nLrn libro brillante y original de Ia pensadora más sagaz desde Dari,vin-

ffil,tgffi"'$ffi DAì*IIEL GILBERT, auror de Tropeza.r con lafelicitlad

¿Y si roDo r.o quE cr{EÍÀMos sAtsER soBRjj ËL

LISA

ÐllsEO? LA.IIìA, LA pENA y L1 AIEGiìÍA

L& wHffi& ffiffiffireffiwA
FUERA FELDMAN
TN C OIìRECTO I

BARRETT
Las emociones parecen algo automático, como reacciones
incontrolables a las cosas qrJe pensamos v expe rimentamos. Los
científicos han apoyado dulante mucho tiempo esta suposición al
afìrnar que las errociones están de algúrn modo ligadas ar crrerpo
ffiffir ffiffiffiffiffiffiffi
::
o al cerebro. Hoy; sin embargo, la ciencia de las emociones está
en plerra revolución v esir: cambio de paradigma tiene
implicaciones de gran alcance para todos nosotros.
Ê/\
$

Liderando el cambio se encuentra la psicóloga y neurocientífica ruiu ::

LlS,å FËLDMAh¡ BARRETT, cuva teoría de las emociones csrá tråÃ

ilnptilsanclo una cornpre nsión más profunda d.e ia mente i, el f x L&å
cerebro, alavez que da nuevas claves sobre lo que significa ser
Mj tti
humano. Su investigación revierre la creencia generalizacla
de que las emociones se alojan en diferentes partes del cerebro
tffi r& ìl

ã¡ã ii

v se expresan v reconocen tuirrersalmente. Muy al contrario, ha : s

den'rostrado que las emociones se construyen en el momento,
IB ..:

mediante sistemas centrales que interactúan en todo el cerebro

-J
gracias a toda una vida de aprendizaje. Esta nueva teoría implica
qlle tenemos un papel mucho más importante en nuestra vida
æ så!

e mocional de 1o que creíamos. - &**3

I
En descubriremos las últimas invesiigaciones
Lc¿ uirl,a secreta del csrebro

-v aplicaciones prácticas de la nueva ciencia de las emociones

':¡.4 : ::.1). ..)'r.. ::: .. .:..t
la mente y el cerebro.
üoEwo se consïruyen Í,as ew;tc'i,o,yl€s

¡SBN: 978 607-747-636-8

iii.ìtl::i;:j.lrtliì:.1,i:;:'lr'1.ì:àl::¡:ji:itiä

.i ilii::r.ti!i:1,:l!; Lå5A FËLDMAN BARRHTT

eBook
îffilililillllil]lillilil
wwu;. p lanetadelibros.com. mx \il1Ð
D¡SPONIBÚ

ffiftfwüffiE& \ilÐ rttl>p¿mÓs

 Surnario

Introducción. {Jn supuesto de dos mil años de antigüedad 77

1. La búsqueda de las <<huellas dactilares> de las emociones T9

2. Las emociones se construyen 47
l. El míto de las emociones uníversales 67
4. El orígen del sentir 83
5. Conceptos, metas y palabras r17
6. Cómo construye emociones el cerebro 1.51
7. Las emociones como realidad social 169
8. Una visión nueva de la naturalezahttmana ... . 797
9. Domina¡ nuestras emociones 223
10. Emoción y enfermedad . . 253
i1. Emoción y derecho 277
72. ¿Estâenfadado un perro que gruñe? 317
11. Del cerebro a la mente: la nueva frontera 349

Agradecimíentos 367
Apéndice A. Introducción al cerebro 377
Apéndice B. Suplemento para el capítulo 2 . . . . 383
Apéndice C. Suplemerúo para el capítulo 3 . . . . 385
Apéndice D. Pruebas de la cascadâ de conceptos 387
bJotas 399
Bibliografía 459
Índice anaTíticoy de nombres . . . . 521
Créditos de ias imágenes 539
796 LA. VIDÄ SECRETA DEL CEREBRO

ría ð.eIa emocíón construida. Las normas de una cultura nuevâ pueden Crq'PITULO
pafecef extfañas o incluso erróneas hasta que hemos vivido un tiempo en
eJJ.ayJJegamos â entendeflas... Y espero que el lector ,valohaga o que Lo
acabehaciendo. A final, si yo y otros cíentíficos de ideas afines tenemos
éxito en sustituir 1os conceptos antiguos por los nllevos, estâIemos ante
I
una revolución cíentífíca. Una visión nueva
Lateoria de la emoción construida explíca cómo experímentamos y
percibimos emocíones en ausencia de cuaiquier huella åacttl.at biológica de la natural ezahutnana
constante en el rostro, el cuerpo o el cerebro. Puesto que el cerebro pre-
dice y sirnula continuamente todos \os inputs sensofiales del ínterior y el
exteriof del cuerpo, entiende 1o que signífícan y sabe qué hacer con ellos.
Estas predícciones v.ajanpof la cottezacefebfal, pfopâgándose en cascadâ
desde los circuitos de presupuestacíón corporal de la red interoceptiva
hasta las cortezas sensoriales primarias Para cfear en todo el cerebro simu- Lateoríade 1a emoción construida no es solo una explicación moder-
laciones distribuidas, cað-a una de las cuales es un caso de un concepto. na de cómo se forman las emocíones. También es embajadora de una vi-
La simulaci ónmás cercaftaa nuestfa situación real es Ia ganaåony se con- sión radicalmente diferente de 1o que signifíca sef humanos. Esta visión
vierte en nuestra expefiencia, y sí es un caso de un concepto emocional es coherente con las ultimas investigaciones en neurociencia. También nos
experimentamos la emoción. Todo este proceso se cia, con la ayuåa åe da más conffol que la visión cIâsica sobre nuestras sensacíones y nuestrâ
nuestrâ red de conttol, al servicio de regular nuestfo presupuesto cofpo- conducta, y tiene profundas repercusíones en la manera de vivir nuestra
ruIparamantenernos vivos y sanos. Con ello influimos en 1os presupues- r,'ida. No somos animales reactivos, cableados para teaccionat alos suce-
tos cofpofâles de quienes nos todean para que nos ayuden a sobrevivir y sos del mundo. En io que se refíere a nuestas experiencias y percepcío-
a prcpagef nuestros genes aIa generución siguiente. Así es como crean nes, estamos en el asiento del conductor más de 1o que podríamos pensâr.
rcabdað.social1os cerebros y los cuerpos. También es así como se hacen Ptedecímos, construimos y âctuamos. Somos arquitectos de nuestra ex-
reales las emociones. periencia.
Sí, eso es mucho decir. Y algunos detailes todavía son solo especula- La visión c!âsica de la emoción es otra perspectivâ convíncente de Ia
ciones fazonaåas,como los mecânísmos exactos de la cascada conceptual. naturalezahumana. Ha exisddo durante miles de años y sigue estando in-
Pero podemos afirmar con toda seguridad que ia teoría de la emoción corporada en el derecho, la medicina y otfos elementos cruciales de la so-
construída es una manetaviable de pensal en cómo se forman las emocio- ciedad. En realidad, las dos visiones han estado en guerfa entre sí alolar
nes. La teoríaexplícâ todos los fenómenos de la visión clásica además de go de la historia escrita. En las batallas anteríotes, la visión clâsica dela
sus anomalías, como la enorme varíabilidad de las experiencias emocio- natutalezahumana siempre ha salido ganando por fazones queanalnate-
nales, los conceptos emocionales y los cambios físicos durante una emo- mos, pero ahora, cuando estamos en medio de una revolución de la men-
ción. A su vez, disuelve los debates inútiles en tofno a 1o innato y lo ad- te y de1 cefebfo, la neurociencia moderna nos ha dado los ínstrumentos
quirido (por ejemplo, qué está. cableado y qué es aprendido) utilizando para resolver el conflícto y, vistas las pruebas abrumadoras en contra, la
un solo mâfco de referenc ia para entendel Ia reabåað. (tsica y ia realidad i'isión clásíca ha perdido
social, dando así un pâso más haciala construccjón de un puente científí- En este capítulo expondré una visíón nuevâ ;z distintíva de la natura-
co entfe el mundo social y e1 mundo natutal. Y, como analízatemos en el leza humana que representa la teoría de la emoción construida, y 1a com-
capíûfo siguiente, este puente, como todos los puentes, nos llevará â un pararé con 1as ideas tradícionales propugnadas por ia visión clâsica.
lugar nuevo: un relato moderno sobre 1o que significa ser humanos. Tambíén presentaré a un oscuro culpable de que la visíón clásica h aya ocu-
 198 LÄ VID,{ SECRETA DEL CEREBRO UNA vtslóN NUEVA DE LA N,{TLTR{LEZA HUì\LdN,i,L t99

pado un lugar tanprominente durante tanto tiempo, un culpabie conso- mos de ciertas mâneras que cablean los cerebros de la generación si-
lidado en la ciencí a y en 1a cultura, a pesar de una corriente consrante de guiente. Por ejemplo, si una cultura dícta que las personas con ciefios
pruebas en contra. colores de piel son menos respetables, esta realidad socíal tiene un efecto
físico en ei grupo: sus salarios son más bajos y ia nutrícíón y las condicio-
I
!D @
nes de vida de sus hijos sorì peores. Estos factores cambian la estructura
cerebiai de sus hijos a peor, haciendo la escuela más difícil y aumentando
La mayotía de nosotros pensamos que el mundo exterior está sepa- las probabilida<Íes de que los hijos ganerr' sueldos más bajos en el futuro.l
rado físícamente de nosotros. Los sucesos ocurren <<ahí fuera>>, en el Nuestras construcciones rio son arbitrarías: el cerebro (y la mente
mundo, y nosotros reaccionamos a el1os <<aquí dentro>>, en el cerebro. que crea) debe mantenerse en contacto con los fragmentos de realí-
Pero en Iateoría de la emoción construida,Ialínea divisoria entre el dad que cuerìtan para mantener el cuerpo vivo y sano. La construcción
cerebro y el mundo es permeable, quizâinexístente. Los sistemas centra- no puede hacer que un muro sólido deje de serlo (salvo que seamos mu-
les de nuestro cerebro se combinan de díversas maneras para construir tantes con superpoderes), pero podemos volver a,tlazar fronteras, rede-
percepciones, recuerdos, pensamientos, sentiffiientos y otros estados men- finír el maffimonio o decidir quién es respetable y quíén no. Nuestros ge-
ta-les. Hemos experímentado esto con 1a inagenborrosa delaabeja,cuân- nes nos han dado un cerebro que puede cablearse a sí mismo en función
do hemos visto formas que no existían físícamente, demostrando que e1 de nuestro entorno físico y social, y otros miembros de nuestra cultura
cerebro modela nuestro mundo mediante simuiación. El cerebro crea una construyen ese entorno con nosotros. Hace faJta mâs de un cerebro para
avalancha de predicciones, simula sus consecuencias como si fueran rea- creâf una mente.
les, y comprueba y corrige esas predicciones comparándolas con eI input Lateoúa de la emoción construiåatambién conduce aûnar;,arrera
sensoríalreal. Por e1 camino, nuestras predícciones interoceptivas produ- de pensar totalmente nueva sobre la responsabilidad personâl. Supon-
cen sensaciones de afecto,influyen en todos los actos que reaTtzamos y de - gamos que estamos enfadados con nuestro jefe y que arremetemos con-
termínan qué partes del mundo nos ímportan en cadamomento (nuestro tra él impulsírramente dando un puñetazo sobre su mesa y llamándole
nicho afectivo). Sín interocepción, no notaríamos o no nos importaría idiota. Mientras que la vísión clásica poåría atribuir parte de \a ctipa a
nuestro entorno físico ni ninguna otra cosa, y seúaimprobable que sobre- un hipotético circuito de la ira absolviéndonos en parte de la responsa-
viviéramos mucho tiempo. La interocepción permite a nuesro ce¡ebro bilidad, la construcqión extiende 1a noción de responsabilidad más alfá.
constfuir el entorno en el que vivimos. de1 momento del daño. El cerebro es predictivo, no reactivo. Sus siste-
Al mismo tiempo que ei cerebro modela nuestro mundo, el mundo mas centrales están ffatanào de adivinar constantemente 1o que pasatâ a
exterior ayuda a cablear nuestro cerebro. Cuando éramos bebés inunda- contínuación paîa que podamos sobrevivír. Por 1o tanto, nuestros actos,
dos de iruputs sensoriales, e1 mundo exterior sembraba nuestros primeros y las predicciones que han desencadenado esos actos, están conformados
conceptos a medida que e1 cerebro se cableaba a sí mismo paralas rcali- por todas nuestras experiencias pasadâs (como conceptos) que han des-
dades del mundo físico que nos rodeab a. Asíes como los cerebros de los embocado en ese momento. Golpeamos la mesa porque nuestro cerebro
bebés se cablean para reconocer rostros humanos. cuando el cerebro se ha predicho un caso de ira usando nuestro concepto de <<Ira>>, y nuestra
desarrolla y el bebé empiezaa aprender palabras,el cerebro se cablea a sí experiencía pasada (con independencía de que sea directa o debida a pe-
mismo para eI mundo social y empíeza a ctear conceptos purâmente lículas, libros, etc.) incluyela acción de golpear la mesa en una situación
mentales como <<Cosas que nos pueden proteger de insectos que pican>> simi.lar.
o <<Tristezo>. Estos conceptos de nuestra cultura parecen estâr en el mun- F.ecordemos que nuestra red de control conforma constantemente e1
do exterior, pero son construcciones de nuestro sistema conceptual. curso de nuestrâs predicciones y el error de prediccíónpara ayrdar a ele-
En esta visión, la cultura no es como un vapor amorfo y sutil que nos gir entre múltiples acciones, tanto si experimentamos que tenemos el
rodea, sino que ha ayudado a cableat nuestro cerebro, y nos comporta- controi como si no. Esta red solo puede trabajar con los conceptos que
200 LÅ VIDÄ SECRETA. DEL CEREBB.O UNA \¡ISIÓN NUEVA DE LA NÄTURALEZA HUMANA 20r

tenemos. Por 1o tanto,la pregunta sobre la responsabilidad se convierie culpar de tener los conceptos asociados; pero de aciultos podemos elegir
en si somos responsables de nuestros conceptos. Sin duda, no de todos. educarnos a nosotlos mismos y aprender otros conceptos. Está claro que
Cuando éramos bebés no podíamos elegír los conceptos que los demás no es taieâ fácil, pero es factible. Esta es offa de las bases para sostenef
ponían en nuestra cal¡eza. Pero está claro que de adultos podemos elegír mi frecuent e afirmación de que <<somos arquítectos de nuestra experien-
a qué nos exponemos y, en consecuencia, qué aprendemos) es decir, lo ciæ>. Sin duda, somos parcialmente responsables de nuestros actos, in-
que crea los conceptos que, aI hna7, impulsan nuestros actos con inde- cluso de lasllarnaåas reacciones emocionales que experimentamos como
pendencia de que se sientan como intencionados o no.2 Así pues, <<res- sí estuvíeran fuera de nuestro conffol. Somos responsables de aprender
ponsabilidad> sígnifíca hacer elecciones deliberadas para cambiâr nues- conceptos que, pof medio de la predicción, nos alejen de actos dañinos.
tros conceptos. También tenemos alguna responsabílidad pata los demás, porque nues-
Como ejemplo dei mundo real, elljamos cualquier conflicto prolonga- tfos actos conforman los conceptos y las conductas de offas pefsonas'
do en e1 mundo; israelíes contrâ palestínos, hutus conßa tutsís, bosnios creando el entorno que enciend e y apaga sus genes pan cablear sus cere-
contra ser-bios, suníes contra chiíes. Me la voy a jugar proponíendo que bros, incluyendo los cerebros de la generación siguiente. Realidad social
ningún miembro vivo de estos grupos tiene la culpa delaraque siente un significa que todos somos responsables en parte de nuestra conducta
grupo hacia otto porque los conflictos en cuestión empezaron hace mu- *,rr,ru, no de unamanerasuperficial, del tipo <<culpemos a la sociedad>>,
chas generaciones. Pero hoy, cada indivíduo tiene una parte de responsa- sino en el sentído muy real de cablear ei cerebro.
bilidad por continua¡ el conflicto, porque cada índividuo tiene la posibi Cuando era psicoterapelttatral:aié con mujeres de edad universitaría
lidad de cambiar sus corìceptos y, en consecuencia, su conducta. Ningún que de niñashal¡ían sufrido maltratos a manos de sus padres. Solía ayr-r-
conflicto concreto está predeterminado por la evolución. Los confiíctos dar a mis clíentas a entender que habían sido maltratadas dos veces: unâ
persísten debido a circunstancías sociales que cablean los cerebros de los vez enaquel momento, v otîàvezporque se habían quedado con un sufri-
individuos que particip an. A/guien debe responsabilizarse de cambiar es- mienfo emocicnal que solo ellas podían resolver. A causa de su trauma,
tas circunstancias y estos conceptos. ¿Quíén Iovaahaceq si no las perso- sus cerebros seguían modelando un mundo hostil, incluso después de
nas mismas? habe¡: escapado a otro mundo mejor. No fue culpa suya que sus cerebros
Para responder a esta cuestión, un estudío científico ofrece algunos hubieran sido cableados para un entofno tóxico concreto. Pero cada mujer
visos de esperanza. Unos investigadores enseñaron a un grupo de suietos es la única que puede transformar su sistema conceptual para conseguir
is raekes a r ecafegor iz ar de una manel a menos ne gativ a dirrers o s suces os que las cosas mejoren. Esa es la forma de responsabílidad a la que me
negativos como los lanzamientos de cohetes por parte de los palestinos o .efiero. A rreces, responsabilídad sígnifíca que somos ios únicos que pode-
el secuestro de un soldado israelí. Después, los sujetos no solo se mostra- mos cambiar las cosas.
ron menos irritados, sino que mostraron más apoyo a políticas que de- Y ahora llegamos a la cuestión del origen humano. Estamos acostum-
fenåían posturas más concili atotias y pacíficas como ofrecer ay'uda a 1os brados a vernos como el destíno final de un lafgo viaje evolutivo. La teo-
palestinos y dar menos apoyo a esrrategias agresivas dirigidas a los pales- ría dela emoción construída adopta unâ pefspectívamâs equfibrada' La
tinos de Iaftanja åe Gaza. En aqueila época, los palestinos habían solicí- selección naïfralno apuntó en nuestfa dirección. Solo somos una espe-
tado su admisíón como míembros de Naciones Unidas, y aquel entiena- cie nrás con unas aåaptaciones concretas que nos ayudan a pasar nues-
miento en recategorización hizo que 1os sujetos apotaian renuncíar a los tfos genes a Ia generación siguiente. Otros animales han desarrollado
controies de seguridad en los barrios de Jerusalén oriental a cambio de nruchas capacidades que no tenemos> como saltar grandes distancias o
ùna paz plena, y que dieran menos apoyo a políticas restrictivas como escalar pur.d.r, que es la razón de que superhéroes como Spider-Man
prohibir a los palestinos e1 uso del sistema sanitario israelí. Estos últimos nos fascinen tanto. Es evidente que los seres humanos son los que tienen
cambios persistieron cínco meses después del entrenamiento.i más talento parâ construir cohetes que lleguen a otros planetas y para in-
Si crecemos en una sociedad llena de ira o de odio, no se nos puede \¡entar y aplicar le1,es que existen en nuestfas mentes y dictan cómo debe-
 202 LA VID,{ SECRET,\ DEL CEREBRO uN¡ vrsróN xuEV,LDÊ LA NATURALEZA HUMANA 203

mos tratârnos mutuamente. Algo en ei cerebro humano nos proporciona contÍamos, incluyendo el mundo social creado por acuerdo entre perso-
nuestras capaciåaåes únicas, pero ese .."1go> no tiene por qué ser un nas. Nuestra mente es uriâ espléndida colaboración de la que no tenemos
conjunto de circuítos separados y dedicados a los coheres o a hacer cum- conciencia. Mediante la construcción, no percibimos el mundo en un
plir las leyes en realidad, dedícados a 1as emocí transmitidas sentido exacto objetivamente, sino que 1o percibimos a través de la lente
por nuestros -o,
ancestros no humanos. de nuestras propias necesidades, nuestras metas y nuestrâs experiencías
una de nuestras adaptactones más notables es que no necesitamos anteriores (como hemos hecho con las manchas yIa abela). Y no somos
lievar encima todo el material genético pana creat todo el cableado de el pinácu1o de la evoiución: soio una clase de animal muy interesante con
nuestro cerebro. Eso sería enormemente costoso desde el punto de vista algunas aptitudes únicas.
bío]ógico. En lugar de eso, tenemos genes que dejan que nuestro cerebro
se desarrolle en el contexto de otros cerebros que nos rodean a trar¡és de a @

la cultura. Del mismo modo que un cerebro individuai aprovecha la re-

dundancia comprímiendo la información en similitudes y diferencias, Lateotía de la emoción construida ofrece un punto de vista de la na-
muchos cerebros aprovechan sus redund ancias mutuas (el hecho de que turalezahumana muy diferente del que ofrece la visión clâsíca. Las ídeas
estemos en la misma cultura y hayamos aprendido ]os mismos concep- clásicas sobre nuestfos orígenes evolutívos, nuestfa responsabijidad per-
tos) y se cablean mutuamente. En efecto, la evolución mejora su eficien- sonal y nuestra relación con el mundo extefioÍ han sido dominantes en 1a
cia por medio de la culturahumana, y transmitímos cultura a nuestros cultura occidental durante miles de años.Para entender esta visión más
descendientes cableando sus cerebros. antigua de la naturafezahumanâ y por qué ha estado tan anatgada àu-
El cerebro humano, desde el nivel macro al nivel micro, está organi- tânte ianto tíempo, conviene empezar hacen tâfìtos relatos cien-
zaáo paraTavariación y la degeneración. En sus redes en interacción hay tíficos- con Charles Darwin. -como
grupos de neuronas que en parte son independíentes y comparten mucha En \B72,Darwin publicó La expresión de las emociones en los anima-
ínformación con efícacia. Esta organizacíón permite qlre se formen y se les y en el hombre, donde escribió que las emociones nos fueron transmi-
disuelvan en milísegundos poblaciones de neuronas en constante cambio, tidas, sin cambiar através de los tiempos, desde un antiguo ancestro ani-
de modo que unas neuronas dadas participen en co-nstrucciones diferen- mal.t Por 1o tanto, según Danvin, las emociones de los seres humanos
tes en situacíones diferentes modelando un mundo variable y predecible modernos se deben a partes ântiguâs de nuestro sistema nervioso, y cada
solo en pafie.4 En un entorno tan dinámíco no hay lug àt paÍahuellas dac- emoción tiene una huella digital concreta y constante.
tiiares neurales. Sería muy ineficiente para toda la humanidad tener un Tomando prestado un término de la filosofia,Darwin estaba dicien-
conjunto heredado de módulos mentales, porque vivimos en entornos do que cada emoción posee una esencia. Silos casos de tristeza se dan
geográficos y sociales muy diversos. El cerebro humano ha evoiucionado con una mueca y un ritmo cardiaco reducido, una huella dacttl,at de
pata crear distintas clases de mentes humanas aåaptadas a entornos dife- <<mueca y ritmo caråíaco reducído>> puede ser la esencia åeIatústeza.
rentes. No necesitamos uir cerebro unive¡sal que cree una mente univer- Por otro 1ado, esta esencia también poåúa ser una causa subyacente que
salpara reivindicar que todos somos una sola especie. haga que todos los casos àeftisteza sean Ia emocíón que son' como un
En general, Iateoúa de la emoción consrruida es una explícacíón psi- conjunto de neuronas (usaré IapaTabl¿<<esencia>> paru teferitme a las dos
cológica, y con una buena base biológica, de quiénes somos como seres posibilidades).6
humanos. Tíene en cuenta tantolaevolucíón como la cultura. Nacemos La creenctaen esencias se l1ama <<esencialismo>>. Presupone que cier-
con aigo de cableado cerebral determínado por nuestros genes, pero el tâs categorías úisteza y el miedo, los perros y los gatos, los estadou-
entorno puede encender y apagm algunos genes permiriendo que el ce- -la africano y caucásico, los hombres y las mujeres, el
nidenses de origen
rebro se cablee a sí mismo en función de nuestras experiencias. Nuestro bien y el mal- tienen ur,a naturaleza o realið,ad verdadera. Dentro de
cerebro está conformado por las realidades del mundo en ei que nos en- caåa categoría, se considera que sus miembros compalten una propie-
 204 L,{ VIDA SECRETA DEL CEREBRO
UNA \,1SIÓN NTIEVA DE LA NATUR{IEZA HUÀ,IANA 205

dad subyacente profund a (unaesencia) que hace que sean similares aun-
El libro más famoso de Darv¿ín, El origen de løs especies, provocó un
que presenten algunas diferencias superficiales. Hay muchas variedades
cambio de paradigma que transformó la biología en una ciencia moder-
de perros que presentan diferencias en cuanto a tantaño, f.otma, color, na. Su máxímo logro científíco, tan bien resumido por el biólogo evolu-
manefa de andar, temperamento, etc., pero estas díferencias se conside- cionista Ernst Mayr,liberó a la biología åeIa<<presa paraltzarte del esen-
¡an irrelevantes respecto auna esencia que comparten todos los perros. cialísmo>>. Pero en 1o relativo a la emoción, Darwin adoptó un cambio de
Un perro nunca es un gato. postura radicai e inexplicable a1 escribir, tiece años después, La expre-
Del mismo modo, rodas las variedades de la vísión crásica conside- sión de las enzocionas, un libro plagado de esencíalísmo. Con ello aban-
ran que emociones como Ia tristeza y el miedo denen esencías distíntas. donó sus extraordinarias innovaciones y volvió aIa ptesa paraTizante del
Por ejemplo, e1 neurocientífico Jaak Panksepp escribe que la esencía de esencialísmo, a1 menos en 1o tocante alas emociones.s
una emoción es un circuito en las regiones subcorticales del cerebro. El Y es que ântes de que la teoría de Darwin plasmada en El origerc se
psicólogo evolucionista steven Pinker escribe que las emociones son hiciera popular en el siglo xrx, e1 esencialismo regía el reíno animal. Se
como órganos mentales, análogos a los ótganos de1 cuerpo, pata unas creía que cada especie tenía una forma ídeal, creada por Dios, con unas
funciones especializadas, y que la esencia de una emoción es un conjun- propiedades definidolas (esencias) que la distínguían de todas las de-
to de genes. La psícóloga evolucionista Leda cosmídes
1,el psicóíogo más especies (cada una con su propia esencia). Las desvíaciones del
Paul Ekman presuponen que cada emoción tiene una esencia innata e ideal se creían debidas a errores o accidentes. Podernos concebir esta
inobservable ara que se refieren como un <<programa>> metafóñco. La creencia como una versión <<exposición canina>> de la biología. Por si el
versión de Ekman de la visión clâsica,l7amada teoriabâsíca de la emo- lector no ha visto ninguna, una exposícíón canina es un certamen pâra
ción, presupone que las esencías dela aregría,Iatristeza,el miedo, la sor- identificar a1<<mejon> perro de entre un grupo de competidores. Los pe-
presâ, Ia ira y el asco son actívad as aûtomáticamente por objetos y suce-
rros no compiten directamente entre sí, sino que son comparados con
sos del mundo. otra versión, JJ.amad,a teoría crásica de 1a evaluación, un perro hipotétíco ideal por unos jueces. Por ejemplo, al evaluar go1-
intercara un paso más entre nosotros y el mundo, y dice que e1 cerebro den retrievers, 1os jueces comparan cada perro con la imagen de un golden
primero juzga (<<eva7úarr) \a sítuación y luego decíde si actir¡ar una emo- retriever ideai. ¿Tiene el perro Ia altura correcta? .¿Sus extremidades
ción. Todas 1as versiones de la visión clásica coínciden en que roda care- son simétricas? ¿Tiene el hocico recro y se fusiona con fluidez con el
goría emocional tíene una huella dacttlar caracteústica; solo discrepan en
cráneo? ¿Su pelaje es de un dorado rico, denso y lustroso? Cualquíer dí-
lanatutafeza de las esencias.T ferencía con e1 perro ideal se considera un error, y gana el perro con el
El esencialismo es e1 culpable de que haya sido tan difícil dejar de lado menor número de errores. De 1a misma matrela> los pensadores influ-
1a visión clâsica.l{ace que 1as personas crean que
sus sentidos rel,elan lí- yentes de principios del siglo xx concebían ei mundo de los seres vivos
mites objetivos en 7a naturareza. Se argumenta que ra alegría y Ia tisteza
como un^ gran exposición canina. Si veíamos un goiden retríever y ob-
son diferentes y que, en consecuencia, deben tener esencias diferentes en
sen'ábamos que caminaba con pasos más largos que la media, esto signi-
ei cerebro. Las personas câsi nunca son conscientes de que esencíalizan;
ficaba que su zancada era demasiadolarga en comparación con el ideal
no ven sus propias manos en movimienro cuando trazanlíneas dír,isorias
o incluso defectuosa.e
en el mundo naturaT.
Entonces rríno Danvin y señaló que ias variaciones dentro de una es-
como se revela en La expresión de las ernociones,la creencía de pecie, como la longitud dela zancada, no eran errores, sino que eran va-
Darwin en las esencias de las emociones ayrrdó a situar la moderna visión
riacíones que cabía esperar y que estaban relacionadas significativamen,
clásíca de las emociones en su posición tan prominente. Esa
misma creen- te con elhâbitat de la especie. Cualquier población de golden rerrieveÍs
cia también hizo que Danvin, inadvertidamente, parecíer-a
un hipócrita. preseniâ una variedad de longitudes de zancada, y algunas ofrecen una
No es fácil criticar mucho menos contradeci¡- ras ideas de uno de
-y de la historia, pero io vamos a jnf.entar. ventaja funcional para correr) trepar o cazal. Los indivíduos con zarrca-
los mayores científicos
das que encajen mejor corì su entorno vívírân rr,ás y tendrán más descen-
 206 L,{ VID,{ SECRETA DEL CEREBRO uN¡ vIsIÓx NUEVA DE LA NATUfu\LEZA HUMANA 207

dientes. Esta es lateoría de ia evolución que Darwin expuso en El origen gigante intelectual. Las 7.200 pá,gínas de su obra Principios de psicología
conocida como selección natural y a \¡eces llamad.a <<supen ivencia del contíenen la mayoúa de ias ídeas más ímportantes de la psicología occí-
más apto>>. Para Darv¡in, cada especie erauna categotía conceptual, una dentai, y sigue siendo, más de un siglo después, la base de este câmpo.
población de indíviduos únicos que se diferenciabân unos de otros sin La Association of Psychological Science estadounidense otorgâ el \x/il-
ninguna esencia en su nricleo. El perro ideal no existe: es un resumen es- liam James Prize, eI galaråón más prestigioso que puede otorgar a un
tadístico de muchos perros diferentes. |.linguna característica es necesa- científico, y e1 edificio de psicología de]ts'arvard se llama \)ØilliamJames
ria, suficiente o ni siquiera típica de cadaíndividuo de 1a población. Esta Hall.
observación, conocida como pensamiento poblacional, ãs fundamentaj
James ha sido muy citado por decír que todas las emocíones
enlateoúa de la evolución de Darwin.io gría, míedo, etc.- presentan una huella åacalar característíca en el-aie-
cuer-
E1 pensamiento poblacional se basa en 7a vaúación mienrras que el po. Esta idea esencialista es un hecho clave de la visión clásica, y genera-
esencialismo se basa en la uniformidad. Las dos ideas son fundamental- ciones de investigadores influencíados por James han buscado esas
iTìente incompatibles. Por lo tanto, El origen es un iíbro profundamente huellas dactilares en los latidos åel coruzón. 1a respira cíón, la presión
antiesencialista. Por eso es tan desconcertante que en 1o tocante a las sanguínea y otros marcadores corporales (y han escrito algunos bestse-
emociones Darwin invirtiera su mayor logro al escribir Ln expresión de llers sobre las emociones). Pero esta afitmacíón deJames tíene trampa:
las emociones.ll nuncâ la dijo. La creencia tan extendida de que 1o hizo se debe â una ter-
Es igualmente desconc ettante, por no decir irónico, que la vísión clá- giversacíón ya centenaria de sus pa)abras a través de la lente del esencia-
síca de las emociones se base, precisamente, en el esencialismo cuya de- lismo.
rrota en el campo de la biologíahizo famoso a Daru.in. La vísión clásica Lo que realmente dijo James fue que cada caso de emoción , no cada
se declara explícitamente <<evolucionista>, y supone que las emociones y categoría emocional, surge de un estado corporal único. Es una afirma-
sus expresiones se deben a la selección natural, pero la selección natural ción muy diferente. Sígnifica que podemos temblar de miedo, sobresal-
está totalmente ausente de1 pensamiento de Darwin sobre las emociones. tarnos de miedo, gritar de míedo, quedarnos paralizados de miedo, que-
cualquier visión esencialista que se enr,'uelva en el manto de Danvin de- darnos sin respiración de miedo, escondernos de miedo, atacal pol
muestra una profunda incomprensión de 1as ídeas centrales de Darwin miedo e incluso reírnos de miedo. Cada caso de miedo está asociado aun
sobre la evolucíón. conjunto díferente de sensaciones y cambios internos. La tergiversación
El poder de persuasíón del esencialismo condujo a Danvin a algunas clâsica deJames representa dar un giro de ciento ochenta grados a lo que
ideas bastante extrâvagantes sobre las emo"ciones. <<Incluso los insectos quería decir, como si estuvíera proponiendo la existencia de esencias
en La expresión de Las emocione-ç- expres an ira,terror, celos y emocionales cuando, irónicamente, estaba argumentando contra ellas.
-escribió
âmol>> cuando restriegan partes de su cuerp o paru.emitir sonidos. pense- En sus propías palabtas: <<El miedo a mojarse no es el mismo míedo que
mos en esto la próxima vez que persigamos a una mosca por la cocina. el miedo a Lrn oso>>.11
También escribíó que eI desequilibrio emocional podía hacer que el pelo
¿De dónde surgió esta tergiversación tan extendida de las ideas de
se tizata.r2
James? Descub¡í que se debía a un filósofo contemporâneo deJames lla-
Además de ser poderoso, el esencialismo también es contâgioso. La mado John Dewey. Dewey planteó su propia teoría de la emoción ínjer-
desconcertante creencia de Dànvin en unâs esencias invariables de las tando en las ideas antiesencialistas de James las opiniones esencialistas
emociones perduró después de su muerte y deformó el iegado cie otros que Darrvin había expresado en La expresión de las emociones, aurìque
científicos famosos. Con ello, la visión clásica de la emoción cobró im- ias dos eran radicalmente incompatíbies. El resultado fue una teoría típo
pulso. E1 ejemplo más imporrânre es el de william
James, considerado <<monstruo de Frankenstein>> que invertía 1o que decía James y asignaba
I
por muchos el padre de 1a psicología estadounidense. puede queJames una esencia a cað,a categoría emocionai. Como toque fnù., y en honor a
:.
no sea un personaje tan conocido como Darwin, pero sin duda fue un
James, Dewey llamó a su invento <<Teoría de las emociones de James,
I
L
 208 LA VID.A. SECRET.{ DEL CEREBRO
UN,\ VISTÓN ruUEVÂ DE LA NATURALEZ.{ HUMÁN,\
209

Lange>>.t'Hoy, ei papel de Dewey en este embrollo está olvidado, e incon-

con una sola causa que parecen responder al sentido
tables publicaciones atribuyen su reoría a común, cuando la
James. un ejemplo destacado realidad es que vivimos en urr *,rndo complejo.
es el de los esc¡itos del neurólogo Antonio Damasio, autor de
El error de El esencíalismo también es extraordinariamente difícilde
Descartes y otros libros populares sobre las emocíones. para Damasio, la rebatir. pues-
to que una esencia puede ser u-nâ propiedad inobservabre,
huella dacttlar físíca característica de una emoción, a la que lrama matca- la gente es Ii-
bre de creer en esencias, aunque rà r. p,r.dan encontra
dor somátíco, es urìa fuente de información que usa el ....bro pata to- t.És flrrrpropo-
ner razones por las que un experimento no ha detectado
mar buenas decisiones. Estos marcadores son como pequeños fragmen- una esencia: <<Aún
no 1o hemos mírado todo>>, <<Está dentro de esta estructura
tos de sabiduría. Según Damasio, la experíencia emoiional se da cuando bíológica com_
pleja que aún no podemos estudian> o <<Nuestros instrumentos
unos marcâdores somáticos se transforman en scnsaciones conscientes. actuares
no tienen ra capacidad sufíciente para encon trarlaesencia,
En realídad, la hipótesis de Damasio es producto de ia fusión pero algún día
James- ':atendrán>>. Estos pensamíentos optimistâs
Lange, no de las opiniones deJames sobre las emociones.la son sinceros, pero rógícamen-
' La tergiversacíón de las palabns deJames te es imposible demostrar su falsedad.15 El esencialismo
se ínmuniza a sí
por pârte de Deu,ey, teñí- mismo para defenderse de ias pruebas en su conrr a. También
da de esencíalismo en nombre de Daru,in, .rno J. 1o, grandes errores cambiala
manera de ejercer la ciencía. Si los científicos creen
de la psicología moderna. Es irónico, por no",decir absurdãmente trágico, en un mundo de esen_
cias que esperân sei descubíertas, entonces se dedican
que el nombre de Daru'in se utilice paru otorgar autorídad u p,r.rto, d" a encontrar esas
esencias en unâ búsqueda que, en potencia, no tiene
vista científicos de catáctet esenciaiista, cuando el mayor iogro científico fin.
E'l esencialismo tamhién pârece ser consust anciarâ
de Darwin fue precisamente derrorar al esencialismo en eùampo de iu nuestra constitu-
ción psícoiógica. como hemos expuesro en el capítuJo
biología. 5, ios seres huma-
nos cfeamos categorías inventando simfitudes purâmente
Entonces ¿por qué el esencialismo dene tanto poder que hasta puede mentales ynom_
brarnos esas categorías con pùabras.Esta es Ia tazónde que
tergiversar Ias palarotas de grandes científícos v desrriar de su camino al pdubru, .o-o
<<lTrascota>> o <<trísteza>> se apliquen a una
des cubrimiento científico ?
multirud de .uro, dif.r"ntes. Las
p¿labras son un logro increíble, pero tambiênson
La nzón más sencilla es que el esencialismo es intuitívo. Sentimos un pacto faustiano para
ei cereL'ro humano. Fo¡ un lado, cuando una pal^bràcomo
nuestras propias emociones como reaccíones autom âtícas,y es fácíl creer <<tristeza> se
aplíca a una serie de percepciones díversas, nos invíta
que surgen de partes del cerebro antiguas y especiarízadas. También pei- a buscar (o a inven-
tar) alguna similítud_ subyacenre que trascíenda las diferencías
cibímos emocíones en parpadeos, ceños fruncidos y otros mor¡imientos percepti_
bles. Es decir, la palabra<<tristeza> nos conduce a cleatun
musculares, y oímos emociones en ei tono y'la cadencia de ras rroces, sin concepto emo-
cíonal, que en sí es algo bueno. pero tambíén nos invítaa
ninguna sensación de esfuerzo o de voluntad. por 1o tanto, también es f â- ci:eer que existe
una razón para esasimilitud: argunacuaiidad profrnda,
cil creer que ia Ðatutarezanos ha diseñado para reconocer manífestacio- inobservable o in_
cluso incognoscible que es responsabr. d. s, .q, ivareÁciay
nes emocionales y que nos ha program ado paru a.ctuat en consecuencia. qrr. r., du *
verdadera identidad. Es decir, las palabras nos invitan
Pero esta conclusión es muy discutible. Millones de personas de todo â creer en una esen-
e1 cia y cabe ]a posibilidad de que ese proceso sea e1
mundo pueden reconocer a1 instante y sin esfuer to ulguno a la rana Gus- orígen psicológico del
esencialismo' James htzo una observación simílar hice
tavo, pero esto no significa que el cerebro humano esté cablead o pãta re- má.s de un sigro
cuando esc¡ibíó: <<Cadavez que hemos creado unapalabra[...]
conocer teleñecos. El esencialismo nos promete explicaciones simples y puru á._
notar cíerto grupo de fenómenos, tendemos a suponer una
endàad sus-
'" La tantiva que exisre más all,â de los fenómenos y de lãs cuales
pal'abra <<Lange>> se refíere al físiólogo carr Lange, un contenìpo
râneo ð,eJa-
Ia palabta seút
mes y de Dewey. A primera vista, sus ideas sobre.la, el nombre>r. Las mismas palabras que nos a¡rudanu ,p...d.,
eru., similu.es a las de conceptos,
James, pero conse¡r''aban la creencia esencialista de que "rno.iorr",
toclas las categorías emociona- también pueden engañarnos y hacernos creer que sus categorías
les tenían una huella dactiTar propia. Lange se haJlabaen
refiejan
el lugar ,¿.îu¿o en el mo- límítes definidos en Ia naturaleza.l6
mento oportuno paÍa que su nombre aparecíera en 1a teoría de
Deu,e\,. La investigación con niños ilustr a cómo consrruye el cerebro
huma-
 L¡. VIDÄ SECRETA DEL CEREBRO UNA VISIÓN NUE\',{ DE LA NÄTURALEZ.A. HUMÀNA 2TT
210

no la creencia en las esencias. IJn ciendfico enseña a un niño un cilindro obtenemos algo más que simplemente una doctrína sobre cómo y por
rojo al que da un nombre inventado como <<blicke¡>>, y le hace ver que tie- qué tenemos sentimientos. Obtenernos un relato convincente de 1o que
ne la funcíón especiai de encende r una mâqrtina. Luego se le enseñan al signifi c a s er human o s. Una teo lía clásica åe Ia natur alez a humana.
níño dos objetos más, un cuadrado de color azul que el científico tam- Este relato clásíco empieza con nuestros orígenes evolutivos. Se nos
biénllama <blickeO> y otfo cilindro rojo aJ que no llama <<blickeu. El dice que, en el fondo, somos anímales. Supuestamente hemos heredado
\.rarias esencias mentales de nuestros antepâsados no humanos, incluyen-
niño espera râ que soio encien ð.ala mátqulna el cuadrado az'oL' a pesar åe
las diferencias visuales con el <blícke> rojo original' Los níños infieren do esencias de emociones sepultadas profundamente debajo de la corte-
que caåa<<bLickeU> contíene wnafuerza causal oculta que enciendelamâ- za.Por citar aDarurin: ..E1hombre, con todas sus nobles cuaiidades ['..]
quina. Este fenómeno, que los científicos llaman índucción, es una ma- con su intelecto, que parece divino [...] con todos estos elevados poderes
.r".u -,ry eficiente de hacer que el cerebro extienda conceptos haciendo [...] sigue i]evando en su cuerpo e1 sello indeleble de su modesto orígen>r.
câso omíso delavaúación.17 Pero Ia índucción también fomenla el esen- No obstante, la r.'isión cIásica nos considera especiales, porque esas eserì-
tiuiír-o. Cuando de pequeños \¡eíamos a un amiga en el suelo l-loiando cias animaies se presentan envueltas en pensamiento taciond,. Supuesta-
por la pérdida de un juguete y se nos decía que el niño esaba ffiste, e1 ce- mente, la esencia exclusivamente humana delataz6n nos permite regu-
iebro infería que dentro del niño habíaunafterzacausai oculta que àaba lar nuestras emociones por medíos racionales y nos sitúa en la cúspíde
Iugar asu sensación detrísteza, su postura de abatimiento y su 11anto. Ex- Cel reino animal.re
tendimos Ia cteencia en esta esencia a otfos casos de niños que lloraran, La visión clásica de la naturalezahumana también habla de la res-
aunque tuvieran berrinches, àpîetaran los díentes y mostfalan otras con- ponsabilidad personal. Asegura que nuestra conductâ está regida por
ductas, pofque 1os adultos nos las habianetiquetado como tristes. Las pa- f'senasjnternas que están má,s all.á.de nuestro control: el mundo nos gol-
labras apIícadas a emociones fefuerzan ia ficción de que 1as equivalencias pea y respondemos emocíonalmente por impulso, como un volcán que
que cfeamos son objetivamente reales en e1 mundo y esperan a sef descu- entra en erupción o unâ marmita que hierve. Según esta visión, nuestras
biertas. esencías emocionales y cognitivas a veces compiten por el control de
El esenciaiismo tambíén puede sef una consecr-rencianatuial de cómo nuestra conducta, y, en otras ocasiones, 1os dos conjuntos de esencias ac-
esÍ.â cableado nuestro cerebro. Los mismos circuitos cr-le nos permiten túan conjuntamente y actuamos con sabiduúa.De cualquíer modo, y se-
formar conceptos y predecir con ellos también fac:Irttanla esencialización. gún este argumento, si estamos a merced de emociones fuertes que nos
Como hemos expuesto en el capítulo 6,La cortezacerebral aprende con- dominen, podríamos ser menos culpables por nuestros actos. Esta supo-
ceptos sep af ando similitudes de diferenc ias. Integr a información pro ce- sicíón está en la base de los sistemas jurídicos occidentales, donde ios lla-
dente de la vísta, el oído, la interocepción y otfos ámbitos sensoriales mados crímenes pasionales son objeto de un trato especial. Además, si
comprímiéndola en fesúmenes eficientes.l8 Cada fesumen es como una alguien está totalmente desprovísto de emociones se le considetamás ca-
pequeña esencia trnagtnaúainventaáapor el cerebro pafa fepresentaf que paz åe rcalizar actos inhumanos. Hay quien cree que un asesino en serie
un conjunto de casos de nuestro pasado son similares. que no sienta remordimientos es en cierto sentido menos humano que
Así pues, el esencialismo es íntuítivo, es imposible de refutar lógica' un asesino que lamente profundamente sus actos. Si esto es así,Iamofa-
mente, pafte de nuestra estructura psicológica y neulal, -V es una plaga lidad tendría sus raíces en nuestfa capacidad de sentir cíertas emociones.
que se autoperpetú a enla ciencía. También es la base de la idea más fun- La visión clásica también trazâwnos límites tajantes entfe nosotros y
darnental de la visión clásica: que las emociones tienen unas huellas dac- ei mundo exterior. Cuando miramos a nuestro alrededor vemos objetos
tilares de carácter universal. Así pues, no es extraño que la visíón c1tâsica como árboles, rocas, Serpientes, casas y otfas personas. Estos objetos exís-
seâ tan lesistente: se Sustenta en una creencia pfáCticamente íinposible ten fuera de nuestro cuerpo anatómico. En esta visión, los árboies que
de eliminar. caen hacen ruido, tanto si estamos plesentes como si no. Por otro lado
Cuando introducimos el esencialísmo en una teofía de 1as ernociones' asegura que nuestras emociones, nuestfos pensamientos y nuestfas per-
 21,2 LA VID,{ SECRETA DEL CEREBRO uN,q vlsróN tuEVÄ DE LA NATUR{IEZ,{ HUMANA 213

cepcíones exísten dentro del cuerpo anatómico, cada uno con su, propia una vez existió en una condición muy inferior y parecida a la de los anima-
esencia. Así que, por implicación, nr.restra mente estaría completainente les. El carácter común de ciertas expresiones en especies dístintas pero re-
dentro de nosotros y el mundo estalía completamente fuera.2o lacionadas, como los movimientos de los mismos múscujos faciaies cuando
En cierto sentido, 1a visión clâsicaha arrancado la naturai ezahumana ríen el hombre y varios monos, se hace algo má,s inteligibie si creemos que
descienden de un antepasado común.21
del ámbito de ia religíónylaha situado en manos de la evolución. Ya no
somos un alma inmortal, sino un conjunto ðefuenas especializað,as, dís-
tintas, ínternas. Llegamos al mundo preformados por nuestros genes, no A primera vista, podríamos pensar que Darwin dijo que las expresio-
aimageny semejanza de Dios. Percibimos el mundo con exactitud, pero nes faciales son un producro útil y funcional de la evolución y, de hecho,
no porque Dios nos haya hecho así, sino porque la supen'ivencia de nues- 1a visión clásica se fundamentó en esta idea. Pero Darwin dijo, precísa-
tros genes en la generación síguíente depende de ello. Y nuestra mente es mente, 1o contrario. Escribió que las sonrisas,los ceños, 1os ojos muy abier-
un campo debatalla, pero no del bien contra elmal o de 1a rectitud con- tos y otras expresíones eran movimientos inútiles y vestigiales, productos
'tra
el pecado, sino de la ncionalidad contra la emotividad, de la corteza de ia evoiución que ya no desempeñaban ninguna funcíón, como el apén-
, cerebral conlrala subcorteza, de las fuerzas ínteríores contra las exterío- dice y la rabaåúla del ser humano o ias alas del avestruz .Hizo esta afhma-
res, de los pensamíentos de nuestro cerebro contra 1as emociones de nues- cíón más de una docena de veces en La expresión de las emociones. Las ex-
tro cuerpo. Nuestra natutaleza, con nuestro cereL,ro animal enr,'uelto en presiones emocionales eran, más que nada, ejemplos convíncentes paru
urna colteza cerebral taciond, es distinta de la de otros animales, pero no sus argumentos más amplíos en torno a la evolucíón.22 Según Darwin, el
porque tengamos un alma, sino porque to*ot el pináculo de 1a evolución hecho de que estâs expresiones sean inútile s pata el ser humano pero las
y estamos dotados de juicio y razón. compafia con otros anímales significa que debieron ser funcionales para
Darwín encarnó esta visíón esencialista de la naturaleza humana. un antepasado común desaparecído hace tiempo. Las expresiones vesti-
Aunque desterró el esencialismo de la comprensión del mundo natural, gíales ofrecerían una prueba convincente de que los seres humanos fue-
el esencia-lismo ganó Iabatalla en cuanto d,Iugar de1 se¡ humano en el ron animales, justificando sus ideas anteriores sobre la selección natural
mundo. La expresión de las emociorces alsarcó las tres partes de la visión en El origen de las especies, de 1859, que luego aplicó a la evolución hu-
clásica delanaturaleza humana: que el ser humano y los restantes anima- manâ en su siguiente llbro, El origen del hornbre, en 787I.
les comparten 1as esencias uníversales de las emociones, que las emocío- si Ðarwín no dijo que las expresiones emocionales hubieran evolucio-
nes buscan expresión en e1 rostro y en el cuerpo fuera de nuestro control nado para desempeñar una función de superviv encia, ¿por qué tantos cíen-
y que son desencadenadas por el mundo eiterior. ríficos creen fervientemenre què 1o dijo? Descubrí la respuesta en los in*a-
Pero en los años que siguieron, e1 esencialismo de Darv'ín regresó nuscritos de un psicólogo estadounidense de principios del siglo xx,
para propin arle una pataé.a en el trasero. Cuando los descendientes ínte- Floyd Allport, que escribió extensamenre sobre las ideas de Darwin.
lectuales de Darwin adoptaron sus puntos de vista dando forma alavi- En 1924, Allport hizo una inferencia muy generaTizaåora apafür de los
sión clásica, fue irónico que ínterpr etaranmal (¿o tergirzersaran?) sus pa- escritos de Daru.ín que alteró considerablemente su significado original.
labras para que se ajustaran más aI esencialismo. Afirmó que las expresiones empiezan de una manerâ vestigíal en los re-
En efecto, Darwín dijo en La expresión de las emociones que los seres cién nacídos pero que asumen su función con rapidez: <<En lugar de con-
humanos manífiestan unas expresiones faciales universales que evolucio- siderar que la reacción bioiógicamente útil estuvo presente en el antepa-
naron de un antepasado común: sado y que el vestigio expresívo está presente en el descendiente, creemos
que las dos funciones están presentes en el descendiente y que la primera
Algunas expresiones humanas, como el erizado iel pelo loajo Ia in- sirve de base a partír de 1a cuai se desarroll ala segunda>>.2i
fluencia de un terror extremo o enseñar los díentes bajo una rabia furíosa, A pesar de ser inexacra, la modifícación de Allport gozó de cierra
pueden ser difícrlmente entendidas salvo bajola creencia de que el hombre autenticida d y valiðez, porque apoyabala visión clâsica de la naturaleza
 11/1
L.{ VIDÂ SECRETA DEL CEREBRO
UNI\ VISIÓN NUE\¡A DE L,{ NATURALEZ,A. HUÀ,IANA
2r5

htsmana.Fue adoptada con entusíasmo por científicos de ideas afines que ejemplo nrás claro de función cerebral TocaJtzada,
así pudieron reivindicarse como herederos de1 incuestíonable Chades Dar- aunque la neurocíen-
cia ya haya demostrado que esta ârea no
es necesaria ni sufíciente para el
win. Pero, en realidad, no eran más que los herederos de la tergiversación lenguaje."' En realidad , eI áteade Broca supone
,_r, ..f.u.^å>> en el inten_
de Daru'in que había hecho Floyd Allport. to de localizaf unafunción psicorógica en un móduro
Así pues, el nombre de Darwin a veces funciona como una capa m* del cerebro. pero
la historia se reescríbió en fãvor d."B.o.u,
rcforzandolas visiones esen_
gica que protege contra los espírítus malignos dela cútica científica. Per- cialistas de la mente.2t
mitíó a Floyd Allport y aJohn Dewey rrânsmurâr las palabras de \Øilliam Broca y su câpa darwiniana acabaronreforzando
ra fícción clásíca de
James y de1 mismo Darwin en sus opuestos diametrales ,y apuntalar asíIa que la emoción y Ia ruzón evorucionaron
como ros estratos en er cere-
vísión clâsica de las emociones. Y esa capaprotege, porque si estamos en bro que ya hemos vísro en el capíturo 4 arhablardei <<cerebro
desacuerdo con una idea darwiniana es que negâmos 1a evolución (vamos, ffiuno>.
Broca se había ínspírado en ras afirmaciones que
que seguramente somos creacionistas de tapadí1lo).
hizo Darwin en Er ori_
' gen del honzbre segúnias cuares ra menre
h.r-årru, a tg,rJq,r. er cuerpo
La capamâgrcade Darwin también ay,ud6 aptopagarlatàeaerrónea humano' habían sido escuipidos por la evorucíó.r.
de que el cerebro evolucionó como un grupo de módulos con unas fun-
nr'.-rrr'escribió que
<dos animales inferiores se excitan por
ras mismas emociones que experi_
ciones especializadas diferentes. Esta creencia clave de 1a visión clásica menta el hombre>' suponiendo que er cerebro
humano, ar iguarque el
condujo a muchos científicos por la senda infructuosa de buscar módu- resto del cuerpo' refleja nuestros ohumirdes
orígenes>>.2|'Er, .o.rr..r-r..r-
los de las emociones en el cerebro. Esta senda fue par'ímentað.a por un cia, Broca y otros neurólogos y fisíórogos
.-pr.rrdi.ron una intensa bús-
médico del siglo xIX empâpado de Darwin, Paul Broca, que dijo haber queda de los circuitos emocionale, urri-ul..,ie
nuestra ob.stia inte¡ion>.
descubierto el módu1o del cerebro para ellenguaje humano. Obsen'ó Se centraron en 1o que conside rabanque
eran partes antíguas del cereb¡o,
que pacientes con iesiones en una región dada del lóbu1o fronral izquier- y cuyos circuitos estaban regulados, supuestâm"rrt",
poa ra cofieza más
do perdían la capacid.ad de hablar con fluidez ,una afecciónllamada afa- e.','olucionada.
sia expresiva o no fiuente. Si una persona con afasta de Broca trata de de- B¡oca locaJtzó esa <<besda interion> en ro que
creía que era un <<róbu-ro>
cir algo que tenga un signitícado, las palabras salen revueltas: <<El jueves, antiguo situado denffo del cerebro humano. L
eh, eh, eh, no, eh, el viernes... Bar-ba-ra... mujer... )', oh, coche... condu-
ollami o/e grand lobe lim-
bíqtte> o dóbulo límbico>>. Broca no calificó
de sede d.lur-.-o.iones su
ce... patopista lsicf... ¿sabes?... descansar y... televisión>>.2a Broca infirió supuesto lóbulo (en realidad creía que alojabael
sentido del olfato y orros
quehabía hailado la esencia del lenguaje en e1 cerebro, de manera muy circuitos primirivos paruIasupervivenciuj, p.ro
sí que ünr:
parecida a los científicos de 1a visión clástca que señalan 1as iesíones de la bíco como una sola entidad ,rnifícada, .on rå c,ralpånía ";.iljíj"
tu pri-.ru pi.aru
amígdala como prueba de los circuítos del miedo. Desde entonces, esra del camino hacia su esencialización como sede
de las emociones. En er
región se conoce con el nombre åe área de Broca. síglo siguiente, el lóbulo límbico de Broca se
transformó en un <<sisrema
El caso es que Broca tenía pocas pruebas de su afirm acióny que otros
científicos teníanmuchas pruebas de que estaba enaåo. Señalaron, por
ejemplo, que otros pacíentes con afasiano fluente teníanun área de Bro- '' una cantidad considerabre de pacientes que padec en
afasíade Broca no tienen
ca perfecamente sanâ. Pero 1a idea de Broca se impuso de todos modos, lesionada el área de Broca,v,a ra in.,eÀa, ....rdå
r, -ri"à1.îrö;;;;, ."" Iesiones
en el área de Broca no presenrân afasja d,eBroca.
porque estaba protegida por la capamá,gica de Danvíny reforzada por Los cienúficos sìgu.nã.burr.rrdo ,o_
bre la función de esta área,.ara,quees mejor ,amar
una buena dosis de esencialismo. Gracias aBroca,los científicos pudie- corteza prefrontal lâreral, pero po-
cos cfeen que sea responsable de Ia producción
der lengua;e, de rrs capacidades gruäu_
ron tener un relato evolucionista del origen del lenguaje situaba en ticales o incluso del procesamiento ùngüístico
generd.Er áorrr"rrro uå,rr_i
-lo
Iacofieza<<racionab>- que iba en contra de La creencia predominante de parte de varias redes intrínsecas, incluyendo
i"i redes i"r.....pìi*ïãl .ont.ol.
"s
que forma
querespecta al ìenguaje, la.red de conrror ay,uda En Io
que el lenguajehabía sido dado por Díos. Los libros de texro de psicolo- arcerebro u i.gi.'*,rà opciones en
conflicto, como en el caso de ras palabra, ho-ófo.rrr,
gíay neurología de hoy síguen presentando eI área de Broca como e1 pero como hemos visto en er ca-
pítu1o 6 esta red participaen otras tareas
no J_ingüísticas.
2r6 I,A \¡IDA SECRETÂ DEL CEREBRO UNA \¡ISIÓN NUEVA DE LA NATURAIEZA HUMANA 277

]ímbíco> uníficado paralaemoción åelamano de otros partidaríos de la visión ruåtcal del budismo redefinió los dharma.s como consrrucciones
visión clásica. De este supuesto sistema se díjo que era antiguo desde e1 humanas dependientes de conceptos.2e
punto de vísta evolutivo, que prácticamente nohabía cambiado desde Después de aquellas escaramtrzas inicíales, la guena ha seguido a 1o
su origen en los primeros mamíferos y que controlaba el corazín,los pul- largo de toda Ia hístoria documentada. El científico musulmán del si-
mones y otros órganos internos. Supuestamerìte, se encontraba entre los g1o xI Alhacén, que contribuyó de una mânera fundamental al desarrollo
antiguos circuitos <<reptilianos> de1 tronco encefá1ico pan eI hambre, 1a del método científico, sostenía la visión consrruccionísta de que percibi-
sed, etc., ylas capasmás recientes y exclusívamente humanas deTa corteza mos el mundo mediante el juicio y la inferencia. Los teólogos cristianos
cerebral que regulan las emociones animales del ser humano. Esta jent- medievales eran esencialistas, y asocial:an distíntas iavidades cerebrales a
quía ilusoría encarnal:alas ideas de Dar'win sobre la evolución humana: esencías diversas como la memoria, Taimaginaciónylainteligencia. En el
primero evolucíonaron los apetitos básicos y luego 1as pasiones, pata aca- siglo xru, filósofos como René Descafies y Baruch Spinoza creían en la
bar en el logro supremo de la racionaltåað'2i existencia de esencias emocionales y las catalogaron, mientras que filóso-
Los cíentíficos inspirados por ia visión clâsicahan afirmado haber 1o- fos del siglo mn como Da'id Hume e Immanuel Kantabogaron por ex-
calizado muchas emociones diferentes en regiones límbicas de1 cerebro, plicaciones de la experíencia humana mâsb,asadas en 1a construcción y la
como la amígð,al,a, que se haIlan (supuestamente) bajo el control de 1a percepción. El neuroanatornista FranzJoseph Gall fundó en el siglo xx
contezay 1a cognición. Pero la neurociencia mode¡na ha demostrado que la frenología, quizála máxkna expresión de la visíón esencialista del ce-
el llamado sistema límbico es una ficción, y ios expertos en evolución ce- tebro, para detectar y medir las esencias mentales como abultamientos
rebral ya no 1o toman en serio y mucho menos lo consideran un siste- del cráneo (ll). Poco después, \X/illiamJames y \X/ilhelm Wundt propug-
ma.28 En consecuencia,no es ia sede de las emocíones en el cerebro, lo nâron teorías construccíonistas de 1a mente; como escribió James: <<IJna
cual no constituye ninguna sorpresa, porque no hay ninguna área cete- ciencia de las relaciones entre mente y cerebro debe mostrar cómo se
brù.ttnica dedicada a ias emociones. La palabta<<1ímbico>> aún tiene sig- corresponden ios ingredientes elementales de la primera con las funcio-
nificado (aIhablar de la anatomía del cerebro), pero el concepto de siste- nes elementales de1 segundo>>. James y Darwin también fueron víctímas
ma límbico no ha sído más que otro de los muchos ejemplos que han de esta guerrâ en torno a la naturaleza humana, porque sus puntos de
intentado aplicar una ideología esencialistâ, con unos toques de Darvrin, r¡ista sobre las emociones fueron, por decir algo, <<arteglados>>, y el resul-
a la estructura de1 cuerpo y el cerebro del ser humano. tado cayó en mânos de científicos como Broca, que reívindicaron una
Las vísiones clásica y construccionista åeIa naturalezahumanaya es' victoría panla evolucíón..., o al menos pafaùna evolución de carácter
tal:an en guerra mucho antes de que Broca áefinieru su primer módulo esencialista.ro
cerebral. En la Grecia antigua, Platón dividió la mente humana en tres Las esencias de la mente que definió Platón aún siguen vivas, aunque
clases de esencias: los pensamientos racionales, 1as pasíones (1o que ho;r sus nombres han cambiado (y hemos prescindido de los corceles alados).
lTamaúamos emociones) y los apetitos, como el hambte y el impulso se- Hoy las llamamos percepcíón, emoción y cognición. Freud lasllamó id,
xual. El pensamiento racíonal estaba al mando y controiaba ias pasiones ego y superego. El psicóiogo y premio Nobel Daniel Kahneman las de-
y los apetitos, urìa jerarquía que Platón descríbía como un auríga que di- nomina, metafóricamenre, Sistema 1 y Sistema2 (Kahnemanprocuta de-
rigía dos corceles alados. Pero unos cien años antes, su compatrj.ota He- jar claro que son metâfotas, pero muchas personâs parecen no hacerle
rá,clíto (capítulo 2) habia sostenído que la mente humana construye 1â caso y esencialízan los sistemas I y 2 como módulos cerebrales).r1 El <<ce-
percepción a caåamomento, del mismo modo que se construye un río a rebro triuno> las )fama cerebro repdl, sistema límbíco y neocórtex. Re-
partir de incontables gotas de agua.Enla filosofía de1 antiguo Oriente, e1 cíentemente, el neurocientífico Joshua Greene ha uuluado Ia analogía
budismo traåicíonal enumeraba más de cincuenta esencias mentales dis- intuitiva de una cámata fotogrâfica, que puede actual con rapidez y sin
tintas l1ama ð.as dharma.s, algunas de las cuales se parecen muchísimo a las esfuerzo usando sus ajustes automáticos, o de una maneramás flexible y
llamadas emociones básicas de 1a visión clásica. Siglos más tarde, una re- deliberada usando un modo manual.
 218 LA VIDÄ SECRETÄ DEL CEREBRO
UNA VISIÓN NUE\¡,A. DE LA NATURALEZA HUMANA
219

En el otro extremo ð.eIring, hoy abundan las visiones de la mente te que ni el dererminismo biológico ni ei determinismo cultural
denen
basadas en la construcción. E1 psícólogo y auror de besrsellers Daniei razón. El límite de la piel es artificial y poroso. como Sreven pinker
es_
L. Schacter aboga por una teoúa construccionista de la memoria.r2 cribe con acierto: <<Ahora es simplemente erróneo preguntar
si los seres
Y podemos hallar fâctTmente teorías construccionistas de 1a percepción, humanos son flexibles o si están programados, sí la .o-rrd,r.ru
es univer-
del yo, del desarrollo de conceptos> del desarrolto del cerebro (neu¡o- sal o varía según la cuitura, si los actos son aprendidos
o innatos>>. La
construcción), además de, naturalmente, Iateoúa de la emoción cons- clave está en los detalles, y los detalles nos danlareoría de
la emoción
truída. construida.ra
Las batallas de hoy aún son más intensas porque es fácil que cada
bando caricaturice el bando contrario. La visión clásicasuele menospre- @@@
ciarla construcción diciendo que, según e1la, todo es reladvo, como si la
mente solo fuera una tabula rãsa y se pudiera prescindir de la biología. E1 Ahora que la era de Ia neurociencia remacha los últimos clavos en
construccíonismo atacala visión clâsica diciendo que pasa por alto los el
,taúå de ia visión clásica, quisiera creer que, estavezsí, lograremos apar-
poderosos efectos de la culturay justifica el statu quo.En otra carícatura, tar el esencialismo y empezatemos â entender la mente y-el cerebro
sin
1a visión clásica dice <<innato> donde la construccíón dice <<adquírído>>, y ninguna ideología previa. Es una buena idea, pero la historia
nos conffa-
el resultado ha sido un combate de lucha libre entre hombres de paja. dice. La última vez que la construcción se impuso perdíó la
batalla, y sus
Sin embargo, la neurociencia moderna ha acabað,o con estas caricatu- partidarios desaparecieron en la oscurida d.p^rufràseando una
conocida
ras. ÞJi somos ta.bulas rasas ni nuesrros hijos están hechos de una plastíli- serie televisiva de ciencía ficción, <<Battlestar Galacdca>>: <<Todo
esto ya
na que se pueda moldear a nuestro antojo;ninguna de 1as dos cosas es un lra pasado antes y puede volver a pasa,>. y, desde la última ,r.r,
.1 .ort.
destíno bíológico. Cuando miramos cómo funciona el ce¡ebro no vemos parala sociedad se ha cifrado en miles de millones de dólares,
en incon-
módulos mentales. Vemos sistemas centrales que interactúan contínua- tables horas de esfuerzo baldío y en vidas perdidas.
mente de maneras complejas para creaf muchas clases de mentes depen- Mi relato empiezaa principios del sígro xx, cuando los científicos ins-
diendo de la cultura. El cerebro humano mismo es un arrefacto cultural pirados por Darwin y por la teoría<<mutarrte>> deJames-Lange
buscaban
porque está cableado por la experiencia. Tenemos genes que el entorno en vano las esencias dera ira,7a ttisteza, el míedo, etc. T,as
sis r.petidos
enciende y apaga,y otros genes que regulan nuestrâ sensibilidad a ese en- fiacasos llegaron a una solución creativa. Si no podemos
medir las emo-
torno. No soy \a ptimera persona que 1o dice. Pero quizá sea la primera ciones en el cuerpo o en el cerebro, dijeron, solo medíremos
lo que ocuffa
en señalar quela evolución del cerebro, el desarrollo del cerebroylaana- antes y después: los sucesos que câusân una emoción ylas
reacciones físi-
tomía resultante indican una dirección clarua la ciencia de la emoci óny a cas-resultantes. Lo que pueda suceder en el interior del
cráneo no impor-
nuestra visión ð,e Ia natur alez a humana ) j ta. Y así empezó el período más conocido de la historia
de la psicología,
Irónicamenr.e,Ialarga guerra que se ha estado librando duranre mi- un período marcado por el llamado <<conductismo>>. Las emociones se
lenios en torno aIa naturalezahumana se ha visto contaminaða por e1 redefiníeron como simples conductas pan lasupervivencia: luchar,
huir,
esencialismo. Los dos bandos han supuesto que una fuerua superior y comer y copular.it Paraun conducdsta <<aregtía>> eruiguala sonreír,
, <<tris-
úníca debe haber moldeado el cerebro )' diseñado ia menre. En la visión teza>> eia llorar y <<míedo>> era el acto de quedarse purùrudo. y
asífue
clásica, estafserza ha sido lanaturaleza, Dios y luego la evolución. En 1a c_omo, de un plumazo, se acabó el tedioso problemu de buscar
las huellas
visión constfuccionista ha sído ei entorno y posteriormente la cultura. dacdlares de las sensaciones emocionales.
Pero ni la biología ni la cultura son responsables por sí solas. otros ya io Los psicólogos suelen rcIatar historias del conducdsmo con el mismo
han señalado antes que yo, pero ha llegado el momenro de considerarlo tono escalofriante con el que cuentan relatos defantasmas en torno al
fue-
en serio. No conocemos todos los detalles del funcionamiento de la go de un campâmento. El conducdsmo declaró que los pensamientos,
los
mente y del cerebro, pero sabemos 1o suficient e pana decir taxativamen- sentimientos y el resto de Ia mente carecían de importancià parala con-
220 Lu\ VIDA SECRET,A. DEL CEREBRO UNA VISIÓN NUEVI\ DE LA N-ATURÁLEZ,{ HUMANA
22r

ducta o que incluso podrían no exisrir. Duranre esta edad oscurâ de la in- prestigiosâs, ha sido pasado por arro, ignorado
o incomprendido desde
vestígación de ias emocíones, que duró varios clecenios, no se descubrió quefinalizó la supuesta edad oscura.i,-
nada digno de mención sobre las emociones humanas (supuestamente). ¿Por qué ei coro perdido froreció duranre medio siglo y luego desapa-
Nfiffil.,Ia mayoría de los cíentíficos rechazaron el conductísmo porque reció? supongo que aquellos científícos no
ofrecierà ,rru teoría de la
pasaba por alto un hecho básico: que todos tenemos una mente y que en emoción alternativa y totaiment e formada que
compítíera con Ia attacti_
cada momento de laviåatenemos pensamientos, sentimientos y percep- va visión clâsica. Sin duda presentaron p..r.Lu.
sóLias en su contra, pero
ciones. Estas experíencias y su relación con 1a conducta se deben expiicar aquellas críricas, por sí solas, no fueron suficientes.
como escribíó el filó_
en términos científícos. Según la historia oficial,la psicología emergió de sofo Thomas Kuhn alhabrat de ra estrucrura
de ras revoruciones cíentífi_
esa oscurídad en 1a dé.cada de 1960, cuando la revolución cognitiva volvió cas: <<Rechazar unpar.''digmay almísmo tiempo no sustituirlo por
a incluir 1a mente como objeto de estudio científico, equiparando las esen-
otro es
rechazar 1a ciencia mismu,>. Arí prr"r, cuando ra visión crásicase
reafírmó
cías emocionales a módulos u órganos de una mente que se creía que fun- en los años sesenra, medio sigro de ínvestigación
antiesenci afrcta acabó en
cionaba como un ordenador.ió Con esta transfo tmación,Las piezas fínales Iapapelera de la historia. Y aquello nos
sí renemos e' cuen-
de la visíón clâsicamoderna acabaron de encajagy las dos líneas principa- ta ei tiempo y ei dinero que se gasta hoy"Ãpobreció,
en perseguir ras esencias iruso-
le s de la visión clâsica teoúabâsica de la emoción y las reorías clásicas rias de las emociones. Mientras rermino .rr.
-Ia lib.ol Microsoft está analt_
de 1a evaluación- fueron ungidas oficialmenre. zando foto$afías faciales en un intento de reconocer
las emociones.
Esto es 1o que dicen los libros de historia..., pero los iibros de historia Apple ha adquirido hace poco Emotíent, una empresa
de reciente crea-
los escríben ios vencedores. La historia oficial de ia investigación de ias ción que usa técnicas de inteligencia artificial en
Ln inr.nto de detectar
emociones, de Darwin aJames y dei conducdsmo alasalvación, es un emociones en las expresiones faciares. Al parece¡
vaias empresas están
subproducto de ia visión clásica. En realidad, la supuesr a edaå oscura in- programando disposítivos Google Glass para detectar
emociones en ex_
cluyó un llujo contínuo de estudios que demostraban que las esencias presiones faciales en un intento de ayud,ar
a ]os niños autistas.is políticos
emocionales no existen. Sí, 1a mísma clase de pruebas en contÍâ que he- de España y de Méxíc o *abajanen ia rlamada
<neuropol,Iírirurrpara dis-
mos vísto en el capítulo 1 fueron descubiertas setenta años antes..,, y se tinguir las preferencias de los votanre s a paftír de sus
acabaron olvidando. El resultado es que ho.v se siguen gastando inmen-
.*pr.rion.s facia.
les' Algunas_de las pregunras más acuciantes
sobre la emoción siguen sin
sas cantidades de tiempo y de dinero en una búsqueda redundante de fespuesra, y hay preguntas importantes que
están poco claras porque mu-
huellas dactiTares de las emociones. chas empresas y muchos científicos siguen practicando
esencialismo
Descubrí lo que acabo de afirmar por casuali dad en2006. Nordenar mientras el resto de nosotros tratamos da ,rr.rígrru,
mi despacho encontré por accidente un par de viejos escritos de los años
.O-o ,a .oararrry.r,
las emociones.
treínta, una época en la que, supuestamente, la investigación de las emo- Es difícil abandonar la visión crásica cuando
estâ encârna creencias
ciones estaba en desuso..Aquellos escritos no abrazaban e1 ccnductismo. muy profundas sobre 1o que significa ser humano.
No obrru'te,nadieha
Defendían que las emocíones no tienen esencias biológicas. Siguiendo encontrado ni una sola esencia emocionar fiable,..prod,-r.ibie
en ríneas
un rastro de referencias descubrí un tesoro de más de cien publicacrones generales y medibles objetivamente (y esro
es un heciro). Cuando monto_
escritas durante un período de cincuenta añ.os de las que La mayoría àe nes de datos en contra de una idea no oblígan
auna persona a abandonat-
mis colegas científicos nunca habían oído hablar. Los autores eran cons- |a, es que 1a persona ya no sigue el métoJo científiio.
sigue una ideoro-
truccionistas incipientes, aunque no usaran ese térmíno. Flicieron expe- gía.'e Y, como ideología,ravisión crásicahamalgastado
rimentos para encontrar huellas dactilares físicas de dístintas emocir-¡nes de dólares en invesríga ctónyhadescarriado
-î., de millones
Iaiivestigación cienrífica du-
y, al no hallarlas, concluyeron que la visión clásica carecía de base, y em- rante más de cien años. si la gente se hubiera
ceñido a las pruebas en lu-
pezaron a especular con ídeas construccionistas. Llamo a este grupo de gar de seguir una ideología setenta añ.os atás,cuando
científicos <<el coro perdido>>, porque su trabajo, publícado en revistas
d .oå perdido aca-
bó cla¡amente con las esencias de las emocíones, quién
òabe dónde
222 LI\ \¡ID:\ SECRETÄ DEL CEREBRO

estaríâmos hoy en relación con los fratamiento s paralos trastornos men-

tales o las mejores prácticas para cniñ a nuestros hijos. CAPITULO
6@@
9
Caåa vraje científico es un relaro. A veces es un relato de descubri-
miento gtadual: r<Ét^seiJnavez...,la gente no sal:ía.mucho pero con los Ðorrain ar riuestras emociones
años aprendimos cada vez más y hoy sabemos muchas cosas>>. En otras
ocasiones es un relato de cambio raðtcal: <<Todo el mundo solía creer
algo que parecia correcto, ¡pero qué equivocados estabanl Ahora yahe-
mos dado con ia fascinante verdad>>.
Nuesto víaje es más bien un relato dentro de un relato.El relato inre-
rior es cómo se construyen las emociones, y 1o enr,'uelve un relato exterior
de lo que significa ser humanos. <<Durante dos mil años, la gente ha creí- cadavez que mordemos un melocotón jugoso o masticamos el conte-
do algo sobre las emociones, a pesar de las abundantes pruebas en contia nido crujiente de una bolsa de p^tatasfritas, no solo estamos reponiendo
que hay al respecto. Y es que e1 cerebro humano está cableado para con- nuestra energía. Estamos teniendo una experíencia que es agraãable,
de-
fundir sus percepciones con Iareahdad. Hoy, instrumentos poderosos han sagradable o algo intermedio. No romamos un baño ,olo piu
-.n no poner-
dado lugar a una explicaciónmâs fundada en pruebas que es casi imposi- nos enfermos, sino también para disfrut ar der agua.ali"nte
nuestia piel.
ble ignorar..., aunque algunas personâs aún consiguen hacerlo.>, No buscamos a otfâs personas pafa que estar en grupo nos proteja
de
La buena noticia es que estamos en una edad de oro del estudio de 1a depredadores, sino para sentir Ia caJidez de 1a amistå o d..ãhogárro,
mente y del cerebro. Muchos científicos siguen hoy un camino basado en cuando nos senrimos agobiados. y es evidente que el sexo es p^iu
ios datos, y no en ideologías, para entender las emociones y entendernos rrás que propagar nuesttos genes. ^lgo
a nosotros mismos. Esta nueva comprensiónbasada en datos conduce a
ideas innovadoras sobre cómo vivir una vida satisfa ctoúay sana. Si el ce-
, Estos ejemplos señalan que mantenemos una relación especial entre
io físico y lo mental . cada\¡ez que realizamos un acto físíco para
nuestro
rebro actúa por predícción y construcción y se cablea a sí mismo por me- pfesupuesto corporal, también hacemos algo mental po, mèdio
de con-
dio de la experiencia, no es una exagetación decir que si cambiamos ceptos. Y cada actividad mental también tiene un .f..io físíco. podemos
nuestrâs experiencías actuales hoy, podremos carnbiar quiénes seremos pone-r esta conexíón a_nuestro servicio para dominar
nuestras ernociones,
mañana.ao En 1os capítulos siguientes exploraremos estas implicaciones aumentar nuestrâ resilencía, ser mejores amigos, padres o amantes,
yhas-
en las áreas de ia ínteligencia emocional, la salud y e1 derecho, así como ta cambiar la concepción de quienes somos.
en el de nuestras reiaciones con otros animales. El cambio no es fácil. Preguntemos a cualquier psícoter apeutao mon-
je budista que ]le'e âños entrenándose para
ser consciente de sus expe-
riencias y controlârlas. con todo, ahora mismo podemos dar pequeños
pâsos en esta dirección basándonos en Iateoríade la emoción
construida
y en la nueva úsíón de Ia natural ezahumanaque
conlleva.
Algunas de las propuestâs que hago en este capítuJo sonarán famtlia-
res' como dormir 1o suficiente, pero con nuevâs justificaciones
científícas
para motivârnos. Es probable que otros consejos sean totalmente
nue-
vos, como aprender palabras de una lengua extranjeta, algo'que proba-
 224 L,å. VIDÄ SECRET,{ DEL CEREBRO DOIVÍINAR NUESTRAS EMOCIONES 225

blemente el lector nunca hal¡râ asociado a la salud emocional. No todas te. Podemos regular nuestïas emociones si nos esforzamos lo sufíciente.1
las propuestas Servirán a1 lector; algunas encalarân con su estilo de vida Pero estos libros no dan mucha importancia al cuerpo. Espero que, como
mejor que offas. Pero el esfuerzo puede conducir a un mayor bienestar 1' mínímo, el lector haya aptendído en los cinco capítulos anteriores que ei
aLéxito. Los estudiantes con un vocabulario emocionalmás rico rinden cuerpo y la mente están profi-rndamente interconectados, que la intero-
mejor en los estudios. Las personas con un presupuesto corporal equili- cepción dirige nuestros actos y que la cultura cableanuestro cerebro.
brado tienden a desarrollar menos enfermedades graves como díabetes y De hecho, 1o más básico que podemos hacer para dominâr nuestras
enfermedades cardiovasculares, y, cuando envejecen, sus capacídades emociones es mantener nuestro presupuesto corporal en forma. Recor-
mentales mantienen su aguåeza du¡ante más tiempo. Y su r'ída puede ser demos que la red ínteroceptivâ ttal:ajanoche y åíahaciendo prediccío-
más significatiYay más p1ena. nes para mantener un pfesupuesto sano, y que este proceso es el 0rigen
¿Podemos chasquear los dedos y cambiar nuestras sensaciones a vo- de las sensaciones afectivas (agradabre, desagrable, arousal y calma). Sl
luntad, como quien cambia de ropa? Laverdades que no. Aunque cons- nos queremos sentir bien, 1as predicciones del cerebro sobre el ritmo
truyamos nuestras experiencias emocionales, estas toåavía nos pueden car diaco, 7a respiración, la tempera tur a, Tapresión sanguínea, las hormo -
arroll,at en un momento dado. Sin embargo, podemos tomar medidas nas, el metabolismo, etc., se deben ca-librar en relación con 1as necesida-
para influír ahon en nuestras experiencias emocionales futuras, pffa es- des reales de nuestro cuerpo. Si no es así y nuestro presupuesto corporal
culpir quiénes seremos mañ.ana. Y no 1o digo en un senddo vago o pseu- no está equiiibrado, nos vamos a sentír hechos unâ porquería, con inde-
doespíritual, al estilo de..vamos a iluminar nuestra menre cósmica>,, sino pendencia de los consejos de autoayuda que sigamos. Solo es cuestión de
en el sentído muy real del cerebro que predice ver de qué clase de porqueria se trata.
Todo lo que el iector ha leído hasta ahora sobre la interocepción, e1 Por desgra cia,la culiura moderna está diseña da para fasddiar nues-
afecto, 1os presupuestos corporales,Iapredicción, el error de predicción, tro presupuesto corporal. Muchos productos que se venden en los super-
los conceptos y la rcahdað. social dene repercusiones prácticas amplias ,v mercados y 1as cadenas de restaurantes son pseudoalimentos cârgados de
profundas para quién es y para Iamanera de vivir su vida. Este será el tema azú.car refinado y de grasas perjudiciaies que deforman nuesrro presu-
en el que nos centraremos a partft de ahora en la parte final de este libro, puesto. Los estudios y el trabajo exigen que nos levantemos pronto y nos
que empieza aquí con el bienestar emocional, continúa con 1a salud (ca- acostemos tarð.e, y mâs del +o 7" de los estadounidenses de edades com-
pítulo 10) y el derecho (capítulo II), ,t, acaloa con una reflexión sobre los prendidas enrre trece y sesenta y cuatlo años sufren una privacíón habi-
animales no humanos (capítulo 12). tuai de sueño que puede dat lugar a una mala presupuest ación crónica,
En el resto del libro aplicaremos nuestrâ nueva visión de la naturale- a posibles depresiones y a otros trastornos mentales. Los anuncíantes
...:.:

zahumana, sobre todo el1ímite poroso entre 1o físico y 1o socía1, para åt- explotan nuestras inseguridades dando a entender que nuestras amista-
señar una receta panvivir. Los ingredientes principales de esta receta van des nos juzgarânmal sí no comprâmos un coche o una ropa adecu ada,y
a ser nuestfo presupuesto corporal y nuestros conceptos. Sí mantenemos eI rechazo social es tóxico para nuestro presupuesto corporal. Los medios
,:

un presupuesto corporal equilibrado nos sentíremos mejor en general, y sociaies ofrecen nuevas oportunidades para el rechazo socíal y añad,en
ahí es donde empezaremos. Pe¡o si además desarrollamos un buen con- ambigüedad, 1o que es aún peor para nuestro presupuesto corporal. Ami-
junto de conceptos tendremos a su \Tez una buena caja åe herramientas gos y jefes esperan que estemos pegados a nuestro móvil atodashoras,
pâra conseguir una vida con sentido. lo que sígnifica que nunca nos podemos relajar de verdad, y el tiempo
que pasamos frente a una pantallahasta altas horas de la noche trastoca
@@ø
nuestrâs pautas de sueño. Las expectativas de nuestrâ cultura en relación
con el trabajo, el descanso y la vida social dererminan la facrltdaå para
Los libros de autoayuda típicos se centran en la mente. Nos dicen que administrar nuestro presupuesto inte¡no. La rea]jdadsocial se ffansforma
ll
si pensamos de una manera diferente sentiremos de una manera diferen- en lealidad física.2
tl:

i:.
:¡
 LA VIDA SECRETA DEL CEREBRO
DOìvIINÁR NUESTRAS EMOCIONES
227

Recordemos que nuestro presupuesto corpor aI está regulado por los mes y deben elegir entre comel y pagü ras facturas quizá.no
circuitos predictivos de nuestra red interoceptiva. Si esas predicciones , puedan
permitirse ellujo de cambiar de estilo de vida. Rogaría-a
estas personas
presentan unafalta de sincronía crónica con 1as necesidades reales del que hicieran 1o que pudieran. La ciencia es muy
clãra sobre la alimenta-
cuerpo, es difící1 devolverlas a un estado de equilibrio. Los circuitos en- ción sana, el ejercicio y el sueño como requisitos pata un presupuesto
cargados de la presupuestación corporal, el <<gritóru> de nuestro cerebro, corporai equilibrado y unavidaemocional sana. como
veremos en el ca_
no responden con ruptåez a las pruebas en contra (error de predícción) pítuio síguiente, un ptesupuesto corporal con un desequilibrio
de nuestro cuerpo. Cuando 1as predicciones han sido erróneas durante crónico
âumenta las probabilidades de que i.ru..oll.mos
muchas dolencias di-
mucho dempo, se tiene una sensación de abatimíento cróníca. ferentes.
Cuando las personas se sienten con el ánimo por ios suelos con regu- La siguiente línea de ataque es modifica¡ si podemos, nuestro
Iaúåad, muchas deciden automedicarse. El 30"/. detodos los fármacos con-
fon físico. Probemos con un masaje hecho po, ìn, p..rårru cercana o
que se consumen en Estados Unidos se utilizan para eI control de algu- por u:n fisioterapeuta
profesional (si nos lo podemos permitir). El con_
na clase de angustia. Las predicciones de estas personas no se calibran iacto humano es bueno paralasalud: me;ora er pr.r,rprì"r,o
corporar por
regularmente con sus gastos corporales reales, probablemente porque el rnedio de nuestra red ínte¡oceptiva. un masaje es especialmente
cerebro calcula mal el coste. En consecuencia, se sienten abatidas y to- útil des_
pués dç un ejercicio vígoroso. Limita \a innramaciói y
favorcce una cica_
manfátmacos, o consumen alcohol o sustancias cailejeras como opiáceos trización más úpida de las pequeñas roturas del tejido muscular
provo-
ilegales.i cadas por el ejercicío, que en caso contrario podríamos
experimentar
Y eso es 1o malo. ¿Qué podemos hacer, desde un punro de vista prác- como desagradabJe.t
tico, para mantener unas predicciones calibradas y un presupuesto cor- otra actividad que equilibra el presupuesro es el yoga. Las personas
poral equilibrado? Pido perdón ai lector por sí de repente le parece estar que llevan tiempo practícand o yogapueden .dmarse
Jor, -á, ,u pidez
oyendo a su madre, pero el camino empieza poî comer de una mânera y eficacia, probablemente con alguna combinación de activídad
sana,hacer ejercicio y dormir lo suficíente. Lo sé, 1o sé: suena prosaico e
físi-
ca y respiracíón lenta. EIyoga también reduce los niveles
de las citocinas
incluso triliado, pero por desgracia no existe ningún sustituto desde el proinflamatorías, unas proteínas que a Ia latgadan lugar
punto de vista biológico. Un presupuesto corpor aL, aI rgual que un pre-
a una infl.ama-
ción perjudiciarpanel cuerpo (examínaremos más a fondo
estas proreí-
supuesto fínanciero, es más fátcú åe mantener si tenemos unos funda- nas en el capítulo siguiente). El ejercicio habitual también
aumenrâ los
mentos sólidos. Cuando éramos bebés, nuesrros cuidadores administra- níveles de offas proteínas, Tl,amadas citocinas ant|,nfl,amatorias,
que re-
ban por completo nuestro presupuesto corporal. A medida que fuímos clucen las probabilidades de desarrollar enfermedades
card.iovasculares,
creciendo. nos trânsfirieron graduaimente más y más responsabilidad depresión y otras dolencias.6
palamantener el presupuesto. Hoy, nuestros amígos y familiares pueden Puesto que el entorno físico también infruye en nuestro presupuesto
echamos una mano, pero, básicamente, el mantenímíento dei presu- corporal, si es posible intentemos pasâr tiempo .n .sp"cíoJ
puesto es cosa nuestra. Así pues, en la medida de lo posible comamos con menos
ruido, menos gente, más vegetación y más luz natura\.ño
de no-
-,r.ho,
verdura, consumâmos con moderación azitcates refinados, grasas perju- soiros nos podemos permitir moldear nuestro entorno cambiando
de
diciales y cafeína, hagamos ejercicio enérgicamente y de unâ manera re- casa o redecorando la actual, pero es asombroso
10 que puede hacer una
g'tÃa4 y durmamos mucho.a pranta de interior. Factores ambientales como estos
son tan imporrantes
Estos consejos podrían paÍecer imposibles sin algunos cambios im- þara el presupuesto corporal que incluso parecen aytsdata ]os pacientes
portantes en la estructura y los hábitos de nuestra við.a.Para algunas per- de trastornos mentales â recuperarse con más rapidez.T
sonas, la dificultad estriba en resistirse ala comida basura _v en no dedi, Sumergirnos en una novela absorbente también es sarudabre para
car un tiempo excesivo a la televisión ni a otrâs tentaciones de la cultura nuesrro presupuesto corporal. Es algo más que simple evasión:
si nos im-
dominante. Omas personâs que rienen dificultades para lTegar a fin de plicamos en ia historia åe otrapersona, .ro årt"rrro, tan implicados
en ra
aao
¿LO LÅ VIDÀ SECRETÀ DEL CEREBRO DOÀ,f INAR MJESTRAS EA,f OCIONES 229

nuestra. Estas excursíones mentales hacen que entre en activið,ad una Daniel Goleman, autor de Inteligencia emocional, sostiene que unâ
parte de nuestra red interoceptiva, conocida corno red del modo por inteligencia emocional mayor darugar amâ* éxito en el campo académi-
defecto, e impíden que cavilemos en exceso (que sería negatívo para el co, en los negocios y en las relaciones sociaies. <<pararendir aimáximo
en
presupuesto). A quien no le guste ieer, que vea una buena película. Y si todos los trabajos, todos los campos ----¡sç¡iþs-, la competencia
,en
Iatrama es triste, que llore a gusto, que también es bueno paru elpresu- emocional es ei doble de importante que las aptítudes puramente
cogni-
puesto.s tivas.>> Así que quizá. ellector se sorprend a al. saber qn.
1, ciencia aún no
Otra rnanera sencilla de mejorar el presupuesto es fijar encuentros tiene ni una definición ni una medida d,eraínteligencia emocional que
periódicos con un amigo para almorzat e invitarse mutuamente pot tur- gocen de una aceptación generatr. Los libros de Goleman ofr.c.n
ri,r-
nos. Los estudios seña1an que el hecho de dar y Ia gratitud son buenos chos consejos razonaltres y prácticos> pero no exprican debidamente por
para los presupuestos corporales de las personas ímplicadas, y alturnar qué funcionan. su justificación científica está muy influenciadu po,
nos cosechamos los beneficios (y ala larga cuesta 1o mismo que p^gal à modelo va anticuado del <<cerebro úiuno>: si regulamos con eficacia "l
escote).e nuestfâ supuesta <<bestia interion> emocional, es que somos emocíonal-
Hay muchas más cosas que podemos probar y que aún no he men- mente intelígentes.11
cíonado. Adoptemos un animal de compañía, que nos åaút contacto y La ínteligencia emocíonal se caracterizamejor en función de concep-
aåoración incondicional al mismo tiempo. Demos pâseos por un jarðtn o tos. Supongâmos que una persona solo conoce dos conceptos emocíona-
un pârque público. Busquemos en Internet información sobre nuestros les: <<Sentirse fantásticamente bieru> y <<sentirse horriblemente
mab>. cada
pasatiempos favoritos paraver si son útiles para el estrés, o simplemente vez que experímenta una emoción o la percibe en alguien más solo pue-
probemos cosas para ver cuáles funcíonan. Parece que hacer punto fun- de categorizal con esta brocha tan gorda. Est, p..son1no puede
,.rLrry
ciona;10 a mí me va mâs hacer ganchillo. inteligente en 1o emocíonai. En cambio, una persona que pueda dis-
Modificar nuestros hábitos pan aåaptarlos a nuestro presupuesto tinguir significados más sutiles denrro de <<Fantásticumenìe bieno (feliz,
corporal nunca es fácil y a veces es imposible, pero deberíamos intentar alegre, encantado, r elajado, esperanzado, inspírado, dichoso, orgulloso,
estas técnicas siempre que podamos. À4ejorarán nuestro estado de ánimo agradecido...) y distinguir <<cincuenra sombras>> denffo de <Horribl.-..r.
y nos sentiremos menos estresados durante más tiempo. mab (enfadado, exaspe *.åo, alatmado, rencoroso, malhumorado, arrepenti-
do, pesimista, avetgonzado, atercado, intranquilo, resentido, asustadt,
en-
@@@ vidioso, afligido, melancólico...), tendrá en su cerebro muchas más opciones
para pronosticar, categorizar y percibir emociones, y tenåtáinst¡umen-
Después de ocuparnos de nuestro presupuesto corpoial, lo segundo tos para responder de una mânera más flexíble y funcíonal. Esta persona,
mejor que podemos hacer para nuestra salud emocional es ieforzar nues- por tanto, podrá predecir y categorizar sus sensâciones con más ificaciay
tros conceptos, lo que también se conoce como <<mejorar nuestra inteli- podrá adaptar mejor sus actos a su entorno.
genciaemocíonab>. Las personas de mentalidad clásica consideran que la Lo que esroy describiendo es la granul arídademocional, el hecho (des-
inteligencia emocional es ..detectar con precisión>> las emociones ajenas ciito en el capítulo 1) de que algunas persorìas construyen experiencias
o sentir alegtía y evitar Ia tristeza.<en el momento oportuno>>. Fero 1a emocionales más detalladas que otras. Las personas que construyen expe-
nueva comprensión de las emociones nos permite concebir ia inteiigen- riencias muy granulâres son expertas de las emociones; hacen prediccìo-
cia emocíonal de otra manera.La <<Negría> y la <<Tristeza> son poblacio- nes y construyen câsos de emociones que están perfectâmente aåaptadas
nes de casos diversos. Por 1o tanto, la inteligencia emocional es hacer que a cada situación concrera. En el otro extremo del abanico hay niños pe-
el cerebro construya el caso más útil deÌ concepto emocional más úti1 en queños que aún no han desarrollado conceptos emocionales propios de
una sítuació n ð,að,a (y también se refiere a cuândo lxo construir emocio- ios adultos y que usan <<triste>> y <<enfadado> de maneraintercambíable
nes, sino casos de algún otro concepto). para decir que se sienten mal (como hemos visto en el capítulo 5). Mi
la-
230 LÅ \¡ID^A. SECRETÄ DEL CEREBRO
DOMINIÄB. NUESTR.SS EMOCIONES
237

boratorío ha demostrado que los adultos abarcan todala gama, desde la A medida que vayâmos adquiriendo los conceptos asociados se-
<<triste>.
grantiaridad emocional mâsbaja aIa mâs elevada.l2 Así pues, una clave remos capâces de construir nuestras experiencias con mayor precisión.
para la intelígencia emocional es adquírir concepros emocionales nuevos Y no nos limitemos a palabtas de nuestra lengua
y <<pulir> los existentes. -ur.rrru. Elijamos otra
lengua y busquemos concepto s paralos que nuestra lengua
no tengâ pâ-
H.ay muchas mâneras de adquirir conceptos nuevos: hacer excursio- Tabras, como gezellig,la emoción holandesa de unión
Jsentimiento de
nes (aunque solo sea paseando por el bosque), ieer iíbros, ver pelícu1as, grupo' o como enohi,la sensación gríega de profunda culpa.
ptobar comidas nuevas. Coleccionemos experíencias. Probémonos ropa cada pala-
bra es una invitación a consirr-,ir nuestras experiencias de maneras
dife-
nueva y dístinta. Estas actívidades harân que nuestro cerebro combine rentes. ia

conceptos pan{ormar otros nLlevos, y cambíarán nuestro sístema con- rntentemos también inventar nuestros propios conceptos emociona-
ceptual proactivamente pata que más adelante predigamos y actuemos les usando los poderes de la realidad sociai y ra combinación
conceptual.
.de otras maneras. El escritor Jeffuey Eugenídes nos presenta algunos concepros que
son
En nuestra casa,por ejemplo, mi marido Dan se encarga del reciclaje divertidós en su novelã M¡dd/"r"r, tcluyend o <<I ,aaversíón'a los
espejos
porque yo no dejo de tirar aI cubo de Ia basura cosâs que no debería, que empieza enra Edad l\dedia>>, <<La decepción tras acostarse
con ràfun_
como celofán o madera, que a mi enrender deberían ser reciclables. En tasía åeuno> o <<El entusiasmo cuando nos dan unahabitación
con mini-
lugar de fiustrârse por e1 trabajo exrra que 1e doy, Ðan aplica un concep- ba''>, aunque no ies asigna paiabras. Nosotros pocíemos hacer
lo mismo.
to de su ktfancia, cuando coleccionaba cómics de superhéroes. Mís in- cerremos los ojos e imagínemos que nos alejamås en coche de nuestra
ciu-
tentos infructuosos de resístirme aIa realiåaå se han convertido en un dadnaalsabiendo que nunca vamos a vorver.
<<superpoden> que éIlIama reciclaje ilusorio. De esre nodo, un hábíro
¿podemos caracterizar esa
sensación combinando conceptos emocionales? Si podemos
emplear esta
kritante se ha transformado en un defecto dívertido. técnica ðía a åía estaremos mejor calibrados puruhurrrfrente
a diversas
QuizâIa manera mâs fâcú de adquirír concepros sea aprenci et pd.a- circunstancias, y seremos potencialmente más empáticos con los
demás,
bras nuevas. Es probable que el lector nunca haya pensado en aprender con una mejor capacidad para negociar conflíctos y llevarnos bien.
pal.abns para mejorar su salud emocional, pero 1a e{icacta de este méto- Incluso podemos dar nombre a nuestrâs creaciones, como mi palabta
do se desprende de la neurociencia de la construcción. Las palabras siem- <<simpatatas>> del capítulo 7, y enseñarlas afamiiares
y amigos. cuando
bran nuestros conceptos, los conceptos dirigen nuestras predícciones, las hayamos comparrido nuestras creaciones, serán tan reales
coÃo cualquíer
predicciones regulan nuestro presupuesto c.orporatr, y nuestro presupues- otro concepto emocionar,y seránigual de útiles para nuestfo presupuesto
to corporal determína cómo nos sentímos. Por lo tanto, cuanto más rico corporal.
seâ nuestro vocabulario, con más precisión el cerebro predicto r podrá Además de tener_muchos conceptos, las personas con inteii gencia
adaptat su presupuesto a las necesidades de nuestro cuerpo. De hecho, emocional saben cuáles usâr y cuándo. Igual que ros pintores aprãnden
las personas que tíenenmás granulanåademocional acuden mencis al.má a ver distinciones sutiles en los colores y los buenos
catadores desa¡ro-
díco, toman menos fármacos y se pâsan menos días hospitalizadospor en- llanlacapacidad para experimentar gustos que ros no iniciados no pue-
fermedad.li Pero esto no es magía; es 1o que sucede cuando aprovecha- den sabo¡e ar,7a categoúzación se puede practicar como cualquier
otra
mos ellímite poroso entre 1o social y lo físico. capacidad. Supongamos que vemos a nuestro hijo adolescente saliendo
Así pues, aprendamos todas las palabras nuevas que podamos. Lea- pan ir al instituto como si hubiera acalsado åelevantarse de la cama: des-
mos libros que estén fuera de nuestra zona åe confort o escuchemos con- peinado' con la ropa affugada y con restos de la cena de anoche en la
ca-
tenidos de audio que nos hagan pensâr, como algunos programas de 1a misa. Podríamos regañarlo y decirle que r,'uelva a su cuarto paru cambi'-
radio pública. No nos contentemos con <<alegre>>: busquemos y utilíce- se' pero en lugar de eso preguntémonos qué estamos sintiendo nosotros.
mos palabras más concretas como <.eufórico>, <<extasíado> o <<dichoso>>.
¿Nos preocupa que sus profesores no lo tomen en serio? ¿Nos repugna
Aprendamos la diferencia entre <<desanímado>>, <<abatido>> y e1 genérico su pelo grasíento? ¿Nos pone nervíosos que su atuendo pueda dar
una
232 LÂ VID,\ SECRETA DEL CEREBRO DO}f INAR NUESTRAS E¡{OCIONES 233

mala impresíón de nosotros como padres? ¿Nos irrita gastar dínero en larídad mâs baja panlas emociones negativas. Las personas diagnostica-
ropâ que nunca se pone? O quizá nos pone tristes ver que nuestro hijo das de esquizofrenía manifiest an ur\ gr anulaúåað.b ajapara distinguir las
ha crecido y echamos en falta 1a exuberancia de su infancia. Si toda esta emociones positivas de las negativas. Debe quedar claro que nadie dice
introspección suena inverosímíi, haremos bien en darnos cuenta de que que ia granll.aúdadbaja dé lugar a estos trâstornos, aunque cabe la posí-
la gente paga mucho dínero a psicoterapeutas y orientadores exactamen- bilidad de que desempeñe algún papel.17
te con este fin: ayudarles a rcplantear situaciones, es decir, a encontrar ia Después de mejorar nuestrâ granularidad emocional, ofiamanera de
categoúzaciónmâs útil al servicío åeIa acción Podemos hacerlo noso- ..pulin> nuestros conceptos que es populâr entre los psicoterapeutas y en
tros mismos y, con ),apú"cticasuficiente, convertirnos en categorizaåorcs los libros de autoayr-rda, es hacer un seguimiento de nuestrâs experien-
expertos de emociones) unâ taf ea que la repetición hace cad.a vez más cias.posítivas cada día. ¿Podemos encontrar algo que nos haga sonreír,
fâcú.. aunqLìe sea brevemente? Cada vez que prestâmos atención a cosas posi-
En un estudío sobre el miedo alas arafiastt se ha demostrado que el tivas, ajístamos el sistema conceptual rcforzando conceptos sobre esos
enfoque de las categorizaciones .<de grano fino,, supera â otros dos enfo- sucesos positivos y haciendo que destaquen en nuestro modelo mental
ques populates pala regular las er-nociones. El primer enfoque, llamado del mundo. Aún es mejor que escribamos sobre nuestras experiencias
reevaluación cognitiva, enseña a los sujetos a describir Ia araña de una porque , de nuevo, Ias palabras dan lugar al desarrollo de conceptos que
manera no amenazadora: <<Frente a mi hav una araña pequeña que no nos ay-.rdarán a predecír momentos nuevos para cultivar positividad.ls
hacenada>>. Ei segundo enfoque es ia distracción, y consiste en hacer que Por otro Iaåo, cavllar sobre algo desagradable da lugar a fluctuacio-
los sujetos presten atencíón a algo no relacionado con 7a araña. El tercero nes de nuestro presupuesto corporal. Cavtlar es un círculo vicíoso: cada
es categorizar Ias sensaciones con más granularidad diciéndonos, por vez que pensâmos demasiado en (por ejemplo) la ruptura recíente de
ejemplo: <<Frente a míhay una arañ.a fea y asquerosa que ine pone los pe- r-ina relación, añadimos otro câso con el que predecir que expande 1a
1os de punta, pero aun así es intrigante>>. Este enfoque ha sido el más efi- oportunidad de cavilar. Ciertos conceptos sobre nuestrâ ruptura, como
caz para as¡uåar a 1as personas con aracnofobia a sentir menos ansíedad la pelea {inal a gritos olamirada en el rostro de la otra persona cuando se
al mirar una arañ.a e incluso al acercarse a eIIa. Además, los efectos han ha marchado por ultima vez acaban anaigando en nuestro modelo del
durado hastauna semana tras el experímento. mundo. Estos conceptos, como pautas de actívidad neural, son cada vez
La granti.aridad emocional elevada tiene otras venta jas para llevar más fáciles de reprodu cir para e1 cerebro: son como senderos muy holla-
una vida satisfactoria. En una serie de estudios científícos, las personas dos que se hacen cada vez más profundos con los pasos åe cada ffan-
que podían dístinguir con mucho detalle sus sensaciones desagradables seúnte. Evitemos que se conviertan en cami¡os pavimentados. Puesto
erân un 30 "/o más flexibles aI regular sus emociones, tendían menos a be- que cada experiencia que construimos es una inversión, invírtamos con
ber en exceso al estar estresadas y era menos probable que respondieran prudencia. Cultivemos las experiencias que queramos volver a construir
agresívamente a alguíen_que 1es hubiera hecho daño. De las personas que en el futuro.
sufren es quizofren ia, Ias que m anifiest ân mâyo r gr anulariåad emo cion al A veces es útil construir casos de emocíones desagradables a propósi-
âseguran tener mejores relaciones con familiares y amigos en compara- to. Pensemos en 1os jugadores de fútbol americano que cultívan Iaira an-
ción con las que manifiestan menos grar.l:landad, y son más capaces de tes de un partido ímportante.le Gritan, saltan y Ianzan los puños af aite
elegir la acción að,ecuada en situaciones sociales rea1es.16 para ).ograr 1a mentalidad adecuad a para machacar a 7a competencía. Al
En cambio, una granularidad emocíonøJ,baja está. asociada atoåa clase aumentar su ritmo cardiaco, respirar mâs afondo y, en generãI, influir en
de trastornos. Todas 1as personas que sufren depresíón mayor, trastorno sus presupuestos corporales, crean un estado físico que les es famiJiar, y
de ansiedad social, trâstornos de 1a alimenT.ación, trastornos de1 espectro 1o categorizan en el contexto de un estadio basándose en su conocimien-
autista, trastorno 1ímite de la personalidad o que solo experimentan más to de situaciones pasadas donde una emoción concreta ha mejorado su
ansiedad 1'más sentímientos depresíl'os, tienden a manlfestaî ùna gtarTlr- rendimiento. Esta agresividad tarr'l:rién refuerua sus lazos con 1os compa-
 L'\ \¡ID¡\ SECRET¡. DEL CEREBRO
DOMINAR NUESTRAS EMOCIONES 235

ñeros de equipo y transmite â sus âdversarios el mensaje de que ânden

la variedad del mundo real, el hecho de que r:na sonrisa pueda significar
con ojo. Eso es inteligencia emocional en accíón en un ámbíto un tanto
alegtía, vergrtenza, ira o inclus o tristeza en función del contexto. Procu-
ínsólito.
remos también admidr que a veces no estamos seguros de cómo nos sen-
En el caso de que seamos padres, podemos ayudar a nuestros hijos
- timos, que â veces tratamos de adivinar cómo se siente aiguien más, y que
a des ar r oTrar aptitudes p ar a ra inteligen cia emocion a1. Ilablémosies de
a veces adívinamos mal.
las emociones y de otros estados mentales lo más pronio posíble,
aun- Por turnos, mântengamos conversaciones enteras con un niño peque-
que pensemos que son demasiado jóvenes para entenderl0.
Recorde- ño, aunque sea un bebé y aún no pueda responder verbalmente. cuando
mos que un bebé desarrolla conceptos mucho antes de que nos demos
un niño empieza a andar,Ia pauta conversacional es tan importan te para
cuenta' Así pues, miremos a los niños a los ojos, abramos mucho los
construir conceptos emocíonales como Las palabras en sí.21 Mi marido y
nuestros para captar su atención 1' hablemos de movímíentos y sensâ_
yo nunca utilizamos <habla infantil>> con nuestra hï1a, y desde que nació
ciones corporales desde el punto de vísta de las emociones y de otros
le hablamos con frases de adultos plenamente formadas haciendo después
estados mentales. <<¿ves a ese niño? Está llorando. siente doior por-
una pausâ para que <<respondíera>> como pudíera. Las personas que nos
que se ha caído y se ha rascado la rodilla. Está tríste y segurâmenre
oían en el supe¡rnercado pensaban que estábamos locos, pero hemos aca-
quiere que sus padres 1o abracen.> Hablemos con detalie de 1as
sensa- bado con una adolescente emocionalmente inteligente que habla con per-
ciones de personajes de cuerìtos, de las emociones de nuestros propios
sonas aduitas (y que me puede torturâr con unâ precisión de tres decima-
hijos y de 1as nuestras. usemos una gran varíedad de palabras de emocio-
les; estoy muy orgullosa).
nes. Hablemos de lo que provoca emocíones y d. ,r* consecuencias
si nuestros hijos tienen ¡abietas o berrinches, podemos ayrrdarles a
para los demás. En general, actuemos como guías de nuestros hijos
dominar sus emociones y a calmarse aprovechando la rea-lidad social. Na-
cuando se adentran en el mundo misteríoso delos seres humanos, sus
turalmente, cuando mí hija Sophia tenía dos años y aganabaun berrin-
movimientos y sus sonídos. Estas explicaciones detalladas ayuð.arán a
che, decirle que se caJmarano servía denaåa.Así que inventamos un con-
nuestfos hijos a constfuif un sistema conceptual para las emociones
cepto ilamado <<Flada gruñona>>. cadavez que Sophia teníaunapataleta
bíen desar¡ollado.2c (o, si teníamos suerte, un poco antes),le decíamos: <<Oh, no. El hada gru-
cuando enseñamos conceptos emocionales a un niño, estamos ñona está de visita. Está haciendo que te enfades. Hagamos que se vaya>>.
haciendo aJgo mâs que comunicar. Estamo s creando realidad para ese
ni_ão, Entonces hacíamos que se senrarâ en una silla concreta-uÍraafeþada de
realidad social. Le estamos dando instrumentos parâ ,.grrlu, su presu-
color rojo con una ímagen de Elmo, el personaje de <<Barrio Sésamorr-,
puesto corporal, para creal significado apartit de sus sensaciones y
actuar que era su lugar especial para calmarse (no, no tenía unas pequeñas ma-
al respecto, para comunicar cómo se siente y parainfluir en los
demás con nillas rojas y peludas). Al principío la llevábamos a la silla y a veces renía
más e{icacia. U sar á esras cap acidades to da la vida.
una rabieta ylatiral:a de una patada,pero más adelante iba ella mísma sín
cuando enseñemos a nuestros hijos cosas sobre ias emociones, procu-
que se lo pidiéramos y se sentaba hasta que su sensacíón desagradabie se
remos no limítarnos a estereotipos esencialistas como sonieír al
estar a1e- caknaba. A veces íncluso antxtciabaque el hada gruñona estaba viniendo.
gres, fruncir el ceño al enfadarse, etc. (Esto puede ser difícil porque
esra- Puede que estâs prácticas suenen tontas, pero tienen unos efectos tangi-
mos compitiendo con los dibujos animados de la televisión,
lue se ciñen b1es. El hecho de inventar y compartír con Sophia los conceptos <<lIada
a estereotipos occidentales de las emociones.)" Ayudémo.lo.
a entender gruñona> y <Si1la de Elmo>> dio origen a ínstrumentos útiles que 1a ay'u-
daban attanqut)izarse.Para ella, esos conceptos etantanreales como 1o
'* Las pelícu1as de Pixar son impresionantes por 1o bien que evitan estos esrereoti- son para nosotros el dinero, e7 atte, el poder y oftas construcciones de la
pos. Incluso los personajes de Del reués (Inside Out), realidad social.
una faitasíatotalmente esencia_
lista sobre ias emociones, manifiestan unâ gama rnuy
amplia de configuraciones facia- En general, los niños que tienen sistemas conceptuales emocionales
les v corporales muv sutiles y fascinantes d''rante los episãdios
emociJ-rales. más ricos, están más preparados para el éxito en los estudios. En un estu-
236 L¡. VIDA SECRET,{ DEL CEREBR.O DO.tvfINAR NUESTRAS EMOCIONES 237

åio realizado por el Yale Center for Emotional Intelligence se enseñó a fácilmente nuestro afecfa e impacta directamente en e1 sistema nervioso
unos escolares a ampliar su conocimiento y sì-i uso de palabras de emo- del nlno.-'
ciones, durante veinte a fteintaminutos poí semana. Los resultados fue- Regulando con eficacia los presupuestos corporales de nuestros hi-
ron mejoras en ia conducta socíal y en el rendirniento en los estudios. Las jos, no solo los guiamos hacia un sistema conceptual emocional más rico,
aulas que usaron este modeio educativo también estaban mejor otgani- sino que también mejoramos su desarrollo iíngüístico general, que ios
zadas y, según Ia evaluación de unos obse rvadores <<cíegos>> , o{recían más prepara para que ríndan mejor en 1os estudios.
apoyo alaenseñanza.22
Por otro 1ado, si no hablamos a un níño de sus sensaciones en térmi- @@@

nos emocionales, podemos dificultar ei desarrollo de su sístema concep-

tual. Alos cuatro años de edad, ios niños de hogares con ingresos eleva- ' Ahora ya nos hemos esforzado por reformar nuestro estilo de vida
dos han visto u oído cuatro millones de palabras más que los niños de parâ conseguir un presupuesto corporal equilibrado, y también hemos
hogares con ingresos bajos, y su vocabulario es mayor y tienen mejor robustecido nuestro sístema conceptual para convertirnos en expertos
comprensíón lectora. Por io tanto, en el mundo social los niños con me- en emociones. Pero aún seguiremos teniendo altibajos. Seguiremos te-
nos ventajas materiales están aIa zaga. Una intervención sencilla como niendo que ocuparnos de 1os compromísos que exigen el amor, ias ambi
aconsejat a los padres con ingresos más bajos que se comuníquen más güedades de nuestra vída social, Iapoca sinceridad de nuestro lugar de
con sus híjos mejora el rendimiento de los niños en la escuela. Del mis- trabalo,las veleidades de las amistades y el lento deterioro de nuestro
mo modo, usar más palabras de emocíones debería mejorar su inteli- cuerpo con la edad. ¿Qué podemos hacer para dominar nuestros senti-
gencia emocional.2l mientos en el momento?
Se aplican los mismos principios cuando damos a los niños rerroâ- Aunque parezcamentira, el método más sencillo es mover el cuerpo.
limentacíón sobre su conducra. Los estudios indican que los níños de cua- Todos los animales utilizan el movimiento pâra regular sus presupues-
tro años de hogares con pocos ingresos oyen I25.tO0 palabras más de desá- tos corporales; sí e1 cerebro ofrece más glucos a åela que necesita el cuer-
nimo que de encomio, mientras que los niños de cuatro años de hogares po, trepar a un árbol a toåavelocidad devolverá e1 nivel de energia aI
con ingresos elevados o1'en 560.000 palabras más de encomio que de desá- equilibrio. Los seres humanos somos únícos en el sentido de que pode-
nimo. Esto significa que los niños de hogares con ingresos bajos tienen un mos regular nuestro presupuesto sin movernos, usando conceptos pura-
presupuesto corporal más exígido y menos recursos pan afuontarla situa- mente mentales. Pero cuando esta capactåað.no nos baste, recordemos
ción.24 que también somos anima-les. Levantémonos y caminemos aunque no nos
Todos reprendemos a nuestros hijos de vez en cuando, pero procure- apetezca. Pongamos músíca y bailemos por câsa. Demos un paseo por el
mos que nuestra retroalimentación sea concreta. Si nuestra hija no deja de parque.tG ¿Por qué funciona esto? Mover el cuerpo puede cambiar nues-
gimotear, en lugar de gritarie <;Déja1o yal>>, inrentemos decirl e algo como: tras predicciones y, en consecuencia, nuestra experiencia. Nuestros mo-
<<Tus quejas me están írrítando, así que paru. Siríenes un problem a díme- vimíentos tambíén pueden ayuåar a nuestra red de control a traef otlos
io con palalsrasrr. Cuando nuestro hijo dé un coscorrón a su hermana sin conceptos menos molestos a un primer plano.
venir a cuento, no le digamos que es <<un niño malo>> (ese no es un con- Otra manera de dominar nuestras emociones en el momento es câm-
cepto que queremos que desarroüe). Seamos más concretos: <<No pegues biar de lugar o de situación, lo que a su vez puede carnbiat nuestfas pfe-
o/o
a tu hermana; 1e hace áano y la pone triste. Dile que lo sienres>>. La mís- dícciones. Por ejemplo, en 1a guera de Vietnam , eI75 delos soldados
ma regla se aplica a 1os elogios: no digamos a nuestra hija: <Buen a chica>>. estad.¡unídenses efan adictos alaheroína. Cuando volvieron a casa como
Elogiemos sus actos: <<Has hecho bien en no devolverle el cosco ,..ón atu vetefanos, el95'/. de eilos dejaron de tomar la sustancja durante el pri-
hermanor>. Esta formulación ay,adaa los níños a construir más conceptos mer año, una clfra asombrosa en compâración con la población general,
útiles. fJuestro tono de voz también tiene importanciaporque comunica donde solo el 70./" de los usuarios evitan îecaer.21 El cambio de lugar
238 LA VIDA SECRETA DEL CEREBRO DOMIN,TR NUESTRAS EMOCIONES 239

câmbió sus predicciones y redujo su ansía de consumir 1a sustancia (ave- ¿Nos sentimos irritacios, o es que tenemos mono de cafeína? Las mujeres
ces me pregunto sí 1a crisis de los cuârerìta es un intento drástico de cam- suelen tener síntomas físicos ambiguos relacionados con el ciclo menstnral
biar las predicciones de la persona cambiando el contexro)." o durante 1a menopausia, y pueden categotizar las sensacíones como si tu-
Cuando los cambios en el movimíento y en el contexto no nos ay-r- rrieran un signíficado emocional cuando no es así. Recuerdo que en 2010
den a dominar nuestÍas emociones, 1o siguiente que deberíamos intentar todo mi laboratorio, incluyendo veinte investigadores y centenares de mi-
es volver a categoúza¡ cómo nos sentimos. Esto requíere alguna expiícâ- les de dólares en equipo, se trasladó a oúa uníversidad. Todo parccía ir
ción más. Cuando tenemos e1 ánímo por los suelos es porque experimen- mal ;i yo estaba a punro de hacer un viaje de dos semanas. De afurrna ma-
tamos un afecto desagradable debido a sensaciones interoceptivas. Nues- nera me las iba arreglando, apagando cada fuego a medída que empezâ-
tro cereb¡o predecírá con diligencia causas para esâs sensaciones. Quizâ ba...,y entonces rni ordenador portátil <<murió>>. Me dejé caer al.suelo en
seâ un mensaje del cuerpo como <<Tengo doior de estómago>>. O quizâ medio de ia cocína y rompí en sollozos. Justo en aquel momento mi ma-
estén diciendo: <Algo va muy mal en mi vidæ>. Esra es la diferencia enrre rido entró, se dio cuenta de mi estado y me preguntó inocentemente: <<¿Es-
'malestar y
sufrímiento. El malestar es purainente físico. El sufrimiento es tás a punto de tener Ia regla?>. Dios mío. Arremetí contrâ é1, conffa aquel
personãl. cerdo machista que se atevîa â ser tan petulante cuando todo se me venía
Imaginemos cómo vería nuestro cuerpo un virus invasor. No sería- ¡¿abajo? I Mi furia nos sorprendió a los dos. Y tres días más rarde me di
mos rnás que una gtan masa de ADN, proteínas, agrt y cualquíer otra cuentâ de que tenía raz6n.
sustancia biológica que el virus deba robar para reproducirse. Un vírus Con 1a prá"ctica podemos aprender a deconstruir una sensación afec-
de la gripe no se preocupa por nuestrâs creencias, nuesrras cualidades o tiva en sus merâs sensaciones físicas en lugar de dejar que esas sensacio,
nuestros valores cuando infectanuestras células. No hace juicios rnorales nes sean un filtro a través de1 cual vemos el mundo. Podemos disolver la
sobre nuest ro carâctet, como: <<Oooh, es una esnob con un corte de pelo ansiedad en r.rn cotazónque late con rapidez. Cuando podemos decons-
horrible... ¡Vamos atn{ectarlal>>. No, un virus es iguaiitario en relación truir algo en sensaciones físicas, lo podemos volver a categorizar de otra
con sus víctimas. Provoca malestar, pero no es nada personal. Todos los manera utílizando nuestro rico conjunto de conceptos. Quizá esas palpi-
seres humanos que no hayan dormido 1o sufíciente y cuenten con un taciones en el pecho no se deban a la ansiedad, síno a una expe ctatjva o
buen par de pulmones húmedos, pueden solicitar el puesto de anfitrión. incluso al entusiasmo.
Por su parte, el afecto transforma las sensaciones interoceptivas en Miremos ahota mismo a nuestro alrededor y encontremos r_rn objeto
algo sobre nosotros, con nuestras virtudes y nuestros defectos. Ahora las en el que fljarla atención. Intentemos rccategorízarlo, pero no como un
sensaciones son personales, residen en nuêstro nícho afecdvo. Cuando objeto visual tridimensional, sino como los fragmentos individuales de
nos sentimos muy mal, ei mundo parece un lugar La gente nos juz- luz de distintos coiores de 1os que está construida nuestrâ percepción.
^troz.
ga.Las guerras no cesan. Los casquetes polares se derriten. Sufrimos. La Difícil, ¿verdad? Pero podemos entrenarnos para hacerlo. Elijamos ia
mayoría de nosotros dedicamos mucho tiempo a paliar e1 sufrimienro. parte más brillante del objeto e intenremos seguir su conrorno con la vís-
En lugar de comer por los nutrientes,2s soiemos comer por placer o pâra ta. Con Ia práctica podremos aprender a deconstruir objetos de este
tranqulJuarnos. Pienso que 1a adícción a las drogas iegales e ilegaies sue- modo. Grandes artístas como Rembrandt podían hacerlo y representar
le ser un intento equivocado de aliviar e1 sufrimiento debido a urì presu- objetos de una manetà realista pintando en un lienzo. Podemos decons-
puesto corporal en desequilibrío crónico. truir nuestras emociones de una manerâ simílar.
Es difícíI distinguir 1a íncomodidad del sufrímiento en el momento. Recategorizar es un instrumento del experto en emociones. Cuantos
más conceptos sepamos y cuantos más sean los casos que podamos cons-
'" lvii amigo Kevin, el del capítulo
7, tiene un dicho: <Cariño. cuando no re sírva
truir, podremos recategorizat con más eficacia para dominâr nuestras
nada más, ponte unâ bufanda bonita y unas gafas de so1 elegantes, cómprate un desca- emociones y regular nuestrâ conducta. Por ejemplo, si vamos a hacer un
potable v conduce por ahí'. test y nos sentimos excítados afèctivamente, podemos categorizar nues-
240 LA VIDA SECRETÂ DEL CERE,BRO
DOT'Í INAR NUESTR;\S EMOCIONES
24L

tra sensación como una ansiedad negativa (<¡Oh, no, estoy condena- nuestro srstema conceptual paraun ejercicio
más proìongado en er fu_
do >>), o como unâ expect ativa úttl (< Estoy lleno de energía y listo para
I
¡ turo.
empezar!>>). El dírector de 1a escuela ðekârate de mi hi¡a, eI gran maes- Los dolcres lunrbares, ras resiones deportivas,
troJoe Esposito, da este consejo a sus alumnos por si se ponen nerviosos ros doiores debidos a
tratamientos médicos rigurosos y otras dolencias,
antes de la prueba para obtener el cinturón negro: <<F{aced que las mari- ofr"..r, oportunidades
simi-lares para distinguir enrre incomodidrd
posas que os revolotean en el estómâgo Iohagan en formacióru>. Está di-
fíri.;;;;;t". uf..d,ro. po,
ejemplo' las person-as que viven con argún
dolor cråní.o ,.r.r.., tener pen-
ciendo que sí, que nos podemos sentir excitados en ese momento, pero samientos catasttóficos que pârecen tener
en su vida un impacto aúnma_
que no 1o percibamos como nerviosísmo y 1o constru)'amos como un yor que la intensidad der doror. cuándo
aprenden u ,.puruiJ,ì; ,ä;ä-
caso de <<Determínación>>. nes físícas de su males tar afectivo, pueden
tomar menos fármacos opiáceos
Esta clase de recategorizaciónpuede traer beneficios tangibles a nues- y anhelarlos menos. Esto es unhullu"goimporrante
travida. Numerosos estudios han examinado el rendimiento en ias prue- considerando que casi
eI 6'/"
de los estadounid.rr.. .o.rr't.n fá.-r.o,
.o,,....ru paru dorot
bas de matemáttcas de acceso a estudios de posgrado yhan constatado crónico cada añ'o,Ia mayoña de eilos opíáceos
que los estudiantes logranpuntuaciones más elevadas cuando fecatego-
udi.tirro, qìu no, se sabe
que aumentan los síntomas de doror
con un cofisumo prolàngado. según
rizanla ansiedad como una símple seña1 del cuerpo frente ala situación. Deborah Barrett, aûtora de paintracþing (y
cuñada *irj, ."r"¿o pode-
Las personas que rccategorízan 1a ansiedad como excitación manifiestan j mos categorizar e7 dolor como físico, no
dene por qué sef una catástrofe
unos efectos similares: rinden mejor v presentan menos síntomas clási- personal.rl
cos de ansíedad alhablar en público e incluso aI cantar con karaoke. Su La noción de recatego úzat elsufrimiento
como incomodidad o de
sistema nervioso simpático a(tn cteaesas mariposas en e1 estómago, pero deconst¡uír lo mentar en 1o físico tiene orígenes
I
antiguos. En er budis_
con menos citocinas proinflamatorias que reducen el rendimíento y que, I
mo, algunas formas de medítac íón ayuð,ati
a ,.rurgZrirl, ,".ru.ior.,
en general, hacen que la gente se sienta inútil, con 1o que su rendimien-
l

como sínromas físicos para reducir el sufrimíento,

,."rru pri.ti.a que los
I
to mejora. Según otros estudios, 1os estudiantes de clases de recupera- budistas llaman <<deconstruir er yo>>. Nuestro
l <<yo> es nuestrâ idenddad,
cíón de matemâticas en centros de formación superior pueden mejorar un conjunto de características que nos definen
de algún *od., .o-o
sus notas de examen y la nota fínal de curso medi ante ufia, tecategoríza-
ì
ll
nuestra colección de recuerdos, de creencias,
d..orur q,re nos gustan y
I

cíón eficaz. Este ímportante desarrollo puede modíficar Iatravectoîia de a

nos ciisgustan, de esperânzas, de eleccíones
: virares, de princþios y de va-
Tavida de una persona, porque uno de estos títulos puede suponer la di- I
lores' También nos podemos definir por
nuestros genes, nuesrras carac-
ferencia entre el éxito económico y luchar tocfala vida paralTegar a fin rl
te¡ísticas físicas (peso, colgr de ojor), nuestra
l etnia o nuestra personali_
de mes.2e dad (di'e¡tida, fiable); por las reraciones que
.a
tenemos con otras personas
podemos categoúzar nuestra incomodidad como Ãgo útiJ,,por ejem-
Sí ri
(amigos, padres, hijos, amantes),
rl por Io. À1., q". a.r._p.ñu_o, (.rt,r_
plo cuando estamos haciendo mucho ejercicio, podemos cuitivar mâs rc- ,.ì

di1nt9s, científicos, vendedores, Åédí.or,

operarios), por nuesrra comu_
sístencia. El Cuerpo de Marines de Estados Unidos dene un lema que en- ,1

:
I nidad geo gt áfica o ideoiógica (estadounid.rrr.r,
calna este principio: <<El dolor es debilidad que abandona el cuerpo>>.
ì
nos, demócratas), y hastapor el automóvil ";;;rn"_os,Encristia_
q,r. .o.rá,r.i_or. todas
Cadavez que nos ejercitamos hasta que la sensación es desagradable v nos ì1
estas perspectivas hay un núcreo común:
1
yo nuestra sensación de
detenemos, estamos categotizando nuestras sensaciones físícas como ago- 1 ser quienes somos, "i
1'tiene una continuidad en ei",tiempo, *.
tamíento. Siempre nos ejercitaremos por debajo de nuestro umbral, a pe-
ì
si fuera
J
.1
nuestfa esencia.12
sar de los beneficios para nuestrâ salud que tendría continuar.r0 Pero me- 'J
El budismo considera que er yo es unâ {icciónyla
diante una adecua ¿a recategoúzaciínpodremos seguir haciendo ejercicío
I causaprincipar del
ri sufrimiento humano. cadavezque ansiamos
I cosas materiares como ves-
y sentirnos inciuso mejor más tarde, cuando cosechemos los beneficios de i tidos y coches caros, o d"r.u-os haragos para
i
mejorar nuestra reputa-
un cuerpo más fuerte y sâno. Cuanto más 1o hagamos, mâs prepararemos
ì

cíón, o buscamos posiciones d. y pod", para beneficiar nuestra

l "rtut,r,
jI
)Àa LA VIDA SECRETÄ DEL CEREBRO DOMIN,AR NUESTRAS EMOCIONES
243

vtda, eI budismo dice que estamos tratanåo nuestro yo fícticio como si ¿cómo hace el cerel:ro el seguímiento de todos los casos de nuestro
{uel.a reaL (<<cosificamos>> el yo). Estos intereses materiales pueden pro- <<yo>> como bebés, niños pequeños, adolescentes, adultos y ancianos?
La
porcíonar piacer y gîatlficación ínmediatos, pero también nos atrapan respuestâ es que una pafte de nosotros ha permanecido
constante: siem_
como unas manillas de oro y dan lugar a un sufrimiento de catá.cter pel- pre hemos tenído un cuerpo. cada concepto que hemos aprendido
in-
sistente al que ll.amaúamos afecto åesagr adaL:ie prolonga åo. P an un bu- cluye el esrado del cuerpo (en forma de piedicciones interoceptivas)
en
dista, el yo es peor que una enfermedad física pasajera. Es una aflicctón el momento de aprenderlo. Algunos conceptos, como <<Tristeza>>,
supo-
perdurable.rl nen mucha interocepcíón y otros suponen menos, como <Envoltorio
de
Mi definición científíca del yo está inspirada en el funcíonamiento plástíco>>, pero siempre están .n ,el"ción con el
mísmo cuerpo. Así pues,
del cerebro, pero simpatiza con la visión budísta. El yo forma parte åela cað.a categonzación que construimos objetos .r, .i *,rrrdå, ,o-
rea-lidad social. l'Jo es exactamente urìa fíccíón, pero tampoco tiene una -sobre mentales como <<Justi-
bre otras personas, sobre conceptos puramente
naturaJeza objetivamente real como un neutrón. Depende de los demás. cia>, etç.- contíenen un poco de nosotros. Esta es la
base mental rudi-
En términos científicos, nuestras predicciones en el momento ylos actos mentaría de nuestra sensación de yo.i7
que se derivan de el1as dependen, hasta cierto punto, de cómo nos ratan De manera análoga ara idea budista, ra ficción del yo es que posee-
Ios demás. No podemos ser un yo por nuestra cuenta. Podemos entender mos alguna esencia perdurable que nos hace ser q,ri.n.,
somos. pero no
por qué el personaje de Tom Hanks en la película lJáffiago, que llevaba es así. Especulo que e_l yo se construye de nuevo a
cad.ainstante por los
cuâtro años solo en una ísla desierta, necesitaba crear urì compañero 11a- mismos sístemas predictivos básicos que corÌstruyen las emociones,
ín-
mado \X/ilson a p^rtir de un T:alón.t' cluvendo, entre otros, nuestro par de r.d., y" fu-iliur", (interoceptiva
y
Cíertas conductas y preferencias son coherentes con nuestro yo y de control), que câtegorizanracorriente continua de sensaciones
del cuer-
otÍas no. IH.ay alvnentos con los que disfrutamos y otros que preferimos po y del mundo. De hecho, una pârte de la red ínteroceptiva,
la red del
no comer. Podríamos decir que nos vân los perros o ios gatos. Estas con- modo por defecto, también se ha llamado <<sisrema del yåo.
su actividad
ductas y preferencias varían rnucho: nuestra comida {avotita podrían ser se intensifica sistemáticamente durante la introspección.
Si tenemos la
Ias patatas fritas, pero no en cada comida. Los amantes más entusiastas red del modo por defecto atrofiada, como ocurre en 1a enfermedad
de
de los perros conocen a un par de perros que no pueden soportar y, en Alzheimer, podemos 7Legar a perder nuestra sensación de vo.rs
secreto, les gustan algunos gatos. En general, nuestro yo es como un con- Deconstruir el yo ofrece una nueva inspiracíón p"ru .ã*o convertir-
junto de pautas que resumen lo que nos gustâ, 1o que no nos gusta y nos en dueños de nuestras emociones. Ajustando ,rrrarrro
sistema con-
nuestros hábitos en el momento. ceprual y cambiando nuestrâs predícciones, no solo cambiamos
nuestras
Antes ya hemos visto algo así. Estas pautas son como las característi- experiencias futuras; en reaiidad podemos cambiarnuestro <<yo>.
cas de un concepto. Así pues, desde mi punto de vista el yo es un concep- que nos sentimos mal: preocupados porque estamos
to común y corriente como ..ÁrboLr, <<Cosas que nos pueden proteger de " .t.Ogtrtamos
iuchando con nuesrr as {inanzas. enfadado, po, .ro håbe¡'recibido el
insectos que pican>> o <Miedo>.rt Estoy segura de que el lector no se ve a ascenso que merecíamos, desmoralizados porque nuestfo profesor
cree
sí mismo como un concepto, pero le ruego que me siga un poco más. que no somos tan inteligentes como otros alumnos
o desconsolados por-
Si el yo es un concepto, construímos casos de nuestro yo pof símula- que nuestra pareja nos deja. {Jna menralidad budis ta ðescrlbfuíaesos
sen_
ción. Cada caso encaja en nuestras metas en el momento. A veces nos ca- tímientos como el sufrimiento que resulta de aferrars e a riquezas
tegorizamos por nuestra carreta. A veces somos padres, o hijos, o aman- rnateriales, a la rep*tación, alpoder y aTaseguridad en un intento de
cosi-
tes. A veces no somos más que un cuerpo. Los psicóiogos sociales dícen ficar el yo. En el lenguaje derateoñade la emoción consrrui d.a,la dqueza,
que tenemos muchos <<yoes>>, pero podemos concebjr este repertorio la reputación, etc., están firmemente insertadas en nuestro nicho
afectivo
como casos <le un único concepto basado en metas llamado <<Yo>> y cuyas e impactan en nuestro presupuesto corporal, 1o que aI {inalnos
lleva a
rnetas cambian en función del contexto.jr- construir casos de emociones åesagraåables. Deconstruir el yo por un
ins-
¿44 LA VIDA SECRET,{. DEL CEREBRO DOMINAÌ. NUESTRAS EMOCIONES 245

tante nos permíte reducir eltamaño de nuestro nicho afectivo, de modo las que añaden más significado psicológico sobre nosotros o sobre nues-
que conceptos como <<Reputación>>, <<Poder>> o <<Riqueza>> se hacen inne- tro lugar en el mundo.
cesarios.re La meditación tiene un efecto potente en la esrructura y la función
La crtltura occidental tiene algun a sabiå:uúa común asociada a estâs del cerebro, aunque los científícos aún no hayan aclal,d.o los detalles
ideas. No seamos matefialistas. Lo que no mata, engorda. A palabras ne- exactos de cómo ocurre. Regiones claves de la red interoceptivay åeIa
cías, oídos sofdos. Pero vayamos un pâso mâs alfát. Cuando suframos por red de control son más grandes en los meditadores, y las conexíones en-
algírnrrraJ,o alguna injuria, preguntémonos si de verdad estamos en peli- tre estas regíones son más fuertes. Esto coincide con lo que cabría espe-
gfo. ¿O quizá esta presuntâ tniuría solo amenazala realidad social de rar, porque la red interoceptíva es fundamental para construir conceptos
nuestro yo? Larespuesta nos ayudar á a îecategoúzat las palpitacíones, e1 mentales y representar sensaciones físicas procedentes del cuerp o, y Ia
nudo en el estómago y 1a frente empapada de sudor como sensaciones red de control es fundamentalpanregular Ia câtegoúzaciín. En algunos
puramente físícas, dejando que la preocupaci6n,Iaíray el abatimiento se 'estudios se detectan conexiones más fuertes incluso después de solo unas
disuelvan como un comprimido se disuelve en agua.ao horas de entrenamiento. Otros estudios han revelado que la meditación
No estoy diciendo que esta clase de recategorización sea fâaJ, pero reduce e1 estrés, mejora la detección y el procesamiento del error de pre-
con 1a plá.cticaes posible y también es saludable. Cuando categorizamos dicción, faclltta la recategoúzación (lTamada <<regulación emocionab>) y
algo como <<No me atañ.e>>, sale de nuestro nicho afectivo y tiene un ím- reduce el afecto desagradable, aunque los resultados suelen ser diferen-
pacto menor en nuestro presupuesto corporal. Dei mismo modo, cuan- tes de un estudio a otro porque no todos los experimentos han sido con-
do tengamos éxito y nos sintamos orgullosos, honrados o gratificados, trolados adecuadamerrte.4l
distanciémonos un poco y recordemos que estas emociones agradables A veces, deconstruír el yo es demasiado difícil. Podemos lograr algu-
son resultados de 1a rcaIiåaà social que refuerzan nuestro yo ficticío. Ce- nos de los mismos beneficíos con más facilidad cultívando y experimen-
lebremos nuestros logros pefo no dejemos que se conviertan en manillas tando asombro, la sensación de estar en presencia de algo infinitamente
de oro. IJn poco de calma cunde mucho. más grande que nosotros. Es útílpara distanciarnos de nuestro yo.42
Si nos ínteresara llevar esta estlate gia mâs allá, probemos con la me- Pude experimentar estos beneficios personalmente cuândo mifami-
ditación. Lameåitación mindfulness, que es una de muchas, nos enseña a 7ia pasó unâs semanas de verano en unâ casa junto a una playa de Rhode
estar atentos y presentes en e1 ahora observando e1 ir y venir de 1as sensa- Island. Cada noche nos rodeaba una sinfonía de grillos que resonaba con
ciones sin juzgarlas.'f Este estado (que exige una práctica tremenda) me una intensidad que nunca habíaoído. Antes nuncâ habíaprestado dema-
recuefda el estado de alertay de calma de los fecíén nâcidos cuando ob- siada atención a ios grillos, pero ahora entraron en mi nicho afectivo.
servan el mundo con el cefebro cómodamente inmerso en e1 eíror de Empecé a esperar oírlos cada noche, y ñe parccia que su canto me con-
predicción, sin ansieda d a la vtsta. Experimentan sensaciones 1' 1as deian fortaba mientras me quedab a dormída.ar Cuando volvimos åelas vaca-
ir. Con la meditación se logra algo semejante. Puesto que lograr este esta- ciones me di cuenta de que poðíaoír grillos através de los gruesos muros
do puede exigir años de prá.ctica,lo mejor que podemos hacer en su lu- de mi casa si me echaba en silencio. Ahora, síempre que me despierto en
gar es recate gorizar nuestros pensamientos, Sentimientos y pelcepciones medio de una noche de verano, preocupada trâs un día estresante en e1
como sensacíones físicas, que son más fáciles de dejar ír o de soitar. A1 laboratorio, los grí1los me ay'udan a concilíar otravez el sueño. Desarro-
menos al princípio, podemos usar la meditación pan åar más prioridad lié un concepto inspirado en e1 asombro de estar enr,.uelta por ia natvta-
a 1as categorizaciones que se centran en 1o físíco y reducir la prioiidad de lezay sentírme como una mota díminuta. Este concepto me a¡.uda a caÍn-
bíar mí presupuesto corporal cuando 1o deseo. Puedo notar que unâ
planta diminuta se abre paso por una grieta en Ia acera, demostrando
Desde una perspectiva budista podríamos decir que deconstruír el ,vo ay,uåa a
'.
<<suspender la categorización>. Pero desde una perspectiva neurocientífíca el cerebro
ùnavez más que 7a civiización no puede domesticar \a naturaleza, y em-
nunca deja de predecir -v no podemos <<apagar>> conceptos- pleo el mismo concepto para confortarme en mi insignlficancia.
246 L,{ VID,{ SECRET;\ DEL CEREBRO DON{IN,{R \TJESTR{S EIVIOCIONES a /1

Podernos experimentâî ûna sensación de sobrecogimiento símílar ai mos es dominar la percepción de las experiencias emocíonales de los de-
oír las o]as chocando contrâ un acanllfado, al contemplar las estrellas, al más, debemos abandon at esta suposicíón esencialista.
caminar bajo nubarcones de tormerÌta en pleno día, a7 hacer largas cami- ¿Qué sucedió duranre aquel minuro de psicoter apia deDan? Dan
natas por lugares desconocídos o al particípar en ceremonias espirituales. construyó una experiencia de concentración y el psicoterapeuta constru-
Las personas que dícen sentir asombro con más frecuencia también tie- yó uma percepción ãe ira. Las dos construccíones eran reares, pero no
en
nen los menores niveles de esas repugnantes citocinas que nos provocân e1 sentido objetivo, sino en el sentido social. Las percepciones
àe las emo-
trÍ7amaci6n (aunque naðie haya demostrado 7a relaciín causa-efecto).aa ciones son suposiciones y solo son <<correctas>> cuando coinciden con la
Con independencia de que cultívemos el asombro, meditemos o en- experiencia de Ia otra persona; es decír, sí las dos personas coinciden en
contremos otras mane¡as de deconstruir la experien cia en sensaciones fí- el concepto que se debe aplicar. Síempre que creemos saber qué siente
un ínstrumento fundamental para dominar
sícas, 1a tecategotízación es otra persona> nuestra confianza no tiene nada que ver corì el verdadero
nuestras emociones en el momento. Cuando nos sintamos mal, tratémo- saber. Solo estamos teniendo un momento de rearísmo afectivo.aj
nos como si tuviéramos un virus en lugar de suponer que las sensaciones Para mejorar la percepción de emociones, debemos ren'nciar ala{lic-
desagtadables sígnificanalgo personal. Esas sensacíones podrían ser solo ción de que <<sabemos>> qué sienren los demás. cuando nosotros y un ami-
ruido. Quizá solo nos hagafalta dormir. go discrepamos sobre unos sentimientos, no supongamos que nuestro
ami-
go está equivocado como hizo el psicoterapeuta de Dan. En lugar de eso
6 @ pensemos: <<No estamos de acuerdo>>, y activemos nuestrâ curiosidad para
conocer la perspectíva de nuestro amigo. Sentir curiosidad por su expe-
Ahora ya hemos visto qué podemos hacer pata tener más inteligencia riencia es más importante que tener tazón.
emocional en relacíón con nuestrâs experiencías. Pasemos ahora a perci- Así pues, si nuestras percepciones no son más que suposiciones,
bir de unamafiera inteligente 1as emociones en las personas que nos ro- ¿cómo nos podemos comunicar corr los demás? Si arguíen me dice que
dean y a considerar los beneficios posteriores para nuestro bienestar. se siente orgulloso de 1as noras de su hijo y <<orgulio>> es una población
Mi marido, Dan, pasó por unos momentos difíciles hace unos dece- de casos diversos que no presentan una huella dact,lat constante,
¿cómo
nios, antes de que nos conociéramos, y fue remitído a un psiquiatra. Al puedo saber a qué <orgullo>> se refiere? (Esra pregunra no se pbnìeu en
cabo de unos treinta segundos de íniciar la primera sesión, Dan frunció la visión clá.sica, donde el orgullo dene una esencia distintiva: simple-
el ceño, como suele hacer cuando se concentra,y el psiquíatra, confian- mente hay alguien que transmite orgullo y nosotros 1o reconoc"-àr.)
do en ia exactitud de sus percepcíones, dictaminó que Ðan estaba <<lleno Ante esta inmensa varial:úidad, comunicamos emociones por medio de
de ira reprimida>>.La cosâ es que Dan es una de las personas más ttan- la maquinaria predictiva del cerebro. Nuestras emociones están guiaðas
quilas que conozco. Cuando Dan aseguró al psíquiatra que no estaba en- por nuestras predicciones. Y, cuando observo a alguien, las emociones
faåada, el psiquiatra, confiando en su capacið,ad para interpretar a sus que percibo están guíadâs por mis predicciones. por io tanto,la comuni-
pacientes, insistió: <<Sí, 1o estó>. Dan salió por 1a puerta antes de que el cación emocional se da cuando dos personas predícen y categorizan en
segundero hubiera dado la primera r.'uelta. Puede que tengâ el récord sincronía.a6
mundial de la sesión de psicoter apra mâs breve. Los científicos y los câmareros saben que las personas se sincronizan
Mi intención al citar este ejemplo no es criticar esta profesión dedica- de muchas maneras cuando se comunican, sobre todo si se gustan o hay
da ala salud mental. sino ilustrar la {alsa confianza en que nuestras per- confianza entre ellâs. Saludo con la cabeza a alguien,y ese alluien me sa-
cepciones de los estados mentales de otras personas son pueden 11e- luda con ra cabeza a mí. IJna persona me tocâ el brazo y un momento
Bm a ser- <<correctas>>. Procede de la visión cIásica,
-o
que propone que después yo toco el suyo. Nuestras conductas no verbales se coordinan.
Dan transmite ira con una hueila åact:/lar característica que el psicote- También hay una sincronía biológica;los ritmos cardíacos de una madre
rapeuta detecta aunque Dan no sea consciente de ella. Si 1o que quere- y de su hijo se sincronizan si su apego es seguro, y 1o mismo,puede pasar
248 I-A VIDA SECRETA DEL CEREBRO DOìvIIN;\R NUESTRAS EMOCIONES 249

entre dos pefsonas que mântíenen una conversación interesante. El me- periencia taml:ién nos permíte regular recíprocamente nuestros presu-
canismo sigue siendo un mistelio. Sospecho que es porque la respiración puestos corporales; esta es una de las grandes ventajas de vívir en gru-
se sincroníz a aI obsewar de manera ínconsciente cómo sube y l:aja elpe- po. Todos los miembros de una especie social, incluyendo las abejas,las
cho de Ia otrapersona. Cuando me formaba como psicotelâpeuta apfen- hormigas y las cucarachas, regulan mutuamente sus presupuestos cor-
dí a sincron iz,ar åeltberadamente mi respiración con la de mis clientes porales,as pero nuestra especie es la única cuyos míembros pueden en-
con el fin de preparados Þarc"la hipnosís.47 señarse mutuamente conceptos puramente mentales y luego usarlos en
Sincronizamos del mismo modo nuestros conceptos panlas emocio- sincronía. Nuestras palabras nos permiten entrar en los nichos afectivos
nes. Mis emociones están guiadâs pof mis predicciones. Y cuando alguien de los demás, incluso a distancias enormes. Podemos regular el presu-
me observa, las emociones que percibe están guiadas pof sus prediccio- puesto corporai de un amígo (y é1 el nuestro) hasta con un océano de
nes. El sonido de mi voz y 1os movimientos de mi cuerpo, tal como los per- por medio, ya sea por te1éfono> por correo electrónico o incluso con solo
cibe e1 cerebfo dela otrapefsona, confírman sus predicciones o se con- pensar cn é1.
vierten en un e¡ror de Predicción. |.luestra elección de palabras tiene un ímpacto enorme en este proce-
Supongamos que alguien me dice: <A mi hijo le han dado el papel so porque esas palabras conformanlas prediccíones de los demás. Los
protagonist a efilaobra de teaúo de la escuela. Estoy muy orgulloso>>. Las padres que preguntan aùnniño <<¿Estás disgustado?> en iugar de 1a pre-
palabrasy los actos de esa persona desencadenan en mi cerebro una po- guntâ más general <¿Cómo estás?>>, están influyendo en la respuesta,
Èlación de predicciones qr-re ayuáan a coordinar en el momento un con- construvendo conjuntamente una emoción y orientando los conceptos
cepto de <Orgullo> compaftido pof las dos. Mi cerebro calcula proba- del niño hacia sentirse disgustado. Los médicos que preguntan un pa-
^
biildades basãndose en experiencias pasadasyhace una críba de sus cíente <<¿Se siente usted deprimido?>> tambíén hacen que sea más proba-
prediccíones hasta llegaf â un caso ganado r que quizâmehagz' decir: <<Fe- ble una respuestâ a{itmativa que si le hubieran preguntado simplemente:
ii.idrd"rrr. Luego, se repite el mismo proceso en sentido contrario cuan- <<¿Cómo se encuentra?>>. Son preguntâs que sugieren la respuesta: son la
do la otra pefsona me percibe a mí. Estafemos más en sincronía si com- misma clase de preguntas que usan (y que objetan) los abogados con los
partimos 1ã misma cultura u otfas experiencias pasadas, y si estamos de testigos de un juicio. En Ia vida de cada dia, igual que en un tribunal, de-
u.rrerdo en que ciertas confíguraciones facíales, determinados rror'ímien- bemos tener presente ia posibilídad de influir en las predicciones de ios
tos corpofales, cíerta acústica vocal y otras pístas tienen un sígníficado åemâs con nuestras palabras.
en determinados contextos. Poco a poco, construimos conjuntâmente Del mismo modo, si queremos que alguien sepâ cómo nos sentimos,
una experiencia emocional que las dos pefsonas ídentificamos con lâ pa- debemos transmítir unas señales claras para que Ia otra personâ prediga
labra ..orgulloso>>. con eficacia y paru que se produzca sincronía. En la visión clásica dela
En una situación como estâ, pâra que yo entienda cómo se siente Iaotra emoción, todala responsabilídad recae en el perceptor, porque se supone
persona no hace falta quçnuestros conceptos coíncidan exactamente; es que las emociones se manifiestan de unâ manera universal. Desde la
suficiente con que tengamos unas metas tazonablemente compatibles' Por perspectíva de la construcción, también tenemos 1a responsabílidad de
otra pârte, si construyo un câso de la clase desagraåable de orgullo en el ser buenos emisores.ae
qrr" iu otra person a es affogante y despectiva, puede que no acabe de
entender lo que dice, porqu eha utllizado un concepto que, en este caso, @@@

no coincide con el mío. Obsérvese que esta construcción mutua eS un

pfoceso continuo con ios dos cerebros en constante actividâd' aunque Supongamos que no hemos 1eído este libro y que alguien nos dice:
aquí lo estoy describiendo como una simple secuencia de sucesos recí- <¡Eh! ¿Quiere usted dominâr sus emociones? Pues coma menos comída
procos. basura .v aprenda muchas palabtas nue\¡as>>. Reconozco que no suena
La <<coconstrucción>> o constmcción conjunta y compartida de la er- mu.v intuitivo, pero comer de una manera sana fomenta un presupuesto
250 LÀ VIDÄ SECRETA DEL CEREBRO DOÀ,IINAR NUESTRAS EMOCIONES 251

corporal que es mâs fâcú. de equilibraf y ûnas predicciones interocepti- sob¡e el sistema nervioso están disolviendo ellímite sagrad,oenrre Io que
vas más caJlbraåas, y las palabras nuevas siembran conceptos nuevos que catalogamos como enfermedades físicas y ro que .o.riid"ru-os trastor-
son la base panla construcción de experiencias y percepciones emocio- nos mentales, de la misma maneraque la teotíade la emoción construída
nales. Muchas cosas que parecen no estâr relacionadas con las emociones desdibuja Tafrontera enrre 1o físico y 1o social. Esre es el tema que vamos
tienen un impacto muy profundo en cómo nos sentimos a causa del lími- a examinat a contínuación.
te poroso entre lo social y 1o físico.
Sornos unos animales excepcionales que podemos crear conceptos
puramente mentales que intluyen en el estado de nuestro cuerpo. Lo so-
cial y 1o físico están estrechamente vínculados por el cuerpo y el cerebro,
y nuestra capaciåaå de movernos con eftcacia entre 1o social y 1o físico
depende de una serie de capacídaåes que podemos aprender. Á.sí pues,
aumentemos el número de nuestros conceptos emocionales. Cultivemos
oportunidades para que el cerebro se cablee para)-as realidades de nues-
ffo mundo social. Si nos sentimos mal en un momento dado, deconst¡u-
yamos o recategoricemos nuestrâs experiencias. Y tengamos presente que
nuestras percepciones de 1os demás son simples suposiciones, no hechos.
Algunas de estas capaciåades nuevas son dificilísimas de cultivar.
Una cosa es que una científica como yo diga: <<Así es como funciona el
cerebro>>. Y otra totalmente diferente es poner patas anlbatodo nuestro
estilo de vtda paru aprovechar 1o que dice la ciencia. ¿Acaso tenemos
tiempo para reformar nuestros hábitos de alimentación y de sueño y para
hacer más ejercício, por no hablm de aprender conceptos nuevos, practi-
carla categorización y distanciarnos de vez en cuando de la ficción de1
yo? Todos tenemos trabajos, tareas escolares, iimitaciones de tíempo y
toda clase de problemas personaies y domésticos. Ädemás, algunas de
estâs propuestas exígen una inversión de tiempo o de dinero que podría
no estar aI alcance de 1a gente que más podría beneficiarse de ellas. Pero
en este capítuio todo el mundo puede encontrar .<algo> que pueda pro-
bar, aunque solo sea dar-paseos o combinar algunos conceptos emocio-
nales antes de echarse a dormir. O renunciar alas patatas chips (vale,
puede que no del todo).
Como acabamos de ver, 1os conceptos emocionales y la presupuesta-
ción corporal pueden mejorar el bienestar y la salud, pero tambíén pue-
den actuar como catalízað.otes de la enfermedad. Parece que las emocío-
nes influven en una variedad de trastornos como ia depresión, 1a ansiedad
y el dolor crónico que no tiene una causa aparente. y en disfunciones me-
tabólícas que dan lugar a díabetes de tipo 2, a enfetmedades cardiovas-
culares e incluso aI câncer. A1 mismo tiempo, nuevos descubrimientos
 CA['ITUI.O
10
Ernoción y enfermedad

Pensemos en la última vez que hemos estado resfriados. Seguramen-

te nos goteabala naúz y teníamos tos, fiebre y otros síntomas diversos.
Lamayoúa de 1a gente atribuye los resfríados a una sola causa, como un
virus. Fero cuando 1os científícos colocan virus del resfriado enlanatíz
de cien personas, solo enferman entre eI25 y el40'/. de ellas.l Por lo tan-
to, el virus no puede ser la esencia de un resfriado; debe estar pasando
algo más compiejo. El vi¡us es necesario, pero no sufícíente.
Este conjunto de síntomas al que llamamos <<resfríado>> no implica
solo nuestro cuetpo, sino también nuestra mente. Por ejemplo, las perso-
nas introvertidas o de mentalidad negativa tíenden mâs a desarrollar un
resfriado si su nariz entra en contacto con el virus.2
Nuestra nueva r'ísión åela naturalezahumana, inspkada enla teoría
de ia emoción construida, también disuelve los límites entre lo menral y
1o físíco en caso de enfermedad. Por otro lado, e1 antiguo pensamiento
esencialista mantiene claramente esta división. ¿Tenemos algún proble-
ma cori nuestro cerebro? Acudamos a un neurólogo. Si el problema que
tenemos es mental, habrâque acudir a un psiquíatre'.IJnavisión más mo-
derna integra mente y cerebro, y permite entender mejor la enfermedad
humana.
Pcr ejemplo, sí consideramos ios diversos síntomas que se observan
en dolencias como la ansiedad,la depresión, el dolor crónico y el estrés
crónico, veremos que no encajan en un grupo de compartimentos clata-
ì
mente separados, como un cajón paralacubertería. Cada enfermedad tie-
iì:
ne unâ variabilidad enorme, y hay muchâs superposiciones entre los con-
!¡': juntos de síntomas. Esta situación nos debería sonar. Ya hemos visto que
fi;
254 L,{ \TDÄ SECRE,T,,\ DEL CEREBRO
EMOCIÓN Y ENFERMEDAD
255

c ategoúas emocionales como Ia alegúa y Ia tristezano tíenen es encias, sino te sígnificativo, como-ve¡ que n.uestro jefe, entrenador
o profesor viene
que están hechas por sistemas centrales en el cuerpo y en el cerebro, en ei hacia nosotros, el cerebro pr"d" pr.d".í. innecesariamentl que necesita-
contexto de otros cuerpos y cerebros. Ahora propondré que algunas en- remos combustibl e y activ* unos circuitos
de supervivencia que impac_
fermedades que parecen distintas en realidad también son construcciones tan en nuestro presupuesto. En generar, estos
desequiribrios de cortid,r_
hechas por el ser humano pala lepartir un mismo pastel bíológico muy tación no suponen ningún problema, siempre y
cuando reintegremos ro
vanalsle. que hemos reti¡ado comiendo y durmiendo.
Un enfoque basado en 1a construcción para entender la enfermedad Pero cuando un desequilíbrio presupuesta¡ío se prolonga,
puede dar respuesf.a a algunas preguntâs desconcertantes que nunca se dinámicas internas cambian a peor. Er lerebro
.rrr.rr.rrï
pr.di.. .r.órr.u-..rt.
han resuelto satisfactoriamente. ¿Por qué tantas dolencias comparten que nuestro cuefpo necesita enetgía unay
,

offa vez, con lo cual nuestfo r

los mismos síntomas? ¿Por qué hay tantas personas ansiosas y deprimí- presupuesta entratá en números rojos. Los
efectos de esta mala presu_ ,*
das al mismo tiempo? ¿El síndrome defatiga crónicaes una enfermedad puestación crónica pueden se¡ devastadores para
nuestra sul,rd y hrc.r
distinta de 1a depresíón, o solo es una depresi ón disftazaåa? Laspersonas que interv'engan los <<cob¡adores de deuda.r, ,,

d"l cuerpo, que forman

que sufren dolor cróníco sin que se observe ningún tejído dañado, ¿su- parte de nuestro sistema inmunítario ,

fren un trastorno mentai? ¿Y por qué tienen depresión muchas personas

con enfermedades cardiovasculares? Si se relacionan enfermedades con
- Normalmente, el sistema inmunitario nos protege de invasor., v d.\
herídas. Nos ayrrda provocando inflamación,
como lu q.r.,;;;:*
nombres diferentes con el mismo conjunto de causas fundamentales y se nos golpeamos un dedo con un marti,lro, si nos pir^ l
unu abejà o.i t.rr.- ¡i
a ,rrul p"q,r.n^ prot.in;ä; j
difuminan las líneas divisorias entre ellas, estas preguntas dejan de ser mis- mos una infección. Lainframación se deb,e
terios. madas cítocinas proinflamatorías, que he mencíonado
br.,r"mente en el
Este es ei capítulo más especulativo dellíbro, pero esrá susrenrado en capítulc anterior. cuando sufrimos una herida o i
contrâemos una enfer- ,i_
datos, y espero que e1 lecto¡ consídere 1as ídeas que aquí expongo intri- medad, nuesrras células secreran citocinas que rlevan "
gantes y provocadoras. En Ias páginas que siguen demosraré que fenó-
,""u.. ;i;r=";;.
afectada, aumentan su temperat,rayprovocan
Iainframación.,0 Estas ci- r,
menos como el dolor y el estrés, y que dolencias como el dolor crónico, el tocinas pueden hacer que nos sintamàs fatigados
y enfermos;";;;;,
estrés crónico, la ansíedaåyla depresíón están más entrelazados de io que mientras rcaltzan su tarea de ayudatnos erì nuest ra
podríamos pensar, y se construyen de la misma mafiela que las emocio-
cutación. ;;

Pero las citocinas proin{ramatorias también pueden

..fo.rurr. marr;
nes. Un componente clave de este punto de vista ímplica una compren- dadas las condiciones adecua åas paru er cobro
å. d.rrdrr. Esto sucede,
sión mejor del cerebro predíctivo y del presupuesro corporal. sobre todo, cuando nuestfo pfesupuesto corporal
se encuentra en un es-
tado de desequilibrio crónico poiqr. ejempro- vivimos en un
ø66 -por En rrn entorno øn
barrio peligroso y oímos disparos .rãu rro.h..
duro, el
cerebro podría predecir regularmente que necesitamos
más energía de ra
Normalmente, nuestro presupuesto corporal fluctúa a 1o largo del que requiere nuestro cuerpo. Estas predicciones
hacen que nuestro cuer-
día porque el cerebro prevé las necesidades del cuerpo y va carnbiando po libere hidrocortísona con más frecue ncia
y., -uyoå, cantidades de
los recursos presupuestarios como el oxígeno, la glucosa, Ia sa| y eI agua. lo necesario. Normaimente, ra hid¡ocortisona inhibe
r a tnframación (por
Cuando digerimos comida, e1 estómago y los intestinos toman recursos eso ]as pomadas de hidrocortisona arivian el picor,
y las Ínyecciones de
de los músculos; cuando corremos, ios músculos toman recursos del hí- cortisona reducen una hinchazón). Cuando tenemos
demasiada hidro_
gado y de ios riñones. Duranie estos cambios, nuestro presupuesto sigue
siendo <<solventerr. 't Las citocinas no intervienen en todas ias crases ð,e tnfl,amación, y no
todas ras cí-
tocinâs la pro'o_can. Aquí soÌo nos ocupamos de
Nuestro presupuesto corporal se desequilibra cuando el cerebro cal- la inflam *¡¿n ,rO^r^,q.r. pro_
vocada por las llamadas cirocinas proinflrmrto "rtá
rias. para simpiificar, solo hablaré de
cula mal, lo cual es bastante normal. Cuando sucede algo psicológicamen- ..citocinas>>.
256 LÄ VIDA SECRETA DEL CEREBRO ¡lloclóN y g¡JFERLI ED,A.D
)7f

cortisona enTa sangre durante mucho dempo, Iainflamación se recrude- ciiccíones, especiaimente las que controlan
ei presupuesto corporar, po-
ce.i Sentimos que nos falta energía. Podríamos tener fiebre. Si alguien niendo el presupuesro en negativo. Re.ordemä,
q"; r.";ircuitos encar_
nos colocara vÍrus del resfriado en la nariz, seríamos una de las personas gados del presupuesro corporal
son duros de oído ;;;.T;t,.;
que acab aúan enfermando. prácticamente sordos a ras correcciones
der cuerpo.r-^øfi^^^ción acer_
Aquí puede producirse un círculo vicioso. Cuando nos sentimos fatí- caTa aguja alnivel de <.sordera totaL>.
Las regíones encargadas de ra pre_
gados a causa de unainfl,amación, no nos movemos ianto con el fin de con- supuestación se r,r,zelven insensibles a nuestra situación, haãiendo más pro_
servar (1o que el cerebro cree erróneamente que son) nuestros limitados bable que el ptesupuesto se mantenga
en negativo. podemos acabat
recursos energéticos .Empezaremos a comer y a dormir mal y no haremos consumidos por la fatigay los sentimíentos
desãgradabr.r. tu maia pre-
ejercicio,lo que aún desequúlbrará, más nuestro presupuesto, y empeza- supuestación crónica agoia nuesrros recursor,
dJrgrrt, er cuerpo y acu-
remos a sentírnos muy mal. TaIvez ganemos peso, 1o qlJe agîavalá nues- mula más citocinas proínframatorias.
cuando esto oãurre tenemos un gran
tros problemas, porque ciertas células adiposas producen citocinas proin- problema.T
fLamatorias que empeor an Ia infl.amación. También podríamos empezar a un presupu"rr? en desequilibrio crónico acrúa como
evitar a otras personas, que entonces no podrán ayudarnos a equilibrar pamla enfermeciad. Ttqotal
En los últimos ,,åi.rr. años ha quedado
abono
claro que el
nuestro presupuesto corporal, y las personâs con menos relaciones socia- sistema ínmunitario es un ingrediente
en muchas más enfermedades de
les también tienen más citocínas proinflamatorias y hasta pueden enfer- las que ca!:ríaesperâr, induyãndo
diabetes, obesidad, enfermedades car_
mar con más ftecuencia.a dio'asculares, depresión, i'somnío, pér
diáad. ;;oJl'orr", funcio_
Hace unos diez añ,os,los científicos descubrieron, para su sorpresa, nes <<cogniti'as>> ¡elacionadas con
ra vejez prem atula yia åemencia. por
que las cítocínas proínf\amatorias pueden pasar del cuerpo a1 cerebro. ejemplo' si tenemos cáncer, Iainflamaciån hace q,rá
'a ro. ,.r-ores crez_
Ahora también sabemos que e1 cerebro tiene su propio sistema ínflama- can con más rapidez. Tambiénhace
más probabre qrr. ru, céruras cânce_
rosas sobrevivan alperígroso viaje por
torio con células que secretân estâs citocinas. Estas pequeñas proteínas, d tå.r..rt..u;;;;. n, ruinfectar
con su capactåad de inducir sensaciones de sufrimíento, reestructurân otros lugares del cuerpo, un proceso ilamado
metásãsis. La muerte por
e1 cerebro. La'tnframación en el cerebro provoca cambios en la estructura cáncer se produce antes.s
cerebral, sobre todo en la red interoceptiva, e interfiere con las conexio- La infl'amación ha ¡evolucionado nuesrra
comprensión de ras enfer_
nes neurales e incluso elímína neu¡onas. Lalnfl.amación crónica también medades menrales. Durante muchos
años, ros médicos ¿rrl.o. yros cien-
puede hacer que sea más difícíl prestff atención y recordar cosâs, 1o cual tíficos han adoptado una visión clásica
de enfermedades mentares como
reduce el rendímiento en un test de coeficiente intelectual (CI).t el estiés crónico, el dolor crónico,
ia ansiedad y ru d.pr.rìJ". s. *eía que
Dicho esto, consideremos qué ocurre si nos hallamos en una situacíón rrasrornos tenía unah,,"[á ¿"*ir". ÀìJogica
social estresânte, como cuando un grupo de compañeros de trabajo de re-
:?"1i:::1: ,":r.:
cIStlngula de ros demás.e.Los investigadores hacían preguntas
que 1o
ésenciaris-
pente deja de invitarnos a que nos unamos a el1os para almorzaq o si unos cada trasrorno era diferente: ..¿e"ué
amigos leen nuestros mensajes de texto pero no responden. Lo normal es
i:toepresion
ra ::::Yfonían,9ue
en ei cuerpo? ¿cómo infruye ra emoción
impaco riene
en el do_ror? ¿por
que nuestro cerebro prediga que necesitamos un combustible que e1 cuer- q"eJ?,ansiedad I' ia depresi ón vanjuntas
con tantafrecuencia?>>.
po no precísa, 1o cual afectará temporalmente a nuestro presupuesto. ult'-amente, .las ríneas di'isorias entre estos
tfastomos se han ido
Fero ¿qué ocurre si la sítuación social no se resuelr'e con rapidez? ¿Qué desdibujando' I-as personas diagnosticadas
con un ¡¡asrorno dudo p,r.-
ocurre sí este rechazo social es nrÌestrâ vida de cada día? Niuestro cuerpo den tener síntomas muy dirrerso's, y ra
variaciónes ra norma. Al mísmo
se mantiene alerta, rebosante de hidrocortisona y citocinas. Ahora el ce- tiempo' hay diferentes trasto¡nos que se
superponen y compârten sínto-
rebro empiezaatfãtar al cuerpo como si estuviera enfermo o dañado -via mas, dan Tugar a attofia en ras misrnas
regiones cerebrares, ras personas
inflamación se cronifica.ó afectadas manifiestan pocâ granuraúdademocionar
y urg,*os casos se
La inflamación en el cerebro es muy perjuclícial. Afecta a nuestras pre- recetan los mismos fármacospor considerarse
eficaces.
".
258 LA VID:\ SECRET,{ DEL CEREBRO OCIÓN Y ENFERIVIED,\D
EÀ,f
259

Como resultâdo de estos estudios, 1os ínvestigadores se alejan de la vi- les con que se construyen emocíones. En cada caso, nuestro cerebro
hace
sión clásica de unos trastornos díferentes con esencias distintas, y se cen- predicciones sobre nuestro presupuesto corporal en relación con e1 mun-
tran en un conjunto de ingredientes comunes que hacen ala gentevulne- do exterioq y crea significado. Estas predi..iorr., surgen de nuestra red
rable aestos trâstornos, como factores genéticos, insomnio y lesiones en interoceptiva y descienden del cerebro äl cuerpo por 1as mismas vías. En
Ia red interoceptiva o en centros fundamentales de1 cerebro (capítulo 6). sentic{o contrario, las vías ascendentes que llevan inputs sensoríales
del
Cuando estas áreas se lesionan, el cerebro se enfrenta a graves problemas: cuerpo al cerebro ømbiénson las mismas pav-elesftés y pazias emocío-
depresión, trastomo de pánico, esquizofrenia, autísmo, dislexia, dolor cró- nes. Y el mismo par de redes, la interocep tiva y ra de control, desempe-
nico, demencia, enfermedad de Farkinson y trastornc por déficít de aten- ñan los mismos roles. (Los investigadores del esúés y de la emoción rara
ción con hiperactividad, todos trastornos asociados a lesiones en centros vez reconocen estas similimdes, y tienden a preguntarse cómo influye
el
cerebrales.'o estrés en las emociones y viceversa, como si e1 estrés y las emociones
fue-
- Mi opinión es que ciertas enfermedades muy importantes que se con- ran independientes.)12-Desde el punro de vista de la construcción,lo que
sideran distintas y <<mentales>> tienen su raíz en un presupuesto corporal difiere es el resultado final, con independencia de que el cerebro ,ur.go-
que sufre un desequilibrio crónico y en una inflamación sin freno' Las rice nuestras sensaciones como estresântes o como emocionales.
categorizamos y las nombramos como tlastolnos diferentes en función si nuestro presupuesto corporal está en desequiribrio durante mu-
del contexto, de manera muy parecida a como calegarízamos y nombra- cho tiempo, podemos experimentar estrés crónico (una malapresupues-
mos los mismos cambios corporales como emociones diferentes. Si ten- tación crónica se suele diagnostícar como estrés, que es Iu razónde que la
go lazóî, preguntâs como <<¿por qué la ansiedad y la depresión van jun- gente piense que e1 estrés causa enfermedad). El esmés crónico
es peli-
tas con tanta frecuencia?>> ya no son misterios> porque, aI tgual que las groso parâ nuestra salud física. Corroe, literalmente, la red interoceptiva
emociones, estos trâstornos no tienen unos límites definidos enlanatu- y la red de control haciendo que se atrofien, porque un presupuesro
cor-
raleza. Ofreceré una justificación más åetall,adapara defendef esta visión poral en desequilibrio cróníco remodela, precisament", 1o, circuitos ce-
cuando hablemos con mayor profundídad del estrés, ei dolor, la depre- iebrales que regulan el presupuesro.li ¡y iuego hay quien hablade la cii-
sión y la ansiedad. visión clásica enrre enfermedades mentales y físicas I
Los científicos aún están intentando resolver el puzle del sistema in-
@@@ munitario, el estrés y la emocíón, pero en estos momentos ya sabemos
algo. El deseqr-rilibrio acumulad'o del presupuesro corporal ejem-
Empecemos por el estrés. Se poclría pensar que el estrés es algo que plo, al haber crecido en la adversidad, sin habernos sentido -porr.jrror, hu-
nos sucede, como cuando intentamo s tealizat cinco tareas alavez, cu.an- biéndonos visto privados de necesidades básicas como alimenros nutriri-
do nuestro jefe nos dice que teníamos que entregar a,ver el trabajo de ma- vos o momenios de tranquilidad pan dormir, etc.- también cambiaTa
ñana o cuando perdemos a un sef querido. Pero el estrés no procede del estructura de nuestra red ínteroceptiva recableando el cerebro y redu-
mundo exterior, sino que 1o construimos nosotros. cíendo su capacida dpararegular con precisión nuest¡o presupuesto cor-
A1gún estrés es positivo, como el reto de aprender un tema nuevo en poral. solo hacen falta un par de experiencia,
-.ry r"guri vas p)ataque los
la escuela. Alguno es negativo pero tolerable, como pelearnos con nues- niños tengan la sensación de vivir en unazonade combate y ei tamano de
tro mejor amígo. Y algún orro es róxíco, como el estrés crónico debido a sus regiones de presupuestación corporal se reduzca cuando JJegan aIa
una pobreza prolongada, a malos trâtos o ala soledad.tt En ctras pala- edað, aðurta. crecer en una famtliacruel o caótica, con muchos conflictos
bras, el estrés es una poblacíón de casos diversos. Es un concepto, igual o críticas verbales, aumenta Ia jnflamación en ias muchachas adolescen-
que <<Alegríæ> o .<Nfiedo>>, que apiicamos a experiencias construídas a tes y sitúa a los niños varorÌes en urìa trayectoúa que lleva a la enferme-
partir de un presupuesto corporal desequilibrado. dad crónica; es casi tan negatirr o pa"¿el desarrollo ã" ..ru, redes como io
Construimos casos de <<Estrés>> con los mísmos mecanismos cerebra- son los malos ftatos o el abandono durante Ia tnfancia. Lo mísmo cabe
260 L,{ VIDÄ SECRET,\ DEL CEREBRO EIVIOCÌÓN \' ENFERNÍ EDAD
261:

decir del sufrímiento debido ai acoso escolar. Los niños que han sido ob- cerebro simplemen te rccibîa y representaba sensacíones
nociceptivas y,
jeto de acoso escolar en su in{anciamuestran una inflamación de baiain- uo i lò, exp erimentábamos dolor.
tensidad que persiste en 1a edad adulta y que 1os predíspone a muchas Feio el funcionamienro inrerno der doror es más
complejo en un ce-
enfermedades mentales y físicas. Estas son las innumerables maneras con rebro preclictivo. El.dolor es una experiencia que
no surge solo de un
que el cerebro esculpe un presupuesto corporal desequi-iibrado, que se daño físico, sino rambién de ia prediåion po,
pãrr" der cerebro de la in-
traduce en un riesgo vitalicio mayor de sufrir enferr¡edades cardíovascu- minencia de un daño.16 Si la nocicepción f,rr.i,orru
mediante predicción,
lares, artritis, díabetes, câncet y otras enfermedades.la como hacen rodos los sistemas sensoriares del
cerebro, .. qrr. construi-
En 1a vertíente positiva, e1vínculo entre emociones y estrés indica que mos casos de dol0r a panî de partes mâs bâsica,
,rrurrdo nuesrfo con-
podemos reducir la inflamacíón aplicando técnicas dei capítulo anteríor. cepto de <<Dolor>r.
Por ejemplo, las personas con más inteligencia emocional que sufren cán- Tal como yo lo veo, el doror se construye iguar que
las emociones. Su-
cer parecen tener niveles más bajos de citocínas proinflamatotias. En a1- pongamos que estamos en la consulta del médico
recibiendo una inyec_
gunos estudios, pacientes que díjeron que câtegorizalsan, etiquetaban y ción contra el tétanos. Nuestro cerebro construye
un câso de <<Doron>
comprendíân sus emociones con frecuencia, tendían â tener menos cí- haciendo prediccíones sobre ra agujaque perfora
ia piel,porque renemos
tocinas al recuperarse de un cáncer de próstata o después de un suceso experiencias anteriores con ínyecciones. podríamoì
,-nti, el dolor aun
estresânte, y los niveles más elevados de citocinas circulantes se encontra- antes de que la aguja llegue atocar elbrazo.Luego,
nuestras predicciones
ron en vârones que expresaban mucho afecto que no habían etiquetado. se corrigen por el input nociceptivo rear procedÃre
der cuerpo po,
Las supervivientes åe câncet de mama que etiquetan y comprenden ex- nen la inyección- , y ûnavez soruciorruão .rr"rq,ri.r -nos
.r- ãe predicción
plícítamente sus emociones también gozan de mejor salud y visilan me- hemos categoúzado las sensaciones de noci.epcìón
y res hemos dado síg-
nos almédico por síntomas relacionados con el cáncer. Esto quiere decir nificado.r; El dolor que experimenramos como
si ui'i"ra de ia inyeccióî
que, con e1 tiempo, las personas que câtegorízan sus sensaciones intero- en realidad está en nuestro cerebro.
ceptivas como emociones podrán estar más protegidas contra procesos Mí explicación del dolor basad a enlapredicción está respald
ada por
inflamatorios crónicos que den lugar a mala salud.tj un par de observaciones. cuando .rp..u-o,
dolor, como en er momento
justo anres de una inyeccíón, Ia actividad
de ras regiones cerebrares que
@ @ procesan la nocicepción cambia. Es decír,
simulamos el dolor y, en conse-
cuencia' 1o sentimos. Este fenómeno se lrama efecto
nocebo. Seguramen-
La palabra dolor, como las palabtas estrés y emoción, describe una te estamos más familiaúzað.s con el efecto contrario,
el efectopi acebo,
población de experiencías diversas: el dolor sordo de un tobíllo torcido, que alir.ia el dolor con un ftatamiento médicamen
tr^.rirur romo unapíl_
e1 martilleo constante de un dolor de cabeza,Ia nrttactón de una picadu- dora cle az,3'car. Si cieemos que sentiremos menos
dolor, esta creencia in-
ra de mosquifo y, natur,almente, el tormento de que una cabeza de tleín- fluirá en nuesrras predicciones y reciuci râ er ircputro.i..p,ìuo
paru que
ta y cinco centímetros pase por un cuello de útero de diez. siniamos menos cloio¡. Tantalos pracebos como
tr ro..bo, suponen cam-
Podríamos pensar que cuando nuestro cuerpo recibe un daño, la in- bics quírnicos en las regiones ceiebrares que procesân
ra nocicepción. Es-
fornración simplemente itradía àeIa zana afectað.a hacia el cerebro, ha- tas sustancias químicas incluyen opioides que
alivian el dolor y actúan de
ciendo que digamos tacos en voz alta y busquemos el ibuprofeno y las rranerâ similar a Ia marftna, ra codeína, la heroín
a y otf*s opiáceos. Los
vendas. Es verdad que el sistema nen'íoso envía input sensoríal a1 cere- opioides aumenran du¡ante el placebo y reducen rr ro.i..p.ìón,
y dísmi-
bro cuando los músculos o las articulaciones se lesionan, 1os tejídos de nuyen durante el efecto nocebo, io queles vale el
apodo då obotiquín in-
nuestro cuerpo se dañan por un exceso de calor o de frío, o en respuesta terno>.18
a una irritación química como una pizca de pímienta en el ojo. Este pro- vi a mi híja experímentar er efecto nocebo cuando era un bebé y tuvo
ceso se l1ama <<nocicepción>>. En e1 pasado, los científícos creían que el trece infecciones de oído en nueve meses. La pmneravez
que visitamos
262 L.A VIDA SECRETA DEL CEREBRO ¡,¡,locróN Y ENFERMEDAD 263

aI pediatra parâ que le diera Dn ttatamiento, 11oró cuando ei médico le bradas, la espalda podría doler más o el martilleo del dolor de cabeza
examinó los oídos (aunque es un profesionai muy cuidadoso). La segun- podría ser peot pero rÌo porque haya argúntejido dañado, síno porque
davezyalloró enla salita de espera. Laterceravez empezó a llorar en el los nervios están conversando entre sí. No es un dolor imaginario. Es
vestíbulo del edificio , y Ia cuarta vez se puso a llorar cuando estábamos real.2o
aparcando. Después, lloriqueaba siempre que pasábamos por Ia calle cuando alguien experimenta un dolor continuo sin ningún daño en
donde el pediatra teníala consulta. Así es un cerebro que predice en ac- un tejido corporal, hablamos de dolor cróníco. Entre otros ejempios
cíón: es muy probabie que la pequeña Sophia simulaia el dolor de oído. conocidos estânlafibromialgia,Ias migrañas y el dolor de espalda cró-
Meses después de que Sophia hubiera superado las infecciones y ya em- nico. F{av más de 1.500 míllones de personâs que padecen dolor cróni-
pezara a andar, dejó de pieguntar <<¿Vamos al doctor?, ¿miraú los oídos co, incluyendo 100 millones de estadounidenses que pagan en conjunto
de Sophia?> cad.avez que pasábamos cerca. 500.000 millones de dólares al año para su rrâramíenro. Cuando inclui-
. El dolor, como ia emoción y e1 estrés, pâtece ser una construcción de mos en esta cantidad la productividad perdida, el dolor cuesta a Estados
todo el cerebro. Implíca elpar de redes que ya nos son familiares, la inte- {Jnidos 65.a]a míllones de dóla¡es caðaañ.o.Además, su tratamiento es
roceptiva y la de control. Y las similitudes no acal:an aquí.I'as vías que mu;' difícil v frustrante porque los fármacos que se receran actualmente
envíanpredicciones nociceptivas al cuerpo y las que traen inpllt nocicep- contra el doloE los analgésicos, son ineficaces más de la mitad de las ve-
tivo al cerebro están muy reiacionadas con la interocepcíón (incluso es po- ces. Esta epidemia mundial de dolor crónico es uno de los grandes míste-
síbie que ia nocicepción seaunaformade interocepcíón).re En general, las rios de la medicina de hov.21
sensaciones corporales que se categorizan como dolor, estrés o emociones ¿cómo y por quéhay rantas pefsonas que experimenran un do10r
son fundamentalmente las mísmas, incluso en el nivel de las neuronas del continuo si sus cuerpos no parecen presentar ningún daño físico? para
cerebro y åeIa médula." Distínguir entre dolor, estiés ,v emocíón es una responder a esta pregunta pensemos en io que pasaríasi nuestro cerebro
forma de granularidad emocíonal. hiciera predicciones de dolor innecesaria s e ignoráramos el error de pre-
Es fácil demostrar que la interocepción y Ia nocicepción \'ân juntas. dícción que indicara 1o contrario. Experimentâríamos dolor sin razón
Si hicieia que el lector sintiera un afecto desagradabie en mi laboratorio aparente. Esto se parece mucho a la experiencia con las manchas del ca-
mientras Ie aplícara calor en unbrazo hasta un nivel doloroso, e1 lector pítulo 2, que se convirtieron en una al:eja a1 percíbir unas líneas que no
comunicaríâ sentir más dolor. Esto sucede porque sus regíones de pre- existían. lrtruestro cerebro pasó por alto el input sensorial sosteniendo
supuestación corporal hacen predicciones gue pueden matcar el nível que sus predicciones eran Ia rca7idad. Apliquemos este ejemplo ai dolor,
de dolor como un mando del volumen de una raðio. Esas predicciones y el resultado es un modelo verosímil dei dojor crónico: predicciones
pueden influir en la simulación del dolor que hace el cerebro, y, también erróneas sin corrección.
llegan a1 cuerpo para ampllficar o amortiguar los <<info¡mes de situa- Ahora los científicos creen que e1 dolor crónico es unâ enfermedad
ción>> que envía aI cerebro. Por 1o tanta,las regiones de presupues- cerebral que tiene sus raíces en la inflam ación.2z Es posib]e que el cere-
tación corporal pueden engañar al cerebro haciéndole creer que un teji- bro de una persona con dolor crónico recibiera un íntenso input nocí-
do se ha åañaåo, con independencia de 1o que esté sucedíendo en el ceptivo en algún momento del pasado y que, cuando la Iesíón se curó, el
cuerpo. Así pues, cuando ei lector tiene una sensación desagradable, sus cerebro no recibieralanoticia. Sigue prediciendo y categorizando de to-
articulaciones y sus músculos podrían doler más o podría desarrollar un dos modos, generando dolor crónico. También es posible que prediccio-
dolor de estómago. Cuando e1 presupuesto corporal no está <<en for- nes sobre los movimientos interiores del cuerpo suban el volumen del in-
ma>r, 10 que supone que las predicciones interoceptivas están mal cali- put nociceptivo cuando se diríge al cerebro desde el cuerpo.
Si tenemos la desgracía de sufrir un dolor crónico, es probable que
'" Para facilitar la discusión seguiré hablando por separado de la interocepcíón la nos hayamos encontrado con personas escépticas que no entienden por
1'
nocicepción. lo que estamos pasando. Tratan de explicar nuestro dolor diciendo que
264 L,{ \¡IDA ST]CRETA DEL CEREBRO
EtvtoctóN r" ¡NFER¡/IEDAD 265

está en nuestra cabeza, con 10 que quieren decir que no tenemos ningún dos. El dolor crónico pârece ser un caso trágico de predecir mary de re-
tejtdo dañaåo y que haremos bien en ir al psiquiatra.Lo que yo les digo a cibír datos erróneos de nuestro cuerpo.2ó
estas personas es que no están locas. Les pasa algo. Su cereb¡o predicti-
vo, que sin duda está <<en su cabeza>>, g€nerã un do/or aut¿inticc,¡ que con- 6 @ 6
tinúamâs allá, åel punto en el que el cuerpo ya seha curado. Es parecido
al síndrome del miembro fantasma, cuando una persona amputada sigue Teniendo presente lo que acabamos de exponer sobre el estrés cróni-
sintiendo ei miembro perdido porque su cerebro sigue haciendo predíç- co y el dolor cróníco, ahora centraremos nuestra atención en 1a depre-
cíones sobre é1.21 síón, que es otro trâstorno debilitante que puede atormentar una vida.
Ya tenemos pruebas intrigantes de que algunas clases de dclor cróni- La depresión, también,conocida como trastorno depresivo mayor, está
co funcionan por predicción. Los animales que sufren estrés o lesiones al mucho más allâ de la aflicción cotidiana que sienren las personas que se
principío de su vida es más probable que desarrollen un dolor persisten- quejan diciendo: <<Tengo una depre...>>. Marvin, el androide paranoide
te. Los bebés humanos que han sufrido alguna operación tienden más a de La guía" de/ autoestopista galtíctico de Douglas Adams, .rtub" deprimí-
sentir un dolor más intenso en eiapas postcríores de su r'ída (por increí- do de A veces veíaravida tan negraque se apagabaél mismo. un
b1e que p^lezca, antes de los años ochenia, los bebés no se solía,n (tneste- 'erdad.
episodio depresi'o mayor es iguai de invalidante. <<El dolor de ia depre-
siar durante operaciones de cirugía rtây6¡ iporque se creía que no po- sión gra'e es ínimaginabre para quien no lo ha sufrido el
dían sentir dolorl). Tambíén hav una enfermedad l7amaða síndrome de novelísta V/illiam Styron en sus memorias-, y en muchos-recordaba
câsos conduce
doior regional complejo, en el que el dolor de una lesión se propaga iner- a la muerte, porque Ia angustiaque provoca no se puede soportâr.>27
plicablemente a otras áreas del cuerpo, 1o cual pârece estar relacionado Para muchos científicos y médicos, la depresión sígue síendo una en-
con malas predicciones nocioceptivas.2a fermedad de 1a mente. Se clasífica como un trasrorno afecdvo y se atribuye
Por 1o tanto, <<Dolor>>, aligual que <<Estrés>>, es otro concepto con el a1 pensamiento negativo: la persona es demasíado dura consígo misma o
que damos significado a sensaciones físícas. Podríamos caracterizar ei do- tíene demasiados pensamientos contraproducentes o catastrofistas. O qui-
lor y e1 estrés como emociones o incluso la emocíón y el estrés como cla- zá se deba a algitn suceso taumâirco,sobre todo si los genes de la persona
ses de dolor. No estoy diciendo que los casos de emocíón y de dolor sean la hacen r,r:]nerable. o puede que la persona no regule adecuadamã.rr. ,,r,
indistinguibles en el cerebro, pero ningr-ino de ellos dene una huelia dac- emociones y sea demasiado sensible a sucesos negatívos y demasiado in-
tiiar concreta. Si escan eara el cerebro de una personâ miertras iiene un sensible a sucesos positivos. Todas estas explicaciones presuponen que el
dolor de muelas y cuando siente ita,Iasimágenes serían un tanto diferen- pensamiento controla el sentimiento,Iavieja idea del <<cerebro triuno>>.
tes. Pero si escaneo el cerebro de la misma persona duranie casos dife- Siguiendo estalógica, si la persona cambia sus pensâmíentos o reguia
rentes de ira, esos câsos también parecerán algo diferentes. Es probable mejor sus emociones. la depresión desaparecerâ. E7 mantra parece ser:
que casos diferentes cie dolor de muelas tambíén varíen. Esto es degene- <<Do,'t u)onry, be happy:y si eso no funciona, prueba con anddepresívos>>.28
ración: lavaúación es la norma.2t veintisiete millones de ciudadanos estadounídenses roman antidepre-
La emoción, el dolor agudo, e1 dolor c¡ónico y el estiés se construyen sivos a diario, pero más del 70 7o de ellos siguen experimenrando sínto-
en las mismas tedes, las mismas vías neurales que van v vienen de1 cuerpo mas, y la psicoterapia tampoco es eficazpara todo el mundo. Los síntomas
y, muy probablemente, en la misma regíón sensorial primaria de la corte-
suelen âparecer enffe 1a adolescencia y los primeros años de lavída aårÃta
za, por lo que es totaLmente plausible que distíngamos 1a emoción r, el y se repiten después duranre todalaxl,da.Laorganización Mundía-l de la
dolor por medio de los conceptos que aplica e1 cerebro para dar senrido salud calcula que, en 2030,ra depresión causarámás muertes premâturas
a las sensaciones corporaies. Es probable que el dolor crónico sea una y más años de incapacidad que el cáncer,los ataques cerebrovasculares,
aplicación errónea del concepto .<Dolor>, por pai:te de1 cerebro cuando las enfermec{ades ca,rdio'asculares,Iaguerrâ o los accidentes.2e Son unos
construye la erperiencia de dolor sin heridas ni amenz.zas a nuestros teji- resultados apabullantes para un trastorno <<mentab>.
266 L,\ VID.{ SECRETA DEL CEREBRO
EÀ,f OCIÓN Y ENFER-&IED,{D
267

Muchas investigaciones intentan hallarla esencia universal genética o En el fondo, un cerebro deprimido estâ atrapado por el
neural de la depresión, pero 1o más probable es que la depresión rro sea sufrimiento.
Es como un cerebro atrapado en un dolor cróni-, porq.r.
ignora er error
solo una cosâ.i. como el lector habrá, adivinado, la depresíón es un con- de predícción' pero a una escala mucho mayol)2p,r..ro
que apagao des-
cepto. Es una población de casos diversos, y hay diversos caminos que conecta por completo aTapersorra. sitúa el pfesupuesto
conducen a e1la, muchos de los cuales empiezan con un presupuesto cor-
..órri.u*ente en
negativo, y el cerebro intenta reducír gâstos.
porai desequilibrado. Si ia depresión es Lln rrasrorno afecdvo y el afecto ¿v cual es la maner u^ar.fi_
caz de hacerio? Dejar de moverse y no prestar atencíón
al mundo (error
es un resumen integrado del estado del presupuesto corporal (basrante de predicción) . Esa es Ia fatigaimplacable de la
depresíón.
malo, por cierto),la depresión bien pr.à" deùers" u.rrìrurrorno de la si la depresión es un rrasromo debido a unaLdu pr.r,rpuestación
presupuestación y la predicción. ctónica, entonces es que, en rigor, no es un trastorno
mentJexcrusiva-
Sabemos que nuestro cerebro predice continuarrrente 1as necesidades mente' También es un trasrorno neurológico, metabólico
e inmunoiógi-
energéticas del cuerpo basándose en experiencias anteriores. En cilcunstan- co. La depresión es un desequilibrio entre muchas pârtes
enfterazad.as
cias normales, el cerebro también corrige sus prediccíones basándose en in- del sistema neiwioso que solo podemos entender ffatando
a la persona en
formación sensorial real procedente dei cuerpo, pero ¿y si esta corrección no su totalidad, no tratando un sistem a aislaåo como
sí fuera una pieza de
funcionara adecuadamente? Nuestra experiencia momentánea se construi- una máquina. El punto de inflexión en un episodio depresivo
ríaapanir delpasado peîo mayol
?to se corregiría en e/presente.Entérminos gene- puede deberse a muchas causâs diferentes. Luþ..roru
p,-r.d. haber su-
rales, eso es 1o que creo que sucede en la depresión. El cerebro predíce mal f¡ido malmaros o estrés durante un tiempo prorãngado, ,obr.
todo en ra
continuamente las necesidades metabólicas. Por 1o tanto, ei cuerpo y e1 ce- infancia, y tener un modelo del mundo .onrrrrrido a pattr
de experíen-
rebro actúan como si estur.'ieran luchando contra una infección o curándo- cias pasadas tóxicas. o podría tener una afección
físicã crónica, como in-
se de una herida cuando no existe ninguna, como en e1 dolor o el estrés cró- somnio o alguna enfermedad cardiovascular, que conduzca
a malas pre-
nícos. En consecuencia, nuestro afecto está desequilibrado: sentimos un dicciones ínteroceptivas. Nuest¡os genes podríanhacernos
sensibles al
sufrimiento debilítante, fatrgau orros síntomas de una depresión. A-l mis- entorno o a cada pequeño problema. Además, si ra person
a afectada es
mo tiempo, el cuerpo está metabolizando con rapidez una glucosa innece- una mujer en edad {'érttr,Ia conectiúdad de su r.d ínt.ro.eptiva
cambia
saúapata satísfacer esas necesidades energéticas eievadas pero todavía arorargo del mes haciéndola más vulnerable, en cierros
inexistentes, lo cual åalugar a problemas de peso y nos pone en ríesgo de cíclo, a afectos desagradables y a cavilaciones, o haciénd
-oà.rrto, d. ru
ola máspropen-
padecer otras enfermedades metabólicas que suelen acompañar a la depre- sa a trâstornos del estado de ánimo como la depresión
y etr ffastorno por
sión, como diabetes, enfermedades cardiovasculares y cáncer.3r estrés postraumático. <<Tener pensamientos positivos>
o corìsum ir anti-
La vísión tradicional de la depresión consiste en que los pensamientos depresivos podría no ser sufíciente prru ,rirr", a conseguir
un presu-
negativos causan sentímientos negativos. Lo que estoy proponiendo aquí puesto corporai equilibrado; puede que sean necesarios
otros cambios
es que sucede al revés. Ahora mismo, nuestrâs sensaciones guían nuestro en el estilo de vida u otros ajustes en el sistema.ri
siguíente pensamiento, así como nuestras percepciones, como prediccio- La teoúa de la emoción construida sugiere que se puede tratar Ia
åe-
nes. Por 1o tanto, un cerebro deprímido retira sin cesar fondos de1 presu- presión rompiendo el círculo delamarapresupuest
ación,es decí¡ hacien-
puesto corporaì basando sus predicciones en <<gastos> similares del pasa- do que las predicciones interoceptivas se a;rrst.n más alo que sucede
a
do. Esto supone revivir consrânremerìte sucesos difíciles o desagradabies. nuest-ro alredecior. Los científicos han enconrâdo pruebas
La persona acaba en un círcu1o vicioso de desequilibrios presupuestarios
i. q,r" es así.
cuando tratamienros como el consumo de antidepràsivos yra terapia
que el error de predicción no rompe, porque no se tiene en cuenta, no re-
cog-
nitiva conductual empiezan a funcionar y Ia p*sorr^s. siente
cibe atención o no consigue ilegar al cerebro. En realidad, la persona está
menos de-
primida' ia actividad de una región cluue paiala presupuestación
encerrada en un círculo cie prediccíones sin corregiq atrapaåaen un pasa- corpo-
ral r.uel'e a los niveles normales y la conectividal de la red interoceptiva
do adverso en ei que sus necesidades metabólicas eran elerradas. de la persona se restablece.rr Estos cambios son coherenres
con la idåa de
¿oö L,{ VIDA SECRETÄ DEL CEREBRO EÀ4OCION Y ENFERT,IEDAD 269

reducir las predicciones excesivas. Tambíén podríamos tratar la depre- des. Las vías neurales esrudiadas en la ansíedad paralapredicción.y
el
sión haciendo que la persona tenga más presente el error de predicción, error de predicción son las mismas que pâra la emoción, .l dolor, eies-
por ejemplo pidiéndole que 1leve un diario de sus experiencias posirivas trés y la depresión.i>
para reducirla sangría de su presupuesto corporal. E1 problem a, naïrîd.- La investigación tradicional sobre los trastornos de ansiedad se basa
mente, es qlre no hay un trâtamiento que funcione paratoåo ei mundo y en el antiguo modelo del <<cerebro triuno>>, donde la cognición contro-
que hay personas panlas que no funciona ningún tratamiento. la la emoción. según ese modelo, rìuestra amígd.ala-l,rprr..rumente
Uno de los métodos de tratamiento más prometedores que conozco emocionâl- es hiperact iva, y ra corteza prefrontal ra-
es el trabajo innovador de la neuróloga Helen S. Mayberg (capítu1o 4), cional- no puede regularTa). Este enfoque sígue -rrprrårtumente
sienåo influyente en
que estimula eléctricamente el cerebro de pacientes con una depresión 7a actuariåad, aunque ra amígdalayu .ro ,. .orrríd.ru que sea
la sede de
constante. Su técnica ñvta åe inmediato el tormento de la depresión, aun- ninguna emoción, ra cortezaprefrontal no aloja la cognición yla emoción
que solo mient¡as se âplicâ la corriente, porque hace que ei cerebro del y la cognición son construcciones de todo el c.r.brã que no pueden
re-
paciente deje de centrarse en el mundo ínterior que lo consume todo y se gularse mutuâmente. Entonces
¿cómo surge ra ansíedaã? Toåavíano co-
centre en el mundo exterior, de modo que pueda predecii y procesar el nocemos todos los detalles, pero tenemos algunas pistas que resultan ten-
error de prediccíón con normalidad. Esperemos que estos resultados tadoras.
prelimínares pero alentadores acaben guiando a los científicos hacia un Especulo que, en cierto sentido, un cerebro ansioso es 1o contrario de
tratamiento más duradefo para la depresión. Como raínímo, deberían un cerebro deprimido. En ra depresión, hay mucha predícción y poco
hacer correr\avoz de que la depresión es una enfermedad del cerebro y error de predicción, por lo que estâmos encerrados en er pasado. Èn la
no la simple escasez de pensamientos positivos. ansiedad hay demasiado er¡or de predicción procedente del mundo y
demasiadas predicciones infructuosas. con una predicción insuficiente
@@@ no sabemos qué nos espera alavuelta de la esquin a, y enlavid,ahay mu-
chas esquinas. Así es la ansied ad clásica.i,-
La ansieð,ad es un trastorno que parece muy díferente del dolor cró- Las personas que sufren ansiedad por la razónque seâ presentan
co-
nico y la depresíón. Cuando sufrimos ansiedad nos sentjmos preocupâ- nexiones debfitadas entre varios centros claves de la red intJroceptiva,
in-
dos o agitados, como si nc supiéramos qué hacer, y abatidos en general, cluyendo ra amígåala. Algunos de estos centros también se halan en
la ¡ed
io cual contrãsta claramente con 1a depresión, en la que nos seniimos a1e- de control. Es probable que estas conexiones debilitadas setaduzcan
en
targados, como si no pudiéramos seguir viviendo, y también nos senti- un cerebro ansioso que es torpe haciendo predicciones que encajen con
mos abatidos y con dolor crónico. las circunstancias inmediatas y que no aprende de la expËr ienciacon
efi,
Hasta ahora hemos visto que en la emoción, e1 dolor crónico, el es- cacia' La personâ podría predecir amenazas innecesariamente, generaf
trés crónico y la depresión intervíenen 1a red interoceptíva y la red de incertidumbre prediciendo con imprecisión o no predec ir nada.Además,
control. Estas mismas redes también son fundamentales en la ansiedad. las inpttts ínteroceptivos son cadavezmás ruidosås cuando ei presupues-
La ansiedad sigue siendo un enigma,"' pero unâ cosa parece clara: es ctro to corporal 1le'a tiempo en números rojos; la consecuencia es que.l cere-
trastorno de predicción y de error de predicción a ravés de esras cios re- bro los ignora. Esas situaciones nos dejan abiertos a unâ gran cântídad
de incertidumbre y de errores de predicción que no pod"mos resolver.
t' En este capítulo trataré todos los trasto¡nos de ansiedad como un grupo (salr'o Y la incertidumbre es más desagradable y ca,rsu m á.s aiousal que un daño
que se indique 1o contrario), porque es bien sabido que esros trasrornos tienen causas seguro porque, si e1 futuro es un místerio, no podemos preparârnos para
comunes. Du¡ante muchos años, se supuso que una variedad de trastornos de ansiedad
éi. Por ejemplo, alguien que esté gravemente enfermo p.- t"ng, una
eran diferentes desde un punro de vista biológico, pero (como al lector ,va no 1e sor- opor-
prenderá saber a estas alturas) en sus perfiles de síntomas ha-v muchas superposiciones tunidad excelente de recuper ación, estarámenos satísfecho con su vida
quehacen que seâ difícil estudiar un tfastorno en ausencia de 1os demás. que las personas que saben que su enfermedad es permandnte.r8
 270 LA VIDA SECRET.{ DEL CEREBRO
EÀ,{OCIÓN Y ENFER,\IEDAD
271

Las pruebas parecen indícar que la ansiedad, aI igual que

ra depre- lab ras p an 7a dep resión
y tambiên p o dría ac ab ar sintién dose dep rímído.
s]ó,n, es Lrna categoría construida delamisma
-u..ru!r.
dolor o el estrés. El sufrimienro causado por la ansiedad y
la emoción, e1 Esto podría explícar mís misteriosos resultados: conceptos
como <<Ansie-
1a depresión dad> y <<Depresión> son muy variabres y maleables .*
nos indica que algo vâ muy mal en reración con er pr..,rprr"r,o
corporar.
i^" pÃ^bras utiliza-
das en los cuestionaríos pueden influir en ras categorir".år",
o bien el cerebro estátratando de proteg.. rrn ..dåpósiår, aumenrando que hacen
las personas, del mismo modo que el método de
el afecto desagradabie, o bien intenia reducir Ia neåsídad la*s emocíones básicas in_
å" .r. depósi_ fluy-e en las percepciones con .,r lirt, de palabras
to quedándose quieto y ocasionan do fatiga como resultado. El de emociones.
ceiebro No hace mucho me encontré con argo parecido en ra consu-rta
puede categorizar estas sensâciones como ansiedad, de un
depresión o, en rea- médico. Llevabaun riempo sinriéndom
lídad, dolor, esrrés o emoción. argo de
peso' y el médico me preguntó; <<¿Está "f^iiguduyhabîaganado
Que quede claro que no estoy diciendo que el trasrorno depresivo ma- ,,,r,èd d.primidã¡r. Respãndí:
<<Bueno, t¡iste no me siento, pero sí que me
yor y los úasromos de ansiedad sean intercàmbíables. siento À,ry .unsud grinpur-
Lo q,rå propongo te del dempo>>' Entonces me dijo: <<puede que esté deprimida ^ y rrà
es que caåa categoría åetrastorno mental es una población 1o
ãir,,.r.u de ca- sepa>. Mi médico no se daba cuenta de que un afecto
sos, y que ciertos conjuntos de síntomas se podrían desrgrudubie pue-
categorizar tazonabre_ de tener una causa fîsica, que en mi caso segurament
mente bien como un rrasrorno de ansieduà o .o*o,rnã
d"pr".ión. Tam-
e era fartade sueño
por tener que llevar un laboratorio con un centenar de personas,
bién estâlacuestión de la gra'edad. Es erridente qrr. ulg,r.* pacienres por
de quedarme hasta muy arde trar:ajanåo en este libro y
Helen Mayberg con depresiones muy graves, cefcanas aia
catatonlâ, no
por'r., madre de
una adolescenre, además de un pequeño detaile ilu
se diagnosticarían con trastornos de ansiedad. pero âð,omenopausia (re
otros pacientes que acabé explicando la interocepció'y er presupuesro
sufren muchísimo se podrían diagnostica r ruzonablemenre corporar). pero ro
Jo.rro .uro, d. que quiero desracar es que si simpremenre me Àubiera
ansiedad, esrrés crónico o incluso dolor crónico. En diugnosticudo de-
senerai, ia depresíón presión, yo podría haber cultivado una sensación
moderada puede presentar síntomas coincidente, .o' lo, de la de deprãsión en aquel
ansiedad mismo insianre. sin duda esraba fatigað.ay es probabr.
y también con los del estrés crónico, e1 clolor crónico
v ei síndrom e de fa- na inflamación debicla a un poco de estrés cróìíco, pero
i r. tu'iera algu-
tiga crónica.)e si no me hubie-
ra resistido podría haberme marchado con una
Estas observacíones ofrecen una solución al misterio con receta de antidepresivos
el que se ha y 1a creencia de que algo debía ir muy mai
abierto el capítulo 1: ¿por qué los sujetos de los experimentos en mi vida o en mí misma si era
de mi cen- incapaz de hacerle frenre. Esta convicción podría habe¡
tro de posgrado parecen incapaces de distinguir entre se'saciones empeorado mi
de an- presupuesto corporal mal calibrado si hubiera empezað.o
siedad y de depresión? una razónque ya h"Ão, considerado u trrr.u, pro_
es la granu- biemas en mi vida..., y cuando se busca argo síempå
laridad emocional; es decír, es probable que algunos de
mis sujetos puedan
r.;;;; enconttar.
En cambio, el médico y yo descubrimos .r' probl.,,'J
construir emociones con más detalle que otros. pero ahora pârece d. pr.rrrp,r.rro
que corporal y buscamos maneras cle a*eglarlo. Ei médico
también habúa otra razón: <Ansiedad> y oDepresíón>> ,ro ,. dío cuenta,
son .orr."pro, puru pero entre é1 y yo construimos conjuntamente mi
ca|egorizar sensaciones similares. experiencia . Él quería
construir una realidad social y yo teníaotra.
cuando mis sujetos teníanuna sensación desagradable,les entregaba
escalas de clasifícación para que comun ícaransu
sensación, pero solo en @6@
función de la ansied ad y la depresión. La gente utiizarâ.rruiq.rí"r
medi-
da que le demos para describir cómo se sienre.
Si aiguien .. .ilr.t. hecho cuando el error de prediccíón que viene der mundo domina ra pre-
un âsco y solo le damos una escala de ansiedad, com.,ni.urá
sus sensacio- dicción, podemos rene¡ ansiedad. Sìpongamos que nunca pudiéramos
nesusando palabras paralaansiedad. F{asta puede que
llegue a sentir an- predecir nada. ¿Qué sucedería?
úedad porque 1as palabras 1e impulsa¡án a simula..'
.u.o Je <Ansieda#. Para empezar' nuestro presupuesto corporal quedaríafastidiado
si ie damos una escala de depresión comunicará
sus sensaciones con pâ-
por-
que no podríamos predecir nuestras necesidadesmetabóli'cas.
Nos cos-
272 LÁ VIDA SECRET.{ DEL CEREBRO EMOCiON Y ENFERÙIEDAD 273

taríaintegnat eI input sensorial de la vista, ei oído, e1 oifato, la interocep- do mirar al pequeño pero intentando entender por qué no era un gato>>.
ción,la nocicepción y otros sistemas sensoriales en un todo cohesivo. Naokí Higashida, un niño de trece años con autismo que escribió La ra-
Por lo tanto, tendríamos un aprendizaje estadístico deficiente que nos zón por la. que salto,relatasus esfuerzos por câtegoúzat <<Plimero, explo-
dificultaúa aprender conceptos básicos y hasta reconocer a una misma ro en mi memoria pâra enconftat alguna experiencia que se acerque al
persona desde ángulos diferentes. Nluchas cosas quedarían {uera de máxírno a lo que esté sucediendo ahora. Cuando la encuentro, el siguiente
nuestro nicho afectivo. Si fuéramos bebés en esâ siiuación, es muy pto- paso es tratar de recordar 1o que dije aquella vez. Si tengo suerte, doy con
bable que no nos interesaran ios demás; dejaríamos de mirar los rostros una experiencia aprovechable y todo sale bieru>. En otras palabtas, al ca-
de nuestros cuidadores, lo cual ålficultatíala regulacíón de nuestro pre- recer de un sistema conceptual que funcione adecuadamente, Higashida
supuesto corporal yamüy trastocado y rompería un vínculo crucíal. Tam- tiene que esforzarse mucho parahacer 1o que otros cerebros hacen auto-
bién nos costaría mucho aprender conceptos puramente mentales pro- mátícamente.al
pios de Ia realtdaå social porque se aprenden con palabras, pero dado Otros ínvestigadores también especulan ahora con la posibilídad de
que 1os demás no nos interesan probablemente nos costatía aprender que e1 autismo sea un faLlo de predicción. Algunos creen que el autísmo
una lengua. Nunca llegaríamos a cofltar con un verdadero sistema con- se debe a una dísfunción de la red de control, que produce un modeio del
ceptual, mundo demasiado específico paru cadasituación. Otros ven el problema
Al final, existiríamos en una corriente constante åe inpttt sensorial como un déficit de 1a hormona neuromoduladora lfamada oxitocina que
ambíguo con pocos conceptos que nos ayuåaran a darle sentido. Sentí- provoca problemas en la red interoceptiva. Sospecho que en e1 autismo
ríamos ansiedad constantemente porque 1as sensaciones serían imprevi- no hay solo un problema de ¡edes, sino un menú de posibilidades diferen-
sibles. En el fondo sufriríamos una crísís total en cuanto a la interocep- tes debídas a 1a degeneración. De hecho, e1 autismo se caracteriza como
ción, 1os conceptos 5,Iarealiåadsocial. Pam aprender algo necesitaríamos un trastorno dei desarrollo neural quevaríamuchísímo en su genética, su
que el input sensoríal fuera constante, incluso estereotipado, con la me- neurobiología 1, sus síntomas. Especulo que 1os problemas empíezan con
nor vartación posible. No sé qué pensará el lecto¡ pero en mi opinión los circuitos de presupuestación corporal, porque están presentes en el
esta colección de síntomas se parece mucho al autismo.al nacimiento 1' todo aprendizaje estadístíco se fundamentâ en la regula-
Está claro que el autismo es un trastorno increíblemente complejo ¡' cíón del presupuesto corporal (capítu1os a y 5).Las aftenciones en estos
un âreagígantesca de ínvestígación que no se puede resumir en unos po- circuitos cambian la trayectoria del desarrollo cerebral, Sín un cerebro
cos párrafos. Ei autismo también es muy variable, un término que se apli- predictivo a plena càrga estaríamos a merced de nuestro entorno. Ten-
ca a una g ma mvy amplta de síntomas que seguramente tienen causas dríamos un cerebro regido por estímulo y respuesta, cuando el sistema
múltíples y complejas.a2 Lo que planteo es la interesante posibilidad de nervioso está optimízado para una organización cerebrai más eficiente
que el autismo sea un trastorno de la predicción. desde el punto de vísta metabóiico. Esto podría explicar las experiencias
Las personas con autísmo que pueden describir sus experiencias dí- de las personas con autismo.aa
cen cosâs coherentes con la idea que acat¡o de exponer. Temple Grandin,
una de las personas con autismo más conocidas y sinceras, escribe con ø@@

claridad sobre su falta de predicción y sus abrumadores errores de pre-

dicción. <<Los sonidos fuertes repentinos me dañan los oídos como un ta- YIasta aquí hemos expuesto que varios trâstomos notables y graves
ladro de dentista que me dé en un nervio>>, escribe en <An Inside Vieu' of pueden estar relacionados con ei sistema inmunitario, que vinculala sa-
Autism>>. Grandin describe con elocuencia cómo luchó panformar con- lud mental y la salud física dentro del cerebro predictor. Cuando las ma-
ceptos: <De niña categoricélos perros para distinguirlos de los gatos c1a- las predicciones no se revisan, pueden darlugar a un desequilibrío cróni-
sificando los animales por tamaño. Todos los perros de nuestro barrio co del presupuesto corporal que conribuye alainflamación de1 cerebro
eran grandes hasta que unos vecinos trajeron un perro saichicha. Recuer- y que corrompe aún más las predicciones interoceptivas en un círculo vi-
 ¿/+ LA VIDA SECRETA DEL CEREBRO
EÀ,IOCIÓN Y ENFERIVIEDAD 275

cioso. De este modo, los rnismos sistemas que construyen

las emociones tan extendído de estâs sustancías. Entre 1997 y 20rr, ei número de esta-
también pueden conrríl:uir aia enfermedad.
dounidenses adultos adictos aTos fârmacos que exígen receta creció un
No estoy diciendo que la deuda der presupuesro corpoi ar
sealaúnica 9007o. Muchos otros hân recurrido a la heroína,la metanfetamtna y
causa de todos 1os ffâstornos mentales. Tumpã.o
.rtoy åurrdo a entender otras drogas ilegales que reducen la angustia. Tambiénsabemos que una
que reequfibrar el pfesupuesto 10 cure todo. so10 estoy diciendo que, proporción importante de ia población no duerme 1o suficiente, no come
gtacias a nuestrâ nueva vísión dela natutarezahumana, podemos enten- bíen o no hace ejercicio con regularidad. Es probable que la genre se au-
der que ei presupuesto corporal es un factor común .rrf"r-.dades tomedique con opiáceos para aliviar el malestar que se ð.eriva de un pre-
que tradicionalmente se consíderaban separables. "r,
supuesto corporal en desequilibrio crónico. Empiezan â consumir opiâ-
cuando tenemos demasiadas predicciones y 1á corrección es insufi-
ceos por diversas nazones, pero sospecho que siguen consumiéndolos e
ciente, nos sentimos mal, y el ..sabor>> de esta sensación
depende de ios incluso abusando de ellos porque están regulando su afecto desbaratado
conceptos que usemos. En pequeñ as cantidaàes podríamos
sentírnos en- para sentirse mejor. Sus presupuestos coiporales están demasiado de-
fadados o avergonzados. En cantidades extremâs ãbten.iríamos
dolor cró- sajustados para que los opioides naturâles dei cerebro puedan hacer su
nico o depresión. Por orro lado, dema siaåo input sensoríal
1, una predic_ trabajo.
ción ineficaz provocan ansiedad; y en cantidades extremás podríamos
La desgracia de una mala presupuestacíón crónica también se pue-
desarrollar un trastorno de ansiedad. sin ninguna predicción
tend.ría_- de reducir temporalmente con la comið,, que estímula algunos de los
mos un trastorno comparable al autismo.
mísmos receptores cerebrales que responden a los opiáceos. En expe-
Todos estos trastornos parecen tener su raízen una mala presupues-
rimentos con ratâs> esta estimulaciónhace que las ratas se atibomen de
tación.Imaginemo s ahora, por un instante, ras innumerabres
maneras en alimentos rícos en carbohidratos aunque no estén hambríentas. En las
que una personâ joven puede desarrollar un pfesupuesto
que esté cróni- personas, el consurno de azítcat provoca un aumento de la producción
camente en números rojos. I'{.al:ú" maltratos y abanåono
manifiestos, de opíoides cerebra-les. Por 1o tanto, comer comida basura o pan blanco
claro está, pero tambi énhabrá una avalanchu i" sucesos más pequeños.
realmente <<sientæ> bien. No me extraña que me guste tânto una buena
La corriente consrante de violencia que ve en la teievisión y
en peiículas, baguette crujiente. Y el azúcar puede acû)ar como un analgésico suâve.
vídeos y videojuegos. El lenguaje degradante que oye
en lamúsica pop y Así pues, las personas que dicen que nuestra sociedad es adicta al azúcar
que imita ínformalmente cuando saiuda a sus compañeros:
oiEh, -uÁo- quizá, no estén muy desencaminadas. No me sorprendería que la gente es-
nes!>> (¿es ese ìin saiudo cordial, un insulto
o,.ru u*rnu"u?).El creci- tuviera consumiendo alimentos con muchos carbohídratos como una
miento del bullying como forma de bromear porque en la teievisión
Ia droga para gestionar su afecto y sentirse mejor. Hola, epidemia de obe-
gente se dice cosas horribles sobre el fondo de
una pista de audio con ri- sidad.l7
sas.a5 Añadamos a esro las oportunidades
casi ilimiiadas pan eI rechazo Una población de ciudadanos con presupuestos corporales desequi-
social que ofrecen ios mensajes de texro y algunas forrrru.
de medíos so- libi:ados no solo cuesra miles de millones de dólares en asisrenci a sanita-
ciaies, combinadas con falta de sueño y de ejercicio y
con demasiada ria, sino que tambíén 1es cuesta a las personas su bienesta! sus relaciones
pseudocomida de dudoso val0r nutríti',.,o, y tenemos
una fecetâ cultural e incluso sus vídas. Las personas que estudian estas enfermedades están
casi perfecta palaunageneración de adultos con
un desequilibrio cróni- empezando a prescindir del esencialismo que da Tugar a la creación de
co del presupuesto corporal.
categorías como <<Ansiedad>>, <<Depresíón>> o <<Dolor crónico>>, y van en
EI sufrimíento causado por este desequiribrio crónico,
¿podría ser busca de factores subyacentes comunes.as Sospecho que si pudiéramos
una de las razones que explicaría por qué Estados
unidos estisumido en añadír la interocepción, e1 equílíbrio de1 presupuesro corporal y 1os con-
una crísis de opiáceos?16 Los opioides naturales
del cerebro reducen el ceptos emocionales a la lista de esos factores comunes avanzarîamos bas-
dolor porque regulan el afecto (no Ia nocicepción),
y las drogas opiáceas tante más contra estos trastornos tân debilitantes. Mientras tanto, nues-
iegales e ilegales imitan esos efecros, ro que poáríaáxphcar
Jr, .orr.r-o tro propio conocímiento de estos factores comunes nos puede ayrtdar a
 276 Lr\ \.ID.{ SECRETÄ DEL CEREBRO

e'itar enfermedades y a comunícârnos con nuestros médicos de una ma-

netamás eftcaz. CAPITULO
_ Todos andamos porla cuerda floja entre ei mundo y ra mente y entre
1o natural y 1o sociai. Muchos fenómenos que antes
ramente mentales
se consider alsan pu-
depresión,la ansiedad, el estrés y ei dolor cróní-
11
cG- en rcalidað, -Ia
sepueden explicar en términos biológicos. otros tenó-
menos que se condideraban puramente físicos, como e1 dolor, tamlsién Emoción y derecho
son conceptos mentales.Para ser los.arquitectos de nuest¡a experiencia
con eficacia debemos distinguir Ia realjdad física de Ia rez,håaã social y
no confundidas nunca, pero teniendo siempre presente que las dos
están
irrevocablemente entrela zadas.

Todas las socíedades poseen reglas que dictan qué emociones son
aceptables, cuándo son aceptables y cómo se deben expresar. En mi cul-
tura,la estadounidense, es adecuado sentir pena cuando alguien muere,
pero no 1o es reírse cuando se introduce el ataúd en 1a sepultura.l {Jna
fiesta sorpresa es un momento paru sentirnos sorprendidos y alegres,
pero si ya sabemos que la halxá,lo adecuado es fingir sorpresa cuando
llegamos. Los miembros de la tribu ilongot de FiJipinas pueden sentir la
emoción liget cuanðo decapítan a un enemigo en equipo, celebrando un
rcal:ajo bien hecho
Si violamos las reglas de la realidad social de nuestra cultura, puede
haber un castigo. Reír en un entierro puede hacer que nos rechacen. No
fingir sorpresa en urìa fiesta en nuestro honor puede decepcíonar a los
invitados. Y la mayoría de las culturas ya no valoran mucho la decapi-
tación.
En toda sociedad, las reglas fundamentales para la emoción están
determinadas por su sístema jurídíco." Esta afirmación podríaparecer
sorprendente, pero consideremos 1o siguiente. En Estados Unidos, si ün
contable nos roba nuestros ahorros o un banquero rros vende una mala
hipoieca, se considera inaceptable matarlos; pero si matamos a nuestro
cónyuge en un arcebato de ira por engañarnos con Dn amante secreto, la
lei podría tener más maßga ancha, sobre todo si somos varones. Es inacep-

" N'Iis comentarios en este capítulo se limitan al sistema jurídico estadounidense,

aunque también pueden aplícarse a los sistemas de otros países. Todas las frases que
hablen de <ia lep o del .<sistema jurídico> se refieren a Estados Unidos: