Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 4

Centro Educativo María

Inmaculada
Área de: Educación Artísticas
Maestro: Cristian Matos
Tema de investigación para 4to.de Secundaria
(Administrativo, Mercadeo e Informática)

“Diseño textil y de la Moda” Textile: Sewing Items Still Life


Sus variantes industriales

¡Texto tomado del muro de la revista, Oh!

 La industria de la moda en República Dominicana


La moda dominicana presenta un alto potencial de exportación y a la vez tiene un gran reto
por delante, y es crear una marca país. Una meta que puede ser posible con el esfuerzo y la
colaboración del sector público y privado.
La moda suele ser calificada, en ocasiones, como banal o superficial y es que la mayoría
podría juzgar que se trata solo de prendas y accesorios para embellecer la figura femenina o
masculina. Argumento que obvia por completo cómo esta industria representa una fuente
de empleo para millones de personas y elude el poder que posee de mostrarnos las
costumbres de una época o de un grupo social.
«Quiero ser el catalizador de toda una época, un reflejo puntual de los cambios adaptados a
las nuevas formas de vida», decía Yves Saint Laurent.
Sin lugar a dudas, la moda y la cultura se encuentran intrínsecamente unidas, es la
representación del mundo visto desde la óptica del diseñador y, por tanto, se convierte en el
reflejo de la sociedad del momento.
Es un fenómeno social que transparenta la cultura de un país y coloca de manifiesto el estilo
de vida de las personas.
Casa París, iniciada por Rafael Valentín Peña, constituye uno de los primeros referentes en
cuanto a antecedentes en la historia de la moda en República Dominica se refiere, un atelier
dedicado al arte del buen vestir masculino y femenino y que se consagraba, además, a la
confección de diseños de modas, según nos apunta el diseñador Carlos De Moya.

3 BILLONES DE DÓLARES ES EL VALOR DEL MERCADO GLOBAL DE LA


INDUSTRIA DE LA MODA, LO QUE EQUIVALE AL 2 % DEL PRODUCTO INTERNO
BRUTO MUNDIAL.

Estas referencias históricas datan de la década de los 30, época en la que ejerció la
presidencia el dictador Rafael Leónidas Trujillo y quien se convertiría en uno de los clientes
asiduos de este famoso taller dominicano, al igual que el dictador cubano Fulgencio Batista.

El historiador Mario Read Vittini afirma en su libro Trujillo de cerca, que El jefe, como era
apodado, observaba como una necesidad el presentarse en público perfectamente
arreglado, fresco y lozano.

CON LA FINALIZACIÓN DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL EN 1945 Y PASADOS


LOS AÑOS 50, IMPORTANTES SECTORES FLORECIERON, ENTRE ESTOS LA
INDUSTRIA DE LA MODA.

El frac, el smoking, el chaqué y el bicornio se convirtieron en el símbolo del dictador para


mostrar su poder.

Una particularidad que agregó a su servicio este atelier y que hoy día no representa novedad
alguna, era la técnica de ‘tomas de medidas’, esta propuesta se convirtió en una insignia
única de venta, asegurándoles a sus clientes un producto que entallaría perfectamente al
cuerpo.
Moda dominicana: Los 60 un antes y un después
La década de los 60 a nivel mundial se encuentra representada por un crecimiento
económico notable, avances científicos-tecnológicos y grandes cambios sociales que
permitieron mejorar las condiciones de la colectividad.
No podemos hablar de un antes y un después sin mencionar a los diseñadores Oscar de la
Renta y Farah Cabrera.
Esta década representó un punto de inflexión para el diseñador Oscar, quien labró su estilo
propio e introdujo en el país presentaciones de sus diseños con maniquíes, acrecentando de
este modo el interés de la mujer dominicana por la moda y distinguiendo en sus creaciones
detalles étnicos, así como el uso de colores y estampados llamativos.
Es en este decenio cuando nacen importantes firmas como: Valentino, Yves Saint Laurent,
Ralph Lauren y es en este lapso que Farah Cabrera regresa al país, lanzando en 1968 su
propia línea de ropa, lo que la convierte en pionera de esta industria a nivel local.

Presencia de retos en el desarrollo de la industria


Para el diseñador Carlos De Moya, los desafíos continúan siendo los mismos: poca
colaboración del Estado, falta de protección para el diseñador, precios elevados en los
insumos, complejidad en cuanto a exportaciones, etc. Información que da a la par con lo
expresado en 1987 por la diseñadora Mercy Jácquez en una publicación del suplemento
semanal Isla Abierta, dirigido desde sus inicios hasta el momento de su muerte por el poeta
Manuel Rueda, en el que Jácquez manifestaba la necesidad de contar con el apoyo del
comercio, las industrias y el pueblo.
Además, denotaba la falta de oportunidad de los industriales hacia los diseñadores criollos,
así como los altos precios de la materia prima.
La industria de la moda representa la oportunidad perfecta para mejorar los indicadores
económicos en el país y colocarnos a la par de países expuestos anteriormente como
Bangladesh, Perú o Colombia, (país suramericano que concentra el 74 % de las empresas
del sector de industrias creativas) o España, quienes en el 2017 generaron el 2,9 % del
Producto Interno Bruto (PIB) del país con la industria de la moda.
El Gobierno tiene un aliado en la moda para generar empleos y aumentar el potencial
exportador, pero mientras las entidades públicas y privadas se deciden a apoyar este sector,
los diseñadores tienen el gran reto de crear y proponer un plan donde la sostenibilidad sea
fundamental y donde se perciba cómo la industria puede dinamizar el mercado y crear
mejores niveles de competitividad. Un accionar distinto al recorrido en este tramo histórico
donde el compromiso y la aspiración a que la moda esté presente como marca país sea la
meta.
Aún no contamos con una Ley de Moda (INMODA RD trabaja en ello) que regule el
contrabando de ropa o que asegure la participación de un diseñador nacional en cada
tienda del país.
República Dominicana lo tiene todo para convertirse en un destino de moda, contamos con
importantes diseñadores que han labrado, a través de esfuerzo y persistencia, un nombre
que es símbolo de calidad.
No podemos dejar de mencionar a: Jenny Polanco, Leonel Lirio, Sissy Bermúdez, Elisa
Morató, Mercedes García, Carlos De Moya, Magaly Tiburcio, Giannina Azar, Michelle
Reynoso, entre otros nombres importantes que figuran en la industria.
Esperamos que más allá de un sueño sea una realidad y que la industria de la moda en RD
alcance las plazas locales y la moda mundial, representando nuestra cultura a través de
diseños que reivindiquen nuestras raíces y coloquen de manifiesto la calidad del diseño
dominicano.
«Uno de los avances de moda más significativo lo constituye el evento de DominicanaModa,
gestado por Sócrates Mckinney, Mirka morales y Fidel López , el cual ha logrado
posicionarse como uno de los más importantes en el caribe, una plataforma para mostrar al
mundo propuestas creativas y vanguardistas».

También podría gustarte