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Emancipación de Argentina

Lo que hoy conocemos como Argentina, perteneció al Virreinato de Perú, hasta los años
1776 Carlos III de España creó el Virreinato de la Plata, con las reformas borbónicas en
América.

Dentro de las razones para la creación de este Virreinato fueron:

 Una de las razones más importantes por las que Carlos III dio el estatus de
virreinato al Río de la Plata fue la intención de frenar la expansión portuguesa
sobre los territorios cercanos. Con ello pretendía restablecer el control del
comercio por parte de España.
 La necesidad de fortalecer la navegación de los ríos en territorios que limitaban
con las colonias portuguesas en Brasil fue otra razón importante para declarar el
virreinato del Río de la Plata.
 La incapacidad del virreinato de Perú para gobernar la gran extensión de su
territorio fue otra de las causas que llevaron a la creación del virreinato del Río de
la Plata.
 Además, Los puertos españoles ubicados en Montevideo y Buenos Aires parecían
propensos a sufrir los ataques de flotas francesas, inglesas, o incluso holandesas.
 La necesidad de defender estos puertos también influyó en la creación del
virreinato

Coyuntura Crítica:

“Argentina constituyó un foco fundamental del movimiento de independencia


latinoamericana… En 1816 se declaró la independencia definitiva de Argentina por parte
del Congreso de Tucumán. Ya los ejércitos de San Martín habían liberado al país y se
encontraban en Chile, en avance hacia el Perú” (Boersner, Demetrio, 1982, pág 83)

Antecedentes:

El 23 de setiembre de 1808 se conoció en Alto Perú (Bolivia), la captura de los reyes


españoles por parte de Francia. En consecuencia, se forma la Junta Central y Suprema
de Sevilla. La junta de Sevilla envió a un nuevo virrey, Baltasar Hidalgo de Cisneros (era
marino), unos meses después con la caída de Andalucía en manos de los bonapartistas
se desencadenó en la revolución de mayo.

“El sistema colonial descansaba en un equilibrio de grupos de poder la administración


tenía poder político pero escaso poder militar y su prestigio derivaba de la soberanía de la
corona y de su función burocrática” (Lynch, John, 1976, pág 49)
- Aunque las grandes fincas ganaderas estaban ganando importancia, la mayor fuente de
riquezas y prestigio continuaba siendo el comercio exterior, y el comerciante tenía
precedencia social sobre el estanciero. Esto favorece a los españoles contra los criollos
porque aquellos dominaban el comercio transatlántico” (Lynch, John, 1976, pag 49)

Factores exógenos:

 Invasiones británicas:

En el plano económico, ante las dificultades y costos del comercio con España, Cisneros
aceptó la propuesta de Mariano Moreno e instauró el 6 de noviembre de 1809 el libre
comercio con las demás potencias. Los principales beneficiados eran Gran Bretaña y los
sectores ganaderos que exportaban cueros.

En 1806 y 1807 se produjeron dos invasiones inglesas, que fueron rechazadas por el
pueblo de Buenos Aires, alistado en milicias de criollos y españoles. Las milicias se
transformaron en centros de discusión política.

Tras la victoria obtenida durante las Invasiones Inglesas, la población de Buenos Aires no
aceptó que el virrey Rafael de Sobremonte retomara el cargo, ya que durante el ataque
había huido de la ciudad rumbo a Córdoba con el erario público. Se nombró a Santiago de
Liniers como nuevo virrey, pero la gestión de Liniers comenzó a recibir cuestionamientos,
por este de origen francés

“El liberalismo, el racionalismo y los ideales de la francomasonería penetraban en


Hispanoamérica, La literatura subversiva o revolucionaria de Francia e Inglaterra entraba
de contrabando a los países iberoamericanos y pasaba de mano en mano. El ejemplo de
la revolución en armas, entusiasmaba y estimulaba” (Boersner, Demetrio 1982, pág 79)

“La información ideológica de la Revolución Norteamericana penetran en América


española a través del creciente comercio con EE.UU” (Kaplan, Marcos 1969, pág 113)

“En 1806 una fuerza expeditaría británica que venía del Cabo de Buena Esperanza cruzó
el Atlántico Sur, entró en el Río de la Plata, y el 27 de junio ocupó Buenos Aires” (Lynch,
John, 1976, pag 50)

“El mismo año, cuando España se convirtió en aliada de Gran Bretaña contra Napoléon,
el comercio británico fue tolerado en Buenos Aires y Montevideo, y en 1809 Santa
Coloma describía a Buenos Aires como una colonia inglesa” (Lynch, John, 1976, pag 59)

 Intervención Británica: “La guerra estaba perjudicando el comercio británico en el


Atlántico Sur y los comerciantes sufrían graves pérdidas debido al bloqueo
brasileño a Buenos Aires y al aumento de la piratería” (Lynch, John, 1976).
 Abolición de la Constitución: “El 1 de octubre de 1823 Fernando VII, liberado de la
servidumbre constitucional por un ejército francés, abolió la constitución y puso fin
a las reformas liberales. La restauración del absolutismo dividió al mando español
en Perú” (Lynch, John, 1976, pág. 303)

Fuerzas Profundas:

 Sentido de independencia Argentino:

Buenos Aires, la capital del Virreinato, logró un gran reconocimiento ante las demás
ciudades del mismo luego de expulsar a las tropas inglesas en dos oportunidades durante
las Invasiones Inglesas. La victoria contra las tropas inglesas alentó los ánimos
independentistas ya que el virreinato había logrado defenderse solo de un ataque externo,
sin ayuda de España. Durante dicho conflicto se constituyeron milicias criollas que con el
tiempo ganarían un importante peso político, la principal de ellas era el Regimiento de
Patricios liderado por Cornelio Saavedra.

 La Política Comercial del Virreinato del Río de la Plata:

La capital, Buenos Aires, se convirtió en un gran puerto comercial y se incrementó


notablemente la exportación de cueros, tasajo y de la plata proveniente de las minas del
Potosí. El sistema de monopolio impuesto por España prohibía comerciar con otro país
que no fuera la propia España. Esto encarecía notablemente los productos y complicaba
la exportación.

Dado que los productos que llegaban de la metrópoli eran escasos, caros e insuficientes
para mantener a la población, tuvo lugar un gran desarrollo del contrabando, que era
tolerado por la mayoría de los gobernantes locales. El comercio ilícito alcanzaba montos
similares al del comercio autorizado con España. Legalmente no había diferenciación de
clases sociales entre españoles peninsulares y del virreinato, pero en la práctica los
cargos más importantes recaían en los primeros. La burguesía criolla, fortalecida por la
revitalización del comercio e influida por las nuevas ideas (liberales), esperaba la
oportunidad para acceder a la conducción política.

Existían 2 tipo de corrientes sociales: Los que reclamaban el comercio libre para importar
directamente con cualquier país sin tener que necesariamente comprar todas las
mercaderías trianguladas por España (los criollos). Y, Los comerciantes monopolistas,
autorizados por la Corona española, quienes rechazaban el libre comercio y propugnaban
por la continuidad del monopolio, ya que si los productos entraban legalmente
disminuirían sus ganancias (los peninsulares).
De tipo Social: “Las invasiones británicas proporcionaron varias lecciones: demostraron
que los hispanoamericanos no tenían ganas de cambiar un amo imperial por otro.
También mostraron las grandes fallas del imperio español del sur, su frágil administración,
sus débiles defensas. Fueron sus habitantes, no España, quienes lo defendieron. Los
criollos le tomaron gusto al poder, descubrieron su fuerza, y adquirieron un sentido de la
identidad” (Lynch, John, 1976, pag 52)

De Tipo Económica: “El interés económico dominante en El Río de la Plata era el


comercio, no la agricultura. La ausencia de verdaderas grandes estancias, la división de
la tierra en numerosas propiedades y su vulnerabilidad ante las incursiones de los indios,
la existencia de un número de pequeños y débiles productores a merced de los
compradores porteños, todos estos factores perjudicaban al productor rural en el
“hiterland” de Buenos Aires y reforzar el control de los comerciantes sobre la economía”
(Lynch, John, 1976, pag 57)

Factores endógenos:

 Levantamiento de la Paz

El 23 de setiembre de 1808 se conoció en Alto Perú (Bolivia), la captura de los reyes


españoles por parte de Francia. En consecuencia, se forma la Junta Central y Suprema
de Sevilla.

En medio de la efervescencia del ámbito de la cultura y de la Universidad de Chuquisaca,


empezó a circular el texto del Diálogo entre Atahualpa y Femando VII, escrito por
Bernardo de Monteagudo (1789-1825). En él, se habla del espíritu de la libertad, y parece
haber interpretado el sentir de sus compatriotas. Si el rey está ausente la soberanía
vuelve al pueblo.

El 16 de julio en La Paz. El pueblo se reveló contra la opresión española, y formó juntas


de gobierno, que en el caso de La Paz estaba integrada totalmente por americanos.

La represión no se hizo esperar, y el movimiento revolucionario fue derrotado por los


realistas.

Fisuras:

 Cautiverio de Fernando VII:

Cuando Napoleón toma la Península Ibérica, el rey Carlos IV de España le cede la corona
a su hijo, Fernando VII, y éste, a su vez, a José Bonaparte, el hermano de Napoleón. Con
la deportación de los reyes a Francia, se forma la Junta Central y Suprema de Sevilla,
noticia que llegó en septiembre de 1808 a la ciudad de Chuquisaca –actual ciudad de
Sucre, Bolivia-, junto a la de la prisión de los reyes españoles.

Una alternativa considerada antes de la revolución fue el Carlotismo, que consistía en


apoyar a la infanta Carlota Joaquina de Borbón, hermana del rey Fernando VII de España
y esposa y princesa consorte del príncipe regente Juan de Portugal, para que se pusiera
al frente de todas las colonias españolas como regente. Estaba capacitada para hacerlo
por la derogación de la Ley Sálica en 1789, y su intención sería prevenir un posible
avance francés sobre las mismas. El intento no fue apoyado por los españoles
peninsulares, pero sí por algunos núcleos revolucionarios que veían en ello la posibilidad
de independizarse en los hechos de España. Sin embargo, la propia infanta renegó de
tales apoyos, y denunció al virrey las motivaciones revolucionarias contenidas en las
cartas de apoyo que le enviaron. Sin ningún otro respaldo importante, las pretensiones de
Carlota fueron olvidadas.

 Revolución de mayo:

1) Día viernes 18 de Mayo de 1810

El Virrey Cisneros le comunica al pueblo la caída de Andalucía en poder de los


franceses, lo que ya había sido conocido debido a que habían llegado noticias a
Montevideo al recalar una fragata inglesa.

Los Patriotas realizaron una reunión con el Jefe del Regimiento de Patricios,
Cornelio Saavedra, ya que consideraban oportuno poner en acción sus ideas
revolucionarias.

2) Día sábado 19 de Mayo de 1810

Los patriotas logran presentarle al virrey la convocatoria de un Cabildo Abierto y


así el pueblo podía decidir su destino.

3) Día domingo 20 de Mayo de 1810

El Virrey Cisneros, ya enterado del pedido, se reunió con las Fuerzas Militares y
Saavedra no fue muy enérgico en su posición, entonces Cisneros no pudo resolver
nada. Los revolucionarios, no haciendo mucho caso del enojo del virrey, envían a
Martín Rodríguez y a Castelli, quienes logran que se convoque a un Cabildo
Abierto.

4) Día lunes 21 de Mayo de 1810


Los vecinos apoyaban la solicitud del Cabildo Abierto, los regidores recibieron por
parte del Virrey Cisneros una autorización escrita, en la cual se accedía a la
voluntad de pueblo de convocar a una sesión pública para el día 22 de mayo, a la
cual se invitó a la parte más representativa del vecindario.

Durante las discusiones de los días posteriores hasta el 25 de mayo culminó con la
destitución del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros, reemplazándolo por la Primera Junta
de Gobierno convalidada por el pueblo. El movimiento revolucionario, desconoce el
Consejo de Regencia, pero simula declarar fidelidad al rey cautivo Fernando VII. Lynch
señala que esta revolución fue realizada por una élite que hablaba del pueblo sin
consultarle, es decir, fue iniciada por una minoría que consiguió movilizar y manipular a
una mayoría. Los patriotas esperaban capitalizar los restos de los sentimientos realistas
en el pueblo del Río de la Plata, impedir una contrarrevolución española y asegurarse del
apoyo de Gran Bretaña. Para ellos no era sacrificio invocar la soberanía de un gobernante
que no gobernaba. Esta mascara se fue quitada una vez derrotado Napoleón y con la
llegada del despotismo de Fernando VII.

La política de la revolución se encontraba dirigida a todos los españoles conocidos o


sospechosos de ser hostiles a la junta. Se les prohibieron los cargos públicos y la elección
para una asamblea, quedaron sujetos a la violencia, expulsados y detenidos; y en algunos
casos ejecutados.

El movimiento de la Revolución de Mayo, fue eminentemente porteño. La capital debía


lograr ahora, que las provincias del Río de la Plata apoyaran la nueva forma de gobierno
de Buenos Aires, y enviaran sus representantes al congreso constituyente. Como
consecuencia de la interacción, entre Buenos Aires y las provincias, nace la divergencia
entre unitarios y federales.

En el acta del Cabildo de Buenos Aires del 25 de mayo, se indicaba a la Junta que
remitiera una circular a los cabildos del interior, para que las provincias envíen diputados
a la capital.

 Cautiverio de Fernando VII 1808: “La diferencia formal hacia Fernando era un
instrumento convincente, como una táctica temporal” (Lynch, John, 1976, pag 68)
 QUIEBRE: Oposición al despotismo por parte de los criollos hacia Fernando
VII.
 Revolución Patricia: 25 de Mayo el Cabildo: “El 25 de mayo e cabildo aceptó y
fue proclamada la Junta Patriótica. Saavedra era el presidente, Belgrano y Castelli
se contaban entre sus miembros, y Moreno era uno de los dos secretarios. En
esta segunda Junta la Administración y los conservadores españoles quedaban
eliminados y el poder en realidad era compartido por los militares e intelectuales”
(Lynch, John, 1976, pag 67)
Inflexiones:

 Resistencia en Córdoba:

En agosto de 1810, en Córdoba hubo resistencia. El antiguo virrey; Santiago de Liners,


junto con el intendente y arzobispo, prepararon una contrarrevolución, y establecieron
contacto con las autoridades españolas del Alto Perú. La junta actuó contra la resistencia,
capturando a los líderes y ejecutándolos.

En 1811, se creó un Comité de Seguridad Pública, para perseguir a la oposición y recibir


denuncias contra los contrarrevolucionarios.

El nuevo gobierno se vio afectado por las divisiones dentro de las filas revolucionarias y la
oposición de las provincias. Para las otras provincias la revolución de mayo era un
movimiento regional que no era necesariamente favorable para sus intereses económicos
o políticos. Esta no era aceptable ni para Paraguay ni para el Alto Perú. Su resistencia se
debía a la inspiración españolista que más a adelante se convirtieron en una resistencia
más amplia lo que conllevo a la creación de las naciones Uruguay, Paraguay y Bolivia.
Por otro lado encontramos en la zona central que la mayor parte reconocieron la
legitimidad de la junta pero reservaban su libertad de acción.

Hubo dos tendencias internas, una radical y liberal dirigida por Mariano Moreno y otra
moderada y conservadora liderada por Cornelio Saavedra. Lynch señala que el golpe de
conservador fue de corta duración, después del desastre militar de Huaquí, en 1811,
perdiendo el Alto Perú para la revolución. Este hecho conllevó establecer una nueva junta
que fue transformada en una cámara legislativa por Juan José de Paso, Manuel de
Sabarreta y Juan de Pueyrredón. La oligarquía de intelectuales.

Para marzo de 1812, José de San Martin llego a trabajar dándole un nuevo cuerpo militar
a la revolución.

En la batalla de Sipe-Sipe, Potosí quedó en manos españolas, y ya el envió de plata a


España dejó de hacerse desde Buenos Aires. Buenos Aires (gracias a su puerto) trató
de compensar la pérdida de los ingresos por la exportación de plata del Potosí, por la
exportación de productos ganaderos como: el cuero y la carne salada (tajaso).

La provincia de Buenos Aires intentaba imponer su propia revolución a toda la región,


buscaba también aplicar una única política económica. Confusamente percibida en 1810,
en la década de 1820 estaba claro que los intereses del puerto y de las provincias eran
inconciliables. La revolución generó mejoras en la economía de las provincias del litoral,
estimulaba mejores precios para la exportación y un acceso barato para las
importaciones, y el comercio exterior incrementó su volumen y mejoró la balanza de
pagos. Generó mejoras en la industria ganadera. Mientras que la economía de las
provincias del interior, sufrieron una grave recesión, ya que estas economías que antes se
encontraban bajo la protección de la corona española, se encontraban expuestas a los
productos extranjeros. Los mercados de Chile y Perú cerraban por las guerras de
independencia.
En Córdoba hubo resistencia. El antiguo virrey; Santiago de Liners, junto con el
intendente y arzobispo, prepararon una contrarrevolución, y establecieron contacto con
las autoridades españolas del Alto Perú”. ” (Lynch, John, 1976, pag 69)

Puentes:

 Declaración de Independencia:

Para el año 1816 las Provincias Unidas estaban al borde de la disolución, Santa Fe y
Córdoba estaba en revuelta abierta. Tenían a un ejército portugués que ocupaba Brasil
para ocupar la Banda Oriental. En el Alto Perú un ejército español que se estaba
reuniendo para la guerra en Tucumán. El gobierno de Buenos Aires como medida para
fortalecer al país y tranquilizar a las provincias, convoco un congreso, a celebrar en
Tucumán, en marzo de 1816. Las provincias de Uruguay, Entre Ríos, Santa Fe,
Corrientes y Córdoba, estaba ausentes. Con unos diputados divididos entre federalistas y
monárquicos, San Martin y Belgrano, utilizaron como preliminar la declaración de
independencia para renovar la lucha contra España. La declaración de independencia de
la Argentina tuvo lugar durante el Congreso de Tucumán el 9 de julio de 1816.

“(…) El 9 de julio declararon la independencia de las Provincias Unidas de Sud-América ”.


Lynch, John, 1976, pag 82)

Emancipación de Chile

Coyuntura Crítica:

“En Chile, existió una junta patriótica que apoyaba la independencia desde 1812, y que en
1814 negoció un acuerdo con los realistas, bajo mediación inglesa. El acuerdo fue
repudiado tanto por los patriotas chilenos como por el virrey del Perú, y la nación chilena
batalló por su independencia en dura lucha, a partir de 1816, bajo la dirección de
Bernardo O’Higgins, quien recibió el apoyo militar de San Martin” (Boersner, Demetrio
1982, pág 83)

Fuerzas Profundas:

 Crisis Social:

Era lógico que los aristócratas criollos, amos del campo, aspiraran ser amos del país. Una
de las razones es que en una época de impuestos crecientes (después de la guerra de los
7 años y el apoyo a la revolución norteamericana, el imperio bonapartista), necesitaban
poder político para proteger sus intereses económicos. Los criollos mantenían una
constante oposición contra los impuestos imperiales, alanzando un alto grado de
hostilidad al producirse las exigencias del tiempo de guerra de 1805-1806. Era vital para
los criollos el control de la clientela al igual que la administración. A pesar que los chilenos
poseían cargos públicos, estos querían más, querían todos los cargos públicos en su
país. Detrás de todo esto (los impuestos y los cargos) se encontraba un nuevo sentido de
identidad chilena.
 Alejamiento geográfico:

Chile dependía totalmente del mercado peruano para vender cereales, por su cercanía, y
la influencia, riqueza y poder de Perú, le permitía forzar una baja de los precios en apoyo
al virreinato. Para 1798, ya Chile había ascendido a Capitanía General (en 1778), y había
conseguido la independencia administrativa de Perú. Para 1810, esta ya estaba
emancipado de la tutela peruana, por lo que había forjado madurez y conciencia sobre sí
mismo.

 El naciente nacionalismo:

La autoconciencia regional se expresó en la literatura chilena. Estos escritos articularon


un incipiente sentido de la nacionalidad que ya había arraigado en los chilenos. El
desarrollo de la identidad chilena fue repentinamente acelerado por los acontecimientos.
La crisis del encarcelamiento de Fernando VII, la imposición de un nuevo monarca José I
de España, las juntas patrióticas ( los antecedentes), obligó a los chilenos a actuar como
nacionalista, y para 1810 el concepto de patria había empezado a tomar fuerza en Chile.
Ya en 1811, el periodista chileno Camilo Henríquez consideraba la existencia nacionalista
como un hecho. Estos sentimientos no eran compartido por las clases de los estratos
sociales más bajos, ya que no tenían nada que ganar en la nación por lo que carecían de
sentido de la nacionalidad.

“Era lógico que los aristócratas criollos, amos de campo, aspiraban a ser amos del país.
En primer lugar, en una época de impuestos crecientes, necesitaban poder político para
´proteger sus intereses económicos… En segundo lugar, era vital para ellos controlar la
clientela al igual que la administración… aunque los chilenos tenían cada vez más cargos
públicos dentro del mundo hispánico, querían más que eso: querían cargos públicos en
su país y los querían todos.” ” (Lynch, John, 1976, pag 147-148)

“Víctima de su alejamiento geográfico y la escasez de mercancías de exportación, chile


dependía totalmente del mercado peruano para vender sus cereales. La superior
influencia, riqueza y poder, del Perú le permitía forzar la baja de los precios y
habitualmente con el apoyo virreinal” ” (Lynch, John, 1976, pag 148)

“El incipiente nacionalismo minó los supuestos básicos del dominio español y aflojó los
lazos entre la clase dominante chilena y sus soberanos. Cuando, 1808 el soberado fue
depuesto por napoleón, la fábrica del imperios empezó a caerse. Después de una
reciente experiencia de buen gobierno, chile cayó bajo el despótico dominio del
gobernador Francisco Antonio García Carrasco, cuya política chapucera en los 2 años
siguientes agravó la crisis” ” (Lynch, John, 1976, pag 149)

Fisuras:

 Desmantelamiento de la Patria Vieja:

El proceso inició con la instalación de juntas de gobierno en las colonias


hispanoamericanas, en respuesta a la captura del Rey Fernando VII por parte de las
fuerzas napoleónicas en 1808. En Chile, a través de un cabildo abierto, la primera junta
de gobierno se realizó el 18 de septiembre de 1810 y buscó, en un primer momento,
“mantener lealtad al rey cautivo”. Sin embargo, el naciente patriotismo local pronto
comenzó a radicalizar el proceso, tomándose una serie de medidas durante gobierno
de José Miguel Carrera que buscaban una separación definitiva con la metrópoli y la
adopción de ideas republicanas por parte de los protagonistas del proceso. Por entonces,
surgieron los primeros emblemas patrios, el primer reglamento constitucional, la prensa
independentista, la libertad de vientres y se crearon instituciones como la Biblioteca
Nacional y el Instituto Nacional

Bernardo O`Higgins, que se encontraba trabajando en Las Canteras, hacienda de su


propiedad en el sur de Chile, comenzaría a tomar parte activa en política, ofreciendo sus
servicios a la Junta y organizando dos regimientos de milicias con sus inquilinos y
vecinos. Este sería el principio de su fundamental participación en la consecución de
nuestra independencia.

Con la caída de Fernando VII en España, Chile cayó bajo el despotismo de Francisco
Antonio García Carrasco. Este gobernó con el apoyo de la fracción española, y de los
intereses de esta, lo que causó malestar en la aristocracia criolla.

Después de la Revolución de Mayo en Buenos Aires, este metió a la cárcel a conocidos y


respetados criollos. El Cabildo de Santiago tenía como objetivo deponer al gobernado
mediante la fuerza, este depuso a Carrasco el 16 de junio de 1810 remplazándolo con un
chileno, Manuel de Toro Zambrano. El cabildo se había convertido en un vehículo de
ideas reformistas criollas. En el cabildo se discutió que el pueblo español no tenía
soberanía en América, en consecuencia, las junta españolas carecían de validez. La junta
estaba compuesta por criollos de clase alta y por españoles.

Santiago siguió el ejemplo de Buenos Aires, en expresar su lealismo a Fernando VII. Esta
era su máscara principal que disimulaba su intención real, acabar con el dominio colonial
en cualquier forma, y la independencia de Chile.

“Pero no podría restaurar la prístina inocencia de Chile, la patria vieja había sido el foro
de un debate ideológico y fue en esos años cuando “La conciencia política de la clase
dominante sufrió una tan transformación” (Lynch, John, 1976, pag 155)

 Catecismo político Cristiano:

Catecismo político Cristiano de 1810, es un largo argumento a favor del gobierno


republicano y de las instituciones independientes, mantenía que, en caso de la disolución
del gobierno por muerte o prisión de rey, la autoridad debería volver al pueblo, de donde
emanó, y es solo este (el pueblo) quien tiene derecho a formar un nuevo gobierno.

O’Higgins, recibió gran parte de su educación en Reino Unido, bajo la influencia de


Miranda, se convirtió a la causa independentista.
El dominio español se expresaba por el dominio de Perú, y Chile no toleraba el dominio
de este último. Los revolucionarios y los reformistas se ayudaron para formar un grupo de
patriotas, estos prevalecieron sobre el resto de la sociedad chilena que se encontraba
bastante dividida en cuanto a política se refiere.

La Constitución provisional de 1812, estableció que ningún decreto promulgado por


autoridad o tribunal internacional fuera del territorio chileno no tendría efecto.

EL período de la Patria Vieja, el cual luego fue intervenido y disuelto por dos golpes dados
por José Miguel Carrera. Este, finalmente, tomó el control del gobierno.

“El catecismo político cristiano de 1810… Los revolucionarios iban más lejos; para ellos la
lealtad a Fernando no era más que una máscara tras la cual disimulaban su intención real
– acabar con el dominio colonial en cualquier forma y la independencia completa de
Chile” (Lynch, John, 1976, pag 150)
Virajes:

 Liberación comercial:

Los periodos que comprende de 1810-1814 es conocida como la Patria Vieja, en donde
Chile fue una nación incipiente con gobierno e instituciones propias. Sin una declaración e
independencia formal se zafó del control español. Se inauguraron una serie de decretos
que abrió los puertos e Chile al comercio internacional.

1810-1814: “Fue esta la patria vieja que abrió camino a la nacionalidad. La junta de 1810,
dominada por el experto funcionario criollo Juan Martínez de Rozas, inauguró una serie
de reformas liberales, incluyendo el decreto del 21 de febrero de 1811 que abrió los
puertos de Chile al comercio internacional… fue ciertamente un ejercicio de autonomía”.
(Lynch, John, 1976, pag 152)

Factores endógenos:

 Campañas militares 1813-1814:

En 1813, llegaron tropas realistas al mando de Antonio Pareja, produciéndose los


primeros enfrentamientos entre estos y los patriotas. Para poner fin a estos conflictos,
ambos bandos firmaron el Tratado de Lircay en 1814.
O'Higgins no pudo detener a Osorio en la rivera del Cachapoal y se vio obligado a
retroceder a Rancagua donde se atrincheró, uniéndose a una facción al mando de Juan
José Carrera.
El Desastre de Rancagua causó pánico en Santiago. Los planes para defender Angostura
y Santiago mismo fueron olvidados y la población patriota y el gobierno abandonaron la
ciudad para escapar hacia Argentina, acompañados por algunos de los juntitas
conciliacioncitas temerosos de represalias.

En 1814, Fernando VII recuperó su trono y se encontró con que los gobiernos
provisionales de las colonias españolas habían realizado una serie de cambios con los
cuales no estaba de acuerdo. Ordenó a sus funcionarios que anularan todos los cambios
e intensificó las medidas para recuperar los dominios reales que corrían peligro. A Chile
llegaron tropas desde el Perú, las que lograron una victoria sobre los patriotas en la
Batalla de Rancagua (1814) e instauraron una fuerte represión.
Los patriotas atravesaron la cordillera de los Andes y con la ayuda de José de San Martín
comenzaron a preparar el Ejército Libertador.

En enero de 1814, San Martin fue nombrado comandante en jefe del batido ejército del
norte, este comenzó a trabajar en el mejoramiento de las defensas de Tucumán. Allí
estableció una estrategia septentrional de la revolución. Este tenía pensado crear el
ejército de los Andes. Su estrategia en que la revoluciones sudamericanas no estarían
seguras hasta que el corazón del poder español, en Perú, no fuera destruido. La única
manera de llegar a Perú era a través de los Andes por Chile para llegar a Perú por vía
marítima. Por lo que suponía liberar Chile, después de Rancagua. Los planes de San
Martin iban en consonancia con O’Higgins.

Puentes:

 Declaración de Independencia:

Unos de los problemas principales contra dicha estrategia es que las Provincias Unidas
no contaban con los ingresos suficientes para los pagos, por lo que San Martin y sus
oficiales se dedicaron a desarrollar la economía. Para el año 1816, una de las medidas
tomadas por San Martin fue que las Provincias Unidas, al estar al borde de la disolución,
utilizaron medida para fortalecer al país y tranquilizar a las provincias, por lo que convoco
un congreso, a celebrar en Tucumán, en marzo de 1816. A finales de 1816 tenían un
ejército de 5000 mil hombres. Una vez el ejército llego a Chile, se reagrupó y penetro
rápidamente en la región central hacia Santiago, derrotando a los realistas en las llanuras
de Chacabuco; en febrero de 1817, entrando a Santiago.

Mientras tanto, los realistas se reorganizaban en el Sur. El 12 de febrero de 1818 se


proclama formalmente la Independencia de Chile, en las cercanías de la ciudad de Talca.
El documento, firmado entre otros por Miguel Zañartu, Hipólito de Villegas y Bernardo
O’Higgins, era un intento por registrar este hecho de trascendental importancia en el logro
de nuestra identidad autónoma con respecto a España

San Martin, logra la victoria en las llanuras de Maipo, a las afueras de Santiago (en abril
de 1818), los realistas estaban en retirada y los chilenos era soberanos de sus tierras y
O’Higgins se convirtió en el director supremo.

Emancipación de Perú

Coyuntura Crítica:

“Perú experimentó rebeliones independentistas desde 1810 pero permaneció en manos


realistas hasta 1820, cuando los ejércitos de San Martín penetran el país… algunos
sectores del país aceptaron la independencia a regañadientes, como una imposición
desde el exterior. El Alto Perú-Chacrcas, posteriormente Bolivia- proclamó su
independencia, separadamente del resto del antigui virreinato, el 6 de agosto de 1825”
(Boersner, Demetrio 1982, pp. 82 y 83).

Virreinato de Perú: El Virreinato del Perú, cuya capital era Lima, se organizó el año de
1542, siendo el primero que desempeñó el cargo Blasco Núñez Vela. Comprendía
entonces todas las posesiones españolas en la América Meridional; pero a medida que la
colonización del territorio avanzaba acreditaba la experiencia lo difícil de gobernar tan
extensa jurisdicción, fueron separándose los virreinatos de Nueva Granada y Buenos
Aires y las Capitanías Generales de Venezuela y Chile; con lo cual vino a quedar reducido
el Virreinato del Perú a los límites de la República actual, si bien en los últimos años se le
agregaron el Alto Perú, Bolivia actual, Maínas, Guayaquil y Chiloé. Era el Perú la más rica
y extensa de las posesiones españolas en Sud América. (Agüero, 1968 Pág 04)

Antecedentes:

 Rebelión de Túpac Amaru I


Túpac Amaru I fue el último soberano inca de Vilcabamba. Tras la muerte de su medio
hermano Titu Cusi Yupanqui en 1570, presuntamente envenenado por los españoles,
Túpac asumió el trono junto con los indios que se resistían a la dominación imperial. Pese
a que la administración colonial enviaba embajadores para negociar con el antiguo
gobernante un acuerdo de convivencia, Túpac no apoyaba esta opción.

El último enviado fue Atilano de Anaya, quien fue capturado y asesinado al cruzar el
puente Chuquisaca. Este hecho provocó que el nuevo virrey Francisco de Toledo
declarara la guerra en 1572 contra el reino de Vilcabamba. Con unos 2.000 hombres,
Túpac enfrentó a las tropas, integradas por unos 250 soldados y 2.500 pobladores
aliados, quienes tenían por misión erradicar los focos rebeldes para evitar que se
extendieran hacia otros territorios.

“En Perú, los criollos no podían poner en duda la resolución española de mantener
subordinados a los indios; pero después del gran levantamiento de Túpac Amaru se
dieron cuenta del modo en que ellos mismos eran postergados del sistema de seguridad
y cómo sus milicias eran desmovilizadas” (Bethell, Leslie, 1991, Tomo V, pág. 35)

 Rebelión de Túpac Amaru II


En el siglo XVIII se produjeron diversas rebeliones indígenas en el Alto Perú. Una de las
más importantes fue la del cacique José Gabriel Condorcanqui o Túpac Amaru II, entre
1780 y 1782 en el virreinato del Perú, en el Cuzco, en contra de las imposiciones del
gobierno español mediante las reformas borbónicas, la explotación de los indígenas y las
reformas fiscales.

El 4 de noviembre de 1780 comenzó su levantamiento con la detención del corregidor de


Tinta (localidad), Antonio de Arriaga, hasta que días después fue ejecutado públicamente.
Movilizó y armó a miles de voluntarios indígenas y se enfrentó a un ejército español de
900 hombres, donde obtuvo la victoria en la batalla de Sangarará (18/11/1780).
En 1781 las autoridades españolas lo aprehenden junto a su esposa e hijos, fue
sentenciado y obligado a presenciar la ejecución de su familia, posteriormente, ataron sus
extremidades a caballos para descuartizarlo. Al morir, ordenaron repartir sus partes entre
los pueblos que participaron en la rebelión atemorizarlos.

“En la década de 1770, Túpac Amaru empezó una movilización pacífica para obtener
reformas (…) Cuando no obtuvo ningún resultado, condujo a sus seguidores a una
insurrección violenta, con ataques a los corregidores, saqueos de los obrajes y una
ocupación de los pueblos” (Bethell, Leslie, 1991, Tomo V, pág. 40)

Fuerzas Profundas:

 Económica:

Los recursos y riquezas de estos territorios eran muy anhelados por la Corona, así como
por las administraciones coloniales, quienes se aferraban a sus privilegios y poderes para
conservar el monopolio comercial que mantenían, así como el control de los ingresos para
consolidarse dentro del territorio hispanoamericano.

Con el incremento de impuestos por parte del imperio, la situación en el nuevo continente
fue desestabilizándose al generar el descontento de los habitantes y propagarse el deseo
de libertad a través de las revoluciones hispanoamericanas, las cuales perjudicaron las
actividades comerciales.

“Buenos Aires tenía un interés vital en el Alto Perú. Cuando se rebeló, Lima empezó
rápidamente a exigir su antiguo patrimonio y, con la ardiente cooperación de los
funcionarios coloniales locales, reintegrarlo a la fortaleza realista del Perú (…)
Económicamente su producción de plata se había convertido en un importante elemento
del comercio ultramarino de Buenos Aires”. (Lynch, John, 1976, pág. 135)

 Estratégica:

Ante el fracaso de la revolución de 1810, la causa que promovía esta iniciativa


consideraba el uso de la guerra irregular para establecer una resistencia a los ejércitos
realistas, con alianzas necesarias entre indios, mestizos y criollos, para iniciar la
arremetida contra los españoles.

“Era un claro trampolín para las operaciones españolas de contrainsurgencia. Los


porteños tenían aliados entre los patriotas del Alto Perú, y creían que sería sencillo para
una expedición libertadora unirse con los políticos en las ciudades y con las guerrillas de
las montañas en una campaña concertada para expulsar a los españoles” (Lynch, John,
1976, pág. 135)

Factor Endógeno:

 Guerrillas del Alto Perú:


Las guerrillas del Alto Perú significaron un recurso útil para resistir las imposiciones de la
Corona, aunque su papel fue limitado en la gesta independentista ya que sus números no
eran grandes, solo cientos, lograron agrietar las defensas reales al controlar las
comunicaciones entre las ciudades y bloquear algunas fuerzas enemigas.

Pese a no tener una formación militar, se abastecieron con armamento, caballos y los
recursos producidos en el campo, ya sea de forma voluntaria o forzada de las aldeas
dominadas por ellos. Al menos existían unos seis focos de resistencia dirigidos por jefe
guerrillero. Entre las principales estaba Ayata, Mizque y Vallegrande, así como en las
selvas entre La Paz y Cochabamba.

“Las guerrillas del Alto Perú, los montoneros de los picos, desiertos y selvas, se juntaban
espontáneamente en bandas de varias magnitudes, y se mantenían unidas menos por
disciplina militar que por un común propósito, y por su fidelidad a un caudillo victorioso”
(Lynch, John, 1976, pág. 136)

 Nacionalismo peruano:

Los criollos no se habían comprometido con ninguna causa pues solo les interesaba
conservar su poder y posición hasta que ganara el más fuerte de los bandos. Aunque
intentaron promover libertadores propios, según Lynch, sus candidatos demostraban una
desorientación política y colapso militar, desencadenando rebeliones militares.

“Incapaz de liberarse a sí mismo, a Perú le desagradaba aceptar la liberación por parte


de los otros. Esta perspectiva provocó un resentimiento mucho mayor que el despertado
por la presencia española, y el nacionalismo peruano se expresó, primeramente, no
contra los españoles, sino contra los americanos” (Lynch, John, 1976, pág. 299)

De hecho, las consecuencias de esta anarquía les condujo a la clase dirigente a buscar la
ayuda de Simón Bolívar para ayudarlos a alcanzar la independencia. Bolívar, pese a
sentir el rechazo de los peruanos, intervino en nombre de la defensa de la revolución
americana. En 1823, asumió la suprema autoridad militar y política de un Perú ocupado
por fuerzas argentinas, peruanas, chilenas y colombianas.

Factor exógeno:

Pese a sufrir las sublevaciones de Perú, los españoles trataron de aprovechar las
ventajas que daban los desacuerdos entre los ejércitos americanos para afianzar sus
posiciones. El general José de Canterac envió a un ejército de casi ocho mil hombres
para avanzar contra las fuerzas libertadoras y anticiparse a sus movimientos.

Sin embargo, ante las nuevas órdenes del monarca, los españoles comenzaron a revelar
sus verdaderos intereses por lo que retiraron sus respectivos apoyos a la causa contra los
independentistas y en favor de establecer en el Alto Perú un régimen conservador y
eliminar las administraciones constitucionales.
“El 1 de octubre de 1823 Fernando VII, liberado de la servidumbre constitucional por un
ejército francés, abolió la constitución y puso fin a las reformas liberales. La restauración
del absolutismo dividió al mando español en Perú” (Lynch, John, 1976, pág. 303)

Fisura:

 Erradicación de las guerrillas

Hasta 1816, las guerrillas evitaron el control absoluto español en el Alto Perú, por lo que
las autoridades tuvieron que organizar una gran campaña para combatirlas y acabarlas.
La aristocracia del Alto Perú era realista y estada de acuerdo en emprender la lucha
contra estas fuerzas insurgentes, a las cuales temían y odiaban.

“Cuando los españoles liquidaron a las guerrillas en 1815-1816, quedó el campo


despejado para la clase dominante criolla, que permaneció leal a España hasta que
quedó claro que la causa española estaba sentenciada. Fue en sus manos, y no en las de
los porteños ni en las de las guerrillas, que cayó la independencia del Alto Perú” (Lynch,
John, 1976, pág. 144)

Nudo:

 Expediciones auxiliares al Alto Perú


Según Lynch, en total fueron tres expediciones libertadoras o auxiliares a Perú. Desde
1810, derrotaron fuerzas realistas a lo largo del territorio. La primera fue dirigida por Juan
José Castelli, quien había prometido libertad y ayuda militar, pero realmente buscaba
implementar un gobierno de terror para mantener el poder. Ordenó el castigo y
fusilamiento de funcionarios españoles, dejó a un lado a los patriotas y reorganizó la
administración del territorio. Fue derrotado en Huaqui, en 1811.

La segunda expedición fue en 1813 a cargo del general Belgrano, pero al igual que la
primera, fracasó y los pobladores reafirmaron que estas misiones solo servían para
desatar el caos y la destrucción sin aportar nada.

“Los porteños despacharon una segunda expedición del Alto Perú en 1813, esta vez bajo
el mando del general Belgrano. El nuevo jefe y sus fuerzas fueron un mejor anuncio para
Buenos Aire que sus predecesores, pero militarmente eran igualmente vulnerables”
(Lynch, John, 1976, pág. 139)

La tercera fue encabezada por José Rondeau, aunque tuvo la mejor oportunidad para
atacar gracias al avance de las guerrillas, no tuvo un control real sobres sus tropas,
quienes saqueaban o permanecían borrachas.

Inflexión:
La batalla de Junín fue uno de los últimos enfrentamientos entre el ejército realista, con
José de Canterac, y el ejército patriótico, dirigido por Bolívar, siendo este último quien
obtuviera la victoria.

“El 6 de agosto trabaron combate con Canterac en la meseta de Junín. Fue una batalla
rápida y furiosa en la cual no se disparó ni un solo tiro; el jadeante silencio sólo se rompía
con el choque de las espadas y las lanzas y el galopar de los caballos. Y fue la superior
caballería de los patriotas la que logró la victoria y obligó a huir a los realistas”. (Lynch,
John, 1976, pág. 304)

Quiebre:

La batalla de Junín fue el último gran enfrentamiento de la gesta emancipadora


hispanoamericana, lo que condujo al cese del dominio español en los territorios
suramericanos.

“Mandando las fuerzas conjuntas de Canterac y de Valdés, un ejército de 9.300 hombres,


avanzó sobre Sucre e intentó rodearlo, mientras éste maniobra con sus 6.000 hombres
fuera de su alcance. Por último, el 8 de diciembre de 1824, los dos ejércitos se
enfrentaron en Ayacucho (…) Perú estaba liberado, la revolución americana era
prácticamente completa” (Lynch, John, 1976, pág. 305)

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