Profetas en El Hoy Andrés
Profetas en El Hoy Andrés
Profetas en El Hoy Andrés
23 de marzo de 2022
Introducción al Profeta en el hoy
El nombre del profeta viene del griego (prophetes), es decir el que habla en lugar de, en
nombre de. Sólo a partir del siglo II d.C. se le dio la partícula de anunciar con proyección
de futuro. Expresamos que en Israel hay diferentes palabras para denominar al profeta:
nabí; profeta: roé, vidente y hozé, el que recibe una revelación, vidente; algunas veces falso
actualidad Nuestra imagen del profeta suele estar muy ligada al “típico” profeta del
Antiguo Testamento. Y decimos que tampoco allí hay un único patrón para definirlo. Todos
aquellos quienes llamamos profetas en la Biblia están marcados por muy diversas
contacto con Dios y el modo de transmitir el mensaje, sin mencionar las diferentes épocas
¿Quién es un Profeta?
Los profetas son hombres de Palabra. Esto significa que han de poner a disposición de
Dios sobre todo su lenguaje. Como si tuvieran que dar la carne y la sangre, la vida y
Profética era ante todo un acontecimiento oral. Nunca piden los profetas que se lean sus
su etimología con los usados en hebreo y otras lenguas semíticas para describir la realidad,
hay que reconocer que su significado corresponde la función principal del personaje. El
Los textos proféticos de la Biblia presentan muchos casos precisos en los que aparece
este carácter original del profeta. Isaías ante Ajaz (cfr Is 7, 1-17) o Jeremías con su yugo a
“predice” el futuro, una especie de adivino. Esta concepción tan difundida tiene unos
fundamentos, podríamos decir uno erróneo y otro etimológico, y podríamos decir que
algunos textos Bíblicos presentan al profeta como un hombre capacitado para conocer cosas
ocultas y adivinar el futuro, podría citar el caso de Samuel que puede encontrar las asnas
que se le han perdido al padre de Saúl (Cfr 1 Sam 9,6-.20); Ajías, ya ciego, sabe que la
mujer que acude a visitarlo disfrazada es la esposa del rey Joroboán, y predice el futuro de
Se podría añadir que Incluso en tiempos del Nuevo Testamento seguía en Vigor esta
idea, como lo demuestra el diálogo entre Jesús y la Samaritana. Cuando le dice que ha
El Profeta en el hoy
Y podríamos pensar que ser profeta ayer y hoy Para mucha gente hablar de profeta, es
hablar de un hombre que predice el futuro, y en algunos pasajes del A.T podemos
encontrarnos con esta imagen (cfr 1Sm 9,6ss; 1Re 14,1-6; 2Re 1,16- 17; 2Re 5,20-27; 2Re
6,8ss,). Pero, aunque tiene su fundamento, es una imagen incompleta y hasta deformada del
profeta, quien no es un simple adivinador. El profeta es un hombre del presente, pero con
memoria del pasado, que mira hacia el futuro: “las referencias al futuro brotan de un
contacto íntimo con el presente, como respuesta a los problemas e inquietudes que éste
Hoy en día se nos ha perdido la concepción del ser profeta emanada desde nuestro
Bautismo, y hoy en día necesitamos que todos seamos profetas: no críticos, el profeta es
quien reza, mira a Dios, mira a su pueblo, siente dolor cuando el pueblo se equivoca, llora
es capaz de llorar por el pueblo, pero es capaz también de jugársela bien por decir la
verdad. Ese profeta en el cual el mundo necesita hoy, está en la Iglesia al servicio de la
actualización, siempre nueva, del mensaje de Jesús en las situaciones del tiempo,
perpetuamente variables.
Nos dice el Papa Francisco que La Iglesia necesita que todos seamos profetas», es decir,
que él dice; es su propia vida la que se convierte en un mensaje, así como nos los expresa el
libro de Ezequiel: “Me vino esta palabra del Señor: «Hijo de Adán, vives en la casa
rebelde: tienen ojos para ver, y no ven; tienen oídos para oír, y no oyen; pues son casa
rebelde. Tú, hijo de Adán, prepara el ajuar del destierro y emigra a la luz del día, a la vista
de todos; a la vista de todos, emigra a otro lugar, a ver si lo ven; pues son casa rebelde.
Saca tu ajuar, como quien va al destierro, a la luz del día, a la vista de todos, y tú sal al
sácalo en la oscuridad; tápate la cara, para no ver la tierra, porque hago de ti una señal para
cual esgrime sus propios argumentos, y cada día estamos en una sociedad convulsionada y
se hace arduo anunciar y proclamar lo que el Señor nos pide, es una tarea a la cual todos
Evidenciamos que el profeta de hoy también por su labor, Dios le encomienda la tarea
comunidad, Dios se encuentra con los hombres, por lo que la palabra de los profetas es un
signo elocuente de esta presencia divina, también el profeta ha de ser un puente entre
Dios y la humanidad, no obstante, son varias las veces en la que dicha labor cae en
Bibliografía
Sicre, J. L. (1993). Reseña Bíblica los Profetas. Revista trimestral de la Asociación Bíblica
Española, 5.