Tight end en la NFL: qué posición es y cómo juega

Siete son las posiciones que se encuentran dentro del ataque en el fútbol americano de la NFL, y una de ellas es la de tight end o ala cerrada, que se caracteriza por ser muy versátil en comparación con otras.

Los jugadores que ocupan este lugar se ubican en el extremo de la línea ofensiva. Allí están capacitados tanto para hacer bloqueos como para recibir pases, siendo este el punto clave de su flexibilidad dentro del campo.

A pesar de lo anterior, el ala cerrada tiene una función clave (que no deja de cumplir a pesar de hacer otras) y es la de proteger al quarterback o mariscal de campo bloqueando a los defensivos, además de abrir espacios a los corredores.

En relación al aspecto físico de los deportistas que se desempeñan como tight ends, suelen ser altos y muy fuertes. También poseen manos que les permiten atrapar el ovoide con precisión, habilidad que se entrena a diario.

La National Football League informa en su sitio oficial que esta posición fue cobrando relevancia a medida que pasaron los años, ya que en los inicios de la competición pasaba prácticamente desapercibida, al punto de llegar a estar "en peligro de extinción".

¿Cuáles son los mejores tight ends en la historia de la NFL?

Rob Gronkowski encabeza la lista. El estadounidense recopiló en su carrera 4 Super Bowls (3 con los New England Patriots y 1 con los Tampa Bay Buccaneers). Una de las marcas que dejó antes de retirarse fue el de tener más recepciones de un tight end en la historia del Super Bowl, con un total de 23.

ESPN hizo un extenso informe sobre las cualidades de este deportista, el cual fue "una pesadilla recurrente para muchos apoyadores y jugadores de perímetro en la NFL". Además se destaca que "no había una forma adecuada, técnica o cobertura que funcione el 100% para neutralizarlo".

Antonio Gates, Shannon Sharpe, Tony González, Jason Witten y Travis Kelce acompañan a la figura en el listado.

Gates, que a finales de 2023 fue elegible para ingresar al Salón de la Fama, jugó 16 años con Los Angeles Chargers y anotó 116 recepciones de touchdown. Además conserva en sus manos el récord de juegos con más touchdowns múltiples hechos por un ala cerrada (con 21).

Shannon Sharpe tuvo como mejor temporada en la NFL a la tercera que disputó, ya que allí anotó 53 recepciones para 640 yardas. "Mi vida durante 14 años en la Liga Nacional de Fútbol fue el fútbol", reveló en una entrevista y añadió: "Comía, bebía, dormía y pensaba en fútbol. Eso es todo lo que quería hacer. No tomaba vacaciones, no era dueño de un yate, no tenía muchos pasatiempos aparte de hacer ejercicio y prepararme para la próxima temporada".

Tony González, por su parte, mantuvo marcas de recepciones de touchdowns (con 111) y recepciones en total de yardas (15.127) para un tight end. Sin dudas, lo que más se recuerda es la constancia que tenía, ya que en 17 temporadas, sólo faltó a 2 partidos.

Jason Witten, a su vez, disputó 15 temporadas en la liga y todas fueron en los Dallas Cowboys. Es allí donde se posiciona como el líder indiscutido de todos los tiempos en recepciones, con 1.152. Además ostenta 12.448 yardas recibidas, la mayor cantidad en su franquicia y la segunda a nivel de la NFL.

Travis Kelce es el nombre más contemporáneo, pero ya es parte de la historia debido a que lo consideran uno de los mejores tight end de la historia. El nueve veces Pro Bowler y siete veces All-Pro, tiene 11.328 yardas recibidas, la mayor cantidad que un jugador de los Kansas City Chiefs, su equipo, pudo conseguir alguna vez, y la cuarta mayor cantidad para un ala cerrada de la NFL.