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Lo entendemos: Puede que el yoga no sea el ejercicio más intenso -al menos, la mayoría de sus formas no lo son- y probablemente no sea lo primero que se te viene a la cabeza cuando piensas en una clase de fitness que quieres probar.
Pero el fitness consiste en salir de tu zona de confort, ¿verdad? Y hay muy buenas razones por las que deberías considerar la posibilidad de añadir el yoga para equilibrar tu rutina de ejercicios.
Esa es la razón original por la que Brendan Rooney, instructor de YogaWorks en Nueva York, probó por primera vez este ejercicio.
"Todo mi programa de fitness se basaba en el esfuerzo, llevando mi cuerpo y mi mente al límite casi todos los días", dice. "Con el tiempo, el constante 'vamos-vamos-vamos, empujar-empujar-empujar, más-más-más' me afectó con varias lesiones, agotamiento y aburrimiento. Necesitaba algo que equilibrara la fuerza que ejercía corriendo y levantando pesas".
Añadir yoga puede hacer maravillas físicamente como opción de entrenamiento cruzado, pero también tiene otros beneficios que notarás también fuera del gimnasio. Aquí tienes 5 razones por las que deberías apuntarte a esa clase de yoga y convertirla también en parte habitual de tu rutina de entrenamiento.
Tu vida sexual podría mejorar
¿Le cuesta eyacular antes de tiempo? El yoga podría tratar la eyaculación precoz. Investigadores de la India compararon durante tres meses a hombres con problemas de eyaculación precoz que practicaban yoga o recibían medicación contra la eyaculación precoz, y descubrieron que todos los del grupo de yoga experimentaron una mejora en el momento de la eyaculación. Eso en comparación con el 82 por ciento de los del grupo de la medicación que experimentaron una mejora.
Además, un estudio de 2011 publicado en el Journal of Sexual Medicine encontró que los hombres que practicaron yoga durante 12 semanas reportaron una mejora de la función sexual en general, incluyendo en las medidas de deseo, la satisfacción con el sexo, el rendimiento, la capacidad de controlar su eyaculación, y su orgasmo.
Los autores del estudio creen que los beneficios del yoga para la vida sexual se deben probablemente a una combinación de factores, como por ejemplo, un mejor tono de los músculos pélvicos, mejoras en el estado de ánimo y una reducción de la ansiedad.
Serás más productivo en el trabajo
Añade un poco de yoga a tu rutina y puede que también te vaya mejor en el trabajo.
Según un estudio reciente de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) sobre 85.000 trabajadores de EE.UU., las intervenciones basadas en la atención plena, como el yoga, pueden mejorar el bienestar de los empleados y aliviar problemas de productividad como el agotamiento.
Según los investigadores, este tipo de práctica puede aumentar la resiliencia mental de los trabajadores, lo que les ayuda a afrontar el estrés. Y esto es especialmente cierto en el caso de las personas que ocupan puestos de alto nivel, que pueden ser más vulnerables al agotamiento.
Es más, un estudio realizado en 2013 con 367 trabajadores de los Países Bajos descubrió que una intervención de seis meses que incluía tanto una sesión de yoga como una sesión de ejercicio general a la semana conducía a una mayor sensación de vitalidad en el lugar de trabajo, con mayores niveles de perseverancia y resiliencia, y menores niveles de fatiga.
Vencerás el estrés
Gran parte de los beneficios del yoga en el lugar de trabajo también pueden relacionarse con su efecto sobre el estrés. Pero sus efectos también pueden ir mucho más allá.
De hecho, los efectos positivos del yoga se han demostrado a nivel celular cuando se trata de reducir el estrés. Un estudio publicado en la revista Immunology descubrió que quienes practicaban yoga suprimían la activación de ciertos genes que causan inflamación, una respuesta común al estrés que puede tener graves consecuencias para la salud.
Además, se ha descubierto que el yoga aumenta la capacidad del cuerpo para responder al estrés de forma más eficaz, reduciendo la frecuencia cardíaca y la presión arterial y facilitando la respiración en situaciones de estrés que suelen aumentar estas respuestas.
Dormirás mejor
Si luchas contra el insomnio o simplemente no puedes conciliar el sueño fácilmente por la noche, el yoga puede ser el remedio que te faltaba.
Un estudio de 2013 descubrió que los participantes de más edad que practicaban yoga afirmaban tener muchas menos alteraciones del sueño y tardaban menos en dormirse. Además, eran menos propensos a utilizar medicamentos para conciliar el sueño. También puntuaron más alto en las medidas de calidad del sueño que los que no hicieron yoga.
Según los investigadores, esto puede deberse a varias razones. Es posible que el simple esfuerzo físico y mental que requiere el yoga, provocado por el estiramiento y la relajación de los músculos, permita dormir mejor. Pero los ejercicios respiratorios del yoga también pueden influir. Los investigadores afirman que pueden ayudar a mejorar la fuerza de los músculos respiratorios, lo que a su vez puede evitar trastornos del sueño como los ronquidos o la apnea del sueño.
El yoga mejora la movilidad y la postura
Aún eres joven, ¿por qué tienes las articulaciones y los músculos rígidos y doloridos? Doug Kechijian, D.P.T., de la fisioterapia Resilient Performance de Nueva York, nos dijo anteriormente que eso se debe a que pasas demasiado tiempo sentado y haces los mismos movimientos día tras día.
Su rutina de levantamiento también podría desempeñar un papel, especialmente si no está contrarrestando sus ganancias musculares añadidas con movimientos de movilidad, dice Rooney.
"Mientras que muchos hombres pueden pasar mucho tiempo aumentando sus brazos, abdominales y pecho, toda esa tensión muscular tira del cuerpo hacia una mayor flexión de la columna vertebral, o una espalda redondeada o caída", dice Rooney. "Si a esto añadimos que muchas personas pasan gran parte del día sentadas en un escritorio, mirando hacia abajo al ordenador o al teléfono... esto sólo ayuda a reiterar ese patrón habitual de pecho hundido, hombros enrollados hacia dentro y cabeza caída".
Estiramiento de la paloma elevada
El yoga ayuda a contrarrestar esos efectos, así como los resultados de estar sentado en una silla de oficina todo el día. De hecho, después de que adultos jóvenes y sanos practicaran yoga caliente durante ocho semanas, experimentaron aumentos en la flexibilidad de la zona lumbar, los isquiotibiales y los hombros, según un estudio publicado en el Journal of Strength and Conditioning Research.
Emily Shiffer has worked as a writer for over 10 years, covering everything from health and wellness to entertainment and celebrities. She previously was on staff at SUCCESS, Men's Health, and Prevention magazines. Her freelance writing has been featured in Women's Health, Runner's World, PEOPLE, and more. Emily is a graduate of Northwestern University, where she majored in magazine journalism at the Medill School of Journalism and minored in musicology. Currently residing in Charleston, South Carolina, Emily enjoys instructing barre, surfing, and long walks on the beach with her miniature Dachshund, Gertrude.
