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Entrevista

Arte y Teatro

‘Guía de separAcción’: la nueva obra de Aleida que con su típica acidez aconseja por qué a veces es mejor separarse

Vladdo y la actriz Paula Estrada preparan la obra Guía de separAcción, inspirada en Aleida.

La actriz Paula Estrada y el caricaturista Vladdo.

Foto:Teatro Cafam

Tras el éxito de 'Aleida a flor de piel', el caricaturista Vladdo explica en entrevista con EL TIEMPO la esencia narrativa del nuevo montaje inspirado en su icónico personaje. 

Linda Maria Donado RudasPracticante de la Escuela de Periodismo ...
Aleida es una mujer irreverente que no tiene pelos en la lengua para decir las cosas como son. Goza de una inteligencia que le facilita analizar y divulgar, aunque irónicamente no tiene boca, por aquello que las mujeres piensan y no se atreven a decir. 

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Aleida es dueña de sí misma, de sus convicciones y tiene la capacidad de lanzar frases cortas que cultivan una reflexión sobre el amor o las relaciones interpersonales. De esta forma, leerla es aprender y entender la intensa realidad femenina.
Se trata del personaje emblemático del caricaturista y periodista Vladimir Flórez, mejor conocido como Vladdo, que ha inspirado su segunda obra de teatro, llamada ‘Guía de SeparAcción: qué hacer cuando no hay nada que hacer’, se estrenará el próximo 19 de julio en el Teatro Cafam de Bogotá. De nuevo, el montaje es protagonizado por la actriz colombiana Paula Estrada, dirigido por Jorge Hugo Marín y escrito por el mismo Vladdo.
La nueva entrega es muy distinta a ‘Aleida a flor de piel’ (2022), en el que Paula Estrada interpretó también al personaje del caricaturista, y Vladdo fue parte del elenco. Ahora se trata de un monólogo en donde Aleida expresará, sin ningún tabú, los desafíos que conllevan las relaciones, las rupturas sentimentales y cómo salir adelante cuando la separación es inevitable. 
Las boletas para la obra pueden adquirirse en Tuboleta.com, a partir de los 76.700 pesos. Esta nueva parte  contará solamente con cuatro funciones: viernes 19 de julio (8 p. m.); sábado 20 de julio (5 p. m. y 8 p. m.), y domingo 21 de julio (5 p. m.).
Su look ha cambiado, desde cuando nació, en 1997, en un individual de papel en un restaurante de Guayaquil.

El look de Aleida ha cambiado desde cuando nació, en 1997, en un individual de papel en un restaurante de Guayaquil.

Foto:Vladdo

Como parte del estreno, se lanzará el libro ‘Guía de SeparAcción', este miércoles 26 de junio en la Sala de Exposiciones del teatro. El prólogo del libro lo escribió Florence Thomas y el guion de la obra se basa en la reedición del texto que Vladdo escribió 20 años atrás, ‘Manual de separacción’. Además del libro y la obra, los asistentes podrán disfrutar de una exposición de viñetas de Aleida en gran formato.
Vladdo ha logrado que muchas mujeres conecten con lo que expresa este personaje, eso, sin duda, ha sido la razón de su éxito y popularidad. Tanto que Aleida tiene agendas para cada año; el Museo de Arte Moderno de Bogotá le rindió un homenaje cuando cumplió dos décadas de publicación, y, con esta, dos obras de teatro inspiradas en las viñetas.
Los primeros bosquejos e ideas de la creación de este personaje inician cuando el periodista decide abordar temas más transversales, como el amor, y no limitarse solamente en asuntos políticos. Así, en 1999, las viñetas de Aleida empezaron a publicarse en la revista Semana.
Divulgar realidades femeninas aún representa un reto para Vladdo, por lo que una de las formas con las que ha podido superar este desafío es, tal como lo cuenta, estar con las antenas prendidas. Es muy observador y atento a su entorno: cualquier frase de una película o cualquier comentario que lea en una revista le servirá para construir la viñeta de Aleida de la semana. Así le llegan las ideas, y el día que a este artista se le dejen de ocurrir comentarios, dejará de dibujarla. Mientras, hay Aleida para rato.

La obra tratará acerca del divorcio y del amor, temas que desde siempre han sido recurrentes en Aleida, ¿por qué continúa abordando esas temáticas?

Porque ese es el eje del personaje: el amor y las relaciones. Cuando publicamos el primer libro de Aleida en el año 99 hace 25 años, yo le pedí a Gabriel García Márquez un texto para ese libro y me mandó una frase que decía: “Lo único que le falta a Aleida para ser perfecta es un poco amor”.
El día que Aleida sea feliz, ya ahí se acaba el personaje. La vida de Aleida es como un tango. En los tangos a los protagonistas los abandonan, los engañan, se les muere la novia, la esposa, el amor de la vida, pero siempre es un canto al amor. La temática de Aleida es esa: es el amor y las relaciones sentimentales. Entonces siempre se trata de eso, pero la idea era hacerlo de una manera irreverente, distinta, novedosa.

¿Qué desafíos tuvo traer nuevamente un personaje del papel a carne y hueso?

El desafío no es solamente como personaje en teatro, sino desde el inicio mismo. Aleida se lanzó en octubre del año 97. O sea hace 27 años. El principal desafío que yo tenía cuando empecé a hacer el personaje de Aleida es que esa mujer pareciera una mujer, porque crear una mujer desde la perspectiva de un hombre era un reto.
He pretendido siempre que cuando una persona vea a Aleida diga: es una mujer y que cuando una mujer vea a Aleida se sienta identificada. Ese era mi único fin y no que dijeran: “Ay, no. Este es un tipo que habla cosas de mujeres, pero no tiene ni idea. Y por fortuna ese objetivo se consiguió. Aquí en un libro de Aleida metimos una frase que decía alguien: “Aleida dice cosas que todas sentimos, pero que no todas nos atrevemos a decir”.
Hace 27 años cuando yo publicaba viñetas de Aleida, utilizaba un lenguaje que no se usaba mucho en la prensa. Hoy en día claro que se usa más, pero en esos comienzos hablar de orgasmos, hablar de sexo o hablar de infidelidad, era escandaloso. Eso fue uno de los principales retos.

¿Cómo logra empaparse de la realidad femenina para crear este personaje?

Siempre he tenido una muy buena relación con las mujeres. En mi casa cuando éramos niños estábamos mis hermanos, mi hermana, dos tías y yo. Entonces había una mayoría más que calificada y absoluta de mujeres. También cuando estaba en el bachillerato éramos 6 hombres y 16 mujeres, y en los recreos me quedaba hablando carreta con mis compañeras y ellas hablaban de películas, de cine, pero también de novios y yo oía sin saber que, inconscientemente, estaba preparando material para este personaje.

Yo la veía en los ensayos y decía: “Es Aleida”. De hecho, luego de terminar la temporada que duró 4 meses, le tocó tomarse un tiempo para desintoxicarse y encontrarse consigo misma para dejar de ser Aleida. En la casa le decían: 'Usted no es Aleida, es Paula'.

Cuando llegó Aleida a mi vida, después de buscarla un buen tiempo, ya tenía una cantidad de cosas guardas que empecé a desempolvar y que empecé a darles uso. De ahí se desprende esa cercanía con la manera de ver y vivir y sentir de las mujeres.
Pero, por otro lado, yo siempre me he negado a asumir ese rol típico que pareciera que nos obligan a desempeñar, en donde los hombres están a un lado y las mujeres por el otro: que el hombre tiene que ser fuerte, que no puede ser tierno, dulce, que no puede ser cursi, sino serio, debe tener autoridad y fortaleza. Pero, en realidad, los sentimientos son muy similares entre hombres y mujeres, solo que la sociedad no nos permite a los hombres manifestarlos y exteriorizarlos.
Entonces yo dije: "No, esto no puede ser". Siempre me he resistido a eso y desde siempre soy un hombre que llora, que es romántico, sensible, cursi e ilusionado.

¿Qué le exigían a la actriz para que interpretara a la perfección el personaje de Aleida?

Siempre que un actor se mete en la piel de un personaje  conlleva unos riesgos, ¿cuáles son esos riesgos? Que el actor terminara, obviamente, siendo y haciendo su propia versión de ese personaje. El reto es que por un lado la actriz se sienta cómoda en la piel del personaje, y que por el otro mantenga la esencia de ese personaje. Y a veces esas dos cosas se combinan muy bien.
La idea con Paula es que conserve esa escena que logró sobradamente en la primera obra que hicimos, ella se metió en el personaje, se lo gozó y la tenía en la piel. Yo la veía en los ensayos y decía: “Es Aleida”. De hecho, luego de terminar la temporada que duró 4 meses, le tocó tomarse un tiempo para desintoxicarse y encontrarse consigo misma para dejar de ser Aleida. En la casa le decían: “Usted no es Aleida, es Paula”.
Digamos que ahí no hubo ningún reto. La obra es distinta a la anterior, porque la que hicimos con el Teatro Nacional hubo varios actores, yo entre ellos, y este es un monólogo en el que estará sola con el público presentando varios actos en los que aborda distintas temáticas.
La esencia de esta obra es que ella se va a comunicar y va a comunicarse con el público, porque de alguna amanera el público va a terminar teniendo una conexión y participación con la actriz. Al hablar de estos temas de pareja, si uno va con la pareja terminan dándose codazos. Ahí hay una tarea por hacer y es que se logre esa conexión, pero no dudo de que Paula la va a lograr.

Y cuando lanzaron 'Aleida a flor de piel', ¿cómo lo recibió el público?

Por lo que uno veía, la gente que iba salía muy contenta y enganchada con el personaje. Y eso porque obviamente la gran mayoría de los que asisten, sino todos, son personas que conocían a Aleida y saben de qué se trata el personaje. Tenían a algún conocimiento preliminar. Era graciosa la experiencia.

¿La gente le pedía una nueva obra?

Sí, porque además mucha gente que se quedó sin ir, aunque estuvimos tanto tiempo. De hecho, hubo gente que la vio varias veces. Hubo una buena acogida y a la gente le gusta el personaje, además que la actriz es muy buena: es divertida, ocurrente, ingeniosa, tierna, tiene mucha energía y se come ese escenario.

Me imagino que el por cómo recibió el público la primera obra fue lo que los motivó hacer esta nueva entrega de Aleida

Sí, había gente que preguntaba: “Oiga, ¿y cuándo van a volver a lanzar Aleida?”. Entonces decidimos hacer este nuevo montaje.

¿Qué les espera a los que asistan a esta nueva obra de Aleida?

Vladdo y la actriz Paula Estrada preparan la obra Guía de separAcción, inspirada en Aleida.

Vladdo y la actriz Paula Estrada.

Foto:Teatro Cafam

Les espera una sesión de reflexión sobre las relaciones, los hará pensar en qué acertamos y en qué fallamos. La obra es una forma de decirle a la gente que hay decisiones que es mejor tomar por difíciles que parezcan, porque al final del día las decisiones de cerrar capítulos o de terminar relaciones en un momento determinado son más saludables que seguir en relaciones que no son sanas.
Es mejor una buena separación que una mala relación ¿no? Es desmitificar el hecho de que la gente se separe. Muchos se han separado en el mundo y eso no quiere decir que el que se separa es un fracaso en la vida, simplemente es una circunstancia que se da.
La obra es también una manera de ver cómo no llegar a eso. ¿Qué estamos haciendo, de lo que nos está mostrando la obra, que nos está llevando a conducir a un mal final? Las relaciones, por razones obvias, sufren desgates, transformaciones, tienen altibajos, muchos de esos factores son subsanables, pero hay otros que no. Y cuando ya no lo son, ¿qué sentido tiene insistir?
Esta entrega invita a reflexionar sobre el hecho de que separarse es un proceso, no es chévere, pero a veces es lo más saludable y lo más conveniente. Tampoco es una invitación a separarse, sino a darse a cuenta de si su relación llegó a un punto de no retorno. Hay gente que se queda en las relaciones por el sexo, por la plata, por la compañía y prefiere eso a estar solo. Es un poco una vida miserable por no atreverse a tomar esa decisión, ¿vale la pena tener esa vida miserable?

Aleida, el personaje de Vladdo, de nuevo en teatro y con exposición

LINDA DONADO RUDAS 
ESCUELA DE PERIODISMO MULTIMEDIA EL TIEMPO
IG: lindr_9
Linda Maria Donado RudasPracticante de la Escuela de Periodismo ...
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