EL LLAMADO DE GEDEÓN EN LA BIBLIA, PRÉDICA SOBRE VIDA DE

GEDEÓN
Los hombres de Gedeón escogidos en las aguas

Prédica sobre el llamado de Gedeón en la Biblia, Héroe de la fe, ¿Quién era Gedeón en la
Biblia?

Gedeón es una de los personajes bíblicos de quien, probablemente escuches poco en las
enseñanzas y predicaciones, pues se habla mucho más de Abraham, David o Pablo que sobre
este varón llamado Gedeón, pero que también es un héroe de la fe.

Hay muchos héroes de la fe como Gedeón de los cuales se habla poco. Supongo que podría
pensar en ellos como los “no tan ricos y famosos” del mundo antiguo: Personas como usted y
yo, hombres y mujeres comunes que hicieron cosas poco comunes porque confiaron en las
promesas inmutables de Dios. Podemos MANTENER VIVA LA HISTORIA si aprendemos las
lecciones que sus vidas nos brindan y las ponemos en práctica.

Nos concentramos en un tipo normal llamado Gedeón. No es muy impresionante a primera

vista, pero toma algunas decisiones que se derivan de su fe en Dios. Tan significativa es la
marca que este hombre tan común hizo en su tiempo que aparece en Hebreos 11 junto con los
que mueven y sacuden el Antiguo Testamento.

Sigue la historia de “el llamado de Gedeón”, mientras trabajamos en Jueces 6 al 7, donde

encontramos un manual sobre la confianza en Dios. Aquí hay seis lecciones que nos ayudarán a
confiar más en Dios. Aprendamos de “el llamado de Gedeón”.

I. DIOS USÓ UN TIEMPO DIFÍCIL PARA EL LLAMADO DE GEDEÓN EN LA BIBLIA

Dios usa tiempos difíciles para llamar nuestra atención (Jueces 6: 1-6)

Al abrir Jueces 6, encontramos a la nación de Israel saliendo de una época de relativa

tranquilidad. Las facturas están pagadas, los niños se están portando bien y el negocio va bien.
Rosas que suben de todo. Y como suele sucedernos a todos en esos momentos, Israel se olvidó
de Dios. Se volvieron autosuficientes. No necesitaban a Dios. Así que el Señor sacudió las cosas
al despertar a un enemigo contra ellos para mostrarles lo difícil que puede ser la vida sin Él.

El versículo 1 dice que los israelitas hicieron lo malo ante los ojos del SEÑOR. Así que el SEÑOR
se los entregó a Madián por siete años. Debes saber que los madianitas eran extremadamente
poderosos y oprimieron a los israelitas sin piedad.

Cada año, alrededor de la época de la cosecha, los nómadas madianitas invadían Israel. Y el v. 5
nos dice que vendrían como langostas, devastando la tierra. Lo que no pudieron llevar consigo
lo destruyeron. La Biblia informa que fue tan terrible que muchos israelitas dejaron sus hogares
para vivir en cuevas y fortalezas, temiendo por sus vidas.

Esto continuó durante siete años. Finalmente, los israelitas clamaron al Señor por ayuda. ¿Por
qué esperaron tanto para volverse al Señor? Porque se parecen mucho a nosotros: Esperaron
hasta que se resolvieron todas las opciones posibles y no pudieron aguantar más.

El versículo 6 nos dice que Israe¡”se empobreció a causa de Madián, y los israelitas clamaron al
SEÑOR. ¿Cuántas veces nos han llegado circunstancias difíciles y nunca nos detenemos a
preguntarnos qué está planeando Dios para nosotros en esas circunstancias? En cambio,
resistimos, pensando que podemos manejarlo por nuestra cuenta.

Aprenda esto de Gedeón: Cada experiencia en la vida es una prueba. Y cada prueba en la vida
del pueblo de Dios está diseñada para acercarnos más a Dios.

Este es el punto: Cuando lleguen tiempos difíciles, en lugar de mirarlos como si Dios te
estuviera castigando, trata de verlos como un regalo de la gracia de Dios.

Proverbios 3: 11-12: Hijo mío, no desprecies la instrucción del SEÑOR, ni aborrezcas su

disciplina; 12 porque el SEÑOR disciplina al que ama, como un padre, el hijo en el que se
deleita. Él te ama demasiado para dejarte seguir viviendo como eres. Anhela estar en el centro
de tu vida. Por eso, Él tiene designios para nuestros problemas, y siempre son para nuestro
bien.

CS Lewis lo dijo así: “Dios nos susurra en nuestros placeres, habla en nuestra conciencia, pero
grita en nuestros dolores. Es su megáfono para despertar a un mundo sordo”.

En este tiempo difícil, Dios tuvo la atención de todo el pueblo de Israel, quienes clamaron a
Dios, pero también fue el momento para que Dios hiciera el llamado a Gedeón.

II. DIOS MIRÓ MÁS DE LO QUE MIRABA GEDEÓN DE SÍ MISMO (6: 7-12)

Lo maravilloso de Dios es que aunque regresamos lentamente a Él, Él nunca tarda en

respondernos. Los versículos 7-8 nos muestran que cuando clamamos a Dios, Él se mueve con
misericordia y amor hacia nosotros. Nos dice la verdad y comienza a trabajar entre bastidores
para ayudarnos. Para Israel, primero envía a un profeta anónimo para llamarlos de vuelta a la
entrega total y la devoción total.

CON EL LLAMADO DE GEDEÓN EN LA BIBLIA, DIOS NOS ENSEÑA QUE VE MÁS QUE
NOSOTROS

Pero su plan también incluía a un hombre de lo más improbable llamado Gedeón. Nos
encontramos con Gedeón en el verso 11 donde está trillando un poco de trigo en un lagar para
guardarlo de los madianitas.

Algunos de ustedes saben esto, pero los chicos de la ciudad no. Normalmente, querrá trillar el
trigo al aire libre para que el viento pueda llevarse la paja. Pero al parecer, Gedeón ha sido
picado antes, por lo que se esconde en un lagar subterráneo, con la esperanza de desviar la
atención de los madianitas. Es un espectáculo lamentable, lleno de frustración, desánimo y
miedo.

En caso de que te preguntes si Dios tiene sentido del humor, lee el versículo 12: Entonces el
ángel del SEÑOR se le apareció y le dijo: “El SEÑOR está contigo, varón esforzado y valiente”.
¿No te imaginas a Gedeón por aquí como el hombre valiente al que se dirigía el Señor? ¿Dios
estaba siendo sarcástico? ¿O vio más de lo que vio Gedeón? Creo que Dios vio lo que estaba a
punto de hacer con Gedeón. Ya era hora de que Gideon lo viera también.

Oigan, hermanos y hermanas, ¿Saben quiénes son realmente? Una de las mentiras más
grandes que nos decimos a nosotros mismos es que Dios solo usa personas especiales. Si eres
un creyente nacido de nuevo, eres hijo de Dios (Juan 1:12), Su amigo (Juan 15:15) y Su obra
maestra (Efesios 2:10). Has sido justificado (Rom. 5: 1), libre para siempre de la condenación de
Dios (Rom. 8: 1).
Eres adoptado en Su familia (Efesios 1: 5) y tu ciudadanía está en el cielo (Filipenses 3:20).
¡Perteneces a Dios (I Cor. 6:20), y nunca debes separarte de Su amor (Rom. 8:35)! ¡Y tienes
todo de Él que necesitas para la vida y la piedad! Dios sabe quién eres, incluso si no lo sabes. Y
trabajará para ayudarte a ver tu verdadera identidad.

III. EN EL LLAMADO DE GEDEÓN, DIOS LO MOTIVÓ CON SU PRESENCIA (6: 13-24)

El llamado de Gedeón nos enseña que Dios nos motiva y nos da confianza con su presencia

Después de ser llamado un varón esforzado y valiente, Gedeón le pregunta a Dios: “Por favor,
señor, si el SEÑOR está con nosotros, ¿Por qué ha sucedido todo esto? ¿Y dónde están todas
sus maravillas que nuestros padres nos contaron?” (v. 13) La conclusión de Gedeón fue que el
Señor los había abandonado.

El versículo 14 registra algo que debe haber arrasado la sensibilidad de Gedeón. Dice que el
Señor se volvió hacia él. Miró a Gedeón a la cara y dijo: “Ve con las fuerzas que tienes y libera a
Israel del poder de Madián. ¿No te envío yo?”.

Gedeón todavía no está haciendo los cálculos en esta ecuación divina, por lo que observa lo
poco impresionante que es su currículum. Gedeón es el eslabón más débil d’ su clan. Gedeón
es el más joven de su familia. No tiene ninguna autoridad para llamar a la caballería de su
propia tribu, y mucho menos de los demás.

Dios confirma sus prioridades con su presencia en el verso 16, “Yo estaré contigo”, le dijo el
SEÑOR. “Derribarás a Madián [como si fuera] un solo hombre”. A Gedeón se le da una comisión
innegable, se le informan los notables resultados de antemano y se le promete la asociación sin
igual del Señor mismo.

Después de una confirmación adicional de que de hecho estaba tratando con Dios mismo, el
versículo 22 nos dice que las piezas encajaron en su lugar para Gedeón. Grita: “¡Oh, no, Señor
DIOS! ¡He visto al ángel del Señor cara a cara!” Sus temores consolados, su llamado afirmado.
Así que construye un altar al Señor.

Gedeón necesitaba un encuentro personal con Dios. Dios lo encontró justo donde estaba,
dándole una sensación de paz y propósito por su presencia prometida. Entre los soldados de
Napoleón se decía: “Cuando Napoleón toma nuestras manos y nos mira, nos sentimos
conquistadores”. Hay algo que cambia en nosotros cuando escuchamos la voz de Dios y
sentimos su presencia maravillosa. De repente, sus prioridades se convierten en lo más
importante del mundo. Gedeón estaba listo para la primera prueba.

IV. GEDEÓN DEBÍA PONER SU VIDA PRIVADA Y LA DE SU FAMILIA EN ORDEN (6: 25-
32)

El llamado de Gedeón nos enseña que la fidelidad privada es un requisito previo para ser usado
públicamente

Antes de que Gedeon pueda ser usado públicamente, primero debe limpiar su propio patio
trasero. Su familia estaba rompiendo el primer y segundo mandamiento, con ídolos de Baal en
su propiedad. Entonces, la primera asignación del Señor fue tomar el toro especial de siete
años de su padre y derribar los ídolos. Luego, Gedeón debía sacrificar ese preciado toro usando
la madera del ídolo destruido.
¿Qué sentido tiene decirnos esto? Si quiere aprender a confiar en Dios, primero debe poner su
propia casa en orden. Antes de que Dios pueda usarte poderosamente, Él debe ser
magnificado en tu propia vida, en tu propia casa.

La adoración privada nos prepara para el poder público de Dios. No hay atajos. Entonces, ¿Hay
algo a lo que te hayas estado aferrando? ¿Hay algún pecado al que te estés aferrando? Derriba
a tus ídolos. Confiesa tu pecado. Enfréntalo y vuelva a la plena obediencia a Dios.

¿Moverá las cosas para hacer esto? Seguro que lo hará, pero Dios honrará a quienes lo honren.
Le sucedió a Gedeón. Evidentemente, este toro era un ganado de cría comunitario propiedad
de la familia de Gedeón. El versículo 30 informa que los hombres de la ciudad le dijeron a Joás:
“Saca a tu hijo. Debe morir”. Pero el acto de Gideon ya estaba provocando el cambio. Su padre,
Joás, se despertó a la verdad y se enfrentó a los hombres, preguntando en el vers. 31:
“¿Contenderéis vosotros por Baal? … Si él es un dios, contiendo por sí mismo con el que
derribó su altar”.

V. GEDEÓN DIO UN GRAN PASO DE FE

El llamado de Gedeón también nos enseña que Dios es paciente con nuestro proceso de fe (6:
33-40)

Si esto fuera una película, cuando llegáramos al v. 33, estaría sonando música siniestra. Dice
que los madianitas y sus socios se están preparando para hacer su incursión anual. Pero en
lugar de encogerse en una cueva, el verso 34 dice que el Espíritu del SEÑOR envolvió a Gedeón,
y él tocó el cuerno de carnero y los abiezeritas se reunieron detrás de él.

Gedeón había dado un gran paso de fe en su fidelidad privada y ahora el Espíritu de Dios
estaba atrayendo a personas de todas partes. ¡Aparecen treinta y dos mil hombres, listos para
luchar!

Pero mira esto. Incluso después de su encuentro con el Dios Todopoderoso, a pesar de que
había sido obediente para limpiar la tienda en casa, y aunque el Espíritu Santo le estaba dando
poder, Gedeón todavía luchaba con las dudas. Sabe que Dios ha prometido salvar a Israel a
través de él, pero se mira en el espejo y el reflejo que ve no parece alentador.

Note los versículos 36-37. Gedeón dice al SEÑOR: Si librares a Israel por mi mano, como dijiste,
37 pondré aquí un vellón de lana en la era. Si solo hay rocío sobre el vellón y toda la tierra está
seca, sabré que librarás a Israel con mi fuerza, como dijiste.

Me encanta lo amoroso, tierno y paciente que es Dios con nosotros. Gedeón está haciendo un
trato con Dios. Gedeón quiere una señal de confirmación. Y la Biblia dice que a la mañana
siguiente, Dios se la dio: El vellón estaba mojado y la tierra estaba seca. Incluso cuando este
“Tomás incrédulo” del Antiguo Testamento invierte la prueba en el v. 39, pidiendo que el vellón
se seque y la tierra se cubra de rocío, Dios en su gracia confirmó Su poder a Gedeón. Nuestro
Señor estaba convirtiendo a Gedeón en un siervo totalmente convencido, haciendo
desaparecer toda duda de Gedeón con una amable tranquilidad.

VI. GEDEÓN ENTENDIÓ QUE LA VICTORIA DEPENDE DEL PODER DE DIOS Y NO DEL
HOMBRE (7: 1-8)

Gedeón ahora está listo para la batalla, pero Dios tiene otros planes. En Jueces 7: 2, el Señor le
dijo a Gedeón: Tienes demasiada gente para que Yo te entregue a los madianitas, [1] o de lo
contrario Israel se jactaría diciendo mi mano me ha salvado.
Dios procede a darle a Gedeón un par de pruebas para reducir el número. La primera prueba
eliminó a 22.000 hombres del ejército, dejando 10.000; sin embargo, aun Dios dijo que aun
eran demasiados.

GEDEÓN LLEVA A SUS HOMBRES A LAS AGUAS PARA SER PROBADOS

Gedeón y los 300 hombres

De modo que en el v. 4, se dio una segunda prueba. Dios le dice a Gedeón que lleve a sus
hombres al agua y los deje beber. Gedeón debe haber tragado saliva cuando empezó a contar
cuantos fueron descalificados: 9700 estaban fuera, dejando solo 300 hombres.

¿Te imaginas cómo se sintió Gedeón? El capítulo 8 nos dice que el ejército madianita contaba
con 135.000 hombres. Eso es 450 madianitas por cada soldado israelí. ¡Dios quiere que el
ejército de Gedeón se enfrente a esta horda con apenas 300 hombres!

Dios creó una situación imposible por la debilidad humana para exaltar su propia fuerza. ¡Ésta
es su especialidad! ¿Qué dijo Jesús en Lucas 18:27? “Lo que es imposible para los hombres, es
posible para Dios”.

Aquí hay una buena lección para nosotros: El logro de los propósitos de Dios no está
determinado por el resultado final de una hoja de finanzas, o el tamaño de nuestra
congregación o la eficiencia de nuestros planes.

Tenemos que ocuparnos de todas las cosas mencionadas anteriormente, pero la verdad es que
Dios está buscando glorificarse a sí mismo en la tierra a través de personas que dependen
completamente de Él, que creen que Él está con ellos y están listas para cumplir los propósitos
de Dios en el nombre del Señor.

Dios no necesita nuestro voto sobre esto. No nos necesita en absoluto; pero nos invita a
unirnos a él para hacer su voluntad. Cuando lo hacemos, cosechamos los beneficios y Él recibe
la gloria. Ocurrió en Israel. En una de las estrategias de batalla más extrañas de la historia, los
300 salieron con trompetas, antorchas y cántaros al encuentro de los madianitas
merodeadores.

Dios envió confusión a las filas del enemigo para que comenzaran a atacarse entre sí. Cuando
terminó, 120.000 madianitas se habían matado unos a otros y los otros 15.000 huyeron. Se
terminó. Dios había respondido a las oraciones de Israel. Usó a un hombre común llamado
Gedeón que creía en Dios.

Conclusión sobre el llamado de Gedeón en tiempos difíciles

Dios usa tiempos difíciles para llamar nuestra atención. ¿Está prestando atención? Dios
siempre ve más que nosotros. ¿Te ves a ti mismo como Dios te está viendo?

Dios nos motiva con su presencia. ¿Puedes sentir Su presencia contigo ahora, instándote a
confiar en Él? La fidelidad privada es un requisito previo para que Dios nos use en público. ¿Hay
cosas en tu vida, en tu hogar, que deben desaparecer para que Dios pueda moverse con poder
en tu vida?

Dios es paciente con nuestro proceso de fe. El éxito está determinado por el poder de Dios, no
por el nuestro. ¿Confiarás en Dios hoy, con tu vida, con tus hijos, con tus finanzas, con tus
decisiones, con tu esposo o esposa?. Estas son las lecciones en las cuales nos hace meditar la
historia de Gedeon