¿Conoces los inicios de nuestra luna?

Al principio, el sistema solar era un caos total. Había cientos de objetos volando y chocando entre sí, un vasto mar de polvo y restos flotando en el espacio. Estos materiales, bajo la influencia de la gravedad, comenzaron a aglutinarse, formando anillos similares a los de un CD. Poco a poco, estos fragmentos se fueron compactando, dando lugar a los primeros planetas.

Mientras la joven Tierra y otros planetas se formaban, un evento cataclísmico dejó una marca indeleble en su historia. En medio del caos, la Tierra primigenia probablemente colisionó con un protoplaneta del tamaño de Marte, conocido como Theia. Este impacto colosal fue una verdadera locura cósmica: dos mundos chocando en el vacío del espacio.

De este violento choque, una enorme cantidad de escombros quedó orbitando alrededor de la Tierra. Con el tiempo, estos restos se enfriaron y se aglomeraron, formando lo que hoy se conoce como la Luna. Este satélite natural, que inicialmente era una masa de roca al rojo vivo, gradualmente se estabilizó en la órbita terrestre.

Hoy en día, la Luna juega un papel crucial en la estabilidad del planeta. Actúa como un escudo protector, ayudando a estabilizar la inclinación de la Tierra y, por ende, el clima. Además, es la causante de las mareas, influyendo en la vida marina y los ecosistemas costeros.

La historia de la Luna es casi tan antigua como la de la Tierra misma. Este satélite, que acompaña cada noche, no solo fascina con su belleza, sino que también es un testimonio de los violentos y formativos primeros días del sistema solar. Es asombroso pensar que, de todo este caos primigenio, surgió el orden que se conoce hoy, con la Luna desempeñando un papel fundamental en la evolución y estabilidad del planeta, lo invitamos a seguir a Faber Burgos en sus redes sociales.
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