificar en otro sistema de valores, de cultura, de poder, etc.
El punto en el que estamos nos impone pensar fuera de los conceptos tradicionales de la
política. Los sistemas totalitarios rompen con todo lo que implique arraigo o identidad.
Pasan primero por ser regímenes o Estados fallidos hasta lograr delinear la configuración
de la nueva estructura de poder. “Nuestra trayectoria supera cada terreno específico y
considera la dimensión criminal como una de las dimensiones propias del conjunto del
sistema comunista durante todo su período de existencia.” Con Stéphane Courtois, tenemos
clara esta dimensión criminal. Esta es la Venezuela del aquí y el ahora, ¿desde dónde
pensar y hacer política?
El sistema se ha mantenido porque ha logrado sustituir la institucionalidad republicana,
democrática, de bienestar y ha impuesto una estructura basada en la dependencia, en la
minusvalía del sujeto, en el hambre, en el control de sociedad por la delincuencia, en el
miedo, eliminación de la libertad, obligando a más de 6 millones de venezolanos a huir del
país por la pobreza e inseguridad.
Estamos en un país fragmentado, unido sólo por los lazos de las megabandas, del crimen
organizado en alianza con las fuerzas públicas y militares y del incipiente pero firme Estado
comunal. Estas primeras preguntas van dirigidas al poder establecido, ¿cómo hacer política
para lograr la libertad?
Catalina, nos da una respuesta: “En nuestro planteamiento proponemos incluir en forma
explícita la cualidad de la responsabilidad como parte inherente del modelo de ciudadano
que buscamos, cualidad imprescindible para el éxito del sistema político que estamos
proponiendo para Venezuela, ya que consideramos que el ejercicio de la misma está
intrínsecamente vinculado al ejercicio y disfrute de la libertad, valor principal y foco de una
República Liberal, lo que la ha convertido en el principal foco de ataque por diseño, por
parte del régimen chavista que lleva 23 años en el poder.”
Es importante que no perdamos de vista que el régimen se mantiene no por los incentivos
que da sino por la fuerza, por la eliminación de la libertad y el consecuente sometimiento.
Estas prácticas de la libertad y la responsabilidad son fuertemente atacadas por los sistemas
totalitarios, volvamos a Stéphane Courtois: “el habitante de una democracia occidental
desearía creer que el totalitarismo es completamente ajeno a las aspiraciones humanas
normales. Ahora bien, si así hubiera sido el totalitarismo no se habría mantenido durante
tanto tiempo ni habría arrastrado a tantos individuos en pos de sí. Por el contrario, es una
máquina de una eficacia impresionante. La ideología comunista propone la imagen de una
sociedad mejor y nos impulsa a aspirar a ella: ¿acaso no es parte integrante de la identidad
humana el deseo de transformar el mundo en nombre de un ideal? Además, la sociedad
comunista priva al individuo de sus responsabilidades: son siempre “ellos” los que
deciden.”
Es un sistema que se impone, ahora bien, no son inmunes a las culturas que dominan. De
hecho, su debilidad es la fortaleza del otro, y el otro solo es fuerte en su identidad, en su
modo de vida, en su cultura. El desafío no es producir un nuevo sujeto, un nuevo ciudadano
libre y responsable, sino favorecer el entramado de ciudadanos que ya son responsables y a
los que se les ha quitado la libertad.

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Para cerrar, quisiera citar en extenso a Alejandro Moreno, 2008, quien destaca el valor de
reconocer lo que tenemos y desde ahí favorecer procesos de cambios y liberación: “Cuando
se dice que el venezolano no ha logrado ni siquiera formar comunidad, se está haciendo una
afirmación totalmente falsa. Comunidad, como la entienden los modernos, ciertamente no,
pero comunidad como entramado de relaciones de vecindad convivial, es un hecho
indudable para cualquiera que se sumerja en el pueblo y desde él la viva. No una
comunidad de instituciones comunales, sino una comunidad de relaciones conviviales
que produce sus propias formas de convivencia, las cuales no pueden recibir el nombre
moderno de instituciones porque pertenecen a otro mundo de vida. Lo que no puede
nombrar desde sí misma, la modernidad lo declara inexistente, pues las condiciones de
existencia las pone su lenguaje.”
El reto es pensar con el lenguaje popular, con la realidad que está ahí, que existe, que se
vive y tiene la fuerza para generar cualquier cambio. Vecindad convivial parece ser una
clave interesante, potente, con arraigo, con identidad, ¿será que ahí tendremos las
cualidades comunitarias requeridas? ¿El ciudadano o vecino requerido? Sin olvidar que
estamos en un fuego cruzado, por un lado, el sistema totalitario contra el que hay que luchar
y vencer, por el otro, la comunidad convivial punto fundamental para poder reestablecer
una sociabilidad libre, responsable, con la identidad que ya la define. En este sentido,
merece la pena hacernos una última pregunta, ¿será posible pensar en la construcción de un
partido que nos lleve a la libertad? El documento nos abre al desafío del aquí y el ahora
venezolano. Primero lograr la libertad para luego restablecer la república.

Julio Jiménez Gedler


Son más los años de vida que tuve dentro de la política que fuera de ella, años en un
partido, otros tanto buscando qué hacer, luego fundé y dirigí un movimiento; siempre
dentro de la lucha, estudiando, pensando y participando. Lo que me motivó de adolescente
a iniciarme en política a convertirme en militante sigue vigente hoy y se suman nuevas
razones; razones que nos unen como ciudadanos urgidos de cambios.
El ensayo Innovación Política para la Libertad de Catalina Ramos es una buena síntesis
que aborda algunas de las razones acumuladas que trajeron a Venezuela a esta perversión
de la política a la par del curso que los cambios tecnológicos e históricos del milenio. A su
vez, propone en concreto el método político necesario para los liberales, este es su punto
débil histórico en las sociedades hispanoparlantes.
Hablar de innovación política hoy es asumir en filosofía y práctica continua tres elementos
indispensables:
• El desplazamiento de la militancia por el activismo.
• La conexión entre micro organizaciones por causas comunes.
• Definición humana del liderazgo necesario.
En este respecto, el ensayo nos aporta elementos de fundamento para la discusión sobre la
crisis de los partidos políticos y la ausencia del liderazgo para la sociedad venezolana que,
aunque contiene el enfoque ideológico de Vente Venezuela, tiene elementos supra
ideológicos a tomar en cuenta para la construcción del nuevo sistema político para nuestro
país.

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

En ese respecto, calificar y cualificar al ciudadano como sujeto transformador ya no es una


tesis por comprobar o un ideal, es una necesidad que surge por encima de los conceptos; en
ello, el ensayo propone el marco de acción para la política que debe ser objeto de estudio y
análisis permanente entre los proponentes del cambio en Venezuela comprendiendo que no
existe sistema político democrático sin partidos políticos, no existen partidos políticos sin
ciudadanos. Sin ciudadanos no existe democracia, así entiendo la propuesta y la felicito.

Algunas consideraciones sobre la relación del partido político con el


ciudadano en los tiempos actuales. Martha Yanira Hernández
La nueva cultura política se soporta en dos premisas fundamentales: la primera es que el
ciudadano ha alcanzado mayores niveles de conciencia sobre su rol y poder en la sociedad;
y, la segunda, que la incorporación de la tecnología en prácticamente todos los ámbitos de
la vida de las personas ha derrumbado muchas barreras, brindando herramientas de
participación directa –individual o colectiva– en asuntos de interés público. En
consecuencia, el individuo ya no requiere de una organización formal para incidir en su
entorno.
Por tanto, asumiendo que un partido político es –entre otros– un espacio donde las personas
pueden participar para articular esfuerzos con otros ciudadanos –que hacen vida y/o lideran
esta organización– y tomando en consideración las premisas mencionadas, las formas de
relacionarse han cambiado considerablemente. De allí que los partidos políticos enfrentan
actualmente un gran reto para garantizar su existencia. Se trata de una evolución interna de
valores, procesos y estructuras que generen y brinden recursos atractivos para los
ciudadanos, que respondan a sus demandas y que establezcan con el resto de la sociedad
una relación basada en la reciprocidad, a partir del trabajo conjunto y la obtención del poder
para servir.
Los procesos electorales, si bien constituyen mecanismos a través de los cuales las
organizaciones políticas alcanzan los espacios de poder público desde donde ejercen el
gobierno, ya no son suficientes para garantizar la construcción de un equipo político que
sostenga al partido en momentos no electorales. Se hace necesario contar por una parte con
un liderazgo identificado y comprometido con los valores e instituciones del partido y a su
vez con un proyecto de corto, mediano y largo plazo, construido y deseado por la
ciudadanía.
La participación en la toma de decisiones, el debate y la formación para alcanzar mayores
niveles de comprensión y aprendizaje sobre los fenómenos políticos, sociales y
económicos, así como también la integración, coherencia y cooperación de quienes ejercen
el liderazgo en el partido, son algunos de los elementos claves para la evaluación
ciudadana. Ello exige la identificación de valores, de la misión y la visión organizacional,
así como el contar con reglas de juego claras para todos los miembros. Exige así mismo
evaluar el desempeño y la eficacia interna, los procesos de comunicación efectiva de tipo
matricial y desarrollar una política que esté enfocada en la complementariedad de las
partes, para lograr un objetivo común que ofrezca certezas a los participantes.
La nueva relación entre el partido y los ciudadanos reclama un liderazgo adaptado a estos
cambios, con capacidad no solo para el manejo efectivo del discurso político, sino también

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

gerencia, planificación efectiva, transparencia, negociación real, trabajo en equipo,


articulación con otros actores políticos, económicos y sociales generando redes de
confianza, manejo de herramientas tecnológicas, percepción y sensibilidad ante el entorno.
También reclama que los líderes sean generadores de confianza, lo que conlleva a crear una
cultura
ura organizacional alineada con los intereses de la sociedad. Ello implica
simultáneamente –yy como aspecto clave
clave– motivar y estimular el trabajo dentro de la
organización, al igual que de esta en el entorno, así como también contar con un
mecanismo que permita
mita el ascenso organizacional de sus miembros. Este último ha de estar
fundamentado en el mérito y en la construcción de una carrera política, en la cual el partido
sea concebido como una plataforma útil para lograrlo.
Ahora bien, no solo basta que quien
quienes
es ejercen el liderazgo cuenten con estas capacidades.
Adicionalmente el ciudadano exige el establecimiento de un proyecto país en el que este se
vislumbre a corto, mediano y largo plazos; una hoja de ruta que permita conocer hacia
dónde propone el partido que avance la sociedad y cuáles serían los objetivos a alcanzar.
Para el caso venezolano, por ejemplo, la propuesta a nivel coyuntural estaría relacionada
directamente con la liberación del país, pero a futuro el partido tiene la responsabilidad de
indicarr cuál es el modelo de desarrollo por el que se apuesta. Y en este nuevo desafío el
ciudadano de hoy impone, con justa firmeza, ser el protagonista.
Aquí es importante concientizar que hoy en día los partidos políticos de masas han perdido
pertinencia social
al y solo los perfiles de los cuadros que ejercen el liderazgo serán capaces
de inspirar, convencer y motivar a la ciudadanía para participar directamente en los
planteamientos que se realizan. Un ciudadano que puede participar de manera autónoma
debe obtener
ner un valor agregado como contraparte por mantenerse dentro o cercano al
partido político; compartir experiencias e ideas para fortalecer el ejercicio de la ciudadanía
y el desarrollo en sociedad es, en la práctica, uno de ellos.
Otro de los elementos indispensables
dispensables para llevar adelante una organización política
vanguardista es el uso de tecnologías para alcanzar el desarrollo organizacional y brindar
mayor rapidez en los tiempos de respuesta respecto a las demandas que realizan los
ciudadanos. Para ello se requiere también de una adecuada formación, tanto para las
personas que dirigen el partido como para quienes interactúan a través de estas
herramientas.
En resumen, los partidos políticos deben estar en una permanente evolución, de
conformidad con los cambios
ambios que experimente la sociedad. Su estructura debe ser robusta,
flexible y capaz de adaptarse a las innovaciones y constantes modificaciones en las
variables del entorno, que a su vez cambian tanto las conductas como los intereses de los
ciudadanos.
Vente
nte Venezuela es un partido político que se sustenta sobre una serie de valores que
centran su atención en el ejercicio político y el desarrollo integral del ciudadano. Si bien no
resulta fácil romper con los esquemas conceptuales y procedimentales de las estructuras
partidistas tradicionales, sus estatutos brindan un marco de referencia propicio para edificar
una organización moderna: una organización que pueda cumplir con las demandas
ciudadanas en la actualidad.

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad
libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Resumen curricular.

Catalina Ramos S.
Venezolana, biólogo egresada de la Universidad Simón Bolívar, con Magister de la misma
universidad, es una consultora con una extens
extensaa trayectoria en gestión de la innovación
i
social y política, y el establecimiento de alianzas sostenibles y relaciones con la
l ciudadanía
organizada.
Ha desarrollado
do proyectos de consultoría para instituciones como la Corporación Andina de
Fomento, Fundación Venezolana para el Avance de la Ciencia, Fondo para la reconversión
Industrial y Tecnológica, Fundación Nacional del Arroz y el Instituto Nacional de
Investigaciones Agropecuarias.
Ha sido profesora de postgrado en la Universidad Metropolitana y de la Universidad Simón
Bolívar en el área de creatividad e innovación. Fue Directora General de Transferencia e
Innovación Tecnológica
gica y Científica en el Ministerio de Ciencia y Tecnología. En ese
trabajo representó a Venezuela en Naciones Unidas (Ginebra) y América Latina y el Caribe
(ALCUE-Cartagena),
Cartagena), y como Vicepresidenta Ejecutiva del Consorcio Latinoamericano de
la Yuca. Dos veceses Presidente de la Junta Directiva de la Asociación de Egresados de la
Universidad Simón Bolívar, y actualmente es parte de su Consejo Consultivo.
En febrero de 2010 se incorporó al equipo de trabajo de María Corina Machado, desde las
campañas de primariass para la legislatura del estado Miranda, y luego durante su gestión
como diputada ante la Asamblea Nacional. Durante la campaña presidencial del 7 de
octubre de 2012, llevó la Coordinación Operativa nnacional
acional de las Fuerzas del Progreso, en
el que confluían las fuerzas de la sociedad civil organizada.
Co fundadora del partido Vente Venezuela en mayo de 2012, desempeñándose desde el
inicio hasta octubre de 2016 como Coordinadora Nacional de Formación. A partir de esa
fecha lleva adelante la Coordinación Naci
Nacional
onal de Asociaciones Ciudadanas del partido, y es
miembro de su Dirección Ejecutiva Nacional. Fue la responsable nacional de regiones
r en la
Alianza Soy Venezuela.

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Vente Venezuela: una experiencia de innovación política para la libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

Miguel Angel Martínez Meucci


Doctor en Conflicto Político y Procesos de Pacificación por la Universidad Complutense de
Madrid. Licenciado y Magister en Ciencias Políticas por las universidades Central de
Venezuela y Simón Bolívar, respectivamente.
Ha sido profesor investigador en las universidades Simón Bolívar, Metropolitana y Católica
Andrés Bello en Caracas, y desde 2017 en la Universidad Austral de Chile. Es autor del
libro "Apaciguamiento. El referéndum revocatorio y la consolidación de la Revolución
Bolivariana" (Alfa, 2012) y coeditor/coautor de "Transición democrática o autocratización
revolucionaria" (Ediciones UCAB, 2016), así como de una docena de artículos arbitrados y
más de cien artículos de prensa y divulgación. Actualmente es miembro del equipo
directivo del Observatorio Hannah Arendt, del Comité Académico de Cedice Libertad y del
Comité Ejecutivo de la Sección Venezolana de LASA

José Gregorio Contreras


Licenciado En Ciencias Políticas y Administrativas, mención: politólogo. (Facultad De
Ciencias Jurídicas y Políticas de la UCV). Magíster Scientiarum en Economía
internacional, mención publicación de tesis. (Facultad de Ciencias Económicas y Sociales.
UCV). Máster en Estudios políticos Aplicados. (Fundación Iberoamericana de Gobierno y
Políticas Públicas. Madrid). Doctor en Ciencias Políticas, mención honorífica. Facultad de
Ciencias Jurídicas y Políticas. UCV. Diputado Nacional, periodo 2011-2016. Profesor de
pre y postgrado de la UCV.
Columnista actualmente para Caraota Digital y La Patilla. Ha desarrollado más de una
decena de trabajos y participaciones en revistas y libros, en particular, Sociedad Civil y
Ciudadanía. El reto de la resistencia democrática en Venezuela. (Revista de la Facultad de
Ciencias Políticas y Jurídicas UCV. N° 136, pp. 17-33. 2012) y ¿Qué es un movimiento
social? y su importancia en el estudio de la ciencia política. (Revista De La Facultad De
Derecho Y Ciencias Políticas, 52(136), 68-100. 2022)

Mirla Pérez
Doctora Ciencias sociales, licenciada en trabajo social. Profesora titular en la escuela de
trabajo social de la Universidad Central de Venezuela, profesora del doctorado en ciencias
políticas e investigación y desarrollo. Directora de Investigaciones del Centro de
Investigaciones Populares, Investigadora de los procesos totalitarios, de las dinámicas
socio-comunitarias y del Estado Comunal, entre otras áreas.

Julio Jiménez Gedler, “juliococo”


Activista, militante y estudioso de la política desde muy joven, ha construido una
significativa trayectoria dentro de la movilización social en su querida Venezuela, primero
como dirigente estudiantil, luego como militante de partido y luego como dirigente,
comunicador y organizador político siempre en disidencia al régimen chavista en
Venezuela.
El uso efectivo de las redes sociales para la difusión de sus mensajes lo ha convertido
también en un ciberactivista y especialista en creación de comunidades. Así fundó y dirigió
el Movimiento Democracia Sociedad y Desarrollo para Venezuela –DSD Venezuela– con

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libertad. Catalina Ramos S. Marzo 2022

base en sus estudios y teorías, actualmente alejado del activismo y dirigencia política se
dedicaa al análisis y asesorías privadas, a la colaboración ad honorem en grupos de
pensamiento y respuestas, y a la creación de contenidos de formación política y ciudadana

Martha Hernández
Ingeniero de Sistemas, Magister en Economía mención Políticas Económicas,
Económica candidata a
doctora en el Doctorado de Ciencias Organizacionales en la Universidad de Los Andes,
Venezuela. Es Profesora de la Universidad de Los Andes en pregrado y postgrado,
Investigadora adscrita al Instituto de Investigaciones Económica y Sociales e investigadora
invitada en diversos trabajos del Centro de Investigaciones Agroalimentarias de la Facultad
de Ciencias Económicas y Sociales, miembro del comité técnico de la Cátedra Libre
Formación para La Libertad y autora de diversos artículos científi
científicos
cos y de opinión.
Es coordinadora en el estado
stado Mérida y cofundadora del ppartido político
olítico Vente Venezuela
junto a la líder nacional María Co
Corina Machado, fue coordinadora municipal,
unicipal, coordinadora
co
del estado Mérida y enlace de la región L
Los Andes de la Asociación
ción Civil Súmate.

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