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ESTUDIOS EN HOMENAJE AL PROFESOR MARTÍN DE RIQUER

Fin’Amors-Amor Cortés:
la mujer en la literatura medieval1
Francisco Crosas, Universidad de Castilla-La Mancha

Resumen: El amor cortés es una retórica del amor nacida a finales del siglo XI, de origen incierto y de una fecundidad
extraordinaria. Trovadores provenzales, gallego-portugueses, poetas cancioneriles castellanos, lo mejor de la lírica del
Siglo de Oro… Multitud de poetas seguirán empleando, más o menos transformadas, las categorías de esta retórica
del amor, que idealiza sistemáticamente a la mujer. Palabras clave: Amor cortés, lírica, trovadores, Edad Media, mujer,
misoginia. Abstract: The courtly love is a rhethoric of love which began in the late 11th century. Of uncertain origins
and extremely fruitful, it was used by Provençal and Galician-Portuguese troubadours, Castilian cancioneriles poets,
the best lyric poets of the Siglo de Oro... Poets in large numbers went on making use of this rhethoric of love, which
systematically idealizes women. Keywords: Courtly love, lyric poetry, troubadours, Middle Ages, woman, misogyny.

A. Praenotanda: vida versus ficción. Hombre, su finalidad primera no es útil ni tam-

Con muchísima frecuencia mis alumnos se


ven amonestados por confundir la vida
con la Literatura, como Don Quijote. Cuando co-
poco ideológica.
A la hora de aproximarnos a ese maravilloso
corpus de la lírica trovadoresca provenzal, inte-
mentamos los sonetos de Garcilaso, por ejemplo, resa mucho no perder de vista la dimensión es-
debo insistirles en que se prescindan de Isabel tética, la primera y principal, de los versos de las
Freire, de Guiomar Carrillo, de Beatriz de Sá o de cansós y los sirventeses. Sin duda podemos ras-
cualquier otra mujer de carne y hueso que hubie- trear rasgos de época en las canciones de Jaufré
ra podido inspirar al vate del Tajo. Rudel o de Bernart de Ventadorn, pero siempre
La Poesía (la Literatura) -ya lo decía con gran cautela, para que no se nos seque el “ce-
Aristóteles- no cuenta cómo han sucedido las lebro” y perdamos el buen juicio, confundiendo
cosas sino cómo podrían o deberían haber suce- el universo lírico de la cortesía y del amor cortés
dido. Por eso la Poesía es superior a la Historia con la realidad del amor y del matrimonio en los
(Historiografía). Se puede mantener este plantea- siglos XII y XIII.
miento para esa dimensión de la Literatura que Es axiomático que la Lírica de las diferentes
llamamos Lírica. Salvo en casos muy excepciona- tradiciones y épocas es distinta y evoluciona sin
les, como el de Lope, debemos huir del biogra- cesar. Sin embargo, los valores de experiencia
fismo. Del mismo modo, no podemos confundir que se transmiten mediante concretas y cam-
los textos literarios con documentos, por mucho biantes fórmulas retóricas son permanentes. Por
que puedan inspirar al historiador a la hora de eso nos sigue cautivando Edipo Rey de Sófocles.
recrear un ambiente o una realidad social del pa- ¿Era el amor en el Languedoc del siglo XII muy
sado. No pretendo aportar aquí una definición distinto del que se tenían quienes oían a Ovidio
de Literatura ni de Lírica, pero me parece opor- o del de los hombres y mujeres de la postmoder-
tuno recordar que son siempre una sublimación nidad? Pienso que no. De ser así, no vibraríamos
de la vida, de la experiencia y que, por tanto, con la Heroida VII, con ese conmovedor: “Uror!”,
aunque nos puedan servir para conocer mejor al ¡Me abraso!, en boca de la desdeñada Dido2-

1. Este texto –cuya versión oral leí en Cuenca en julio de 2011- es directamente deudor del magisterio escrito del llorado romanista
Martín de Riquer, así como del magisterio oral y de los estudios de Isabel de Riquer, quien despertó mi interés por la lírica trovado-
resca en el Patio de Letras de la Universidad de Barcelona, hace ahora treinta años. A su vez, este trabajo es fruto de la metodología
desarrollada dentro del grupo de investigación BITECA, financiado a través del proyecto FFI2011-29719-C02-01, del Ministerio
de Ciencia y Tecnología, “BITECA”, que es continuación de FFI2008-03882, ambos cofinanciados con fondos FEDER
2. Vror, ut inducto ceratae sulpure taedae [...] / Aenean animo noxque diesque refert. / Ille quidem male gratus et ad mea munera
surdus... “Me abraso, como las teas de cera untadas de azufre [...] la noche y el día traen a Eneas a mi ánimo. Él es sin duda ingrato
y sordo a mis regalos”. Ovidio, Heroida VII..

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B. La fin’amors Dice el enamorado a la dama o Midons (meus


1. “Amor cortés”, que traduce el provenzal dominus):
fin’amors, es un marbete muy utilizado en la his- salvan vostr’onor que.y retinc;
toriografía literaria de la Edad Media y el Siglo de e lais vos.l cor e.l cors per fieu,
Oro. En la bibliografía, no siempre con las mis- En el léxico latino del siglo XII honos es el patri-
mas comprensión y extensión. Por eso podemos monio territorial de un señor feudal. Retinere sig-
hablar de la pervivencia de la retórica cortés del nifica conservar (lo que el donatario quiere para
amor, por ejemplo, en Petrarca, Garcilaso o Lope. sí). Fieu es, obviamente, feudo.
Pero en sentido estricto designa una retó- Et irai lai si.us platz, e no,
rica del amor que aparece por primera vez en qu’en mi non a dreit ni razo
Occidente a finales del siglo XI, en los textos del mas cum sers, si Dieus mi perdo,
primer trovador conocido, Guilhem de Peitieu pus mos mas dins les vostres tinc
-Guillermo, VII Conde de Poitiers y IX Duque e de vos servir no.m retinc.
de Aquitania, (1071-1126)-; que conocerá un Doncx, pus en mi non a ren mieu,
espectacular desarrollo a lo largo del siglo XII faitz ne cum prod dona del sieu.
en Occitania; y que subsistirá, con más o menos [...]
variaciones, en toda la lírica europea de la Baja Vostres suy ses autr’ochaizo,
Edad Media y de la Edad Moderna. per la bona fe qu’ie.us covinc.
Es el tema predominante –casi exclusivo, se- Guilhem de Bergadà, “Lai on om mellur’e reve”
gún Martín de Riquer– de la cansó trovadoresca. Iré allí, si os place, o no [iré si no os place], por-
Siempre es amor entre hombre y mujer, con unas que en mí no hay derecho ni razón sino como en
limitaciones y con unas expresiones y un léxico un siervo (¡que Dios me perdone!), pues tuve mis
peculiares. Fue una forma nueva de expresar el manos dentro de las vuestras y no me abstuve
sentimiento amoroso. de serviros. Así pues, ya que en mí no hay nada
2. De modo análogo a como adscribimos mu- mío, haced de mí como noble dama con lo que
chos motivos y figuras al Petrarquismo, verdade- es suyo [...] Soy vuestro sin ningún pretexto, por
ro cajón de sastre, la aplicación de la categoría la buena fe que os prometí.
“amor cortés” ha sido, con frecuencia, arbitraria.
Entiendo que lo esencialmente distintivo y He subrayado términos que equivalen a los
novedoso de la fin’amors consiste en la traslación que encontramos en documentación latina jurí-
al paradigma retórico amoroso de las relaciones dica de la época: directum, ratio, servus, inmixtio
vasallático-feudales. Dicho de manera sintética manuum, servire (cumplimiento servicios vasa-
y simplificando mucho, la dama se convierte en lláticos), domina, occasio, bona fides (fidelidad del
“Señor” y el amador en “Vasallo”. Esto no agota la vasallo al señor), convenire (prometer en virtud
noción de amor cortés pero pone de manifiesto de un pacto), etc.
su aportación a la retórica amorosa de todos los Estamos ante una poesía amorosa con el mis-
tiempos. mo léxico que empleaban en los actos jurídicos
3. Veamos algunos términos técnicos que los señores y sus vasallos; pero es un léxico que
iluminan esta afirmación: ambos textos son de sólo tiene pleno sentido en la Europa feudal –so-
Guilhem de Bergadá (1138-1196), uno de los bre todo en la zona central y occidental– entre
trovadores de los que conservamos más poemas3. los siglos X y XIII. ¿Caben influencias orienta-

3. Hom conserva 31 poesies autèntiques seves, d’estrofisme ric i original, a vegades imitat per trobadors contemporanis i pos-
teriors, escrites en un occità prou correcte que, en algunes composicions de caràcter popularitzant, deixa entreveure solucions i
formes catalanes. Bé que conreà la poesia amorosa dins els més estrictes cànons de l’amor feudal i que atenyé uns certs graus de
delicadesa (com en l’epístola en vers en resposta a un anònim) i d’elegant desimboltura (la famosa tençó fingida amb l’Arondeta),
la part de la seva obra més reeixida i en la qual apareix el trobador personal és la dedicada a atacar, bescantar i insultar els seus
enemics, adés amb sornegueria i hàbils fiblades ridiculitzants, adés amb una ira no continguda.
http://blocs.xtec.cat/catpoesia/els-origens/la-poesia-trobadoresca/guillem-de-bergueda/

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les o extrañas a ese tejido social? Los arabistas joven: difícil de precisar, pero muy importante y
lo afirman, como referiré después. Para ellos la frecuente. No significa juventud física ni de edad,
fin’amors sería una versión del adab y de su refle- sino de espíritu. Implica desinterés, generosidad,
jo en determinada lírica arábiga. necesarios para el buen amor y la relación social.
Veamos el paralelismo de otros términos en largueza: generosidad, liberalidad. Cualidad
ambos campos semánticos: esencial de los nobles. (largitio era una carta de
donación en textos jurídicos).
bailia (señorío amoroso) solatz: es el resultado de tratar con gente culti-
baulia (tutela, protección) vada; evoca consuelo, conversación agradable,
blandir (cortejar) solaz.
blandimentum (favor, consentimiento, aprobación) ensenhamen: cultura, educación (en el sentido
cauzimen (clemencia) de la discreción áurea).
causimentum (donación, elección) pretz (pretium): mérito, valía, estima. Aquel cú-
ces (servidumbre, vínculo) mulo de perfecciones por el que alguien es ama-
censum (tributo) ble, digno de ser amado.
dompna (amada) mezura: moderación (virtud clásica), contraste
domina (señora, madona= meus dominus) con la desmesura épica, sensatez, sentido de la
encombre (impedimento) justicia, cierta humildad y dominio de sí.
encombre (impedimento en el ejercicio de un derecho) joi: el gozo que produce la recompensa, sentir-
escondisc (defensa) se correspondido en el amor. Estamos ante una
excondicere (defensa de una acusación) ascesis sentimental. Este joi, personificado en la
forfaitz (desdenes, faltas) dama de la fin’ amors, eleva al hombre fuera de
foris factum (infracción de una obligación) sí, en un transporte gozoso, a un estado de alma
om (hombre amador) especial.
homo (sin adjetivar = vasallo) deport: diversión.
mercé: gracia, piedad, misericordia, benevolen-
4. Otros términos frecuentes del código lírico cia, favor (también es término vasallático). Sus
cortés, que redondean esta primera aproxima- equivalentes en la lírica castellana cancioneril son
ción a la expresión del amor como una relación “galardón” y “merced”.
vasallática:
5. En los textos divulgativos, y aun en algunas
fin’amors: amor puro, excelente, exclusivo, monografías científicas, se afirma taxativamente
aristocrático. que el amor cortés, para serlo, debe ser adúltero.
gilos: el marido celoso. No he leído todo el corpus trovadoresco proven-
lausengiers: los enemigos de los amantes. zal (en el corpus cancioneril castellano, “nieto”
fenhedor: el amante tímido. de los trovadores de los siglos XII y XIII, que co-
pregador: suplicante (pide una prenda de amor) nozco mejor, no se da ese presunto requisito).
entenedor: enamorado admitido por la dama Pero me atrevo a afirmar que, si bien en muchos
drutz: amante perfecto o cumplido. textos la domna es, efectivamente, una mujer
cortezia (de cort): es la virtud caballeresca por casada, hay muchos otros en que ni directa ni
excelencia, que resume el conjunto de virtudes indirectamente se hace referencia a esa impor-
que deben tener un caballero y una dama. Es una tante circunstancia. Moshé Lazar, en su canónica
noción muy concreta en los trovadores, aunque monografía Amour courtois et fin’amors no admi-
muy amplia; supone perfección moral y social en te dudas: sólo la domina, la mujer casada, puede
el hombre del feudalismo: lealtad, generosidad, ser cortejada por un trovador. Y además extrae
valentía, buena educación, trato elegante, afición consecuencias sobre la concepción del matrimo-
a juegos y placeres refinados, etc. nio y del amor en la Edad Media que van más allá

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de los textos y que no comparto. premio será un beso, una caricia, la unión físi-
¿Por qué, entonces, en bastantes ocasiones ca... pero las más de las veces, la simple aquies-
la mujer es cortejada no por su marido sino por cencia, el consentimiento: se admite al caballero
diversos trovadores-amantes? Según Pierre Le como servidor, como “vasallo” de amor. Y en ese
Gentil, porque no sería “cortés” lo fácil, lo banal, ejercicio (y este aspecto aparece explícitamente
lo que está al alcance de todos. No se conquis- innumerables veces) el caballero mejora; no so-
ta lo que se tiene sino lo inaccesible, lo ajeno. cial, sino moralmente. Amando, el cobarde se
Además, la doncella no tiene independencia, está vuelve valiente y el mezquino, franco y liberal.
sometida a todo tipo de tutelas. El matrimonio Los poetas del Dolce stil novo y los poetas can-
entre nobles es fruto de intereses, no de amor. cioneriles castellanos insistirán mucho en este
Hubo “cortejadores” que formaban parte de la aspecto ascético del servicio amoroso.
vida de la corte.
Es una explicación plausible, pero no del Quar dompnas fan valer ades
todo satisfactoria. los desvalenz e.ls fels engres;
Otros alegan que en esta retórica amorosa (e que tals es francs e agradius
insisto en lo de retórica de intento), el amor se que si ja dompna non ames
expresa casi como culto a la mujer... Y quizá tam- vas tot lo mon fora esquius…
bién por eso se busca una “señora”, una mujer Guilhem de Cabestany (?-1212...)
“cumplida” y no una joven doncella... Isabel de Porque las damas siempre infunden valor a los
Riquer dice que sólo la mujer casada puede ser apocados y a los viles impetuosos; y los hay que
domina, tener una consideración social y ser, por son francos y agradables que, si no amasen a una
tanto, cortejada y celebrada públicamente. dama, serían hoscos a todo el mundo…
Ligada a la cuestión de la situación canónica
y legal de la domina está la presencia del “amor Dice Le Gentil:
carnal”. En la bibliografía encontramos quienes
defienden que el amor cortés es ideal, algo así Le troubadour est en effet dans la situation para-
como un amor platónico. Otros, como Lazar, ven doxale de quelqu’un qui s’emploirait de toute son
tras vocablos absolutamente normales y de sig- âme et de tous ses sens à rechercher une satis-
nificado transparente, oscuras alusiones al acto faction dont il ne peut apprécier la pleine valeur
conyugal y a otros aspectos físicos de la relación qu’autant précisément qu’il ne la possède pas en-
sexual. Algo parecido pasa con la lírica cancione- core!” (Le Gentil, 1963: 61).
ril castellana del XV, donde muchos ven, sin fun-
damento alguno, sentido directamente genital en El trovador se encuentra en la paradójica si-
palabras como “gloria” y “pena”, cayendo además tuación de quien busca con todas sus fuerzas una
en lamentables anacronismos lingüísticos. satisfacción de cuyo valor no puede ser cons-
Pienso que tanto el estado civil y canónico ciente sino tanto en cuanto no la ha alcanzado
de midons como la expectativa de la unión física todavía. Ante ese panorama, caben dos posibili-
entre los amantes, no son ni requisito ni carac- dades: rehabilitar francamente el placer carnal o
terística esencial del amor cortés. En esta forma renunciar totalmente, como Dante y los poetas
de poesía amatoria lo de menos es la unión física del Dolce stil novo, que se dejan llevar a Dios por
con la amada. Interesa, sobre todo, el ejercicio de una progresiva espiritualización del amor huma-
ese servicio amoroso (que de por sí no es carnal), no. En definitiva, no interesa tanto la amada, que
en sí mismo; es una ascesis, una autodisciplina, raramente aparece con rasgos concretos, como
a la que contribuyen las dificultades que pone la el amante y su propio proceso vivencial, la expe-
amada. ¿Ennoblecería la satisfacción inmediata riencia del amador, como encontramos todavía
del deseo o de la pasión? Sin duda, no. El caba- en Garcilaso de la Vega, varios siglos después.
llero se ejercita: es la historia de un deseo, cuyo

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C. Orígenes el estudioso, de manera radical, sino más bien


Buscamos siempre el origen. En ocasiones, como un elemento sociocultural más para tener
podemos encontrar precedentes; en otros no, en cuenta en nuestras pesquisas.
como el caso del corpus trovadoresco provenzal. Bezzola sostiene que Guillermo IX de
De la noche a la mañana aparecen dos poetas Aquitania es el primer trovador en sentido ab-
aristócratas, Guillermo de Poitiers y su ahijado soluto. Su tesis podría resumirse del siguiente
Jaufré Rudel y, como un reguero de pólvora, la modo: Guilhem de Peitieu –tipo sin duda excén-
nueva expresión -métrica, música, motivos- al- trico– opondría a la austeridad y a la glorificación
canza en menos de un siglo una madurez porten- de la mujer, a imagen de la Virgen María, en la
tosa, con gran cantidad de orden de Fontevrault –funda-
poetas que siguen esa este- da por Robert d’Arbrissel– en
la. Se trata de una cuestión Bezzola sostiene que la que ingresaron, entre otras
abierta; hay varias teorías: Guillermo IX de muchas aristócratas, sus dos
a) Origen litúrgico Aquitania es el primer mujeres y su hija; y la famo-
San Marcial de Limoges sa Bertrada, manceba del Rey
trovador en sentido
y los tropos. Se trataría de de Francia (y donde más tarde
una traslación de la himno- absoluto. serían sepultados Leonor de
dia litúrgica a la expresión Aquitania y su hijo Ricardo
del amor humano. Corazón de León), una “glorificación” profana
b) Origen hispanoarábigo: la retórica del de la mujer, tan lejos del ascetismo como de la
amor de la lírica medieval árabe culta; de ahí ven- procacidad de sus primeras canciones. Tras esa
dría el pretendido sensualismo de estos poemas. “invención” del primer trovador estarían el plato-
Como indicaba antes, se ha puesto en relación nismo de Chartres y Ovidio, maestro en el “arte
el paradigma medieval de la cortesía con el adab de amar”; así como la religiosidad exaltada de los
arábigo. Desde luego, adab y cortesía son fenó- seguidores de Robert d’Arbrissel, pero invertida,
menos análogos4. ¿Se trata de poligénesis? ¿Hay contrahecha.
una raíz común en el mundo grecolatino? ¿Hay No le parece que el amor cortés sea de filiación
influencias recíprocas? No sé árabe y no puedo árabe o clásica. Insiste en el papel de Guillermo
profundizar en la cuestión. No obstante, tengo de Poitiers en la invención de esa pseudomística
mis reservas porque no veo fácil la doble circu- femenina: el noble vitalista, vuelto de la cruzada,
lación de textos en fecha tan temprana como los cínico y desvergonzado, antagonista del clero,
siglos XI y XII. instalado en la rutina de sus dominios y deseoso
c) Reto Bezzola o la mística “secularista” de la de una salvación no trascendente. Insiste en el
mujer, que habría sido codificada por Guilhem ambiente lujoso y mundano de las cortes meri-
de Peitieu, el primer trovador provenzal conoci- dionales, donde se dan una relajación y una exal-
do. Es la hipótesis, para mi gusto, más sugerente, tada religiosidad penitente a la vez.
aunque no pueda aceptarla tal como la formula Hace una lectura en esa clave de sus cancio-

4. adab, Islâmic concept that became a literary genre distinguished by its broad humanitarian concerns; it developed during
the brilliant height of ‘Abbâsid culture in the 9th century and continued through the Muslim Middle Ages. The original sense
of the word was simply “norm of conduct,” or “custom,” derived in ancient Arabia from ancestors revered as models. As such
practice was deemed praiseworthy in the medieval Muslim world, adab acquired a further connotation of good breeding,
courtesy, and urbanity. Parallel to and growing out of this expanded social meaning of adab there appeared an intellectual
aspect. Adab became the knowledge of poetry, oratory, ancient Arab tribal history, rhetoric, grammar, philology, and non-
Arab civilizations that qualified a man to be called well-bred, or adab. Such men produced a vast and erudite adab literature,
concerned with man and his achievements and written in a style rich in vocabulary and idiom, and usually expressive and
flexible. They included such writers as the 9th-century essayist al-Jâhiz of Basra and his 11th-century follower Abû Hayyân
at-Tawhïdï; the 9th-century Kûfan critic, philologist, and theologian Ibn Qutaybah; and the 11th-century poet al-Ma’arrï. As
the golden age of the ‘Abbâsids declined, however, the boundaries of adab narrowed into belles lettres: poetry, elegant prose,
anecdotal writing (maqâmât). In the modern Arab world adab merely signifies literature. Enc. Britannica on line. http://www.
britannica.com/EBchecked/topic/4883/adab

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nes “limpias”; especialmente de “Farai un vers de to” más), los goliardos, Richard de Hampole, etc.
dreit nien”, francamente original. Hay que ad- Como en el caso de Ovidio, es plausible y detec-
vertir, no obstante, que según Riquer utiliza una table su presencia, pero por sí solos no dan razón
versión poco fiable, sospechosa, de ese texto. de la “explosión” textual trovadoresca.
d) Eric Köhler o la lectura sociológica.
Simplificando mucho su aportación, el amor D. Conclusión: las dos tradiciones
cortés de los trovadores y del roman courtois re- En la Literatura europea han convivido siem-
sultarían de una sublimación de las aspiraciones pre dos tradiciones de representación de la mu-
de los jóvenes guerreros en las cortes nobiliarias jer: la idealizante y la misógina. No se trata de
del Mediodía francés. En los castillos había más opciones retóricas alternativas sino simultáneas.
hombres que mujeres. Normalmente, una sola Es más, no es extraño encontrar en un mismo
domina y varios donceles, que hacían allí (con poeta el recurso a ambos paradigmas.
el dominus, amigo o pariente de la familia) su a) Tradición misógina
aprendizaje como caballeros. Éstos constituían El tópico galénico de que la mujer es una
una pequeña corte, en la que se ejercitaban como criatura imperfecta (fría y húmeda, al revés que
amadores sirviendo y cantando a la domna. el varón) se repetirá en la Tradición Occidental
e) Origen clásico: Ovidio y su Ars amatoria hasta la saciedad. En la lírica, además, la dama
Es indudable que todos los trovadores leye- será culpable –por ingrata- de las desventuras del
ron con más o menos profundidad los textos de amador. Y en la Literatura satírica, blanco de todo
Ovidio, que precisamente en el siglo XII conocen tipo de invectivas. Veamos algunos ejemplos:
una revalorización. Pero los elegíacos latinos y En la Literatura sapiencial: Dice Sócrates, en
las obras amatorias del Sulmonense no dan cuen- Bocados de oro (ms. 39 fondo San Román de la
ta del imaginario feudal del amor cortés y mucho RAH), uno de los textos más difundidos de la
menos de la sofisticada elaboración literaria y Literatura sapiencial europea:
musical de las cansós occitanas.
f) El catarismo o la lectura de los textos en Dixo a vn su deçiplo sy non puedes escusar las
clave simbólica. Vale para el catarismo lo mismo mugeres / v∫a dellas commo el que comme dela
que para quienes ven en la fin’amors una descar- mala vjanda que nola comme sy non por nesçesy-
nada, audaz e irreverente expresión de la pasión dad / & no come mas de quanto mata la fanbre.
amorosa, también en su dimensión física. [...]
Siento prevención ante la “claridad” con que // las mugeres son lazo parado ??? [ilegible] que
a veces percibimos sentidos ocultos, enmascara- non cae en él syno el engañado // vjo socrates a
dos, pues temo que muchas veces acabemos en- vna muger que leuaua fuego & dixo el leuador
contrando lo que buscábamos, cayendo no pocas es peor que lleuado que lo vno es claro & lo otro
veces en esa bestia negra de la historiografía que secreto // & vjdo vna muger enferma & dixo el
algunos han llamado presentismo. mal queda conel mal / & vjdo
Con el catarismo sucede igual, con el agra- /fol. 131r/
vante de que no sabemos prácticamente nada de a vna muger muerta & otras que la llorauan &
la doctrina de los cátaros. Y lo poco que conoce- dixo duélese el mal por el mal que pierde el mal
mos se aviene mal con la lírica amatoria de los // & vjo vna moça que aprendia escreijr & dixo
trovadores. Por otra parte, en la lírica religiosa de acreçentar en el mal // quien quisyere estonçes
los trovadores provenzales, que existe aunque se estorçer enlos engaños non odedesca ala muger.
le preste poca atención, no hay el menor atisbo la nesçiedad del omne es conosçida en tres co∫as
de heterodoxia de ningún signo. // por non aver cuydado de enderesçar a∫i mesmo
g) La vitalidad de la propia tradición latina // & por no contrallar la su cobdiçia // & por gu-
tardoantigua y medieval: Venancio Fortunato (s. jar∫e por ∫u muger enlo que non sabe // & dixo
VI). Escuela de Chartres, s. XII (otro “renacimien- a∫us dezjplos non obedesca njnguno a muger

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Fin’Amors-Amor Cortés: la mujer en la literatura medieval
por njnguna maña // & dixeronle alguno de nos por sola tema regidas,
a buena hermana o buena madre es bjen delas reparten sus beneficios. (apud Archer, 2000: 408)
obedeçer & dixo abondenos lo que vos dixe // &
vjo vna muger que se afeytaua & dixo la muger es Aunque Torrellas no fue especialmente origi-
commo fuego que por muchiguar enla leña arde nal ni virulento, su poema fue mal recibido, y
mejor // & dixeronle por que dizes delas mugeres ocasionó una serie de réplicas (al menos, seis),
que le llevaron a él mismo –que probablemen-
que ∫i por ellas non fue∫e tu non serias njn otros
∫abios & dixo socrates la muger es tal commo la te no esperaba que alguien se tomara “en se-
palma en que a espjnas que ∫i omne se allega a rio” su sátira- a retractarse y a componer su
Razonamiento en defensión de las donas (recogido
ellas lj∫ianle pero lleuan buen fruto // otro le dixo
por que fuyes delas mugeres & dixo porque fu- en el Cancionero de Herberay), donde se excu-
yen ellas del bjen // el gouernado por mugeres essa atribuyendo sus coplas al enfado causado por
muerto maguer sea bjuo // una dama ingrata. Yo no sé si ahí es sincero o
no Torrellas. Lo que me interesa es que un mis-
Coplas satíricas. En el propio corpus trova- mo autor puede trabajar con los dos códigos, el
doresco provenzal encontramos ejemplos de misógino y el idealizador, sin ningún problema.
maldits, un subgénero a medio camino entre la
cansó y el sirventés, y que se caracteriza, como b) Tradición idealizante
indica su nombre, por hablar mal de la dama; ha- Los principales hitos de esta tradición son los
bitualmente, reprochándole su desdén. Y, como trovadores y sus herederos: los estilnovistas y el
no podía ser de otro modo, se utilizan los topoi petrarquismo.
de siempre sobre la doblez de las damas. Cerverí Dice Dante, en la Vita nuova:
de Girona, de “Lo vers de la falsa fenbra”, dice
en el “Mig vers car e vil”: “ton hom’s deu de vil Damas que tenéis entendimiento de amor,
femna guardar […] car femnas vils an natura quiero hablar con vosotras de mi dama,
de vibres”. (apud Isabel de Riquer, 1994: 37). Y no porque crea agotar su alabanza,
Bernart de Ventadorn, en la celebérrima Lauzeta: sino para desahogar la mente conversando.
“De las dompnas me desesper; / ja mais en lor me Digo que cuando pienso en su valor,
fiarai… (apud Archer, 2000: 419). tan dulce Amor se me hace sentir,
Paradigmático me parece el caso de Pere que si entonces no perdiera el atrevimiento,
Torrellas (¿1410-1486?), poeta cancioneril bi- con mi hablar haría que se enamorase la gente.
lingüe (castellano-catalán) del siglo XV, here- Dante, Vita nuova, rima XIX
dero, por partida doble, de la tradición cortés
trovadoresca. El Cancionero de Estúñiga y quince Ese valor es el pretz de los trovadores proven-
testimonios más nos han transmitido sus Coplas zales. Justamente, ese pretium o prez es aquello
de las calidades de las donas (anteriores a 1458), por lo cual la dama merece ser servida y amada.
buen ejemplo de la invectiva misógina. Se lee en Un conjunto de virtudes corteses que la convier-
la primera de las trece coplas que presenta el tes- ten en la gensor, la más perfecta de las damas.
timonio de Estúñiga: En el siglo XV encontramos en la religio
amoris otra forma de sublimación de la dama: la
Quien bien amando persigue aplicación a la Lírica amorosa del paradigma re-
dona, a sí mesmo destruye, ligioso; especialmente, del litúrgico. Así, la dama
que siguen a quien las fuye será una deesa y el amador un devoto fiel. Por
e fuyen de quien las sigue; otra parte, los cancioneros recogen bastantes go-
non quieren por ser queridas zos, salmos y hasta misas de amor, que no tienen
nin galardonan servicios, nada de irreverente, pero sí todo de idealización
Mas todas, desconoscidas, de la mujer amada.

Revista Cálamo FASPE nº 62 • julio-diciembre 2013 • Página 94


ESTUDIOS EN HOMENAJE AL PROFESOR MARTÍN DE RIQUER
Fin’Amors-Amor Cortés: la mujer en la literatura medieval

La Celestina: nada tiene de blasfemia el que juntos el oriente y el ocaso,


“Melibeo soy, a Melibea adoro” de Calisto. Es la lumbre y sombra fría,
justamente una parodia del tópico de la religio serás sin duda síncopa del día. (vv. 1572-1577).
amoris de la poesía cancioneril, un procedimien-
to que en el XVII ya no se entiende y ocasiona Para concluir, una muestra más, posterior
la única intervención censora sobre el texto de a la gran fractura -quizá la única- que experi-
Rojas. menta la Tradición Occidental, la Ilustración-
Y un botón de muestra del Siglo de Oro. Romanticismo. Aun así, los principales topoi
Calderón, en La vida es sueño, recoge este topos líricos van a permanecer inalterados, como
de la mujer obra maestra del Creador: Hollywood se encarga una y otra vez de recor-
Segismundo, en su primera estancia la Corte, darnos. Cedamos, sin embargo, la palabra, al
le confía a Clotaldo sus impresiones nada más mejor de nuestros poetas románticos:
despertar:
Hoy la tierra y los cielos me sonríen,
Nada me ha suspendido, hoy llega al fondo de mi alma el sol,
que todo lo tenía prevenido. hoy la he visto..., la he visto y me ha mirado...
Mas, si admirar hubiera ¡hoy creo en Dios!
algo en el mundo, la hermosura fuera Bécquer, Rimas, XVII
de la mujer. Leía
una vez en los libros que tenía, BIBLIOGRAFÍA
Archer, Robert (2000): “Las coplas De las calidades de
que lo que a Dios mayor estudio debe las donas de Pere Torroella y la tradición lírica catalana”,
era el hombre, por ser un mundo breve; en Boletín de la Real Academia de Buenas Letras de Bar-
celona, 47, 405-423.
mas ya que lo es recelo Bezzola, Reto (1944-67): Les origines et la formation
la mujer, pues ha sido un breve cielo, de la littérature courtoise en Occident (500-1200), 5
vols., París, Champion.
y más beldad encierra Lazar, Moshé (1964): Amour Courtois et Fin’Amors,
que el hombre, cuanto va de cielo a tierra. (vv. París, Klincksieck.
Le Gentil, Pierre (1963): La littérature française du mo-
1558-1570) ten âge, París, Armand Colin.
Marrou, Henri-Irénée (1997): Les troubadours, París,
Seuil, [1971]. En italiano en: I Trovatori, Milán, Jaca
Y unos versos más adelante dice a Rosaura: Book, 1983.
Riquer, Isabel de (1994): “Tota dona val mays can le-
tr’apren: Las Trobairitz”, en Mujeres y Literatura, Barce-
Oye, mujer, detente; lona, PPU, 19-38.
no juntes el ocaso y el oriente Riquer, Martín de (20014), Los trovadores, 3 vols.,
Barcelona, Ariel [1975].
huyendo al primer paso;

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