Calefactor eléctrico Magiclick C1009 blanco 220V

Por el precio realmente vale la pena hacer la compra. Funciona para habitaciones o un comedor/living pequeño. De ninguna manera es un tiro balanceado. Es una estufa sencilla y de materiables livianos. Cuando llega a tu casa la probas y la dejas enchufada donde quieras que este. No es para llevar de aca para alla. En mi caso el olor a quemado la primera vez que la use fue un ratito, ventile y ya. Sin ninguna exageracion. Por el precio vale la pena y repito: es ideal para un dormitorio/ escritorio. Pobre estufa la tengo prendida 24/7 en el minimo y es maravillosa. Tengo a mis perros y el gato instalados al lado de este aparato. Viene con un film protector, en mi caso solo se lo saque de un lado porque este film estaba rayado. Del otro lado se lo deje y 10 puntos. Me fue tan util el producto que compre dos, por el precio que habria comprado una similar de primera marca. Que conste que soy muy rompe con cada compra que hago, en este caso vale la pena. Recomiendo.

Sirve. Falta ver el consumo. Es de tamaño chico, está muy bien para ambientes pequeños, calienta bastante rápido. A mi entender no es convector, no tiene un motorcito ni nada parecido que emita aire, sino que el aire caliente sube suavemente por la única salida que tiene porque el calor siempre se va hacia arriba solo. Lo uso en mínimo y medio, no lo pondría al máximo. No lo dejaría encendido mientras duermo o si tengo que salir del lugar en que esté usándolo aunque sea por unos instantes, si me voy de la casa lo dejo desenchufado. Por la noche con calentar la habitación antes de dormir alcanza, porque según el frío que haga uso manta o acolchado, si dejo un calefactor encendido me da calor. Su construcción es frágil, es de de plástico y chapa delgada, hay que tratarlo con delicadeza para que dure. Evitar a toda costa descuidos que puedan golpearlo, es hiper liviano, aunque eso es genial para transportarlo. Quizás es peligroso que los paneles de los costados vienen con un film plástico pegado del lado de afuera, cuyos bordes sobrantes vienen doblados hacia adentro, quizás es lo que da olor a plástico quemado. Pude quitarlos aunque me volví loca con eso, tuve que desarmar el aparato y es un quilombo volver a armarlo, además hay q tener cuidado con las rejillas de chapa porque pueden cortar la piel. Hay que luchar para mantener las partes encastradas y al mismo tiempo moverlas levemente hasta lograr embocar los tornillos para volver a armarlo. Las patas encastran sin problemas.