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Verificado por Psychology Today

La encopresis es un trastorno que implica el paso repetido de heces en lugares inadecuados por parte de un niño. Por lo general, este comportamiento es involuntario y el resultado físico del estreñimiento crónico, que con el tiempo resulta en pérdida de heces. Sin embargo, también puede ser de naturaleza deliberada y psicológica, especialmente en los casos en que un niño lucha contra un trastorno de oposición desafiante o un trastorno de conducta.

Se estima que el 1 por ciento de los niños de 5 años tienen encopresis y el problema puede persistir en algunos niños durante años. Este trastorno es más común en hombres que en mujeres y tiende a ser hereditario. Pueden ocurrir casos de encopresis durante el día o la noche.

La encopresis puede tener graves consecuencias para la salud mental de un niño. Los niños con encopresis a menudo se sienten avergonzados y pueden intentar evitar situaciones en las que podrían sentirse avergonzados, como ir a la escuela, asistir a un campamento o participar en un deporte u otra actividad física.

Síntomas

Para un diagnóstico de encopresis, según el DSM-5:

  • Un niño expulsa heces (involuntariamente o intencionadamente) a la ropa, al suelo o a otros lugares inapropiados.
  • Esto ocurre al menos una vez al mes durante más de tres meses.
  • El niño tiene al menos 4 años (o un nivel de desarrollo equivalente).
  • Este comportamiento no debe ser atribuible a los efectos fisiológicos de una sustancia ni a otra condición médica.

La encopresis se puede clasificar además según dos subtipos: con estreñimiento e incontinencia por rebosamiento y sin ellos.

Con estreñimiento e incontinencia por desbordamiento:

  • Hay evidencia de estreñimiento.
  • Las fugas pueden ocurrir o no con frecuencia.
  • Los episodios ocurren principalmente durante el día.

Sin estreñimiento e incontinencia por desbordamiento:

  • No hay evidencia de estreñimiento.
  • El ensuciamiento es intermitente.
  • Las heces se pueden dejar en un lugar visible.
  • La conducta puede coincidir con la presencia de trastorno de oposición desafiante o trastorno de conducta.
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Causas

En los casos en que el paso de las heces no es intencional, a menudo se debe al estreñimiento, que a su vez puede deberse a que se evita la defecación debido a la ansiedad u otras formas de psicopatología. El estreñimiento también puede resultar de la deshidratación o de ciertas disposiciones fisiológicas relacionadas con la defecación.

Cuando el paso de heces es intencional, el niño también puede tener características de otro trastorno (p. ej., trastorno de oposición desafiante o trastorno de conducta) que implica un comportamiento socialmente inaceptable en términos más generales.

La defecación dolorosa y algunos medicamentos (como anticonvulsivos o supresores de la tos) pueden contribuir al desarrollo de encopresis, según el DSM-5. El entrenamiento inadecuado para ir al baño y el estrés también pueden aumentar la probabilidad de encopresis.

¿El estrés puede causar encopresis?

Los científicos han encontrado un segundo cerebro o “cerebro de respaldo” en el intestino que puede influir en el estado de ánimo y el comportamiento de las personas. Conocido como sistema nervioso entérico (SNE), este segundo cerebro procesa información de todo el cuerpo. Como resultado, la ansiedad, la depresión y otras emociones angustiosas pueden contribuir o exacerbar afecciones físicas relacionadas con el intestino y los procesos digestivos, como la encopresis.

¿Cuál es el vínculo entre encopresis y depresión?

La encopresis puede ser tanto un factor contribuyente como un síntoma de depresión en la infancia y la adolescencia. Los padres querrán estar atentos a cualquier comportamiento que sea inapropiado para la edad y el nivel de desarrollo de su hijo. Los ejemplos pueden incluir estreñimiento, ensuciarse, enuresis y cambios en los hábitos intestinales, especialmente si son repentinos.

Tratamiento

Un proveedor de atención médica realizará un examen físico y quizás realizará pruebas adicionales para ayudar a hacer un diagnóstico de encopresis. El tratamiento, que debe ser administrado por un médico, puede incluir medidas como proporcionar laxantes, enemas o ablandadores de heces e introducir una dieta rica en fibra. Si es necesario, un gastroenterólogo pediátrico puede emplear técnicas adicionales para ayudar a superar la encopresis. Según la Academia Estadounidense de Pediatría, una fase de “mantenimiento” que implica horarios programados para ir al baño y el uso regular de laxantes puede durar un par de meses o más.

Un psicoterapeuta puede ayudar a un niño con encopresis a afrontar sus efectos psicológicos negativos, como la vergüenza o la disminución de la autoestima. En ausencia de estreñimiento, una evaluación psiquiátrica puede ayudar a identificar una causa subyacente del comportamiento.

¿Puedeser intencional la encopresis ?

A veces, los niños pueden ensuciarse deliberadamente. Esto ocurre con más frecuencia en niños que tienen un trastorno concurrente, como trastorno de conducta o trastorno de oposición desafiante (TOD). Una señal es cuando se descubren las heces de un niño en un lugar destacado, destinado a ser exhibido. Un psicólogo capacitado puede ayudar a estos niños a lidiar con la encopresis y cualquier problema de salud mental relacionado.

¿Qué sucede si no se trata la encopresis?

Es posible que los niños cuya encopresis no se reconoce o no se trata no puedan resolver sus síntomas por sí solos durante muchos años. En algunos casos, pueden experimentar problemas hasta la edad adulta. En general, es mejor no dar por sentado que la encopresis desaparecerá por sí sola; en su lugar, se debe buscar tratamiento lo antes posible para lograr un resultado más positivo para el niño.

References
American Academy of Pediatrics  
Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, Fifth Edition
U.S. National Library of Medicine
Last updated: 12/06/2021