En el noreste de Suecia, perdido en el interior de los densos bosques de altos pinos cercanos al río Lule, se creó un concepto de casas en los árboles tan innovador que no son pocos los que viajan hasta este remoto lugar tan solo para probarlo.
El Treehotel posee nueve casas en los árboles, a cada cual más original. Aquí, los huéspedes pueden elegir pasar la noche en un ovni, una especie de cabina-contenedor suspendida entre los árboles, un cubo cuyas paredes parecen espejos, o una cabaña que tiene el aspecto de ser el nido de un enorme pájaro prehistórico.
Las casas se hallan suspendidas entre 4 y 10 metros sobre el suelo y se puede acceder a ellas mediante rampas, puentes o escaleras. Además, gracias a un sistema de calefacción que va por debajo del suelo, son agradables incluso en invierno, cuando el paisaje nevado es totalmente espectacular y el sentimiento de conectar con la naturaleza se multiplica exponencialmente.