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Los quarterbacks que debes conocer para el Draft 2025 de la NFL

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Echamos un vistazo a los pasadores que debes seguir en la próxima temporada universitaria, con un ojo puesto al siguiente reclutamiento colegial


Aunque será duro superar a la camada de quarterbacks del Draft 2024 de la NFL --con sus seis pasadores elegidos dentro de los primeros 12 turnos-- existe el potencial para que el grupo del 2025 sea realmente bueno. Tres nombres ya circulan como potenciales candidatos a ser el primer pasador elegido: Carson Beck de Georgia, Shedeur Sanders de Colorado y Quinn Ewers de Texas. Pero, existe una tonelada de profundidad, también.

¿Quiénes son los nombres principales que debemos conocer para el 2025? ¿Cuáles son sus fortalezas y dónde necesitan mejorar? Echemos un vistazo a los 19 mejores quarterbacks que serán elegibles para el draft en la próxima primavera, incluyendo a siete que fácilmente pueden ser reclutados dentro de los primeros 100 turnos. También, responderé un par de preguntas clave respecto a equipos de la NFL que podrían estar estudiando a profundidad a estos pasadores. Comenzaré con mi temprano N° 1 en la posición de quarterback para el Draft 2025 de la NFL.

Los principales quarterbacks a seguir

Carson Beck, Georgia

Estatuta: 6 pies con 4 pulgadas | Peso: 220 libras Clase: Senior

Dónde brilla: Beck tiró para 3,941 yardas, 24 pases de touchdown y seis intercepciones la temporada pasada, su primera como titular. Su 86 de QBR lo ubicó quinto en el país. Un pasador de ritmo, tiene comprensión a nivel veterano sobre cómo procesar y atacar a las coberturas. La ofensiva de Georgia se centra alrededor de su decisión y gasta poco tiempo en sacar el ovoide. Su promedio de 2.38 segundos antes de cada pase empató por el desprendimiento más rápido de la nación en el 2023.

Beck también confía en lo que ve y permanece en calma, incluso cuando el bolsillo se colapsa. Ha jugado bajo el centro y desde la formación escopeta, también, dándole buena experiencia para lo que se le pedirá al siguiente nivel.

Dónde necesita trabajar: Beck no es la clase de quarterback que consistentemente hará jugadas fuera de la estructura de la ofensiva. Posee suficiente movilidad para escapar del peligro en el bolsillo, pero crear oportunidades adicionales siempre será un desafío.

Y, aunque Beck posee un buen brazo, un trabajo inconsistente de pies y a la hora de finalizar lanzamientos han llevado a una colocación errática de balón en áreas cortas e intermedias; algunos envíos pierden velocidad cuando alcanzan su objetivo. Se ha visto beneficiado por una ofensiva de pases rápidos, promediando 8.0 yardas aire por intento (N° 78 en la FBS). Ahora, entrando a su segunda campaña como titular, Beck podría tener mayores oportunidades de ejecutar conceptos más profundos.


Shedeur Sanders, Colorado

Estatuta: 6 pies con 2 pulgadas | Peso: 215 libras Clase: Senior

Dónde brilla: Un distribuidor calmado cuando está protegido, el juego de Sanders gira en torno a la precisión y colocación del ovoide. Completó el 69.3 por ciento de sus pases la temporada pasada, dejándolo octavo en la FBS. Nunca carece de confianza y no teme probar sus límites como pasador. Tiene suficiente potencia en el brazo para lanzar el ovoide por el centro del campo y entregar envíos precisos a blancos fura de las costuras.

Después de dominar en Jackson State a nivel FCS en el 2021 y 2022, Sanders se mudó al nivel FBS y encontró éxito inmediato, finalizando con 3,230 yardas por pase, 27 touchdown por pase y tres intercepciones.

Dónde necesita trabajar: Sanders sufrió muchas capturas innecesarias, quedando tendido en 52 ocasiones, la mayor cantidad en la FBS durante el 2023. Un pobre nivel de juego de la línea ofensiva no fue el único factor, dado que tendía a derivar en retroceso en el bolsillo e ignorar el reloj interno. Me justaría verlo escalando verticalmente el bolsillo y tirar pases desde allí bajo presión, en lugar de guardarse el ovoide instantáneamente y correr o lanzar el balón fuera del campo.

También, quiero ver al nuevo coordinador ofensivo Pat Shurmur mandar más pases profundos para Sanders, quien promedió 7.5 yardas por intento de pase la temporada pasada, dejándolo N° 58 en el país.


Quinn Ewers, Texas

Estatuta: 6 pies con 2 pulgadas | Peso: 195 libras Clase: Junior

Dónde brilla: Ewers posee rasgos de primera línea lanzando el ovoide, y es capaz de generar velocidad en los pases con su efectiva extensión lateral de brazo. Ewers, quien lanzó 22 pases de touchdown con seis intercepciones la temporada pasada, disfrutó bastantes momentos importantes el año pasado como junior, incluyendo una gran victoria de visita frente a Alabama, pero su mejor desempeño podría haber llegado ante Oklahoma, donde completó 19 pases en fila y 26 de sus 28 finales. Su talento en el brazo le ayuda a operar la ofensiva de Texas a alto nivel, aunque es inconsistente en ocasiones.

Dónde necesita trabajar: A veces, la mecánica de Ewers es demasiado relajada, resultando en colocación impredecible del balón y pases que carecen de suficiente fuerza. A veces, sufre en la toma de decisiones respecto al ritmo de sus pases. Ocasionalmente, le falta potencia en pases lanzados en ventanas cerradas, o le pone demasiado arco a los pases profundos, resultando en un receptor teniendo que desacelerar y esperar a que llegue el ovoide. Los siguientes pasos en su desarrollo son entender las diferentes clases de envíos y cómo colocarlos.


Jaxson Dart, Ole Miss

Estatuta: 6 pies con 2 pulgadas | Peso: 220 libras Clase: Senior

Dónde brilla: Dart puede sacar el balón con su relajada y explosiva mecánica de lanzamiento, y colocarlo con facilidad, permitiéndole aprovechar los huecos en la defensiva. Dart, quien tomó las riendas como quarterback de los Rebels en el 2022 después de transferir desde USC, se destapó como junior en el 2023, consiguiendo 3,364 yardas por pase, 23 touchdowns por pase y cinco intercepciones. Se colocó tercero en la nación con 63 completos de al menos 20 yardas. También, es móvil, logrando correr para ocho anotaciones.

Dónde necesita trabajar: El reto a la hora de evaluar a Dart es descifrar cómo lidiará con lecturas nivel profesional, dado que la ofensiva de Ole Miss no incluye muchas progresiones de pasos múltiples. La ofensiva de Lane Kiffin depende primordialmente de rutas de aislamiento por esquema. Dart fue inconsistente lanzando dentro de las costuras, completando apenas el 59 por ciento de sus pases, así que necesita mostrar mayor crecimiento y mejor visión cuando busca a sus receptores en el centro del campo.


Cameron Ward, Miami

Estatuta: 6 pies con 2 pulgadas | Peso: 223 libras Clase: Senior

Dónde brilla: Ward, quien transfirió a Miami este año después de dos temporadas jugando para Incarnate Word a nivel FCS (2020-21) y dos más en Washington State (2022-23), es un jugador eléctrico que puede meter en problemas a las defensivas desde dentro o fuera del bolsillo. La temporada pasada, se ubicó N° 14 en la FBS en yardas por pase dentro del bolsillo (3,117) y N° 11 en yardas desde fuera del bolsillo (618). Posee excelentes habilidades de improvisación, y puede hacer jugadas estilo Houdini fuera de la estructura. Puede generar velocidad en sus pases y es extremadamente confiado lanzando en ventanas cerradas.

Dónde necesita trabajar: La confianza de Ward en la potencia de su brazo puede meterlo en dificultades, en ocasiones, y quiero verlo dar un paso al frente en la toma de decisiones como pasador profundo para los Hurricanes en el 2024. Jugando en una ofensiva que dependió bastante de pases cortos el año pasado, promedió apenas 6.7 yardas aire por intento, colocándolo N° 117 en la FBS. No se le pidió leer demasiadas progresiones en Washington State, significando que dejo pasar jugadas campo abajo.

Cuando sí lanzó más profundo, no obstante, fue realmente sólido. Ward completó el 55.3 por ciento de sus pases que viajaron 10 yardas o más en el aire, dejándolo N° 12 en la nación. Quiero verlo crear esas ganancias grandes de manera consistente.


Jalen Milroe, Alabama

Estatuta: 6 pies con 2 pulgadas | Peso: 220 libras Clase: Junior

Dónde brilla: Milroe es agresivo tirando campo abajo, con sus 34 completos de 20 yardas aire o más en la temporada pasada lo colocaron cuarto en la FBS. Se sobrepuso a ser enviado a la banca en la Semana 3 para conducir a Alabama a un título de la SEC y un sitio en el College Football Playoff. Finalizó con 2,834 yardas por pase, 23 touchdowns por pase y seis intercepciones. También, es un corredor fuerte y competitivo, corriendo para 531 yardas y 12 touchdowns. Brilla con las piernas cuando las jugadas se colapsan, con la habilidad de amenazar a las defensivas por el medio y por la orilla.

Dónde necesita trabajar: Milroe carece de la consistencia en pases cortos e intermedios debido a sus fallas en el trabajo de pies. Eso conduce a una demora en la toma de decisiones y una colocación de balón no confiable cuando necesita sacar el ovoide con rapidez. Muestra mayor comodidad cuando cuenta con el tiempo de esperar a que se desarrollen las cosas campo abajo.

Milroe puede caer en exceso de confianza con su habilidad para correr, lo que resulta en demasiadas jugadas negativas. Fue capturado al menos en cuatro ocasiones en ocho partidos de la temporada pasada, y debe comprender que no siempre necesita una jugada eléctrica en cada oportunidad.


Riley Leonard, Notre Dame

Estatuta: 6 pies con 4 pulgadas | Peso: 212 libras Clase: Senior

Dónde brilla: Leonard es un pasador de amenaza dual con una mecánica fluida y suave para lanzar que complementa pies ágiles en el bolsillo. Las lesiones no lo dejaron en paz el año pasado en Duke, jugando apenas seis encuentros y finalizando con 1,102 yardas por pase, tres touchdowns por pase y tres intercepciones, al tiempo que añadió cuatro anotaciones terrestres.

Será capaz de mostrar su habilidad como pasador bajo el coordinador ofensivo Mike Denbrock, el arquitecto de la campaña de destape de Jayden Daniels el año pasado en LSU. Con emjor protección y talento a su alrededor, Leonard podría dar un salto significativo en su desarrollo en el 2024.

Dónde necesita trabajar: Leonard no atacó lo profundo del campo con frecuencia ni efectividad el año pasado, con la ofensiva de Duke enfocada en envíos cortos. Completó apenas el 57.6 por ciento de sus envíos pese a estar en un esquema que requirió pases cortos y decisiones rápidas. Los problemas de la línea ofensiva de Duke podrían haber sido factor para su imprecisión, pero posee un brazo promedio que se verá retado dentro de una ofensiva más agresiva en Notre Dame. Tendremos mejor idea de sus limitaciones después de la próxima campaña.

Los mejores del resto

Estos 12 pasadores son listados de manera alfabética:

Drew Allar, Penn State

Con 6 pies y 5 cinco pulgadas, y 243 libras, Allar cumple con todos los requisitos físicos, y es un pasador dotado con bastantes herramientas. Durante su primera campaña como titular, logró 2,631 yardas por pase, 25 touchdowns por pase y dos intercepciones. Allar necesita mejorar su precisión (59 porcentaje de pases completos) y falta de toque, algo que se vería beneficiado por mejor mecánica en la parte baja del cuerpo. El nuevo coordinador ofensivo Andy Kotelnicki arriba desde Kansas para trabajar en hacer más consistente a Allar.


Max Brosmer, Minnesota

Brosmer entra a su primera campaña a nivel FBS después de pasar las pasadas cinco en New Hampshire en la FCS. Lideró a la FCS con 3,464 yardas por pase y 29 touchdowns por pase la campaña pasada. El jugador de 6 pies con 2 pulgadas y 217 libras posee una mecánica rápida por arriba de la cabeza que le permite sacar el ovoide apresuradamente. La ofensiva de Minnesota es similar a lo que hacía Brosmer en UNH, así que tiene como meta demostrar que sus habilidades se trasladan al nivel FBS.


Jalon Daniels, Kansas

Daniels logró una racha de tres partidos el año pasado en que lanzó para 705 yardas y cinco touchdowns en la explosiva ofensiva de los Jayhawks. Esos fueron los únicos tres encuentros en que participó, perdiéndose los nueve duelos finales con una lesión en la espalda. Las lesiones han sido tema, dado que se ha perdido 14 juegos en el último par de temporadas. Pero, cuando está sano, el jugador de 6 pies y 215 libras es un pasador preciso; Daniels completó el 74.7 por ciento de sus 75 envíos hace un año, y también logra hacer jugadas por tierra.


Noah Fifita, Arizona

El Freshman del Año reinante en la Pac-12 fue eléctrico, finalizando la temporada pasada con 2,869 yardas aéreas, 25 pases de touchdown y seis intercepciones, al tiempo que impuso marca de la escuela completando el 72.4 por ciento de sus pases. Es un pasador no convencional pero emocionante que debe estar entre los mejores del país como sophomore de tercer año. Con sus 5 pies y 11 pulgadas de estatura, y 194 libras, el tamaño de Fifita es una preocupación, y hay interrogantes sobre cómo aguantará su carrocería al nivel siguiente.


TJ Finley, Western Kentucky

Finley está en su cuarta escuela después de pasar por LSU (2020), Auburn (2021-2022) y Texas State (2023). Con 6 pies y 7 libras de estatura, y 255 libras, es el mayor de los quarterbacks de esta camada. Produjo en su primer año como titular, tirando para 3,439 yardas con 24 touchdowns y ocho intercepciones. Finley destella movilidad (especialmente considerando su tamaño) y talento en el brazo, pero una dependencia exagerada en su torso causa problemas de imprecisión. El ataque de Western Kentucky pondrá a prueba esa precisión, dado que depende de pases rápidos y frecuentes.


Dillon Gabriel, Oregon

Gabriel va en su tercera escuela después de tres años en UCF (2019-2021) y dos en Oklahoma (2022-23). Su segunda campaña con los Sooners fue estelar, imponiendo marca personal en yardas por pase (3,660) y tirando 30 pases de touchdown. Su QBR de 88.6 lo dejó tercero en la FBS. Es un zurdo que lanza rápidamente con dos opciones potentes en los receptores Tez Johnson y Evan Stewart. Con blancos de primera línea y un esquema que magnifica sus fortalezas, el quarterback de 5 pies y 11 pulgadas y 204 libras tiene la oportunidad de retomar donde se quedó Bo Nix. Como Fifita, no obstante, Gabriel carece del tamaño ideal para la NFL.


Will Howard, Ohio State

Howard transfirió para llegar a una gran situación, con Ohio State contando con el que podría considerarse el mejor plantel en el país. Los Buckeyes carecieron de consistencia en la posición de quarterback la temporada pasada, algo que Howard brindó durante sus cuatro años en Kansas State. El senior de 6 pies con 5 pulgadas y 242 libras mejoró en todos sus años con los Wildcats, con marcas personales en yardas por pase (2,643), porcentaje de pases completos (61.3 por ciento) y pases de touchdown (24) en la campaña pasada. A diferencia de muchos pasadores altos, Howard juega con una base balanceada. Su énfasis en el 2024 debe estar en la mejoría de colocación de balón.


KJ Jefferson, Central Florida

Aunque Jefferson logró una carrera notable durante sus cinco años en Arkansas, la campaña del 2023 no fue su mejor, tirando para 2,107 yardas con 19 pases de touchdown y ocho intercepciones. Transferir a UCF podría sentarle bien; el coach de los Knights, Gus Malzahn, lo ha hecho bien con pasadores móviles de buen brazo. Jefferson está construido como un tanque, con 6 pies y 3 pulgadas, y 247 libras, y posee todas las cualidades necesarias para ejecutar el esquema de Malzahn.


Garrett Nussmeier, LSU

Después de servir como suplente de Jayden Daniels en las dos temporadas pasadas, Nussmeier aprovechó la ausencia del ganador del pasado Heisman en el ReliaQuest Bowl, destrozando a Wisconsin con 395 yardas aéreas y tres pases de touchdown en 31 completos de 45 intentos. El quarterback de 6 pies con 2 pulgadas, y 205 libras mostró buena precisión y toque campo abajo, y tiene un camino claro hacia la titularidad de LSU.


Donovan Smith, Houston

Smith transfirió a Houston después de pasar sus dos primeras campañas en Texas Tech y se desempeñó bien, tirando para 2,801 yardas con 22 touchdowns y 13 intercepciones mientras completaba el 64.5 por ciento de sus pases. Con 6 pies y 5 pulgadas, y 241 libras, Smith tiene gran tamaño y gran brazo, capaz de alcanzar todas las partes del campo, pero frecuentemente careció de toque en envíos más cortos y sufrió lanzando por arriba de la cobertura. También, se sometió a una cirugía en su hombro de lanzar durante el receso de campaña.


DJ Uiagalelei, Florida State

Uiagalelei se encuentra en su tercera escuela después de pasar tres temporadas en Clemson y una en Oregon State. Con 6 pies y 4 pulgadas, y 252 libras, Uiagalelei posee el tamaño necesario para mantenerse en el bolsillo y lanzar los pases complicados, habiendo jugado en una ofensiva más tradicional el año pasado, donde completó 2,638 yardas con 21 touchdowns y siete intercepciones. Su porcentaje de pases completos declinó desde el 2022 (62.1 por ciento a 57.1 por ciento), no obstante, y se mantuvo dudoso a la hora de soltar el ovoide antes de que sus receptores se descubrían, algo donde los scouts querrán ver progreso esta temporada.


Conner Weigman, Texas A&M

Pese a que una lesión en el pie lo limitó a cuatro encuentros de la temporada pasada, quedé impresionado con Weigman después de estudiarlo en video. Posee ben tamaño (6 pies con 3 pulgadas, 215 libras) y produjo cuando jugó (979 yardas, ocho pases de anotación, dos intercepciones) pero debe mantenerse sano. Posee un buen brazo, es fiero y competitivo que no teme poner a prueba las ventanas cerradas. algo que hizo lanzando para 336 yardas ante Miami. Weigman es un jugador a seguir de cerca ... si puede mantenerse sobre el campo.


Otros quarterbacks a seguir para el Draft 2025 de la NFL: Hudson Card (Purdue), Brady Cook (Missouri), Kyron Drones (Virginia Tech), Dequan Finn (Baylor), Garrett Greene (West Virginia), Cade Klubnik (Clemson), Grayson McCall (NC State), Kyle McCord (Syracuse), Graham Mertz (Florida), Cameron Rising (Utah), Will Rogers (Washington), Kurtis Rourke (Indiana), Kaidon Salter (Liberty), Tyler Shough (Louisville), Brock Vandagriff (Kentucky) y Tyler Van Dyke (Wisconsin)

Las grandes interrogantes de quarterback

En este punto, ¿cuál equipo de la NFL necesita con mayor urgencia reclutar a un quarterback para construir a su alrededor?

New York Giants. Hubo gran especulación este año de que los Giants probarían el mercado de quarterbacks durante el Draft 2024, pero decidieron no moverse del sexto puesto global y elegir al receptor abierto Malik Nabers. Eso deja una batalla por la titularidad entre Daniel Jones, quien viene de una rotura de ligamento anterior cruzado, y Drew Lock, quien está en su tercer equipo tras ser elegido en la segunda ronda del 2019.

Los Giants podrían estar encaminados a una selección alta, especialmente si Jones es incapaz de recapturar su forma del 2022, motivo por el cual los tengo proyectados para escalar vía canje hasta el primer turno global para elegir a Carson Beck en el Draft 2025 de la NFL.


¿Cuál equipo podría dar la sorpresa en la posición de quarterback?

Dallas Cowboys. No estoy a favor de que los Cowboys reemplacen a Dak Prescott, pero retenerlo a largo plazo presenta desafíos. Entra al año final de su contrato, y las partes no parecen estar cerca de una extensión.

Dado que no pueden colocar la designación de jugador franquicia sobre Prescott, los Cowboys tienen dos opciones: firmarlo a un caro contrato de largo plazo, o dejarlo caminar. Eso deja mucha presión sobre un equipo que ya está bajo el microscopio después de una decepciona derrota ante los Green Bay Packers en la Ronda de Comodines pasada.